Partida Rol por web

Thognar siente el calor y el regustirrinin de la energía divina recorriendo su cuerpo y cicatrizando las heridas, incluso se le erizan un poco los pelos de la barba, aún no estaba muy acostumbrado a ello. Sacude la cabeza y asiente al clerigo aunque sin quitar la vista del chucho huesudo - GRrrracias, ahorrra me encuentrrro mucho mejorr.

Vuelve a alzar el martillo con energias renovadas y trata de aplastar de nuevo al maldito perro infernal restante. 

parece que el combate casi termina... - Miro a mis compañeros cercanos. - creo que deberíamos darnos un aire en esta habitación

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Centrado en atacar al paladín, que le estaba golpeando con la maza, el perro esquelético trata de morderle una vez más, ahora que ya no tenía la protección de la pared. Sin embargo, el golpe anterior le había dejado un poco aturdido y sus dientes no consiguen encontrar un hueco en la armadura.

Bravo Anur.

Piensa la pelirroja norteña ante las voces de Thognar que sugieren que la cosa marcha bien. Otro crugido de huesos se deja escuchar por las escaleras.

  - ¡Tralarali, tralarala, yo voy allí!.- dice el mediano mientras saca una piedra de debajo de su justillo, arrojándola sin cuidado hacia el perro. El impacto, débil pero certero, acierta en la cabeza del lobo que mira a un lado y a otro sin saber de dónde le ha venido la bala.

  - Parece que el combate casi termina... - Miro a mis compañeros cercanos. - Creo que deberíamos darnos un aire en esta habitación.

 Thognar siente el calor y el regustirrinin de la energía divina recorriendo su cuerpo y cicatrizando las heridas, incluso se le erizan un poco los pelos de la barba, aún no estaba muy acostumbrado a ello. Sacude la cabeza y asiente al clerigo aunque sin quitar la vista del chucho huesudo - GRrrracias, ahorrra me encuentrrro mucho mejorr.

Vuelve a alzar el martillo con energias renovadas y trata de aplastar de nuevo al maldito perro infernal restante. Pero la pared está en su contra y detiene de nuevo el ataque al can.

Da un rapido paso al costado, como cediendo lugar al enano para que le asista... Pero en realidad, aprovecha la momentanea distraccion del canino para trazar una n sobre su cabeza con la maza, golpeando el lomo de la criatura...

La criatura emite un sonido gutural y se desploma sobre el suelo. La maza de Anur ha acabado con sendas criaturas infernales y ahora el paladín puede mostrarse orgulloso de ello.

La fiesta no había acabado. El clérigo, que aún no había conseguido salir desde la parte trasera, intenta hacerse paso hacia el can no-vivo, ahora caído en el suelo, apartando de su camino con gentileza a Thognar y Anur. -

¡Abridme paso! ¡Voy a mandar a ese monstruo adónde se merece!

- Cuando lo tuvo en línea de visión, cerrá los ojos por unos instantes para luego abrirlos de golpe mientras estiró la mano, con el sello de Lathander en ella.

¡Regresa a los avernos, criatura del mal!

Una energía dorada, proveniente de la fe del clérigo, se materializó en la mano de Aaron mientras el símbolo de su dios vibraba con fuerza en la palma de su mano. - ¡Ahh! -  Gritó, concentrándose para devolver a ese conjunto de esqueletos a su lugar de origen. Vamos Lathander, préstame tu favor una vez más.

Los perros dejaron de moverse. La fueza que los había animado cesó de pronto y el montón de huesos cayó de manera desordenada al suelo. El clérigo sonrió al paladín, contento también de que las criaturas animadas ya no fuesen tal y que los perros que habían sido antaño ahora pudiesen descansar tranquilos.

Thognar suspira pesadamente al ver que el rubiales no le ha dejado ni las migas. Para colmo el clérigo termina de rematar los espasmosos huesos que aun se retorcian por el suelo.

Prrrrrrrrrrrrrrr.........

¡BAh! Solo errrrrran perrrrros....

Gruñe, molesto por sentirse inutil. Mientras el clerigo y el paladin estan aun entretenidos Thognar avanza un poco hacia el comienzo de la siguiente escalera y husmea el aire, mirando hacia abajo.

El siguiente será mio, seguro que es más grande, más feo y más peligroso. 

 El cese de los sonidos propios de la escaramuza terminan, la pelirroja da un vistazo por encima de sus compañeros intentando ver algo, mas no es posible, no hasta alcanzar el espacio donde se ha sucedido el encuentro.

 La agitación de sus compañeros mengua y todo regresa a la normalidad.

 - Continuemos el descenso, aquí no podemos combatir bien, necesitamos más espacio. ¿Estaís todos bien?

Me pasé la mano por la frente, había sido una situación bastante tensa. El hecho de no ser un combate abierto me había descolocado totalmente. Ha sido difícil, por suerte Lathander nos ha acompañado esta vez. Gracias señor mío. ¿Quién está herido? Fijé mi vista en Anur que había luchado cara a cara con la criatura. Anur, compañero, amigo. ¿Necesitas asistencia? Has hecho un combate fenomenal. Le dije, con sinceridad.

Bajé junto a los demas a la habitación y me acerqué a Anur esperando respuesta.

Compañeros, esperemos a que Anur pueda asistir a los heridos, quizás un leve descanzo tampoco venga mal - El mago se acomoda sus ropajes y los sacude un poco para sacar el polvo - Thognar, que puedes decir de esta estructura rocosa? tienes idea de donde estamos? Osea, seguimos bajo el cementerio?

            ¡Qué aburrido ha sido este combate, el estirado parecía que estaba sacudiendo la ropa, como hacia mi madre…!

Aron, ¿dónde aprendiste a sacudir ropa tan bien? No es que lo hagas tan bien como mi madre, claro, pero para ser tan larguirucho no se te da mal… Señor enano- dice mirando muy serio a Thognar.- creo que debería dejar de esconderse detrás de las paredes, o puede que el estirado piense que es un cobarde.- Mientras se encoge de hombros el mediano se acerca hacia la escalera y comienza a bajar de forma casual, aunque aparentemente sigilosa.

Tiro mientras bajo por la escalera, viendo con la vision de los medianos y la luz de la antorcha de arriba. Si hay algo feo me escondo xD

Sacude el polvo de hueso que mancha su maza, mientras se mantiene junto a la pared lateral, dejando que el resto se vallan reuniendo en el rellano.

- Un combate mas, sencillamente... +contesta con aplomo al clerigo. + No te preocupes por mi, puedo encargarme de esto tambien.

Guarda la maza en su cinto, y suavemente aplica la diestra sobre el desgarron que lograra hacer el canino, en una de las pocas hendiduras de su armadura de placas. Acaricia la herida, cerrandola rapidamente bajo sus suaves dedos... Mientras tanto, contesta al mediano.

- Nunca en la vida he sacudido ropa... solo a los que la portan. Ahora... trata de apartarte mas rapido la proxima que maese enano o yo debamos trabajar. Salvo que prefieras enfrentar los proximos horrores tu...

Sonrrie ligeramente al decir esto... Hace una señal a Thognar, de que le siga como es habitual, mientras el vuelve a equiparse con la maza y unirseles, el tercero.

Asiento ante las palabras de Anur, observando como se cierra él mismo su herida. De acuerdo, recuerda que puedes contar conmigo. Saqué mi odre de la mochila y le di un trago, sediento. Pensaba en quién sería el que había hecho todo esto y por qué motivo. Tenía ganas de avanzar y sacar conclusiones. Tenía que castigar a la persona o ser que había hecho todo esto. Lathander me dará fuerzas para ejercer el bien, su fe es nuestra espada y su ley nuestro escudo. Nuestro grupo está a salvo una vez más gracias a él.

Esperé la iniciativa de los demás para seguir avanzando, allí no había nada interesante. Parecía un tramo normal y corriente sin mayor complicación, no había que pararse a investigar. O al menos, eso pensaba Aaron.

Thognar gira la cabeza hacia el mago y se rasca la barba ligeramente- Clarrrrro aun seguimos debajo del cementerrrrio , hemos descendido perrro no avanz....- pero el mediano termina pasando a su lado y sacandole de sus casillas al llamarle cobarde. No habia peor insulto para un hijo de las montañas. Los pelos se le erizan y los mofletes se le inchan de indignación.

¡Me cago en tus diminutos padrrrres!! ¡Yo no soy ningun cobarrrrde! ¡VEN AQUI TE VOY A... ·$%& ! 

Tras ello y a pesar de algunas heridas en la pierna que aun tiene, le sigue por la escalera muy cabreado armando gran alboroto, intentando darle alcance.

Este pequeño no sabe respetar las habilidades de sus compañeros combatientes - Bueno, si todos quieren avanzar, creo que será lo prudente. - Avancemos pues.

 La pelirroja se ubica en el rellano, acercándose al nuevo paso oteando las oscuridad impenetrable, aún quedaba mucho por hacer. Entonces siente las palabras de Therion y eso le hacer fruncir el entrecejo.

 - Thognar ha demostrado sobradamente sus agallas y capacidad, ya fuera con los esqueletos o los lobos. No tienen sentido tus palabras Therion. En cualquier caso ahora no es el momento de ver quien la tiene más larga. Centrémonos y terminemos la búsqueda.

La tensión del grupo es palpable, todos saben que los peligros que han enfrentado probablemente no sean nada comparados con los que han de venir, y sus recursos ya se han visto claramente mermados, la reacción de todos ellos ante el chiste del inconsciente mediano es prueba de ello. Para cualquiera menos para Therion.

Miré a Therion, sin intención de recriminarle nada. Por un momento iba a abrir la boca para hablarle pero en ese momento pude ver las heridas de Thognar, ahora de cerca. Algunas no habían cicatrizado del todo y parecía no encontrarse completamente bien. Me acerqué a él y le puse una mano en su pequeño hombro de enano. Sonreí mientras mi mano derecha comenzaba a brillar.

Creo que aún no estás a pleno rendimiento, será mejor restablecerte por completo. Eres una de nuestras fuerzas principales, en cierto modo, dependemos de ti. Tras haber dicho esto, puse mi mano en su pecho y la luz comenzó a plasmarse por todos cortes, arañazos y magulladuras que aún le quedaban al amante de la cerveza. Poco a poco todo comenzó a eliminarse quedando solo la piel del bárbaro perfectamente intacta.

Volví a sonreír haciendo una breve plegaria a mi dios en agradecimiento. Tus cuidados nos hacen seguir adelante. Recuerda, Lathander nunca te abandonará si sigues como ahora, por el buen camino, estos son los beneficios de hacer el bien. Tener compañeros que velan por ti y que Lathander te sea favorable. Ya puedes volver sin miedo a tus bravuconerías, solté una pequeña risa y me alejé de él.

Entonces... ¿seguimos?

Una vez finalizado el combate es el enano el primero que se acerca a las siguientes escaleras. Los muertos vivientes que les estaban esperando en cada esquina, hacian que cada paso costara una barbaridad. El enano no era un cobarde, sin embargo no había bajado las escaleras.

Sin faltarle demasiado, pero con cierta burla, el mediano pasó por el lado del enano y bajó un poco las escaleras, oteando la siguiente habitación que se encontraba un par de metros más abajo. Anur le regañaba mientras sanaba sus heridas gracias al poder divino de Sune y el clérigo y el mago esperaban pacientes a que el grupo avanzara.

De pronto todo se lía un poco, el enano da unos pasos hacia el mediano con claras intenciones hostiles mientras pega unos gritos escandalosos. El clérigo, preocupado por el grupo, decide tomar la iniciativa, detiene al enano con el brazo y sana una vez más sus heridas.

Mientras tanto, Therion ha desaparecido en las sombras...