Partida Rol por web

Lágrima Hechicera: El descubrimiento

Ciudad de los Elfos

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22/01/2013, 17:04
Jack

|Bosque|

Jack sonrie ante la pregunta de Risk.

-Yo opino que es una buena ocasion para que las muchachas vean algo de magia. ¿Que opinais vosotras?.-

Mira a las dos jovenes, con una sonrisa en su rostro consciente de la respuesta que van a dar. Y la verdad es que para su animo tambien le vendria bien ver de que eran capaces en el grupo. Reforzaba sus esperanzas de lograr algo con esta mision tan peligrosa.

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22/01/2013, 17:26
Naida

| RÍO CARHÚ |

Escuché atentamente la historia que había relatado Míriel y lo triste que se había vuelto la expresión de Risk al escuchar el tramo donde explicaba el asesinato de su padre y cómo se había tenido que hacer cargo de toda una raza sin haberse recuperado de su tragedia familiar. Sentí pena por él, pues sabía perfectamente lo que era perder a alguien, aunque él siempre había estado arropado por muchas personas. Yo sólo por Luna.
Después de aquella historia llegamos a un río y justo delante estaba el bosque. Cualquiera de las dos opciones parecía interesante, pero Naida necesitaba ver algo de magia. Lo único parecido que había visto era su colgante brillar, pero necesitaba creer que aquel grupo era capaz de cualquier cosa.
- Opto por la magia. Además, no sabemos qué hay en ese río... Cruzarlo a nado podría ser peligroso- dije después de unos segundos de reflexión.

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26/01/2013, 15:13
Director

| JUGADA MASTER |

Míriel asintió con la cabeza y decidió que si Risk no hacía nada con su magia para poder cruzar el río, lo haría ella misma. De modo que descendió de su caballo y se colocó en la orilla del río, cerrando los ojos y concentrando todo su poder en las palmas de sus manos. Las dirigió hacia el agua que corría lentamente por el río e intentó detectar presencias, para asegurarse de que cruzarlo no suponía ningún peligro para ellos.
De repente Míriel abrió los ojos, sorprendida. Se dio media vuelta para mirar a los que la acompañaban, pero antes de que pudiera dar explicaciones una enorme ola surgió del río, elevándose en el aire. Míriel intentó detener su avance pero su magia no era suficiente para hacerlo. La rabia por no conseguirlo se reflejó en su rostro, pero también la rabia de no saber proteger a Naida y a los demás. Desconocía de dónde provenía aquella magia tan poderosa pero lo entendió al instante.
La ola les rodeó a todos, creando algo parecido a una burbuja, atrapándoles a todos dentro de ella. Esa burbuja también acaparaba parte del río y desde allí apareció la causante de tal encantamiento. Emergió del agua una mujer con el cabello azul claro y con una mirada intensa. Poco a poco fue saliendo también su cuerpo y pudieron comprobar que sus largos cabellos cubrían sus senos, ya que no llevaba nada puesto en la parte superior que lo hiciera. Poco a poco fue apareciendo una cola del mismo tono que el cabello y entendieron que se trataba de una sirena. Un chorro de agua la mantenía en el aire, mientras los diamantes que llevaba en el cabello brillaban con gran intensidad.
- Buenas noches, viajeros- dijo la sirena con una sonrisa maliciosa-. ¿Os habéis perdido?-.
Míriel subió en su caballo y se puso entre la sirena y Naida, impidiendo así que pudiera verla.
- Con todos mis respetos, no creo que eso sea asunto suyo- dijo Míriel, dibujando en su rostro una pequeña sonrisa.
- Se equivoca, anciana elfa, aunque debo reconocer que se mantiene igual de bien- comentó la sirena, en tono de burla-. ¿Puedo saber a dónde os dirigís?-.
Míriel decidió callarse y dejar que hablara otro.

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26/01/2013, 16:26
Director

| JUGADA MASTER |

Walgior volaba en su dragón. Llevaba pocos minutos haciéndolo pues la distancia entre Fletord y las montañas Sphirock era muy escasa. Estaba sobrevolando el río Carhú, viendo cómo las montañas se alzaban ante él a pocos metros, pero algo llamó su atención. Sintió unas presencias bajo ellos, algunas conocidas y otras no tanto. Pudo sentir a Risk, a Jack, a las dos muchachas... Pero había alguien más. Pudo ver entre las nubes que habían sido atrapados en el interior de una burbuja creada con el agua del mismo río.

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26/01/2013, 18:10
Jack

|RIO CARHU|

Jack es pillado por sorpresa por la ola y la burbuja porque pensaba que era parte del hechizo de Miriel.
De modo que se ven atrapados dentro de la burbuja antes de que pueda hacer nada.
Cede las riendas de su caballo a uno de los guardias para que a Luna no le pase nada y se encara con la sirena.

-¿Por que nos detienes?, ¿que quieres de nosotros?.-

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26/01/2013, 20:36
Risk

| RÍO CARHÚ |

Vivían a poco tiempo del río y desconocían la presencia de sirenas en él.  Cuanta ignorancia había traído el encierro al pueblo elfo.  Risk sacudió su cabeza y se adelantó hacia la mujer, desmontando de su caballo y separando suavemente a Jack

-Jack.  Por favor ¿Donde están tus modales?- Se giró hacia a la mujer -Mi señora- dijo haciendo una reverencia  -Perdone los modales de mi amigo, no esta acostumbrado a tratar con mujeres como vos.  Nos dirigimos al bosque- agregó mientras su mirada indicaba la foresta que crecía detrás -Nuestro objetivo es hacer canoas con su madera para así poder llegar a la que fuese nuestra ciudad y verificar si el pueblo puede retornar y reclamarla nuevamente.  O, al menos, si podrá hacerlo algún día.  No pretendimos causarle molestia alguna, pero, como seguro entenderá, no podemos utilizar los puentes pues podrían estar vigilados, por eso es que se nos ocurrió hacerlo por aquí-  Miró a sus compañeros -Le garantizo que no buscamos ningún mal para usted o los suyos así pues  ¿Nos permitirá pasar?-

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26/01/2013, 23:00
Sirena

| RÍO CARHÚ |

Arqueé las cejas sorprendida por la reacción de aquel hombre con pelo castaño y barba del mismo color. Por suerte había alguien que conocía de modales, lo cual me provocó una sonrisa de satisfacción. Asentí con la cabeza, escuchando con atención las explicaciones que me estaban dando para dejarles libres.
- ¿Por qué deberíamos ayudaros?- pregunté, sin saber muy bien en qué nos beneficiaba si les dejábamos marchar-. De todos modos, no creo que yo sea la adecuada para hablar de ésto...-

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26/01/2013, 23:04
Melpénome

| RÍO CARHÚ |

Aparecí de entre las aguas, mientras un fuerte chorro de ésta me mantenía en el aire, más elevada que a la sirena que había salido del agua en primer lugar. Le agradecí con una sonrisa el gesto que había tenido. Entre nosotras nos entendíamos, aunque los allí presentes no lo hicieran en realidad.
- Vaya vaya... Me han hablado mucho de ti, Risk- dije, con una sonrisa maliciosa en mis labios-. Dicen que el Rey de la Tierra Media paga muy bien la entrega de tu cabeza- añadí, soltando una pequeña carcajada, esperando sus reacciones.
Con un gesto de la mano pedí a aquella joven sirena que se retirase y me obedeció al instante. Ya me había ayudado bastante.

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27/01/2013, 05:17
Risk

| RÍO CARHÚ |

-También dicen que el Rey no tiene palabra, que odia a todas las razas en las que, por supuesto, se incluyen las sirenas.  Dime sino por qué para los hombres no somos más que cuentos y leyendas.- Aguardo un segundo y continuó -No, espera, mejor deja que yo te lo diga.  ¿Qué crees que pasaría si una... por ejemplo Sirena entregara la cabeza de... por ejemplo el Rey Elfo?  Pasaría que el Rey, no el elfo, sino el humano, tendría dos nuevos adornos para su pared, una cabeza élfica y otra sirénida- luego devolviéndole la sonrisa agregó. -Además... ¿Para qué necesitaría una sirena el dinero de los hombres?  Por otro lado... quién sabe, quizás en nuestra ciudad encontremos la forma de aliviarnos, a todos nosotros, sirenas incluidas, de la tiranía del Rey.  ¿Acaso esta idea no te resulta lo suficientemente tentadora como para ayudarnos o, al menos, no entorpecernos?-

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27/01/2013, 19:43
Walgior

| Río Carhú |

Esperaba que Markus y Grey se las apañasen. ¿Y qué pasaba conmigo? Pues que no tendría un momento de respiro. Paré mi dragón en seco al sentir aquellas presencias, y fué entonces cuando ví a Risk, Jack y las dos chicas dentro de aquella burbuja de agua. Sentía a alguien más y no sabía si era amigo o enemigo. Di un pequeño gruñido, sin saber muy bien que ocurría, viendo como mi rey y la elegida estaban en un posible peligro.

Bajé lentamente con el dragón hasta comprobar que la distancia de salto era segura. El plan era caer sobre la copa del árbol más alto y poder espiar, para comprobar la situación y poder ayudarlos. No podía precipitarme.

- Tiradas (1)
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27/01/2013, 20:30
Director

| JUGADA MASTER |

Melpénome soltó una pequeña carcajada, sin dejar de mirar a Risk. Su rostro se volvió algo más amable y la sirena le hizo una pequeña reverencia con la cabeza.
- Incluso antes de que hablaras no tenía pensado entregarte, pero no deberías andar por la Tierra Media tan desprotegido... El Rey es muy ambicioso y desea tu trono por encima de todo. Bueno, con una excepción- empezó a decir la sirena, pero se detuvo repentinamente. La joya de Naida comenzó a brillar con gran intensidad. Tanto que se iluminó su rostro y todo lo que tenía a su alrededor, de modo que ya no servía de nada la postura que estaba manteniendo Míriel por ocultar a la elegida. La sirena sonrió ligeramente, sin inmutarse-. A eso me refería. Esa joya es lo único que supera tu trono, si no fuera por la existencia de ese colgante te perseguiría hasta la eternidad. Pero perdonadme, no me he presentado... Soy Melpénome, Reina de los Mares- añadió, haciendo desaparecer la burbuja que les retenía a todos, con un pequeño movimiento de su mano derecha.
- ¿Reina de los Mares?- preguntó Míriel, sorprendida, a pesar de los años que tenía de vida. Era obvio que nunca se había hablado en la Tierra Media de esa especie. Nadie conocía a las sirenas y eso les daba una ventaja. Era una raza muy poderosa, había quedado demostrado, y permanecer en el anonimato les había otorgado una larga vida de paz.
- Sí. Hemos estado siempre en nuestro particular universo, sin pronunciarnos ni posicionarnos, esperando a que llegara el día en que alguien naciera con la gracia y el poder que destruiría al Rey- dijo Melpénome, dedicándole una pequeña reverencia a Naida-. Mi deber es serviros, asegurarme de que no os sucede nada, y no puedo permitir que crucéis el río para adentraros en ese bosque. Si vuestro destino es la antigua Ciudad de los Elfos yo os proporcionaré un barco. Podréis llevar también a vuestros caballos en el interior pues es un barco bastante peculiar...- dijo Melpénome mientras movía nuevamente su mano.
Gracias a que el río era bastante ancho pudo hacer aparecer con su magia un barco, que había emergido del agua. El barco era impresionante pues llevaba sobre él un enorme castillo con varias torres, en tonalidades grises. Melpénome observó con orgullo el barco y volvió a dirigirse hacia Naida.
- Es un presente para tí, Naida... Quiero que el barco sea tuyo y lo utilices siempre que quieras... Es un barco mágico y te lo demostrará en cuanto lleguéis al mar- empezó a explicarle Melpénome, que seguía manteniéndose en el aire gracias a aquel chorro de agua que la elevaba-. Aquí no puede mostrar sus habilidades por la falta de espacio y profundidad... Pero creo que os será de gran ayuda si queréis navegar-.
 

Notas de juego

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27/01/2013, 20:51
Director

| JUGADA MASTER |

Walgior había conseguido ocultarse entre algunas malezas cercanas al río sin que nadie le detectara. Desde allí podía verlo todo mucho más claro y escuchar también lo que se decían.
Risk, Jack, las dos muchachas y una de las elfas más ancianas que residía en la Ciudad de los Elfos, Míriel, estaban atrapados en una burbuja que había creado una sirena que se mantenía en el aire gracias a un chorro de agua que salía desde el río Carhú. Se concentró en la conversación que mantenían y pudo comprobar que Míriel intentaba ocultar a Naida, que Risk se había interpuesto entre el grupo y la sirena, como si quisiera proteger a los demás. Sin embargo las cosas parecían calmarse.
- Incluso antes de que hablaras no tenía pensado entregarte, pero no deberías andar por la Tierra Media tan desprotegido... El Rey es muy ambicioso y desea tu trono por encima de todo. Bueno, con una excepción- empezó a decir la sirena, pero se detuvo repentinamente. La joya de Naida comenzó a brillar con gran intensidad. Tanto que se iluminó su rostro y todo lo que tenía a su alrededor, de modo que ya no servía de nada la postura que estaba manteniendo Míriel por ocultar a la elegida. La sirena sonrió ligeramente, sin inmutarse-. A eso me refería. Esa joya es lo único que supera tu trono, si no fuera por la existencia de ese colgante te perseguiría hasta la eternidad. Pero perdonadme, no me he presentado... Soy Melpénome, Reina de los Mares- añadió, haciendo desaparecer la burbuja que les retenía a todos, con un pequeño movimiento de su mano derecha.
- ¿Reina de los Mares?- preguntó Míriel, sorprendida, a pesar de los años que tenía de vida. Era obvio que nunca se había hablado en la Tierra Media de esa especie. Nadie conocía a las sirenas y eso les daba una ventaja. Era una raza muy poderosa, había quedado demostrado, y permanecer en el anonimato les había otorgado una larga vida de paz.
- Sí. Hemos estado siempre en nuestro particular universo, sin pronunciarnos ni posicionarnos, esperando a que llegara el día en que alguien naciera con la gracia y el poder que destruiría al Rey- dijo Melpénome, dedicándole una pequeña reverencia a Naida-. Mi deber es serviros, asegurarme de que no os sucede nada, y no puedo permitir que crucéis el río para adentraros en ese bosque. Si vuestro destino es la antigua Ciudad de los Elfos yo os proporcionaré un barco. Podréis llevar también a vuestros caballos en el interior pues es un barco bastante peculiar...- dijo Melpénome mientras movía nuevamente su mano.
Gracias a que el río era bastante ancho pudo hacer aparecer con su magia un barco, que había emergido del agua. El barco era impresionante pues llevaba sobre él un enorme castillo con varias torres, en tonalidades grises. Melpénome observó con orgullo el barco y volvió a dirigirse hacia Naida.
- Es un presente para tí, Naida... Quiero que el barco sea tuyo y lo utilices siempre que quieras... Es un barco mágico y te lo demostrará en cuanto lleguéis al mar- empezó a explicarle Melpénome, que seguía manteniéndose en el aire gracias a aquel chorro de agua que la elevaba-. Aquí no puede mostrar sus habilidades por la falta de espacio y profundidad... Pero creo que os será de gran ayuda si queréis navegar-.

Notas de juego

Como podrás comprobar, el barco no es nuevo para tí :P

Y aquí tienes a la sirena

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27/01/2013, 22:06
Naida

| RÍO CARHÚ |

Escuché con atención la conversación entre Risk y aquella sirena. Según decía era la Reina de los Mares pero me sonaba tan extraño todo... Jamás imaginé que existieran las elfas pero cuando explicó la situación de la raza comprendí por qué se desconocía su existencia.
Me quedé aún más fascinada cuando hizo emerger aquel impresionante barco que llevaba consigo un enorme castillo con varias torres.
- ¿Eso es para mí?- pregunté, con los ojos abiertos como platos-. ¿Por qué? Yo no sé navegar, nunca lo he hecho...-

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27/01/2013, 22:30
Risk

La aparición del barco lo dejó completamente sorprendido, aquella fortaleza marina era simplemente espectacular.

-Creo que hablo por todos los presentes cuando digo que agradecemos tu ayuda- entonces Naida habló tan sorprendida como el elfo y él no pudo más que emitir una pequeña carcajada al girarse y ver su expresión de asombro.  Esperó a que la sirena le respondiese Naida y entonces agregó -Melpénome, Reina de los Mares... Llegado el momento ¿Se uniría tu pueblo al nuestro para luchar contra el Rey?-  No sabía cómo preguntarlo así que lo hizo de forma directa.  Había estado evaluando la idea de Miriel y no le parecía nada descabellada, sería bueno, muy bueno que las sirenas se unieran a su causa, su mente inquieta comenzaba ya a pensar diferentes formas de pelear aquella guerra, por lo que sacudió levemente su cabeza y pestañeó para quitarlas de allí... por ahora

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27/01/2013, 22:50
Melpénome

| RÍO CARHÚ |

Sonreí al ver que les había dejado anonadados a todos, especialmente a Risk. Puede que los demás no hubieran visto mundo o no hubieran visto magia, pero un elfo tan acostumbrado a ella... Era fascinante ver cómo se sorprendía con mi magnífico poder de convocatoria.
- No importa si no sabes navegar. El barco tiene vida propia y su timón estará conectado a tu mente desde éste mismo momento. Es un barco mágico que obedece a los pensamientos de su dueño, en éste caso su dueña- le expliqué a Naida, con una sonrisa de oreja a oreja. Después me giré de nuevo hacia Risk-. Por supuesto que lucharé. Será un placer luchar por ella- dije, dedicándole una nueva reverencia a Naida, la joven que portaba el colgante y que era la destinada a salvarnos-. Siempre y cuando exista confianza entre nosotros- añadí, girándome hacia las malezas donde podía sentir la presencia de otro elfo más. Le hice una señal para que se acercara al grupo.

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27/01/2013, 23:00
Risk

| RÍO CARHÚ |

No entendió muy bien a que se refería la sirena, quizás a la actitud de Jack o de Miriel.  

-Debes comprender que la confianza es, en estos tiempos, algo... peligroso.  Sin embargo puedes estar segura que desde ahora la habrá entre los elfos y la gente de los mares-  Se acercó a la pequeña Naida y poniendo la mano en su cabeza le agitó el cabello en un gesto cariñoso.  -Qué dice mi capitán.  ¿Zarpamos?-

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28/01/2013, 00:13
Jack

|RIO CARHU|

Jack habia estado cuidando de Naida desde niña y su actitud hacia lo desconocido era defensiva, cosa logica teniendo en cuenta la actitud del rey. Por eso y ante la burbuja que les encierra respondio con palabras quizas agresivas.

Ahora al ver la actitud de la sirena y el resplandor de la joya, unido al magnifico regalo que les hace, que de seguro les ahorrara problemas, no le queda mas remedio que hacer una cosa.

Jack se arrodilla ante la sirena.

-Melpénome, lamento mi comportamiento sin modales hacia ti. Espero que consideres atenuante de mi comportamiento la proteccion de Naida, para mi es la labor mas importante y estoy con ella desde que nacio. El regalo que le haces a Naida nos facilita la labor a los demas y posiblemente salve la vida de alguno de nosotros que hubiesemos tenido que entregarla protegiendola por el otro camino. Asi pues quiero que consideres mi palabra de que si no obstruye mi labor de proteccion hacia Naida, podras contar conmigo si en algun momento lo necesitas.-

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28/01/2013, 01:01
Melpénome

| RÍO CARHÚ |

Sonreí al ver la reacción del hombre que en principio me había retado, que se había enfrentado a mí. No me había ofendido con tal gesto, aunque realmente lo hubiera hecho con mi ayudante. Había sido una prueba. Aquella sirena se había ofrecido a hacerse pasar por mí pues desde el agua no conseguíamos adivinar las intenciones que tenía el grupo. Cuando vi que no había peligro decidí mostrarme y no me equivoqué.
- En realidad todos te necesitamos precisamente para esa tarea que llevas a cabo desde que Naida era una niña... Te necesitamos para que le acompañes, para que la protejas, para que le muestres el buen camino siempre que se sienta perdida... No creo que nadie pueda pedirte algo más pues es mucho lo que estás haciendo. Nadie podrá reprocharte jamás que no hayas aportado cosas a la causa pues estás aportando una de las más importantes- le expliqué al hombre de la barba castaña, haciéndole una pequeña reverencia con la cabeza, pues para mí era igual de importante su vida que la mía-. ¿Podréis zarpar sin él?- le pregunté a Risk después de escuchar lo que le dijo a Naida. Con un gesto de la mano y con mi magia hice que se retiraran las malezas, descubriendo a un elfo que se ocultaba entre ellas.

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28/01/2013, 01:08
Naida

| RÍO CARHÚ |

Sonreí ante el gesto de Risk de alborotarme el pelo pero antes de que pudiera contestarle escuché lo que Melpénome decía, mientras el brillo blanquecino de mi joya me cegaba ligeramente. Le dedicó unas palabras muy agradables a Jack y me sentí eternamente agradecida hacia aquella sirena. Había dejado claro que la función de Jack era tan importante como la magia de cualquiera de ellos. Era igual de útil.
De repente, Melpénome se dirigió hacia alguien que estaba escondido entre las malezas y al ver a Walgior sonreí abiertamente. Sentí el impulso de correr hacia él y abrazarle, contenta de volverle a ver. Nos había salvado de la larga travesía del bosque, no podía estar más agradecida con él. Sin embargo otra cosa me vino a la mente.
- ¿Y tus amigos?- le pregunté a Walgior, borrando mi sornisa para mostrarme preocupada.
Walgior había dicho que acudía con su dragón a salvar a dos amigos suyos que se encontraban en peligro. ¿Qué habría sucedido con ellos?

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28/01/2013, 15:17
Walgior

| Río Carhú |

Escuchaba atentamente, sorprendido por aquella raza de sirenas. Majestuosas, sin duda. Un poder increible pude observar, mientras salía aquel barco-castillo. En mi rostro no se podría apreciar ningún cambio, ni de sorpresa o admiración, pero dentro de mí estaba increiblemente sorprendido.

Al ser descubierto salí de entre las malezas, escuchando a Naida hablarme.
-Estan escapando y seguro que bien.-le contesté.-Les eché una mano con un asunto, lo demás es pan comido.-pasé por alto el detalle de que mi dragón marchaba camino a la Ciudad Élfica, para dejar allí el cadaver de un elfo.
Entonces miré a Melpénome y asentí levemente en forma de saludo y respeto, que era lo máximo que se podía conseguir de mi.
-Todo por el bien común.-le dije, dejando entender que veía perfecto aquella alianza, que obviamente rodeaba a Naida y su colgante.