Partida Rol por web

 - ¡Drussilla, no!. - Pero era demasiado tarde, los hombres le obedecieron, disparando las flechas. Esperaba que Marcus pudiera arreglar este desastre o todo iría a peor. Me apresuré a correr a apoyar a Marcus a proteger al señor, esperando que no hiciese falta y que pudiéramos retirarnos sin llegar a luchar.

El piedrazo dejó muy adolorida a Drussilla luego de unos segundos intentó volver a tensar y le costó, pero debía hacerlo. - Preparen, tensen!!!

Que el gesto se repita no es bueno. Las piedras continúan cayendo. Ciertamente no son pocas… Aunque cientos lanzan, la mayor parte de la multitud se queda atrás vociferando o sin participar. Solo unos pocos cientos del frente son los que atacan a los soldados.

Drusilla es vuelta a ser alcanzada junto con varios de sus hombres, aunque solo en la pierna en su caso. Otras rocas rozan a Marcus y Gaheris, pero los dos caballeros tienen armaduras sólidas y atacarlos con cascotes es lo mismo que tirar pasteles a un castillo. Aparte, el capitán esta junto a lord Swift y cerca de la joven dama, a quienes los pueblerinos sin duda no quieren herir.

No parecen surgir capitanes o lideres todavía entre los campesinos, aunque es cuestión de tiempo que la turba se organice un poco. Es mejor salir cuanto antes. Swift ya casi alcanza al carro, pero Lady Cliffton no se ha movido de donde cayera, mirando a la muchedumbre…

 - Mierda... - Murmuro, mientras cojo a Lady Cliffton y trato de cargar al hombro, para reunirnos con el Lord. Definitivamente, hoy merezco una paga extra, sin la menor duda.

¡Drussila! - ahora que estaban a cierta distancia del tumulto cabreado - ¡Disparo de advertencia! - esperó que captara bien lo que quería, que no disparara a matar, solo a los pies, cubriendo el terreno tratando así de amenazar a la turba, de que la siguiente descarga sería directa a matar.

Un gesto de ira aparece en mi rostro sin poderlo evitar y aun con cierto temor por esas piedras tomo a lady Clifton por el brazo y digo en voz baja.

-Estará contenta por lo que ha hecho- murmuro contra su oído mientras la jalo para atrás y hago un esfuerzo por llevarla hasta el carromato. 

- Disparo de advertencia, no queremos muertos. Suelten!!!!!!! Nuevamente una ronda de flechas salió de sus arcos.

Cuando Gaheris intenta cargar bruscamente a Lady Cliffton, el público se enardece e igual los gritos aumentan en volumen e ira. Ahora no se limitan solo a tirar cosas, sino que muchos empiezan a proveerse de largos bastones sacando palos de los puestos, y de las herramientas usadas en la construcción de algunas de las tiendas, como martillos… 

Ella se resiste al agarron del hombre y escapa ágilmente de sus manos como el agua que se escurre, arrastrándose un par de pasos hacia atrás sobre el suelo, para quedar junto a Tayla, a la cual dice algo por lo bajo.

En ese momento llega la orden a los arqueros de soltar. Pero los hombres no la acatan!!!. Todos observan como la sublevación comienza a tomar un verdadero mal cariz y pasan a la defensiva. Que les den… ellos no van a ponerse contra el pueblo solo porque si, incluso si solo son advertencias...

Swift ya esta abordo de su carro, esperando. Es lo unico rescatable, que se mantenga a salvo de lo que se viene

Aquel bruto había sido de ayuda, pese al susto inicial cuando intento agarrarla. Nada podía sentarle peor a la gente que verles maltratarla en público.

Sonríe suavemente entre las lágrimas, mirándote por lo bajo, mientras sus rizos caen a un lado ocultándole la cara de la plebe enardecida que ataca el escenario.

-Gracias a ti. Gracias por recordarme lo que debo ser. +replica con tono tenso, nervioso, pero victorioso. Habían sido sus palabras después de todo las que le habían inspirado para esto y estaba saliendo de maravillas…

La observo de lado y suspiro mirándola con cierta ira.

-¿Pensáis casaros con un campesino sin cuna y sin educación? Estos hombres son brutos y aunque os rescataran, cosa que dudo, vuestro futuro no cambiaria mucho por estar con ellos, para esos hombres las mujeres son solo objeto de placer y también un desfogue, solo dos días con ellos y moriríais , porque dudo que permitan que solo uno os tenga venid al carruaje conmigo mi lady- digo – esto se convertirá en una masacre antes de tiempo. 

- Gaylor, prepara los caballos, creo que deberemos salir de aquí a las corridas.

Drussilla esprera tensando por si llega a tener que cubrir a sus compañeros. Cárgala al condenado carro y salgan de aqui ya! Grita a Gaheris.

 Me apresuré a hacer lo que me ordenó Drusilla, deseando poder salir de esta con vida. Definitivamente, si llego a saberlo, hoy no me levanto de la cama. De todas maneras, aunque es un hecho de que todos morimos, espero que mi muerte no sea a manos de una turba de campesinos encoñados de una cría...

Lady Clifton no responde a Tayla, ocupada en esquivar el agarre de Gaheris, pero su sonrisa confiada no se ve amilanada por las palabras de la dama… Al contrario, parece ensancharse. Hay algo en su interior ardiendo que va más allá de la ira que le es habitual. Casi como orgullo se diría.

Gaylor gruñe y va por los caballos sin más, haciendo caso a Drusilla. Después de todo son una forma rápida de huir y es lo que la situación requiere ahora.

Por su parte Marcus intenta guiar a los hombres pero está claro que no quieren pelear. Su retirada es cada vez más evidente, dejándolos solos e incluso adelantando el carro. Todo lo cual no hace sino incitar a la plebe a avanzar.

El gentío se apelotona gritando por la liberación de la terca muchachita, buscando apabullar a los soldados con su peso. Estos interponen los escudos, buscando aguantar sin tener que alzar las armas… pero simplemente son muy superados en numero y comienzan a flaquear! Algunos de los rufianes se cuelan entre las lineas, alcanzando el estrado...

¡MALDITOS COBARDES! - les gritó visiblemente cabreado - ¡VOLVED A VUESTROS PUESTOS! ¡AHORA MISMO! - bramó a pleno pulmón mientras avanzaba en pos de su señor preparándose para enfrentar el solo a toda la turba que se acercaba peligrosamente hacía él y Lord maizal, maldita niñata.

El caos desborda la escena y muchos campesinos se cuelan entre las líneas de soldados replegándose en desorden junto  al carro de Lord Swift, o directamente hacia el castillo, sin esperar más.

Al menos, finalmente Gaheris consigue hacerse con la muchacha, pero eso le hace obviamente el blanco de sus rescatadores con predilección. Media docena de rufianes cargan sobre el! Y dado que necesita sus brazos para retener a la Lady, no está en las mejores condiciones de defenderse…

Marcus por su parte se ve seguido por 5 sujetos quienes reconocen a un capitán cuando lo ven y también una buena armadura, en tanto que otros tres van a por Drusilla, quien al estar entre los soldados es menos visible pero sigue siendo una mujer, una sargento y la voz que dio la orden de disparar. Tayla, la menos llamativa, solo recibe la atención de dos campesinos de miradas brillosas… pero eso puede que sea más que suficiente para la muchacha.