Partida Rol por web

La Compañía Negra: El Dios del Dolor.

Campamento Principal: Zona de los seguidores de campamento.

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16/01/2013, 20:05
Derviche.

Derviche miró sorprendida a Odio, no se esperaba nada de él, más que indiferencia y rechazo. Abrió los ojos más que de costumbre y se quedó pensando unos momentos sin saber qué contestarle. Se encogió de hombros y asintió con la cabeza.

-No tengo ni idea, pero... podemos intentar...

Se acercó más al guerrero y miró hacía arriba para intentar ver en los ojos del hiena si hablaba en serió o le iba a estrangular al tocarlo. Parecía que era sincero en su petición.

Derviche bajó la mirada hacia el brazo del guerrero e intento cogerlo con delicadeza, no lo consiguió y acabo apretando con fuerza. No quiso alargar más el momento y con un brusco movimiento intentó poner los huesos del guerrero en su sitio.

Se quedó inmóvil esperando una respuesta de Odio para saber si ya estaba todo colocado en su sitio. Se acordó de algo parecido que le pasó a su madre y el curandero del pueblo le puso unos trozos de madera atados con un trapo. No parecía difícil, pero ella sabía cómo romper huesos no como colocarlos en su sitio.

Se giró y busco con la mirada a la bailarina.

-¿Sabes cómo atar dos palos con un trapo alrededor de su mano? Era obvio que la niña esa no entró en la compañía por sus dotes como guerrera, para algo útil tenia que servir. ¿Alguien sabe cómo hacerlo?

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16/01/2013, 20:12
Plumilla.
Sólo para el director
- Tiradas (1)
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16/01/2013, 20:15
Plumilla.

- Puedo intentarlo-dijo Plumilla con suavidad, dando la espalda con cierta indignación a Pulga y a Keropis. Se acercó con cierta cautela al hiena, como si temiera que le fuera a morder. Con las pequeñas y finas manos tomó el poderoso antebrazo de Odio, tenso bajo la piel.-¿duele mucho?-inquirió moviéndole la mano.

Se arrepintió de haberlo hecho y le soltó con rapidez retrocediendo algunos pasos.

-Necesitaré ... cuatro palos no más largos que su antebrazo-dijo la muchacha a Derviche. Giró sobre sí misma buscando algo de tela que pudiera apañar, sin encontrar nada que estuviera mínimamente decente para usar como vendaje para inmovilizarle. Tomó uno de los largos trozos de tela que pendían de su cadera, haciendo así las veces de faldón del vestido de bailarina y lo arrancó haciendo un ruidito ahogado por el esfuerzo, luego lo estiró delante de su cara examinándolo satisfecha.

Vale, con esto sirve.

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16/01/2013, 20:56
Manta.

Yo preferiría que hiciéramos una competición de beber jarras de grog dice Pulga alegremente—. Y todavía estamos a tiempo de cambiar. ¿Que os parece?

—Me parece que es una buena idea —contesta Manta, dejando una mano pesadamente sobre el hombre de Pulga—, pero es más sensato dejar las competiciones por hoy.

El k’hlata contempla con sorpresa el comportamiento de Derviche con Odio. Está bien que ver que tiene algo más que furia y hostilidad dentro. El guerrero no solo se ha hecho daño, sino que parece que algo se ha roto o torcido dentro de su mano. Pulga, deberías cuidarte de ese hombre, y de Derviche, pero sobre todo deberías cuidarte de ti mismo. Acabarás muerto o malherido, y será por culpa de tu insensatez.

—Te aconsejo que te disculpes —susurra en su lugar a su compañero, inclinando la cabeza hasta tenerla la boca al lado de su oído—, humildemente, sin decir nada innecesario. O al menos no digas nada más.

Plumilla está ayudando a Derviche a inmovilizar el brazo de Odio. Necesita cuatro varillas, rectos y no demasiado largos. Manta suelta a Pulga y se agacha a recoger los palos con los que entrenaba la fanática un momento atrás, antes de que se desarrollara la absurda escena. Los sujeta entre las manos y los parte por la mitad.

—Aquí tienes —dice, entregando los cuatro palos a Plumilla.

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17/01/2013, 00:10
La Compañía Negra.

PLUMILLA:

- Mucho te temes que tus atenciones no están siendo efectivas. En este momento no dispones de material médico.

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17/01/2013, 06:02
[RIP] Pulga.

Por lo que parecía Odio se había hecho daño en el pulso con Derviche.

Lo que me faltaba, ahora me echarán a mi la culpa.

Y por primera vez desde que estaban allí dentro vio a Derviche preocuparse por otra persona, aquello si que era nuevo. Enseguida Plumilla acudió a ayudar y cuando Pulga la vió arrancarse un trozo de tela de su cadera deseó que todos estuvieran heridos para que la muchacha siguiera necesitando más vendas. La voz de Manta le hizo volver de nuevo a la realidad y lo sacó de sus pensamientos. Como se esperaba él si que estaba dispuesto a tomarse una buena jarra de grog. Manta apoyó una de sus manos en su hombro y susurró algo a su oído. Pulga se lo quedó mirando unos instantes.

-No creo que sirva de mucho, pero seguiré tu consejo.

Se acercó al grupito pero se mantuvo a unos pasos de distancia por si las moscas.

-Odio, siento lo que te ha pasado, no era mi intención que resultaras herido, es que Derviche es más fuerte de lo que parece. Bien con eso valdrá no digas nada más. Plumilla ¿Necesitas que te ayude con algo?

Miró hacia Manta y encogió los hombros indicándole que al menos lo había intentado.

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17/01/2013, 08:53
Keropis.

El ermitaño no podía creer lo que veía, ahora Pulga no sabía ni disculparse.

Negó con la cabeza tranquilamente y se giró para contemplar la escena, si iban a soltarle un par de golpes no quería perdérselo, por nada en el mundo querría perdérselo.

Así que, silencioso como siempre, Keropis se quedó esperando para ver si había algo de pelea entre algunos hoy. O al menos ver como ese individuo con la boca más grande que el torso recibía su merecido por parte de alguien.

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17/01/2013, 15:51
Odio.

Derviche no era para nada delicada y así lo demostró cuando intentó colocarle bien el brazo al hiena. Al hacerlo, le hizo más daño que otra cosa y Odio soltó un gruñido, mezcla de protesta y de dolor. Sin embargo, lo había hecho con la mejor de las intenciones, por lo que no había nada malo que reprochar, al contrario, la guerrera quizás se ganase la simpatía de Odio, si es que alguien podía. Ante su incapacidad, ésta llamó a Plumilla.. a la cuál deberían haber acudido, sin duda, en primera instancia, puesto que realmente tenía conocimientos para solucionar los problemas en el brazo del hiena. Necesitaba palos y algo parecido a una venda, necesidades que se vieron rápidamente cubiertas con la ayuda de Manta y la propia Plumilla.

Los ojos de Odio se clavaron en los de la joven Plumilla, que lo miraba con cierto temor. Intentó que estos no reflejaran su habitual carácter mientras ella le inspeccionaba el brazo. El contacto de la suave piel de Plumilla hizo que el vello se le erizase al hiena. sin ni siquiera quererlo. Fue entonces cuando Pulga volvió a acercarse, dispuesto a seguir con toda aquella escena y probando fortuna, parecía que realmente su charlatanería no tenía fin..  

Odio no se digno a mirarlo, pues la sangre comenzaba a hervirle de nuevo... y lo único en que pensaba en cumplir, en aquél mismo momento, la amenaza lanzada segundos atrás. Sus palabras salieron escupidas con parsimonia.. y arrastrando rencor en cada sílaba.

- Tú nunca piensas, aléjate de mi de una vez - espetó 

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17/01/2013, 20:25
Plumilla.

-Gracias Manta -Plumilla sonrió con dulzura y, tomando los palos se acercó de nuevo a Odio, sujetando los materiales con una mano. Con la otra tomó de nuevo su antebrazo e intentó poner ella sola los palos... pero se le escurrían.

-Necesito alguien que los aguante mientras paso la tela para inmovilizarlo-dijo en voz alta mirando a su alrededor pero con toda la intencionalidad dirigida a Pulga, para que le ayudara, ya que se había prestado a modo de vergonzosa disculpa, como los niños cuando no quieren decir perdón directamente y empiezan a decir cosas que vienen a significar eso mismo pero mucho más enrevesado.

-Odio...-Plumilla se puso de puntillas y le puso un dedo en los labios, así seguro que , aunque le mordiera el dedo y se lo arrancara le escucharía (aunque no tardó en quitarle el dedo de ahí por si acaso)- no te puedes sujetar todas las varillas, necesito a alguien que pueda usar las dos manos-procuró sonar razonable- Pulga puede sujetarlas -bueno, cualquier otro y seguramente ese otro correría menos riesgo que el muchacho.

Resopló con algo de resignación pero la mano que había tomado el antebrazo del hiena no se había movido de ahí, como asegurándose de que no haría ningún movimiento brusco.

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18/01/2013, 05:55
[RIP] Pulga.

Estaba claro que Odio no estaba dispuesto a dejar pasar el asunto y que su presencia le resultaba molesta, a él y a la mayoría. Pulga ya estaba acostumbrado al desprecio de la gente, nunca había tenido una verdadera familia y allí no iba a ser distinto. La mayoría de guerreros estaban llenos de ira y rabia, quizá eso les hacía útiles en las batallas, pero fuera de ellas las cosas eran distintas.
Plumilla seguía intentando atenderlo y le pidió ayuda.

-Lo siento Plumilla, ya has oído a Odio, lo mejor será que me aleje. Que te ayude Derviche, que fue ella la que le hizo eso y no yo.

Se dio media vuelta y se alejó unos pasos.

-Al menos lo he intentado, pero estaba claro que no iba a salir bien. Le dijo a Manta encogiéndose de hombros antes de que este pudiera reprocharle nada. Será mejor que me vaya a dar una vuelta hasta que se calmen los ánimos por aquí.

Pulga sabía que no había nada mejor en esas ocasiones que desaparecer durante un tiempo, hasta que el asunto quedara en el olvido o al menos nadie estuviera a punto de intentar matarlo, en el fondo aquella gente no era muy distinta a los ladrones y asesinos entre los que se había movido casi toda la vida, incluso era probable que si habían terminado allí muchos de ellos lo fueran.