Partida Rol por web

Aunque me da la sensación de que Svenn se muerde la lengua, por lo menos no de manera literal, creo se trata de una buena persona y por eso le doy unas suaves palmaditas en su huesudo hombro en un intento de consolarle.

-Una maldición de palabra no es igual que una maldición conjurada o invocada, Svenn, lo se por experiencia -le digo al esqueleto- Si tu amada sigue existiendo, ten por seguro que haremos todo lo que esté a nuestro alcance para rescatarla y traerla de regreso. Además, no te tortures con las palabras de la tal Leah, tú y Clea se conocieron y durante un buen tiempo fueron felices así que parte de esa "maldición" nunca llegó a cumplirse y lo que sucedió no tiene nada que ver con los deseos de una sacerdotisa resentida.

Finalmente, nuestros pasos nos llevan hasta una especie de templo-anfiteatro que no tarda en ser ocupado por nuestra no-muerta escolta y en cuya parte central se ubica un esqueleto con vestiduras similares a un sumo sacerdote que sin lugar a dudas se trata de Hargrimm, el líder de las Naciones Muertas. Tras recibir la bienvenida del "sumo esqueleto" y luego de que este nos explique brevemente la situación, escucho como el gith y como Tauron intervienen. Sin embargo, al oír las palabras del medio-demonio y su "jerga de enajulado" no puedo evitar mover la cabeza negativamente, si estuvieran en mi mundo natal y el líder en cuestión tuviera poca paciencia este ya hubiera ejecutado al infernal o, como mínimo, le habría dado una docena de latigazos por hablar con tamaña falta de respeto.
Independientemente de lo opino e imaginando que soy el que más experiencia tiene en el campo de la investigación y en el trato con superiores, me adelanto unos pocos pasos y me dirijo hacia Hargrimm.

-Os saludo respetousamente, noble Hargrimm, y como ser afín a la energía negativa ni vos ni vuestros súbditos recibiréis ningún daño por mi parte, a menos que emprendáis hostilidades -digo realizando una rápida reverencia y luego esbozando una amplia sonrisa que muestra mis colmillos y revela mi ascendencia vampírica a los presentes- Ahora, por mi parte estoy dispuesto a aceptar con sumo gusto vuestra remuneración pero antes deberíamos establecer los límites ya que desde ciertos puntos de vista pueden considerarse difusos. No se que opinarán mis compañeros pero por lo menos a mi nombre diré que estoy dispuesto a revelar quien está detrás de las desapariciones y a ponerle un fin, siempre y cuando los causantes no sea un grupo numeroso o una facción de Sigil que estén por fuera de nuestras capacidades eliminar -comento con una actitud respetuosa- En cuanto al trabajo en si, quisiera que nos relatarais con lujo de detalle todo el asunto de las desapariciones. También quisiera saber hace cuanto iniciaron, quienes han desaparecido, que sospechosos tenéis y que nos dierais acceso total tanto a las moradas de las víctimas como los lugares donde supuestamente desparecieron, además de la completa cooperación de los familiares y allegados de las víctimas -agrego con un tono neutro que luego termino por suavizar- Os pido disculpas si algunas de mis palabras os llegarais a ofender pero como investigador avezado debo tener en cuenta todos los aspectos, tanto remunerativos como a la hora de determinar el área de investigación.

Mientras hablo con Hargrimm le dedico una mirada a mis compañeros para que me apoyen, si no es por afinidad por lo menos que lo hagan para que todos nos beneficiemos.

Tras recorrer otro tramo acompañados por los no muertos “curiosos”, llegaron por fin ante su contratante, Hargrimm.

Este era un esqueleto bastante más imponente, y algo en él le hacía parecer un líder.

Su tono cortés fue de agradecer, así como la promesa de un viaje al plano que quisieran.

Claro que apenas habían obtenido información sobre lo que querían que investigaran.

Le sorprendió la lista de preguntas que formuló Mattheus, pero asintió con la cabeza como para hacer entender que él opinaba lo mismo, sobretodo en el punto de querer saber el máximo de detalles posibles.

Soy Zolgren Vrinn, y es un honor poder hacer tratos con vos.

No tengo nada que añadir a las preguntas de mis compañeros, cualquier pequeño detalle por insignificante que os pueda parecer podría sernos de gran utilidad para la investigación.

Dijo finalmente, esperando su reacción.

Entiendo los, "hola" de mi clase, pero los sonido de los zombi no mucho. Pero viendolo desde un punto de vista logico, seria un "bienvenido u hola". Asi que simplemente agacho la cabeza en señal de entedimiento mutuo. Luego, dentro de la capilla mi curiosidad se despierta ante las oraciones de los pieles-muerta. ¿A quien pediran ayuda en su ventajosa-piel?

Pero el pensamiento se desvanece por la presencia de su lider.

Que me impresiona, pese a ser uno de nosotros, aun pose caracteristicas muy distintivas. Incluso manteniendo una voz emotiva en su hablar, pero recio a usarlo constantemente. Quizas por miedo de agotarlo, o ser realmente un ser reservado.

No deja de ser interesante todo lo que ha pasado, como si de un hecho destinado se tratase.Este dia ha sido un cambio de emociones,en tal erraticos sucesos.

Sintiendo la esperanza y la desgracia, combinandose mutuamente para asi ofrecerme esta oportunidad por el multiverso, esta mision para poder conseguir mi liberacion de esta Jaula, ¡Tan solo debo aceptarlo sin dudarlo.!¡Y podre ir al limbo, en busca de mis respuestas!

-Maravillosa propuesta.-No pude evitar soltar ese comentario hueco, mientras mis dedo recorria toda mi dientes, hasta llegar a mi no-orejas. Para dar la impresion de una sonrisad de mi parte.-Ser Hargrimm, me complace mucho conocerlo finalmente, soy el señor Hiam Senen, un gusto.-Y acercando mi mano en clara invitacion para un apreton de mano, por avance personal. Mi nervios estan muerto, y mi piel no sentira su roze. Pero es la primera vez, que podre tocar otro como yo, la experiencia sera de utilidad. O caeria en nada, pero nunca sabria hasta que lo intentara--Y espero que mi persona sea de suma ayuda para su ploblema, mi espada esta a su entera disposicion. Y ya que mi compañero ha realizado todas las pregunta que acometia a mi mente, os lo dejo para escuchar vuestra respuesta.

Hargimm asintió a cada uno en señal de respeto a medida que se iban presentando, para después pasar a contestar sus preguntas a medida que las planteaban, aunque más como un relato que como respuestas directas. Aunque comenzó aclarando el inciso de Mattheus.

-"No espero de vosotros que os enfrentéis a una fuerza abrumadora, ni os niego la ayuda de aquellos de nosotros que pudiéramos ofrecerla. Si hay una facción completa detrás de esto o un ser de poder extraordinario, habremos de buscar otras soluciones, pero si sólo es un factótum, sí espero una mayor colaboración. En cualquier caso, si una facción o alguien de tanto poder buscase nuestra destrucción, no hay nada que se lo impida, ninguna necesidad de andar con subterfugios."

Tras aclarar ese punto pasó a contarles lo que sabía de las desapariciones. 

-"Lo primero que debo deciros es que no estamos seguros al cien por cien de que haya habido desapariciones." - un ruidito procedente de Svenn, que se había quedado al lado de Mattheus, tras sus palabras de consuelo, indicó que no estaba nada de acuerdo, aunque Hargimm siguió con su frase, sin aparentar molestia ni apoyo - "Hasta hace unos días, en que la desaparición de Clea, la amada de Svenn, me convenció de que los ausentes podían no ser causas habituales, sino realmente... un problema, desapariciones no voluntarias. Aún no descarto que la respuesta a la pregunta que les planteo sea que no hay desapariciones, pero me gustaría alguna prueba de alta fiabilidad, que convenza incluso a Svenn; y, ahora mismo, a mí. Conocer el oscuro de la cruda realidad, como diríais allí arriba."

Se acercó al altar, invitándoles a hacer lo propio, con un gesto del macabro bastón, cuyas calaveras de ojos iluminados, tras tanto rondar esqueletos animados últimamente, les parecía que les miraban y seguían con esos puntos de luz a modo de ojos. Allí había una pequeña lista.

-"Ciertamente, a pesar de los acuerdo de paz con la Dama y el Consejo de Factoles de hace quinientos ochenta y tres años, que son la base de nuestra naturaleza pacífica y aislada, no estamos faltos de enemigos y problemas. Es cierto que, a veces, hemos tenido algún conflicto y nos ha costado alguna o muchas vidas, pero siempre ha sido algo más o menos notorio, directo y abierto." -

Hargrimm fue señalando su lista de sospechosos mientras les daba una explicación.

-"Nuestra propia sociedad tiene facciones, Mary la Podrida dirige a los zombis, la considero mi amiga, es dulce y responsable, pacífica e inteligente. No está falta de ambición, pero su vía es la diplomacia y el acuerdo... Acaste, la líder de los necrófagos... es harina de otro costal. Preferiría liderar y valora la fuerza por encima de la razón, la verdad es que su pueblo es el más afectado por las restricciones, su hambre no es fácil de sobrellevar y siempre han sido los más reacios a lo restrictivo de los acuerdos de paz. ¿Sospecho de ella? Si ¿Entre los presuntos desaparecidos hay necrófagos? También.

Nuestro enemigo más grande, son, con toda seguridad, los Hombres de la Ceniza. Somos una aberración a ojos de su filosofía de intransigencia y muerte. Nos quieren destruidos y olvidados, pues personificamos la antítesis de sus creencias. Pero lo cierto es que el pacto universal nos protege, un Hombre de la Ceniza y un muerto viviente tienen prohibido dañarse uno a otro con cadenas casi irrompibles. En el pasado en representante de los Cenizos en las Naciones Muertas ya resultó ser un traidor a su causa y, en consecuencia, pudo hacernos daño. No me consta nada contra Kayru, su nuevo representante, después de que Soego se uniera a los hombres rata y fuera destruido por el inmortal sin nombre, pero, por nuestra naturaleza siempre sospecharé de él. Quede claro que él tiene derecho a predicar su filosofía aquí, y que no se nos permite considerar asesinato ni acto hostil el que convenza a los nuestros de pasar a la otra vida. Lo hace libremente y no podemos interferir en ello, la gente que desaparece así, bien marchada está, pues es su decisión."

Svenn interrumpió ahí con una serie de lamentos por Clea, bastante incoherentes pues a veces temía que hubiera seguido ese camino para inmediatamente afirmar que estaba seguro de que no lo habría hecho nunca. Y vuelta al ciclo. Todo ello como si fuera un niño pequeño muy listo leyendo de corrido un párrafo y haciendo las pausas correctas de los signos de puntuación pero sin entender nada de lo que decía como un papagayo.

Hargrimm esperó a que hubiera acabado para seguir, sin muestra de exasperación ni de consuelo.

-"Los hombres rata, cuyas madrigueras están en túneles cercanos, fueron antaño nuestro principal enemigo. Un vecino hostil, violento y expansionista; pero la pérdida de su líder y muchos de sus guerreros en el conflicto con el inmortal sin nombre les ha convertido en una sombra pálida de su pasado. Estoy seguro de que nos matarían a todos si pudieran; pero, salvo que tengan un nuevo líder, no se si están capacitados para organizar tantas incursiones sin ser detectados. Habitualmente organizaban partidas de incursores, pero ciertamente ahora no podría hacer más que pequeños ataques sigilosos. Poco que ganar y mucho que perder; apuesto que podríamos pagar a un grupo como el vuestro para exterminarlos, si nos dieran motivos para hacerlo. Y ellos deberían saberlo."

Pasó a los dos últimos apuntes, en mayúsculas.

-"También está mi teoría más probable, en mi lógica. Bajosigil. Está lleno de toda clase de monstruosidades, una de ellas podría haberse infiltrado, ser invisible a nuestros sentidos, o tener poderes de teleportación, demasiado pequeña para percibirla... Casi cualquier cosa es posible viniendo de ese nido de mutaciones y portales desconocidos a cien lugares del multiverso.

Y la segunda que veo más factible, pues tiene el mismo componente de imprevisibilidad y aletoriedad. Aunque los Cenizos son nuestro principal enemigo, no son los únicos fanáticos que odian lo que representamos... Paladines, inquisiciones menos respetuosas de nuestra naturaleza que el comprensivo señor Volkhen, celotes religiosos... Hay mucha gente que hace su misión en la vida destruir a los no muertos y cuya mente no alcanza a abrirse para dar cabida a quienes, como nosotros, ven en ella un camino válido y deciden seguirla sin hacer daño a nadie. Es cierto que los acuerdos de paz nos protegen, pero no todos los conocen y entre quienes lo hacen algunos están dispuestos a sacrificarse si son atrapados. Esa gente puede tener tanto poder y tan variado como cualquiera de nosotros o de aquellos que conocemos."

Hargrimm aprovechó que había hablado de los acuerdos para dirigirse a Haim personalmente.

-"No sé, señor Senen, los motivos de su búsqueda. Detecto una naturaleza inusual en su energía negativa, no parece un no muerto corriente. Si está huyendo de su destino en la otra vida, sepa que éste lugar es justamente un santuario para quienes no desean continuar su camino. Si prefiere en lugar de un Portal un sitio en nuestra sociedad como recompensa, es bienvenido a quedarse. De hecho un ciudadano no vinculado a las emanaciones locales, sería un recurso sin precio para nuestra sociedad."

Tras su oferta particular, volvió a hablar para todos.

-"Todos en las Naciones Muertas saben ahora que actuáis en mi nombre, colaborarán en la medida de sus posibilidades y lo que la lógica concede, podéis ir a cualquier lugar y registrar todo, salvo los enseres personales de Kayru, pues no tengo autoridad en ellos. Aunque vosotros no estáis atados por los acuerdos, os pido que no ejerzáis sobre él violencia injustificada, ni son nuestros métodos ni nos traería consecuencias positivas. Quiero que Svenn os guíe para facilitaros el movimiento y esté a vuestra disposición para responder preguntas que os puedan surgir por el camino, dado que parecéis llevaros bien. La única limitación es la natural, pues el ritual de protección que le permitió alejarse de nuestro hogar para buscaros ha finalizado y ya no puede acompañaros fuera de las Naciones Muertas y su energía negativa ambiental. También podéis hablar con él de desaparecidos, a mi me consta que varias personas ya no están pero me cuesta dar una lista de 'desaparecidos' como tales... la única que pondría en ella sería Clea y, tal vez, un necrófago hace una semana; pero incluso esos dos nombres estarían entre interrogaciones. Yo no estoy seguro de que mi pueblo esté desapareciendo por circunstancias inexplicables."

La lista de sospechosos parecía larga y difusa. El bajosigil estaba bajo una gran sospecha, pero era un lugar demasiado peligroso para optar por empezar por allí. La teoría de los paladines sonaba un poco mejor.

-Tal vez podamos averiguar si hay paladines o sacerdotes cerca de aquí...

Luego de haber aclarado los límites del trabajo, los cuales a mi ver son aceptables, escucho atentamente y en silencio todo lo que nos dice el líder de las Naciones Muertas. Una vez que Hargrimm ha terminado con su exposición y que el gith que nos acompaña da su opinión, intervengo.

-Antes de cobrar la cabeza de un bandido, uno no solo debe saber que como cazarlo sino también como decapitarle -digo citando una frase de mi viejo mentor aunque mis palabras claramente son más dirigidas hacia el introspectivo ser planario que hacia el líder esquelético- Por eso, antes de encasillarnos en cualquier teoría, deberíamos investigar a los desaparecidos y que las huellas nos lleven en la dirección correcta -agrego citando una de las máximas de mi instrucción- Si los culpables son paladines, clérigos o cenizos, debería haber señales de lucha o como mínimo polvo de hueso, si se trata de los hombres-rata deberíamos encontrar huellas o indicios de resistencia, y si el culpable es una criatura de Bajosigil capaz de usar la magia deberíamos ser capaces de encontrar un rastro mágico -inmediatamente dejo de centrar mi mirada en el gith y la concentro en el líder de las Naciones Muertas- Noble Hargrimm, independientemente de vuestras dudas, quisiera que me señalara los últimos lugares donde fueron vistos todos aquellos que supuestamente desaparecieron ya que cabe la posibilidad que una mirada ajena sea capaz de vislumbrar algo los demás no percibieron e incluso de hallar una conexión -le digo con sumo respeto al noble esqueleto- Además, he de decir que por mi parte agradezco que nos designe a Svenn como guía y contacto. De hecho, si no lo mencionabais os lo iba a sugerir ya que aunque su punto de vista puede ser algo sesgado, su determinación por hallar la verdad lo compensa de sobra -inmediatamente centro mi mirada en nuestro afligido guía- ¿Que dices, Svenn? ¿Crees que eres capaz de llegar hasta el final, independientemente de cual sea este?

Zolgren escuchó atentamente las palabras de Hargrimm, que puso todo tipo de detalles y hasta mostró sus dudas de que se tratara de desapariciones.
Si no eran desapariciones, ¿entonces qué? ¿los no muertos se marchaban con ganas de ver mundo?

Sea como fuera, habían cuatro claras opciones: los cenizos, los hombres rata, Bajosigil y cualquier hombre santo algo despiadado.
Por ahora no tenían ninguna pista clara, por lo que la mejor opción parecía hacer como decía Mattheus e investigar la zona donde habían habido las desapariciones en general en busca de algún rastro.

Bien, pues empecemos registrando los lugares donde se cree que estuvieron por última vez cada uno de los desaparecidos.
Quien sabe, quizás una segunda mirada pueda servir para encontrar alguna pista que a vosotros se os haya pasado por alto.

En todo caso, habrá que estar con los ojos bien abiertos.

Dijo el drow, con ganas de comenzar ya.
Cuanto antes comenzaran, antes terminarían y la verdad es que ya estaba ansioso por conseguir su recompensa.
Eso y que la verdad es que con tanto no muerto a su lado, no terminaba de sentirse a gusto.

Tras la intervención de Tauron el humano paliducho se había presentado con una reverencia y mostrando que parecía dominar muy bien la alta diplomacia. El tiflin arrugó un poco el ceño mientras aparcaba la oreja y trataba de que no se le escapara nada de lo que Mattheus decía con aquella verborrea suya. Tras él, el drow y Haim se sumaron el grupo de investigación mostrándose de acuerdo con el trato. Ninguno se había echado para atrás.

Después (por fin), habló el gran esqueleto, Hargrimm. Primero les dejó claro que si quien estaba detrás de todo aquello era una amenaza de elevado poder buscarían otras soluciones, tal y como había demandado su compañero. No esperaban que cuatro mascas aleatorios pudieran contra una facción completa ni nada así. Pero eso preocupó un poco al tiflin: ¿en ese caso se quedarían sin recompensa? Esperaba que no.

Tauron se acarició el bigote haciéndose el interesante mientras Hargrimm hablaba con su voz hueca, relatándoles lo Oscuro del Asunto. Aquellos huesecillos moviéndose de un lado para otro le recordaban a una buena parrillada, y su estómago empezó a rugir.

Hargrimm les mostró una larga lista de desaparecidos mientras les explicaba cada caso por aislado. Tauron resopló, aquello iba a ser más complicado de lo que creía. La sociedad no-muerta parecía tan dividida como la sociedad vida, con distintas facciones, cada una con sus propios objetivos: zombis, necrófagos... Esas movidas siempre complicaban las cosas, aunque Tauron podía entender bien el hambre de los necrófagos, su estómago había vuelto a gruñir.

Después pasó a explicarles que los Hombres de la Ceniza eran especialmente beligerantes con ellos por que representaban una contradicción con sus creencias. No era la primera vez que Tauron oía hablar de lo problemáticos que eran los Cenizos y su oscura forma de ver la vida, por lo que no le extrañó demasiado. Lo que si le extrañó es que hubiese un pacto de no agresión entre ellos. ¿Cuándo habían llegado a aquel acuerdo? Aquello debería de haber costado mucho, poner de acuerdo de a dos facciones tan enfrentadas no era fácil.

Svenn no parecía de dejar de lamentarse por la desaprición de Clea. Aquello le ponía algo nervioso. Pese a lo antinatural de su aspecto, no dejaba de despertarle cierta compasión (seguramente un sentimiento que provenía más de su parte humana que de su parte demoníaca...) Intentó darle un par de palmadas de consuelo en los homóplatos, con la fuerza justa para no desmontarle.

-Tranquilo hombre, seguro que no ha optado por la otra vida, y está por ahí en alguna parte. Daremos con ella. -le susurró.

Hargrimm continuó con los hombres rata, que al igual que el líder de los cenizos parecían haber sufrido a manos de un inmortal sin nombre. Tauron no tenía ni idea de a qué se refería Hargrimm con aquello, y decidió preguntarle eso también, después. Aunque para el líder de las Naciones Muertas la sospecha principal recaía sobre alguna monstruosidad de Bajosigil, Tauron no lo veía tan claro. El resto de sospechosos parecían obvios, pero a la vez demasiado complicado que bajaran hasta allí y pasaran desapercibidos...

Levantó un dedo para preguntar algo, pero Volkhen se le había adelantado. El tiflin escuchó en silencio, y después el drow se mostró de acuerdo con lo propuesto por este, y Tauron añadió:

-Yo también estoy de acuerdo con nuestro amigo paliducho. Deberíamos de echarle un ojo a cada desaparición para ver si podemos encontrar algo que una los casos. Pero antes de irnos, me gustaría preguntar un par de cosas. Por un lado, ¿han llegado a un acuerdo de no agresión con los Cenizos? Eso debió costarles, ¿no? Todo el mundo sabe lo furibundos que pueden ser con sus creencias... Además de permitir a Kayru impartir sus creencias aquí, ¿hay algo más en ese acuerdo? ¿Suele verse a Kayru por aquí abajo...? Un momento, había algo más... -se quedó un poco en silencio tratando de recuperar el hilo de sus pensamientos, finalmente pareció venirle algo: -¡Ah si! Ya me acuerdo: ha dicho usted que tanto los Cenizos como los hombres-rata han sido afectados por una especie de entidad inmortal ¿puede contarnos algo más sobre la cruda realidad de ese inmortal sin nombre?

-Valla, yo....- Y dejando la oración a medio terminar, pienso en la propuestas que me ha realizado. Mi destino natural, no es muy amigable, y cualquiera que lo supiera diría lo mismo que yo. Antes el olvido, que caer de nuevo en esa zona. Pero con todo esto, aun no deja ser una opción un tanto extrema. Es el estancamiento, no seguir y quedarme aquí para siempre, o hasta caer al olvido. Tampoco era algo que fuera malo, aun con todo eso estaría mi persona protegido y tendría otros, que con celos y molestias por estar con su presencia. Podría hasta confiar en ellos, o al menos tener intereses comunes para mi estadía. Ya que si miro por el otro lado,tengo mi actual curso de acción, que no es otra que buscar por los planos las respuesta a mi pregunta: Como fusionarme con otro plano.

Pero sabia bien, que tampoco fuera muy segura en si misma. Y que el riesgo de doble-perecer en el camino era muy posible, que aunque con conocimiento en defensa personal. De alguna forma instintiva a mi persona no dejaban de ser quizás, hasta imposible de defenderme de ciertos enemigos mas fuerte que mi momentania existencia. Ambas decisiones sin importar como lo vieran tenían sus ventajas y consecuencias. Era una decisión que cambiaría mi propia existencia, ¿una paradoja, quizás ? Realmente, me golpearía en el suelo, pensando en que debería hacer. ¡Oh! ¿¡Incluso eso no me haria traidor a mi propia filosofía!?....Estar aquí, con experiencias limitadas.....Pero....Tampoco.....Aun podría sentir......no seria tampoco impropio....Quizas...Pero....¡Son tantas opciones posible! ¡Mi voluntad aun no esta tan fuerte como para aquello! Debo pensarlo, MUY seriamente-Lo pensare seriamente, aun en el estado que estoy. No puedo dar una decisión clara y concesiva.

Y de allí, escucho el resto de las palabras del Sacerdote. Una muy especial, me hace sentir ganas de reír, pero seria inapropiado mostrar tal cantidad de humor y mas en especial con Sveen que aun esta afectado por la perdida de su amada. Pero es en si mismo, el trato entre los Cenizos y los No-muerto la raíz de mi humor, me extrañaba demasiado que cada cenizo que me viera a mi persona, mostrara un odio hacia mi presencia. Pero a su vez, mostrara un gran interés en motivarme a unirme a su filosofía, no, mejor dicho no interés. Si no hasta obsesión malsana que podría confundirse perfectamente con enamoramiento, ha veces estos llegaban a unos limites exagerados por sus esfuerzos por salvar, mi "alma". ¡Que irónicos ellos! ¡Si supieran, que si soy un esqueleto, es porque no quiero morir! ¡Y a su vez, deseo liberarme de esta condición!. Debo ser mi persona, un gran chiste para las entidades del multi-verso si vamos al todo al caso. Ohhhh, ahora entiendo el teatro dramático. Es para burlarse de gente como yo.-Suficiente de divagar demasiado, hay que trabajo que hacer- Y parando con mis propia, ¿Depresión? ¿Humor entre desgracias ? Como sea que fuera llamado, que pienso las propuestas de mi demás compañeros.

Todos tenían su lógica, y no había porque negarse, aunque preferiría seguir lo del hombre pálido. Tendría mas lógica, aunque no me dejaba de extrañar ciertas cosas de la historia, desapariciones no voluntarias, quien sabe a donde estaría.-Estoy de acuerdo con vos, ummm como era....Sir Mattheus, si, ese es tu nombre. Bien, tu lógica no tiene nada de malo. Quizás, hasta descubramos una pista. Aunque no tenga nada claro, pienso que quizás hallan sido secuestrado, aunque no entendería mucho, porque aun no ha amenazado a Hargrimm por los desaparecidos. O es alguien dentro, o es una fuerza del exterior, no le veo de otra. Por la zona, dudo que los hombres ratas se atrevan a atacarlo.

Hargimm se encogió de hombros a la cuestión de Mattheus, contestando con su voz controlada y profunda, tan parecida y a la vez tan distinta a la de Svenn.

-“En las Naciones Muertas somos gente muy poco sociable. El caso de Svenn y Clea es una excepción, casi nadie tiene demasiado contacto con los demás, como mucho con dos o tres. Es cierto que doy la bienvenida a todos al llegar, y que conozco a todos los esqueletos, pero a algunos no les veo en años y no hablo con ellos en décadas. Casi todos somos así.

Es buena idea saber dónde se vio por última vez a los desaparecidos, una vez sepáis quienes pueden ser, pero en eso Svenn puede ayudaros mejor, yo no se qué entender por desaparecido sin explicación..."

Hizo una pausa, girando la cabeza en otra dirección. Tal vez estaba pensativo, tal vez había tenido una fuga mental como las que a veces parecían tener Svenn y Haim, probablemente era que se quedaban pensativos y que sin rostro que leer, era imposible identificar.

-"Me consta que la ausencia de Clea es inexplicable, ella sí es una. Acaste insiste en que uno de sus necrófagos subió hace poco tiempo a éstos túneles y no volvió a bajar, tal vez hace diez días, o quizá tres semanas; si dice la verdad, tampoco sería normal del todo, los necrófagos son algo más… sociales, en cierto sentido, forman grupos de caza y, si uno decide seguir el camino, suele dar su carne a su partida para un banquete de despedida. Otros… no sé, ¿dónde empezar? ¿o dónde acabar? ¿cuánto es mucho tiempo o cuánto no es suficiente?. Svenn tendrá mejor perspectiva.”

Svenn, por su parte se había mostrado dispuesto a ayudar, dejando sus movimientos compulsivos cuando se refirió a él para asentir con su rostro inescrutable e inexpresivo; que volvió a Tauron asintiendo de nuevo cuando le consoló. Pero tanto en un caso como otro era imposible saber qué más había detrás de su asentimiento, ¿había hallado cierto consuelo? ¿seguía sumido en la desesperación? ¿lloraba o sonreía? Imposible deducirlo

Mientras Haim daba su (no) respuesta a Hargrimm y Svenn comenzaba a desgranar sus conocimientos a Mattheus y aquellos que le quisieran escuchar, el clérigo no muerto aclaró a Tauron los puntos que no le habían quedado claros:

-“El pacto, como tal vez pueda confirmar el señor Senen, no es algo entre el Factol actual y yo. Es un acuerdo ancestral. Parte de los Pactos Primordiales, suscrito entre poderes que ya ni siquiera se recuerdan, milenios antes de que comenzase mi tiempo; gente tan poderosa que su palabra nos sigue vinculando hoy día a gente que ni los conocimos ni sabemos su nombre siquiera. Yo no sé qué palabras se usaron para alcanzar acuerdos, pero imagino los argumentos: en una guerra abierta y total entre los Hombres de la Ceniza y todos los muertos vivientes del Multiverso sólo hay un ganador: aquellos que nos odian a ambos y se regocijarían con que muriéramos por millones. Y Kayru vive aquí, tiene un sitio no muy lejos del templo dónde recibe a todo el que le quiere escuchar, sólo sale a la superficie muy de vez en cuando, pues al estar vivo requiere suministros.”

El tiflín recordó su última pregunta cuando los demás casi se ponían en marcha, Hargrimm por su parte se había movido tan poco como el altar, por lo que pudo contestar como si la conversación no se hubiera pausado siquiera.

-“El paso del Sin Nombre fue hace años. Hay un inmortal que pasa por aquí de vez en cuando, a veces varias en un año, otras veces tarda años en volver. Casi siempre con las mismas preguntas, pues olvida todo de una vez a otra, al parecer tras resucitar.*”

Svenn por su parte, había empezado a contar lo que sabía respecto a los desaparecidos. Como siempre acompañaba su voz átona y monocorde de mucha gestualidad, que remitía a una rica entonación y narrativa que se perdió con sus cuerdas vocales.

-“Lo que dice Hargrimm es cierto, la única persona que me importaba aquí y a quien realmente conocía era Clea. Es cierto que hay otra media docena de gente con la que hablo de vez en cuando; diablos… he pasado siglos aquí, lo cierto es que puedo haber cruzado palabras con, al menos, treinta o cuarenta personas, aunque haya sido un par de veces” – los gestos de admiración, como si fuera una celebridad, parecían sinceros y serios, aunque sus palabras fueran un poco… ridículas, desde la perspectiva de una persona sin autismo crítico – “La última vez que vi a Clea, hace tres días, creo, estábamos intercambiando poesías, cuando acabamos ella se marchó a rezar mientras yo fui a ver a Magissa,  otra esqueleto que es maga y puede conseguir que traigan cosas, para que me consiguiera un libro sobre la saga de Snorri Lenguadeseda; pero Clea nunca llegó al templo, por lo que he investigado.” – señaló a Hargrimm.

Nuevamente Svenn se interrumpió cuando comenzó a oscilar los hombros, antes de poder seguir sin que su voz cambiase en ningún momento.

-“El necrófago al que se refería Hargrimm es Bizcocho de Hígado, Acaste dice que subió y no volvió a bajar nunca, los necrófagos suelen estar abajo, en la salida de los túneles de Bajosigil, protegiéndolos. Ella dice que eso demuestra que no son los necrófagos devorando esqueletos y zombis, quien está detrás de éste asunto. Supuestamente fue hace doce días, pero Acaste también es muy vieja y no mide bien el tiempo.”

Fue marcando con los dedos los que enumeraba.

-“Anne la roja, una zombi que había sido pirata, pidió a Magissa un sombrero nuevo hace un mes y dos días, pero nunca fue a recogerlo y nadie la ha visto desde entonces. Esa fecha la tenía clara porque era el Día de las Naciones Muertas y casi todo el mundo lo pasa en la Iglesia.” – ese fue el tercer dedo.

En ese momento se encogió de hombros.

-“Esos me ha parecido más raro de todos, porque ha sido todo en un mes. Pero hace al menos tres meses que nadie ve a Torbul, un esqueleto depresivo, nadie se acuerda de la última vez que lo vio, aunque todos dicen que hablaba mucho con Kayru; pero yo no me hablo con ese Cenizo manipulador. Uno reconoce a los suyos. Lengua de plata, eso es lo que tiene… si lo sabré yo." - algunos gestos de su expresivo lenguaje corporal eran indescifrables, pero no hacía falta mucha imaginación para deducir que no eran positivos.

-"Hace entre seis meses y un año que unos zombis vieron a Hatler por última vez, solían debatir de política humana por diversión, una vez dijo adiós al irse y… no volvió." - se encogió de hombros - "el tiempo de éstas desapariciones es más relativo, pudieron haber desaparecido ayer y que nadie se diera cuenta, o al día siguiente de que les vieran por última vez."

Svenn, empezó a dar pataditas a piedras sueltas, antes de seguir, al no variar el tono ni tener rostro que expresara lo que sentía era difícil decir más.

-"Acaste también dijo algo de que habían desaparecido más necrófagos, creo, pero estaba muy enfadada y me asusté, así que ya sólo quería irme y no presté mucha atención a lo que decía.”

Al parecer el pacto con los cenizos era ancestral e involucraba a ciertos... poderes... como les gustaba llamarlos por aquí. Yo no creía en dioses, sólo en las enseñanzas del maestro Zerthimon. Pero aquellas criaturas sin duda serían poderosas, lo suficiente para que los cenizos lo pensaran muy bien antes de meterse con ellos. Pero eso no era suficiente para descartarlos del todo como sospechosos. Svenn nos dio más información sobre los desaparecidos.

-Bien, al parecer tenemos varias pistas que seguir. ¿Por dónde empezamos?

El tiflin se cruzó de brazos mientras escuchaba al líder de las Naciones Muertas. Echó un vistazo de reojo a Svenn cuando mencionó que su caso era una excepción. Le hizo una señal positiva levantando el dedo pulgar cuando le pareció que este le miraba, para indicarle que no se preocupara, ellos se iban a encargar de desenlaberintinar todo aquello; aunque en el fondo le preocupaba que la naturaleza solipsista de los esqueletos hiciera muy complicada la tarea de averiguar los detalles sobre aquellas desapariciones.

Hargrimm comenzó a darle explicaciones sobre todo el asunto de los Pactos Primordiales y el inmortal aquel, y el tiflin se arrepintió de inmediato de haber hecho aquella pregunta: todas aquellas movidas siempre le daban dolor de cabeza. Sonrió tensamente, asintiendo mientras escuchaba al sacerdote esqueleto y finalmente dijo:

-Gracias por las explicaciones, su mortalidad. -hizo un torpe saludo con la mano (era difícil interactuar con aquellos maniquíes de huesos de mirada perdida), y después siguió al grupo, tratando de coger el hilo de lo que estaba explicando Svenn.

Le sorprendió escuchar que había una esqueleta maga. No dejaba de ser curioso. Magissa, Bizcocho de Hígado, Anne la roja, Torbul... pronto el tiflin tenía la cabeza llena con más nombres de los que podría pronunciar mientras comía un pincho de rata. El gith preguntó por dónde podrían empezar, el tiflin se rascó la cabeza, pensativo:

-Veamos, tenemos a varios desaparecidos más recientes, la mayoría esqueletos, entre ellos un necrófago, Bizcocho de Hígado. Quizás podamos hablar con esa tal Magissa por si nos puede dar algún detalle más sobre Clea y Anne. También deberíamos hablar con Acaste para saber si nos puede aclarar si ha habido más desapariciones de los suyos, eh, ¿la necrófaga esa estaba enfadada por algo en concreto cuando hablaste con ella, Svenn? Por otro lado, el Cenizo ese tiene todas las papeletas para ser culpable, pero necesitamos saber si Torbul forma parte de la serie de desapariciones más recientes o si se debe a otras razones. -el tiflin se arañó el cráneo con las afiladas uñas, tratando de recordar todo. -Arg, creo que tantos nombres me han dado migraña en a sesera.

El baile de nombres empezó a llenar de opciones la investigación.

La sociedad no muerta era mucho más compleja de lo que había imaginado, y hasta tenían sus festividades y templos.

Empezaba a pensar que los esqueletos eran gente solitaria y que era posible que los hubieran engañado para llevárselos a algún lugar antes que raptarlos simplemente.

Pero todo eran suposiciones y hasta que no empezaran a investigar, no sabrían nada.

Tauron dijo los nombres que creía apropiado investigar primero.

Quizás podríamos dividirnos en dos grupos para investigar dentro de las Naciones Muertas donde se supone que no deberían haber peligros.

Magissa, Bizcocho de Hígado y Acaste... ¿quien quiere hablar con quien?

Preguntó, esperando que vieran bien su propuesta de dividirse en grupos.

El mayor ploblema, es ironicamente nuestra propia condicion no-muerto. Varias de estas desaparicones, no poseen un tiempo exacto desde su facto olvido, si no es hasta pasar mucho tiempo que su desaparicion empieza hacer eco hacia nosotros, donde el tiempo es tan ambiguo que no tiene importancia.

Sera complicado eso si, pero todo ser deja un rastro de por si. Y dudase, que estos seres no hallan dejado algo que nos permita aclarar con mas luz, lo oscuro de este asunto.

-Muy buena idea, lo de dividerse entre grupos. Yo por mi parte, deseo investigar a Halter y el necrofago desaparecido. Pero no se si sera buena idea, alguien como mi tipo socialice con Acaste.

Tauron alzo las cejas ante la sugerencia de dividirse, se rasco la barbilla un poco y finalmente asintió. Después respondió al esqueleto:

-No es mala idea, huesitos. Puedo acompañarte a ver a la necrófaga... Ver qué reacción tiene ante uno de los tuyos puede ayudarnos a revelar la cruda realidad de este asunto.

Al escuchar la sugerencia del drow, muevo la cabeza negativamente e intervengo.

-Hay algo o alguien que está haciendo desaparecer a los habitantes de este lugar ¿y vosotros queréis separaros? -le digo a mis compañeros- En todas las teorías, correremos el mismo riesgo que cualquier lugareño, independientemente de nuestra raza: Si se trata de una criatura nos atacará en cuanto tenga oportunidad sobretodo si estamos divididos, si se trata de clérigos, paladines o incluso hombres-rata también nos atacaran porque nos considerarán partidarios de las Naciones, y si quien está detrás es el cenizo puede que quiera deshacerse de nosotros para que no le descubramos. No, lo mejor es seguir juntos, además aunque tardemos un poco más lo compensaremos con la seguridad que nos brinda nuestro número y varios pares de ojos más a la hora de examinar los diversos lugares -les explico con tono sosegado pero firme- En cuanto al plan de acción, lo primero debería ser seguir los mismos pasos que Clea e investigar la zona ya que por lo que tengo entendido es la desaparición más reciente, luego podríamos visitar a Magissa para saber si sabe o ha visto algo, y por último hablar con Acaste.

Svenn estaba mirando quieto como una estatua cómo hablaban y, cuando Tauron se dirigió a él, dio un respingo.

-"Si, claro, ¿Acaste? Bueno, podríamos decir que ella siempre está enfadada. O lo parece. Oh, dioses del Valhalla, qué desperdicio de voz modulable." - el clamor al cielo sólo fue identificable por su pose, puño en alto y mirada al... bueno, al techo - "Pero se molestó especialmente por mis preguntas, se debió dar por aludida, aunque es posible que mis palabras fueran vagas en ese sentido. Esos necrófagos siempre están tan hambrientos..." - su estremecimiento hizo esa frase también bastante obvia, incluso si su temblor no afectó en nada a su voz.

Luego se dirigió a Zolgren, temiendo que le pidieran lo imposible.

-"Disculpe usted, amigo Zolgren, pero de sus tres sugerencias, con Bizcocho de Hígado no podría ayudarle. Es el necrófago que parece haber desaparecido, Acaste parecía convencida de no haberle visto en doce días y yo tampoco he podido encontrarle, y he mirado por todas las Naciones Muertas, bien es cierto que éstas son laberínticas y alguien podría evitar ser encontrado si fuera decidido y capaz."

-Claro, no veo porque no.- Dijo en considerando las palabras del Gigante, que aunque no me gustaba mucho los seres como el. Sangre demoníaca en sus venas, era mejor que ir solo y sufrir la incompetencia de al diferencias sociales, luego antes que nos podamos dar en accion, uno de nosotros estan desacuardo con ir en separación-No creo que seria una separación muy extensa, solo sera uno dentro de esta zona. Nos podemos reunir a final de cuenta pasado cierto tiempo, pero si todos prefieren ir juntos que se hace.

Tauron se rascó la cabeza en el punto de nacimiento de sus afilados cuernos mientras escuchaba a sus compañeros de investigación. Tres de los cinco miembros del grupo estaban de acuerdo en separarse para ir de excursión y así abarcar más terreno en menos tiempo, pero el paliducho había puesto objeciones a esta idea por considerarla peligrosa para su supervivencia. Un tipo precavido. Tauron se encogió de hombros:

-Hasta el momento podemos asegurar que las desapiriciones estas solo han afectado a no-muertos solitarios. Entiendo que estés nervioso por si acabas apuntado en el Libro, Volkhen, porque tu naturaleza tiene ambos. Pero se me ocurre que el único que está en verdadero peligro aquí es Haim. Lo siento, huesitos, alguien tenía que decirlo. -Finalmente sonrió de forma conciliadora:- Si os parece más seguro, iremos juntos, no hay problema.