Partida Rol por web

La hija de Chronos

Jornada 1: El manantial de Ossecina (GdV 2)

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25/06/2016, 09:34
Lairiel

Su idea no parecía ser tan buena como había pensado. Los gritos de Tsuna y Kon ante el golpe en la escama reverberaron en las paredes de la pequeña cueva, haciendo que las delicadas orejas de Lairiel ampliaran aún más el sonido y provocando que se llevase las manos a los oidos

-¿Y si la escama necesita ella misma algo de agua? El mismo dragón siempre debió estar húmedo, y encontrarse en un lugar tan seco durante tantísimo tiempo...

Lairiel sacó su cantimplora, quitó el tapón y derramó una parte considerable de su contenido sobre ella. Luego volvió a cerrarla y se quedó mirando esperando algún cambio. Agitó un poco el recipiente. No le quedaba mucha agua ya. Tendría que racionarse bien.

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25/06/2016, 12:00

- ¡No! - chilló Mö al ver como Lairiel desperdiciaba aquel líquido tan preciado dadas las circunstancias. Pero era tarde, un chorro que probablemente habría caído con mucha mayor gracia por el gaznate del ren salpicó la superficie helada que recubría la gema. El hombre simio se limitó a contener su enfado y a llevarse la palma de la mano al rostro en gesto de frustración.

- Realmente estamos a ciegas... - repuso. - Golpear, curar... "regar". Cualquier cosa es igual de probable e igual de improbable que funcione. Siendo como es hielo lo que recubre a la gema deberíamos fiarnos de nuestro instinto y buscar darle calor. Pero más del que hay aquí no creo que seamos capaces de generar. 

Habida cuenta de que la violencia no iba a generar nada bueno, Mö optó por envainar de nuevo su hoja.

- Y, claro... - añadió - como tampoco sabemos qué ha congelado la esquirla. 

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25/06/2016, 13:01
Kon

Kon parecía satisfecho con la actuación de Lairiel, desde luego no tenía ni idea de cómo podría arreglarse la escama, pero estaba convencido de que un espíritu amigable y de ayuda era siempre mejor que uno agresivo y de enemistad.

Yo...bueno, hay un tipo de calor que no es el mismo que el que se da en este desierto - comentó Kon con la cabeza en otra parte, recordando días pasados - En el orfanato en el que me críe nos calentábamos en las noches de invierno así, y uno se sentía mejor que al lado de cualquier fogata - dijo mientras abría los brazos y trataba de abarcar el gran bloque helado, cosa que era imposible entre una sola persona.

Podríamos probar, si os parece... - dijo con una mezcla de esperanza y vergüenza, poco propia de él. Por último, le dedicó un pequeño susurro a la escama congelada - Hemos venido a ayudarte, ayúdanos tú también.

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25/06/2016, 15:28
Umi

Umi no acababa de coger el concepto este de mostrarle afecto a una escama. Ciertamente era un artefacto mágico poderoso, y había formado parte de un Dragón, un ser mágico y legendario, del que no sabía más que cuentos e historias. Pero, aun así, no era más que una escama… Atribuirle sentimientos a aquella escama, fragmento de un mítico dragón, era como atribuirle sentimientos a un pelo que se le cayera a una persona.

Pero por alguna razón Kon parecía convencido de que la escama era sintiente, aunque aquello no se registrase como coherente en el cerebro de Umi, y parecía que Tsuna pensaba de forma similar.

Lairiel probó a “darle de beber” a la escama, para desagrado de Mö, que seguramente llevaba rato deseando darle un trago a cantimploras ajenas. No sucedió nada de forma inmediata… Pero tampoco podía descartar que fuese a suceder algo. Tal como decía Mö, no tenían ni idea.

Kon volvió a las andadas, abrazando la escama, y el espectáculo le pareció tan ridículo que Umi no pudo evitar reír.

- Ten cuidado no te quedes pegado. Sobre todo no la lamas, por menos se han tenido que cortar lenguas. - Risas aparte, seguía con su idea de derretir el hielo – Si nada de lo que estáis haciendo acaba por funcionar… Yo puedo conjurar un montón de hojas secas, para hacer un fuego rápido a ver qué pasa.

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26/06/2016, 13:32
Tsuna

El agua que vertió Lairiel sobre la escama helada fue inútil. Resbaló pared abajo y cayó al suelo, no tardando en evaporarse por la temperatura de la zona. Aunque el hielo de la escama congelada enfriaba el ambiente, la atmósfera seguía cargada de la calidez seca del desierto. Kon había notado cómo la escama había vibrado ante sus palabras anteriores, hablando de lo sola que debía sentirse. 

-¡No!- negó Tsuna a las palabras de Umi y abrazó a la escama, uniéndose a Kon. -No puedes quemarla, ¡es algo sagrado!- ambos sintieron que su gesto volvía a hacer vibrar a la escama congelada.

De aquella lasca les llegaron sentimientos encontrados, soledad y alegría. Cosas que sus compañeros no podían sentir, pues estaban aun decidiendo qué hacer. -El fuego no hará nada... ¿Y si de verdad se sentía sola?- preguntó la guardiana, más para sí misma que para el resto. Frotó su mejilla contra aquel hielo innatural. -Lo siento, debí venir a verte...

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28/06/2016, 21:32
Lairiel

Lairiel estaba un poco frustrada porque sus esfuerzos no dieran fruto, pero las palabras de Kon y su actitud, junto a la de la guardiana, le dieron otra idea.

-¡Eso es! Puede que Kon haya dado con la clave. Si la escama es un ser vivo, puede que esa capa de hielo sea su manera de expresar su aislamiento del mundo exterior. El calor de nuestras emociones puede que sea más apropiado que el real.

Dicho y hecho, y aunque un tanto más avergonzada que sus compatriotas, la semielfa apoyó la palma de la mano contra uno de los laterales de la escama, y pensó en recuerdos de niñez, de su padre y de su madre juntos.

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30/06/2016, 12:02

Mö miró en derredor con la boca abierta. No daba crédito. No podía articular sonido y sin embargo su cuerpo casi que quería seguir aquel estúpido plan. ¿Abrazar a la escama? ¿Se habían vuelto todos locos? Vale que la escama de dragón, de alguna manera mística y desconocida, proporcionaba agua a toda la región... de acuerdo con que fuese el fragmento de un ser mágico por naturaleza... pero, ¿que fuese capaz de entender emociones humanas? ¿Que no solo fuese capaz de entenderlas sino de verse afectada por ellas? ¿Qué se hubiese congelado por "sentirse sola"? El ren sencillamente no podía creer lo que estaba oyendo. Y mucho menos lo que estaba viendo.

Kon abrazaba a la esquirla congelada como si fuese un perrillo al que habían lanzado una piedra unos niños traviesos en el pueblo y hubiese que consolarlo. Tsuna, quizá la más propensa a probar cualquier teoría por muy descabellada que esta fuese, abrazaba también a aquel bloque helado con un amor extraño y bizarro. Oh... lo que faltaba, Lairiel también. Probablemente Mö habría llegado a pensar que Umi, sabiendo como es, se habría unido a la teoría del abrazo sin pestañear pero, ¡¿Lairiel?! Santo cielo... ¡una guerrera! Inaudito. 

Mö paseó finalmente sus ojos por las miradas de todos sus compañeros; Kon, Lairiel, Tsuna... e incluso Umi que parecía debatirse.

- Oh... está bien. - Acabó por claudicar como si los ojos de sus compañeros le hubiesen devuelto incontestables argumentos sobre por qué había que asumir que aquella opción podría ser la que acabase por dar resultado.

A regañadientes se aproximó a la esquirla. Con cautela. ¿Y si se quedaba pegado como había vaticinado Umi? Tendrían que raparle el pelo del cuerpo para separarlo de nuevo. - No quiero ni pensarlo... - murmuró. Así, sin mucho convencimiento aproximó su cuerpo escuchimizado al bloque helado y lo asió con ambos brazos. Por un instante se sintió ridículo. Pero solo por un instante. Al momento siguiente, como por ensalmo, Mö comenzó a recordar cuando aún vivía con el resto de los ren... cuando aún formaba parte de la familia. Cuando aún no había sido desterrado. ¿Por qué pensaba en aquello precisamente? 

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30/06/2016, 19:56
Umi

- ¡No pretendía quemarla! – Expresó Umi, casi indignada por el malentendido - Solo hacer un fuego a su lado para calentarla.

Por otro lado, ya no era solo Kon, sino también Tsuna, y hasta Lairiel, quienes se decidieron a abrazar a la escama, para consternación de Umi y Mö.  Sí, era una escama mágica, pero de ahí a asumir, sin ninguna base, que se sentía sola y que quería que la abrazasen. ¡Era una escama! Por muy de un dragón que fuese…

Para colmo, Mö siguió el ejemplo del resto y se unió al abrazo.

- Cielos… - susurró Umi – si no puedes contra ellos… Al menos no va a hacer ningún daño.

Y fue a abrazar la escama, sintiéndose avergonzada, pero no tanto como cuando era la única que no lo hacía.

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25/07/2016, 00:34
Kon

La mejilla de Kon se congelaba por momentos, pero parecía que por fin sus compañeros habían comprendido que la mejor forma de que los demás se abran a tí es ser amables y cálidos con ellos, como con Tsuna, si no hubieran decidido ayudarla, nunca habrían visto un chacal de las arenas, y mucho menos la escama de un legendario Dragón.

Sí, son buenas personas- pensó, como hablando para los hermanos que había dejado atrás en Lindblunt - estaré bien con ellos.

Tras éste pensamiento, frotó un poco más su helada mejilla contra el bloque que encerraba la escama, tratando de transmitir todos los pensamientos positivos que rondaban su cabeza hacia el interior del hielo.

Sólo un poquito más, seguro que conseguimos arreglarlo - dijo en voz alta esta vez, pero casi más para sí mismo que para el resto.

Conteniendo a duras penas los escalofriós, Kon permaneció abrazando la helada figura.

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26/07/2016, 17:50
Tsuna

Y a escama, que al tacto le pareció helada, fue templándose poco a poco con la calidez de aquellos corazones que le brindaban compañía tras años de soledad. Y aunque su temperatura era como el mismo hielo, no se quedaron pegados como pasaba con este cuando era una masa grande helada. No, lo que pasó es que poco a poco comenzó a fundirse, hasta que una pequeña explosión de luz y agua asoló la cueva, empapando a los Viajeros. Los cinco acabaron por el suelo, debido a la fuerza con la que salia el agua y aquel bloque de hielo pasó a ser aquella maravillosa masa de agua que se sostenía clavada en la roca sin ninguna lógica o razón que la ciencia pudiera explicar.

-Por todos los dragones... Era cierto que se sentía sola...- susurró la guardiana y estalló en una carcajada de alegría, por el agua que la empapaba por fin tras días sin una gota de agua. Rió por los pequeños campos que podrían regar, por los Viajeros que pararían y porque la vida fluía de nuevo. - ¡A partir de ahora vendré todas las semanas a verte!- prometió más animada a la escama, la cual nadie habría pensado que tendría sentimientos. Tantos misterios envolvían a los dragones y a su naturaleza, a cómo habían creado aquel mundo, que todo era posible.

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01/08/2016, 18:16
Lairiel

Lairiel tosió y se frotó la cara para secarse un poco, empapada como estaba por el agua. Estaba con la boca abierta, contemplando cómo brotaba agua a raudales de lo que antes era un bloque de hielo incrustado en la roca. Juntó las manos para formar un cuenco improvisado y recogió un poco de agua, que estaba bastante fría para la temperatura reinante en el lugar, bebiéndosela con deleite. Después cogió su cantimplora y empezó a rellenarla, con una sonrisa de alegría.

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01/08/2016, 18:47
Kon

¡Jajajaja! ¡jajajaja! - totalmente empapado, Kon no podía dejar de reir, ciertamente ¡la escama les había escuchado! 

Habían logrado devolver el agua al manantial, cosa que a priori hubiera parecido imposible.

La ola de agua le había hecho caer de culo y en el suelo permaneció, carcajeándose por el hecho de tener agua en mitad del desierto.

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01/08/2016, 20:00

Los ojos del ren no podían estar más abiertos. Incredulidad era un concepto que había sido redefinido en aquel día. No solamente había llegado a claudicar con aquella soberana estupidez de abrazar a la escama de dragón sino que, además, ¡habían conseguido despertarla de su letargo de hielo con ello! Y, lo peor, en agradecimiento, la escama había decidido regarles como si de una lluvia de mayo se tratase. Y ahora, empapados de pies a cabeza, los aventureros reían y celebraban una ocurrencia como aquella que había tenido Kon.

Aunque, claro, no todos eran tan felices como podría pensarse. La misión estaba cumplida, eso era evidente... y, mucho más aún, con muy pocos inconvenientes a decir verdad. Pero Mö no era un animal acuático. No le gustaba bañarse demasiado a menudo y ahora, mojado de pies a cabeza, como un gato a medio ahogar, se sentía humillado.

- Esto es... esto es... esto es... - el ren se quejaba sin hallar exactamente el motivo por el qué hacerlo. - ¡No tengo palabras! - concluyó.

Finalmente el pensamiento práctico de Lairiel se impuso y el ren decidió imitarla. A fin de cuentas habían hecho varias jornadas de camino a través del desierto de Saladino con el fin de beber de aquella agua. De poder bañarse en ella y refrescarse con sus propiedades quasi mágicas. Pues hala... ya estaban bien bañados. El agua, efectivamente resultaba refrescante y, a regañadientes, Mö bebió copiosamente llenando también cuantos odres dispusiese.

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02/08/2016, 01:55
Umi

La sorpresa que sentía Umi porque aquello de “abrazar la escama” funcionase no llegó a notarse. La sorpresa por la repentina ducha lo ocultó a la perfección. La fuerza del agua los arrastró a todos hacia atrás. Cuando se recuperó de la sorpresa se incorporó, sentándose en el suelo. Se unió entonces a las risas de Kon, y respondió a las quejas de Mö.

- Vamos compañero, no hace mucho te quejabas del calor, ¡Ahora nos hemos refrescado!

La verdad es que estaba algo consternada porque aquello hubiese funcionado. La lógica indicaba que aquello no debía ser posible. Una escama, un fragmento de un ser vivo, no podía estar viva por sí misma. Pero una mente analítica debía aprender a aceptar las verdades cuando estas estaban frente a sus ojos:

Habían abrazado a la escama, y esta había recuperado su estado anterior. No había ninguna otra razón, y no debía negar la evidencia. La escama estaba viva y se había congelado porque… se sentía sola.

Se unió a sus compañeros en la tarea de rellenar los odres.

- Entonces, ¿el pozo volverá a tener agua ahora?

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06/08/2016, 17:09
Tsuna

El agua que bebieron era fresca y deliciosa, la mejor que habían probado casi jurarían los Viajeros en un futuro. Y es que en verdad era agua pura de la misma fuente. Acabaron empapados, pero con el calor que hacía casi era de agradecer por todos, menos por Mö, que hubiera preferido ver el espectáculo seco a un lado.

-¡Sí!- gritó Tsuna contenta y abrazó a los cuatro, uno por uno. -¡El manantial volverá al pueblo! ¡Qué buena noticia! Creo que a partir de ahora vendré todas las semanas a ver a la escama, para que no se vuelva a sentir nunca más sola... Gracias, Kon por ayudarme a despertarla. La verdad es que no sé que la hizo dormir y congelarse, solo espero que no vuelva a pasar y para ello vendré a mostrarle mi amor y mi apoyo.

La guardiana se escurrió el pelo y trató de escurrirse también la ropa, al tiempo que dejaba que el agua siguiera su curso. -Volvamos a Ossecina, podréis llevaros agua y víveres. Os daré todo como agradecimiento, no tenéis que pagarme nada. Aceptarlo por cortesía, por favor.

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12/08/2016, 19:57

Mö llenó las cantimploras en silencio. No iba a abandonar su habitual mal humor, esto estaba claro... ya no solo por una cuestión de extrema tozudez, más bien era que el ren no conocía otra cosa. Llevaban demasiado tiempo viviendo solo y discutiendo consigo mismo (lo que implicaba perder la discusión en el cien por cien de las veces) como para entender que el mundo funcionaba de otra manera. Sin embargo era bien cierto que tras haberse bañado y bebido hasta la saciedad en las aguas de Ossecina se encontraba más "ligero". La sensación era extraña, de hecho. Era como un bien estar que no había experimentado antes. Como estar más contento sin tener motivos para estarlo. Como sentirse en paz consigo mismo. Era raro.

- Esto es raro... - se dijo a sí mismo entre murmullos. Y esto era así porque Mö no terminaba de entender lo que le pasaba pero le costaba seguir manteniendo el ceño fruncido. Tanto que, tras un par de espasmos voluntarios tratando de escurrirse el agua que lo empapaba, se desperezó poderosamente lanzando luego un estruendoso suspiro que casi pareció correr como un céfiro veloz por todo el lugar. Había sido una exhalación de algún mal que llevaba años acumulando pues sonó como si el hombre simio hubiese podido soltar una gran carga.

- Estoy de acuerdo. - afirmó. - Regresar al pueblo será lo más prudente no sea que nos alcance la noche a medio camino. Si llegamos a Ossecina sin tener que toparnos con otro de esos monstruos podremos decir que la misión habrá sido un verdadero éxito.

Su voz no sonó cerrada y tosca. Sonaba blanda... relajada.

- El primero de muchos... espero. - rubricó con una sonrisa.

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13/08/2016, 01:54
Umi

- No veo por qué no debería serlo – le sonrió Umi a Mö – Piénsalo de esta manera, ahora mismo tenemos un balance del 100% de éxitos. Somos lo más.

Umi llenó las cantimploras como el resto, pero no tenía prisa por abandonar el sitio. Se quedó cerca de donde brotaba el agua, notando la corriente pasar entre sus dedos. No llevaba mucho tiempo en el desierto, pero había sido el suficiente como para que, sin saberlo, echase de menos aquella sensación.

De repente recordó a Akatsu. ¡¿Dónde estaba?! Se giró, nerviosa, buscando al cachorro de Kitsune. Lo encontró rápidamente, estaba cerca de una de las paredes de la caverna, completamente empapado, subido a una piedra de tal forma que el agua ya no le cubría más que los pies. Akatsu aprovechó que le miraban para sacudirse el agua del pelo, rociando a todos los presentes y dejando su propio pelaje de punta y despeinado.

- Mira, Akatsu piensa como tu Mö. – Le dio una palmada en el hombro a su compañero, y luego se dirigió a todos en general – Hagamos eso, volvamos a Ossecina.

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13/08/2016, 14:05
Kon

Ha sido gracias a todos, Tsuna - replicó Kon abriendo los brazos de modo que abarcara la cueva entera, salpicando por doquier - sin el "calor" de los cinco no lo hubiéramos conseguido.

Su sonrisa se ensanchó más aún tras contemplar como el mal genio habitual en Mö desaparecía por momentos, y como la racional y escéptica Umi empezaba a calcular el balance de éxitos que había logrado el improvisado grupo de viajeros.

Mientras el agua continuaba empapándole, sentía como poco a poco desaparecía el desasosiego de estar tan lejos de sus hermanos y empezaba a formarse un nuevo vínculo con aquellos "desconocidos", sólo el futuro sabía que planes tenía para él y sus nuevos amigos.

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14/08/2016, 17:59
Lairiel

Ya no se podía guardar más agua en las cantimploras, estaba a tope y una pequeña sonrisa asomaba por sus labios. Observó al resto de sus compañeros, y satisfecha de que hubiesen resuelto aquel contratiempo, salió de la caverna, donde el abrasador sol la devolvió a la realidad. Observó desde lo alto del monte la pendiente hasta el suelo. Les esperaba otra buen descenso. También recordó la presencia de aquella bestezuela que habían encontrado en el camino.

-Puede que hayamos conseguido solucionar esto, pero no podemos perder de vista que este sitio puede ser peligroso -dijo mientras comenzaba a bajar, asegurando bien en la medida de lo posible sus manos y pies.

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22/08/2016, 11:08
Naga

El camino de vuelta fue menos pesado de lo que parecía el de ida. Quizás algo tenía que ver con que el calor era menos ahora que se habían empapado con agua fresca de aquella fuente mágica, seguro que beber de ella fortalecía al Viajero. Nada más llegar al poblado de Ossecina pudisteis ver como la fuente que se encontraba en la plaza volvía a llenarse.

En el poblado no se oía nada más aparte del rumor del agua caer, aunque los habitantes de aquel lugar no tardarían mucho en volver al saber de las buenas nuevas. Tsuna por su parte corrió a su casa a buscar en un gran baúl, parecía entusiasmada de nuevo, como si su corazón se hubiera templado como la escama al descongelarse.

-¡¡Tengo que agradeceos todo lo que habéis hecho por mí y por Ossecina, Viajeros!!- dijo casi en un gritito, buscando en su baúl. -Tengo regalos de otros Viajeros que pasaron por aquí antes que vosotros... ¿Qué os gustaría que os diera?

Notas de juego

Tsuna os regalará un objeto a cada uno, tirad 1d12 para saber la condición del objeto (usado, hermoso, resistente, etc) y 1d4 para saber la naturaleza del objeto (arma, armadura, escudo o ropa)