Partida Rol por web

Las chispas del Pikachu no me asustaron, y continué acariciándolo tranquilo y calmado para que pudiera relajarse -Eso... me alegro de que estés más tranquilo...- sonreí al ver que dejaba de ponerse a la defensiva. Y cuando vi señalar al grupo con la cola, asentí -Si Pikachu... nadie te va a hacer nada...- le dije al pequeño para que terminara de relajarse del todo, contento de que Arion viniera a demostrarle a pikachu que no eramos peligrosos. Y cuando vi que el capturador recuperaba las funciones al fin, me sentí aliviado del todo, pues significaba que el pikachu confiaba en mi totalmente -Si, yo iba a proponer lo mismo Ray- le dije al rubio asintiendo, aunque no lo miré hasta que me aseguré de que el Pikachu estaba en buen estado después de "revelarse" -Yo tengo un equipo de cocina... estaré encantado de prepararos algo a todos- y cuando decía a todos, obviamente me refería también a la pequeña familia de Pikas.

Cuando escuché a Aiko hablar sobre el hornillo eléctrico experimental... no se yo... -¿Segura que no saldrá comida mutante de allí? Me gustaría que nos comieramos la comida... no que la comida nos coma a nosotros- dije, riendo levemente... claramente lo decía en broma... aunque si que la idea de usar ese hornillo no me pareciera bien del todo -Podemos probar a preparar un pequeño plato con él para ver si funciona...- aconsejé a la chica. Mejor probar solo un poco, en vez de cocinarlo todo ahí... no sea que salga incomible y no podamos alimentar a la familia. Sobre el tema de lo que pudo haberle pasado a la manada de donde podían venir estos pequeños -Si, deberíamos investigar... y tal vez también llevar a estos pokes a Ciudad Plateada... quizás desde allí le puedan llevar a un refugio donde le tengan bien cuidados y alimentados de mientras...- le di la razón a mi amiga además de aportando esa idea.

Me dediqué a ayudar con el campamento, montando también mi puesto de cocina... y si Levy lo necesitaba, también podía pedirme ayuda con las instrucciones... -Chicos, que sepáis que vais a acampar con el rey de las acampadas- dije contento y alegre mientras lo preparaba todo.

Aiko no se contentó con la respuesta de Angie, a fin de cuentas se le veía mala cara. No obstante no preguntó y se giró cuando Levy ofreció también su cocinilla. la hija de Silph sonrió - ¿Estuviste con los Scyther? Vaya pues si que desapareciste bien rapido. Aun así no importa, soy Aiko Silph, un placer - Un apellido reconocido incluso en Johto - Deja que te ayudo con la cocinilla. No es tanto como la mía pero al menos servirá igual - Obviamente la suya iba a ser un invento, y como se lo vió venir Rick, su precaución actuó antes de que fuera demasiado tarde.

Solo que Aiko no se enfadó, al reves, soltó una carcajada bastante agradable, como quien oye un chiste - Por favor no. Es experimental, pero no cocina con acido o cosas así. Simplemente es un intento de cocinilla portatil ecologica. en Silph S.A. hemos buscado la forma en que se pueda usar teniendo en cuenta energías no dañinas para su funcionamiento. - Sacó la cocinilla y empezó a desplegarla y explicar - Solar para usarla durante el día o con día soleado, tubos de combustión para usar con una pequeña llama o un ataque ascuas por ejemplo, y electrodos para aprovechar electricidad de los pokemon tipo Electrico.  - dijo sacando una placa solar, apartando un tubo para mostrar una entrada en un lateral y sacando un electrodo de otro lateral.

-La comida resultante no es mutante lo prometo. Pero si aún así no os fiais no la usaré hoy no te preocu... - iba a terminar su frase cuando entonces Rick dijo de preparar algo pequeño para probarla y las estrellas salieron de los ojos de Aiko en su dirección cual ataque rapidez de la gema de un Starmie. - ¡¿DE VERDAD?! - y por supuesto su emoción fue mayuscula. - Levy te importa que use a tu Mareep, su electricidad estatica es perfecta para probarla. Te prometo que no sufre nada por aportarla, al reves le vendrá bien para destersar su lana. - dijo efusiva entonces al granjero al cual ayudaba esperando pues una ayuda mutua. Y entonces escuchó a Arion preguntar por ayuda - ¿Tienes un pokemon electrico?  - Obviamente ahora estaba obcecada en probar su producto

Ray ni habló cuando la euforia de Aiko se desató por completo, estaba sacando y preparando multitud de ingredientes que podrían usar e incluso tubos de comida casera para pokemon en las que se podían ver algunas pegatinas en estos indicando el tipo para el que iba dirigido, siendo la principal y mayoritaria la tipo bicho, pero también había agua, fuego, planta y electrico.

Al oir su nombre reaccionó Ray con un sonido ahogado y aprovechó para mirar la circunsatancia de los demás, parando más en uno que en otros y suspirando hasta que Rick llegó al final de su conclusión - Así que el rey ¿Eh? - dijo riendo de medio lado mientras ya estaba a punto de terminar de preparar todo.

Con Rick como un cocinillas, Levy con su esperiencia granjil y Ray con sus conocimientos, entre los tres pudieron hacer suficiente comida para todos, tanto humanos como pokemon, incluso para los que llevaban en sus pokeballs los cuales al liberarlo pudieron darse cuenta de los que llevaban todos, siendo que Ray además de su Scyther, llevaba un Larvesta, y Aiko por su lado llevaba además de un Ralts y un Riolu, un Pikachu. - Esta es Kai, me acompaña desde pequeñita para ayudarme con los trabajos electricos. Es mi principal fuente de energía y me costaría usarla en un combate, pero igual podría ayudarme en algún concurso. - comentó Aiko pensativa mirando al cielo.

Mientras la comida se preparaba, Ray junto a quien quisiera acompañarle, fueron a por leña para encender una hoguera y mantener calor para todos. Charmander y Larvesta fueron la chispa para generar un buen fuego que mantuviera a todos calientes y con una llama bien viva. Con eso y la comida lista os sentasteis alrededor de la hoguera (podeis decir donde aunque diré donde irían a sentarse los PNJs) siendo que Ray se mantuvo cerca de Angie y Aiko quiso sentarse entre Levy y Arion. Los pokemon se entremezclaron conociendose un poco entre todos, e incluso hicieron un poco de migas con los pikachus siendo que la ratoncilla electrica de Aiko fue la más proxima a estos.

La pequeña familia de pokemon salvaje salieron de su escondite transportando el huevo a horcajadas y al Pichu en la boca acercandolo al fuego para que mantuviera el calor. Allí cerca al Ranger empezaron a comer la comida que habían robado y la que les ofrecían... siendo que al final la robada no la tocaron.

Al ver tal escena y después de hablar entre vosotros durante la cena* que fue acabando poco a poco, Ray se hizo denotar - Ey Ranger - dijo haciendo referencia a Rick mientras buscaba algo en la mochila - Creo que deberías usarlo. - y le lanzó al susodicho una poción.

No había que ser un genio para denotar que debía hacer con ella. Solo había dos pokemon heridos cerca suyo y uno podía aguantar la herida que tenía. En realidad Ray era capaz de hacerlo por si solo sin pedir permiso a nadie, pero alguna razón tuvo para hacer ese gesto.

Aiko fue entonces quien sonrió y con todo ya más calmado de emociones y aún con un poquito de noche empezó a hablar de cosas más importantes - Gracias Rick por ayudarme a preparar algo en mi hornillo, al final si que funciona bien. Y gracias Levy y Arion por el combustible - dijo sonriendo a ambos mirando a uno y a otro respectivamente. - Mira que me encantan las máquinas... Pero creo que esto es lo único que lo iguala, la tranquilidad de un fogata ¿No creeis?

Ray no se metió en la conversación, en su lugar parecía estar más pendiente de Angie y casi vigilante. - Haceis bien en buscar respuestas mañana, es un acto muy valiente - dijo en un susurro tapando su boca con una taza y enfocando su voz hacia Angie con esta, casi esperando que nadie más le escuchara, aunque no tenía por qué ser así.

Jade se sorprendió de nuevo, aunque nadie sabe si para bien o para mal - Vaya... curiosa confesión. - reconoció antes de continuar hablando ofreciendo su inexperta ayuda - Siento no serte de utilidad, pues solo puedo darte los consejos básicos de los concursos. Nunca he participado en uno, y dudo que llegue a participar, pero al menos se lo básico. Eso o igual... En celeste puedo presentarte a otra coordinadora. Bueno... Ex-coordinadora. No aguantó mucho pero ganó una vez un campeonato de coordinadores de Kanto. O al menos eso me contaba mi madre. - Se encogió de hombros dejandote finalmente a ti elegir que preferías. Era obvio que lo primero lo conseguirías antes, pero la oportunidad de conocer a otra coordinadora ganadora era única.

Te miró entonces con una sonrisa orgulloso de tener a una compañera entonces, aunque aquella sonrisa rompió en risas al decir lo de glamour. - Si el glamour lo llevas tu de seguro estaré rodeado de el. Bueno... de no ser tan novato entonces, intentaré ser un buen guardaespaldas para ti - Mencionó guiñando un ojo prometiendo así su fuerza cual caballero protegiendo a su princesa.

Ante tu siguiente revelación, Jade te miró con una curiosidad felina - Aja... Así que prefieres grupitos pequeños antes que grandes. Lo tendré en cuenta - aunque obviamente no era para bien esa curiosidad intentando como ver un poco más allá de lo que había en dichas palabras. - Pero no podemos dejarlas abandonadas. - y eso era una realidad - Seguro que en Ciudad Plateada se encuentran con su grupo. - y finalmente se encogió de hombros antes de seguir avanzando en dirección al "campamento".

Al final Jade asintió con el tema de los pokemon - Sip, de hecho ya tengo nombre para cuando lo capture... Pero falta encontrarlo. Por suerte el bosque es muy grande y está lleno de pokemon tipo bicho. Será facil encontrar un Caterpie y un Weedle. - No obstante y aunque ya estabais llegando al campamento miró a las copas de los arboles - Por otro lado, si no quieres pasar por su estado larva, los Kakuna anidan en el tronco y las copas de los arboles. Los Beedrill son los más raros de ver. - aconsejó con su esperiencia Verdial que tenía.

Y esperando encontraros a las otras dos chicas, para vuestra sorpresa erais los primeros en llegar - Humm... Que extraño... No debieron de irse muy lejos. - Se encogió de hombros mientras se acercaba a un punto central - ¿Quieres encender el fuego conmigo? Te puedo enseñar si no sabes - Preguntó aunque bien era cierto que una cientifica tenía mil formas de encender un fuego, la practica podía ser diferente. Entonces se paró a mirar a sus pokemon - Toru, Spike, Silf, traed piedras alrededor de los palos - pidió y una vez estuvo montada la hoguera se apartó un poco - Hagamos magia my lady. - dijo cortesmente y de forma burlona simplemente por hacer gracia mientras cogía unas piedras para hacer chispa y explicarte como hacerlo para que lo hicieras con el.

Ella por su parte levantó ambas cejas y se encogió de hombros, propiciando la aparición de su típica sonrisa de Meowth solo que ahora con cariz relajado en vez de la travesura habitual. — ¿No es lo más alentador, verdad? Me refiero a mi confesión, pero se trata de la verdad: es una consecuencia obvia cuando se tienen mis gustos y energía, si lo piensas — explicó, tan falta de modestia como de dudas — y por lo mismo, sabes más que yo de momento así que no te subestimes ¿vale? me encantaría conocer a la coordinadora de Celeste…pero también aprender e ti todo lo posible, hasta que en concursos tú me llames a mi senpai jujuju — ¿por qué limitarse solo a una opción, si precisamente uno de los fundamentos del método científico era realizar una investigación a fondo antes de enunciar cualquier certeza? Además nada le garantizaba que la desconocida para ella aceptara darle algún consejo, mientras que el entrenador de ojos verdes parecía muy dispuesto a ayudarla…

— Esa voz me agrada — respondió a aquella especie de promesa, ensanchando su gatuna sonrisa tras el guiño ajeno que no sabía por qué pero hizo que su piel se erizara levemente… ahora Jade mismo propiciaba que Connie lo viera como alguien capaz de enfrentar al peligro, algo que de la mano de la científica podría ser un asunto a tomar en cuenta, pero tiempo al tiempo.

Sufriendo una breve incomodidad, la de Fuscia fue incapaz de entender el motivo tras la sospechosa curiosidad del entrenador de Spike en sus palabras, luego de confirmas con las mismas que de hecho entendía…hasta cierto punto; para Connie, pues, los grandes grupos eran más motivo de distracción que de deseo, y en el peor de los casos fuente de problemas, como cuando el entrenador pelirrojo y el ranger no tardaron en llevar sus diferencias de método al campo de batalla antes; podría ser un modo de pensar algo frío, pero al fin y al cabo como científica la chica Hemlock tendía a ser práctica…

— No es que quiera dejarlas así como así — tampoco era una apática sin remedio, pese a lo que pudiera parecer a veces — además me sentiría mal, ellas son buena gente y todo — suspiró; ella albergaba la misma esperanza que la suposición de Jade comunicó.

— ¿Y se puede saber qué nombre tendrá? — al poco tiempo, cuando la plática avanzó, ella no pudo evitar preguntar, curiosa — No es que tenga particular asco a los tipo bicho, y por ahí he leído que a veces, cuando se capturan pokémon salvajes, es mejor hacerlo desde sus etapas más básicas porque hay ataques que podrían no aprender por si solos en la naturaleza…odiaría conseguir un Kakuna que solo se pudiera endurecer — de pensarlo la chica se estremeció, aunque no pretendía hacer menos el consejo de Jade — supongo que sería cuestión de analizar bien al pokémon en un posible encuentro — agregó, pues.

De cara a la “soledad” del campamento lo primero que Connie pensó era que quizás las otras dos se habían metido en algún problema, no obstante ante la reacción de Jade se replanteó un poco el asunto, creyendo que quizás estaba siendo demasiado paranoica. — Podría usar a Nebbia, ya sabes, por el fuego que tiene a su alrededor… — dijo dudosa, a lo que fantasma negó, indignada por alguna razón — la otra opción sería usar un encendedor… si trajera uno — pero al parecer no lo llevaba — … —

— Le dejo el gusto, pues, mi valiente caballero ojojojojo — así que a fin de no maltratarse las manos con la fricción y el trabajo que requeriría hacerlo a la antigua, se acercó a Jade una vez estuvo montada la hoguera y cual ojou-sama le siguió aquel peculiar juego. Bien podría verse como una total aprovechada, más no estaba segura si el contrario de hecho llevaría consigo fósforos o algo así…

Una vez tomada una nueva decisión, abanonaste allí al Nidoran donde este seguía comiendo la baya sin que se percatara de vosotros y la Rowlet se acercó al ver que todo iba calmandose poco a poco.

Al llegar a un punto intermedio del camino, todo era practicamente un llano que iba en una única dirección. Los arboles no cubrían y no hacían laberintos y se permitía ver mucho de la ruta así como que poco a poco los pokemon iban durmiendose por el camino.

Decidiste pues darle de comer a los tuyos así como comer tu mismo y tanto el Rowlet como el Rockruff se pusieron contentos y comenzaron a comer, quizás Rowlet más orgullosa que el pequeño perrito.

No obstante algo a lo lejos te llamó la atención haciendo que miraras un poco hacia el cielo pero sin duda hacia el fondo de la ruta.

Había una pequeña columna de humo blanco, casi como si de una hoguera o una chimenea se tratase. Dormir al aire libre estaba bien, pero siempre podrias averiguar que era dicha columna de humo. Eso o hacerte tu tu propia fogata.

   ...Silph...Silph... donde e escuchado ese apellido...

   Con ayuda de todos pudimos armar el campamento en un santiamén ... algunos mas acostumbrado que otros.... y otros que parecieran estar en su campo natural... por lo que nos sobro tiempo hasta para conversar sobre aquella cocinilla curiosa de la muchacha Silph.

   Ohhh... - decía como interesado ... no tengo ni idea lo que dijo... pero suena genial... , hasta que la misma nombra a mi jovial compañera - ¿ A Maggie ?, ¡ por supuesto ! - decía animado mientras le hacia una señal a mi oveja para que se acercara a donde estábamos, para que la chica se encargara de darnos la demostración de tan curioso aparato.

   Ahhh... vale vale, funciona igual que el cepillo - mientras sacaba del bolsillo de mi mochila aquella herramienta de cobertura metálica - según la señorita Erika sirven hasta para cargar baterías y esas cosas... - aunque no decía mas... estaba mucho mas pendiente de como la cocinilla comenzaba iluminarse gracias a la electricidad de maggie - Geni~aaaal - con ojos iluminados comenzaba a tomar unas cuantas bayas de mi mochila, mi intención era hacer unas galletas simples, porciones que Pit y mandy pudieran disfrutar aun siendo así de pequeñitos. 

  ... ya con todo listo, solo era momento de disfrutar del trabajo duro....

     Pues mas o menos jaja...-  mientras charlaba con el grupo, aunque se notaba cierta ansiedad en mis palabras - Somos vecinos de la señora Bianca... u-un poquito brusca para sus cosas... y su hija... b-bueno... - con cierto nerviosismo recordaba la risa de Shinya - m-mas de lo mismo jajaja....ja...

Escuché con cierta curiosidad la explicación de Aiko acerca del funcionamiento de su cocina portátil. Me pareció un invento la mar de útil, aunque a mí no es que se me diera especialmente bien la cocina, pero sabía que aquel apartado que funcionaba con energía natural era un innovador invento. Cuando Aiko me preguntó si tenía algún Pokémon eléctrico negué con la cabeza.

-​​​​​​-Eléctrico no, pero quizá él pueda ayudarnos.- dije mientras tomaba la cápsula de Charmander y lo liberaba. Viendo que los Pikachu se relacionaban con los demás Pokémon sin mayor problema, decidí volver a liberar a Sandile para que se alimentase y jugará con los demás -Hazle caso a Aiko, enseguida vuelvo.- le dije al pequeño lagarto naranja. Tras eso acompañé a Ray a por leña, no nos tomaría mucho tiempo.

Cuando volvimos los demás estaban con la comida, por lo que, junto con Charmander, ayudé a formar la hoguera. Cuando todo estuvo listo y mis compañeros empezaron a sentarse, yo decidí hacerlo entre Ray y Aiko, pues aún tenía curiosidad sobre sus múltiples inventos y quería hablar con el rubio sobre algunos entrenamientos.

-Ray, ¿cómo te has hecho con ese Larvesta? Es un Pokémon raro.- le pregunté al rubio con curiosidad. Sabía que ese insecto era muy poco común, y desde luego no era nativo de Kanto. En mi mente ya surgían imágenes de un combate entre Volcarona y mi futuro Charizard. No pude evitar sonreír levemente de emoción ante esa idea.

Angie colaboró en todas las tareas del campamento que se le encomendaron, con Pollo siguiéndola de cerca con una mirada de decisión, como si pensase que su presencia y vigilancia eran totalmente necesarias para que su entrenadora lograse sus objetivos. Probablemente lo eran, de hecho, y Pollo se llevó unas cuantas palabras de agradecimiento de Angie y más de un achuchón. El Pokémon de fuego parecía contento, y su entrenadora también, habiéndose habituado a la presencia del Pichu y del Pikachu, y...

¿Y-Y ahora hay un Pikachu más? Angie permaneció en el extremo opuesto del campamento al que se encontraba el invento de Aiko, que al parecer requería energía eléctrica para funcionar, y todo el mundo parecía dispuesto a colaborar con ello. Uhh... Pollo, dame fuerzas... Angie abrazó a Pollo, habiendo finalizado sus tareas, y al parecer se había sentado cerca de Ray, al que escuchó hablar en su dirección. Su cabeza, un poquito aturdida por tanta electricidad cercana, tardó un momento en entender a qué se refería.

- Ah... - murmuró cuando lo entendió. Negó con la cabeza. - No creo que sea un acto valiente... es algo... natural, ¿no? - murmuró, encogiéndose de hombros. - No solo como rangers, sino como amantes de los Pokémon... si algo está mal, es natural querer ayudar...

Kakuna cayó tras el ataque del Vulpix siendo que quedó en el sitio sin poder continuar atacando.

Con un silcoon atrapado y un Kakuna debilitado, ya solo quedaba volver con los demás para poder disfrutar de la acampada.

Escuché con atención como funcionaba la cocina experimental de Aiko, pues ciertamente me parecía interesante y curioso el concepto de una cocina ecológica que usara diferentes fuentes de alimentación. Y sonreí cuando la chica se puso contenta de que fueramos a probar a cocinar en ella -Si de verdad... tranquila que me ofrezco a hacer de sujeto de prueba. Y bueno, si la comida sale mutante me la comeré igual... tampoco soy muy exquisito con la comida- le terminé diciendo riendo a la chica. Yo el único pokemon que tenía era mi compañero Leaf... así que no podría ayudar en eso salvo para usarla. Por otro lado miré a Ray preguntando si era el rey, y con orgullo asentí -El rey, el genio, el presidente o como quieras decirlo... jeje- le respondí riendo al rubio -Vengo de Ciudad Arborada, allí organizabamos al menos una acampada con mi madre a la semana... Así que confiad en mi- le expliqué al chico... ¡tengo experiencia de sobra!

Y así intenté demostrar mientras preparaba comida para todos, tanto personas como pokemons... sin duda sorprendiéndome al usar la cocina de Aiko. Y también ayudé a montar alguna tienda... aunque para mi y los que quisiera, lo que hice fue montar una hamaca entre los árboles... nada mola más que dormirse mirando las estrellas en una hamaca. Al igual que Arion, me interesé por ese Larvesta al verlo -Como mola, nunca he visto uno... Arion tiene razón, son raros... ¿puedo acariciarlo? Bueno, si el quiere claro- le pregunté a Ray si podía rascarle el pelaje... aunque claro, eso sería si el pokemon insecto me dejaba, no otra cosa.

Tampoco le quitaba los ojos de encima a la pequeña familia que nos acompañaba, asegurándome de que todos comían... sobretodo el pequeño Pichu que era el que más atenciones necesitaba. Entonces, Ray me sorprendió lanzándome una poción diciéndome que la usara... y era verdad, era mejor darle uso, así que asentí. Dejé un poco de comer y me incliné sobre la familia -Pikachu, voy a tratar a Pichu... ¿vale? No te preocupes, intentaré que se ponga bien...- le dije a Pikachu, como esperando que me diera su permiso para aplicarle con cuidado la poción al pequeño Pichu enfermo, a ver si se encontraba mejor con medicina y comida.

Mientras Ray hablaba con Angie, Aiko me agradeció usar su cocina -De nada... la verdad es que se usa muy bien, y es muy práctica- le dije a Aiko, sin duda dándole el visto bueno a ese invento. Cuando dijo lo de la fogata, asentí sin dudarlo -Si, es genial... sobretodo si se comparte con buena compañía- dije sonriendo a todos. Escuché a Levy también y me extrañó un poco -¿Quien es Bianca?- le pregunté intrigado por lo que contaba.

¡Bien! dije cogiendo a Brisa y celebrandolo con ella, ¡Hemos ganado!.

Después del ataque de felicidad por acabar con el primer pokemon salvaje de la aventura, al menos el primero buscado, dejé a mi pokemon en el suelo para que caminara y me acerqué a Ruby. Enhorabuena, parece un pokemon muy guay, Y Spearow también es un gran luchador, seguro que no tienes ningún problema con ellos a tu lado.

Tras ello, fuí donde estaba el kakuna debilitado y dejé frente a él una de esas bayas que la rotomdex decía que mejoraban la salud de los pokemon. Agachandome para dejarla lo más cerca posible. Lo siento, no es tu culpa que hayamos querido combatir, ni que nos llevemos las bayas del árbol donde estabas, aquí te dejo una para que te recuperes, y seguro que dentro de poco vuelven a crecer en el mismo árbol. Sonreí al pokemon y me levanté para volver a donde estaba.

Supongo que Connie y Jade no tardarán en llegar, por qué no comenzamos a preparar las tiendas y esas cosas, seguro que les hace ilusión. Decía mientras caminaba al claro donde ibamos a poner la hoguera dando saltitos de felicidad por el combate, mirando de reojo a Brisa y alegrandome de lo bien que lo estaba haciendo.

Ray miró y atendió primero a los que preguntaron por su segundo pokemon siendo que los miró con extrañeza - Bueno... Zantet es el pokemon que llevo desde casa... Larvesta es el inicial que el profesor Oak me ha dado para iniciar la aventura. Mi madre se empeñó en que llevara un pokemon de fuego como inicial para tener una ayuda en las noches frias. Me recomendó que un Charmander sería lo mejor, pero me negué... - se encogió de hombros en ese momento respirando hondo - Ya le dije y le repeti varias veces, que mi equipo pokemon solo estaría hecho de pokemon tipo bicho. Quizás por eso y que Oak hablara con ella, hizo que al final me encontrara con un Larvesta entre las opciones que me dió a elegir... Y por simple influencia lo acepté

Su decisión fue bastante logica y aplastante ya que así al menos llevaría algo recomendado por alguien con experiencia y cercano a el. No obstante ahí se veia hasta donde estaba dispuesto a llegar el profesor Oak para que todos salieran en su aventura bien encaminados y con un pokemon que creyeran parte de si mismos.

-Aún así... Hice una promesa, incluso antes de salir de mi casa. - Dijo entonces mirando a su Scyther- A Zantet solo lo usaría a partir de ganar la medalla de Plateada, y solamente contra el. En el recorrido inicial solo usaría a Ash... Y por culpa de eso aún no he podido atrapar a los pokemon del bosque que quería. Caterpie y Weedle así como Metapod y Kakuna son debiles al fuego, y algunos al arder huyen. Voy a tenerlo crudo si no consigo un Butterfree o un Dustox. - Quien supiera realmente más de estos pokemon sabría el por qué lo decía, no obstante después de decirlo mostró una sonrisa de suficiencia - Dudo que puedas tu solo contra el ¿No Zantet? - tras preguntar aquello el Scyther de Ray apartó la mirada como frustrado.

Escuchando la petición de Rick, Ray se encogió de hombros - Ten cuidado de que no te queme, a veces se emociona sin querer. - levantó entonces la mano - Ya me ha pasado - refiriendose a que le quemó esa mano, aunque debió ser leve pues no había quemaduras, tan solo estaba roja

Tras ello y mientras lo demás seguían a lo suyo, retomó su conversación "privada" o más bien en susurros con Angie - Muy pocos harían lo que vosotros. Y más teniendo en cuenta lo sutilmente que te alejas de ellos. - remarcó entonces la observación que había mantenido hasta entonces sobre Angie. No obstante antes de que dijera algo la detuvo - Todos tenemos miedo a algo. Enfrentarnos a ello es lo que nos hace valientes. Aunque bueno... Tu tienes un buen caballero defendiendote - dijo obviamente refiriendose a Torchic el cual no se apartaba de la Ranger.

-¡NO SALDRA MUTANTE! - se quejó frente al ranger antes de volverse a por Levy - Algo así... Conozco ese cepillo, y más bien es como un cargador de estatica - dijo mientras ya estaba trabajando con el Mareep para hacer la cocina funcionar, la cual nada más poner los electrodos sobre la lana de Mareep empezaron a hacerla funcionar y a hacerle brotar una sonrisa a la niña de Silph - Funciona. - entonces vió al Charmander del Arion y se disculpó - Oh... L-lo siento Arion, quería probarlo con electricidad, y es más facil sacarla de un Mareep que de un Pikachu - acabó reconociendo por la pura realidad de la situación. Mareep tenía su electricidad transmitiendose por toda su lana y sin hacer ningún esfuerzo estaba dando energía pura.

Mientras entonces dejaba que Rick probara a cocinar apuntanto siempre cosas en una libreta según la usaba, siguió hablando con Levy - El cepillo de estatica lo que ayuda es a obtener la electricidad estatica de los pokemon en un punto en concreto, una celula de energía o más comunmente conocida como batería. Eso te permite usar su electricidad en otro momento como fuente de energía. Esto - señaló a los electrodos - hace lo mismo, pero lo envia directo a la cocinilla.

Aiko reaccionó entonces a lo dicho por Levy y la pregunta de Rick siendo que fue la primera en contestar - Blanca es la lider de gimnasio de Ciudad Trigal, en Johto. He tenido la suerte de conocerla de primera mano viajando con mi padre a Johto a la torre de radio y probando un nuevo sistema de lactancia para las Miltank. No sé si lo seguirá usando a día de hoy, pero en tal caso debería de tenerlo en su casa. ¿Es así Levy? - le preguntó al joven granjero

-Es muy simpatica, aunque a veces es despistada y se le olvida todo... Por eso pregunto - dijo la que se perdió y creyó estar en Ciudad Plateada, por tercera vez.

Jade sonrió ante tu pregunta y negó, pero sin perder el optimismo - No es alentador no, pero nadie nace sabiendo. - se encogió de hombros - Bueno, pues trataré de enseñarte lo que se, y en Celeste si hay tiempo te presentaré a la coordinadora. Pero no esperes que cuando sepas más que yo te llame senpai. No voy a participar en concursos - se encogió entonces de brazos soltando aire - Así que llegarás a saber mucho más que yo muy pronto.

Sonrió después tras tu respuesta pero agachando la cabeza - No prometo nada - no obstante había que recordar que no era Green. Podía ser fuerte y tener una meta grande, pero igual no siempre podría ser capaz de ser el guardaespaldas que esperabas.

Jade se volteó al verte tan alicaida hablando pues del asunto con Miaka y Ruby, tanto así que se acercó hasta ti un poco y con un dedo trató de levantarte la barbilla para que le miraras - Ese es un punto del espiritu aventurero. - y luego miró a Nebbia que os rodeó en ese momento - La compañía. A veces puede ser innecesaria, y otras veces algo que te llena. Tanto pokemon, como humanos - y tras decir aquellas palabras que esperaban ser no solo inspiradoras sino un alito de no negar una compañía aunque fuera minima, siguió andando hasta el claro.

El hijo de Green entonces se sonrojó un poco cuando hiciste tu pregunta sobre el nombre que le pondría al Caterpie - En realidad es una tontería pero... - se calló durante unos segundos que prometían ser eternos - Chou - terminó diciendo la palabra que significaba en lo que se transformaría al final - La meta que un Caterpie suele alcanzar. Además, es de los primeros pokemon que se pueden capturar en la senda de Red que tienen un ataque tipo Psiquico. Igual Dustox estaría más equilibrado por los ataques de veneno, pero no sé.

Al final de todo, con esfuerzo, Jade logró encender una llama en la hoguera con las piedras - Te dije que no era dificil, my lady. A veces aprender de tu padre cosas sobre acampada merece la pena. Podremos aprovechar el fuego un poco mientras vienen las otras chicas

El último clik, tenía nuevo pokemon ¿Por qué lo había hecho? Sencillo, se había olvidado del hecho de que podía combatir sin más con dichos seres. Un enorme sonrojo apareció en sus mejillas pero esquivó el tema rápido agarrando la pokeball y guardándola en su cinturón especial. - G-gracias. ¿Volv- Sonrió calmándose al ver lo que hacía la chica por lo que puso una baya del mismo tipo al lado de la de Miaka. - Así comerá bien. Se chocó las manos para eliminar el exceso de tierra que se le había pegado en la palma de la izquierda al apoyarse para dejar dicha baya y la miró asintiendo. - Claro, ¡vamos!

Finalmente y Miaka y Ruby volvieron poco a poco al claro donde dormirían esta noche junto con Connie y Jade, los cuales ya estaban junto a una fogata recien encendida.

Ambos se estaban mirando y por lo que parecía, estaban hablando y medio riendose. Los pokemon de cada uno seguían por ahí pululando, pero parecía que salvo estos, ninguno de los humanos se percató de la presencia de las procedentes de Paleta, siendo que Jade estaba de espaldas a donde venía y Connie podría verlas si apartaba un poco la vista.

¡Connie, Jade!, dije a lo lejos. ¿Molestaremos?, me preguntaba, estaban solos en la oscuridad salvo por la hoguera. Aunque por otro lado la noche estaba ahí, y con ella el frío. 

Me acerqué sonriendo, habéis encendido la hoguera, que bien. Dije mientras me sentaba y buscaba en la mochila los aparejos de cocina que había obtenido en la primera tienda. Poniendo dos pequeñas ollas sobre unos soportes. Una para nosotros y otra para ellos. Decía hablando sola mientras me calentaba las manos en la hoguera y sacaba la comida.

Que tal con la leña, pregunté con una sonrisa picarona, que por otro lado en mi rostro de niña quedaba algo extraño. Para después girarme a Jade, he estado pensando en el gimnasio, ¿hay alguna manera de que Brisa aprenda algún ataque de agua?, no es tan diferente al nieve polvo que conoce, pero ni siquiera se por donde empezar. Reía mientras comenzaba a echar comida a las ollas. 

— Aguafiestas… — reclamó de manera casi infantil apenas el muchacho de Ciudad Verde “rompió” su pasajera ilusión, pues había sido por poco pero realmente se había imaginado a Jade diciéndole “Connie-senpai”… en fin, tampoco era el fin del mundo por eso ni mucho menos, por lo que fuera de ese pequeño “altercado” su paseo continuó normal.

Para no repetir palabra al pasar al siguiente tema, la Hemlock solo hizo una especie de puchero pasajero, solo evitando estirar los brazos con tal de desperezarse porque los llevaba de antemano ocupados…aunque casi suelta la madera cuando el chico ojiverde no solo se le acercó de más, sino que tomó su mentón para levantarlo como si aquello fuese alguna especie de escena cliché en un anime shoujo o algo así… ¡p-pero cómo se atrevía!

— Para eso te tengo a ti — primero dijo, sin embargo apenas se dio cuenta de lo raro que sonaba aquello, se puso fugazmente roja cual tomate y apartó la mirada — Y a Nebbia, claro, y a Spike… bobo, no es que quiera negar la compañía ajena, solo exponía inconvenientes — añadió y suspiró, en consecuencia ganando tranquilidad.

— Bueno, para veneno mi primera opción en este bosque sería Beedrill mismamente, o bueno, Weedle, aunque un Dustox tampoco estaría mal, ahora que lo pienso… y el nombre está lindo — lo último cortó la madurez que llevaba en sus palabras, pues sonó más a una especie de curiosidad lejana a la burla pero no así a la risa, al fin y al cabo el nombre del hipotético Butterfree era tan obvio que por lo mismo fue inesperado.

Ya en el campamento Connie aplaudió un par de veces cuando Jade hizo fuego, siguiendo con su papel — Bueno, a mí mi padre me enseñó cómo hacer bombas apestosas para alejar algunos peligros… y mi madre a cómo volverlas explosivas, pero de acampadas como tal, poco podría decir — la aspirante a coordinadora tenía su propio trasfondo, pues, aunque eso para nada le impidió cobijarse un poco con la temperatura y admirar el resplandor que la producía, un muy buen trabajo de parte de Jade — Ah…que a gustito se está aquí… — Nebbia estuvo de acuerdo.

Al escuchar la voz conocida de Miaka, Connie levantó la mirada y de paso aprovechó para indicar a Jade la dirección de dónde venían la susodicha y Ruby, pues el entrenador estaba de espaldas — ¡Hey! ¿Dónde se habían metido? — dijo más curiosa que con ánimos de regañarlas, pues para empezar no era su lugar hacerlo.

— La encendió Jade, para “presumir” sus habilidades — añadió luego en tono juguetón pues no había sido exactamente así, pero según quién lo viera podría tomarse de esa manera. Connie solo bromeaba.

Notó la pícara sonrisa en la cara de Miaka y no pudo evitar que un leve rubor tiñera su rostro… ¿¡Pero porqué!? ¿Qué rayos pasaba con ella? — L-la encontramos rápido, por suerte, pero cuando volvimos que no estuvieran solas tanto tiempo resultó que ya no estaban — inevitablemente rio.

Como ella no tenía la certeza para responder lo siguiente que Miaka preguntó, se limitó a esperar si Jade sí, aunque claro, curiosa.

— Derretir ese hielo con un ataque de fuego seguro sería un combo visualmente maravilloso… — sin embargo tuvo que decir aquello, pues de solo imaginarlo sus ojos brillaron.