Partida Rol por web

- Me gusta tu teoría -

dijo bajando la voz mientras se acercaba a la chica

- Quizá lo mejor sea que sigamos el rollo a ver que pasa.

Me gusta como piensa esta chica... Y bajando aun más la voz, le dijo - ¿Marta, verdad?

 ¡Vaya! ¡Un fuego que habla! Dije. Mi sarcasmo terminaría costándome caro, pero no podía evitarlo. Preferí no hablar, no me apetecía llamar la atención en estos momentos. Contemple las llamas y me fijé detenidamente para ver si podía ver algún tipo de mecanismo

De pronto todos los candelabros se encienden y hay una mujer, de unos 60 años, parada en el umbral de la puerta. Comiendo, sentados a la mesa, uno al lado del otro, hay una pareja: un joven de cabellos oscuros y un poco de barba y una preciosa chica de rubios rulos. Ambos miran a la señora.

-Madre... él es...

La mujer abofetea a la muchacha, indiferente a vosotros. Es más, una sirvienta de color entra por una de las puertas y se queda boquiabierta, llevando una bandeja de plata entre sus manos. Tampoco ella los mira. 

-¿Cómo osas hacernos esto Elizabeth, ¡cómo te atreves a deshonrar a tu familia?!

-Madre... él es...

El joven se para y trata de intervenir.

-Señora...

-¡Vete de aquí, tú has traído sólo desgracias a esta casa.

-Pero... señora por favor...

-VETE!!!

La mujer grita y Elizabeth va a abrazar al muchacho pero entonces la mujer la retiene del brazo.

-Eres una Marleen, no vas a juntarte con escoria!!!

Luego todo se apaga. Incluso la chimenea. Aunque están en total oscuridad se oyen unos sollozos...

¿Pero que era eso? No podía creer lo que acababa de ver, mire a mis compañeros, para asegurarme de que no solamente yo había visto eso.

- ¿Alguien cogio la carta que vimos antes? Creo que decia algo de ELizabeth, ¿no? ¿Qué ponía?

No había atendido mucho a esa carta antes, estaba más interesada en buscar una salida, pero no podía ser una casualidad que esa joven fuera la misma de la carta, quizas consiguieramos saber que era todo aquello.

Despues de que me dijeran si tenían la carta o no me dirijo a la puerta que iba a ir antes de que esa escena pasase

La carta la tengo yo, dije mirando hacia Marta cuando preguntó por ello.

está claro que tendremos que unir las pistas para poder escapar de aquí. Alguien tiene alguna idea? Podemos ir a la habitación de al lado para echarle un ojo antes de seguir avanzando por la casa dijo sacando la carta.

Entonces hizo un gesto con la mano para que todos se acercasen tratando de sacar alguna pista de la carta.

¿Qué mierda era eso? No puedo creerme que haya alguien tan enfermo como para montar este teatro, o sigo dormido en el puto suelo del cajero y esto es un sueño muy raro o estoy alucinando por alguna otra razón. La cosa es que anoche no bebí tanto y no consumo ninguna otra drogra. Desde luego no parece un sueño y no veo marcas que indiquen que me hayan drogado, extrañamente eso no me tranquiliza. Cojo el cuchillo con más fuerza y me acerco hacia ellos si perder la vista de donde estaban los nuevos desconocidos, no me gustaría tener que atacar a ninguna de esas cuatro personas, pero si están tan locos comos para montar este espectáculo tampoco pienso darles la espalda como para darles la oportunidad de que me ataquen ellos a mí.

- Esto... Gente, todos hemos visto a un chico, una chica, una señora mayor y una criada ¿Verdad? Y la señora abofeteando a la chica ¿No?- pregunto observando en la oscuridad donde antes estaba esas cuatro personas- Me parece ridículo que alguien prepare un circo así para nosotros que no tenemos nada que ver, pareciera que quieran hacernos creer que esta casa está embrujada o que hemos viajado en el tiempo... Es de locos...- ese llanto no hace otra que cosa que ponerme más nervioso- Quizás se bueno llevarles la corriente hasta que podamos salir de aquí de forma segura, pero no sé cómo pretenden buscar algo en la carta sin nada de luz... Maldito llanto... Volvamos a la habitación de las cartas, aunque sea ahí se veía algo más.

 Me quedé quieto cuando se apagaron de nuevo las luces. No quería moverme de mi sitio, era más probable que si caminaba tropezara con algo.

Oí lo que decían mis compañeros y dije

Creo que va a ser complicado volver a la habitación de antes. ¿Sois capaces de ver algo? Porque yo no

No me gustaba la situación, pero el sollozo seguía sonando… Pensando que sería la única oportunidad para que volviera la luz, dije en alto:

¿Por qué llora, señorita, qué ocurre?

Todo paso de manera inexplicable, no podía creer lo que había pasado ante mis ojos. Esa visión o lo que fuere había sido tan real que era como estar dentro de una película. Después de ver la escena, por el aspecto de los presentes pude concluir que había estado en el pasado.

- Ahora me van a decir que lo que vimos es producto de una imagen holográfica? Esto es demasiado para la tecnología actual, fue demasiado vivido.

Las luces se apagaron y solo quedaron los sollozos de una mujer, sería posible que se tratara de un fantasma, de Elizabeth. Estaba un poco nervioso como para averiguarlo. Como estábamos ojeando las pinturas me apoye sobre la pared y trate de llegar a la habitación en la que estábamos antes, guiándome por la pared.

 - Nos vemos en la habitación anterior, quizas alli podamos hablar con más tranquilidad y viendo que hay a nuestro alrededor

Toque la pared y esperaba orientarme lo suficiente para llegar a la otra habitación sin problemas

Cuando Nacho pregunta a los sollozos sobre el motivo de ellos, éstos se extinguieron y todas las luces de los candelabros se volvieron a encender; por su parte, la chimenea se apagó. Cuando ésto sucedió una voz suave, la de la joven que lloraba antes, suspiró.

-Jonathan...

Pero eso fue todo, sea lo que sea que había aparecido, ahora ya no estaba allí. En este momento solo estaban los cinco extraños en este comedor ostentoso con el recuerdo vívido de haber vestido algo real que no encajaba en la concepción de realidad que poseían hasta el momento.

Cuando las luces volvieron, le pedí la carta a Miguel, la releí para mi

- Bueno sabemos que Elizabeth es la chica que fue abofeteada, Jonathan es el chico y Bartha es la criada. Hace mención a un padre, pero en la comida no había ninguno. La pregunta es...¿que tiene que ver todo esto con nosotros?

Volvi a darle la carta a Miguel, no entendía nada de lo que estaba pasando y cada vez las cosas se complicaban más.

Abri la puerta del final de la habitación, con suerte fuese la salida

Con la mano libre me rasco la barba sucia y enmarañada pensativo, nada tiene sentido en estos momentos. Las uñas amarillas, largas y quebradas, raspan más de lo debido, pero desde que estoy por las calles no me precupo demasiado de mi manicura. Montaje o no, parece ser que entender el por qué va a ser lo mejor para salir cuanto antes de ahí. Las palabras de Marta me sugieren una idea estúpida y disparatada, desde luego muy acorde a la situación.

- Veamos qué te parece ésto monada... ¿Son nuestros antepasados y quieren que arreglemos sus cagadas? No sé, yo ya no sé que pensar- me froto los ojos con las manos en un esfuerzo de intentar pensar con más claridad- ¿Qué tal si antes de pasar a otra habitación limpiamos esta? Seguramente a alguien ya se lo ocurrió y ya lo haya hecho, pero ¿ha mirado alguien detrás de los cuadros? Puede haber desde cámaras a otras cartas.

Me acerco a lo sitios donde estaban sentados antes Elisabeth y Jonathan, puede que hayan dejado algo tras de sí. Una nota, ectoplasma... ¿Un pedo? Lo que sea.

- Y si vas a pasar a la otra habitación te convendría hacerte con uno de éstos- digo levantando el cuchillo en dirección de Marta-. Parece que se han asegurado de que ninguno se quede sin el suyo.

- Por ahora solo nos hemos encontrado con cuatro...¿fantasmas? No creo que un cuchillo nos sirva de mucho. Aunque gracias, pero en caso de encontrarnos con algun lunático mis puños me seran más útiles, no manejo bien las armas blancas

Miguel se quedó observando la conversación entre el mendigo y la "luchadora" quizá el hombre tuviera razón y pudiese haber algo más en la habitación. Asi que Miguel se uso a echarle una mano en eso de buscar...

Sólo era necesario preguntar y ser educado, como siempre dije con cierto sarcasmo en mi tono de voz.

Toda esta situación me estaba hartando, esto ya me parecía absurdo. ¿Quién coño nos había encerrado allí?

No creo que sean los antepasados de nadie. Tiene que ser una broma de mal gusto. Si alguien sabe algo de algo, podía hablar ahora para que todos compartiéramos su información. A lo mejor así podemos salir de aquí...

Me agaché junto a la mesa buscando algo que pudiera ayudarme a resolver este rompecabezas

Fantasmas o no, el vagabundo tenía razón, no veo porque no tomar uno, dejaron bastantes cuchillos. Tome uno de los cuchillos que brillaban como nuevos, al parecer se habían esmerado en su limpieza, y lo puse en mi cinturón.

También decidí terminar de dar una ojeada a la habitación en busca de algo que nos pudiese servir, con el candelabro que por arete de magia se había vuelto a encender, y digo que por arte de magia, puesto que estaba en mis manos en ese momento.

Lo único que encuentran en la habitación del comedor es un pendiente. Está tirado en medio de los leños de la chimenea pero con ayuda de uno de esos palos que sirven para mover la madera cuando el fuego está encendido lo logran sacar. Es un pendiente pequeño, con un engarzado en oro, definitivamente algo valioso.

Marta decide probar abriendo otra puerta y aunque uno de los hombres le aconseja llevar el cuchillo la chica lo rechaza, pensando que no serviría contra un fantasma.

Luego del comedor, la última puerta de la izquierda, conduce a un larguísimo pasillo, bordeado de blancas paredes. En la parte superior hay varias arañas de las que penden caireles de cristal y que tienen bombillas eléctricas, las cuales se encuentran encendidas. El suelo está revestido por una extensa alfombra que tiene unos dibujos simétricos.

Hay tres puertas más aquí y además el comienzo de una escalera que va hacia abajo.

Se siente un extraño peso en la atmósfera, como si el aire de este sector estuviera siempre corriendo, aunque no se ven signos de ventanas.

Es raro ver algún signo de aparatos eléctricos aquí y mucho más notar la luz encendida. 

Entre la habitación anterior y ésta se ven muchas diferencias, como si ambas no coexistieran en el mismo espacio temporal.

- Deberiamos separarnos en dos grupos, asi registrariamos el lugar mejor, sin bajar ni subir plantas, solo esta planta. Cuando terminemos nos reunimos aqui. En la habitación del tarot quedaban algunas habitaciones por revisar, y en esta misma queda una. La casa parece bastante grande y si vamos en grupo tardaremos demasiado en revisarla entera. ¿Que decis?

Me dirigo a la única habitación que no se ha abierto en el comedor, no queria irme sin dejar de revisar todas las habitaciones