-Tio...David verdad?...no te ofusques colega, a mi me ha tratado divinamente...Dios...daria lo que fuera por tener de nuevo sus manos manoseandome.
Sonrie tirandose sobre su cama.
En realidad, le gustaria que otra persona estuviera alli.
Te quedaste en una sala muy pequeña, mediría 2x2 y tenía un par de sillas de plástico. El frío se te había metido hasta los huesos, y aunque ahora agradecieras la calidez de tus prendas, pequeños escalofríos todavía subían por tu espalda.
Pasó bastante rato. Ya no sabías cuánto, habías perdido la noción del tiempo, cuando finalmente la puerta se abrió y apareció un guardia, el mismo que estuvo ante la puerta cuando llegastéis.
- Hola Alex, si me acompañas te llevaré a tus dormitorios. - Te dijo con bastante amabilidad.
Estuvisteis caminando por varios pasillos, hasta que finalmente llegasteis a uno que tenía varias puertas. El hombre se acercó a una y te la abrió franqueándote el paso. En el interior del dormitorio habían varias camas en filas. Estaban cubiertas con unas colchas horribles. En la pared del fondo se podía ver una ventana con rejas gordas. Y a un lado del dormitorio, entre un amasijo de cosas, viste tu mochila.
En total había seis camas. En el dormitorio viste a Leo, Rubén, David y a otro joven que no habías visto todavía...
Esta vez le toca el turno de entrar a Alex...
Pues parece que la tipa lo que queria era castrarme y matarme de frio. Niego con la cabeza. Al principio pense que era buena persona, pero qué va... es cómo todos. Estoy realmente furioso, y yo a la tipa no le dije nada, lo que es que lo tratan a uno como si fuera ganado. Por lo menos si hubiera sido amable cuando me examino...
Sebastian tranquilo se vistió y fue hacia la sala. Sin decir palabra alguna. Estaba tranquilo y absorto dentro de si y no iba a dar señales de nada a nadie.
Te quedaste en una sala muy pequeña, mediría 2x2 y tenía un par de sillas de plástico. El frío se te había metido hasta los huesos, y aunque ahora agradecieras la calidez de tus prendas, pequeños escalofríos todavía subían por tu espalda. Mientras esperabas, por la misma puerta que acababas de salir, salió también Iván.
Pasó bastante rato. Ya no sabías cuánto, habías perdido la noción del tiempo, cuando finalmente la puerta se abrió y apareció un guardia, el mismo que estuvo ante la puerta cuando llegastéis.
- Hola Sebastian e Iván, si me acompañais os llevaré a vuestro dormitorio. - Os dijo con bastante amabilidad.
Estuvisteis caminando por varios pasillos, hasta que finalmente llegasteis a uno que tenía varias puertas. El hombre se acercó a una y os la abrió franqueándoos el paso. En el interior del dormitorio habían varias camas en filas. Estaban cubiertas con unas colchas horribles. En la pared del fondo se podía ver una ventana con rejas gordas. Y a un lado del dormitorio, entre un amasijo de cosas, visteis vuestras respectivas mochilas.
En total había seis camas. En el dormitorio visteis a Leo, Rubén, David, Alex y a otro joven que no habías visto todavía...
Llegaron a la habitación Sebastian e Ivan.
Sebastian entro sin hacer mucha alaraca y tomo su mochila la abrio y se fijo que aun estuviera dentro lo que el habia traido. Observo su cama, al menos ya podria descansar, hizo un gesto con la cabeza como agradeciendole a roberto, y sin mas se acerco a la que parecia ser su cama. Se sento en ella y se acomodo contra la pared de la misma. Realmente lo unico que queria sebastian era que el dia terminara. Y callado como hizo todo el dia se puso a esperar a q roberto se fuera. No reparo en el otro muchacho. No habia venido a hacer sociales sino a esperar el tiempo necesario para irse.
El hombre, hasta ahora el más amable, espero que no sea un pedofilo de ésos, me lleva hasta la habitación, donde hay unos cuantos chicos de los que ví antes...
-Gracias tio...- Le digo con una sonrisa al hombre que me guia y entro en la habitación.
Voy dónde mi mochila, y escucho el comentario de David.
-Joder, pues a mi me ha puesto cachondo; no sé si lo ha echo a posta o no, pero la tia tenía una sonrisita que no sé yo...- Digo riendome mientras abro mi mochila y reviso que esté todo.
Luego la tiro sobre una cama vacia, y me acerco a la ventana a ver si veo la habitación de las chicas, o la ventana que dé a su habitación para localizarla....
-Veis veis? a Alex le hizo lo que a mi, Buenoas tio, que? buenaza la Medico verdad?Está para hacer un favor tras otr. Ajajajajaja
Se incorpora al ver a Alex, e unicoq ue le habia caido medianamente bien en aquel lugar, exceptuando a Eduu, que se habia mostrado..indiferente, pero no un chuleras.
Pues a mi como que no me toco la misma, no sonrio ni un segundo, debe ser lesbiana.... digo quejoso... Me hubiera puesto cachondo si hubiera sido más delicada... en fin. Luego de un momento me siento en la cama y cambio de humor, me tranquilizo un poco y veo el cuarto este. Parece que esta habitación es para los que llegamos hoy, ¿o no?
- Bueno, para los novatos y para mi... - Digo saludando con la mano. No me había movido de encima de mi cama, esperando a que llegaran los muchachos.
- Por cierto, mi nombre es Edu. Y en teoría me han trasladado aquí por si teneis dudas sobre el funcionamiento del centro. - Ahora que están todos por fin digo con suficiencia mi función en ese dormitorio.
Al abrir tu mochila encuentras a faltar tu i-pod y el tabaco que llevaras. Además de notar que está revuelta toda tu ropa.
Me rio ante lo que dice el rubio... Todavía ni sé como se llaman, y aquí estamos, nuevamente reunidos...
Tio, pues a mi sí que me puso cachondo. Eso de que te tocara sin poderla ver... Umhhh!! Solo de pensarlo siento como empiezo nuevamente a empalmarme. Sonrío y me dirijo a comprobar mis cosas de la mochila...
Bien por los que lo disfrutaron. saludo con la mano. Soy David... ¿y este qué?, naaaaaaaa. De veras que este lugar parece el castillo de Harry Potter, pero versión de terror.
Mierda... Joder... ¿¿¡¡Serán hijos de puta!!?? No me lo puedo creer, han estado tocando mis cosas... Al abrir la mochila he comprobado que me faltaba la psp... Me cago en su puta madre... ¡¡¡Me han quitado la psp!!! ¡¡¡Que los jodan a todos!!!
Estoy tan cabreado que tiro la mochila y cogiendo la lámpara que se encuentra sobre la mesita la estrello en el suelo. Miro al resto con muy mala hostia.... Como alguien diga algo me lo como.
¿cómo?. Cuando veo la reacción de mi compañero comienzo a revisar el estado de mis pertenencias.
Al revisar tus pertenencias, te das cuenta de que falta tu mp3. Al igual que todo tu calzado le han quitado los cordones, y si tenías alguna correa, tampoco aparece.
PUTA MIERDA!. Se han llevado el mp3, dijeron en las instrucciones que uno podía llevar un objeto personal... !y te lo quitan! hay que ser cabrones!!!!!. Estoy furioso, lo unico que me calmaba era mi música, lo único.
Frustrado me siento en la cama y comienzo a putear mentalmente a media humanidad.
La puerta se abrió nuevamente. Allí se encontraban Roberto y Raúl. Este último mantenía la mirada fría.
Entró en el dormitorio Roberto, mientras Raúl se quedaba en la puerta, ocupando con su orondo cuerpo la entrada.
- Buenas noches, como supongo que habreis comprobado, vuestras cosas han sido registradas... - Hizo una pequeña pausa, mirandoos a cada uno de vosotros. - Si alguno de vosotros tiene alguna queja, personaos mañana por la mañana en intendencia, Edu os dirá dónde se encuentra. Y ahora, vais a ir al comedor... Haced el favor de calzaros y seguidme... -