Partida Rol por web

Noches venecianas

Capitulo Uno: Los sotanos de Venecia

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06/06/2019, 21:43
Tommaso Brexiano

Entonces el hombre elegante del grupo de la derecha tomo la palabra. A diferencia de Lanzo, este vestía ropas ligeras, llevaba una simple camisa blanca con encajes y unos pantalones de cuero todo ello adornado con varios colgantes de oro. Para quienes no me conozcan soy Tommaso Brexiano, hijo de estas tierras de la nostra Italia. Comento con voz serena y acento italiano. Los intereses de mi partido, al igual que los de mi amico Lanzo, es recuperar tierra santa,  pero difiero en el camino que quiere tomar. Como figlio de comerciantes sé que la ruta es lo más impórtate, y empeñar los barcos en una travesía tan larga y tan incierta hasta Egipto es algo que no podemos permitirnos. Por ello, propongo atacar directamente Jerusalén como hizo Balduino en la primera cruzada.  

Notas de juego

Podéis tomar la palabra e intervenir en la discusión si queréis, yo iré actualizando esta discusión e introduciendo a más personajes. También podéis acercaros a otro personaje y tratar de hablar con él.

Lo que si os aconsejo, ya que es la primera escena en la que coincidís todos los personajes, es hacer una pequeña descripción de vuestro aspecto físico y forma de vestir. Así todos nos haremos una imagen más viva de la escena, y de los personajes.

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06/06/2019, 22:39
Eleonora de Occitania

Bajo las escaleras siguiendo a mi cicerone. Cuando llego a la sala de inmediato analizo los distintos grupos formados y avanzo apenas unos pasos para situarme cerca de los que, al igual que yo, portan una bermeja flor en la solapa. Me dejo impregnar por los colores, los sonidos, los aromas. Siento la imponente presencia en la tarima y dedico a esa figura una cortés reverencia tras parar los míos pasos junto al grupo más cercano a la entrada que acabo de traspasar. Mis ropas oscuras, pardas, apropiadas para el viaje realzan tal vez mis rasgos. Mi piel luce más nívea, mis cabellos sé que fulguran reflejos escarlata a la luz de las antorchas y candiles. Mis ojos azul cobalto examinan con discreta curiosidad a mis compañeros más cercanos y se posan irremediablemente en la mujer de exótica vestimenta. ¿Qué misterios guardará? ¿Provendrá de las tierras de cuentos y leyendas? La tierra de Occitania, mi tierra natal, no dista mucho de lo que antaño los romanos llamaron Hispania y llegan rumores de guerra y conquista. De grandes caballeros, dignos de ser recordados en épicos cantares, como el Mío Cid*. Me encantaría charlar con ella, pero es entonces cuando el que se presenta como Dux de la Serenísima República de Venecia toma la palabra. 

Lo que se avecina es algo que, en otra medida, ya en vivido. En otras tierras, con otros actores, similar el escenario. Desconozco de guerras y estrategias militares, pero escucho ávidamente lo que aquestas gentes han de decir. Suponer lo que han de callar y lo que jamás confesarían. Mientras escucho y observo, juego con la flor en mis manos, dejando que resbale por mi faz y mis labios, deleitándome de su tacto y aroma. Otro más de los que se entrelazan, cuales finas hebras de una tapiz vivo y cambiante. Me mantengo en silencio, pero sonrío afable si alguien cruza su mirada con la mía y devuelvo saludos si me son prestados.

Notas de juego

*Sí, en la época que nos ocupa ya estaba el Cantar publicado. El terruño tira xDDD.

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07/06/2019, 07:28
Director

Notas de juego

Quien tenga Saber Popular, puede hacer una tirada de Int + San. Pop. Dif. 8, para recon a alguno de los participantes o sacar algo de información por sus vestiduras. 

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07/06/2019, 17:54
Karmen Vjera

Me quedo desconcertada con el incidente continuando el camino indicado. Encuentro lo que ayer se me indico como una cosa muy extraña en Venecia, un sótano. Sin duda el Palazzo de Narses esta edificado sobre tierra, no sobre las aguas de la laguna.

Bajo esas escaleras hasta una sala ricamente decorada y solamente un hombre sentado en una tarima lo que implica que es de esta casa y el de mas alto rasgo, ahora si es o no Narses ya lo desconoce. Observa a varios de los presentes sin detener la vista en ninguno de ellos, prácticamente todos vestidos de distintas formas.

Cuando veo un grupo todos con una flor como la mía me dirijo hacia ellos recriminándome mi desconfianza hacia ella. Karmen si vuelves a verla tienes que compensarla por tu desconfianza.

Mi avance por la sala no despierta ninguna mirada de admiración, soy una niña que apenas tuvo tiempo de desarrollarse como mujer, tapada por un abrigo nada elegante, aunque muy adecuado al tiempo húngaro. Veo caballeros y damas elegantemente vestidos, algunos me resultan ligeramente familiares pero mi educación básica es la de los mercaderes de aldea en aldea. Durante el verano en las montañas y el invierno en la costa de Hungría, pasando los meses intermedios en sus llanuras. Me suenan, pero no se dónde situarlos.

Al llegar junto al grupo que llevan flores en sus ropas hago una respetuosa reverencia colocándome en la posición de menor relevancia, la mas alejada respecto a la tarima.

- Tiradas (1)
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07/06/2019, 19:27
Eleonora de Occitania
- Tiradas (1)

Notas de juego

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07/06/2019, 19:18
Don Diego de Ruiz y Serrano

Estoy de acuerdo con ambos, como ya expresé, con lo que decido por el momento permanecer en silencio y esperar a que otros vampiros expongan sus propias opiniones.

Mientras tanto me fijo en los que me rodean, especialmente en aquellos que al igual que yo portan la rosa roja que nos ha guiado hasta este lugar.

Una niña, de entre aquellos que lucen el distintivo, se acerca a nuestro grupo, supongo que atraída por este hecho. Entiendo su comportamiento, pero su aspecto me dice que no pertenece a la misma clase social que nosotros. Como tal es un error de protocolo que fuera de estas paredes puede costarnos miradas muy peligrosas. Al menos se coloca en el lugar de menor importancia, con lo que solo el haberse acercado sin permiso y no ser reprendida rompe el encanto de nuestra farsa.

Miro con mayor interés a la dama que ilumina la sala con su cabello carmesí. Que me devuelve la mirada, momento que aprovecho para invitarla con una ligera inclinación de cabeza y un suave gesto de la mano a acompañarnos. Simulo ser un caballero joven, deseoso de escuchar a una artista venida de otras tierras.

Vestido con una ligera camisa que asoma por debajo de las anillas de la cota de malla y una espada cruzada al cinto. Pantalones de cuero tratado y unas botas de mota terminan de dibujar el aspecto que todo humano espera encontrar en un hombre que acude a combatir al infiel.

Notas de juego

Dado que veo a personas portando armas entiendo que en este lugar no es problema el permanecer armado. De no ser así asumamos que entrego mis armas antes de entrar.

Por cierto, esto ya por si me hacen entregar las armas. Se supone que los caballeros portaban siempre una daga encima. ¿También se entrega o aquí se sigue esa costumbre?

Por si no se nota, la niña es Karmen y la dama que ilumina Eleonora, por si no se nota, que más de una vez me han dicho que escribo muy "artístico". XD

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07/06/2019, 22:39
Eleonora de Occitania

Me percato de la entrada de una mujer muy joven. Tanto, que apenas parece que hubiera dejado la niñez atrás. También porta una flor roja y la saludo mientras se aproxima a nuestro grupo. Entonces es cuando mi mirada se cruza con la de un caballero que, portando sus armas y con ropas de cierta calidad me saluda y extiende su mano invitándome al grupo. Bajo la vista ocultando por un instante mi mirada bajo mis largas pestañas y luego acepto la tácita invitación. Cierro espacios hasta que mi mano extendida roza la suya y hago una breve inclinación de testa murmurando un suave saludo.

Buona nocte tenga la vuesa merced-digo en un susurro-. Eleonora de Occitania, es un placer hallar a tan galán caballero. Vuestra flor es muy bella, aún no decidí si más que la mía.

Mientras hablo, dejo que mi rosa alcance mi nariz y finjo aspirar su aroma, pendiente de su respuesta.

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07/06/2019, 23:40
Don Diego de Ruiz y Serrano

Don Diego de Ruiz y Serrano, caballero de la Orden de Santiago y, espero, caballero cruzado si se decide emprender el camino hacia los Santos Lugares – me presento, evitando responder a su tácita pregunta, pues considero que hacerle un halago es algo que resultaría pueril y descortés con alguien como ella –. Es un placer conocer a una dama de tan exquisitos modales.

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08/06/2019, 00:12
Karmen Vjera

Consciente de mi baja condición me limito a escuchar en silencio como el caballero y la dama se presentan. Los dos con ricas vestiduras, el recordarlas hace que me asegure de que el abrigo este bien cruzado para ocultar mi vestido aún más humilde.

Con humildad intento hacerme menos visible. Sera seguramente esta sensación la que hizo que los Nosferatu desarrollaran la disciplina que les hace desaparecer de la vista de los demás.

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09/06/2019, 10:24
Eleonora de Occitania

Reconozco el nombre como castellano, aragonés o navarro. Me interesa su historia, pues las órdenes de caballería siempre aportan algo más a las historias. Lamento en mi fuero interno no verlo con el uniforme completo. Es algo que siempre ha de fascinarme en cada torneo que he visitado anteriormente. Gran fuente de inspiración, por su espíritu y su presencia. Sonrío por su galantería y me intereso por su historia.

—Entonces, ¿estáis decidido a partir a la Cuarta de las Santas Cruzadas?-me muerdo ligeramente el labio inferior-Habrá grades y épicas batallas por narrar, entonces, mio signore. ¿Sois compatriota del grande Mío Cid? ¿Es cierto que ganó una batalla tras muerto?

En mis últimas preguntas hay verdadero interés, pues la épica toca una cuerda en mi espíritu que entra en resonancia con mi pasión misma. Y no lo oculto, surgiendo a través de mi voz y el brillo que asoma a mis ojos.

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10/06/2019, 10:02
Francesco

La muerte no es el fin, sino el descanso del cuerpo y el despertar del alma

Aquellas palabras susurradas por Francesco se colaron en la conversación entre la dama y el caballero. Francesco tenía una edad aparentemente mayor que los asistentes en aquella reunión, su habito de monje sin duda no pasaba desapercibido entre las espadas y las armaduras predominantes.

Un largo y oscuro ropaje, denotando el desgaste del largo viaje. Muchacha, acercate dijo con su voz autoritaria hacía la chiquilla que se "ocultaba tras ellos", no hace falta que te ocultes en esta sala y si llevas esa rosa es porque tienes el mismo derecho de estar aqui que los demás

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10/06/2019, 12:28
Narrador

Mientras algunos de los presentes mostraban interés en el debate principal entre Tommaso y Lanzo, otros formaban pequeños grupos que charlaban en susurros. Algunos cainitas simplemente se habían acercado a Venecia en busca de nuevos contactos, igual que el comerciante que va a la feria de ganado y sus productos son verduras. O como el selecto grupo de las “flores rojas” que estaba empezándose a conocer.

 

Por su parte Lanzo seguía argumentando con arrogancia que el objetivo de la cruzada debía de ser primero Egipto, a lo que Tommaso respondía con vehemencia que no había que desviar las naves a un objetivo secundario.

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10/06/2019, 12:31
Khadijah Saadeh

Entonces otra voz se unión a la discusión, era la mujer de la túnica de seda ricamente adornada. ¿Y porque atacar? Pregunta con voz melodiosa rematado con acento árabe. Mi nombre es Khadijah Saadeh, y aunque mi origen sea árabe, soy cristiana.  Lo único que han conseguido las Cruzadas es crear más sufrimiento en la región y a sus habitantes. Nadie ha traído el reino de los cielos a Palestina. Solo dolor y sangre. Niños muertos en las manos de sus madres. Detener esta rueda de destrucción.

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10/06/2019, 12:35
Narrador

La contestación de Lanzo es una sonora carcajada forzada, y gesto de asco en su cara. En su mente se empezaba a buscar los insultos más soeces y descalificadores cuando una mano le detuvo y tomo la palabra por él.

 

Señorita, todos desearíamos que no se derramara más sangre. Quien hablaba era otro integrante del grupo de Lanzo. Al igual que su portavoz, bestia ropas gruesa de piel y portaba espada en el cinto. El mundo es un lugar cruel, lleno de maldad. El reino de los cielos no está aquí, en la tierra, como su nombre indica, el reino de los cielos está en el cielo. Muy lejos de nuestro alcance. El caballero, al pronunciar cada frase remarca la última palabra de ella. Sino atacamos nosotros, lo harán ellos, los musulmanes, los árabes. ¿Qué más da su nombre? Entonces solo cambiara que los niños muertos serán cristianos en vede árabes. Muchos murmullos de aprobación recorren la sala, y sale a relucir el nombre del interlocutor. Es Roland du Rocher, otro cainita de la sangre de Hardestadl, un ventrue.

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10/06/2019, 12:43
Francesco

Casi a continuación de que Francesco invitará a la jovencita a unirse a su grupo por fin se dispuso a intervenir en el debate principal, como si aunque no lo aparentará hubiera estado muy atento a las palabras de unos y de otros.

El reino de los cielos esta lejos del alcance de los demonios de esta sala, supongo que no es algo que anhele la mayoría de los aquí presentes pero Jerusalem es un objetivo para todos los aquí presentes. Para los arrepentidos de su condición Jerusalem es la puerta al purgatorio que tanto anhelan, para los que buscan gloria Jerusalem y la cruzada serán recordadas mucho despues de nuestras inmortales vidas. Para los que no tienen nada, Jerusalem es una oportunidad y una esperanza.

La voz de Francesco resonaba en las abobedadas paredes del sótano con la solemnidad que un emisario de la iglesia solo podía tener.

No es voluntad de los hombres o inmortales decidir los designios del señor, ¿Jerusalem será tomada y devuelta a los cristianos, con o sin los aquí presentes y no hay mejor guerra que la que se libra lejos de casa...

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10/06/2019, 14:08
Eleonora de Occitania

La súbita, inesperada y no invitada intervención del monje me hizo dar un ligero respingo. Respondí a sus palabras con un leve asentimiento de testa, gesto cortés que ni negaba ni daba consentimiento a lo dicho por el pater. Y también porque no dio pie a contestación al invitar a la chiquita a un grupo en el que él ni siquiera había sido llamado a participar. No obstante, viendo el apuro de la pequeña, le dediqué una sonrisa y le tendí la mano de forma amigable. Incluso en el mundo Cainita muchas veces seguíanos pesando la nuestra naturaleza femenina. Cuando la pequeña se nos hubo acercado iba presta a presentarme, pero la voz de varios seguía alzándose, incluida la del fraile. 

Negué con la cabeza. Por más que las grandes gestas dieran pie a bellos y eternos relatos, la realidad era tan cruda como la dama indicase. En mis breves años como mortal y vampiro no recordaba yo hallarme en tales circunstancias, pero jamás me entusiasmo ningún fanatismo. Si bien podía entender la pasión que encendía los corazones de los guerreros, pues era pareja a la mía por los cantos y narraciones. No era mi afán posar demasiadas vistas en mí, pero no pude evitar ciertas conexiones y empatías por la exótica mujer. Y también con la sangre de Haardstadt, cada uno por diversos motivos. 

Ladeé la cabeza y sopesé sus argumentos, que obedecían tanto a cabeza como corazón. Intrigada también por cuáles se debían a qué. Me concentré de nuevo en el debate, fruncidos ceño y labios en gesto de concentración.

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10/06/2019, 17:50
Karmen Vjera

A pesar de haberme colocado en el lugar de menor preeminencia parece que él que cuando vivía era mas mayor, que viste de una forma severa, se siente ofendido. Su tono autoritario desmiente sus palabras y desde que recuerde siempre ha sido para mi confiar en el tono que en las palabras en sí.

De todas maneras, no puedo resistirme a un habito tan arraigado como el de la obediencia. De siempre he tenido que obedecer a mis padres, a los mayores de la familia, a todos los hombres, después a todos los de las clases superiores… La no vida no ha cambiado para nada eso como descubrí en mis primeras noches.

Mientras mis pasos me acercan, como por propia voluntad arrastrándose hacía esa figura autoritaria veo que la dama del grupo me alarga la mano. Sin dudarlo alargo la mi cogiéndome a la suya mientras la miro con agradecimiento.

Mas segura sin soltarla aguardo a que acabe de hablar para decirle. – Le suplico que me disculpe señor. No tenia la intención de molestarlo, ni a usted ni a nadie.

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10/06/2019, 18:09
Eleonora de Occitania

Cierro mi mano en torno a la de la niña y la aprieto suavemente. Está bien que haya pedido disculpas, pero nada más es necesario por el momento. Aquí somos todos hijos de la Estirpe y las castas humanas pierden su importancia. Le hago un gesto y me agacho para susurrarle algo al oído a la pequeña.

—¿Cómo es que os llamáis, pequeña?-pregunto dulcemente-Aquí se están decidiendo grandes cosas y hay mayores y más fuertes voces que las nuestras. Pero si deseas hacer saber tu opinión, hazlo, si bien medita bien y escoge mejor las palabras. Aunque me da que los caballeros y la dama son los que van a llevar el peso del debate.

Tampoco deseo extenderme mucho, pues no es de buena educación hablar y cuchichear mientras otros debaten. Pero sin ánimo de implicarme aún en tales decisiones, aguardo a ver qué voces se van sumando al coro y en qué armonía lo hacen.

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10/06/2019, 18:35
Karmen Vjera

Me relajo al preguntarme con voz dulce. – Me llamo Karmen Vjera, era la hija pequeña de unos humildes comerciantes. Los que he conocido desde la no vida siempre me recuerdan mi procedencia.

Asiento ante su consejo. – Si señora…, primero escuchare y después diré lo que me indico mi voivoda.

Aguardo un instante por si me responde y sino permanezco atenta a lo que dicen, sin intentar soltarme.

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12/06/2019, 12:19
Anna Sgorina

¿Por qué reniega del reino de los cielos en la tierra? Comenta la mujer que va vestida al estilo bizantino con una larga túnica blanca con mangas sobre la cual llevaba una ancha clámide azul, abrochada en el hombro derecho por una vistosa fíbula de cobre. Una chica sabe que en el estudio se encuentra la razón, y en la razón se encuentra la salvación. Una chica a oído leyenda, igual que todo los condenados de la sala. Una chica sabe que en las leyendas hay parte de razón.