Partida Rol por web

Todo aclarado, más o menos, y con los estómagos llenos, fuimos al punto acordado, una nueva aventura de los cinco intentando averigüar un poco más de lo que estaba sucediendo. Para esta ocasión utilizaría la bicicleta, así no me tendría que preocupar de la gasolina, aunque apenas me acordase de lo costoso que era ir pedaleando.

Imité a Joana, dejé la mía al lado de la suya, el terreno mas angosto no ayudaba en nada pasar por ahí. Andar era mejor opción. Cogí una de las palas, una forma de entender que yo sería uno de los que se ocuparían de hacer un agujero. Eso sí, pese a no conocer la existencia de túneles subterráneos, la idea la tuve en mente bien guardada para más adelante.

Por el camino hasta el punto idóneo observaba a mi alrededor los posibles cambios desde ayer, fijándome en el terreno o cualquier cosa que me llamase la atención. Luego me dirigí a Joana. - Vale. Tú di donde y los hombres nos encargamos del trabajo duro. - Lo dije completamente en serio. Miré después a Brandon con la idea de que él no se escaparía. Si yo cavaba, él también.

 Dejar la carretera atrás suponía pasar por montículos, rodear arbustos, y numerosos árboles. Peladear por allí era imposible. Así que como Joana, todos bajasteis y caminasteis con la bici sujeta del manillar.

Como la bioquímica había propuesto se priorizó investigar en la zona centro de la cúpula por lo que lo de cavar quedaría para después. Caminar por allí no era fácil, pero no había prisa y el principio de precaución debía de primar.

Tras un rato de caminata visteis algo grande y peludo en el suelo.

Me paré en seco al ver esa cosa grande y peluda un poco más allá.

- Chicos, cuidado...- susurré para no alterar a lo que fuese esa ¿criatura?.- Creo que no deberíamos acercarnos todos, por si es peligroso. ¿Alguno distingue qué es?-. Sentía una gran curiosidad, pero no quería poner a nadie en peligro.

Seguí caminando cargando con la pala, lo que fue una brillante idea dejó de serlo y el camino cada vez fue siendo más y más molesto con piedras que no dejaban de incordiar, ramas, raices y a saber qué más. Me iba fijando cada paso que daba, por supuesto no podía ir más rápido, ya solo faltaba tropezarme aunque en un par de ocasiones me faltó poco.

Sin darme cuenta, fui acortando distancia con algo que no pude fijarme bien qué era. Solamente pude ver que su tamaño no era tontería y que tenía su cuerpo recubierto de pelo. Llegué a creer en primer lugar de que fuese un animal, después lo dudé lo que fue aún peor. - ¿Qué cojones es eso? - Pregunté nervioso mientras la pala cambiaba de función y posición. De ser una pesada herramineta a un arma.

Tiene pelo....¿es un animal? ¿Tú sabes lo que puede ser Joana? - En el fondo no estaba muy seguro de querer saber lo que era, sin embargo, quería acercarme, ver que era, tal vez fuese una broma o la vista me la jugó.

 Aquello peludo lo idenficáis avanzando un poquito más, pero pronto os detenéis al sentir que aquí algo no anda bien. Se trata de un oso y parece estar muerto. No hay signos de descomposición, al menos de está avanzada.

Es Joana la que unos veinte metros más adelante del oso ve algo extraño más extraño aún que casi pasa desapercibido entre los árboles. Es como un pilar. Pero es algo que no parece pegar nada con el entorno. Un pilar negro como la oxidiana, de forma cilíndrica y pulida. De unos cincuenta centímetros de ancho y diez metros de alto.

De que se trata, nadie tiene ni idea. Pero hay más animales muertos por la zona, no sólo el oso. Pájaros, ardillas, un perro...

Cuando distingo que se trata de un oso, el corazón me da un vuelco. Algo se ha cargado a un oso, no es para tomárselo a broma. Y hay más animales muertos...Me pongo tensa. Quizás haya algo venenoso en la zona, temo por mis nuevos amigos... Y entonces veo ese extraño pilar, negro como de obsidiana. Me hace recordar la película 2001 Una Odisea en el espacio, pues parece el monolito de la peli. Tiene que ser el culpable de todo.

- Parece que la masa peluda es un oso muerto, chicos. ¿Pero habéis visto ese extraño pilar que hay más allá? Tiene que ser lo que ha provocado todo esto, y lo que genera el campo de fuerza o barrera que nos está encerrando. Me muero por acercarme, pero...hay muchos animales muertos por aquí, me parece que esa cosa es muy peligrosa. ¿Qué hacemos?

Ya iba preparado para usar la pala como arma letal contra el bicho, en caso de que fuese necesario. Correr en dirección contraria también era una opción válida. Y muy tentadora. Unos pasos más y me detuve en seco, desconcertado. - ¿Un oso? - Pregunté bastante sorprendido, aunque la sorpresa fue mayor al ver su estado, o la posible causa de la muerte. - ¿También..electrocutado? - Costaba de creer. No podía imaginarme qué podía causar eso y en un animal tan grande como el que vimos.

Un segundo después hallé la respuesta, o eso creí. Una especie de figura oscura, parecía decorativo aunque por supuesto lo dudé. - ¿Y eso qué cojones es? - No sabía si acercarme más a verlo, y las palabras de Joana no me ayudaron en nada en armarme de valor. Si eso había dejado frito a un bicho más grande que nosotros...no quise ni pensarlo.

¿Acercarnos? ¿No sería mejor avisar al ayuntamiento y que se encarguen? - Fue lo primero que se me pasó por la cabeza. Y lo sugerí casi convencido. Casi. - ¿Tú crees que eso es lo que ha causado la muerte de algunos animales y creado la burbuja? - Tuve que realizar esa evidente pregunta para poder imaginármelo.

Por mucho que pensase no sabía que hacer, y expuse mi preocupación, que seguramente la del resto sería igual o similar. - No sé si será buena idea, aunque tampoco sé si será mejor dejarlo ahí. Uff, ¿qué hacemos. - No importaba la decisión, ambas no me hacían ni pizca de gracia.

Rose se acercó a Adrien y lo tomó del brazo, su cuerpo temblaba ligeramente del miedo.

Rachel parecía un poco más resuelta, como vosotros no dio un paso más al frente, pero si primero a la derecha y luego a la izquierda.

- Hay más como ese, tanto a derecha como a izquierda, es como... si trataran de formar una pequeña barrera aquí en el centro, pero ¿Por qué?

 - Vamos a ver... el veterinario dijo descarga eléctrica... - Se llevó la mano a la barbilla pensativo – Recuerdo que en el cobertizo cuando llovía, el interruptor nos daba calambre, al final dejamos un guante de plástico al lado. Nos lo poníamos y se acabó el problema...

- Podemos ver si en el ayuntamiento nos pueden conseguir unos trajes de neopreno de la tienda de deportes, si no me equivoco son de goma que tampoco conduce la electricidad... O una mala puedo conseguir un montón de sacos de plástico vacíos. Son en los que vienen los fosfatos para abonar el campo.

Miré a mi alrededor, buscando esos otros monolitos que decía Rachel. Su teoría tenía sentido, quizás formaban otra especie de barrera más pequeña y electrocutasen a quien intentase cruzarla. Luego habló Brandon, también con sensatez.

- Buena idea, sí que podríamos intentar lo del neopreno, aunque yo probaría antes con un animal envuelto en algún aislante para comprobar que no nos vamos a chamuscar al cruzar. Quizás ahí dentro esté lo que genere ambas barreras, la de Chestersmill y esta otra más pequeña, y podamos desactivarlo si cruzamos. ¿Qué os parece, volvemos al pueblo, conseguimos los trajes aislantes, y algún animal, tipo una gallina o similar, para hacer la prueba? - Tomé aire mientras sopesaba lo siguiente - ¿Y otra cosa, informamos ya a las autoridades?

No supe que pensar de todo aquello, era bastante complicado para mí, sin contar que todo era bastante enigmático y...raro. Mientras observaba los pilares sentí el contacto con Rachel, no hice nada, ya que tampoco sabía que hacer en esos casos, yo también me encontraba nervioso, y reacio a acercarme a esas cosas. - ¿Más? ¿Tendrán algo que ver con la esfera barra lo que sea? ¿Y por qué tres? ¿Y por qué este punto? ¿Qué tiene de especial? ¿Acaso es el punto central del pueblo? ¿Y quién diablos ha colocado esos pilares? Dudo de que hayan salido asín sin más. - Muchas preguntas, demasiadas para mi gusto.

Ya que estamos aquí...podríamos seguir echando un vistazo, no sé, tal vez encontremos más rayadas. - Sinceramente no sabía ni qué pensar de todo aquello, la lógica no servía de mucho, y tampoco era mi fuerte. Eso sí, todos se lucieron a su manera con las ideas.

Buenas ideas chicos, pero antes de irnos podríamos...- Empecé a hablar sin tener ni idea de como continuar pero se me ocurrió algo, no era gran cosa, quizás sirviera no, con tal de probar. - ¿Y si le lanzamos algo? No me refiero a los pilares si no al espacio que hay entre ellos, una piedra tal vez. Si rebota o reacciona de algún modo ya la idea la tendremos.

Sin moverme demasiado por precaución quise fijarme más atentamente en si el suelo alrededor de esos pilares fueron movidos, o quizás marcas de arrastrar o similar. Cualquier cosa que me ayudar a pillar el significado de tanta locura. - ¿Podeís ver bien el suelo? Si está chamuscado o hasta es posible que los hayan arrastrado hasta aquí.- Comenté bastante convencido.

La sugerencia de avisar a las autoridades me parecía cada vez más atractiva, especialmente cuando mis ojos observaban con recelo el estado del oso y del resto de animales. - Yo creo que sí, no sé, ¿pero tendrán equipo para esto? - nada más lanzar aquella pregunta pensé en ello. Decir que tenía dudas era quedarse muy corto.

 Adrien planteó muchas dudas, pero alguna de ellas opinaron los demás que eran buenas preguntas. Además, podíais aprovechar que estabas aquí para hacer esas sencillas comprobaciones, de todos modos en lo que quedaba de tarde ya os iba a resultar imposible volver al pueblo, reunir todo el material y volver de nuevo aquí. Por lo que mejor hacer un estudio sobre el terreno y mañana venir bien preparados para todo.

Tirar una piedra fue fácil, esto lo hizo Brandon, la piedra surcó el aire pasando más allá de la zona de los pilares y... no pasó nada. Esto resultó muy positivo y le daba más puntos a la idea del neopreno.

Luego lo de que si eran tres y demás... con cuidado caminasteis en una de las direcciones para encontrar más pilares, en total habrían varias decenas, entre todos formaban un círculo que digamos no dejaban pasar al interior.

Lo de si era el centro del pueblo sólo había que mirarlo en el mapa. No era exactamente el centro del pueblo, pero si el centro de la cúpula o barrera. Y desde la distancia prudencial tampoco visteis nada quemado, pero si muchos animalillos muertos.

Con respecto a lo de informar a las autoridades, la mayoría se mostró conforma, al menos avisar en el ayuntamiento como os habían comentado, ellos a su ves ya informarían a quien correspondiese.

Brandon comentó - Yo le puedo decir a mi madre de coger una gallina, aunque no se cómo... Ah... quizá con plástico de envolver... dejamos unos agujeritos para que respire... y la espantamos para que vaya hacia la zona de pilares....

El descubrimiento de la barrera de pilares me tenía emocionada. Tal vez hubiésemos encontrado la manera de deshacernos de lo que fuera que creaba la cúpula. Tracé el mapa la ubicación de los pilares. Por hoy no podíamos hacer más.

- Pues creo que hasta mañana no podemos hacer mucho más...ahora hasta la idea de cavar en el lecho del riachuelo me parece irrelevante, ¿no os parece? Propongo volver a casa de Rose y planificar el día de mañana. Yo tengo que trabajar por la mañana, ya me comprometí. Pero no quiero perderme esto...- Me mordí el labio inferior. Odiaba este tipo de situaciones en las que no podía llegar a todo.

Me quedé pensativo, intentando comprender todo eso sin llegar a conseguirlo. De hecho, tuve la sensación de que la distancia a las respuestas creció sin casi darme cuenta de ello. Las dudas que puse en bandeja apenas no ayudaron, al menos no mucho, pero si a descartar opciones.

Uff, no sé que pensar de esto si os soy sincero. - Comenté desconcertado, bastante desconcertado. Lo que sí estuve totalmente de acuerdo, fue en la sugerencia de Joana, la de regresar a casa de Rose. - Sí, me parece bien, a ver si con lo que hemos averiguado, podemos montar algo de este rompecabezas. - Literal, rompecabezas literal. Encogí los hombros sin querer darle más “salsa” al tema. - Ya mañana podremos informar al ayuntamiento, y quien sabe, puede que hasta los otros grupos hubiesen averiguado. - Con poco que sirviese, era mejor que nada, de eso seguro.

Yo no tengo nada que hacer, puedo acercarme al ayuntamiento por lamañana. - Comenté a la bioquímica. Así ella podría continuar con su trabajo. Después miré la pala que aún seguía llevando entre las manos. - Tienes razón, no creo que cavar sea lo más importante. - Luego caí en la cuenta de un detalle que fue una idea planteada bastante interesante y así que lo recordé al resto. - También allí puedo preguntarles por si hay túneles.

No se me ocurre qué más hacer aquí. - Eché un último vistazo al terreno y luego me giré para dirgirme al grupo. - Entonces, ¿nos vamos o alguien tiene otra idea?

El grupo decidió volver a casa de Rose para planear el día siguiente, mientras al sol ya le faltaba poco para caer sobre el horizonte.

Intervino Rose tratando de coordinar un poco las cosas pendientes – No te preocupes Joana, esperaremos a la tarde para volver a los pilares esos. Tú eres la científica de nuestro grupo ¿Qué hacíamos sin ti? - Rió suavemente - Creo que como dice Adrien, los demás podemos ir a ayuntamiento y además tratar de conseguir esos neoprenos. Además de cinta americana o plástico de envolver y todo lo que nos puede hacer falta. Cuando venga Brandon también que nos traiga el animalito ¿Estamos todos de acuerdo?

Brandon comentó que lo intentaría y que supuestamente volvería como hoy, después de comer. Rachel estaba libre y podía venir ya por la mañana, así como ya lo habían comentado Rose y Adrien. Joane recordó que tenía algo pendiente a la hora de comer.

- ¿Entonces disolvemos el grupo hasta mañana? - Preguntó la camarera

Sopesé lo comentado por los chicos.

- Por mí vale, volvamos al pueblo y ya cada uno a su casa. Hoy hemos hecho un gran avance. Entonces, mañana vais al ayuntamiento por la mañana, les contáis lo de los pilares y los animales muertos, conseguís material protector, y nos reunimos después de comer. Si queréis, quedamos en el mismo ayuntamiento, para que nos acompañen las autoridades competentes. ¿Os parece? Y...si no os importa, sigo llevando yo el mapa...me da miedo que si lo enseñáis en el ayuntamiento, no quieran esperar a que estemos todos para volver aquí a investigar...- Me sabía mal ser desconfiada, pero más vale prevenir, dice el refrán, y no me fiaba de las autoridades. En las películas siempre pasan de los jóvenes. 

Me llevé una mano al mentón y mientras lo tocaba organicé mi caótica cabeza, con tantas cosas era sencillo pasar las cosas por alto. - ¿Ya terminado por aquí? Por hoy quiero decir. - Quizás pregunté lo obvio, pero necesitaba confirmarlo. Era hasta posible que alguien de los presentes se le ocurriese alguna idea en el último momento y ya que estábamos allí.

No me quitaba de encima la sensación de que por muchas cosas que averiguábamos sobre todo esto, más dudas aparecían. Como quitar la parte quemada de una tostada, y sin embargo daba igual rascar, ya que siempre salía parte quemada. Seguramente mañana sería otro día, y más descubrimientos vendrían.

Mi padre es madero. - Lo comenté como si tal cosa, tampoco es que fuese muy importante. - Puedo preguntarle a ver que piensa de todo eso. Aunque fijo que no nos dejará acercarnos a esos pilares. - Encogí mis hombros. Era otra opción ante tantas que teníamos.

Ante las sugerencias de ambas chicas no tuve nada que aportar. - De acuerdo entonces. - Y es cuando el recelo de la bioquímica me hizo caer en la cuenta de algo más. - Oye Joana, con todo lo que hemos visto, dudo de que esa cosa sea natural, ¿crees que alguien lo habrá puesto? - Nunca me consideré avispado, pero era una descabellada idea. Una idea que podría tener sentido. Podría. 

Lo peor que puede pasar...es que nos quieran mantener al margen, y ni eso. - Lo dije bastante seguro ante el "miedo" de Joana. Después añadí lo siguiente. - Teniendo en cuenta que la sugerencia del grupo de investigación le vino como anillo al dedo al alcalde. - Suspiré cansado y froté los ojos con los dedos antes de callarme de nuevo.

- Me parece bien lo que dice Joana – Comentó Brandon -  A mi... me gustaría echar una mano mañana por la mañana a mi madre con los animales para ayudarla. Pero si Adrien o Rose o Rachel pueden, que lo vayan comentando en el ayuntamiento y así puedan conseguir el material.

Por lo demás sí que parecía que aquí se había terminado así que emprendisteis el regreso al pueblo.

Allí en la calle, delante de la casa de Rose, Raquel se apuntó a lo de quedar por la mañana, a las diez en casa de Rose. La pelirroja le preguntó a su ex compañero de trabajo.

– Vale, entonces por la tarde después de comer en el ayuntamiento ¿Y tú Adrien? ¿Te vienes mañana a las diez o prefieres venir ya por la tarde?