Me pongo a recuperar mis flechas para despues acercarme al hombre. Saco mi cuchillo de caza miro al hombre con aburrimiento finjido.
-No creo que necesite todos los dedos para responder... ¿Que opinais?-Sonrio de forma macabra
Mmmm..., no parece que tengan mucha pinta de haberlos contratado alguien, quizás solo sean unos asaltantes de caminos buscando hacer fortuna con los mercaderes pocos incautos o bueno quizás no... quizás sean unos sicarios que llevaban varios días siguiéndonos, mandados por algún excéntrico malvado coleccionador de distintos tipos de cabezas decapitadas... Quizás sea eso, o si si.. ¡o si si!, ¡eso tiene más sentido!, o no... no se, estoy confundido...
Me llevo una de mis manos a la cabeza, rascándome con ella la capucha, pensando en las posibles respuestas que podría dar el asaltante...
Mira al elfo con una sonrisa ironica -Yo creo que no los necesitará.. apretando aun mas el filo del hacha que apenas se refrescaba con una gota de sangre que salia de la garganta del maleante.
Sin perder la sonrisa por un solo instante, piso una de sus manos dejando los dedos bien extendidos, sin posibilidad de que pueda soltarse luego voy pasando lentamente el filo del cuchillo por el dedo meñique.
-Este cerdito fué al mercado...- susurro con deleite. El dedo cae cercenado al suelo con un chorro de sangre.- Vaya... si que es un buen cuchillo...
Miro como el Bosmer le corta un dedo al Bandido y mientras me acerco aún más al bandido sonriendo le digo:
-¿Cuántos dedos crees que podrás perder antes de caer inconsciente de dolor?...
Me alejo un poco de él y le digo en voz alta.
-¿Vas a hablar ya o mi amigo tiene que volver a usar su arma? Es un cuchillo muy caro y sería un desperdicio seguir ensuciándolo.
Revisen si tiene alguna nota, tal vez nos de una pista de quienes son... eran, y que pretendían! gruñe mientras sigue apretando su hacha contra la garganta del condenado.
Mis compañeros estaban usando sus dotes para sacar la información pertinente, no hacia falta que golpease al bandido, por lo que sin hablar me subo a la carreta y miro la escena como se desarrolla.
Como el bandido no parecía tener muchas ganas de hablar me agache a su lado y busque en sus bolsillos.
-Veamos que tiene esta rata para mostrarnos.
Si encuentro oro, me lo quedo. Pensé para mí mientras reía maliciosamente.
Busco en los bolsillos del bandido.
- Matadme si queréis, pero no os revelaré mis fuentes. - Les escupo en la cara a todos. Entonces me cortan un dedo. - Aaagh! Malditos! Hijos de vuestra madre! - Chillaba de dolor, retorciéndome.
No hay problema, tengo la solución a estos problemas. Turr'okk guarda su hacha y toma una soga de su carruaje, amarra fuertemente los brazos y las piernas del bandido con la ayuda del sádico Urial. Una vez bien atado toma el otro extremo de la cuerda y lo amarra detrás de la carreta. Espero que disfrutes el viaje amigo, terminará cuando te dignes a hablar.
Muy bien señores, sugiero que nos repartamos el botín y sigamos nuestro viaje, tal vez nuestro buen amigo aquí atado se canse de tragar tierra y nos revele algo en el camino...
Esta demás decir que la idea es arrastrarlo una parte del camino hasta que muera o hable XD
-Si no tiene nada que decir, quizas la tierra haga que le salgan mejor las palabras.
Me levante sin buscar en sus bolsillos al final y me sente en la carroza al lado del Nórdico.
-¿Que amigo, que tal el primer combate del dia? Le dije dandole una palmada en la espalda y soltando una leve risotada.
Pensando todavía en posibles hipótesis de lo que los bandidos podrían ser o podrían querer de nosotros subo al carruaje ausente de palabras o imágenes del exterior, envuelto en mis propios pensamientos e ideas.
¡Vale ya lo tengo!, quizás sean un par de demonios adoptando una apariencia humana con el propósito de hacernos creer que son simples bandidos para después controlar nuestras mentes con algún tipo de fuerza mágica desconocida.... Eso no tiene mucho sentido, o si...; Bueno quizás...
Con gesto de aburrimiento me subo a la parte de atras del carro.
-Si intentas soltarte te dejaré clavado a la tierra sin soltarte del carro. Ya veras que divertido-Digo con una sonrisa angelical mientras guardo mi cuchillo.
Elfo! grita Turr' okk con voz ronca- te lo encargo! creo que este sujeto ya me esta empezando a caer mejor... sin embargo me preocupa lo que dijo el bandido, es posible que aya una mano oscura detrás de todo esto.
Desde el carruaje permanezco mirando como los bandidos son masacrados por mis compañeros sin que moviese un dedo.
---*Mejor, asi evitaré ensuciarme las manos*- pienso mientras bostezo aburrido y miro como dejan al ultimo con vida para interrogarlo, o mejor dicho, torturarlo a juzgar por los chillios que pega el bandido.- * Que bestias son, mucho musculo y poco cerebro*
Espero a que se acerquen y les digo mientras estoy comodamente apoyado en la parte de atras de la carreta.
---Habeis tardado lo vuestro, a este paso nunca llegaremos a nuestro destino.
Antes de partir, reviso el botín para repartirlo entre mis compañeros. Como comerciante no puedo evitar buscar algo de valor.
Todavía no podía creerme como no había logrado abatir a tan insignificante rival, y para colmo mi amigo argoniano se mofaba de mi combate. Parece que estoy algo oxidado, debe ser culpa de no dormir bien, aun recordaba la cálida habitación de Soledad.
Ya arriba de la carreta dispuesto a emprender viaje nuevamente, afirmo las riendas y me acomodo. -No te preocupes Khajiit, siempre llevo mi carga a destino, le guiño el ojo y esbozo una pequeña sonrisa... -Todos arriba?
Esta no era la primera vez que tenia un contratiempo, ni tampoco seria la ultima. Estaba todo calculado en el intinerario, estas cosas siempre pasan. Cualquier cosa es mejor que encontrarse con una dama de los susurros o incluso peor, un gigante enojado porque perdió su rebaño de mamuts...
Asiento desde la parte de atras de carro sin dejar de sonreirle al humano atado.
Será un viaje interesante como pocos...
Dónde estaban los cuatro bandidos hay algunos cofres: 2 abiertos, 1 cerradura fácil y otro cerradura difícil. Además hay una espada de acero tirada al suelo, junto con una maza. Los bandidos llevan ropajes baratos sin valor aparte armaduras. Tan sólo hay un escudo de hierro, y 2 espadas (una a una mano y otra a dos manos) una maza y una hacha a una mano.
Objeto | Daño/Defensa | Peso | Valor |
Armadura de hierro | 21 | 55 | 212 |
Armadura a piezas | 20 | 41 | 200 |
Armadura de cuero | 17 | 32 | 173 |
Espada a dos manos de hierro | 7 | 13 | 60 |
Espada a una mano de hierro | 6 | 12 | 45 |
Maza a una mano de hierro | 7 | 16 | 35 |
Hacha a una mano de hierro | 7 | 15 | 75 |