No te preocupes Edgrin.
Mientras doy una palmada en el hombro del mediano me dirijo a Kimi.
Tú pareces avispada, muchacha. ¿Te fijaste en alguna cosa de la guarida de los kobold que nos pueda ser de utilidad? ¿Sabéis para qué os querían?
Esto último lo digo mirando también a Savram. A lo mejor sabe la lengua de los dragones al ser hijo de quien es...
-Si hay que elegir, yo tambien prefiero matar kobolds.- secunda Geon, mientras trata de ver si los nichos son de enanos decentes o de herejes.
Se aproxima al primero y lo toca con el hacha, como si temiera que fuese a levantarse.
Defensa total, master.
Rumuk se aparta de los niños y llama a sus compañeros, para hablar sin ser oídos: ¿Qué hacemos? ¿Llevaremos toda esta chiquillería con nosotros?
-No parece muy sensato, la verdad; pero la cría está por la labor de venir a matar kobolds... Pobrecita, comprendo perfectamente su pasión.- parece congraciarse el enano, por primera vez con alguno de los criajos.
Su tono hosco y a volumen normal no contribuye demasiado a una conversación íntima.
Ni tenemos tiempo de llevarlos a un lugar seguro, ni podemos prescindir de nadie. Recordad lo que puede estar acechando en la superficie. Habrá que llevarlos con nosotros.
A no ser que encontremos un buen sitio para esconderlos...
- Cargar con ellos es la única opción factible. dice Tekdur sin disimular un ápice lo que implica el verbo "cargar"
- Vamos por los Kobolds, añade comenzando a caminar.
Pues mira, algo si he visto, la mayoría de esos monstruos tienen un veneno paralizante que echan en sus cadenas picudas. Los llaman espolones voladore. Luego estaba el rey que era rojo y que no se separa de esa corona ensangrentada suya. Todos le hablan con respeto, menos una de color verde que no hace más que gritarle.
Algunos guardias montan unas asquerosas ranas blancas llenas de babas. El chamán es un bicho blanco que da saltos como un loco. Otro se fue hace poco con varios, parecía saber lanzar magia.
¿Te parece bastante?
Luego se gira enfadada hacia Finn y le grita.
¡Escondete tú orejudo! No pienso abandonar a mis amigos.
Kimi. ¿No nos llevarán con el muerto encadenado ? Que miedo... susurra el niño, que aun tiene la cara de haber llorado.
Ji, ji. El ennnannno se queja mucho. ¿Cuando vammmos a ccccassa?
Teneis dos posibilidades, al norte por donde han venido ellos o hacia el este por la puerta.
Parece mucha gente y no estamos en nuestro mejor momento de forma...
Soker mira a sus compañeros.
Si necesitan a todos los chiquillos quizá podamos ir a la sala de las camas y descansar allí un rato. Necesitaremos estar en plena forma contra tanta gente...
La idea generalizada es ir al norte.
Sé que mi idea no va a ser aceptada pero por mí que no quede...
Yo soy partidario de un descansito...
¿Descansar? Si estais tan mal... supongo que podríamos... pero no me parece ni el mejor omento ni el mejor lugar. Dice Finn, contrariado.
Hombre, más que nada, porque parece que nos estamos metiendo en la boca del lobo y, aunque me quedan 8 pg, sólo tengo conjuros de nivel 0 para curar. Pero, vamos, lo que diga la mayoría, que ahora mismo no sé en qué estado están.
Amigos, yo estoy algo malherido y los niños están cansados. Se que el tiempo apremia pero en estas condiciones solo conseguiremos que los kobolds tengan más material para sus sacrificios.
Pues yo estoy perfectamente. ¡Tenemos que ir a rescatar a los chicos cuanto antes!
- Descansemos pues, no descansar solo hará que aumente el número de sus prisioneros.
Creo que la sala de los catres es la mejor opción. Podemos hacer guardia en la puerta norte y la del sur dejarla cerrada.
Creo que somos mayoría de descansadores.
Mira cuanta comida junta. Ahora no podeis escapar.
La niña lobo se os acerca a cuatro patas y trata de clavar sus garras a Geon, sin mucha suerte de su parte.