Partida Rol por web

Partidas de Jorgito Diamante

Domingo 03 de Enero del 2010 - Plaza Central de Ciudad Ecruteak - 23:48

Las voces se volvian a escuchar. Hacia rato que no permitian descansar al pequeño Jorge. Volviendo a tumbarse en la cama, no sin hacer bastante esfuerzo, colocaba la almohada sobre la cabeza intentanto apagar los indicios de que aun la fiesta continuaba en las calles de la ciudad.

Ecruteak era mundialmente conocida por rendirle culto a los fantasmas y muertos. Y cada año,  el primer fin de semana, era dedicado a este tipo de entidades. El sabado siempre era mas divertido, hacian desfiles, bailes, y aun siendo un niño, a Jorgito se le estaba permitido acostarse un poco mas tarde. Pero el domingo era distinto, a pesar de estar en verano, muchos adultos debian trabajar y eran pocos los que se aventuraban a festejar hasta muy tarde. Por lo que la noche era basicamente copada por jovenes que disfrutaban de sus vacaciones y hacian que la musica y los bailes durasen hasta el amanecer. Esto solia irritar bastante a la abuela Grace, quien era una persona bastante festiva, pero tambien tenia sus limites.

Nuevamente volvian a estallar las carcajadas, acompañadas de ruidosos sonidos y musica a todo volumen. Escuchas que del cuarto de tu abuela se levanta refunfuñando y maldiciendo camino a la calle para espantar a los jovenes, al menos hasta que el sueño logre apoderarse del hogar. Despabilado del todo por ahora los gritos de tu abuela, te sientas en la cama, con las manos sobre las piernas, y te quedas mirando sin foco alguno la pared que se encuentra a unos metros delante tuyo. Sin nada en que pensar, ni tampoco presatandole atencion al barullo que afuera hay, Jorge Diamante de a poco comienza a soñar o eso es lo que cree. Sueña despierta. Sueña o imagina que ve un silueta... ¿flotando?, delante suyo. Una silueta que de a poco le resulta familiar. Por su forma. Su sombrio color. Y sus brillantes ojos y dientes. Como asi tambien su destacada gema carmesi que siempre lo acompaña desde la altura del pecho. La extraña silueta le sonrie, mostrando algunos de sus filosos colmillos. El pequeño, tal vez de forma inconciente, le devuelve la sonrisa. No se sabe si es porque le divierte de alguna manera, o porque sabe que no tiene nada que temer, o tal vez ambas cosas. Lo cierto es que de poco a poco Jorgito si cae en un verdadero y profundo sueño. En el cual el cielo es tan oscuro como aque Pokemon. Y en el relucen brillos de la misma intensidad. Brillos que al tiempo entiende que se tratan de estrellas. Y entre ellas, una particularmente enorme, comienza a moverse directamente hacia el pequeño que absorto se queda mirando el fenomeno. Cada vez mas grande se va haciendo, acercandose a una inmensa velocidad, hasta que finalmete choca contra el suelo a centimetros de los pies del niño. Claro esta que no se trataba de un meteorito demasiado grande. Pero para el fue inmeso, aunque, teniendo cierta conciencia de que se trataba de un sueño, no se asusto en ninguno momento, sino que disfrutaba de el, y fue llamado por el espiritu de la aventura, por lo que se acerco a aquel aguero que habia quedado en el suelo, del cual ahora salia una constante humareada. Y alli, todo lo que recordo al despertar fue que habia una piedra o un huevo, nisiquiera pudo verlo bien, porque enseguida volvio a la realidad con las palabras de su abuela.

"Despierta, Jorgito, despierta"

Lunes 04 de Enero del 2010 - Ciudad Ecruteak - 04:58

"Despierta, querido", volvia a insistir la anciana a su nieto, el cual refunfuñaba en sueños. Cuando finalmente se fue despertando, se incorporo en la cama notando que tenia la boca babeada. Se limpio con la manga y amago con volver a acostarse, pero su abuela le tomo suave pero firmemente el brazo. "Recuerda que hoy empezaremos a entrenar a Sableye, Jorgito".

Lunes 04 de Enero del 2010 - Ciudad Ecruteak - 04:58

Todavía somnoliento Jorgito se restregó los ojos con ambas manos mientras escuchaba las palabras de su abuela.  Por fin había llegado el día de comenzar con el entrenamiento de Sableye.

-Bueno días abuela- dijo el muchacho mientras la estrechaba en un cálido abrazo –me baño y empezamos –

-No olvides cepillarte los dientes- terció la vieja mientras Jorgito realizaba su cómica corrida hasta el baño.

-No, prometo que no voy a olvidarme- aseguró el joven

Una vez dentro del baño el niño giró las canillas, se quitó la ropa y se metió dentro de la bañera, corrió la cortina, tomó su pokebola y liberó a Sableye.

-Salbelai, vamos a darnos un baño juntos.  Ya estas que apestas- acotó en tono bromista mientras tomaba el shampoo.

-¿Qué apesto? Ja. Lo único que me faltaba que un mocoso como tú me hable con tanto descaro.  Escúchame bien para que no tenga que repetírtelo niñato.  Si vuelves a faltarme el respeto de esa forma te voy a …. –

-Sable, Sableeeyeee, Sab.  Saaableyeee-

-Si.  ¿Verdad que es lindo bañarse?- dijo Jorgito a Sableye mientras lo enjabonaba y lavaba con el shampoo.  Sin siquiera percatarse del disgusto del pokemon quien pese a todo no intentó escapar en ningún momento.

Una vez listos Jorgito tomó una toalla, secó vigorosamente a su pokemon y luego hizo lo propio consigo mismo.

-Hoy es un día importante Slabeleye.  Hoy comenzaremos tu entrenamiento, además deberemos elegir tu nombre.  No me agrada eso de que te llames como todo el resto-

-Pues mejor que me llames por mi propio nombre entonces y que no se te ocurra ninguna ñoñez estúpida.  ¡Para que te enteres de una vez, me llamo Lurk y así me llamaras!-

-Sable.  Eeeeyeee, eyeee, sab saaaab. ¡Saaableeeee, saaaaab eeeeeyeeee Lurk saaableeeye!-

Aquella extraña palabra Lurk, había llegado directamente a la mente, al alma de Jorgito sin que este supiera exactamente de donde provenía, en ese momento fue incapaz de entender que era lo que había pasado, siquiera había sido capaz de percatarse de que aquel sonido no había salido de la boca de su pokemon.  Pero lo haría más tarde, cuando tuviera más conocimiento acerca de su don.

-¡Eso es! Te llamaré Lurk- dijo contento y sonriente Jorgito.

-Y hasta que te espabilas niño-

-Saableee-

-¿Verdad que es un lindo nombre el que se me ha ocurrido?-

-¿Qué se te ha ocurrido?  Pero es que eres tonto ¿Verdad?-

Jorgito hizo caso omiso de las protestas pokemonezcas de su amigo y con la toalla envolviendo sus partes corrió renqueante hacia su habitación.

-Vamos Lurk, no seas perezoso, a desayunar y comenzar con tu entrenamiento.  Vamos muchacho, apresúrate-

Apenas quince minutos más tarde Jorge ya se encontraba vestido y sentado a la mesa para desayunar, su abuela le había servido un vaso de leche chocolatada y para su sorpresa encontró una buena cantidad de churros bañados en chocolate y rellenos con crema pastelera colocados en forma de torre piramidal sobre la mesa.

-Abuela, esto se ve delicioso.  Lurk y yo tenemos un hambre de pelicula-

-¿Lurk?- indago la anciana.

-Si, Lurk, mi pokemon, el Sarbelei que atrapé, el que vamos a entrenar.  Se llama Lurk.  ¿Sabías?-

-No, no sabía.  ¿Y como es que te has enterado de su nombre?- indago con curiosidad la vetusta mujer

-Mmmm, no sé, se me ocurrió- respondió Jorgito mientras devoraba los churros y tomaba largos sorbos de leche.

Luego de unos minutos comiendo y bebiendo su desayuno, paso la manga de su remera por su boca y dijo.  –Listo abuela, ya estamos listos para empezar con el entrenamiento.  ¿No es verdad Lurk?-

-Por supuesto pequeño, sólo que debes saber que el entrenamiento será exclusivamente para ti-

-Sableye, saaable-

Cuando el pequeño y su abuela terminan de desayunar, esta le dice: "Bien Jorgito pues ve a arreglar tu cuarto y yo mientras limpiare un poco aqui, para tener bien el ambiente. Sabes que todo esta hecho de energia, incluso hasta los objetos como una taza o un plato, mientras mas limpio y acomodado tengamos todo, mejor podremos concentrarnos".

Pasada una media hora, cunado el niño termina de asear su habitacion, vuelve a la cocina, y ve que las ventanas estan con las persianas bajas, y algunas velas e incencios prendidos. Tambien hay algunos libros, y frascos, y hasta un pergamino bastante viejo, sobre la mesa.

Grace se acerca a una de las ventanas, y prende otra vela, esta particularmente color violeta, y que emana un agradable aroma junto con una negra humoreada.

Jorgito se sienta en el mismo lugar donde minutos antes habia desayunado, y su abuela, de pie se queda del lado opuesto a el. "Como sabras, los Pokemon Fantasmas suelen dormir de dia y estan mucho mas activos de noche. Por otro lado los Pokemon Nocturnos, si bien, no se ven debilitados por la luz del sol, tienden a ser mas energicos y poderosas en las noches, o en lugares oscuros. -Dice Grace, señalando amablemente con la palma abierta a Sableye, y continua- Dada la combinacion de Fantasma/Nocturno de Lurk, pues potencia estos efectos. Y es algo que deberas tener muy en cuenta. Claro que eso es a lo que respecta Sableye, pero tu bien sabes que tambien tienes cualidades especiales. Y dejame decirte que tus poderes, como los mios, estoy segura que radican en la conexion con la misma energia que nos rodea, y con la que esta hecha todo el universo. Es decir, que por lo menos yo, tengo mi punto maximo de poderio, durante el amanecer, aun no comprendo porque o como, pero mientras tu no sientas algo en particular, creo que seria correcto practicar en esas horas".

Tu abuela cierra los ojos, y durante un momento nada ocurre, pero luego sientes a Sableye algo entuasiasmado. Las velas comienzan a agitarse, y entre todas, van formando una figura en el techo, con sus diferentes tonos de humos. Aun con los ojos cerrado, Grace te pregunta: "Dime... ¿que es lo que crees que es?"

El estado de excitación en Sableye crecía conforme el ritual de Grace avanzaba.  No eran las velas o los aromas que están producían lo que generaba aquella especie de explosión de energía dentro del pokemon.  Tampoco era la presencia mediumnímica de la vieja, no, por supuesto que no, la mujer era débil si se la comparaba con lo que podría llegar a ser Jorge.  Lo que en verdad ponía así a Lurk, era la presencia que comenzaba a aparecer en aquella habitación.  Un ente antiguo y poderoso se manifestaba a través del humo.

-"Dime... ¿que es lo que crees que es?"- preguntó la vieja

-mmm Mucho humo- respondió Jorgito -¿Cuándo vamos a entrenar?  Sableye ya está impaciente por empezar-

Impaciente. Esa era una buena palabra para reflejar la sensacion de Sableye. Pero la abuela de Jorgito no creia que fuese eso. Saco una Pokebola de su espalda y con un estallido de luz blanca libero un Pokemon Fantasma que su nieto bien conocia.

"¡Gengar! ¡Hipnosis!", los ojos del Pokemon Fantasma se volvieron de un intenso rojo y antes de que el muchacho o su Lurk pudieran darse cuenta, el sueño los invadio. Aun algo resistente el chico intentaba mantener los ojos abiertos y en un susurro le pregunto a su abuela, "¿porque?".

La misma acariciando el cabello de su nieto, le dio un beso en la frente diciendole: "Suerte".

Cuando el niño desperto era de noche, en un sitio donde jamas habian llegado las sombras. El bien lo conocia, ya habia estado alli, aunque nunca supo de que lugar se tratara. Pero claro esta, nunca antes habia ido de noche. Lo que ocurrio, fue que antes de que despertara, Sableye se levanto.

Lo que abuela de Jorgito no sabia era que ese justamente el plan de Sableye. Llegar a la mente del niño.  Pero no fue facil. Cuando el Pokemon Fantasma Maligno desperto se sentia debil. Todo a su alrededor era un inmenso oceano. Solo él y el niño se encontraban en un pequeño islote. Era como una gran roca en aquel basto espacio azul, rodeada de algunas pequeñas rocas mas. El sol brillaba como Sableye nunca antes imaginaba. Se sentia descompuesto y acalorado. Intento beber del agua, pero sus manos atravesando el liquido sin mojarse, y sin siquiera poder contener algunas pocas gotas en sus garras. La garganta le ardia, y hasta tuvo algunas arcadas, que luego de un poco de esfuerzo, termino por escupir sangre en una de las pequeñas rocas que alli se encontraban. En cuanto la sangre toca la piedra, esta se volvio de un oscuro brillante, como si de un carbon bañado en petroleo se tratase.

Ese descubrimiento le agrado a Lurk, quien se relamio la sangre restante de sus labios. Se fijamente observando la oscura roca y sentia como su cuerpo, aun expuesto al sol, se recupera un poco. Con lo que le quedaba de agilidad salto a la negra roca, y una vez alli, todo a su alrededor, dentro de un metro cuadro se volvio oscuridad. El agua se espeso, cambiando su estado a uno mas denso y profundo.

Ansioso nuevamente por el descubrimiento y sintiendose cada vez mas vigoroso e interesado por haber descubierto la forma de modificar aquel poderoso lugar a uno mucho mas propicio y provechoso. El Pokemon Fantasma Maligno con la lengua fuera y las garras brillandole de ansiedad tanto como sus cristalicos ojos, comenzo en una macabra danza a usar Arañazo consigo mismo. Y mientras se abria heridas y bailaba su sangre brotaba y desparraba volviendo una total oscuridad lo que tocase. Cuando se agotaba, que fue con frecuencia al principio, recordo lo que hizo con total naturalidad Jorguito, y confiando en sus propias habilidades, intento imitar lo mismo. Para su sopresa, creyendo que podia llegar a llevarle algo de tiempo, en el primer intento sano enseguida todas sus heridas con un brillante resplandor gris.

Repitio la maniobra unas tres veces, cuando ya habia cubierto casi por completo todo el lugar, o al menos hasta donde la vista le llegaba de una oscuridad solo superable por su propia naturaleza.  De todas formas, Lurk se percato, que poco mas hubiese continuado con aquello, a pesar de usar Recuperacion cada vez que sus piernas le fallaban y la respiracion era demasiado sonora, habia algo que no conseguia recuperar mas. Y que a pesar de tener las heridas sanadas, igual se agotaba.

Sentadose como indio junto a Jorgito, para descansar y apreciar su obra, sonreia felizmente al saber que ahora tendria un lugar donde la noche seria eterna.

Pero la tranquilidad le duro poco. Lo que Sableye habia hecho era imperdonable. Al menos lo era para aquel que debia proteger al niño.

Desde lo profundo del oceano, donde era oscuro porque la naturaleza asi lo deseaba, aparecio la verdadera esencia del dueño de aquel lugar. Un caparazon marron se asomo, y llevando sus garras al frente y haciendo destellar sus ojos en furia, salto justo delante de Sableye diciendole en una lengua que cualquiera hubiese entendido: "No eres bienvenido en este lugar. Y tampoco perdonare lo que has hecho. Yo he estado en este sitio desde que fue creado, es mi hogar y lugar, y no permitire que lo profanes de esa manera. Te ordeno que te retires".

Lurk no comprendió donde se encontraba hasta pasado un tiempo.  El descubrimiento, lejos de perturbarlo le agradó, aquel era un descubrimiento importante e interesante, no sólo había sido capaz de ingresar en la mente de Jorgito sino que además podía alterarla de alguna forma.

-Si, debo aprovechar esta oportunidad, debo alterar la mente del mocoso, volverla obscura y tenebrosa.  Debo hacerlo pensar como un fantasma, como Yo, de esa forma nos entenderemos mejor y seremos invencibles- 

Lurk se relamía ante aquella posibilidad disfrutando de antemano los beneficios de aquellos posibles cambios, se dejó llevar por sus pensamientos y comenzó a teñir de negrura aquel paisaje.  Pasado un rato se sintió débil, cansado, fue entonces cuando recordó lo que Jorge había hecho en la habitación e imitándolo logró cerrar sus heridas y rehabilitarse.  Presa del cansancio Lurk decidió sentarse junto al cuerpo tendido de Jorgito y esperar hasta que sus  fuerzas regresaran, debía  continuar con su trabajo, debía obscurecer más aquel lugar.

Se encontraba divagando sobre su proceder cuando una extraña voz habló.  Al parecer la vieja chismosa había logrado meter a un pokemon en aquel lugar tan preciado para Lurk.

-No eres bienvenido en este lugar. Y tampoco perdonare lo que has hecho. Yo he estado en este sitio desde que fue creado, es mi hogar y lugar, y no permitire que lo profanes de esa manera. Te ordeno que te retires-

-Ja- dijo Lurk con desdén –¿Con que has estado en este sitió desde que fue creado?  Pretendes hacerme creer esa mentira.  Vete de aquí escoria o serás historia en un santiamén.-

El Kabuto afilaba sus pequeñas guadañas una con la otra, no aceptaria mas ese tipo de trato proveniendo de un invasor.

"¡Suficiente! No tienes idea de con quien te estas metiendo. Ni siquiera sabes donde estas o como funcionan las cosas aqui. Te arrepentiras de haber venido a este sitio y hecho... esto. Ahora veras de lo un Guardian es capaz".

bueno, no entendì ni medio.  Tiro el d10 y ya le sumaràs vos la voluntad porque no se cuanto tiene

Bueno, siendo arañazo lo unico que tengo para atacar pues... ¿Arañazo? si, arañazo

Mientras Sableye se dirije hacia su adversario, Kabuto se queda en su sitio y comienza a brillar de un intenso blanco. Cuando la luz se apaga, nada parece haber ocurrido, pero el caparazon de Kabuto reluce mas que antes y parece mas duro.

pues por ahora me quedo esperando la resolución del turno y cuando llegue el turno dos veré que hago.  Pero supongo que lanzaré otro arañazo (te comento por si te sirve que ponga varios turnos)