Partida Rol por web

Perceval se rasca la cabeza y dice - Pues mi idea principal era buscar pistas para saber donde podriamos buscar al... 626 ese por la mañana asi ahorramos tiempo al despertar, asi que buscad pistas.

—Ehmm, de acuerdo... —murmura Zayna, y se pone a mirar las huellas de neumáticos—. No sé qué son, pero es lo único que me llama la atención —dice a Perceval. 

Aquello que hizo eso, seguro que vio a 626.

Huellas de neumaticos, buena vista para ser de noche. - Perceval se pone a investigarlas y cae en la cuenta que hay una sustancia la cual a pocos metros hay como otra gota. - Esto es... fluido del 626, ¿acido? ¿Moco? ¿Babas? No se pero puede ser lo que nos lleve a el sigamos las huellas de este fluido y lo veremos. - Dice mientras empieza a avanzar

Zayna opina que es como el aceite de lámpara pero más... denso y sucio. Pero ella no sabe nada de ese mundo así que decide seguir a Perceval. 

No podia reconocer esas marcas ni que era la sustancia que habia botado ese "626", como les decian, pero desde que vi su imagen algo me incomodaba el que llamasen a ese ser por un numero, el numero era una forma de indicar esclavitud en mi mundo y la idea no me gustaba aunque a saber si esa creatura se gano por mano propia el ser tratado como un numero.

-Capitan Perceval kupo- trate de llamar su atencion -Podemos renombrar al 626? No me gusta decirle asi kupo- realmente estaba sonando algo tonto pues desconocia por completo a la creatura en si, pero no queria tratarla mal sin conocerla -Fuera de eso queria preguntarle por uno de los metodos que menciono kupo, para nivelar su oscuridad y luz kupopo, menciono erradicar y purificar, como se purifica?- seria lo ultimo que diria antes de seguirles en su caminar

Perceval te mira mientras anda - ¿Renombrar? No se, la Gran consejera dijo que era una creacion de un cientifico. Supongo que como normalmente hacen los cientificos les ponen un nombre en clave en este caso un numero, 626, puede que sea su hexacentesimo vigesimo sexto experimento, por eso lo llamamos 626 no tiene nombre por que no se le ha reconocido que exista, pero si quieres renombrarlo adelante, no me opondre. En cuanto a lo de purificar... bueno hay dos formas de purificar a un ser invadido por la oscuridad. El primero es con el tiempo y en contacto con alguien de luz que le ayude, algo largo y tedioso. La segunda es, si vemos que aun lucha por ser "bueno" lanzarle luz con la llave espada. Eso me recuerda, tambien se pueden con los medallones de luz. - Dice mientras saca uno de su bolsillo - Este es para ti Zayna, sirve para derrotar a los Sincorazon cuando no tienes llave espada, tienes que enfocarlos con la luz del medallon mientras te concenctras para hacerlo vulnerable a las armas normales.

Me sentía un poco mejor al saber que no había problema en renombrar al ser 626, al menos ya sabía que Perceval no era esclavista o que no tuviera respeto por la vida, uno nunca sabía bien frente a quien estaba hasta conocerle bien. Aunque pronto mi alegría se vio reemplazada por mi curiosidad que se denoto en el ligero temblor pausado de mis orejas, haciendo notar que estaba prestando atención a sus palabras. Eso de la purificación sonaba bastante bien mas aun al saber que se podía hacer con la llave espada sin la necesidad de usarla como arma, era algo maravilloso enterarme que no solo podía usarla para pelear.

-Osea que yo puedo irradiar luz purificadora con BuscaCaminos kupo?- Me empece a emocionar mientras caminamos -Como se hace eso señor? kupo-

Bueno... es dificil de explicar. La llave espada emite ante la oscuridad o ante la luz depende de que tipo de llave espada sea una tenue luz o sombra imperceptible a la vista pero no al sentido de la magia. Cuando esa luz o sombra rodee a la llave espada simplemente tienes que concentrarte en que toda ella vaya hacia la punta de tu llave espada y luego concentrarte en dispararla apuntando al objetivo. Si lo haces con los sincorazon simplemente los destruiras. Con el medallon de luz pasa igual solo que al no ser un arma solo vuelve vulnerable a los sincorazon - Poco a poco empezais a escuchar el murmullo de un pueblo y unos ladridos

Callad y no os preocupeis volvere por la mañana y dejad al nuevo tranquilo... no sabemos que es asi que no lo toqueis. - Suena la voz de una mujer de fondo. Luego apaga la luz y cierra una puerta - Que rayos sera esa cosa, tiene cuatro patas y... antenas. Ugh, desde luego un animal no es que asco. - Dice mientras se aleja

Chicos creo que hemos encontrado a nuestro objetivo, descansaremos entre estos arbustos hasta mañana. - Dice Perceval mientras prepara algunas hojas de entre los arbustos para que no le moleste a la hora de dormir

Zayna coge el colgante y lo observa. 

—Gracias —murmura mientras se lo cuelga al lado del otro que ya tiene. 

Sonrió al ver los dos colgantes. Estaba haciendo una colección interesante en poco tiempo. 

Escucha con atención para qué sirve la llave espada. Cada vez le gusta más la idea de tener una. No la quiere por el poder, pero le agrada la idea de poder ayudar a otros. 

Finalmente, al ver que era hora de dormir, se acercó a Kosmog, mientras meditaba internamente sobre llaves espadas y purificar a 626. Le tiene de lámpara. 

—¿Me la cuidas? —pide mientras sonríe. 

Sin lugar a dudas, Kosmog sería una de las dos personas en las que confiaría su lámpara. Ya salvó su vida y quedó convertido en piedra por ello. Estaba segura de que su lámpara estaría a salvo en sus manos. 

En cuanto él la coge, ella la suelta. Se estira, dejando que sus músculos se relajen y, entonces, dice: 

—Buenas noches, Perceval. Buenas noches, Kosmog —y se deslizó dentro de la lámpara como si fuera una suave brisa. 

Me tomo por sorpresa la petición de Zanya, mis ojos se abrieron cual platos sin descorrer la mirada lejos de la suya. Si bien aun no entendia bien eso de la Djinn y el asunto de la lampara, si lograba comprender la importancia que Zanya le daba a esta. Aun asi la acepte luego de sacudir mi cabeza para aclarar mis ideas y recibirla con los brazos extendidos, una amigable sonrisa acompañada de mis ojos cerrados y una orejas caidas.

-La cuidare como si fuera mi propio corazon kupopo-

Me honraba que me eligiera para esa tarea y al despedirse le saludaria con un sutil gesto de una mano antes de volver a emplear ambas para sujetar la lampara, una vez ella estuviese dentro de la misma saludaria a Perceval haciendo una leve reverencia, antes de buscar con la mirada un sitio donde pudiera sentarme y dejar reposar mi espalda en un arbol. No dormiria, las lagrimas que humedecian el pelaje de mi rostro no me dejaron conciliar el sueño y menos mi conviccion de asegurarme de tener bien abrazada esa lampara para que nadie me arrebatase otro compañero, solo por un rato no tendria ambos brazos en la lampara, uno de ellos sujetaria mi siemprejuntos sin sacarlo de su proteccion de mi bufanda.

Perceval mira a la lampara y luego cierra los ojos...

Las horas pasan, los grillos cantan, la luz de la luna pasa, las estrellas centellean... de una u otra forma acabais durmiendo un tanto tarde...

Llega el amanecer y os despertais viendo que la luz del sol ya ha bañado toda la ciudad y la isla si os apurais a verla. La ciudad tiene barullo, musica y gente moviendose, es sonido estruendoso de las olas y risas de los surfistas puede oirse a lo lejos, y el movimiento de los coches os ensordece. La tienda esta abierta, ahora con la luz del sol veis que es un refugio para animales callejeros. Cuando lo veis claramente pensais algo malo.

Mierda, nos hemos quedado dormidos, vamos rapido entremos por detras.

Un sonido fuerte pero que se escuchaba a la distancia, de agua correr o mas bien chocar contra algo solido fue lo que inicio el proceso de despertar de mi cuerpo y a su vez el afinamiento de mis sentidos a las primeras sensaciones de la mañana. Sensaciones como era la calidez de las caricias que eran los rayos del sol sobre mi pelaje como un agradable y entrañable abrazo de alguien querido; las corrientes de viento que mecían mis finos bigotes a su vez me dejaban oler un suave y agradable aroma a humedad, muy distinto al de un próximo temporal rara vez visto en el desierto; me llevaba a ir desperesandome sin estirar los brazos como hubiera hecho usualmente, esta vez fue distinto solamente por recordar tener la lampara en mis manos cuando quise intentar extenderme. Bostece ampliamente cuando Perceval nos llamo la atención respecto a quedarnos dormidos, me había terminado de dormir bastante tarde a juzgar por mis recuerdos de las horas previas a perder la conciencia y eso que no estaba en mis planes hacerlo.

Me rasque detras de la oreja con una de mis patas, ya llevaba mucho tiempo sin hacerlo y cuando me diese cuenta de mi actuar, bajaría la pata, para algo tenía manos a fin de cuentas.

-Por que no preguntamos kupo?- Preguntaria mientras iría levantándome para caminar rumbo a la puerta principal de ese lugar, total no estabamos seguros de que se trataba el asunto con 626 y como la gente de este mundo podría tomarlo en cuenta.

Zayna se deslizó suavemente fuera de la lámpara y flotó con suavidad hasta el suelo recordando que tenía que caminar. Recogió la lámpara de al lado de Kosmog y sonrió mientras se la volvía a colgar de la cintura. 

Después, escucho a Perceval. Su rostro se volvió serio, adecuándose a las circunstancias. 

—Kosmog, mejor como dice Perceval. Si la gente no sabe nada, es mejor que no se enteren. Imagínate el pánico que causaría. Un ser de la oscuridad. Viendo que ayer escuchamos que dudaban de lo que era, es mejor que piensen que es... un perro raro. Vayamos a por él y llevemoslo a un lugar donde podamos hablar sin lugareños. 

Dicho esto, empezó a caminar hacia el edificio en busca de ventanas abiertas por si el plan de la puerta fallaba. Podría colarse sin dificultad y abrirla. 

Con la tienda abierta la puerta trasera tiene que estar tambien abierta... si tienen... ademas escuchad, no se oyen ladridos ni animales, espero que no haya sucedido nada malo

Mientras os acercais veis que Perceval os detiene y veis que hay una niña junto a su madre o su hermana no lo sabeis muy bien entrando - Mierda, movamonos deprisa.

Al llegar a la puerta trasera veis a 626, pero en negro algo os dice que ha pasado algo malo. Sin embargo Perceval os dice - Ese no es 626, es un sincorazon que quiere su corazon, se llama sombra, atacadle. - He inmediatamente Perceval saca su llave espada, una con una hoja fina y larga con el final con la parte de una llave por un lado y el otro estilo a las llaves dobles. Es muy sencilla pero impresionante.

No entendia muy bien eso de los ladridos, sera que no estaba acostumbrado a ver refugios de animales. Les segui a fin de cuentas Perceval era quien estaba al mando.

Al entrar y ver la situacion no habia mucho a dudar a la hora de invocar mi llave espada, aun me costaba hacerlo a diferencia de Percaval que parecia automatico al presentarse el peligro.

-Si el es una sombra, donde esta el real kupo?- Estaba algo nervioso esta era mi primer batalla real contra un sin corazon y esperaba poder triunfar sin que nadie resultase herido. Y al pensar en eso mostre una expresion asombrada pues me habia dado cuenta de algo. -Las señoritas kupo!- comente asustado al paso que correria en direccion a la otra entrada a la sala, aunque deberia rodear o aaltar a la sombra.

El original... esta dentro. Zayna puedes comprobarlo tu, retendremos a la sombra para que puedas entrar

Zayna asiente con firmeza ante lo que le pide Perceval.

—Kosmog, yo me encargo de que no llegue hasta ellas a través de la tienda —dice mientras respira hondo, coge impulso y, sólo por si acaso, agarra el colgante de luz. 

Entonces echa a correr ágilmente y su melena azul se agita por su aura de viento. Con un giro certero que parecía que estaba bailando, sorteó a la sombra y se deslizó por el aire con su levitación dejando atrás al sincorazón. 

Una vez dentro observó su alrededor en busca de la única descripción que tenía, la que escuchó mientras anochecía. 

Entras en la trastienda de animales y ves como hay un monton de pequeños perros, asustados y arrinconados pero que al verte parecen curiosos. No ves ningun rastro del experimento pero al entrar tambien oistes como la puerta que da a la parte posterior de la tienda se cerro. Algo te dice que se lo han llevado pero al poco el experimento vuelve a entrar y cuando entra, te mira con una mirada punzante. Para poco despues decirte con su voz un tanto extraña - Guau - lentamente intentando parecer un perro mientras que con la pata delantera hace como si diera la patita.

Kosmog, ¿recuerdas lo que te dije de la llave espada? Preparate para acerlo, solo canaliza tu espiritu en la punta de la llave espada apunta y dispara. Mientras yo hare lo propio para que no te ataque, en dos movimientos tendriamos que haberlo destruido. - Perceval se lleva la llave espada al pecho apuntando su hoja para arriba y despues la pone para asestar un golpe y dice - ¡Hoja electrica! - Atraviesa a la sombra la cual se queda con un aura electrica rodeandole y sin poder moverse - Ahora
 

¿Ese es el experimento? No tenía muy claro si... debía seguirle el juego. 

—Hola —murmura Zayna mientras se acerca al experimento. Con la mano, agarra el collar de luz—. ¿Cómo te llamas, pequeño? —pregunta con una sonrisa cálida. 

La verdad es que... no veía que fuera tan peligroso. 

Suavemente, cambia de mano el colgante y manda un mensaje por el siemprejuntos a Kosmog y Perceval. 

Está aquí. Juega... o intenta ser un perro.