Partida Rol por web

Ray seguía inmerso en la proyección, y a medida que iba reviviendo el momento, era capaz de anticipar que había ocurrido aquel día. Tan inmerso estaba, que en un primer momento ni se dio cuenta de que Marnie había llegado hasta su lado, y no fue hasta que le cogió la mano por debajo de la mesa, que el muchacho reaccionó.

- Gracias Marnie... - susurró tratando de ser fuerte y no derramar ninguna lágrima delante del resto y de ella misma. Recuerdo ese momento perfectamente... Ahora me enfadaré muchísimo, robaré otro trozo de tarta y me largaré corriendo de casa hasta perderme por el campo y no saber cómo regresar a casa... ¿Por qué Gin recuerda este momento? ¿Puede ser que sea porque teme perderme de nuevo? No entiendo lo que está pasando por la mente de Gin...

Entonces escuchó a Thad nombrar a su padre. Si, era el profesor Sherman Yaxley, aunque mucho más joven y apuesto. 

- Si, es mi padre Thad. 

Aunque desde que murió mamá ya casi como si no lo fuese... Lo odio...

El dispositivo mágico seguía ofreciendo imágenes. 

Se oye a Ginevra con voz suplicante decir algo a su madre pero el sonido se daña y no se logra escuchar nítidamente.

Ante la negativa de su hermana de jugar al escondite, y viendo que quizá no iban a ir a la excursión si Gin se encontraba mal, Ray apretó los puños conteniendo sus impulsos de gritar, y cuando ya no pudo más y su cara se había vuelto roja del enfado, corrió hacia la tarta, se llevó una porción enorme a la boca, y salió corriendo fuera de casa dando un portazo, no sin antes decir:

- ¡Me da igual el cumple! ¡Me da igual la excursión! ¡Me da igual no comer! 

Y ya cuando la puerta se cerró, se pudo escuchar desde muy lejos, corriendo por el jardín, un grito apagado por la lejanía de... 

¡Me da igual todo!

Veo al pequeño Ray hacer una patañeta y me resulta muy difícil de asociar a ese niño quejuca con el Ray que yo conozco,  un cjiconque se preocupa no sólo por su hermano sino por todos sus amigos.

Algo bastante serio debe haber pasado para que Ray cambie tanto en tan poco tiempo.

e de Ray y Ginevra apareció en pantalla tan joven y apuesto Marnie casi no podía creer que se tratase ahora de su profesor, cuando escuchó a Ray, le miró entristecida.

- No es justo que pienses eso, es tu padre, estoy segura de que te quiere con locura y no se merece algo así Ray, deberías valorar lo que tienes, ya bien sabes que… bueno, podrías perderlo en cualquier momento y… arrepentirte de no haber pasado más tiempo con él, de no haberlo abrazado cuando pudiste… - una lágrima rueda silenciosa por la cara de la niña, se la seca con el dorso de la manga y vuelve a mirar a la pantalla, - es tu padre Ray.

La pequeña gryffindor continuó ensimismada en la proyección sin advertir, que no había salido una palabra de la boca de Ray a pesar de que ella había reaccionado a su pensamiento.

- Vaya si que eras un rebelde… - comenta al verlo en la pantalla con la pataleta.

Oliver salió de la sala y eso hizo que me replanteara si seguir allí o no, la clase parecía interesante en un principio, pero ver la vida de los dos mellizos ya comenzaba a aburrirme, no conseguía entender que sentido tenia aquello y que clase de prueba absurda podría ser, por otro lado dejar a Oliver solo me preocupaba demasiado así que finalmente decido salir afuera con mi amigo y esperar a que todo aquel rollo acabase.

— mamá... a Ray se le pasará — le dice Ginevra a su hermosa madre.  ¿es nuestro cumpleaños? — preguntó, sin soltar la mano de su mamá, la recordaba así, tibia y suave — podemos ir por él...

— ¿Papí? — se gira hacia sherman Yaxley.

Se pasaron toda la tarde buscando a Ray por los alrededores de la casa, Ginevra seguía abrazada a su madre o de la mano de ella, al llegar la noche Ginevra tenía frío y sueño, las ganas de estar con su madre eran más fuertes que el sueño que pudiera tener en aquellos momentos o del frío que pudiera sentir, sin embargo, todo se quedó en negro unos instantes y al abrir de nuevo los ojos Ginevra amanece en lo que parece su propia habitación. No había rastro alguno de objetos mágicos, en su lugar había libros de Geometría, matemáticas, lengua y literatura, conocimiento del medio, ¿Qué era todo aquello?

Ray no había reparado nunca en que Marnie tenía el curioso don de leer la mente hasta que ésta no le susurró que no estaba bien hablar así de su padre. ¿Cuando había dicho algo así en voz alta? Mucho cuidado había tenido siempre de guardar sus secretos y no exponerlos, menos aún de hablar mal de su padre pese al odio que le tenía desde la muerte de mamá. ¿Había sido casualidad que la joven interpretase sus pensamientos o en verdad tenía esa capacidad?

Durante el lapso de tiempo en que el recuerdo de Gin se desvanecía, Ray miró fijamente a Marnie y en su mente formuló una pregunta directa a la joven. ¿Seria capaz de responderle?

Asiente con la cabeza si estás escuchando lo que digo en estos momentos, y cierra los ojos dos veces si quieres hablar conmigo a solas después de clase.

Ahí quedaba dicho. Creía haberla descubierto de su secreto y sabía que mirándole fijamente no iba a poder ocultarselo. La conocía lo suficientemente bien como para saber qué a él no le mentiría, como él no lo haría con ella si le preguntaba. 

Marnie, no digas a nadie que puedes leerles la mente o será peor, a nadie le gusta que puedan leer sus pensamientos, empezarán a desconfiar de ti sin motivos.

No... No me di cuenta, pero Ray es mi amigo seguro que confiara en mi,  y si no lo hace es porque quizás no merece serlo ¿no crees? 

Puede notar como Marnie parece estar segura de lo que piensa aunque parece preocupada al respecto

Puedo haber cometido muchos errores en este colegio, lo se bien, pero sin duda el peor fue contar lo que me estaba pasando a los demás, pronto lo supo todo el colegio, me quedé sin amigos, sin mi hermana, pronto nadie quería estar conmigo, créeme cuando te digo que es mejor no contarlo. De todas formas, tu decides y yo seguiré aquí para ti.

Gin, contenta, salió de su cuarto corriendo hacia la cocina.

— mamá.. ¿mami?¿ Dónde estás? ¿Podemos ir en busca de setas? — recorrió la casa, dando saltitos de felicidad — Mamí, ¿Ray sigue enojado? — ¿mami? — 

Sin embargo no parece haber nadie en la casa. Veis unas luces rojas y azules que iluminan la estancia del salón, cuando Ginevra asoma la cabeza veis un coche con unas luces en el techo, parece un patrullero de la policía, un chico joven está hablando con el padre de los dos hermanos, ambos parecen tristes y afectados por algo, pero no lográis oírlo desde el otro lado de la ventana.

Ginevra lleva su mano derecha hasta su cara para cubrirse de la Luz que venía del exterior de la casa, no reconocía el patrullero, o mejor dicho, no lo vinculaba a algo malo como los muggles. Ginevra se restregó los ojos y salió de la ventana para caminar por el pasillo y salir al jardín, ahí corrió donde su papá y se aferró a sus piernas.

— ¿Que pasa papito? ¿Dónde están Ray y mamá? .

Me agacho para ponerme a la altura adecuada y clavo mi mirada en la de Ginevra.

Mamá y Ray han tenido un accidente cielo, venían para casa desde el centro en el coche y un conductor se saltó un semáforo. Mamá está en el hospital y Ray está... las lágrimas recorren mis mejillas mientras mi mirada pasa de los ojos de Ginevra al suelo y luego ya no puedo mirarla de nuevo. 

Ray... ha muerto cielo. Ahora está... está... con los abuelos... en el cielo.

Agarro sus manos y luego la abrazo fuertemente. La cojo en brazos y la meto dentro dejando al policía allí. El chico de uniforme parece abatido por dar aquella noticia y se queda unos minutos sin saber reaccionar bajo los primeros copos de nieve que empiezan a caer anunciando la entrada del invierno y la finalización del otoño.

Al ver elnrecuerdo falso que esa máquina nos mostraba, estallo en rabia y cojo mi tintero arrojándolo con fuerza contra el auror, me importaba muy poco si daba en el blanco o no.

Basta de idioteces Graves, voy a sacar a Ginevra de esa maquina ahora mismo, no voy a permitir que le borres la memoria con recuerdos falsos y traumáticos.

Ray está vivo y sentado.en esta misma clase, su máquina de mierda sólo le está creando un trauma psicológico a Ginevra tal como lo hizo ese bastardo del mortífago.

¿Qué clase de auror de poca monta eres que traumatizas a un estudiante y no puedes evitar que un puto mortífago se meta a la escuela?  - grito con rabia mientras me dirijo a la puerta y miro al profesor.

Profesor Fluxx si no hace algo, lo que le ocurra a la señorita Yaxley será también su responsabilidad, así que dígame dónde está. Me importa poco si me expulsan por esto, no voy a quedarme de brazos cruzados mientras uno de mis amigos sufre.

Marnie asiente y parpadea mirando a Ray en respuesta a lo que le dijo y volvió a centrar su atención en la pantalla. Aquél recuerdo parecía un auténtico drama y Ginevra estaba totalmente desconcertada y en el momento en que el padre informó a la pequeña de la muerte de su hermano la pequeña Ollivander palideció cual cadáver entreabriendo su boca con expresión horrorizada.

- No… - susurró.

Sus anos comenzaron a sudar y y temblar, sus manos… fue cuando se dio cuenta de que aún tenía la mano del muchacho entre las suyas y se giró para verlo, sí, aún seguía ahí.

- Ray… es…estás aquí, no… no se que mierda es esto pero… espero que Gin esté bien… - ¿pero cómo iba a estarlo? Conocía perfectamente cuan sensible era la muchacha y que su hermano era su mayor debilidad, su mayor amor. Marnie le miró fijamente, - Tranquilo ¿vale?

Entonces Artemis, lanzó el tintero a Graves pidiendo que pararan aquella locura y amenazando con ir a sacar a la chica de allí y Marnie estuvo tentada de seguirlo pero no sabía que pensaba hacer Ray y él también la necesitaba. Entonces se acerca a su amigo y le susurra algo.

- Tienes que sacarla de ahí Ray

Yo no tengo que hacer nada pequeño mocoso malcriado. 

No oís ningún tipo de hechizo, ninguna palabra sale de la boca del auror pero en un abrir y cerrar de ojos el tintero vuelve a toda velocidad hacia Artemis.

El tintero se estrella contra la parte derecha de la cabeza de artemis ya que no pudo más que voltear la cara. Pronto la sangre y la tinta se mezclan en el pelo del niño mientras cae al suelo todavía perplejo de lo que estaba pasando. Unos segundos después el dolor comienza a extenderse.

Ray sonrió ante la respuesta de Marnie, le había confiado su secreto y se lo agradeció presionando ligeramente un par de veces la mano de la muchacha de forma afectiva y cariñosa. Entonces reparó en que la joven parecía ser lenta en su acciones, sin mostrar su habitual espontaneidad, como si algo o alguien interfiriese, aunque no sabía idendentificar el qué. 

Un pequeño vistazo a su alrededor le permitió darse cuenta que el joven Thad estaba mirándolos fijamente, y creyó saber que estaba ocurriendo. ¿Mantenían ambos, Marnie y él, una conversación fluida mentalmente? ¿Estaba mirándoles un tanto contrariado porque hubiese preferido que la joven no le revelase el secreto a Ray? Ray no era como el resto, era más perceptivo que la inmends mayoría y no se le escapaban ese tipo de detalles. Fisgar en las conversaciones ajenas no estaba bien, pero Ray también tenía su as en la manga, y pese a que Thad era su amigo, no le gustaba que leyesen su mente sin su consentimiento, no lo permitiría. Se protegería mentalmente como le había enseñado a hacer Dumbledore años atrás, y solo permitiría que le leyese la mente Marnie.

Lo siento Thad, pero no me gusta que fisguen en mis conversaciones privadas... Creí que eras mi amigo y que confiabas en mí, pero puede que esté equivocado contigo si crees que podría reaccionar mal con Marnie... Hasta aquí te permito escuchar...