Partida Rol por web

Tras una filigrana en el aire, que es lanzarse desde su observatorio (era el que os miraba con cara rara desde la popa del barco) y aterrizar a media pasarela os interpela el bailarín del viento que es este marinero: - Saludos, Caballeros…” comenta con aire amable y sin prestar muestras del esfuerzo que acababa de realizar.  -¿Tienen asuntos que tratar con el Águila Negra o se han perdido? Esta maniobra os deja extrañamente cerca del marinero por vuestra carga y os entorpecéis, ya que es estrecha y vuestras pesadas armaduras no lo ponen nada fácil.

No detengo la carga del gélido, lo que obligaría al marinero a apartarse a un lado o a dar un paso atrás, o bien a vérselas con el pesado reptil. Subiendo hacia la cubierta, lanza en ristre y con mis caballeros siguiéndome, respondo. - Tenía la misión de entregar la carga que vuestro barco había de recoger, y de eso hace ya varias horas. Exigo una compensación por todo ese tiempo desperdiciado, marinero. - Bajo la lanza de caballeria, animando a mis caballeros a imitarme, para obligar a los marineros a mantener la distancia, pero sin lanzarme al ataque.

Espera, espera. Antes de que sigas. El gélido no puede subir sin destrozar el portalón. Os consideraba subiendo a ambos, a tu subordinado y a ti a pata.

Lo digo por si quieres rehacer el post, ya que ... no estamos los dos en la misma comprensión de la situación.

Cuando veo a algunos marineros bajar para empezar a cargar, ordeno a mis caballeros acercare, y formamos los cuatro frente a la tabla que une el barco con el muelle, lanzas en ristre para impedir que los marinos se acerquen más de lo debido. - Tenía la misión de entregar la carga que vuestro barco había de recoger, y de eso hace ya varias horas. Exigo una compensación por todo ese tiempo desperdiciado, marinero. - Respondo a aquel druchii que se había colocado justo en la rampa de subida.

La tropa está destapando y montando un lazavirotes que hay en proa.

El marinero que se interpuso te habla con una actitud altiva y confiada: - Compensaciones os pedirán a vos el propietario de esos caballos, señor…, respondió sin demora  …o en todo caso, al señor de las bestias encargado de alimentarlos. Se toma un respiro mientras juguetea con los dedos sobre su cintura que está adornada por un cinto de cuero extrañamente ancho. - No creo que a el Vaulkar de Clar Karond le haga ni pizca de gracia que sus comerciantes sufran pérdidas de tal calibre…, y da un par de golpes de tacón sobre la tabla que uno barco y puerto Especialmente cuando estos son tan cercanos el uno del otro, ¿no?

Es un marinero veterano. Lo notas por que el movimiento de las olitas al pasar otra nave cerca, menea todo el caso y este hombre parece estar suspendido en el aire: -Os sugiero tomar medidas para que incidentes como ese no se vuelvan a repetir, Caballero…”, ladea y cabeza y continúa hablando. -...Así como no llevar malentendidos a la cubierta de mi barco.

- ¿Malentendidos? Marinero, si tú hubieras llegado a la hora acordada, todo esto no habría sucedido, ergo sin tu retraso este pequeño intercambio hubiera ocurrido sin percances. Te hago responsable a ti, pues, de todos los gastos relacionados. Es tu mercancía, al fin y al cabo. - Digo con una sonrisa maliciosa mientras desmonto, indicando a mis caballeros que hicieran lo mismo. A continuación cargo a través del portalón. Sabía bien cómo se usaban los lanzavirotes, y que la mejor forma de esquivarlos era lanzarse a la carga. Si disparaban podían darle a su capitán, o peor aún, a su propio barco. No iba a permitir que nadie me amenazase y tuviera que escurrirme con el rabo entre las piernas. Si tenía que morir allí, antes le borraría a ese engreido marino la sonrisa de la cara.

Escena parada hasta nueva orden.

Pasamos a escena conjunta.

La capitán de puerto está regañando al capitanzucho y parece que quiere que quite los carros.

Puedes largarte y escapar ... desentendiéndote de todo aquello sin que te salpique. ... o hacer lo que mejor te parezca.