Partida Rol por web

Todo pasó tan rápido que a Sybill no le dio tiempo a reaccionar, ni a entender nada hasta que la sangre de su madre la salpicó. Su rostro, sus hombros, su vestido... Quedó en shock durante unos instantes en los que solo miró a su madre con el rostro desfigurado, y sus ojos siguieron el movimiento de su caída hasta el suelo. Inerte. No escuchaba nada más, no sentía nada. 

Hasta que los gritos de su padre repicaron en su cerebro como cien campanas sonando al unísono. 

Reaccionó al instante. 

-¡Métete bajo la mesa! -le ordenó a su padre tomándolo del brazo, para que reaccionar rápido y los instó a meterse bajo la mesa más próxima. 

Vio a la hermana de Naya, Asha, la cual había formado equipo con ella ser alcanzada por la luxina, vio a Liandra, que aunque no la conocía personalmente, pudo sentir el dolor en el corazón de Flit. Y todo el horror, toda la tristeza que se mezclaba con odio, se combinaban con los sentimientos de Sybill, dolor por la pérdida de su madre, cuya visión seguía viendo... Una mujer fuerte y con poderío echada en el suelo cubierta de sangre, como si no fuese nada. Ni nadie. Y enfado por lo que estaban haciendo y consiguiendo, convirtiendo una preciosa velada en la que estudiantes y padres se reunían, en las que podían mostrar con orgullo sus progresos... Todo arruinado. 

Las manos de Sybill se volvieran rojas como la sangre, igual que sus ojos. 

No dudó en dirigir chorros de luxina a aquellos que protegían las puertas con tanto ahínco, no iba a dejar a ninguno de ellos en pie, su alma reclamaba venganza... Y esta vez no habría bondad ni empatía ninguna, solo vendetta. Por la muerte de su madre, de Liandra, por el ataque a Asha. Por todo. 

La furia cegó a Sybill que vio cómo su luxina se inflamaba al entrar en contacto con el fuego cercano y explotaba junto a dos de los que custodiaban las puertas haciéndoles caer de espaldas con graves quemaduras y gritando o más bien aullando de dolor

No tuve tiempo de mucho más. Cuando todo iba perfecto y el baile se estaba desarrollando sin problemas, un par de chicos desplegaron unas pancartas con lemas en contra de la Cromería y de la blanca.

A mi alrededor empezó a reinar el caos y algunos de mis compañeros y otros invitados iban cayendo heridos o muertos  por los ataques de los extraños. Mi primera intención fue proteger a Eda de algún posible ataque, pero me sorprendía al ver que ella era la que se había colocado frente a mi y su piel se teñía de azul dispuesta a atacar.

No iba a dejarle que arriesgara su vida por mi así que me coloqué a su lado dispuesto a canalizar mi magia hacia los enemigos. Una oleada de azul y rojo me recorrió el cuerpo. En la mano izquierda tomó forma un envase de cristal azul, hueco, dispuesto a ser llenado. Desde los dedos de la mano derecha salieron hilos de luxina roja que iban llenando el recipiente.

No era una buena idea crear una explosión en medio del caos, pero no se me ocurrió nada mejor en tan poco tiempo. Parecía como si tuviera obsesión por las explosiones así que la lancé contra los dos chicos que estaban matando a la gente.

Eso no podía continuar de esa forma, así que después de lanzar el recipiente explosivo, sin ver a donde caía, me concentré en la mujer. Esperaba que con todo el caos que reinaba a mi alrededor, nadie se fijara en mis ojos. No tenía nada claro que con solo una clase, pudiera ser capaz de hacer algo con el paryl, pero era algo que debía intentar. Aun no poseía suficientes conocimientos de combate como para derrotar a unos enemigos en principio más diestros que yo, así que debía recurrir a mi habilidad que intentaba ocultar a los demás.

Mis ojos se tornaron negros y esperé a ver si salía algo disparado hacia la chica mientras notaba cómo la luz de la bola explosiva que acababa de lanzar unida a la fuerte luz de otros focos del salón molestaban inmensamente mis ojos por lo que de golpe los cerré de manera casi inconsciente

te puede dejar ciega o quemarte viva

Resonó la voz de Marta Martaens en la mente de Threkor cuando un pegote de luxina roja cayó sobre parte de su cuerpo y vio cómo uno de los chicos sonreía en su dirección mientras una pequeña bola impactaba sobre ese pegote que comenzó a arder sobre el cuerpo de Threkor

Eleanor tarda unos segundos en darse cuenta de lo que está pasando. Aram se había abalanzado sobre ella rápidamente, y sólo lo entendió cuando vio un cadáver a su lado, en el suelo. Su mente se detiene y su mirada se queda fija en los ojos inertes, hasta que oye la voz de Aram sobre ella. Sin apartar la mirada todavía, asiente y se arrastra hasta la mesa más cercana. Una vez allí, se recupera un momento del shock y echa un vistazo al resto del salón. Un instante, muchos planes, pero sólo puede elegir uno. Tomando aire, comienza a concentrar la luxina amarilla en sus manos, notándolas cada vez más frías y húmedas. El horror de su alrededor se vuelve más tenue y poco a poco se convierte en decisión en su mente.

-Hay que abrir la puerta. Sígueme y cúbreme. No servirá de nada que luches mientras siguen matando a gente inocente. - declara a Aram en tono neutro aunque ve con sorpresa que el chico está peleando cuerpo a cuerpo contra dos hombres corpulentos.La piel de Aram es completamente verde ahora mismo mientras con la mano extendida estampa una máscara de luxina en la cara de uno de los hombres que comienza a dar vueltas sobre sí mismo tratando de arrancársela antes de morir axfisiado.El otro hombre le da un tremendo puñetazo en la cara que le hace recular varios pasos para atrás

Acto seguido Eleanor sale de debajo de la mesa y echa a correr hacia la puerta, con las manos borboteando amarillo. Aprovechando el fuego que hay por la sala, Eleanor lo conduce con su luxina hacia todos los enemigos que pasan cerca de ella, sin importarle los daños que puedan sufrir. Esta es su primera batalla y no va a contenerse.La chica parece resplandecer envuelta en amarillo mientras lanza su luxina contra todo lo inflamable que ve produciendo varias explosiones en el camino que alcanzan a amigos y enemigos

Mi mente se distrajo ante la figura del Dragón,su mera arquitectura y proporciones lo contemplan como nunca lo hubiera hecho antes.Quería buscar toda irregularidad,cualquier cosa que alertara mi ojos ante las creaciones de mi grupo.Pero nada,absolutamente Nada noto en mis ojos,todo esta perfecto, (segun la definicion de perfección,a un ente imaginario de mi hermano). Mi decisión no fue seriamente la mejor,pero mi mente todavía estaba intrigada por la Pelirroja, tenia que encontrarla y vigilarla,esa frialdad no es normal, asi que con la derrota al frente camino hacia la puerta,con la esperanza de poder encontrarla ya sea saliendo del baile o entre el gentío 

Y así lo hago,me pongo en la pared y vigilo quien entra y sale,como si de un Guardia fuera mi persona, un mero ente inquieto moviendo sus ojos de izquierda a derecha en busca de su víctima. Y tal hubiera seguido si no fuera por una reacción natural de mi cuerpo,primero fue el dolor,luego mi curiosidad y luego el beso del piso sobre mi cara,de ahí siento  como mi ropas se empiezan a ensuciar por mi sangre manando de mi pierna.No puedo evitar lanzar gemidos de dolor, había sido quemado y golpeado,pero el golpe de la bala era mucho para mi.

Sonidos empiezan a entrar en mi oído entre la sinfonía de dolor y sangre que empieza a reunir el Salon que antaño era alegre y vivaz. Con tal ruido  levanto la mirada y veo la figura de mi víctima,aquella persona que sin medir al tiempo usó su bola Amarilla para destruir nuestras creaciones y traer el caos en este baile. El ambiente solo empieza a empeorar por cada minuto que empieza a girar, mi mente despierta su parte de supervivencia y me levanto con el dolor.

Mi pierna tiembla ante el daño de la bala y con mera intuición decido hacer un acto de desesperación y supervivencia. Trazo el amarillo con el subrojo hacia mi pierna para así darle como una especie de vendajes, los cuales me apretarán la pierna lo suficiente como para tapar y evitar que vuelva a salir sangre de la herida, junto con el calor del subrojo que utilizo para intentar "cicatrizar" mi herida ante su propiedades calóricas. Es natural que este acto improvisado de primeros auxilios solo hace que me salgan lágrimas de dolor ante la quemadura,pero sabia muy bien que no podía seguir quedandome en este estado de pasividad. O me movía o terminaba muerto,tal fin me llegaría si no hacia nada.

Mi experiencia en el Gran bazar huyendo o hasta robando me había enseñado ciertos tics a la hora  de ocultar mi presencia, sabia que no tenia que llamar la atención y que en esta situación en donde cada uno se concentra en proteger o asesinar a sus compañeros no estarían muy pendientes de un ser que se mueve entre las sombras del Salón del baile,aquejado con un intenso dolor. El cual para no apresar a mis enemigos,me mantengo callado en todo momento,no mas en mis pensamientos.

-Estupida,¡estupida!¡ Voy a quemarte y apresarte! ¡Si el lider cae! ¡la moral caeran de tus tropas!

Hago por primera vez una combinación de todos mis colores innatos a mi persona, utilizo el subrojo para que sea un combustible explosivo ante el taco humano, lo cubro con luxina amarilla para contener el calor y no se deshaga durante la trayectoria,mas no le doy la suficiente dureza para que así se rompa ante el hecho de mi enemigos, y lo lleno con naranja y rojo.Para así cuando ocurra la explosión el gel se quede aferrado en la piel de mi victima ,quemandolo y quizás dificultarle la movilidad ante la cantidad de luxina que cubrirá su cuerpo

Siento su peso en mi mano, mi magna obra pronto dará su bienvenida a este cruento mundo. Y al  encontrar mi presa, esa  infame pelirroja la vigilo y espero el momento justo para lanzarle mi bola apuntando a su rostro usando el factor sorpresa para que no llegase a notar el ataque y ni mi presencia,.Este es solo el inicio de mi ataque ya que seguiré enviándole otras creaciones mías para así lanzarselas a ella desde la lejanía y estando completamente oculto. No soy un hombre de batallar físicamente,pero el sigilo es unas de mis herramientas utilizadas para el combate.No estaré sastifecho hasta que la vea tentida en el suelo llena de dolor y gravemente herida para así esposarla o rematarla según sea la emoción que me llame.

Entre la rabia y la exaltación creativa que invade a Ren éste se fija que en su trayectoria están Garret y Mescía, ambos enfrentados también a la pelirroja,sin embargo el cuerpo de Ren,multicolor en este momento e invadido por una furia ciega y por impulsos casi instintivos le impiden ver lo que va a hacer por lo que acercándose lo suficiente entre la gente el chico lanza su cóctel en dirección a Evi,impactando en la chica de lleno sobre su pecho y parte de su cara que queda destrozada.Pero la granada está tan llena de explosivo que la luxina y el fuego impactan sobre los que están cerca,incluyendo a Mescía y a Garret que nota cómo las lenguas de fuego se adhieren a su ropa y le queman la carne expuesta.Mescía grita de dolor junto a él mientras pierde la luxina azul que gotea inservible mientras ella trata de sofocar el fuego.Evi yace muerta a sus pies con el rostro carbonizado

Caminaba tras Naya y Asha junto a Cameron en dirección a los padres de ésta cuando estalló todo.Dos hombres se subían a una de las mesas y abrían una enorme pancarta con algo escrito que a causa de su lentitud en la lectura solo llegó a leer "ABAJO LA CROMERIA" cuando un grito llamó su atención, habían llamado Asesina a alguien

Miró en dirección a la voz y allí vio como una mujer con una daga clavada en la espalda caía al suelo , la mujer pelirroja que había clavado el cuchillo en la victima trazó contra el dragón y la figura que habían creado reventó en miles de trozos, como las bolas que hizo en el entrenamiento pero mucho mejor ejecutadas, envuelto en luxina roja y en el suelo por el impacto, rodó por este y se sacudió a golpes para quitarse la luxina, le sobraba la chaqueta y la camisa así que cuando pudo ponerse de rodillas y recuperar algo de visión se las arrancó dejando su torso lleno de cicatrices por arañazos y dientes al descubierto, ahora si estaba cómodo para arrancarle la yugular a alguno, esa era su intención hasta ver como Naya abandonaba a su hermana en el suelo.Se acercó rápidamente a ésta y aprovechando la pulsera que le había regalado su compañera trazó luxina azul para cubrir la herida de la joven y que no se desangrase pero era demasiado grande y no podía hacer nada por ella, rabioso miró a Asha a los ojos.

- No puedes morir, has de cumplir tu promesa.  

Alzó la mirada para ver como seguía el combate, la guardia negra contrarrestaba a los atacantes y los invitados que eran miembros de la cromeria también usaban sus habilidades para combatirles, los agotadores entrenamientos parecían dar su fruto, lastima que algunos de los que atacaban habían sido compañeros de entrenamiento. 

Buscó a los demás, vio a Marie y a unos cuantos ir hacía la puerta cerrada, la joven parecía controlar bien trazo pues acababa de liberar casi toda la resistencia que podían ofrecer a los que intentasen salir de el salón por la puerta, Threkor había lanzado algo que hizo que gruñera al ver la explosión, vio a Len desubicado y alzó su mano para que le viera, recordaba de que el trazaba el rojo le hizo señas para que se acercase a Asha, tras él vio a Flit en el suelo 

- Camerón cuidala. Es lo ultimo que dijo antes de absorber más luxina azul y correr hacía Flit.Mientras lo hacía sus dedos se alargaron en pequeñas dagas imitando unas garras, al llegar se agacho junto a Flit y Liandra, su mano fue directamente a la boca de Flit para ver si tenía aliento. -¿Estás vivo amigo?, tras confirmar si seguía con vida o no, hizo lo mismo con la mujer a la que él protegía.

Elric comprobó que Flit respiraba con normalidad a pesar de tener parte del rostro con pequeñas quemaduras y sangre en la parte trasera de una de sus piernas a la altura del culo y en un costado.La sien estaba hinchada y un hilillo de sangre le corría por la cara

Si alguna vez habeis estado en una pelea de taberna todas practicamente empiezan igual.

Con un destello de furia, una palabra mas afilada o una jarra que se estampa contra una pared.

Lo mejor en estos casos es como siempre me han dicho, salir de ahi lo mas rapido posible. Porque en las peleas de taberna uno nunca sabe si en el mejor de los casos va a recibir un golpe. Demasiados objetivos, demasiados enemigos potenciales, demasiadas cosas que pueden salir mal.

Así es como afronta una batalla un general, con una mente fria y calculadora que evalua en una fraccion de parpadeo sus posibilidades.

Por suerte para el mundo, yo no soy un general.

El disparador de todo lo que aconteció despues fueron los disparos y la sangre. Ese olor metalico a sangre unido al de la polvora hacia que los reflejos ejecutaran las maniobras más basicas del manual de supervivencia de alguien que se habia criado entre batallas como esta.

Dirijo primero mi mirada hacia mi atuendo verde empezando a absorver toda la luxina de la que soy capaz. La sensación es instantanea. Un subidon de adrenalina y un sentimiento de invencibilidad se arremolinan en mi mente al tiempo que voy corriendo hacia la puerta. Bueno que empiece el baile pienso mientras desenfundo mi pistola y la amartillo al tiempo que busco a un buen objetivo, los que me han disparado aun tardarán en recargar para volver a probar suerte con un blanco como yo que ahora ya no estoy estático.

Paso por el lado de Flit mientras lo veo tirado en el suelo protegiendo a alguien.

-Oye ya tendras tiempo para dormir en otro momento, aun hay mucha gente que estara encantada de rematarte si te quedas en el suelo!- le grito entre el estruendo de la pelea. La sensacion de la luxina en la sangre es perfecta para el combate, pelear, desjarretar y degollar. El tono de mi piel adquiere esa verdosa luminosidad mientras apunto con mi pistola hacia uno de los desgraciados que parece que aun estan en la puerta impidiendo nuestra huida o eventualmente la llegada de refuerzos. Así que apunto y click.

Estupido trasto, ha vuelto a fallar...

Vuelvo a amartillar el arma y disparo a escasos metros de mi objetivo, esta vez el sonido del arma revela que si ha funcionado disparando una bola de plomo a uno de nuestros atacantes.

Dejo caer entonces la pistola... no hay tiempo para volverla a cargar y ahora mismo tengo ganas de dejarme llevar por el combate sin importarme mi seguridad hay que disfrutar de estas oportunidades pues uno nunca sabe cuando Orholam te va a bendecir con algo así.

Mi mano saca una de las balas de plomo que guardo en uno de mis bolsillos para la munición. Dejo que la luxina la recubra con una patina color verde oscuro que huele a cedro, creo que sera suficiente.

Busco a otro objetivo próximo al anterior extiendo mi mano que aun sujeta la bala en su dirección como si mi brazo fuese un mosquete y lanzo el proyectil de plomo recubierto de luxina proyectándola hacia mi objetivo como un segundo disparo. Mi brazo izquierdo amortigua la energía de lo que debería ser el retroceso de un mosquete bien cargado de pólvora. Toda acción tiene una reaccion me advirtieron y la magia no es una excepción. El olor a hierba mojada inunda mis sentidos mientras busco más objetivos como un depredador al tiempo que desenvaino mi estoque con tanta fuerza que éste queda recubierto de una pátina amarilla hasta la mitad de la hoja que miro con incredulidad,dejando por unos momentos de escuchar el ruido a mi alrededor

Cuando hace un rato pensaba que parece que nadie quería pasarlo bien esta noche... no podía adivinar cómo de en lo cierto estaba. A veces debería maldecir mi lengua.

Son apenas unos segundos en lo que todo lo que habíamos construido se viene abajo. Sangre, gritos, dolor, muerte y caos. Mucho caos. Pocos segundos, pero suficiente para poder evaluar qué hacer, suficiente para que el azul entre en mí mientras aprieto mis dientes y mis músculos se tensan instantes antes de alzar la voz. Una voz que se impone sobre el caos y que todos y cada uno de mis hombres y de mis aprendices escucha.

¡Buscad al compañero más cercano y cubríos las espaldas! ¡La Cromería y vuestras familias dependen de vosotros!

No iba a decir demasiado más. Era el momento de pasar a la acción. En mi mano unas esferas, mientras con la otra desenfundo el arma y me encamino directamente hacia la puerta. Con un sencillo gesto tres esferas golpean tanto a Carman y Tahes como a uno de los desgraciados que se cruza en mi camino. Una mirada a mi hermosa compañera bastará para indicarle qué es lo que debe hacer, y eso hace que tenga alguna cosa menos de la que preocuparme. Poco a poco comienzo a ganar velocidad hacia la puerta mientras corro y salto encima de una mesa y mientras esta cruje por el impulso lanzo un directo acumulando luxina para proyectarla junto a mi impulso como si de un ariete se tratara contra la puerta. Nadie va a retener a mis chicos mientras yo viva.

La puerta se rompe por el centro dejando un agujero por el que poder escapar y los que están cerca empiezan a sortear a los enemigos mientras tratan de escapar por alli

Elric ve que Asha le observa con ojos sin vida.Unos preciosos ojos que ya nunca volverán a brillar con la alegría de hace escasos minutos.Cameron yace inconsciente a pocos pasos

Cuando te acercas a Flit y a Liandra ves que ella también respira,muy suavemente pero lo hace

Mi espada apenas había rebotado contra Evi y me encontraba en una situación en la que estaba desarmado contra alguien con mayor experiencia que yo trazando... aunque todo esto pierde importancia cuando un idiota decide que lanzar una bomba en medio de la sala era buena idea. Ante la explosión, el fuego y el dolor intenso que noto mientras este último quema mi piel,  mi temor y rabia debida a mi impotencia no paran de aumentar.

Es así hasta que oigo un grito cercano que por poco me desgarra el alma. Mescia había sido afectada también y junto a ella todos los pobres desdichados que intentaban huir de la pelirroja. En ese instante recuerdo las dos únicas enseñanzas que Goss había tenido tiempo de enseñarme. Los subrojos no creábamos fuego sino que eramos un simple canal y que estaba bien utilizar tus sentimientos acordes al color pero que era yo el que debía imponerme y no dejarme llevar o podría desencadenar algo parecido a lo que había pasado.

Con ello en mente y a pesar del dolor o mejor dicho apoyándome en el empiezo a trazar todo el calor procedente del fuego cercano empezando por el que quemaba a Mescia y ampliando mi radio de efecto a partir de ahí aunque mi entrenamiento no es suficiente y mi cuerpo no puede acumular tanto calor.Aún así consigo que sobre Mescía sólo queden unas pequeñas brasas así como sobre mi ropa.Toda la furia acumulada tanto por la situación actual como por lo pasado en el último mes empieza arder en mí con mayor intensidad que las llamas y por un momento siento la necesidad de encontrar a uno de esos asesinos y lanzárselo todo pero consigo imponerme y trazo hacia la bóveda de la sala para evitar más muertes estúpidas alzando una mano y proyectando todo ese calor hacia arriba.A pesar de no ser demasiado parece que un pequeño vendaval cálido sale de mi palma abierta con un siseo que se pierde en las alturas

Cuando Garret se gira ve que Mescía le mira con sorpresa antes de asentir y señalar la puerta mientras una espada azul se forma en sus manos aunque no es lo suficientemente rápida y alguien le dispara en el hombro provocando cierto retroceso en ella aunque esta vez la luxina no se evapora sino que sigue formándose entre sus manos azules

Con un grito furioso Tahes se lanza a por Garret con las manos cubiertas por unos guanteletes reforzados con luxina y le golpea con fuerza en la mandíbula haciendo que el chico se maree y pierda  el equilibrio,cayendo de culo sobre el suelo. Tahes se acerca dispuesto a seguir golpeándole

Naya se volvió directa a golpear a aquel que la había acuchillado por detrás. Para volver a hacerlo de nuevo. Esta vez en toda la garganta sintiendo como crujía la tráquea al partirse. Fue entonces cuando el comandante dio la orden de cubrirse con un compañero y Elric estaba a escasos metros pero el fuego se expandía y dos de sus compañeros estaban envueltos en llamas. Mientras presionaba su herida con una mano con la otra tiró de uno de los manteles y los cubrió para sofocar las llamas dándose cuenta casi sin pensar que sus padres no estaban por ningún lado

Acto seguido corrió hacia donde estaba Elric, Flit y Liandra. Tuvo que contener el impulso de agacharse y comprobar su estado, igual que hizo con su hermana. Lo primero era lo primero

- Ayudame a mantener alejados a estos desgraciados de la puerta para que los nuestros puedan escapar - le dijo a Elric mientras se colocaba en posición para evitar que los enemigos cruzaran mas allá de donde estaba ella, y para eso recurrió a la luxina con su mano libre para amoradazar y apresar a los que se acercaban aunque no llegó a formar nada pues alguien le dio una patada por detrás que le hizo perder la concentración. Naya se encontró tendida en el suelo con un fuerte pinchazo en las piernas que le impedía levantarse

En cuanto Eleanor ve que la puerta está abierta, y después de ver todos los estragos que ha causado, disminuye un poco el alcance de su luxina. No ha visto a Aram cerca, pero supone que sabrá defenderse por su cuenta. Avanza hasta la puerta y se queda cerca del hombre al que le habían presentado como Puño de Hierro, tomando una posición defensiva.

Procurando ser más precisa en sus ataques y aprovechando otra vez el fuego de la sala, Eleanor envía chorros de amarillo incandescente a la cara de los enemigos que intentan atacarles, dispuesta a frenarles para que Puño se pueda encargar de ellos.

Las puertas aún estaban cerradas y custodiadas por varios hombres armados que disparaban a todos aquellos que trataban de escapar por el agujero pero a pesar de todo muchos lo iban consiguiendo aunque fuera e escuchaban más gritos,como si les estuvieran esperando

De repente las manos de Eleanor quedaron cubiertas por luxina roja impidiendo que la chica las usara.Frente a ella ve a un hombre,no está lejos y la mira con fijeza y una extraña sonrisa en los labios exageradamente grandes.Sus ojos están llenos de pequeños cristales de luxina roja que el iris ya es incapaz de contener y se han esparcido por todo el ojo.Es un engendro.Un engendro que parece liderar a aquel grupo y que acaba de incapacitarla para trazar.

El hombre hace un gesto y varios de los suyos apresan a todo aquel trazador que puedan cargar incapacitándolos del mismo modo que a ella o directamente dejándoles inconscientes.Tres de los hombres están sacando al capitán de la Guardia Negra por uno de los balcones del jardín.Bardrych,recuerdas que se llama el Capitán y una de tus compañeras es su hija

El cuidadoso peinado que Sybill se había hecho ya estaba totalmente deshecho, el vestido tampoco tenía mejor aspecto, y su rostro y clavículas estaban manchados de la sangre de su madre, aunque quedaban disimulados por el rubor con el que se había cubierto toda su piel. Con las puertas abiertas, esperaba que su padre gateara por debajo de las mesas hasta poder salir. Pero ni siquiera estaba segura que podría conseguirlo, ¿quién no le decía que a fuera no hubiese más enemigos? No lo sabía. Y en realidad, tampoco estaba pensando en nada de eso.

La mente de Sybill estaba nublada. No pensaba en nada. Solo podía imaginarse a todos aquellos que habían provocado aquel caos ardiendo por su propia luxina, siendo consumidos por el fuego y las llamas. Solo quería muerte y destrucción. 

Al ver caer a Naya no dudó en dirigir otra bola de luxina roja hacia aquel alguien que le dio la patada y la tiró al suelo. Puede que su otra versión se hubiese preocupado de su estado de salud, pero no tenía tiempo para eso, solo pensaba en lanzar bolas de luxina de color rojo como la sangre. 

Distinguía a amigos de enemigos y desde la mesa a la que se había subido ayudaba desde la distancia a aquellos que estaban cuerpo a cuerpo. Si su mirada se cruzaba con alguno de sus compañeros, asentiría con la cabeza. Sybill era una de las trazadoras de combate, y su especialidad era la distancia... Que se demostrara su exhaustivo entrenamiento. 

Algo atraviesa con fuerza a Sybill desde un lateral.Un dolor agudo hace que suelte la luxian roja en dirección a Luther que se haya de espaldas a ella.Con horror ve cómo una trazadora lanza una bola amarilla que impacta sobre el joven y su ropa comienza a arder aunque con menos rapidez de la que cabría esperar.Parece ser que Luther se ha reforzado la ropa con luxina verde,por suerte para él

Sybill se mira el costado y ve una lanza corta de color verde clavada en su cuerpo mientras la sangre mana por la herida manchando su precioso vestido.La mujer que se la ha clavado la mira a los ojos y de un fuerte tirón saca el arma del cuerpo de Sybill causando aún más dolor y haciendo que la chica caiga de rodillas gritando y sujetándose el lado herido.La mujer se dispone a rematar la faena

"Despierta, Flit, tienes que despertar."

Lo oía a lo lejos, con una voz melodiosa que le hacía sonreír los oídos, era la voz de Liandra, de una Liandra que ya no era distante con él, que le quería.

"Flit, no ha llegado tu momento, tienes que despertar"

Flit intentaba abrir los ojos pero pesaban como ladrillos y el no quería irse, quería morir allí junto a Liandra, abrazado a ella, unidos al fin pero de pronto la voz de Liandra se tornó áspera, cruel y burlona y pudo notar el beso del látigo de nuevo en su piel

"Flit de Horatius, eres un inútil, no sirves para nada, por que te iba a querer? eres un esclavo. Te prohibo que la quieras, basura, me perteneces y ahora te lo voy a enseñar" Y los latigazos cayeron uno tras otro hasta que el esclavo gritó con furia, más muerto que vivo y sus manos se tiñeron de rojo. No sabía como lo había hecho pero estaba de nuevo en pie, con el grito de rabia resonando en sus oídos, una rabia oscura y acumulada a lo largo de los años. Estaba en pie, y eso le daba una ocasión que no quería perder, los mataría a todos o moriría él. Flit intentó trazar en una mano un escudo de luxina azul pero al darse cuenta de que con él no le iba a ser posible lanzar luxina y portar la antorcha a la vez decidió olvidar el escudo y cogió una asta de lanza, o era un trozo de silla roto?, daba igual, era madera y la madera le serviría para hacerse una antorcha rociándola de luxina roja y usando los fuegos de la sala. El azul le debería haber calmado pero había tanto rojo en él en ese momento que prácticamente no notó su efecto una vez encendida la antorcha y empezó a lanzar pegotes de luxina roja sobre los enemigos que se le acercaban y una vez rociados se acercó para prenderles fuego.

Había oído a Liandra pero creía que había sido un sueño. No podía estar viva y si no lo estaba el tampoco quería estarlo, pero antes de morir los mataría a todos, incluso a aquel Lord Omnicromo, aunque tuviera que convertirse en un despiadado asesino del paryl.

El fuego prendió rápidamente en la ropa quemándome el cuerpo. El primer instinto fua sacármela de encima y tirarla al suelo mientras la pisaba para intentar apagarla. Me había quedado semdesnudo de cintura para arriba, aunque aquello era lo de menos, ya que las ropas de fiesta no me hubieran protegido más que ir sin nada.

Desistí de mi anterior invento, ya que allí había demasiadas fuentes de luz como pra intentarlo. Mis compañeros habían decidido defender las puertas y proteger la huida de todos. Imité a Eda y los demás y tracé una espada en mi mano derecha.

Vamos Eda, tenemos que unirnos a los demás.

Garret se encontraba en apuros y me dirigí hacia él para asistirle. Si no llegaba a tiempo, el enemigo que se abalanzaba sobre él, podría matarlo de un golpe. Su puño estaba envuelto en luxina y el puñetazo sería fuerte. Corrí con la espada en la mano, esperando atacarle por sorpresa y consiguiendo golpearle por detrás asestándole un golpe mortal que hizo caer a Tahes al suelo cuan largo era y soltando su espalda

Tras Garret Threkor ve que un trazador apresa con luxina roja a Mescía impidiéndole moverse y un hombre la coge en vilo y echa a correr hacia el jardín

Estamos en una sala cerrada, atrapados por un numero indeterminado de enemigos que no se pueden identificar de buenas a primeras. A menos claro esta que te ataquen primero o intenten barrarte la puerta de salida.

Esos mismos enemigos inician un fuego para que al tener las puertas cerradas haya el máximo número de victimas.

Y la mejor idea que se les ocurre a mis compañeros es rociar material inflamable por toda la jodida sala y luego lanzar granadas?

Bueno definitivamente es un plan que podria firmar un verde.

Dejé que la luxina verde impregnara mis ropajes en un intento de aumentar su resistencia y sobretodo hacerlas menos vulnerables al fuego, no tenia ganas de acabar como un trozo de carne humeante esta noche. Valor y heroismo unidos con un toque de irreverencia. Seguidos de un olor carcteristico a cedro recien cortado.

La sensación salvaje del combate aún estaba presente por la acumulación de luxina verde que guiaba mis actos. Rasgar tendones de las piernas por la espalda o incapacitar de un golpe con la guarda de mi espada me parecia un buen plan en estos momentos de euforia. Si no tengo ni idea de quien esta contra mi, me niego a darle la espalda a nadie, todos son posibles enemigos así que actuaré como tal.

No se trata de matar a nadie, solo dejarlos incapaces de crearme más problemas, aunque claro en el caso de los trazadores mejor dejarlos bien inconscientes.

Fui esquivando los pequeños incendios que ya no eran tan pequeños mirando el amarillo de la hoja de mi estoque con la intención de absorver la luxina amarilla para reconducir mi personalidad a algo menos peligroso para mi seguridad personal. El amarillo deja una sensación de pensamiento equilibrado que contrastaba las ganas de pelea que me proporcionaba el verde. Entre tanto iba golpeando con oportunismo aquellos blancos que encontraba a mi paso. Un golpe en la nuca por aqui, un tendon de la pierna cortado por alla, un musculo punzado cuando veia que alguien se revolvía. Simplemente continuaba con mi camino todo lo rápido que podia. Cualquiera que estuviera peleando y no estuviera huyendo era un combatiente así que me marqué esos objetivos descartando a los nobles, los acobardados, los inconscientes y a los compañeros que parecian estar haciendo caso a la orden de puño de hierro.

Mis manos adquirieron un tono amarillento. Que diferente era la sensación de sentir la mente despejada y equilibrada. El olor a menta llenó mis fosas nasales.

-Quereis dejar de usar fuego y luxina roja!?- grité con rabia a nadie en concreto.

-No hace falta que les ayudeis a quermarnos vivos a todos! Se trata de evacuar a los no combatientes, neutralizar a los atacantes y apagar los putos incendios con luxina naranja!- iba ladrando gritos entre el caos creciente esperando que mis voces llegaran a los destinatarios adecuados.

Por el amor de Orholam menos mal que no estabamos peleando en un jodido polvorín o estariamos ya todos muertos.

La definición de fuego amigo cobraba un nuevo sentido para mi en medio de todo este lio monumental.

Ahora solo me queda dejar inconscientes a todos los que pueda antes de que esto arda hasta los cimientos.

Un impacto en su espalda y un calor intenso alertan a Luther de que algo no está bien en su ropa.Sus cabellos comienzan a oler a chamusquina justo cuando recibe un disparo en el brazo donde porta la espada haciendo que la suelte

Asintió a Naya, - Estan ambos vivos pero debiles, habría que sacarlos de aquí. Había demasiado fuego para su gusto, hace años vivió una experiencia similar, se incendió un lado del bosque donde vivía y terminó la zona muy destrozada, por suerte no llegó a donde tenía su pequeño lecho. 

Había demasiada gente corriendo hacia la salida, y no se sabía si habían entrado por otro lado a la cromeria, observó si podía tener alguna salida más rápida para el y sus compañeros pero lo veía inviable por el momento, miró a Naya un segundo. Su compañera era fuerte podían hacer una pequeña resistencia en la zona,  iba a decírselo a Naya cuando vio como a Marie que estaba encima de una de las mesas cerca de el era atacada por otra mujer, esta le había clavado una lanza en el costado y se disponía a clavarsela de nuevo para darle muerte.

Corrió hacía la mujer, sin pensárselo dos veces le laceró los tendones de los tobillos usando ambas garras como si un lobo desgarrase a su presa con los colmillos para que dejara de correr y dejó que esta cayera encima de la mesa y acto seguido hundió su mano izquierda semejante a una garra en su garganta empujando hacia arriba, el ataque dejó en shock a la mujer y dejó caer su lanza y brazos dejándole libre el torso para poder clavar su otra garra en el corazón.

Puño Trémulo llegó junto a ellos,ensangrentado y con la pierna herida por una o varias balas.Miró a Sybill pero alguien le atacó desde atrás y el enorme hombre se giró clavando el codo en la cara de su adversario y propinando varios golpes 

-"Sácala de aquí"-grita a Elric mientras sigue golpeando 

Una vez muerta y tras las palabras de Puño Trémulo Elric se giró hacía Marie y sin decir nada la cogió en peso y volvió lo más rápido posible aprovechando las explosiones y su sigilo donde estaba anteriormente con Naya.

- Has de curar la herida, tengo entendido que has ayudado en la enfermería-

El caos era exponencial. A medida que pasa el tiempo, todo se hacía más y más caótico. Yo estaba en el centro de la tormenta, con Celeste en la burbuja donde no ocurría nada. Veia a la gente moverse, gritar, pelear, desangrarse, morir. Pero ¿Que iba a hacer yo para escapar? 

Una explosión, me dejó ver a una chica pelirroja quemada al instante. El olor a carne rostizada comenzaba a volverse familiar. Y sucedida de esta vinieron varias más. La más fuerte vino seguida de una oleada de gente corriendo. La puerta había sido derribada. 

Intenté moverme, pero aun tenia mis dudas. ¿Sería seguro mover a Celeste? ¿No debería luchar? El subrojo no me dominaba del todo, porque de así pasar, hubiera corrido a quemar todo. Pero las dudas eran mayores que mí ira. 

¿Que debería hacer? La respuesta, por norma general, llega sola. Aunque uno piense que no puede ser así, y así fue en este caso. La voz de Puño de hierro resonó por toda la habitación. Dando aliento a los moribundos y despejando las dudas a los que no sabían si pelear o huir. 

Y yo, ¿que iba a hacer en el centro de la tormenta? Iba huir para volver a pelear. Necesitaba poner a salvo a Celeste y regresar a buscar a mí hermano. 

-¡Por el prisma!- grité luego de tomar a celeste con cuidado y echar a correr hacia la puerta donde había visto de reojo a Elric hace un momento. Podría causarle daños a la lesión, incluso podría morir, pero al menos tenia más posibilidades que dejarla. 

Lennart se dirige al pequeño grupo donde está Elric dejando con cuidado a Sybill en el suelo junto a Naya.A pocos pasos está Liandra que se ha incorporado y se toca la cabeza con gesto confuso.Por detrás un hombre la coge de las axilas y la levanta en vilo dirigiéndose hacia la puerta

Lennart apenas recorre un par de metros con Celeste en brazos cuando pasa al lado de un hombre alto que dirige sus ojos llenos de luxina roja hacia él.El rojo forma sinuosas serpientes retorcidas dentro de los ojos del engendro y sus labios son exageradamente grandes dejando ver una lengua partida en dos que parece refulgir en el interior de la cavidad bucal.De su mano sale una especie de látigo de fuego que golpea al chico en las piernas,enredándose en ellas y comenzando a apretar,quemando en el proceso sus pantorrillas.Lennart cae pesadamente al suelo con  la chica debajo que grita dolorosamente cuando el brazo roto golpea el suelo

Sonrio ante la figura de mi enemiga muerta en el piso, el impacto habia sido muy certero y justo en el mejor momento posible. ¡es el jubilo del victorio.....Si no fuera,porque durante la linea de ataque,otras personas sales heridas dentro de la escenas. Y muy bien conocia sus rostros,meros conocidos que estuvimos hablando durante un leve rato. Antes que empezara todo el chaos del baile. Me hizo sentir mal,pero desecho el sentimiento tan rápido como vino.-No somos amigos,solo "conocidos". Vuestro dolor.......es poco para mi-dejo de mirar sus sufrimiento, y salgo de la escena antes que intentaran atacarme por malitepretar que soy el enemigo.Realmente con el poco tiempo que interactuamos era insuficiencia para tener alto nivel de empatia con ellos.

Entre mis escape, escucho las palabras de puño de hierro y de Luther,exigiendo que no se usara subrojo en el combate. ¡Absurdo! Esto es el campo de batalla.... Es combatir con todo lo que tengas o morir en el intento,aqui ya no hay reglas ni caballerismo,sólo fracaso y victoris.

Trazo otras bolas de accion,para asi  lanzarlo apenas veo como se interponen enemigos, hombre o mujer, da igual. Mientras obstaculice y peligren mi vida y y  camino,¡yo lo destruire! Mi busqueda no es otro que un intentó desesperadamente de encontrar mi hermano,tenia que salir con el antes que la escena empeora mas de lo que estaba. Y si estaba en combate lo ayudaría, desde la lejania y oculto.

Cojeando a causa del disparo en la pierna Ren camina por el salón cuando ve a su hermano con la chica con la que bailaba.Un látigo de fuego se enrolla en las piernas de Lennart haciéndole caer al suelo.Ren empieza a ir hacia él cuando un hombre enorme se cruza en su camino y con un rápido movimiento estampa una porra azul con pinchos en el estómago de Ren. El chico nota cómo los clavos de luxina penetran su piel antes de que el hombre desclave el arma y Ren caiga al suelo doblado en dos falto de respiración