Partida Rol por web

Gun estaba cansado, pero aún así se puso a trabajar en su ordenador, tenía que formar el equipo que viajaría a las instalaciones del imperio y no era una tarea fácil.

No tenía dudas sobre llevar a la gente más veterana que pudiera, así minimizaba el riesgo de infiltraciones, aparte no podía ser muy numeroso, un par de programadores, un par de ingenieros para gestionar y pulir el programa, un coordinador... tendría que darle vueltas al asunto, pero ya estaba empezando a rodar.

Gun tenía en mente a quién exactamente iba a llevar consigo en aquel proyecto. Pocas personas, minimizar los riesgos. Sólo cinco junto con él. Mientras viajaba de vuelta a casa al caer la noche, seguía dándole vueltas a todo eso.

Le sorprendió encontrar a dos guardias de seguridad a las puertas del lujoso edificio donde vivía. Los guardias le saludaron con gravedad e intercambiaron una mirada cuando pasó el duro. Extrañado por esto, Gun se dirigió con paso rápido al ascensor. Sus dependencias se encontraban en el ático. Un impresionante apartamento con unas vistas realmente envidiables. La sangre se le heló en las venas cuando las puertas del ascensor se abrieron y encontró a más guardias a su puerta... junto con su madre...

-Hijo... hijo... ha ocurrido algo terrible... Tu padre...

La mujer no podía continuar y parecía que estaba a punto de perder el sentido...

Gun sujetó a su madre, pues nunca la había visto así.

- ¡¿Madre que ha pasado, que hacen los guardias aquí?!

Su mente divagaba sobre las más terribles cosas, justo en el momento del encargo del imperio y con tanto que decidir y hacer, su mente empezaba a agotarse.

-Ha muerto, Gun ¡Ha muerto! -la mujer estalló en sollozos-. Le han disparado cuando volvía a casa del trabajo. Me he enterado hace un momento y he venido a decírtelo. Habrá... una investigación... Dicen... que fue obra de un profesional...

Gun se llevo las manos a la cabeza, casi en shock por lo ocurrido, quien habría sido? el imperio es poco probable, ya que tenían el trato que querían, alguien de la competencia... su padre se había mostrado muy preocupado en su última conversación, puede que ya sospechara algo, pero su manera de ser le impidió decírselo.

-¡Cerrad el complejo, que nadie entre ni salga! Y mirad las cámaras, nadie ha podido colarse sin ser visto.- se volvió hacia su madre para abrazarla - tranquila madre, encontraremos al culpable y pagará por esto, lo juro.

-¡Enseguida, señor!

Los guardias se apresuraron a cumplir las órdenes de Gun, mientras este llevaba a su madre al interior del apartamento y le servía una bebida fuerte para que se recuperara. El duro hizo lo propio mientras intentaba superar la terrible impresión que había sufrido.

Unas horas más tarde, en lo más profundo de la madrugada, el jefe del servicio de seguridad apareció en la vivienda. Traía consigo los discos de vigilancia y su aspecto era sombrío. Reproduciendo el contenido de las cámaras, observaron los alrededores del edificio en el momento del asesinato. Gun vio cómo el deslizador de su padre circulaba por la avenida y se detenía frente a la puerta. En ese momento, un haz de laser impactaba en su espalda.

El jefe de seguridad hizo unos ajustes en los controles y derivó las imágenes de varias cámaras.

-Allí, el disparo viene desde esa azotea... Voy a enfocarlo un poco mejor...

Se veía una figura en la azotea. Sólo se le distinguía la cabeza y los hombros, pero fue suficiente como para que el jefe de seguridad palideciera cuando la característica forma de una armadura mandaloriana apareció en la imagen...

-Un mandaloriano... aquí...

Gun observó con atención las imágenes, como su padre fue derribado por el frio disparo por la espalda, y localizaron la fuente del ataque, un mandaloriano.

- Ha tenido que entrar de alguna manera, comprobad el tráfico de naves, esos tipos no suelen quitarse la armadura, alguien ha tenido que verlo.

El imperio no necesitaba contratar mercenarios, esto pintaba a la competencia, pero justo en este momento... hay cosas que se le escapan a Gun.

Después de impartir las últimas órdenes, Gun se retiró a descansar un poco después del terrible día. Aunque apenas pudo dormir unas pocas horas hasta que se vio interrumpido nuevamente por la visita del jefe de seguridad.

-Hemos hecho lo que pedía, señor. Su nave fue identificada y aterrizó en el hangar 175 en la zona norte. Todos los permisos parecían en regla pero después de un barrido más profundo hemos descubierto que eran falsos. La nave ya no se encuentra en la ciudad. Despegó apenas media hora después del asesinato...

La nave había partido ya y poco podían hacer, el plan para asesinar a su padre había sido bien ejecutado y ahora no tenía donde agarrarse.

- Denunciad la nave y emitid un aviso, seguramente haya salido del sistema, pero puede que encontremos el lugar a donde se haya movido, prepara un par de naves para que estén en alerta.

De momento sólo le quedaba esperar, y seguir preparando el trabajo para el imperio.

Los siguientes dos días fueron duros para Log. Preparar el funeral de su padre, el trabajo en la corporación y el proyecto con el Imperio le absorbían todo el tiempo del que disponía. Apenas tenía tiempo para sí mismo o para su familia. Por eso le sorprendió encontrarse con su jefe de seguridad esperándole a las puertas de su despacho. Le hizo pasar de inmediato.

-Señor, hemos enviado avisos tal y como usted nos dijo. También hemos investigado a los controladores de tráfico aéreo que estaban de servicio ese día y descubrimos que uno de ellos no había acudido hoy al trabajo. Envié una patrulla a su departamento: alguien le había asesinado. El departamento de informática está estudiando sus pads de datos. Pero estamos razonablemente seguros de que recibió una transferencia importante de dinero de alguien desde Nal Hutta...

Gun asimilo la información recibida, Nal Hutta significaba hutts, y a pesar de su posición Gun no ignoraba la existencia de la lacra de la mafia Hutt, seguramente ellos mismos no tenían nada contra Googre, pero habían favorecido la contratación de un mandaloriano mercenario.

Tenía un gran camino por delante, pero si no se presentaba en el proyecto del imperio, se lo tomarían como un insulto, tendría que trabajar rápido, pero no podía dejar que el rastro se enfriara.

- Hay que investigar ese pago, tenemos a los mejores informáticos del sector, debemos encontrar el rastro del contratista de los hutt, aparte busca a alguien que entienda ese tipo de mundo, no deben existir tantos mandalorianos sueltos por ahí.

Durante la siguiente semana, Gun ya lo tenía todo preparado para partir hacia la base imperial y comenzar el proyecto. Lo habría podido terminar antes, pero quería alargarlo todo lo posible mientras hacía indagaciones por otra parte sobre el tema del asesinato de su padre.

Las averiguaciones habían dado sus frutos. El pago había llegado desde una cuenta bancaria propiedad de la familia Marlo. Una de las familias criminales de Nal Hutta. El por qué aún consideraba siendo desconocido. Pero el jefe de seguridad de Googre podía conseguir a un capitán de nave mercenario que estaría dispuesto a viajar hasta allí y hacer lo que fuera conveniente.

-Quedaría el tema del pago, señor ¿Cuánto estamos dispuestos a gastarnos?

- Que marque la tarifa que crea conveniente, si se pasa demasiado, ofrecedle equipo o una línea de descuento vitalicia, seguro que alguien que viaja en nave sólo agradece un servicio técnico ventajoso.- el duro pensó unos instantes - pero deja claro que mi prioridad es saber a que se debe el asesinato, una simple venganza no es bastante, debo averiguar el motivo de todo esto. 

-De acuerdo, señor. Así se hará. No sé si podrá enviar o recibir comunicaciones al sitio al que va, pero tenga por seguro que en cuanto pueda le mantendré al tanto.

Al día siguiente, ya estaba todo dispuesto para la partida. En la órbita de la ciudad flotante emergió del hiperespacio un Destructor Estelar Imperial que abrió su bodega de carga para dejar salir a un transbordador de clase Lambda. Log y su equipo subieron a bordo donde únicamente estaban los dos pilotos. Apenas unos instantes después, el duro pisaba el vientre metálico del enorme crucero de combate.

Se le asignaron unas espartanas habitaciones para él solo donde pudo dejar su equipaje. Apenas unos segundos después, un droide de la clase C3, construido en metal grisáceo brillante, apareció en la puerta.

-Bienvenido a bordo del crucero Vindicator, señor. Soy C3L-O, relaciones cibernéticas entre especies. Mis servicios están a su disposición para lo que quiera ¿Desea un refrigerio, señor, o alguna otra cosa?

Gun mantuvo su expresión seria, seguramente aparte del droide en la habitación había más dispositivos de espionaje para grabar todo lo que hiciera, mejor ser precavido.

- Claro, tomare algo fresco, quien es el comandante de la nave? Será posible saludarlo o tengo que permanecer en mi habitación?

Ahora estaba en territorio hostil, mejor averiguar todo lo que pueda sobre los que le rodean.

-El Capitán se reunirá con usted en breve, señor -respondió el androide-. Enseguida le traigo su bebida.

El autómata se retiró para regresar unos minutos más tarde con la bebida servida en una bandeja. La dejó en un rincón y se retiró en silencio. Poco tiempo después la puerta volvió a abrirse y dio paso a un alférez acompañado de dos soldados navales en armadura negra.

-El Capitán se reunirá ahora con usted en el puente, señor Log. Si quiere acompañarme.

Log siguió al oficial a lo largo de varios pasillos en dirección al puente de mando. Desde ahí, todavía podían verse las ciudades orbitales duras. La nave maniobraba alejándose del planeta antes de entrar al hiperespacio.

El capitán observaba las maniobras con calma desde su posición en el puente. Cuando llegó el duro, se giró hacia él.

-¿Todo está a su gusto, señor Log? Saltaremos al hiperespacio en unos minutos -su tono era educado, pero frío. Estaba claro que no le gustaba que el alienígena estuviera en su nave.

Los imperiales se toman muy serio demostrar lo acorralado que se encuentra uno en su naves, tanta escolta parece excesivo, aunque seguramente a nadie en esta nave la caigan bien los alienígenas.

- Todo perfecto, como esperaba, en cuanto lleguemos a nuestro a nuestro destino, la empresa Googre se pondrá a trabajar para mejorar las naves de toda la flota.

Es mejor parecer amable y colaborador, seguramente estén buscando cualquier excusa para demostrar lo fuertes y a la merced que estamos de ellos.

-Estoy seguro de que hará un trabajo digno del Imperio, señor Log. Y ahora, si me disculpa, tengo trabajo que hacer.

Log fue conducido de vuelta a sus aposentos en el instante en que el Destructor saltaba al hiperespacio. Unas horas más tarde, el enorme crucero de combate llegaba a su destino: una base imperial situada en una luna remota. Log no sabía muy bien en qué sector espacial se encontraba. Hubiera necesitado echar un vistazo a las cartas de navegación para orientarse. Aunque estaba muy seguro de que este emplazamiento no figuraba en ningún mapa.

La luna era pequeña y rocosa. Un trozo muerto sin vida que orbitaba un lejano mundo anaranjado. Seguramente algún asteroide perdido que se había quedado atrapado en el campo gravitacional del planeta. La base estaba construida sobre su superficie y protegida por un campo de energía azulado, lo que daba a entender a Log que era probable que todavía algún meteorito se estrellaba de tanto en cuanto por el lugar.

Dos horas más tarde se encontraba en una sala de reuniones junto con su equipo, esperando al oficial encargado del proyecto. Los empleados del duro le miraban con aprensión, seguramente bastante intimidados por el aparato militar imperial...

El viaje a la roca perdida fue tranquilo, el lugar era aún mas anodino de lo que pensaba, a pesar del poder del imperio, de vez en cuando también requería de la discreción de vez en cuando, seguramente la seguridad era mayor de lo que parecía a primera vista.

- Relajaos, por mucha exhibición de poder que veáis, el imperio nos necesita a nosotros, no hemos venido nosotros a ellos, sino ellos a nosotros, tenedlo en cuenta y actuad con dignidad. 

No tuvieron que esperar mucho. Las puertas volvieron a abrirse para dejar paso a una mujer de rostro severo, vestida con el uniforme blanco de la Marina Imperial. Gun se sorprendió, puesto que el Imperio no solía colocar a mujeres en puestos de relevancia. Esta sin duda había tenido que pisar a muchos compañeros masculinos para llegar hasta allí.

-Soy la Capitán Nala Redd. Dirijo esta instalación y soy también la directora del proyecto "Actualización". Responderán únicamente ante mí de su trabajo y solo ante mí. Se les asignará unas dependencias y unas credenciales de bajo nivel que les permitirán acceder a determinados sitios de la base. Por su propia seguridad les sugiero que no intenten vagabundear por la instalación. Comenzarán su trabajo a primera hora del día de mañana. Se les informará de lo que necesitamos y del plazo para ello.

¿Alguna pregunta?