Partida Rol por web

Por un momento me quedo pensando si entregarle el pez al parroquiano y desentenderme del tema, o volver al barco con el cubo y que eso genere alguna pregunta que no quiero responder en este momento. Niego con la cabeza y miro al cubo, ya lo soltaría cuando llegara al barco.

-Si nos vemos en otro momento o en otro lugar, recuérdame que te invite a una cerveza para darte las gracias -le palmeo el hombro y me voy de allí camino al puerto, con el dichoso pez aún en las manos-.

Al menos tenía información más concreta para encontrar el barco: un pesquero junto a un místico y frente la tienda de marisco.

Miro a mis compañeros y sonrio luego de conseguir los pescados. Pues ahora que tenemos las cosas que haremos chicos, vamos a buscar a los demas para comentarles las buenas noticias?.

 Quedo mirandolos en busca de una respuesta rapida.

Asiento a lo que dice Musashi.

Estoy de acuerdo vayamos a buscar ese barco a ver en que estado se encuentra... sugiero

Aqui ya no tenemos nada que hacer. Quizás se me ocurra alguna melodía para bautizar nuestro nuevo barco. Siempre busco nuevas inspiraciones para componer, aunque espero no sea un funeral. Digo con cierta ironía en espera que el barco no tuviera que necesitar reparaciones. Aunque fuera viejo, almenos que su estado fuera potable.

Mientras camino, cogí mi vieja guitarra e iba tocando las cuerdas haciendo minimo ruido, para buscar nuevas sintonías.

De camino a la búsqueda del barco , pasáis por la taberna donde habíais hablado con Yoshaku , parece ser que el lugar está clausurado y un par de marines custodian la puerta ; no hay gentío alguno alrededor por lo que hace ya un tiempo que debieron hacer su trabajo . Ahora sin saber donde estaba el dueño del barco tendríais que buscar otra manera de hallar el barco , aunque seguro que estaba atracado en algún lugar del puerto , pero ¿ cual sería ? . 

Ya en el puerto , revisas mentalmente donde debería estar ; encuentras un par de tiendas de marisco pero no tienen enfrente ningún barco de las carácterísticas que te habían comentado ..... hasta que a lo lejos divisas un barco que parece ser el que comentaron , y enfrente puede apreciarse un cartel con un dibujo de unas pinzas de cangrejo . Cuando te acercas más , puedes ver que en el barco de al lado parece haber varias personas preparando las cosas para hacerlo zarpar , pero ... ¿ debería ser ese el barco ? en todo el muelle visto hasta ahora era el único que encajaba . 

Ah... Típico. Te marchas un momento y la marina te fastidia tus planes. Es incluso posible que haya sido culpa de Ryunosuke, cuando abrió de más la boca, y que nos estén siguiendo específicamente a nosotros. Aunque puedo estar pecando de egolatría... ¿Realmente somos tan importantes?

Con paso firme y seguro, primero miro a mis compañeros. De por si era un tipo bastante silencioso, algo tímido a decir verdad... Pero en aquel entonces espero que realmente me dejen hablar con la marina. En teoría tenemos un pacto, y una pregunta siendo amable no haría daño.. ¿Verdad?
 

-Disculpeme...

Comentó, acercándose al primer marine con el que se cruzara, de los que habían en la puerta. Con una mano se rascó la nuca y trató de sonreír

-Estamos buscando a un hombre que nos pidió un favor..  Es un hombre de piel bronceada y curtida , musculoso y entrado en años. Se llama Yoshaku... ¿Por casualidad no lo habreís visto hacia donde se marchó?

En todo momento traté de mantener la sonrisa y las buenas formas: No quería que me viesen como una amenaza o algo parecido.

El que parece el jefe se acerca a ti y te mira de pies a cabeza . 

No tienes pinta de ser alguien capaz ni de fregar el barco para pagar un pasaje , así que pierdete antes de que me arrepienta y te cuelgue del mástil . 

Seguidamente , las risas de sus compañeros le siguen la gracia ; pero él sigue mirandote con cara de pocos amigos esperando que te bajes del barco y te fueras por donde quisiera que hubieras venido . 

Nuestro compañero se acerca a preguntar a los marines justo antes de que lo haga yo me escabullo entre las sombras tratando de pasar desapercibida...
 

Veo como mi compañero va directo a los marines a preguntarle algo, miro alguna persona normal para pasar, intentado observar alguna dama que no pudiera con sus compras para ayudarla.

Algo no termina de encajar, me jugaría lo que fuera a que ese tiene que ser el barco del viejo, pero no entiendo cómo hay gente en él preparándolo para echarlo al mar. ¿Nos la habría jugado el viejo? ¿Alguien se habría aprovechado de su reciente encarcelamiento para robárselo antes que nosotros? Intento ver si las personas que están a bordo son conocidos, vamos, si son Lima y el resto.

Me acerco con paso rápido, por si tuviera que utilizar la fuerza en el peor de los casos. Sin disimulo ninguno, completamente a saco, estaba en juego la posibilidad de salir de esta isla aunque... enfrentarme a unos cuantos marines sería un buen empujón para hacerme un nombre... pero no, prefería salir de aquí ya.

Sonrio mientras miro al tipo que me habla

Pareces un tipo muy duro la verdad, y seguro que asi te ven tus animadoras. Pero no me subestimes o me veras fregar la cubierta con tu cara. Aunque seguro que un tipo tan duro como tu, no se amedrentara con alguien como yo? O si? Que me dices tipo duro quieres hacer algo de ejercicio? O quiza seras tan cobarde de mandar a una de tus bailarinas?

Mientras hablo sujeto el mango de mi lanza preparado para la accion

El jefe mantiene su postura sonriente mientras se saca un palillo y lo empieza a mordisquear. Vaya tienes una lanza muy bonita, pero de seguro podrás solo contra mis chavales?

Sus secuaces se preparan para la acción y toman posición para la batalla. Armados con una cadena, un cuchillo, un bate de beisbol y una barra de metal. Los 4 se alienan en fila para a atacarte todos juntos.

Como anti heroe que lleva el diablo una cara conocida aparece. Oni aparece en el muelle corriendo con toda la rabia que marcaban esas patillas. Ya desde lo lejos pudo divisar extraña situación en el barco, y desde luego no iba a permitir que perder el barco y quedarse en esa isla. Con una mirada rápida entendio la situación: Lima estaba defendiendo el barco ante una pandilla que querían robarlo. Sin mostrar palabra alguna, se coloca en posición junto a su capitán.

El marine es un hombre algo rechoncho y te informa de la situación: Venis en busca de ese borracho? No hace mucho se lo han llevado preso al cuartel. Cambia la escopeta de hombro, pasando del derecho al izquierdo. Sino quereis problemas, mejor no involucraros de forma alguna. Esas palabras, aunque con tono simpaticon, marcaban la presencia de un cuartel en la Ciudad y que las marina no se andaría con chiquitas.

La calle estaba vacía en esos momentos, pero aparece paseando un hombre borracho cantando con botella en mano. Aunque no sabeis quien es, os suena la cara de haberlo visto antes en el bar, cuando conocisteis a Yusaku.

1 de enero, atun casero, 2 de febrero, pirata que entierro, 3 de marzo, por la playa descalzo, 4 de abril, la marina esta aquí, 5 de mayo el barco partido por un rayo, 6 de junio en el río yo me ducho, 7 de julio el rey pirata ya está aquí!!!! Una extraña canción iba tarareando, mientras se iba apoyando por la pared contraria, tropezandose alguna vez con algun escalon de entrada.

El jefe viendo la situacion se echa unos metros atrás y grita: Hacedles pedazos? Solo son dos miserables cucarachas!!

El Secu 4 ataviado con su cuchillo se lanza contra Lima con la intención de hacerle un tajo en el pecho mientras Secu 1 lanza su cadena para reternerte un brazo.

Secu 2 con su bate se movio lateralmente para pegar un golpe en todo el abdomen a Oni: Sin armita, eh!! Pues toma!!

Ya decía yo que algo no me olía bien aquí, mucho movimiento en torno al barco.

-Vaya, así que tras lo que pasó en la taberna has venido a por más... no creí que fueras tan tonto -mis palabras van dirigidas hacia el supuesto jefe, que ya había saboreado uno de mis puñetazos-. No creo que tus amigos vayan a salir mejor parados -suelto el cubo donde estaba descansando tranquilamente el pez y me pongo en guardia, esperando a que el secuaz viniera hacia mí-.

-Ni te imaginas lo ridículo que quedas hablando con diminutivos, un tío grande como un trinquete... que decepción -sin dejarle tiempo a responder descargo un fuerte golpe hacia su cara, buscando golpear su nariz con la base de la palma de mi mano*-.