Partida Rol por web

Aquella serpiente de ser una simple molestia se había convertido en un problema. No tenía idea de como demonios el tipo de rojo había usado ese poder pero Cable intuyó que eliminando la fuente el problema podría desaparecer. No pudo contestar a Coloso ya que sus esfuerzos se concentraron en localizar la ubicación de la mente de demonio a la cual no había podido acceder.

Pese a la densa niebla que les envolvía y el aullido de los espectros, tratar de alcanzar a Rhino no era una tarea realmente complicada. Su enorme tamaño y sus gruñidos le delataban en todo momento su posición, por lo que una vez más, Coloso proyectó su puño como si de un misil se tratase, buscando tumbar de una vez por todas al enorme villano.

De nuevo sonido del impacto resonó como la fuerza de una explosión. Una fuerza imparable chocó contra un muro indestructible y pese a que anteriormente Coloso había logrado imponerse sobre el hombre rinoceronte, las cosas habían cambiado. De alguna forma, el gigantesco villano absorbió el impacto y alzando el puño, lanzó un brutal contraataque.

Con un bramido de furia, su puño pasó lejos de coloso y atravesó uno de los contenedores vacíos. Las oscuras artes de Loki le mantenían totalmente cegado y simplemente podía lanzar golpes al aire y rezar para que uno de ellos, lograse alcanzar a su rival metálico.

Cable extendió sus sentidos para tratar de captar las mentes de aquellos que le rodeaban. Pese a la densa niebla que le rodeaba, pudo percibir con claridad la posición de Loki, Coloso y Rhino. También detecto otra mente que por su posición, debía de ser la del Shocker. Por último, detectó tres mentes más en la zona. Una de ella se encontraba a unos quince metros de Coloso. Las dos restantes se encontraban bastante cerca la una de la otra, pero de golpe una de ellas simplemente se desvaneció. 

Como si la propia realidad se viese de pronto alterada, la oscura gran sierpe, la niebla y los espectros simplemente dejaron de existir. Los Exiliados volvían a disfrutar de sus sentidos y haciendo gala de ellos, pudieron ver a los lejos como Calavera, ataviado con unas gafas de visión térmica, acababa de apuñalar a un hombre con un extraño traje verde, que portaba una capa de color morado un y...¿Una pecera en la cabeza?

Demonio, que era la figura que estaba a pocos metros de Coloso, avanzaba con rapidez tratando de tomar desprevenido al titán de metal. Su destreza marcial, su velocidad, resistencia y domino del combate cuerpo a cuerpo, sin duda habrían puesto en aprietos al Soviético. Pero Cable no deseaba perder el tiempo con intercambio de golpes y proyectó con todas sus fuerzas un ataque psiónico contra el cual, Demonio no estaba preparado. La fuerza del impacto fue tal, que le hizo caer inconsciente al suelo al tiempo que un manantial de sangre comenzaba a surgir de su nariz.

La situación iba evolucionando: Calavera había acabado con el problema visual, Rhino estaba cegado por Loki y un tipo al que llamaban Demonio estaba dirigiéndose hacia Coloso con la esperanza de acabar sigilosamente con él. No iba a tener suerte esa noche.

-¡Cable, ahora este! -exclamó refiriéndose a Rhino.

Alguien como aquel enorme saco de músculos era normalemente un descerebrado y, por el comportamiento que le estaban viendo, Rhino no iba a ser la excepción. Un mentalista como Cable no iba a tener muchos problemas para acabar con él y ahora que había quedado libre, era el momento de ir zanjando asuntos...

Acto seguido, el soviético se separó de la otra mole para encararse hacia Shocker, haciéndose con un enorme pedazo de asfalto de los que se habían desprendido durante la lucha de los dos titanes enfrentados y lo lanzó con todas sus fuerzas como si de un fresbee se tratara. Si bien Rhino tenía la capacidad de absorber al menos parcialmente la potencia de los golpes de Coloso, Shocker no parecía tan preparado...

El escaneo mental del área le desconcertó, había alguien más allí en medio del combate, una mente más que no tardó en desaparecer en el mismo instante que desapareció esa mente. Había estado errado pensaba que demonio era el causante de la serpiente y todo lo que a ella la envolvía pero Calavera había ido directo al problema para eliminarlo de raíz. Una vez desaparecida la niebla no tuvo para identificar la mente de Demonio y acabar con aquella enigmática figura cuya mente no había alcanzado anteriormente. Atacó con todo evitando que esa mente le volviera a eludir y cuando esté cayó seco ante su ataque. Se dió cuenta de que los pensamientos que había intentado detectar antes era otra ilsuión más. Aquel mundo no hacía más que desconcertarle más y más.

Quedaban dos peones en el tablero y era hora de eliminarlos. Ante la orden de Coloso recurrió a fundir la mente del gigantón con cuerno en la cabeza.

Por fortuna aquella niebla desapareció mucho más rápido de lo que cabría esperar, realmente Loki no sabía muy bien qué hacer ante aquello, pero pudieron salir de eso fácilmente. Ella mantenía su conjuro sobre Rhino que aprecia bastante afectado con esto, mira hacia un lado y puede ver las acciones de sus compañeros, la Asgardiana estaba usando varios hechizos al mismo tiempo y en cierta forma eso le costaba, pero tenían que terminar con la situación lo antes posible, por ello decide colocarse cerca de Rhino pero asegurándose de tener detrás algo especialmente duro y resistente, se concentra para que toda su energía mágica se concentre en hacerse intagible y hace desaparecer el conjuro que estaba usando en esos momentos para nublar la vista de Rhino mientras apunta y lanza su rayo mágico y dice:

Oh pequeño cornudo creo que eres el más inútil de todos tus compañeros.

La idea de Loki era la de usar su ataque y la provocación para distraer al mastodóntico Rhino y que estuviera atento a ella y así Cable tenerlo aún más fácil, aun así si, su compañero no lograba terminarlo esperaba que el ataque mágico y el golpe que se daría tras atravesarla fuera suficiente para atontarlo lo suficiente para que Cable pudiera terminar con él.

Liberando a Rhino de su hechizo, Loki le provoca con palabras a la vez que proyecta una descarga de energía arcana contra el gigantesco villano. El haz de luz surca las distancias con cegadora velocidad y logra causarle una fea quemadura en el cuello. Que pese a molestarlo, está lejos de suponerle un verdadero impedimento. Por otro lado, el truco de Loki surge efecto y sin dudarlo ni un instante, se lanza a por ella inclinando la cabeza, más que dispuesto a ensartarla y aplastarla.

Su sorpresa es mayúscula cuando la atraviesa sin causarla daño alguno, choca contra uno de los contenedores, lo atraviesa y termina de cabeza en las frías aguas del río. Aprovechando ese momento de desconcierto, Cable proyecta una vez una ráfaga psiónica que pese a no lograr tumbarlo, lo deja aturdido y malherida. La resistencia de Rhino es impresionante y está demostrando resistir una gran cantidad de daño.

Coloso, tomando el control de la situación, decide cambiar de objetivo y dejar que otro se encargue de Rhino. Pero lejos de mantenerse apartado de la acción, toma un pedazo de asfalto y lo proyecta contra Shocker. El ataque le pilla desprevenido y pese a que logra alzar sus brazaletes y proyectar una poderosa descarga de energía, tan solo logra reducir en parte el tamaño del proyectil arrojado. Para su desgracia, la titánica fuerza de Coloso unido al tamaño y peso del trozo de asfalto es más que suficiente como para derribarlo y dejarle bastante malherido.

El recuento es bastante sencillo, Mysterio ha sido asesinado por Calavera, quién sin un solo ápice de piedad en su mirada avanza caminando lentamente hacia demonio a la vez que desenfunda su revolver. El líder del cuarteto de villanos, aquel que ha sufrido la derrota más rápida y humillante, permanece totalmente inconsciente. Shocker yace en el suelo soltando quejidos de dolor debido a las fracturas que el ataque de Coloso le han causado. Rhino chapucea como puede en las frías aguas del río, aturdido y sin demasiados ánimo de continuar luchando.

Los Exiliados se alzan una vez más con la victoria.

Un ligero resplandor envuelve el brazo de Coloso, cuando el Tallus parece activarse o más bien, reaccionar ante algo. No tienen que esperar demasiado para ver como a unos escasos metros de donde se encuentran, un resplandor provoca la aparición de varias figuras. Las cuales todas portan un Tallus en sus brazos.

La primera figura, Ronan el acusador, armado con su martillo de guerra, trata de alejarse del resto lentamente sin darles la espalda en ningún momento. El kree, pese al orgullo tan propio que le caracteriza, parece simplemente aterrado.

-Doblegados bajo el peso de las cadenas de la esclavitud, los Kree no erais más que meros insectos que Thano pisoteaba por diversión. Exterminé al titán loco y os di la libertad a cambio de vuestra lealtad. Os mostré las maravillas del multiverso y lo único que recibo a cambio es el amargo sabor de la traición.

El hombre que lidera al grupo de recién llegados, el hombre que aterroriza a Ronan más que la propia muerte es alguien que Cable conoce bien...o al menos, una de sus versiones. Se trata de Scott Summer, más conocido como Cíclope.

-Debías de localizar a mis hermanos Exiliados e informarme de inmediato, pero te has limitado a manipular a los habitantes de esta realidad para que traten de matarlos. Eres acusado de alta traición, Ronan el acusador ¿Cómo te declaras?

El Kree detiene su avance, toma el aire para finalmente alzar su martillo y apuntar a Cíclope con él. De alguna forma ha logrado reunir una pizca de valor para hacerle frente.

-Hice lo que tenía que hacer para protegerte, mi emperador. Los Exiliados no te seguirán, jamás lo han hecho y estos no serán diferentes. ¡Tan solo cumplí con mi deber para con mi emperador!

Durante lo que parece toda una eternidad Cíclope guarda silencio y contempla la figura del Kree. Una brizna de respeto despierta en él al contemplar el valor que Ronan reúne para osar hablarle de aquella forma. Pero su crimen está claro y el castigo debe de ejecutarse.

Cable ha contemplado en decenas de ocasiones el poder que su padre era capaz de esgrimir, pero nada le prepara para ver el verdadero poder desatado de Cíclope. Alguien le dijo en una ocasión que cíclope siempre se contenía a la hora de usar su propio poder, incluso que la necesidad del visor era una autilimitación impuesta por su propio psique. Pero el hombre que se alza hoy ante ellos carece de tales limitaciones y proyectando un haz de energía capaz de desintegrar el propio adamantium, simplemente termina con la vida de Ronan dejando tan solo un rastro de cenizas que el viento no tarda en arrastrar con él.

-La traición es imperdonable y mi deber para contigo es aplicar la ley.

Tras Cíclope se alzan tres figuras más, la primera de ellas y quizás la más notoria es la de Gladiador. Loki la reconoce gracias a sus estudios, en su realidad al menos, Gladiador era el líder de la guardia imperial Shi´ar. Sus poderes estaban fuera de toda escala posible y se le consideraba una de las figuras más poderosas y peligrosas del universo.

Junto al imponente Gladiador se encuentra una preciosa mujer piel azulada. Sus largos cabellos del color de la nieve se encuentran recogidos en un moño sostenido por dos agujas metálicas. Sus ojos, del color de la sangre resultan tan cautivadores como peligrosos. Un ceñido mono de moléculas inestables de color azul oscuro, logra realzar aún más si cabe su voluptuosa figura.

Por último, el más anodino miembro del grupo resulta también ser el más joven. De cabellos rubios y piel pálida, parece sumergido en sus propios pensamientos. Al igual que sus compañeros, porta un uniforme de tonalidades oscuras. 

Con la "amenaza" de Ronan resulta, Cíclope se dirige a los Exiliados. Su voz es tal y como la recuerda Cable, aunque tan vez un tanto más oscura y pausada.

-Saludos, Exiliados. Lamento que hayáis sido testigos de semejante acto, pero los actos de Ronan debían de ser castigados. A través del Tallus trató de provocar que os mataseis los unos a los otros.    -Pronuncia cíclope.    -Permitid que me presente, nací con el nombre de Scott Summers, pero en mi bautismo de fuego se me concedió el nombre de Cíclope. Él es Kallark, renacido como Gladiador, mi más leal y fiel protector. Las hermosa dama que nos acompaña es Vanesa, bautizada como Copycat. Por último, el joven silencioso al que nada escapa es Aaron, bautizado como Cifra. 

Gladiador se limita a cruzarse de brazos y a realizar un sutil asentimiento con la cabeza. Copycat muestra una cálida sonrisa y les guiña un ojo divertida. Cifra en cambio, alza la mirada al escuchar su nombre, posa sus ojos vacíos y carentes, al menos en apariencia, de alma alguna en los exiliados y vuelve a bajar la mirada al suelo.

-Somos exiliados, pero a diferencia de vosotros, conocemos la verdad. Os hemos estado buscando con el único propósito de contaros la verdad y ofreceros la oportunidad de elegir que Morfo y el resto no os arrebató.

Lo que acababan de hacer los caballeros recién aparecidos en esta realidad tenía un nombre: ejecución sumarísima. Coloso, proveniente de un régimen de facto totalitario (pese a que fuera muy paternalista, sobre todo con los mutantes), no estaba completamente en contra de este tipo de actos. Además, era militar. A diferencia de otras realidades, el Coloso soviético que los Exiliados tenían ante sí había participado de actos de guerra, endureciéndose considerablemente por el camino también a nivel mental, no sólo físico.

Con todo, parecía haber una razón subyacente para tal acto, al parecer aquel "Acusador" estaba acusado de traición, de tratar de engañarnos para que nos matásemos entre nosotros. Sólo por eso se merecía el final que había tenido, al menos para Coloso. No había inquietud en su actitud allí de pie ante los nuevos exiliados, más allá del hecho de la demostración de poder que había hecho Cíclope.

-¿Cuál es esa verdad de la que Morfo nos ha privado? -inquirió en inglés Coloso con su fuerte acento ruso regando cada palabra.

El plan de Loki había funcionado a la perfección, sin duda aquel tipo era todo un descerebrado y la mirada de este cuando la atravesó sin duda era todo un poema, algo que hizo que sonriera, pero todo lo que fue sucediendo a continuación le dejo un poco sin palabras, realmente no podía entender muy bien que era lo que estaba pasando, solo sabía una cosa, que conocía a uno de esos tipos y era realmente poderoso.

Tímidamente se acerca un poco al grupo de Exiliados y dice tímidamente:

Esto… yo soy Loki es un… ¿placer?

No podía evitar dejar de mirar de reojo a Gladiador, sabía que en su realidad era un auténtico peligro y miembro de la guardia imperial Shi´ar pero si algo había aprendido en esos pequeños viajes es que las cosas podían cambiar mucho ya que si no recordaba mal, incluso ella era un malvado en la primera realidad que visitaron, o al menos por lo que les dijeron allí, aunque ella nunca llego a verlo realmente, aun así esperaba que Gladiador no fuera como el de su realidad.

Esto… no entendemos muy bien que es lo que ha sucedido y que es lo que dicen

Aún estaba reticente y no dejaba de mirar de reojo a Gladiador alerta, sabía que tenía que tener cuidado por si era como el de su realidad. 

Tras la derrota de aquel que había creado la oscuridad consiguieron vencer sin problemas. Pero para lo que iba a suceder nadie le había preparado el Tallus de Coloso reaccionó ante varias figuras que aparecieron de la nada, todas ellas portando un Tallus en sus brazos. Una voz familiar se alzo sobre las figuras, una vo que conocía de primera mano, su corazón se paró y se quedó helado ante las figuras que estaba contemplando.

Palabras de traición y la fuente de la manipulación que habían sufrido parecían esclacerse bajo las palabras de defensa que decía el tal Ronan. Sus ojos pasaron a la figura de Ciclope, su padre, lo tenía ante él, sabía que no era el que él conocía, sin embargo, allí estaba con el mismo semblante serio que le caracterizaba. Un halo de horror le sobrevino. El Guardian. Nunca lo había visto en persona, encargado de comandar a las fuerzas que acabaron con su familia y allí estaba quieto, imponente detras de la figura de su padre. Apenas pudo fijar su mirada en las otras dos figuras, estaba absorto cuando comenzó a proyectarse una energía desenfrenada saliendo de la cara de Scott. ¡Padre, no...! se le escapó un gritó que fue cortado al recibir las sensaciones de la figura que acababa de desintegrarse delante de ellos. Su padre nunca hubiera llegado a ese extremo.

Cayó de rodillas, frustrado sin saber que hacer o decir.

Envuelto en un aura de confianza y seguridad, Cíclope camina con paso firme hasta Cable. El líder de aquel grupo de Exiliados tiende la mano al telépata invitándole a ponerse en pie.

-Su castigo debía de ser ejemplar y acorde a sus actos. Tomar una vida jamás en sencillo, pero en ocasiones debe de hacerse para evitar futuras calamidades.

Los gestos, la apariencia e incluso la voz son como las del hombre al que una vez llamó padre. Pero el alma del hombre que hoy se alza ante ellos está gobernada por el hielo. Es sencillamente como si Cíclope tuviese todas y cada una de sus emociones bajo un control absoluto...o sencillamente careciese de ellas.

-No sois el primer ni único grupo de Exiliados. Existe un lugar más allá del espacio y del tiempo, donde se alza un palacio de cristal, que actúa como una especie de nexo y observatorio de todas las realidades. Hace años un grupo de alienígenas lograron llegar hasta él. Sus acciones jamás tuvieron como fin causar daño alguno, tan solo les gobernaba una insaciable curiosidad. Eran exploradores pacíficos, pero comenzaron a manipular los sistemas del palacio y de alguna forma, dañaron el equilibrio que existía entre las realidades. Incapaces de arreglar su error y gracias a la información que el palacio les otorgaba, reclutaron a los primeros Exiliados cuya misión sería ir viajando de una realidad a otra tratando de arreglar su destrozo.

Cíclope habla de forma pausada dotando a cada palabra, a cada frase de la importancia que merece. Realmente parece que los considera unos hermanos a los que respetar, pese a no conocerlos en absoluto.

-Con el paso del tiempo los Exiliados lograron llegar hasta el palacio de cristal y tras varias aventuras, acabaron dirigiendo ellos mismos las misiones. Incapaces de arreglar el multiverso por si solos, comenzaron a reclutar a otros equipos. Todos fuimos sacados de nuestras realidades y obligados a viajar de una a otra en una lucha sin fin. Morfo es...era uno de los pocos Exiliados originales que aún continuaban en activo, dirigía las operaciones desde el palacio de cristal. Por lo que en esencia, él es uno de los culpables de vuestra actual condición. Todos vosotros habéis sido arrancados de vuestra realidad y obligados a combatir contra rostros de antiguos aliados, enemigos e incluso, amantes. Al principio vuestras misiones harán que vuestro espíritu heroico os haga sentir bien, pero con el paso del tiempo, llegaréis a realidades donde deberéis de cometer actos de lo más deplorables para poder seguir avanzando. Lucharéis, sangraréis y perderéis a compañeros tan solo para que otras realidades puedan seguir existiendo. Seréis figuras anónimas que nadie recordará y llegará un momento en el que desearéis que todo esto llegue a su fin, pero jamás lo hará.

Los Exiliados no necesitan ser unos genios para darse cuenta de cuanto aborrece a Morfo y la propia condición de los Exiliados. Siente todo aquello como una gran prisión de la que no pueden escapar y tal vez en el fondo, tenga razón.

-Nosotros fuimos el primer grupo que los Exiliados originales reclutaron, aunque al principio nos mintieron con el paso del tiempo descubrimos la verdad. Pero para entonces, habíamos perdido a dos de nuestros compañeros y habíamos tenido que tomar decisiones que siempre pesarán sobre nuestras consciencias. Pero un día simplemente dijomos ¡Basta!. Ahora se acabó el continuar viajando por las realidades sacrificando nuestras vidas y creencias. Hemos tomado el control del palacio de cristal y ahora nosotros decidimos que hacer con el multiverso. Por lo que sabemos, existen una cantidad infinita de realidades y aunque la mitad de ellas fuesen destruidas, nada cambiaría en el multiverso. ¿Así que para que seguir luchando? Tenemos un don, hermanos. Mi propuesta es sencilla, uniros a mí y dejaremos de ser esclavos o prisioneros, para convertirnos en los guías del multiverso. Existen realidades que al igual que esta que están dominabas por el mal absoluto. Vuestra misión original era vencer a Kingpin, lo cual provocaría que las grandes facciones criminales que él controla acabasen entrando en guerra. Miles morirían y tras diez años de dolor y miseria, llegaría por fin una nueva época de prosperidad para este mundo. Pero para entonces, miles, puede que millones de vidas habrían quedado destrozadas. ¿Acaso eso es un arreglo para esta realidad?

Retirándose el visor, todos contemplar el color carmesí y brillante de la energía que resplandece en sus ojos de Cíclope. A diferencia de su contrapartida en otras realidades, posee tal control de su poder, que puede manipular los rayos ópticos a su antojo. Por lo que perdiendo intensidad poca a poco, el brillo escarlata termina por disiparse. Su mirada, llena de determinación se posa en cada uno de los exiliados.

-Mi propuesta es la siguiente hermanos, convirtámonos en guardianes y señores de cada mundo que visitemos. Tomemos su control y marquemos una nueva era en cada uno de ellas. Después, usaremos los recursos de cada realidad conquistada para adueñarnos de otra. Traeremos orden al caos y haremos lo que creamos oportuno, no lo que el palacio de cristal nos dicte. Os ofrezco la oportunidad de uniros a mi círculo de confianza y que os convirtáis en mis generales. Cada realidad que tomemos quedará bajo el control de uno de mis generales, la cual podrá ser gobernada a su antojo. Pero cuando os reclame, acudiréis sin dudar. También os ofrezco la oportunidad de regresar sencillamente a vuestros hogares con el juramento de que jamás atacaremos vuestra realidad, quedará fuera de forma permanente de nuestra conquista. Sé que el acceso a vuestras realidades está cerrado, pero Cifra es capaz de encontrar el camino hasta ellas. Por lo que os ayudaremos a regresar a vuestro hogar si preferís dejar atrás la senda de los exiliados.

Coloso, aquel coloso soviético y marcial, fue el primero en tomar la palabra, en responder a la propuesta de aquel frío e insensible Cíclope.

-Quiero volver a casa, señor Summers. Quiero ver a mi hija. Si lo que dicen es cierto, debo regresar. Devuélvame a mi realidad, nunca elegí ser un Exiliado, mi lugar está junto a mi mujer e hija.

Así era, Coloso, Piotr, lo había dicho durante aquella cena que compartieron, bajo el influjo del alcohol. Había tenido que dejarlo todo para arreglar el multiverso y asegurarse que su hija tuviera una realidad donde poder crecer. Una hija recién nacida, bebé. Ahora, ofreciéndole volver a casa, ¿qué padre no lo haría?

Aunque el hombre que lo ofrecía fuera poco menos que un tirano megalomaníaco, o alguien a punto de convertirse en uno, conquistando (o tratando de conquistar) el multiverso. En cualquier caso, si lograba que su realidad quedase fuera de la guerra...

Loki escuchaba atentamente las palabras de Ciclope, al principio atenta y con gran curiosidad, pero después poco a poco fue sorprendiéndose cada vez más, aquello realmente no era algo que pudiera creer estuviera pasando, ¿Cómo podía estar ese hombre diciendo aquello? ¿Cómo podía decirles que quería conquistar el multiverso? Realmente estaba sorprendido, aquello era una autentica locura, gobernar todo el multiverso bajo su domino, y si tal y como había dicho era algo que era infinito estaba pidiéndoles luchar una guerra infinita, fueron las palabras de Coloso otra de las cosas que más le sorprendieron, se queda mirando al coloso unos momentos y dice:

Nos pedís que nos unamos a una guerra infinita atacando a los diversos universos existentes… pero estos son infinitos… nos pides que estemos toda nuestra vida luchando y que rompamos el equilibrio del multiverso… que unos pocos universos no son nada… esos universos que dices que no son nada, son todo para sus habitantes

Loki estaba molesta y cada vez más molesta con lo que estaba escuchando por parte de ese hombre, después mira a Coloso y añade:

Y que no van a atacar nuestro universo… y si es uno de esos universos que son un daño colateral… esos pocos que se sacrificarían y no pasa nada…

Negaba con la cabeza, realmente aquello le parecía demasiado fuerte, hasta hacia unos pocos días lo máximo que había visto y se había enfrentado era a unos criminales del tres al cuarto, ahora tenía delante toda una guerra que incluía a todo el multiverso, algo para lo que sin duda no estaba preparada.

Al ver como la imagen de su padre se dirigía hacia él y le extendía la mano, recuperó fuerzas. Sabía que no era él, su padre había fallecido, pero desde que llegaron a salvar el multiverso. Todo se había echo más duro para él. Y la inestabilidad y rabia en él habían vuelto perturbando la tranquilidad interior que había conseguido. Le agarró del antebrazo y se levantó firme, manteniendo la compostura, debía mantener sus emociones a raya.

Las primeras palabras que salieron de la boca de Cíclope fueron un jarro de agua fría para él. Definitivamente aquel no era su padre, tendría que aprender a mirar más allá de las caras y concentrarse e las psyques que tenía delante. Continuó escuchando sus palabras, analizando sus movimientos y comparándolos con los de su padre, definitivamente no era él.

Escuchó con atención cada una de las cosas que decía, ahora conocían el porqué eran necesarios y que había desencadenado aquel desastre, realmente aquellos seres eran cobardes y habían sido incapaces de afrontar su error siendo ellos los encargados de salvar el multiverso y dejando el trabajo sucio a terceros. Quizá hubieran sido arrancados de sus universo para realizar una tarea más grande, ¿pero no había sido arrancado también de una niñez y juventud normal, por culpa de su ascendencia mutante? Sus padres le habían enseñado a afrontar las adversidades y a enfrentarse a las amenazas que atacaran contra el bienestar de la gente corriente, debía aprovechar ese don para el bien de los demás, le gustaba y no dejaría si existiera la oportunidad de dejar de ser mutante por "culpa", tal y como había denominado Cíclope, de su ascendencia.

Las siguientes palabras le delataron, era alguien con ansia de poder de superioridad, en su mundo hubiera sido en villano en vez del padre que una vez conocía y se sintió aliviado de saber que este hombre no le llegaba a la suela de su padre. Aquel hombre debía ser eliminado por el bien del multiverso, pero por desgracia eran superados en número y viendo lo que acababa de pasar y a Guardián detrás, también lo eran en capacidades. Dos opciones eran planteadas, dejar de ser juguetes de aquellos alienigenas cobardes para o bien ser esclavos de un loco con aires de grandeza o volver a casa con el rabo entre las piernas. Dos opciones que Cable no iba a aceptar.

Se le cayó el alma a los pies al escuchar a Coloso, se iba a rendir, así de fácil, no lo podría creer, dejaría de ser mutante si tuviera la oportunidad, lo dudaba, sin embargo su corazón había flaqueado, sintió levemente su añoranza. Entendía el porqué, pero pondría en riesgo la existencia de su universo.

¬ Coloso, si vuelves sin acabar nuestro trabajo, tu universo podría desaparecer contigo y tu familia incluidos. ¿Rendirías tan fácil, la vida de tu mujer y tu hija? ¿Dejarías que este loco, con el cuerpo de mi padre, gobernará tu universo y decidiera quién vive y quien no? ¿Podrías vivir con ello? le transmitió mentalmente y habiendo un canal de comunicación para los tres, al oír lo que decía. Su gesto se había vuelto serio e imperturbable, cierta rabia quizás asomaba en sus ojos.

Dejó que Loki hablará, su pasión e incredulidad reflejaban sus palabras, también ella había visto la clase de hombre que Ciclope era y que quería reinar en el multiverso. Llegó su turno y comenzó a replicarle.

- No es fácil, como bien dices, viajar de universo en universo, sin saber a qué ser querido te vas a encontrar, vivo o muerto en tu realidad, y ver como pueden ser grandes personas con unos buenos ideales o tiranos con aires de control y grandeza. No sabremos como actuar en cada dimensión y menos si el Tallus no nos otorga buena información o si acaba siendo manipulado por terceros como en esta ocasión. Pero acaso gente como tu y como yo no hemos sido arrancados de nuestra infancia y vida normal por haber nacido mutantes. ¿No hemos abrazado estos dondes para hacer con ellos lo que nos han enseñado, dándonos un ideal y una forma de vida? Fuera de lo común y de forma extraordinaria. Todos hemos perdido seres queridos en combate, no sólo los vas a perder en el multiverso. La vida es dura y no por ello hay que rendirse como habéis echo para perjudicar la existencia de miles de universos sólo porque os habéis sentido utilizados. la seguridad y determinación de la voz de su padre le acompañaban, era duro tenerle en frente pero más duro era el haber contemplado la clase de persona que se había convertido. - Morpho ha echo lo correcto y tomado el camino difícil por salvar los universos, nos ha dado la oportunidad a nosotros de salvar millones de vidas, igual que hacía en mi universo. Yo solo veo ante mí a alguien que se ha rendido y no ha sabido aceptar el don que le han otorgado al igual que acepto el poder de su mutación se tomó un pequeño segundo para desafiar con la mirada a Cíclope. - Viendo el equipo que ha reunido Morpho a mi alrededor solo puedo pensar que fuiste un gran héroe en tu universo, sin embargo no veo como has podido transformarte en el gran villano del multiverso habiéndote rendido y tomado el camino fácil haciendo aquello que te plazca. Nos das sólo dos opciones o sometimiento a tu voluntad o rechazar el don que me ha sido otorgado. ¿Dejarías acaso de ser mutante? le lanzó un directo - Yo no. Prefiero seguir luchando por un bien mayor, aprendiendo a adaptarme a lo que cada universo necesite para salvar millones de vidas y ya procuraremos que la transición tras nuestra actuación sea lo más pacifíca posible, sin embargo quizá en un planeta perezca mucha gente, pero podré absorverlo si el resto de población de ese universo sigue con vida.

Se quedó ante él, desafiante. - Parece que sólo nos queda una tercera opción, ¿me vas a hacer lo mismo que a tu camarada? ¿O podré seguir salvando todas las vidas que me sea permitido? sus mirada no se separaba de la de Cíclope.

-Habláis con la insensatez propia de la juventud y de la falta de experiencia. Al contemplaros me pregunto si existió un tiempo en el que yo también estuve tan cegado por los falsos ideales que me inculcaron respecto a ser un héroe. La senda que se alza ante vosotros es un camino que ya he recorrido durante largo tiempo y que conduce únicamente a la decepción y al dolor.

Cíclope se limita a realizar una invitación con la mano a Coloso para que se una al resto de su grupo de renegados y así poder centrarse en Cable y Loki. Sin alzar la voz ni una sola vez, ni cambiar el ritmo relajado pero autoritario que le envuelve, Cíclope continua con su discurso.

-Ahora no sois más que esclavos del Tallus, acudís a las realidades que desea y cumplís sus órdenes al píe de la letra. En caso de que decidieseis desobedecer, simplemente se limitaría a dejaros abandonados a vuestra suerte en una realidad que no es la vuestra. Mirar a vuestro alrededor, sin Kinping al mando, este mundo se sumergirá en la tercera guerra mundial. El Tallus afirma que deberán de morir millones antes de que el mundo se sumerja en una nueva era de esplendor. En nuestro camino hacia el control de esta realidad, puede que unos pocos deban de morir, pero unas pocas vidas sin duda bien merecen ser sacrificadas para proteger a millones. Así es como actuamos, Loki. No nos enfrascamos en una lucha infinita ansiosos de poder, simplemente traemos orden al caos. Ninguno de los que me acompañan están aquí en contra de su voluntad, todos caminan a mi lado debido a que al igual que yo, han visto lo que en verdad significa ser un exiliado.

Por primera vez en toda su vida, el hombre al que siempre ha llamado padre, posa sus ojos sobre los suyos. Siempre ocultos tras el visor o las gafas, desconocía que su padre tenía los ojos de color avellana, con pequeñas manchas verdes.

-Según tus palabras, porto el rostro de alguien que te es muy querido, pero debes de comprender que no soy esa persona. No puedes juzgarme según quién o qué era él. Tienes unos ideales sobre el heroísmo dignos de ser plasmados en una novela, pero me temo que en la cruda realidad en la que vivimos son tan solo eso, uno meros ideales sin fundamento alguno. Ser mutante es algo que no se elige y en otro tiempo, ser un exiliado tampoco. Pero ahora las cosas han cambiado, nosotros dominamos el palacio de cristal y por tanto, al tallus. Somos los únicos que pueden viajar de una realidad a otra, por lo que si no estás con nosotros tu tiempo como exiliado ha concluido. Podéis elegir acompañarnos, regresar a vuestras realidades o permanecer en esta hasta el fin de vuestros días. No me agrada tomar una vida, pero eso jamás ha evitado que lo haga sin dudar cuando la ocasión lo ha requerido. Salvo que oséis levantarnos la mano, no tenéis que temer nada de nosotros. Ahora elegir vuestro destino...

Coloso había escuchado a las dos partes, al proto-tirano y a los héroes. Entendía las dos posturas. Pero aunque estuviera más de acuerdo con la posición heroica, no había nada que hacer, según lo que contaba Cíclope. No podían enfrentarse a ellos, era demencial siquiera pensarlo. No tenían ninguna posibilidad. Así las cosas, el mutante soviético sólo optó por lo que le dictaba el corazón: volver con sus personas amadas. Aquellas otras realidades... tendrían que apañárselas solas. Podía entender su papel en el mundo, en *su* mundo, pero su limitada mente ya se mareaba ante la sola idea de un multiverso, ni que hay que decir que el juego de poderes que ahí se barajaba era algo que ni siquiera había soñado con plantearse. No, se acabó lo de hacer de héroe. Había estado bien, incluso había sido divertido, pero no, tenía que volver.

Y si Cíclope tenía razón, simplemente aceptando su oferta en ese momento, volviendo a su realidad, la habría salvado de la intervención, de la conquista. Había declarado su realidad como neutral, un lugar que no debía atacarse, ni por un bando ni por el otro. Si luego el tallus enviaba a alguien a acabar con él por tomar aquella decisión, por traicionarle, podría con la consecuencia. Lo que no podía era permitir que por su heroicidad su realidad pudiera sufrir, que por sus buenas intenciones su mujer viera desaparecer su propia realidad, que por su vanidad su hija no tuviera un futuro en el que desarrollarse.

No, era la decisión correcta. Sus compañeros no lo entenderían, pero no eran padres. Coloso avanzó al lugar que le ofrecía Cíclope.

Las palabras que salían de su boca seguían siendo las de alguien que se había rendido para Cable, propias de un asesino o dictador. Si algo no me gusta me deshago de ello, así de triste lo veía. Contempló a sus compañeros, con Coloso no había vuelta atrás y Loki parecía tener su mismo punto de vista. Quizá no tuviera oportunidad de despedirse de Coloso ante aquellos seres autoritarios por lo que los enlazó de nuevo mentalmente para despedirse.

¬ Siento que tenga que ser así Coloso. Buena suerte. No dijo más pues estaba apenado. Su rostro y su mirada fueron constantes y fijos ante los ojos del que en otra realidad había sido su padre. No se amedrentó ante ninguna palabra y tiró de actitud para mantenerse firme, al igual que lo fue su respuesta.

- Ahora soy un Exiliado y mi cometido es salvar el multiverso. Tengo una misión por delante que ha de ser realizada. sus palabras cesaron y llevó su psique fuera de sí en búsqueda de calavera, ya les habían echo perder demasiado tiempo. No sabía lo que pasaría a continuación pero si era dejado con vida, tenía un universo que salvar.

Loki realmente podia decirse que no sabia que hacer, no sabia que era aquello, que era cierto y que era mentira, Mira a Cable y a Coloso, despues a esos hombres, las palabras de Ciclope eran eso, palabras y no le daba pruebas, mira al hombre unos segundos y dice despues:

Digo lo mismo de antes... tengo que creer tus palabras... o las de Morfeo... y no os conozco a ambos lo suficiente para decantarme por uno u otro

Un intrincado símbolo místico de energía comenzó a formarse junto a los renegados. Loki, maestra en las artes arcanas no tardó en reconocer que se trataba de un portal de teleportación. Uno lanzado sin lugar a dudas por alguien de gran poder.

La primera de las dos figuras que emergieron del portal, resplandecía ante los ojos de la Asgardiana debido a su inmenso poder mágico. Fuese quién fuese aquel hombre estaba claro que dominaba las artes arcanas a un nivel tal alto como ella misma, puede que incluso más. 

La segunda figura era la de una mujer que estaba a mitad de sus treinta. Sus cabellos eran largos y oscuros, que hacían destacar de alguna forma su mirada felina. Vestía un traje completo de cuero que hacía realzar su figura o al menos, lo que el largo abrigo que portaba dejaba ver de su figura.

El Doctor Strange realizó una reverencia a Cíclope mostrando el mayor de los respetos y acto seguido, se volvió para extender una mano y presentar a la mujer que le acompañaba. El líder de los renegados por su parte, se limitó a asentir con la cabeza tal y como haría un emperador a su siervo.

-Mi señor, permitirme que os presente a la dama Nova, quién aceptando vuestras condiciones, a accedido a convertirse en una vuestras comandantes.

Un grito de puro odio provocó que todos se volviesen a tiempo de ver como Calavera, alzando dos uzis cargase dominado por el odio contra los recién llegados. La frialdad con la que había operado hasta entonces se había esfumado por completo mostrando a un hombre poseído por el odio y la venganza.

Con el grito de ¡Muere, Kingpin! se lanzó al ataque sin preocuparse lo más mínimo por su propio bienestar. Su objetivo estaba claro, deseaba acabar a cualquier precio con Nova. El sonido de sus dos armas resonó por el puerto cuando los proyectiles comenzaron a surcar las distancias. Lejos de que aquello la inquietase, la mujer se limitó a ignorar por completo a Calavera. Los proyectiles simplemente se detuvieron en el aire de forma inofensiva y después cayeron al suelo. Con un simple chasquido de sus dedos, Calavera se alzó en el aire y como si de una mano enorme e invisible lo aferrase, comenzó a ser aplastado por una fuerza sobrecogedora. El chasquido de sus costillas quebrándose y una sutil orden de Cíclope provocó que Calavera fuese arrojado en dirección en donde se encontraban Loki y Cable. Las heridas que mostraba era de gran gravedad, pero no haber sido por la orden de Cíclope, seguramente habría muerto aplastado.

Lejos de darse por vencido, Calavera se incorporó haciendo gala de un aguante casi inhumano y de una gran capacidad para soportar el dolor.

Y de pronto...todo cambió.

El tallus de Coloso resplandeció y tanto él como los Exiliados, simplemente desaparecieron de aquella realidad.