Partida Rol por web

Deja de entrenar cuando los mandos salen para hablar y atiende a lo que Ponzoña pueda informarles. Acude a la despedida final de Desastre.

Acude al entierro de Desastre.  

Preocupado acude al entierro de Desastre mezclado entre las filas de la infantería.

Campaña acude al entierro de Desastre, colocado al lado de su tío.

Va al entierro de Desastre.

Cena y va al funeral de Desastre.

Acudo al entierro de Desastre antes de ir a dormir

Comunica tanto a Guepardo como a Dolor que deberán acompañar a Barril bajo cuyas órdenes quedan. 

Ordena formar a los hostigadores para acudir al funeral. 

Comunica a Preocupado y a Plumilla que quedan en Carnonegro a las órdenes de Cabo Ponzoña.

Cabo Barril comunica al Pelotón de Infantería dos asuntos (usando idioma K'Hlata, así como de ahora en adelante):

- El Segundo Mago, Chamán Rastrojo, ya no pertenece al Pelotón de Infantería de manera orgánica.

- A partir de ese momento sólo se usará el idioma K'Hlata para hablar entre los miembros de la Compañía. Si alguien es interrogado por personal externo, se usará el idioma que se considere pero no se ha de revelar información sobre la Compañía o sus capacidades. El motivo de esto es que se presupone que hay algún tipo de atención sobrenatural centrada en la Duodécima, y de esta manera se les ofrecerá menos información al respecto.

Al no tener que asistir a la reunión del Pelotón de Infantería (por no pertenecer a ella) Rastrojo va directamente al funeral de Desastre.

Viendo que es requerido por Grito, se une al resto del grupo de infantería y escucha las órdenes.

Percibe el ajetreo que se traen los Hostigadores, descubriendo el motivo; Acude pues al improvisado funeral.

Asiste al sepelio, antes de irse a dormir.

- Ballestero y Guepardo consiguen dormir bien por primera vez en mucho tiempo.

Durante la noche, Caracabra acude al funeral de Desastre.

Frontera casi monta un espectáculo con la llorera que le da durante el entierro de Desastre.

Después trasnochará, quedándose junto a la tumba cuando el resto ya se hayan ido a dormir.

Al amanecer se lava, se asea, desayuna, y pregunta por órdenes a Ponzoña.

Tras despertar, va a las letrinas, y luego entrega todos los silbatos que pudo hacer el día anterior a Grito. Se guarda uno de ellos para él en su mochila.

Queda de parte del Dire decir cuántos consiguió hacer, teniendo en cuenta que le llevó todo el día y que cortó las cañas en trozos pequeños.

Capitán realizará sus abluciones matutinas y se preparará para despedir al grupo que se marcha a Cántaro Roto.