Partida Rol por web

Puso lo ojos en blanco otra vez y negó con la cabeza, tragó forzadamente el bocado que tenía en ese momento dentro y de su cantimplora bebió para pasar el trozo.- Aron... ¿Porqué piensas que podría haberme traido un bolígrafo a esta expedición? ¿ Acaso no será que estás pensando que como soy un estudioso, voy siempre con uno en el bolsillo, no?- Dejó un segundo de dramatismo y con un gesto vacuo, contestó.- Pues no, me he traido una cámara de fotos para los buenos recuerdos de un fin de semana divertido, como alguien que no quiero señalar, dijo...- Dijo con un tono sarcástico nada habitual.

La lluvia golpeaba con fuerza cada rincón del monasterio. Si habían escogido un día adecuado para ir de excursión...desde luego no era ese. Por otra parte Evelyn no estaba en la parte del monasterio que habían registrado y, desde luego no estaba en el agujero de la cocina pero entonces ¿Dónde estaba la tímida amiga de Greta? Cierto era que algunos de los chicos tenían hambre, pero la ausencia de la chica era preocupante. Con toda esa lluvia y estancias de suelo podrido...¿le habría pasado algo o les estaría gastando una broma? En aquel momento, empezaron a oír ruidos de pasos que provenían claramente de la entrada. Parecía como si alguien estuviese subiendo o bajando unas escaleras.

Al escuchar los sonidos que provenían de la entrada, Liam, soltó un bufido con desgana.- Bueno, ¿Quien es el valiente que se asoma a la puerta a ver si es la princesita perdida?- Dijo con ironía a los demás que estaban en la estancia. A continuación le dió otro bocado a la barrita de cereales y miró por la ventana el aguacero que caía.

-Deja de ser tan petulante y ve tú, querido Liam -el "querido" sonó afilado, capaz de cortar el aire que los separaba-. ¿O el nenito tiene miedo de los fantasmas? bu, bu, bu, jajajaja -la risa de Greta sonó nerviosa. Aunque quería disimular su inquietud, la desaparición de Evelyn estaba haciendo mella en su ánimo.

-Bah, no tiene sentido pedirte que hagas algo para lo que no estás capacitado. Aaron, la leña tendrá que esperar. Vayamos a ver quién osa acercarse a mi propiedad. Seguramente sea un vagabundo buscando refugio, algo que no pienso tolerar. Mi tío ha dejado este sitio a la buena de Dios, pero yo no voy a permitir que se llene de okupas.

Más calmada, sabiendo que podría desquitar su frustración en el pobre infeliz que hubiera llegado a guarecerse de la lluvia, buscó su linterna y le sonrió a su novio, haciéndole señas para que se pusiera en marcha junto a ella.

La desaparicion de Evelyn no tenia ningun sentido para Remy, el joven informatico no entendia como una persona, en apariencia cuerda, salia corriendo en solitario a explorar un monasterio en un estado ruinoso, dejando atras a sus amigos. Aunque a medida que pasaba el tiempo con el resto del grupo, Remy percibia que los nexos de union entre sus compañeros no eran tan fuertes como el creia.

Quiza el motivo de la debilidad en las fuerzas de cohesion entre los distintos elementos del grupo fuera la irritante superficialidad de, precisamente, el punto que tenian en comun, Greta. La atractiva rubia no valoraba a quienes se encontraban en su entorno, por lo que dificilmente se podian establecer lazos de compromiso con ella. La falta de correspondencia de cualquier intento de acercarse e incluso el rechazo y repulsion que en ocasiones la hermanastra de Lenny mostraba, eran suficientes como para convencer a cualquiera de que una relacion con ella no podria ser muy profunda.

Y sin embargo, ahi estaba Aaron, quiza la falta de neuronas y perspicacia asociada a los "chicos populares" no fuera una simple leyenda.

Ahora Greta queria expulsar de su propiedad a quien fuera que estuviera intentando entrar y todo parecia apuntar a que sus intenciones eran usar algun tipo de violencia. Lo que a Remy no le agradaba precisamente.

-Vamos, Greta, no creo que sea para tanto- Se atreve a decir, a riesgo de atraer sobre el la furia de la rubia- Vamos que si se quedase en el porche no es como si te estuviera robando, no? Creo que hablando se podria llegar a algun tipo de entendimiento.

Mientras hablaban, los chicos comenzaron a acercarse a las escaleras, que parecían bastante seguras, puesto que eran de piedra, y no de madera como el suelo de la cocina... Greta ya había subido unos escalones y se encontraba a medio camino mirándo despectivamente al nerd que para hacerse oír había tenido que seguirlos. La rubia podía ver por el rabillo del ojo el cementerio y una pequeña iglesia a través de un pequeño ventanuco.

Mientras tanto Liam y Lenny se habían quedado atrás. El primero masticando parsimoniosamente la barrita de cereales, y sumido en su propio y "oscuro" mundo el segundo. Parecía que a ambos chavales les daba bastante igual lo que estaba ocurriendo.

Con un ligero gesto aristocrático despidió a la animadora y a los que la acompañaban. Liam ya había hecho demasiado por ahora y tal como había decidido, era su momento de disfrutar de su pequeño placer del día con su barrita de cereales con chocolate.

Se quedó mirando por la ventana como caía el aguacero con sus rayos y relámpagos que hacía la estancia mas tétrica de lo que era, mientras en su mente, se creaba la imagen de lo que podría haber sido esta abadía en sus tiempos de esplendor y eso lo entretenía de la cruda realidad sobre el destrozado edificio.

         Aaron sin dudarlo un solo momento acompaña a Greta hasta las escaleras, una vez allí observa a su alrededor. Tenia la esperanza de que fuera Evelyn quien anduviera por las escaleras, en realidad, no se puede descartar la idea, pero entonces, ¿Por qué seguir jugando al escondite? Hasta ahora Evelyn siempre había dado la impresión de no causar problemas de ningún tipo. Aunque distraído con sus pensamientos trata de escuchar atentamente, quizás así pueda localizar los pasos de quien estuviera por allí.

         Su mano se levanta con un dedo apuntando hacia el techo de la estancia, como si una gran idea hubiera pasado por su cabeza. Apoya una de sus rodillas en las escaleras y comienza a examinarlas, quizás se pueda apreciar si alguien ha entrado, ya que llueve y hace rato que ellos están dentro, o con suerte, el sentido de la pisadas.

Greta miró por sobre su hombro a Remi con una mezcla de desprecio e irritación. Por poco, el chico le había pedido que acogiera en aquel lugar al mugriento vagabundo que seguramente intentaba colarse por alguna ventana del frente. Su hermanastro debía haberle dicho que ese tipo de cosas la enervaban (que le dijeran que hacer, a quién aceptar, cómo tratar a los demás) y ahora se estaba burlando de ella. Pero no iba a permitir que aquellos pardillos se salieran con la suya.

-Ya veremos... si nos quedamos papando moscas nunca nos vamos a enterar quién está ahí afuera ni qué intenciones tiene, ¿no te parece? -mientras respondía, Aaron se puso a mirar el suelo con mucha atención. Greta siguió la línea de la mirada de su novio, pero no vio nada que le llamara particularmente la atención. El piso era viejo y se notaba desgastado y definitivamente requería un cambio, pero no era momento de ponerse a pensar en la decoración.

-Aaron ¿qué haces? No tenemos tiempo de "maravillarnos" con la construcción. Si no vamos ya, ese vagabundo podría meterse en el monasterio por la fuerza y luego tendremos que lidiar con él. No te pongas a perder el tiempo en tonterías! -puso sus brazos en jarra y lo miró amonestadoramente, antes de dar media vuelta y retomar la marcha hacia donde habían sentido el ruido.

—Yo no me pierdo como esa zorra se encuentra con una rata y empieza a chillar como una loca. —dijo despectivamente Lenny yendo hacia la entrada y dejando solo a Liam, iluminado tan solo por la tenue luz de la linterna y la luminosidad de los relámpagos.

Mientras Greta y Aaron subían las escaleras con el preocupado Remy a su espalda, Lenny llegó caminando y se puso al lado del nerd. —¿Qué?—preguntó—¿Han hecho ya alguna gilipollez?

Remy, viendo que su alegato caia en oidos sordos y que su compañero de habitacion y principal culpable de que se encuentre en el monasterio llega, decide no subir con la popular pareja.

-Tu hermanastra bastantes.-Dice frustrado- No se para que hemos venido, la verdad, esto esta hecho un desastre, estamos en medio de la nada. 

Remy se esta empezando a arrepentir de haber formado parte de la excursion. No solo no tiene un interes especial en estar ahi, si no que las actitudes de los componentes del grupo le estan desmotivando en grado sumo.

—Bah, subamos con ellos. Será gracioso ver como se cae de culo cuando vea la primera araña.— respondió Lenny con tono despectivo. El muchacho mantenía una mueca sardónica. Ayudar a salvar al novio de "la zorra de su hermana" había sido el colofón perfecto de la noche. Podía echarselo en cara cuando quisiera. Y con un poco de suerte la noche no haría sino mejorar

Y así fue como Liam, quien había comenzado comiendo una chocolatina tranquilamente se quedó de nuevo solo en aquella fría habitación. La soledad era algo positivo, especialmente para los intelectuales que no necesitaban oír lo inteligentes que eran pero... ¿era una buena idea?

Vió desaparecer a Lenny por la puerta en dirección a la entrada. Con total indiferencia volteó la vista hacia la ventana.Pasaron unos minutos en silencio, solo interrumpido por los truenos que retumbaban en el oscuro cielo. Liam sintió un escalofrío, entonces se le encendió la bombilla. Aron había traído leña y el suelo de piedra era perfecto para hacer una pequeña hoguera. Además mantendría ocupada su ociosa mente.

Así, con una clara intención de hacer el lugar mas acogedor, juntó algo de leña en la esquina mas alejada a la puerta de entrada, comprobó que no hubiera nada inflamable cerca y con cierto trabajo por la madera húmeda, encendió la pequeña hoguera. Cuando lo consiguió, no pudo evitar sentirse orgulloso de sí mismo y todos los manuales de supervivencia que había leído. Abrió una rendija en la ventana para que saliera el humo y comprobó con satisfacción el trabajo como si hubiera conseguido hacer algo extraordinario.

Liam efectivamente, junto la leña para hacer una hoguera, prendió el fuego y consiguió que ardiese, débilmente si, pero que ardiese. Eso era mucho teniendo en cuenta que hasta el momento solo tenía conocimientos teóricos. El problema del asunto era que el aire y la lluvia seguía entrando por la ventana de piedra, y no había contraventanas que la cerrasen, por lo que todo su esfuerzo podía desaparece entre volutas de humo si no lo solucionaba.

- ¡Oh!..No,no,no..- Dijo Liam con apuro y temor cuando vio que la pequeña llama se medio apagaba por el viento que entraba por el hueco de la ventana y formaba una pequeña corriente en la habitación. Se levanto y mirando al cielo plomizo por el marco de la ventana maldijo su suerte poniendo los ojos en blanco y dando una patada al suelo con mas fastidio que otra cosa.

Miró la mesa y por un segundo se le ocurrió la forma de poder hacerla astillas, ya que era madera seca y se podría alimentar la fogata durante muchas horas, pero, miró de nuevo al espacio vacío del marco de la ventana y pensó que a lo mejor podría poner la mesa como contra ventana. Se giró a mirar la mesa y alternativamente paso a mirar el hueco de la ventana y la mesa... No sabía si funcionaría, pero, era una idea para que dejase de entrar tanto aire.

Remu no paraba de quejarse, lo entendía,pero por fin tenia algo con lo que ganar a su hermanastra.

- vamos Remy, disfrutemos del momento,además no aguantaremos mucho aquí, ¿tu ves a Greta durmiendo en este mugriento suelo?, venga Subamos.

Remy se encoge de hombros y acaba resignandose y subiendo con Lenny en pos de su hermanastra y de su novio.

-Sinceramente no, me imagino que no querra dormir en un sitio sin las maximas comodidades, pero tampoco veo que en un futuro cercano dejemos este decrepito sitio. Estamos demasiado apartados y sin un medio de transporte.

Le responde al impertinente gotico mientras comienza su camino al piso de arriba. 

-Y, con la paranoia que le ha entrado con echar a cualquier extraño que se acerque a la propiedad, vete tu a saber si se emperra en quedarse como una perra guardiana. En fin, a ver si encontramos a Evelyn y podemos empezar a disfrutar del fin de semana, que de momento va de susto en susto.