Partida Rol por web

Nunca sigas a las Hadas... 2: El Sendero Rojo

Escena de Kate

Cargando editor
09/11/2018, 12:01
Kolda

Kolda se quedó apoyada en la puerta, con una mano en el pequeño pecho. Respiraba con dificultad, aunque la habían visto volar mucho más rápido que en ese momento. Más que cansancio, debía ser la tensión.

Bueno... lo conseguimos —dijo—. No me hace ninguna gracia estar aquí, pero si es verdad lo que has oído, Kate... teníamos que venir.

Miró hacia las escaleras.

Quizá sea una trampa. Pero cuando has hablado de los baúles... Así fue como me rescataron a mí hace un año. Yo también estaba encerrada en uno de esos baúles. Espero que tengas razón y no estemos metiendo la pata hasta el fondo...

Cargando editor
13/11/2018, 20:56
Kate

Intenta recuperar la respiración después de la carrera. No es buena en gimnasia y se cansa mucho más que los demás. Aprieta la mano de Robert, que podría haberla dejado atrás para huir solo, mientras mira alrededor. Parece que hace mucho que no se ha usado esa cama así que seguramente la casa esté en desuso. Pero no parece que esté sucia.

Mira hacia la escalera.

-¿Hay que subir? - pregunta temerosa.

Al menos, el alien no les molesta más.

Cargando editor
14/11/2018, 20:48
Kolda

Kolda miró hacia las escaleras y asintió.

Los baúles estaban arriba —dijo—. Pero cuidado... con esta cabaña pasa algo raro. Los pisos superiores son infinitos...

Ante la mirada de incredulidad de Robert y Kate, el Hada se encogió de hombros.

Yo tampoco lo entiendo, pero se puede estar constantemente subiendo y nunca se llega al último piso. Por lo menos, el año pasado no pudimos llegar...

Se le hacía muy raro estar en esa cabaña de día y sin que estuviera rodeada de una miríada de Hadas malvadas... pero por lo demás, la cabaña parecía la misma. Así que suponía que la parte superior también lo sería.

Cargando editor
14/11/2018, 20:51
Robert

Robert se quedó con cara de no poder creerse lo que Kolda decía, pero miró a su vez las escaleras y se enderezó.

Vale —dijo—, si esos baúles están arriba, subiremos. Iré delante...

Y se dispuso a subir los escalones con cuidado, pero con decisión.

¿Vienes, Kate...?

Cargando editor
19/11/2018, 16:49
Kate

Mira hacia arriba y se asusta un poco por lo que dice Kolda, pero no tienen más remedio que avanzar. Fuera solo quedan criaturas del espacio exterior que quieren hacerles cosas malas. Hasta la cabaña parece un lugar seguro en el que refugiarse, incluso si es donde pasaron cosas malas el año anterior.

-Vamos...

Sigue a Robert, subiendo los peldaños uno a uno.

Cargando editor
25/11/2018, 22:03
Narrador

Poco a poco, Kate y Robert fueron subiendo los peldaños de la escalera en la cabaña. A medida que ascendían, la extraña y diáfana luz parda que iluminaba el bosque y que se colaba por las rendijas entre los troncos, fue desapareciendo. Era como si fuera se estuviera haciendo de noche.

Kolda volaba delante de ellos, abriendo la marcha y avanzando con sumo cuidado. Cuando llegó al piso superior, pudieron escuchar su vocecita dándoles la señal de que no había peligro.

Al llegar arriba, vieron que la escalera giraba y seguía ascendiendo, como si hubiera otro piso por encima de ese. Aquello era muy raro, porque efectivamente desde fuera habían podido ver que la cabaña no era tan alta. Pero el Hada ya les había advertido de que en esa cabaña pasaban cosas raras. Kate y Robert miraron a su alrededor y, en la penumbra, pudieron distinguir que junto a las paredes de ese piso había baúles grandes y con aspecto de ser muy viejos. Todos ellos estaban cerrados, y no se oía ni el vuelo de una mosca a su alrededor.

Cargando editor
25/11/2018, 22:07
Kolda

Kolda observó la estancia y asintió con gravedad.

Es todo como hace un año —dijo, lo cual no acababa de estar muy claro si era algo bueno o malo—. Estos son los baúles... ¿Qué hacemos ahora?

Miró a Kate, para saber si ella tenía alguna pista más sobre cómo encontrar a ese Hada que había hablado con ella.

Cargando editor
30/11/2018, 12:17
Kate

Sigue cogiendo la mano de Robert, con fuerza, mientras suben. Parece que se le va a salir el corazón del pecho ahora que ya están ahí... y es que le late tan fuerte. Al final llegan a la primera planta. Se queda, primero, mirando con suspicacia las escaleras que llevan al segundo piso y luego mira hacia abajo, para ver si aun se puede ver la planta baja. Tiene miedo de acabar perdiéndose y que no puedan encontrar la salida.

Luego su mirada se centra en los baúles.

-No dijo nada... solo que se acababa su energía. Que estaba muy cansada. ¿Pasa algo si abrimos todos los baúles?

Intenta concentrarse y hablar con el hada.

Cargando editor
26/04/2019, 00:03
Kolda

Kolda sopesó la idea. No había duda de que era arriesgada, pero... la última vez que habían hecho algo como eso había sido un año atrás, en la cabaña del bosque de verdad. Y no les había ido mal.

Bueno, es una posibilidad —dijo—. Quizá sea buena idea. Desde luego, no conseguiremos nada quedándonos quietos...

Se mordió el labio inferior, indecisa. Finalmente asintió.

No creo que podamos hacer otra cosa. Venga, abrámoslos y veamos qué pasa...

Cargando editor
26/04/2019, 17:11
Kate

Mira hacia los baúles, quizá decidiendo cuál abrir primero. La verdad, es que no tiene plena confianza en que todo eso salga bien... Sacude la cabeza con fuerza, como intentando sacarse los pensamientos negativos de encima. Tiene que confiar en que todo saldrá bien.

Se acerca a uno de los baúles, aun sosteniendo la mano de Robert.

-Podemos comenzar con este. Al fin y al cabo, debemos abrirlos todos hasta que encontremos al hada.

Cargando editor
28/04/2019, 11:35
Robert

Robert asintió con decisión y se agachó junto al baúl. Puso una mano en el cierre, y tras un momento de duda, lo abrió y tiró con fuerza de la tapa hacia arriba. Ahogó una exclamación de sorpresa al ver lo que había dentro, o más bien al no ver nada... porque el interior del baúl era una negrura absoluta. Era como un pozo sin fondo.

Esto no es normal... —murmuró el niño. Pero... ¿qué era normal ya en ese mundo?

Cargando editor
28/04/2019, 11:39
Kolda

Kolda se asomó al interior del baúl por encima del hombro de Robert y exhaló un suspiro.

La última vez no pudimos fijarnos mucho en el interior de los baúles. Pero bueno... supongo que esto al menos es mejor que algo más peligroso. ¿Abrimos los otros?

Cargando editor
29/04/2019, 12:28
Kate

La oscuridad infinita del baúl no le inspira demasiada confianza. Pero, como dice Kolda, mejor eso que algo más peligroso. De todas formas, por seguridad, cierra el baúl para que nada pueda salir de ahí cuando no estén mirando. Lo último que les falta es a un monstruo intentando atacarles por la espalda.

-Abramos el siguiente...

Se acerca al siguiente baúl y abre el cierre para, después, abrir la cubierta. Inmediatamente, se aparta, por si acaso. Nunca se sabe lo que puede esconderse en el interior de esos baúles, aunque no lo haya vivido la vez anterior, tampoco quiere vivirlo en ese momento.

Cargando editor
29/04/2019, 20:47
Narrador

Kate se apartó de un salto del baúl al abrirlo, pero nada se abalanzó contra ella. Era como el primero, la entrada a un pozo del que no podían ver el fondo. Sin embargo, en esa ocasión hubo algo diferente. Aguzando el oído, pudieron escuchar unas voces que parecían provenir del interior del baúl, como si hubiera alguien dentro de él. Eran al menos dos voces y parecían infantiles, pero llegaban amortiguadas, como si las personas que hablaban estuvieran muy lejos. Ni Kate ni Robert llegaron a distinguir lo que decían, aunque les resultaban familiares...

En ese momento, oyeron un golpe seco que venía del piso de abajo de la cabaña.

Cargando editor
30/04/2019, 21:51
Kate

Habría preferido mantener el baúl abierto para intentar descubrir a los propietarios de esas voces tan familiares, pero se escucha un ruido en la planta baja. Da un respingo y mira a Robert y a Kolda. No quiere ni respirar por si es un enemigo temible. ¿Y si son esas hadas malvadas? Pero se las oiría reír y burlarse de ellos.

Aprieta la mano de Robert.

Cargando editor
01/05/2019, 14:36
Kolda

Kolda levantó el vuelo inmediatamente en cuanto escuchó el ruido.

Alguien ha entrado —dijo en voz baja—. Y está subiendo...

Efectivamente, podían oírse pasos que iban hacia el piso de arriba de la cabaña

Cargando editor
01/05/2019, 14:37
Siobhan

Esperaron durante unos segundos que parecieron eternos, temiendo ver aparecer por el hueco de la escalera a uno de esos seres grises. Pero lo que apareció fue una melena oscura, y reconocieron inmediatamente a Siobhan.

¿Chicos...? 

Cuando la niña vio que había encontrado a sus compañeros, se abalanzó sobre ellos y no pudo evitar dar un abrazo a Kate.

¡Estáis aquí! ¡Qué alivio! ¿En qué estábais pensando al echar a correr vosotros solos?

Cargando editor
03/05/2019, 17:10
Kate

Kate se espera lo peor cuando se escucha que, quien sea que haya entrado, comienza a subir. Se prepara para enfrentarse al enemigo cuando esa persona se abalanza sobre ellos y... ¡la abraza! Siobhan es el enemigo a abatir. Está aliviada, pero como no escucha a nadie más, le preocupa que se haya decidido a ir sola a la cabaña. Y más cuando se ha opuesto desde el principio.

-¿Siobhan? ¿Y los demás?

Evidentemente, ya dijo su motivación para echar a correr. 

Cargando editor
04/05/2019, 12:56
Siobhan

Siobhan empezaba a darse cuenta de dónde estaba, y por la expresión de su rostro estaba claro que no le gustaba un pelo.

John se ha quedado en el árbol, cuidando de Zaina y Jess —dijo—. Después de que os fuisteis, Jess y Anette fueron también a donde quiera que esté Zaina, para ayudarla. Pero claro... Jess se desvaneció también, y mientras estén en ese estado, están indefensas. Por eso he dejado a John con ellas.

Respiró hondo, porque le faltaba el aire después de haber hablado muy rápido.

— Cuando llegamos aquí, nos topamos con más seres de esos grises. Por suerte, me abrí paso entre ellos e incluso creo que dejé a uno inconsciente. Melhi me ayudó. Ha venido conmigo, está vigilando abajo. ¡Melhi, ya puedes subir!

Un segundo más tarde, el Hada apareció también por el hueco de la escalera, feliz de haber encontrado a los demás.

Esas otras... Caperucita y Alice, vinieron también conmigo, pero han desaparecido. Como si se hubieran volatilizado. Sigo sin fiarme nada de esos personajes de cuento... En fin, ¿qué vamos a hacer ahora? ¿Qué estábais haciendo con esos baúles?

Cargando editor
04/05/2019, 13:04
Melhi

Melhi sonrió nerviosa al ver a Kate, Robert y Kolda.

Hola, chicos —saludó—. Menos mal que no os ha pasado nada...