Partida Rol por web

La Casa del Polvo y la Ceniza

Segunda Parte: El Vuelo de la Mártir Cygnan

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07/09/2015, 01:34
Director

La tripulación y el capitán de la nave comprobaron vuestras invitaciones a la subasta están en orden y os ponen al día.

Se trata de una nave privada, contratada exclusivamente para el transporte de los invitados a la subasta. Por suerte para vosotros, se espera buen tiempo durante el viaje lo que el capitán calcula que durará unas 30 horas a velocidad de crucero (los días en este planeta no alcanzan las 14 horas) atravesando el ácido mar Balemire hasta alcanzar la Isla Ardiente, donde se encuentra el edificio donde celebrarán la subasta, la llamada Casa del Polvo y la Ceniza.

Evidentemente no sois los únicos invitados, aunque sí el grupo más numeroso. Hay alrededor de una treintena de pasajeros en total, contando a los propios tripulantes de la nave, cada uno con sus diferentes particularidades y rarezas (ver los pasajeros en la escena PNJs de Renombre) a quienes apenas habéis visto de pasada durante las primeras horas del viaje.

Las primeras 2 horas de viaje compartisteis rumbo con algunas otras naves de aspecto similar, aunque tarde o temprano todas terminaban cambiando su rumbo en una u otra dirección. También visteis naves fácilmente identificables por sus insignias del munitorum, que tras verificar vuestra identidad y destino con breves comunicaciones con el capitán, se alejaron sin que ocurriera ningún problema.

La geografía bajo vosotros no cambiaba gran cosa, hacía mucho que tan solo veíais aquél mar verde negruzco bajo vosotros, junto con ocasionales restos de edificios en ruina que asomaban por encima de su superficie en calma, aunque en ocasiones, grandes columnas de fuego en el horizonte partían el cielo en dos durante unos segundos ante vuestros ojos. Tras unas pocas horas más, ya no había nadie más en el aire que vuestra nave...

Notas de juego

Tenéis plena libertad para actuar en la nave (clic en la imagen para verla más grande).

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07/09/2015, 11:05
Hieronymus Homron

El arbites fue de los primeros en subir a la nave, siempre al lado izquierdo de Urtzi y apenas un paso por delante del mismo. Dispuesto a cubrir a ambos con el voluminoso escudo que no preocupó de ocultar. Evaluó a los demás pasajeros con la mirada, sin cortarse lo más mínimo, midiendo el carácter y el grado de amenaza que cada uno podía presentar.

- Lanus, el individuo de piel negra y trajes caros podía pasar por un comerciante libre (RogueTrader). Su supuesto asistente, sin embargo bien podía ser en realidad un psíquico. El arbites había aprendido a no confiar en las apariencias y a no dejarse sorprender por quien parecía un miembro del Administratum.

- Vymer y Quill. Aquellos dos, sin embargo, no preocupaban tanto al viejo, o al menos no lo hacían de la misma fora. Su aspecto salvaje, tribal mostraban un aspecto bien dispuesto para la lucha. En realidad ambos daban con el perfil de cazarrecompensas. De aquellos no esperaría sorpresas. Quizás si un grito de guerra y una carga cuchillo en mano, pero no sorpresas.

- La señorita Nile cuadraba con el perfil de lo que debían esperar, una comerciante y un grupo de escolta. Bien. ¿Qué pintaba allí sin embargo el tipo pequeño y acobardado? El arbites dirigió la mirada hacia su propio grupo. Gruñó. De nuevo un psíquico probablemente.

- El grupo del Ministorum también escamó al viejo arbitrador. Tanto por su número como por lo extravagante de la escena. Un abad de aspecto displicente hasta lo obsceno rodeado de un numeroso grupo de monjes a los que incluso faltaba el calzado. No había que ser un experto para desconfiar.

Después de valorar a aquellos pasajeros que compartían con ellos nave y estancia común, el arbites distribuyó al equipo. Él permanecería junto a Urtzi en todo momento mientras que los demás formarían un discreto perímetro con Heinrich, Isolda, Orionus y Gianna en cada una de las puntas del imaginario cuadrado. Con una mirada y un gesto fue suficiente para que cada uno entendiera lo que esperaba de ellos. Dirigió una mirada más larga a Isolda y luego hacia el abad. Confiaba en que la hermana evitara el contacto con el Ministorum, que quizás, por sus expresiones, su aspecto o sus formas descubriera su tapadera. No sería nada fácil justificar como una sororitas había abandonado su orden y entrado a formar parte de la seguridad privada de un mercader.

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07/09/2015, 11:26
Hieronymus Homron
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Al poco de abordar la nave el arbites se acercó a Taikel y conversó con él en voz baja, junto a su oido.

- ¿Sería posible que alguno de los presentes fuera un colega vuestro? - dijo mirando discretamente a los asistentes de Octavia y de Lanus - ¿sería posible conocerlo gracias a vuestras... habilidades?

Un instante después, siempre desconfiado, añadió - ¿Nos descubriría hacerlo?

- Confío en vuestra discrección y en vuestra... habilidad - susurró no sin cierto tono dubitativo. No le gustaban los poderes psíquicos, pero si el Enemigo se ocultaba allí, quizás no tendrían más remedio que utilizar todos los recursos que el inquisidor Vorn había puesto en sus manos.

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07/09/2015, 13:55
Taikel

Ah otro viaje espacial. Si alguna vez me retiraba, me subiria a una nave y no volveria a bajar nunca. Despues me reí de mi ocurrencia. Al unica manera de retirarse del servicio a la inquisición era morir. 

Por lo menos era una buena nave. Para viajar comodos con pasajeros adinerados. 

Pensaba en mis cosas cuando el Arbites se me acercó a hablar en privado. 

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07/09/2015, 14:00
Taikel

Ante sus preguntas traté de responderle como mejor pude. 

- Existen maquinas extrañas que pueden detectar rastros del uso de la disformidad en la gente. Pero alguien entrenado puede hacer lo mismo sin gastar tanto dinero. - Le respondí. - Seguramente no nos descubriria al hacerlo, pero si hay alguno de los "mios" aqui, y se le ocurre buscar a otros, no podré "esconderme". Somos como un faro unos para otros, una vez ampliamos nuestros sentidos. - Le dije, apenado. La verdad era que la unica manera de "esconderme" seria un Anulador, y eso me dejaria totalmente indefenso. - Gracias. - Le dije ante su muestra de confianza, aunque era bastante evidente que en realidad no confiaba demasiado en ningun psiquico. 

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09/09/2015, 02:37
Orionus Boulder

Orionus se sentía extraño al llevar tanto el nuevo atuendo que vistió en Corte de la Cancillería como la capa roja roída que le complementaron para disfrazarse por completo. Aunque ofreciera ocultación a las armas pequeñas que llevaban debajo de esos ropajes a la hora de moverse o realizar una acción rápida aun no se había acostumbrado a su peso y dimensiones para poder moverse con tranquilidad.

Al bajar del transporte y tener delante la nave que les iba a llevar a la subasta en la Casa del polvo y la ceniza se quedo observando lo unos segundos pensando "Espero que esta nave sea bastante grande por dentro por si hay que moverse por ella por cualquier circunstancia". Luego al salir todos del transporte Hieronymus dio unas instrucciones a todos los miembros del equipo, a Orionus no le hacia gracia que diera ordenes pero ya tenían que interpretar cada uno sus papeles y Orionus debía aparentar ser un guardaespaldas profesional.

Todos los que siguieron las instrucciones formaron alrededor de Urtzi, subiendo al nuevo transporte con su equipo inicial y el recién adquirido en esta misión. Pasaron las horas después del despegue o desembarco y Orionus quería parecer lo más profesional, escoltando a Urtzi. Observando de manera pasiva, disimulada y casi impercetivamente al resto de la tribulación de la nave, los invitados a la subasta y sus acompañantes.

Orionus a parte de llevar todas las armas pequeñas envainadas y enfundadas. Sobresalía de sus ropas la espada envainada en el cinto de su cadera, el rifle de caza sujeta con la correa a su espalda y también la mochila con todo el equipo no ofensivo que no fuera a usar en un incidente rápido. Mientras se movía como escolta y armada a mano llevaría el rifle automático sin el seguro puesto.

Notas de juego

Olvide describir la apariencia de mi personaje. Para que no hay malentendidos de las armas que tengo a mi alcance.

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09/09/2015, 10:46
Heinrich Von Tod

Heinrich llevaba su escopeta "picadora de carne" bien sujeta y su rifle, cargado con unas baterias de alta potencia nuevecitas, colgando de su espalda, por encima de la capa. El veterano sargento de la guardia Imperial hacia por lucirse como un duro guardaespaldas, de esos que es mejor no mirar mucho por si le da alegria al dedo del gatillo.

Al igual que en la mision anterior, Heinrich se pone al lado de Hieronymus, abriendo la marcha y protegiendo con su cuerpo a Urtzi.

Cuando su mirada, oculta por su opaco visor, se posa en los diferentes pasajeros del navio, el rostro de Heinrich parece serio. Su cinica sonrisa parece estar oculta por una mascara de determinacion y profesionalidad, parte de su tapadera como guardaespaldas. 

Sin embargo, dos grupos le llaman la atencion por encima de los demas. Primero la dama Nile, si bien parecia la mas normal del elenco de payasos que se encontraban ahi, eso le escamaba mas a Heinrich. La mejor manera de ocultarte era a simple vista, y ella parecia hacerlo bien. Su mercenario le llamo la atencion, ese visor tenia buena pinta.

Luego, el que realmente le daba escalofrios, ese obsceno cacho de carne del minitorum, se dirigian a una subasta de materiales de procedencia hereje, que un representante de la iglesia se encontrara ahi, alejado de la luz del Emperador, le clasifico automaticamente como el peor hereje de la habitacion. Los salvajes podian, dada su ignorancia, desconocer que el camino que recorrian no era el recto, los comerciantes libres se movian por una unica ideologia, el dinero, no les importaba la herejia si de ella podian sacar creditos por lo que la presencia de Nile y Lanus era de esperar. Pero un Abad, que diera la espalda al Emperador...era tres veces hereje, primero por darle la espalda al Emperador, segundo por traicionar toda la tradicion eclesiastica, lo que era una traicion al Emperador y por ultimo, porque si el se desviaba del camino, su rebaño podria seguirle, con lo que arrastraba a mas gente a la perdicion.

Definitivamente, su dedo de disparar le empezaba a picar.

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09/09/2015, 18:06
Taikel
Sólo para el director
- Tiradas (2)

Notas de juego

Las tiradas para descubrir a un psiquico x ahi y para ocultar mis acciones. 

Psiniscencia para tratar de descubir un psiquico, e invocacion para ocultarme. 


Master: Las energías de la disformidad se mantienen en calma. Eso no te ayuda a confirmar nada, más allá de que si de verdad hay un psíquico en las proximidades, está prudentemente ocultando sus poderes, igual que tu.

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10/09/2015, 10:11
Urtzi Chrom

Urtzi se removía nervioso en el interior de su nuevo abrigo. No porque se sintiese incómodo con la prenda si no más bien por el repentino peso de la responsabilidad pues lo que hasta ahora había sido un plan teórico se tornaba en una implacable realidad. Lo calmó en cierta medida la visión del Mártir Cygnan, una nave de transporte ciertamente curiosa que los llevaría hasta el lugar en el que sería la subasta. 

Con miradas cautelosas, el adepto hacía lo posible por fijarse bien en los pasajeros invitados. Sin duda no se podía trazar ningún patrón entre ellos salvo, claro está, su asistencia al evento. Había desde lo que parecían comerciantes con buen nivel adquisitivo hasta un curioso séquito perteneciente al Ministorum. Todos ellos acompañados o bien por guardaespaldas o bien consejeros. Incluso le pareció reconocer a un compañero de profesión entre ellos. Bien mirado, el grupo de acólitos no llamaba especialmente la atención en medio de una multitud tan variopinta. Pero, por algún motivo, aquello no le hacía dejar de sentir cierta inquietud. De cuando en cuando, Urtzi se dedicó a contemplar el paisaje que rodeaba a la nave. Un mar infinito se extendía allí donde el adepto posaba la mirada, no había nada más. De algún modo, esa visión lo tranquilizaba. Quizás fuese por la casi imperturbable superficie del agua oscura o por la monotonía del paisaje, pero sin lugar al dudas podía pensar con más claridad. Se supone que su misión era recabar información sobre aquellos que acudiesen a la subasta y este viaje previo parecía un buen momento para comenzar, aunque realmente no sabía muy bien cómo. De modo que, por el momento, Urtzi decidió esperar a una ocasión en la que el contacto no fuese forzado. 

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10/09/2015, 19:49
Hermana Isolda

Isolda había tenido complicado el disfrazarse, tanto por el corte de pelo tan característico como por el tatuaje de flor de lys que tenía en los pómulos. Optó por hacerse con unos ropajes normales para cubrirse. Buscó una capucha y una máscara de esas que solían llevar los mercenarios, intentando tapar su rostro y sus tatuajes.

Con ese objetivo conseguido, acompañó a todos intentando destacar lo suficiente y, sobre todo, intentando percatarse de posibles amenazas en ese lugar. No le gustaba que todos fueran en el mismo barco, si alguien quería liquidar la competencia solo tenía que derribar una barcaza.

A penas miraba hacia el paisaje, pues le preocupaban los que estaban allí. Eso era una cesta de serpientes y odiaba tener que hacerse pasar por algo que no era, pero parecía que este trabajo lo pedía una y otra vez.

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11/09/2015, 11:36
Taikel

Me acerqué a Hieronymus y le susurré algo al oido. 

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11/09/2015, 11:37
Taikel

- Por el momento todo está tranquilo. Si hay algún psiquico cerca, debe estar ocultandose como yo. Estaré atento. - Le dije al Arbites en un susurro serio. 

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12/09/2015, 15:28
Gianna Anzerani

Cuando entramos en la nave me lo tomo con bastante calma. No se a que tanto nerviosismo, aqui a la vista de todos los demas dudo mucho que vaya a pasar nada. Asi que a parte de fijarme en los presentes para quedarme con sus caras (y las armas que puedan llevar a la vista), no hago mucho mas.

Me llama algo la atencion el hombre de piel oscura eso si. Quitando los salvajes es el unico que no parece ir muy acompañado, y los salvajes dsi parecen capaces de defenderse de si mismos. He visto lo suficiente como para no fiarme de las apariencias, pero ni el hombre de piel oscura ni su acompañante parecen imponer demasiado. Si tenemos en cuenta donde nos estamos metiendo todos, algo tienen que esconder. Puede que el que le acompaña sea un psiquico, pero aun asi... Con nosotros tambien viaja uno, y eso no es garantia de nada.

Mas alla de ahi, me doy cuenta de que nosotros somos un grupo realmente numeroso en comparacion con los demas, salvo quizas el gordo y su tropa de curas, y muy bien armado. Al menos en comparacion con lo que hay en la barcaza.
Sin duda llamaremos la atencion.

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12/09/2015, 16:18
Hieronymus Homron

Hieronymus respondió a las palabras de Taikel con un asentimiento. Sin embargo, por tranquilizadoras que pretendieran ser las palabras del adepto de la Schola Psykana el viejo agente continuaba sospechando. Los psíquicos no eran nada frecuentes, pero seguro que dentro de aquel elenco de potentados más de uno disponía del capital suficiente como para contar con los servicios de uno de ellos. Antes de volver junto a Urtzi se limitó a responder escuetamente:

- Bien, continuad.

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12/09/2015, 17:12
Hieronymus Homron

El arbites se sintió satisfecho aunque lo fuera sólo por un instante. El equipo había respondido con rapidez a sus indicaciones y en este caso, alabado fuera el Dios Emperador, sin protestas. No obstante, lejos de permitirse ninguna sensación de falsa seguridad, el arbites no dejó de mirar a su alrededor, con el escudo firmemente embrazado y protegiendo a Urtzi con éste y con su cuerpo. Hizo una vez más una evaluación de las armas en la sala y de aquellos que las portaban y se dirigió al equipo.

- Debemos evaluar los aposentos de que dispondremos. El lord - dijo refiriéndose a Urtzi - permanecerá aquí.

- Hotel, queda al mando - dijo empleando el nombre en clave de Heinrich y al que dirigió un leve asentimiento.

- I… Inés ¿seríais tan amable de acompañarme? - dijo dirigiéndose a la sororitas. Estaba claro que la hermana no se encontraba cómoda con sus nuevas vestiduras, ni con su condición de infiltrada y los hechos acaecidos en Desarbolada, tanto la pérdida de su mano como los eventos con la familia Wolfe habían afectado a su carácter. Por ello el arbites en lugar de emplear su anterior nombre en clave “India”, lo había cambiado por “Inés” nombre de una renombrada mártir del sector. Quizás la hermana se sintiera más cómoda empleando ese apodo.

Dudó en llevar consigo también a Taikel o a Arcturus, pero esperó a que éstos u otros de los miembros del equipo se ofrecieran en lugar de pedírselo, en cualquier caso, contaría al menos con la compañía de la hermana Isolda y Urtzi estaría bien protegido en su ausencia por el grueso del equipo de acólitos.

El arbites se disponía a evaluar los aposentos que les hubieran asignado, su ubicación y su relación con los de los demás pasajeros. Comprobaría huecos en la seguridad, desde dispositivos de escucha a respiraderos o puertas débiles, así como establecer los lugares más defendibles.

Quizás aquellos nobles señores que les acompañaban no establecerían combate abierto en la cubierta pero no se negaran a apuñalar a sus potenciales competidores en la oscuridad de la noche.

- Tiradas (2)
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12/09/2015, 17:54
Director

Notas de juego

Con tu ojo experto determinas que las armas básicas que llevan los guardaespaldas de Octavia Nile son armas láser; también llevan unas armaduras de tipo antifragmentación. Además, ligeramente arropada por la capa que lleva el tipo de la máscara has podido apreciar una vaina de espada. Octavia parece desarmada y desprotegida, si te olvidas de su compañía.

De Lanus Cisten y su acompañante no consigues percibir mucho. No ves que Lanus lleve ningún arma, pero bajo sus ropas has distinguido una brillante armadura pectoral. Su acompañante lleva una pequeña pistola enfundada en su vaina sobre la sobaquera de su túnica, solo disimulada por la postura de sus brazos al llevar los papeles.

De Vymer y Quill concluyes que tal vez sean los mejor armados, ligeramente por encima de los guardaespaldas de Nile. Uno de ellos lleva un cañón de mano de diseño similar al del sobrecargo de la nave, y otro de ellos una escopeta y ambos algún tipo de porra o garrote, del que solo se ve parte del mango bajo su armadura. Esta armadura parece haber sido reparada en varias ocasiones, porque algunas de sus partes (por ejemplo, la correspondiente a un brazo en Vymer, y a una pierna en Quill) son evidentemente nuevas en comparación al resto; por lo demás, esas armaduras son parecidas a las de los guardaespaldas de nile, solo que el pectoral tan voluminoso hace evidente que llevan alguna protección pectoral adicional bajo ellas.

Los clérigos seguidores del abad Tamas parecen completamente desarmados, aunque sus túnicas están tan sucias, raidas, y se ajustan de forma tan dispar a su cuerpo, que no conseguirías estar seguro de ello a menos que les examinaras de cerca. Sin embargo, el abad si que lleva una pequeña pistola, visible bajo un pliegue de grasa, y el relieve de una simple daga se marca claramente entre las ropas firmemente ceñidas a su gordura.


Sobre sus intenciones... varias ideas pasan por tu mente, pero te es imposible hacerte una idea realista de ellas por el momento. Por otro lado, te da la impresión de que los clérigos del abad están al borde del desfallecimiento.

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13/09/2015, 17:19
Arcturus

Arcturus ganó la nave junto con sus compañeros, encantados con sus nuevas equipaciones, que miraban y acariciaban como niños con juguetes nuevos y, siguiend con la analogía, escaso respeto. El Martir Cygnan se deslizaba suavemente, como su nombre podría sugerir, por los cielos de aquel extraño y maltratado planeta. Las cubiertas estaban abarrotadas, entre la tripulación y los viajeros que se dirigían a la subasta.

Arcturus pasó la mayor parte del tiempo observando el Belamire, con las manos a la espalda, mirando inmóvil a través de los ventanales de la nave. Únicamente le llamaba la atención aquel Abad, Tamas. Algo en el fondo de sus circuitos le hacía mirarlo de reojo, de vez en cuando... Los más militarizados de sus compañeros rodearon a un Urtzi, quien parecía más abrumado que protegido, el pobre. Sin embargo, Arcturus sabía que era un individuo inteligente, y aprobó su actitud de reserva; dejad que sean los demás quienes se acerquen.

Tras un rato de mutuas presentaciones y suspicacias, Hyeronimus decidió tomar la iniciativa. El arqueo de cejas y ligero cabeceo del arbites, nada discretos, le convencieron para seguirle; tal vez pudiese inspeccionar... algo en los aposentos de Urtzi; es decir, del lord.

- Tiradas (1)
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13/09/2015, 18:00
Taikel

Decidí quedarme con el Urtzi el Lord, preferia estar cerca de él por si intentavan escanear mentes algun otro psquico poder detectarlo y avisar al resto del grupo. Tal vez prevenidos les costase menos resistirse a lecturas mentales y argucias de ese tipo. Aunque si el psiquico oponente era poderoso... Poco podrian hacer. 

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14/09/2015, 09:58
Heinrich Von Tod

Ningun sentido tenia el desviar mas recursos a la inspeccion de los aposentos que usariamos, seguramente algun camarote, apenas equipado. Nuestro mayor experto en la materia ya iba junto con Hieronymus, por lo que seguramente, lo que no descubriera Arcturus, no lo descubriria ninguno de los demas del grupo.

-Gamma, por favor, ocupa el puesto de Jerome-Dice indicandole a Gianna en jerga militar que protega a Urtzi como lo estaba haciendo el viejo, ahora ausente.-No creo que nadie quiera empezar un tiroteo aqui, pero somos guardaespaldas profesionales y asi tenemos que parecerlo.

A continuacion, Heinrich susurro a Urtzi.

-Mi señor, si quiere relacionarse con el resto de presentes, para averiguar quienes son, nosotros estaremos a su lado protegiendole.

Al fin y al cabo tenian la mision de identificar a los asistentes a la subasta y en un sitio tan publico, con un indicie tan bajo de posibilidades de que alguien iniciara un tiroteo, era mejor ocasion que en medio de la subasta, rodeados de herejes, cuando nadie dudaria de acabar con un sospechoso de no pertenecer a sus grupos de traicion y corrupcion.

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14/09/2015, 11:25
Urtzi Chrom

Tratando de mantener la compostura, Urtzi asintió con aparente tranquilidad a las indicaciones del señor Homron. Después de todo, no existía el derecho a réplica. Aunque la Lady Dekanta les hubiese instado a sobrevivir, no dejaba de haber una misión que cumplir y las precauciones que estaba tomando el arbites cumplían las condiciones para los dos objetivos. 

Heinrich asumió el 'mando' de la formación, reestructurándola nuevamente poniendo a la soldado en el lugar del veterano acólito. Urtzi le dedico una breve y amigable sonrisa a Gianna cuando ésta ocupó su sitio. -Esta vez no se trata de ninguna noble familia, ¿eh, Gianna?- Le dijo en voz baja a su compañera para apreciar con cierto sentido del humor su situación. En Desarbolada tuvieron ocasión de entrevistarse con una de las familias gobernantes mientras que aquí no había ninguna certeza con la naturaleza ni comportamiento de sus posibles interlocutores. Aquella reflexión hizo que el adepto prestase mayor atención a quiénes los rodeaban. Quién más llamó su atención en primera instancia fue el hombre que parecía pertenecer al Administratum, al igual que él. Tampoco era menos llamativo el hombre al que servía, con aquella indumentaria. Seguidamente, su mirada se posó en los dos invitados con aspecto más salvaje. Urtzi había leído en ocasiones sobre mundos Imperiales donde no llegaba completamente la mano del Emperador o donde el propio planeta dificultaba la intervención de su maquinaria dejando a sus habitantes estancados en una era primitiva. La engalanada mujer y sus dos acorazados guardaespaldas fueron los siguientes. Quizás Heinrich o Gianna fuesen mejores que él para evaluar a los dos soldados que protegían a la mujer, por ello puso más atención en ella. Por último, pasó al pequeño séquito de la Eclesiarquía. No podía intuir mucho más de lo que había aprendido en su formación. Como siervo del Mechanicus, su fe pertenece al Omnissiah y no estaba familiarizado con el culto al Dios Emperador. Pero ello no lo convertía en un completo ignorante al respecto.

Con calma, Urtzi se tomó su tiempo para analizar a los presentes, buscando cualquier detalle que pudiese aportar un poco más sobre toda aquella gente que los rodeaba. Si debían competir con ellos y detectar a cualquier amenaza para el Imperio de la Humanidad, tenían que armarse debidamente. Y, pese al deliberado desprecio del algunos, la información puede ser el arma que marque la diferencia.

- Tiradas (3)

Notas de juego

Tiro perspicacia en general para ver con qué detalle evalúo al personal. 

Uso Saber Popular (Imperio) por si me sirve para deducir cualquier cosa de los invitados y (Administratum) en concreto para el otro adepto (si es que realmente lo es/fue)

Dime si haría falta alguna otra tirada o si puede ir mejor otra habilidad. Para los del clero ya sé que existe el Credo Imperial, pero no gasto de eso :P