Partida Rol por web

Liv entra en el comedor junto al chico, Edvin. El lugar, a diferencia de lo que ella pensaba, no está muy animado. Ambos se acercan al mostrador con una bandeja para servirse algo de desayuno. 

Livia coge un vaso grande de zumo y un par de tostadas que untará con mantequilla y mermelada. Tras elegir mesa, van a sentarse. La chica se fija en que Jack está por allí también, le gustaría hablar con él, pero no quiere acosarle con el desagradable tema de la noche anterior.

- ¿Puedo preguntarte cómo llegaste aquí y de dónde vienes, Edvin? - Le dije a su interlocutor una vez están sentados y con sus respectivos desayunos delante.

Alberto entra caminando en el comedor y se dirige con un café y un bizcocho a una mesa, el chico se sienta pesadamente y observa a los allí presentes pero no dice nada, parece pensativo

Observo que uno de los chicos del incidente de anoche se acerca a mi mesa.

- Pues claro. ¿Cómo ha sido tu noche después de esos incidentes? ¿El otro pibe se pudo calmar?

Veo que Alberto entra al comedor, y le hago una seña para que venga con nosotros.

- ¿Un mate? - le ofrezco a Jack.

Ya sentado a la mesa y con un desayuno contudente respondí a la pregunta de Livia - Pues digamos que me trajeron a la fuerza, yo me había escapado de casa y unos hombres me atraparon. No recuerdo muchas más hasta ayer por la mañana, cuando nos despertamos en aquella habitación- paro un segundo para beber un poco de zumo - Y vengo de Suecia, de una pequeña región que hay en el sur, muy tranquila la mayor parte del tiempo. Entonces poso mi mirada en Jack, que también estaba por allí. Quería saber como estaba, pero era demasiado temprano para retomar otra vez el tema y además a mi tampoco me apetecía mucho hablar de ello, así que simplemente le salude con la mano y continué desayunando -Pobre Jack, el tuvo que pasarlo mucho peor que yo.

- Y tu, ¿como llegaste aquí?, ¿viniste voluntariamente?- continuó la conversación con Livia, que al menos me mantenía distraído del "otro tema", mientras pensaba también a que podría dedicar el día.

-Gracias- le digo mientras me siento, -Bueno...apenas he dormido nada, un par de horas a lo sumo, creo que intentare dormir luego un rato más ha sido una noche horrible, pero gracias por preocuparte, en cuanto a Ed no se nada más de él despues de que nos metieramos en nuestras habitaciones, ahora le preguntare que acaba de llegar.-

Ed me saluda con la mano y le devuelvo el saludo también, parece cansado como yo.

Ante la invitación a mate que solo se que es una bebida que se suele tomar en sudamerica decido probarlo.

-Nunca he probado el mate pero te acepto la oferta, tiene buena pinta esa bebida, gracias.-

Mientras pruebo el mate, que esta bastante bueno, decido preguntarle por la fiesta de la piscina antes de que yo apareciera.

-Esta bueno esto si, por cierto ¿hubo algo importante antes de que llegara a la piscina?-

Liv asintió a las palabras de Edvin, cuando éste saludó a alguien, ella siguió la dirección de sus ojos y se topó con Jack algunas mesas más allá, que a su vez devolvía el saludo, al verlo, también ella alzó la mano, un gesto amistoso dirigido tanto a Jack como al otro chico que estaba charlando con él (Luis) y quien, si no se equivocaba, también formaba parte de los novatos.

- ¿Voluntariamente? No, nada de eso. - Admitió con una pequeña sonrisa dando un trago a su zumo y poniendo su atención en el otro chico que había entrado en el lugar (Alberto), parecía veterano allí, miraba a los demás con gesto reconcentrado mientras daba cuenta de su desayuno, suponía que pensaba, al igual que todos, en lo sucedido. Livia sabía que muy pronto todos comenzarían a buscar culpables y sospechosos, y el ambiente se volvería irrespirable. Esa idea la hizo preocuparse un poco y no pudo evitar mirar a Edvin a los ojos - De hecho esta gente me encontró y quisieron que les acompañase. Me negué, me contaban algo demasiado bonito para ser cierto. Traté de huir, y creí que lo conseguiría, pero obviamente no fue así.

Me ahorré los detalles, yo no necesitaba recordarlos, y el chico no necesitaba escucharlos. Había cosas más agradables de las que poder hablar.

- Yo soy Española, por cierto. Pareces muy joven, he entendido que... ¿Estás estudiando? 

Me sentí algo más reconfortado al saber que no había sido el único traido a la fuerza, aunque también era algo que me preocupaba, ¿realmente había necesidad de forzar a alguien a ir contra su voluntad? - Sí, bueno fuera de aquí estudiaba en el instituto, aquí por lo que he podido conocer las clases son un poco más "diferentes"- acompaño con un gesto de comillas esto último - Se enfocan sobre todo en el tema de las poderes, como usarlos y demás. Tiene su parte buena, al menos no tengo que hacer problemas de matemáticas- solté el chascarrillo para intentar animar un poco el ambiente ya que no me siento cómodo en las situaciones tristes, aunque era cierto que los números y las ecuaciones eran mis mayores enemigos - ¿Y a ti que te han mandado hacer por aquí? ¿tu también estas con los trabajitos esos para probar tus habilidades?.

Con una bolsa al hombro, en donde traía sus usadas pertenencias deportivas, ingresa al comedor para tomar algo de desayuno reforzado.

Se acerca a retirar nuevamente una bandeja y saca lo que va a consumir. Se percata que Luis se encuentra en el lugar también por lo que se acerca.

- Que tal, Luis. Dice mientras se sienta. - ¿Que nos preparará este lugar por hoy?, ¿Tienes algo pensado?.

Entro con la chica, y me detengo en busca de alguno de los profesores.

Al entrar saludo en general a todos con la cabeza y me dirijo a la zona de comidas para tomar lo que me apetece ese día o más bien lo que se puede elegir. Una vez tengo lo deseado busco una mesa donde sentarme “Por lo visto tendremos el día libre” Pensé tras el comentario de la megafonía.

Mire por si alguna mesa estaba vacía, mirando vi a la chica de pelo blanco que me saludo en la piscina pero que por una cosa u otra no acabamos de hablar.

Buenos días. La salude ¿Puedo sentarme?

Livia asintió a las palabras de Edvin sobre los estudios en aquel lugar y no le sorprendió que todo se enfocase al don o dones que cada cual tuviera, al fin y al cabo para eso los habían llevado allí, para exprimirlos como a limones ¿no? Sus ojos se desviaron hacia la puerta del comedor, esperando ver entrar a Aremi, pero no había ni rastro de ella, más tarde la buscaría para hablar. La última pregunta del chico la hizo volver a la realidad, y se sintió un poco incómoda, así que se removió en su asiento mientras bajaba la mirada y se llevaba un pedazo de tostada a la boca, masticaba y tragaba.

- Sí, yo... - Comenzó a decir- La mujer morena me pidió que buscase a dos personas, una de ellas era precisamente Ming- Na - Dio un trago a su zumo como si lo necesitara para seguir hablando - No he hecho avances por ese lado, y no sé si los haré. Ya no me apetece andar buscando a nadie. 

En ese momento, otra voz a su lado le hizo alzar la cabeza para encontrarse con el chico moreno al que había visto modelar el agua en la piscina la noche anterior (Tommy)

- Oh, buenos días. - Saludó enderezando la espalda y señalando la silla que había junto a ella- Claro, por mí no hay problema... - Antes de decir nada más, miró a su joven interlocutor - Edvin ¿Te importa si nos acompaña?

Pedro, un hombre de aspecto agradable entra casi corriendo en el comedor con una gran cantidad de papeles en una carpeta, el hombre pide una taza de café y se sienta en una mesa un poco apartado mientras empieza a mirar los documentos y a hacer anotaciones en una tablet que traía consigo.

Suzuka entra junto a Anke y al ver a Pedro dice:

- El... es uno de los técnicos del centro

Iñigo se sienta conmigo y Luis y le respondo al saludo.

-Hola tio, que aproveche.- le digo mientras me termino el mate que Luis me ofrecio y me como mis tostadas.