Partida Rol por web

-Esta bien...como quieran ustedes...

Digo no muy convencido mientras adelanto con mis pasos al grupo y me acerca a la extraña cabaña.

Estoy no me agrada en absoluto...no señor...

Confiare en usted mister Rowlandson respondo un poco a regañadientes mientras entro en la vivienda. Al menos por el momento, y mientras la vida de mi hermano siga pendiendo de un hilo. Pero de continuar todo de esta forma, creo que tendré que realizar una visita a las autoridades competentes una vez de vuelta en Boston.

Doy un pisotón en dirección opuesta, desenfundando mi revólver y balanceando mi dedo sobre el gatillo, en oir el disparo lo primero en lo que he pensado ha sido en Gordon, y mi primera reacción ir en su busca pero parecen convencidos en entrar a la casa de Bartley, aunque Charlie, como yo, no sabe qué sacaremos en claro de entrar ahí, pero a regañadientes les sigo mascullando

Maldita sea, ¿¿qué conseguiremos entrando aquí??

¿¿Y si han pillado a Gordon??

¿¿A qué rayos vamos a esperar??

Todos entráis en la cabaña, algunos a regañadientes, pero sin demora. El interior es realmente una pocilga. Todo está sucio y destartalado. Los muebles se caen a pedazos, llenos de carcoma, la basura se encuentra apilada hasta en los lugares más inverosímiles la iluminación es harto patética...

Sólo hay una puerta de entrada, que Bartley entorna en cuanto entráis, sin llegar a cerrarla del todo. Él se queda afuera, aguardando.

Hay um pequeño ventanuco en la parte frontal, a través del cual veis a Bartley asomar la cabeza y deciros que todo va a ir bien, que en seguida lo soluciona él todo.

-Es que vienen p'hablame del amo y señó del viento, que nu sé quién es, pero tolos días pasan por aquí a dicime algo. Son mu feos, pero nunca me hacen na.

Al instante retira la cabeza del ventanuco, lo deja abierto, y se gira. Se siente un sonido sibilante aproximándose. Parece que alguien ha descendido por la colina, en dirección a Hodge.

-Mu buenas, bichos- dice Bartley, con alegría- Os taba esperano.

-Essssss una emerrrgencia- escucháis decir. Parece el sonido de una abeja cuando habla, alargando las eses- Alguien ha osssssado interrrrrrumpirrrr la cerrrrrremonia. Y essssse ssssujeto sssse ha esssscapado. ¿Ha venido por aquí?

-No, nu ha venío nadie- escucháis a Bartley contestar. Los dos hablan lo suficientemente alto como para que se les oiga desde el interior sin mayores problemas. Sin embargo, de pronto, el sujeto desconocido baja el tono, y sólo escucháis los monosílabos de Hodge, y poco más.

-No, que no, que no ha vinío nadie- protesta- No, no sé quién es. ¿Cómo voy saberlo? Si toy tol día aquí....

Ambos siguen hablando en el exterior.

Me agacho y lentamente me aproximo a la puerta entreabierta con la mano derecha metída en el bolsillo. - Veamos a tus visitas Bartley. Si han interrumpido una ceremonia deben ser de algún tipo de secta ¿Sería eso lo que investigaba Mallard? Parece que se metió con la gente equivocada...Han bajado el tono ¿Que estarán diciendo?- Asomo discretamente por un instante uno de mis ojos por la rendija de la puerta para ocultarme rápidamente despues a un lado. Solo un vistazo rápido, lo justo para comprobar si he visto a alguno de ellos en el pueblo, si llevan túnicas con caperuzas o si van con armas a la vista. Luego apoyo la espalda en la pared junto a la puerta tratando de escuchar el resto de su conversación.

Ves unas criaturas extrañas. Parecen insectos grandes, como abejas, solo que del tamaño de un ser humano. Son imponentes, jamás habías  visto cosa semejante. Son 2, y están interrogando a Bartley.

Abro los ojos como platos y me quedo boquiabierto.

Curioso acento...

Al igual que mis compañeros permanezco en silencio escuchando cada palabra de la conversación esperando descifrar algo de aquellas palabras. Pero anda, todo era cada vez mas confuso y alejado de la realidad.

¿Ceremonia?¿donde nos hemos metido?¿que estaba investigando mi padre?

Qué extraño, ese deje al hablar no se parece en nada a los que se usan en la actualidad en las zonas circundantes a Boston. ¿Sera acaso vestigios de algún antiguo dialecto usado por los oriundos de este pueblo? Tal vez deba de volver a investigar una vez encuentre a mi hermano.

Pese a que en principio no era mi intención, el extraño acento despierta mi curiosidad, de forma que agudizo el oído todo lo que pueda para oír el resto de conversación, aunque más interesado en como hablan que en el contenido real de la conversación.

Me deslizo junto a Bartley, moviendome del escondrijo tratando de colocarme lo más cercano a la pared posible, mis compañeros me miran alarmados.... ése acento... nadie que conozca ni haya oido tiene un acento semejante, qué demonios está pasando.

Seguramente estén hablando de Gordon, al menos ha escapado, aunque lo van a buscar toda la noche, y por lo visto las hogueras sí han resultado ser un ritual, por suerte ha sido interrumpido, y si Gordon lo ha interrumpido con ese disparo, es que se trataba de algo gordo.

Solo espero... que ahora estemos seguros....

-SSsssí, ya tenemos ofrenda a nuesssstro amo y señor. ESsssta noche lo traeremosssss a la vida otra vez- dice el sujeto extraño, lo escuchas perfectamente- Essssta noche ssserá la gran noche. La humanidad ssssserá aniquilada. La sssssacerdotisssa ya lo tiene todo preparado. Hassssss de assssisssstir.

-¿La humanidá condená?- Hodge parece confuso- ¿Cómo que condená? ¿Son toos tan malos? Yo soy bueno, no quiero que me condenen. ¿Qué vais a hacer? No entiendo na.

-Eressss demassssiado esssstupido como para comprender nada, ya nosssss lo dijo la ssssacerdotisssa. Pero acudirássss igual, o ya sssabessss lo que lessss esssspera a lossss que nosss desssafían- dijo el otro sujeto, con el mismo acento. Eran dos.

-¿Pero acudir anonde? ¿Qué quieres que haga? ¡Si yo no sé hacer nada!- Bartley parecía algo asustado. No entendía una palabra de lo que decía el sujeto...

Pero...¿que? ¿Era cierto todo lo que sus oídos estaban oyendo?

Asustado de lo que oigo me pego mas y mas a la pared.

-Padre...digo en casi un susurro ¿donde te metiste?

Miro a mis compañeros para ver su reacción y así comprobar si han escuchado lo mismo que yo.
Mi cara de sorpresa es lo suficientemente expresiva como para que todo aquel que la viese se diera cuenta de que lo que había visto o escuchado me había asustado o escandalizado en demasía.

Lanzo una mirada asombro al escuchar las palabras de mi sobrino, que rápidamente se transforma en una mirada de profunda preocupación al darme cuenta del alcance de sus palabras.

¿Qué sucede Charlie? ¿Por qué te preguntas donde se ha metido Charles? ¿Qué es lo que ese pueblerino esta comentando en el exterior con esos desconocidos?

-Tio...

Pero mis palabras se detienen en mu boca incapaces de salir.

¿Pero que pensara de mi?¿ Creerá que estoy loco por creerme eso?

-Veras...con la mirada intento buscar a mis otros acompañante buscando complicidad para ver si al menos ellos me creen en el caso de que mi tío no lo haga. Esos tipos dicen que van a hacer una ofrende para devolver la vida a...su señor...y dice algo relativo a acabar con la humanidad que no entiendo muy bien. Hodge por lo que esta hablando con ellos ya sabia algo de todo esto...

¿Ofrenda? ¿Estamos hablando de un sacrificio humano a un dios de la antigüedad? ¡Imposible, ese tipo de prácticas no se llevan a cabo en toda América que las culturas precolombinas desparecieron! ¡Y apenas hay constancia de ellas en el territorio de los Estados Unidos!

¿Estás seguro de que es eso lo que has oído sobrino? ¿Total y completamente seguro de que es eso lo que has oído? Lanzo una mirada angustiada tanto a mister Rowlandson como a mister Jason esperando, o más bien deseando, que uno de los dos dijese que era un malentendido de mi querido sobrino. Ya que si sus palabras eran ciertas, la vida de mi hermano podría correr serio peligro.

Maldita sea, el incontrolable Charlie y el escéptico Mycroft nos estaban poniendo a los cuatro en peligro, justo a unos metros de nosotros habían unos tipos que hablaban de sacrificios, seguramente estos tipos son los que han hecho un cambio tan drástico en la manera de ser de Yokelville y en sus creencias religiosas, debe ser por eso que el párroco del pueblo no está enterado.... vaya diácono, le toca jubilarse.

En cualquiera de los casos, si nos estábamos ocultando y por lo que habia dicho Bartley, estos tipos eran muy peligrosos, y Charlie lo confirmaba, por lo que no era momento de ponerse a cuchichear justo ahora como marujonas, solo faltaba que Mycroft saliera y les invitara a tomar un té para poder corroborar las palabras de Charlie

Me llevo el dedo índice frente a mis labios, sin chistar, en un intento de silenciar a las dos colegialas.

Me parece mentira que hasta ahora no se hayan dado cuenta de que Charlie no estaba ya en el pueblo, sobretodo tras ver el coche y que aún así todo el pueblo niegue haberle visto.