Partida Rol por web

Puertolibre (Mundo Antiguo)

1.- Tomando tierra...

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29/05/2014, 07:27
Neulens Eorth

Neules se disponía a dar el fatal golpe a su enemigo cuando, de repente, su adversario es lanzado por los aires por un hombretón gigante arrebatándole el placer a la dama vickinga.

¡PERO QUE DEMONIOS! ¿Varek? tras una rara muesca Neules se dirige a Varek para abrazarle con fuerza, un gran apretón refuerza la escena de el gran guerrero que ha salvado a la chica en apuros cuando de repente.

¡ZAAAAS! Un tremendo rodillazo sacude la entrepierna de hombretón y le hace estremecer inclinándose ante la indignada Neules. Los espectadoress no dan crédito a la dantesca escena.

¿Cómo te atreves a derribar a una enemigo mio? Lo tenía a punto para rematarle, pero nooooooooooooo tenías que hacerte el héroe ante la chiquilla en apuros ¿no? la cara de Neules arde en un rojo fuego que asusta a la multitud.

!QUE SEA LA ÚLTIMA VEZ QUE TE HACES EL GALLITO DELANTE DE MÍ, ME VALGO SOLITA PARA DESHACERME DE ESCORIA COMO ESTA! Los hombres no pensáis más que en chulearos y exhibiros delante de las mujeres pensando que no servimos para nada pero esto se acabó, la próxima vez te arrancaré los testículos de un mordisco y se lo daré de comer a los tiburones. De repente todos los presentes de forma involuntaria se ponen las manos en la entrepierna sintiéndose aludidos por las palabras de Neules.

La vickinga se vuelve hacia los demás que miran atónitos la escena para dar explicaciones... Tranquilos en mi tierra la familia nos saludamos así, es una costumbre de lo más normal. ¿Verdad tío Varek? La conversación termina con un sarcástico guiño al púbico asistente.

- Tiradas (1)
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29/05/2014, 09:00
Sutilidad Varek

El sudor de Varek en el agobiante clima de Freeport disimula la lagrimilla de dolor que baja rodando por su mejilla. Aunque le ha dolido eso es bueno para el clan: Neulens se está convirtiendo en una buena luchadora. Esboza una media sonrisa para disimular el dolor y salvar el orgullo ante los espectadores. Veo que a pesar de (claramente) haberlas pasado canutas últimamente tus extrañas ideas no se han visto sacudidas. Varek mueve la cabeza con tristeza y cierta sorna. Esta juventud de hoy en dia... Bueno, al menos esta vez le ha dado una abrazo. Aun hay ciertas esperanzas para esta chiquilla. Por su parte Neulens sabe perfectamente que el posado tradicional de Varek jamás aceptará sus ideas, pero que respeta una actitud combativa.

Varek sonríe y se hiergue desde la postura un tanto encorvada que ha adoptado con el abrazo (y el rodillazo, pero nunca aceptará eso). Conozco un local aquí cerca en el que podreis asearos y descansar, que creo que tú y estos amigos tuyos lo necesitáis. Varek empieza a andar. por el amplio pasillo que se ha creado en la multitud. Claramente este grupo de extranjeros son peligrosos si son capaces de pegarle a un matón como Sutilidad y (obviamente para todo el mundo) hacerle daño y salir indemnes, asi que nadie se les acerca mucho mientras se mueven hacia los tugurios de la ciudad.

Notas de juego

xD Brutal reacción de Neulens y Filippo. ¡Me ha encantado!
 

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29/05/2014, 14:19
La Botas

Después de pinchotear a su oponente y verlo caer una amplia sonrisa se dibujo en el rostro de la mujer, la que no tardo en sacar su florete del cuerpo del pirata caído, para encarar al siguiente contrincante, le que lo vio salir por patas.

-¡Oye! ¡Oye tú! ¿Pero que te has creido?! ¡Cobarde!- Y entre estos y más improperios miró con asco su florete e hizo una mueca... mirándose la ropa.-Que asco, joder...

Paso el metal de su arma por la ropa del contrincante muerto para limpiar los restos de sangre, girando el rostro al encontrarse con aquella escena tan... ni palabras tenia para describirlo.

-Que bonito, una maldita reunión familiar...

Se sacó el sombrero como si fuera a saludar pero lo que hizo fue abanicarse, pues en el maldito puerto pestilente no hacia otra cosa más que calor.- Bueno... después de esto, yo necesito un trago... - Miró a sus compañeros, haciendo una leve mueca mientras enfundaba su florete y se recolocaba el sombrero.- ¿Alguien se anima? - Pronunció las palabras mientras se encaminaba por el muelle hacia la posada o taberna más cercana.

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29/05/2014, 15:30
Director

El combate, si así se podía llamar al calentamiento de los tres recién llegados a Puertolibre, estaba terminando ya, con tres marinos fuera de combate y otro huyendo como alma que lleva el diablo por entre los asistentes que fisgoneaban el recibimiento de los malandrines a los compañeros.

Entonces llamó la atención de la aparición del gigantón que sin esfuerzo apartó al tipejo que había atacado por la espalda a Neulens, lanzándole sin miramientos a las oscuras aguas del muelle. Ante la llegada de Varek, y el recibimiento de su camarada, el último de los pretendientes a pirata se largó con un recordatorio de Filippo en la piel mientras este maldecía y exclamaba a los cuatro vientos.

Varek quedó muy "impactado" por el encuentro, realmente la moza golpeaba fuerte, pues lo dejó más tocado de lo que le confesaría nunca nada a nadie, pero por suerte el sudor le ayudó a camuflar las lagrimillas que le saltaron (mucha pupa en un lugar sensible...).

El recibimiento había terminado, y como cuenta de esto, un tipo estaba sin vida en el suelo, sin vida y los demás quejándose medio aturdidos y agonizantes por el suelo, y el resto huyendo entre abucheos y risas.

Combate terminado.

Entonces, entre las risas y abucheos a los marineros, cuando el grupo se disponía a ir a dar un trago para quitarse la sed y estudiar su situación, unas palmadas le llamaron la atención: clap, clap, clap.

Continúa...

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29/05/2014, 15:42
Hermano Egil

De entre la gente reunida que presenciara el espectáculo, se adelantó un hombre de mediana edad, bien parecido y con una túnica austera pero confeccionada con buenos materiales, con un pergamino bordado en el pecho. Quien os dijo:

-Bien hecho; eso les enseñará a no meterse con los recién llegados- todo riendo entre dientes.-Pero, ¿dónde están mis modales? Permítanme que me presente. Soy el hermano Egil, y precisamente estaba buscando a un grupo de gente como ustedes, que sean capaces de resolver situaciones comprometidas como ésta. Si me permiten invitarles a una copa, me gustaría hablar con ustedes acerca de un trabajo. ¿Qué me dicen?

Continúa...

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29/05/2014, 15:46
Director

No necesitaron muchos argumentos para dejarse convencer, con el hambre y la sed que sentían, los compañeros siguieron al tal hermano Egil, con la incorporación del acoplado Varek.

Este los llevó hasta una taberna cercana, llamada La Rata de Agua, en la zona de los Muelles. Efectivamente, se trataba del típico tugurio portuario, tan sucio y cutre como su propio nombre indicaba, pero la cerveza era mejor de lo que uno podría esperar. Mientras bebían la primera ronda y quitaban el vientre de pena con pescado a la brasa.

Continúa...

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29/05/2014, 15:50
Hermano Egil

El hermano Engil les comentó...

-Hace un par de días, un hermano bibliotecario de mi templo desapareció sin dejar rastro. Por razones que resultan un tanto complejas, nuestro sumo sacerdote ha declinado investigar este asunto. El hombre  desaparecido, Lucius, es un buen amigo mío, y me temo que algo malo pueda haberle ocurrido. Estoy dispuesto a ofrecerles 75 piezas de plata a cada uno, 25 ahora y 50 al fin al del trabajo, si pueden descubrir el paradero de Lucius, y traerlo de vuelta al templo sano y salvo. Les proporcionaré toda la información que pueda, ¿Están interesados?

En la situación en la que estaban, este trabajo les resultó más que interesante, era bastante plata y el trabajo no parecía entrañar demasiados problemas.

El hermano Egil les contó que conocía a Lucius desde casi siempre. Habían crecido juntos en el templo, Lucius se había convertido en bibliotecario y él en sacerdote. Hacía unos seis años, algo extraño ocurrió. Al parecía había cambiado de la noche al día. Un día era su amigo de siempre y al siguiente era un completo extraño. Hacía preguntas extrañas, no parecía recordar nada de su amistad y trataba al templo como su propia biblioteca personal. Unos meses más tarde le descubrieron en el santuario y le expulsaron del templo. Poco después se fue de Puertolibre y estuvo fuera cuatro años.

Cuando regresó, volvía a ser él de nuevo. Vino al templo y suplicó que le readmitieran, diciendo que no recordaba nada de lo ocurrido en los últimos cinco años. Thuron, el sumo sacerdote, parecía dispuesto a rechazar su petición, pero tras una reunión en privado con él cambió de opinión.

- Lucius regresó al templo y todo volvió a ser como en los viejos tiempos,... durante ocho o nueve meses. Luego, empezó a tener mal aspecto, parecía cansado y se le veía ojeroso. Me confesó que no dormia bien. Algo le  molestaba, pero no me dijo qué era. Empezó a hacer muchas preguntas sobre lo que había estado haciendo antes de que le expulsaran. El sumo sacerdote habló con él para que dejara de atosigar a todos con sus preguntas, pero Lucius siguió con ello.

Hizo una breve pausa para recibir la segunda ronda que os trajo un mozalbete, un joven que empezaba a atener pelusa donde los hombres lucen mostachos y barbas. Tras un sorbo de su cerveza, reanudó sus palabras.

- Empecé a preocuparme de verdad por mi amigo. Parecía estar al borde de la locura, como si cualquier cosa, por pequeña que fuera, pudiera precipitarle al abismo. Hace dos días, no vino al templo. Fui a su casa y la encontré vacía. Los sacerdotes de mi templo no lo creen, pero yo estoy convencido de que algo malo le ha ocurrido a Lucius. Quiero que descubrieran qué ha pasado.

Que harán ahora los compañeros que ya tienen un pequeño adelanto que, en estos momentos, les resulta un buen punto de perdida tras perder gran parte de sus bienes en alta mar por culpa del temporal, a parte, tras esta plata había la promesa de más. Se largarán? Continuarán con el asunto? Es vuestro turno y vuestra decisión.

Notas de juego

Tachán, tachán!

Filippo Delfiore 1 px +2 px por el combate.

La Botas 1 px +2 px por el combate.

Neulens 2 px +2 px por el combate.

Sutilidad Varek 2 px +1 px por ayudar con el combate.

Experiencia:

Filippo Delfiore 6 px

La Botas 6 px

Neulens 6 px

Sutilidad Varek 3 px

***

La Botas, sucia, harapienta pero sana.

Filippo, sucio, harapiento y (-1) por golpe contundente en antebrazo izquierdo. Fastidiado por habéresle privado de sus placeres sencillos.

Neulens, sucia, harapienta y (-1) por golpe a traición por la espalda, tras tumbar al primer marinero de agua dulce.

Sutilidad Varek, con un dolor entre pierna que disimula pero le duele (-3) (se recuperó de la mitad del daño tras el encuentro por descansar en la taberna de la Rata de Agua.

Próximo turno lunes 02 de Junio.

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02/06/2014, 11:03
Sutilidad Varek

Varek se mira al hombre. Preferiría no tener que tomar la iniciativa. La voz de barítono que tiene en ese momento es poco masculina, y no quiere que los sureños se hagan idees erróneas de su virilidad. Además, es poco educado tomar la iniciativa cuando la hija del jefe está presente. No obstante, parece que se ha topado con la clásica colección de sureños: callados, con poca voluntad y con una capacidad para la aritmética similar a la de una babosa. No ven las oportunidades ni aunque les golpeen en la cara con ella. La falta de palabras de Neulens sólo lo puede atribuir a su estatus mental tras una travesía por el mar (PUAJ! Maldito lago salado) pero se lo perdona. Por muy pielescarcha que sea, no deja de ser una chiquilla aún. Poniendo una voz un poco ronca para que no se note su nuevo registro melódico, contesta.

Acepto en mi nombre y en el de estos mequetrefes. La plata siempre viene bien para adquirir brazos hábiles si hay estómagos vacíos. JAJAJA. Dinos pues, ¿hay algún dato más que creas que sea de relevancia para encontrar a tu amigo? Una última persona con la que se reuniera y a la que podamos interrogar, un último lugar donde se le viera, unas posesiones que podamos registrar…? Por cierto, ¿cuán expéditos podemos ser para encontrarle? Una recompensa vivo o muerto entra en las opciones, o torturar a sus compañeros de templo, por ejemplo? Por acelerar el trabajo y esas cosas.

Notas de juego

Varek ya sabe que lo último que ha preguntado normalmente esto no está bien visto en estas tierras sureñas, pero por preguntar no se pierde nada. Por algo le llaman Sutilidad. A ojos de un local lo que acaba de decir debería sonar como una monstruosidad de alguien sin alma. O esa es mi idea. Si hace falta ya edito para subir el tono :P

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02/06/2014, 16:36
La Botas

Botas casi se llevó la mano al florete de nuevo cuando vio avanzar a aquel tipo de entre la multitud, mirándolo recelosa, no quería más malditos problemas, sólo quería beberse una buena jarra de cerveza, comer algo de carne, aunque viendo el panorama los más seguro es que debiera comer pescado pasado, y descansar después de un buen baño; odiaba, aquel olor a sal.- Aha... - Murmuró cuando el tipo se presentó, alzando la ceja sana que le quedaba a la vista. Apartando la mano de la empuñadura, volviendo a mostrar una actitud algo más relajada. Y mucho más relajada fue su postura, cuando el tipo habló de un encargo y de dinero, eso produjo chiribitas en su ojo, el que ahora le miraba de forma atenta, esperando escuchar cuando cobraría, y que tipo de encargo debería hacer, y le iba a dar igual que sus compañeros... se proclamaran o no, ella iría, ¿Porque iría no? Por un breve momento Botas se frenó en su debate interno, llevándose una mano al parche mientras acompañaba al tipo en silencio. “¡Ja! Eso no volverá a ocurrir...” Se dijo a si misma volviendo a caminar erguida y muy segura de si misma... frenando en seco al ver el nombre de la taberna.- La rata de Agua. - Torció el gesto después de pronunciar ese nombre, echándose la carcajada.- Pero que graciosos son en este pueblo, apuesto a que ni las ratas quieren entrar ahí. - Bromeó más bien en serio entrando al tugurio de mal a muerte que si podía ser... aún olía peor que el puerto... haciendo que la muchacha se abanicara brevemente con su sombrero, el que ya se había quitado por cortesía, pero.. ¿Cortesía para quien? ¿Para una panda de vagos y maleantes? Obvio, para que no se dijera que Botas, no tenia educación. Una vez sentada esperó que les sirvieran, mordiéndose el labio inferior... llegando a rozar la lascivia aquel acto en cuanto vio la cerveza, estirando su mano hacía la jarra para dar un largo trago. - Ahhh delicioso. - Exclamó arrugando la nariz cuando vio el pescado llegar, de verdad se iría al monte más cercano a matar aunque fuera la primera ardilla para comérsela, y si hacía falta... se la comería cruda y con pelo.- Usted dirá, hermano Egil. - Pronunció dejandole hablar, mostrando un autentico interés en el encargo, ya sentía que algo de diversión le hacía falta. Y ¡Oh! 75 monedas de plata... eso sonaba demasiado bien, ya casi podía imaginar el tintineo de las monedas en su ahora sucia, ajada y vacía bolsa del dinero. Botas casi se frotó las manos, mostrando un mayor interés ahora. - Claro, estaré encantada de ayudarle... usted explique lo que necesite y crea necesario. - Apoyó un codo en la mesa, para reposar la cabeza sobre la mano mientras con la otra iba dando largos tragos a su jarra, bien sedienta como estaba casi se la hubo acabado en poco. Prestaba toda la atención posible, tratando de pensar que era lo que podía hacer que un hombre actuara así de la noche a la mañana, que se marchara para después volver y decir... que no recordaba nada de los últimos cuatro años. - Aha... - Murmuró entredientes tomando su nueva jarra, picando ahora algo de pescado para llenar su vacío estomago... Acabó por bajar con algo de velocidad la jarra, generando así un ruido algo seco, provocando que el ambarino licor se agitara... casi saliendose la espuma por el filo.- ¡Claro que si, obvio! - Exclamó de nuevo con una sonrisa en el rostro, algo que mostraba su emoción.- Cuenta con mi florete. - Aunque la sonrisa se hubo borrado pronto al escuchar las palabras del tipo que había estado abrazándose a la chicarrona del norte.- Disculpa, musculitos... no hables por mi, no necesito que algo con la cabeza hinchada de aire ponga palabras en mi boca... - Bufó molesta por la actitud del recién llegado, haciendo una mueca torcida, esperando a que el hermano Egil diera alguna respuesta a las preguntas del vikingo fortachón. Aunque... las ideas que había dicho a día de hoy ya no le parecían tan mala idea, era una vía rápida de conseguir el dinero y de acabar el trabajo.-

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02/06/2014, 18:58
Filippo Delfiore

Delfiore se estremeció al ver el rodillazo que se llevaba el "tío" Varek y enseguida sintió simpatía por él. Sería un metomentodo, pero su pariente estaba realmente loca. ¿Cómo iba a recibir a su tío así? -Filippo Delfiore -tendió su mano al hombretón cuando éste recuperó el aliento, aunque lo miró un tanto extrañado de que hubiera reaccionado de buena manera ante semejante muestra de afecto por parte de su sobrina. Bah, norteños... seguro hasta es considerado de buena educación recibir a un pariente con una patada en los huevos... raros. Apenas hubo tiempo para nada más pues un monje salido de la multitud se acercó a ellos y medio a las buenas, otro poco a la rastra, los fue conduciendo -y mareando con su charla- hasta una taberna, lo cual él agradeció. No había podido rajar de lado a lado a aquel tipo, pero al menos tendría su cerveza. Y por lo que parecía, también podría ligar un plato de algo caliente si se hacía el que mantenía el interés el tiempo suficiente. -Ahá... uhmmm... bien... oh!... ahá -mientras el hermano Egil hablaba, Filippo apenas intercaló monosílabos. No necesitaba dar su opinión hasta haber conocido todo el asunto y disfrutar de la cerveza aguada y caliente... ya ni una cerveza decente se consigue después de una travesía marina parecía ser lo único que le preocupaba. Hasta que el monje llegó al final de su pedido. Mucha plata por un trabajo supuestamente sencillo... aquí algo huele muy mal y no es la letrina de este lugar -Dígame... Egil... ¿El adelanto nos lo dará ahora mismo? -dio el último trago a su jarra e hizo señas al mozalbete para que se la rellenara-. Si es así, cuente conmigo. Ya el grandote ha hecho las preguntas convenientes, cuanto antes nos responda, antes podremos comenzar -si las últimas palabras de Varek lo habían escandalizado, aquel extraño y sombrío hombre no lo dejó traslucir.

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02/06/2014, 19:15
Filippo Delfiore
Sólo para el director

-Dígame... Egil... ¿El adelanto nos lo dará ahora mismo?

Mientras apuraba lo que le quedaba de brebaje en su jarra, Filippo tuvo un pensamiento fugaz. Con las 25 monedas en la mano, podría largarse de allí ni bien la cosa se pusiera peligrosa. No había huido de los Dos Peniques para terminar dos metros bajo tierra apenas había pisado un nuevo mundo.

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02/06/2014, 19:34
Hermano Egil

El sacerdote fue asintiendo ante las palabras del Pielescarcha, esperando a que terminara de formularlas todas, tomando nota mentalmente. Parecía un hombre reflexivo y de talante muy pacífico. Cuando el grupo asiente, o quien menos se muestra interesado en escuchar más, el asceta pide una ración de almejas aliñadas para acompañar y una tercera ronda. Tras engullir una almeja picante abundantemente especiada, prosigue.

-Sí, si se muestran interesados en el trabajo, podemos formalizar un pequeño contrato, y les daré ese sustancioso adelanto de veinticinco platas a cada uno.-Contesta a Filippo y haciendo una mirada locuaz a los atuendos a los recién llegados añade.- Sin lugar a dudas lo agradecerán... también podría indicarles algún lugar adecuado para poder descansar cuando quieran, y que no les roben o estafen en el proceso.

Relamiéndose los labios engulle otra de las almejas picantes. Antes de contestar otra vez.

-Eh, evidentemente quisiera a mi compañero de una pieza y sano.-Dice con una sonrisa pensando que estaba de broma el gran norteño, pero prefiriendo dejar las cosas claras.-Quien lo viera por última vez, que yo sepa fui yo al igual que otros hermanos del templo, cuando partió por el atardecer para hacer unas compras... y ya nadie más, que yo sepa, le vio. Pero si quieren podríamos ir a dar un vistazo a su morada, está en las afueras de la ciudad, lindando con la selva.

¿Qué hicieron los compañeros al terminar la tercera ronda? Asientieron y cerraron el contrato para ir a ver la morada de Lucius? ¿Tal vez a comprar cuatro cosas en el surtido mercado que tiene Puertolibre? ¿Fueron a la posada para limpiarse y pasar por personas civilizadas? ¿Se largaron de farra? Es vuestro turno y decisión.

Notas de juego

Tachán, tachán!

Filippo Delfiore 1 px

La Botas 1 px

Neulens 0 px

Sutilidad Varek 1 px

Experiencia:

Filippo Delfiore 7 px

La Botas 7 px

Neulens 6 px

Sutilidad Varek 4 px

***

La Botas, sucia, harapienta pero sana.

Filippo, sucio, harapiento y (-1) por golpe contundente en antebrazo izquierdo. Fastidiado por habéresle privado de sus placeres sencillos.

Neulens, sucia, harapienta y (-1) por golpe a traición por la espalda, tras tumbar al primer marinero de agua dulce.

Sutilidad Varek, con un dolor entre pierna que disimula pero le duele (-3) (se recuperó de la mitad del daño tras el encuentro por descansar en la taberna de la Rata de Agua.

Próximo turno miércoles 04 de Junio.

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03/06/2014, 14:27
Neulens Eorth

¡HOMBRES! Solo a ellos les pasan estas cosas... Seguro que a una dama no la hubieran capturado tan fácilmente somos más listas y resolutivas que los varones ¿verdad tío? - girándose hacia Varek a la vez que guiña el ojo a los demás - a los hombres os pierden el alcohol y las furcias por lo que sois presa fácil claro que Lucius a lo mejor tenía otras cosas mejores en las que pensar...

Neules comienza a dar vueltas alrededor del hermano Egil a la vez que interroga sin descanso...

Dices que iva a hacer unas compras... ¿Sabemos qué y donde iva a realizar esas compras? ¿Era odiado por alguien? ¿Tenía deudas? ¿Se había metido en líos últimamente? ¿Tenía algún lío amoroso? Me parece que tenemos demasiada poca información antes de comenzar pero sin duda visitar la morada de Lucius puede ser un comienzo.

El tono de la vickinga se relaja y propone. ¿Un contrato? puedes quedártelo, si cumplimos tu misión por mi parte basta con que pongas una placa en tu orden diciendo que

Una mujer, Neules Pielescarcha ayudó a conservar la paz y el orden combatiendo el machismo y tiranía de los villanos del reino 

¿hace el trato? Dice extendiendo la mano al hermano Egil

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04/06/2014, 03:49
Filippo Delfiore

-Yo entgo -dijo Filippo con la boca llena de almejas. Las tonterías de Neulens le traían sin cuidado. Allá ella si por toda recompensa quería una placa. Él pensaba llevarse su plata y, si la norteña insistía, también se llevaría la suya.

El muchacho tragó y se limpió la boca con la manga de su sucia camisa. -Será mejor que veamos la casa de Lucius antes de que caiga la noche. Espero a la puesta del sol estar en una posada decente, llenando la barriga con un buen potaje caliente y sabiendo que en nada estaré durmiendo sobre un buen colchón de lana... bah, me conformo con que sea de paja mientras esté seco... A lo que voy: tengo ganas de un buen descanso antes de embarcarnos de lleno en la búsqueda, así que aprovechemos las dos o tres horas que tenemos por delante y luego tomémonos un respiro.

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04/06/2014, 10:17
Sutilidad Varek

A Varek le gusta ver que la hija del jefe tiene madera, pero ve que se trata de una madera con nudos extraños y tuerce el gesto. ¿Es que la chiquilla no se da cuenta de que el clan necesita esos recursos? Haberse visto... ¡No estan aqui para divertirse y ganar gloria personal sino para mejorar el futuro del clan! Le molesta esta actitud combativa de más que demuestra la niñata esta, sobretodo porque la chavala es la futura lider del clan, y una actitud asi va a hacer que el clan se extinga en vez de prosperar. Y eso no puede ser. Tendrá que hablar con ella sobre estos temas en privado.

75 monedas por cada uno de nosotros está bien. Eso son 300 monedas en total dice Varek mostrando unas sorprendentemente pulidas capacidades de cómputo. Tienes un trato.

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05/06/2014, 09:29
Hermano Egil

El sacerdote se miró el plato de almejas que Filippo engullía con voracidad y finalmente se contentó con dar otro trago de su cerveza de color ambarina mientras escuchaba a la peculiar norteña, cuando terminó ella, tras limpiarse los labios, el hermano Egil respondió:

-Compras, nada especial por el tono que usó, cosas para casa supongo que nabos...- El hombre sonríe débilmente antes de responder.- Lucius tiene muchas virtudes, pero la variedad y la imaginación no están entre ellas, siempre ha sentido una devoción por esos tubérculos.

Recuperando el tono sereno prosigue.

-Lucius es un hombre muy normal, discreto, humilde, ensimismado en sus lecturas. No me consta que tuviera enemigos... o amantes, y cuando veáis su casa veréis que no lleva un ritmo de vida ostentoso, dudo de que tenga deudas. Pero lío... últimamente ha estado incomodando un poco a Thudor con sus preguntas e insistencia, pero el sumo sacerdote, bueno... Milos, su secretario, habló con Lucius para que guardara las formas...

Cuando Filippo logró terminar de engullir las almejas y asentir con lo de la casa para aprovechar esas últimas horas de sol, el hombre sacó unos pergaminos de una pequeña talega de cuero que portaba, así como tina. También depositó unos saquitos de cuero. A algunos de vosotros, venidos de orígenes civilizados ya habéis presenciado en varias veces, incluso participado, en este tipo de eventos, la Botas, con su peculiar trabajo concretamente.

-Formalicemos pues el contrato.- Dijo.- Os leo el contrato, es una formalidad básica, solo faltan vuestro nombres, y serán libre para gastar como crean esas veinticinco piezas de plata e ir a la casa de Lucius.

Con un carraspeo empezó a leer.

-Reunidos.- Dejó un espacio para añadir un nombre.- y yo, ambos personas capacitadas y actuando por libre voluntad.- Hace una pausa para mirar al resto y añadir.- Nunca me gustó trabajar con esclavos, por eso ya no incluí esa posibilidad en el contrato.- Para proseguir.- Acordamos que yo, hermano Egil, sacerdote del culto al Conocimiento, doy a - Otro espacio- la suma de veinticinco piezas de plata como pago para iniciar la búsqueda del bibliotecario Lucius, y que cuando este sea encontrado, yo, el hermano Egil, terminaré el pago entregando a -otro espacio.- cincuenta piezas de plata.

Levantando la mirada, esperando un asentimiento propio. La Botas, asiente por no haber nada raro en el contrato, asiente y el sacerdote os va pidiendo el nombre y escribiéndolo con una caligrafía elaborada y refinada sobre los pergaminos, una vez terminado, os entrega los pequeños saquitos.

-Bien, ya podemos partir.- Dice dejando un par de piezas de plata como pago por la comida y colocándose la talega con los pergaminos guardados en ella.

Continúa...

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05/06/2014, 09:56
Director

Una vez pagada la ronda el hermano Egil salió de La Rata de Agua para empezar a serpentear por las calles portuarias.

El puerto bulle de actividad a esas horas, y el olor del alquitrán y de la madera os llena los sentidos. Un millar de estibadores se mueve entre los barcos y los almacenes edificados en la estrecha franja de tierra destinada al paseo marítimo, junto a pequeñas tascas y tabernas portuarias.

Vigilando a los estibadores, encargados y capitanes pululan dando órdenes y señalando bultos y cajas. Aquí y allá podéis ver mercaderes buscando gangas, funcionarios públicos encargados del puerto, vendedores de comida cargando carritos, patrullas de guarda manteniendo el orden, mendigos extendiendo la mano, juglares que reúnen trabajadores ociosos a su alrededor, pillos al descuido, artistas, mimos, nobles del continente, hombres de tez oscura del lejano Sur, niños buscando a alguien a quien guiar y montones de viajeros de todas las procedencias y clases sociales, recién desembarcados.

Pronto dejaron atrás aquel barullo del puerto para adentrarse en el barrio Oriental de Puertolibre, fueron recibidos por los martilleos de sonidos propios de las fraguas de las armerías que trabajan el metal forjando armas y armaduras, que os van acompañando hasta que alcanzaron el centro del barrio, dominado por las Arenas, un colosal edificio de varias plantas de altura, construido en piedra labrada flanqueadas en los puntos cardinales por cuatro grandes esculturas de brillante bronce de más de tres metros de altura.

Estas son las famosas Arenas, conocidas a lo largo y ancho del mundo, origen de multitud de leyendas e historias, donde la muerte y la gloria son sus reinas.

No obstante el tiempo apremiaba y el sacerdote los condujo pronto fuera de aquel barrio destinado al arte de la muerte para cruzar el corazón de Puertolibre. El Casco Viejo. El recinto amurallado de donde germinó la comunidad con el paso de las décadas. Casas estrechas y altas dominan esta zona cercada por las altas y gruesas murallas que dan fe de un lejano pasado, enterrado por el crecimiento comercial y los nuevos tiempos.

Siguiendo los pasos de Egil el grupo alcanzó el barrio Mercantil, donde los comerciantes de los tenderetes recibían a los forasteros hablado maravillas de sus mercancías, productos y servicios.

Continúa...

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05/06/2014, 10:20
Hermano Egil

Finalmente el hermano se detiene ante un edificio recio que hace esquina, con un cartel de madera en el que se ve una pluma pintada de color gris aferrada por una mano con manchas de tinta.

-Os llevo a la Pluma del Estudiante, un lugar decente donde lo regenta Desi, una matrona que lleva tantos años en Puertolibre como las murallas que hemos dejado atrás.- Mirando al cielo que se ve por encima de las altas murallas añade.-Me temo que tras mostraros la casa de Lucius, deberé partir pronto para ir a cumplir con mis tareas en el Templo del Saber. Por eso os presentaré a Desi, La Pluma del Estudiante es un buen sitio para descansar, sin que por ello uno se arruine. Pasad.

Continúa...

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05/06/2014, 10:24
Director

El lugar estaba ordenado, con un suelo de piedra que muchos otros lugares ya querrían para sí. Con  mesas grandes y recias en el aire se olía una amalgama de aromas entre los que destacaban la madera de encina, el humo de tabaco, vino tinto y el guiso que se cocinaba.

A pesar de estar bastante lleno no había especialmente ruido, la mayor parte de las conversaciones se llevaban en tono sereno y más bien confidencial entre los distintos grupos de clientes. La mayoría de estos grupos lo formaban mercaderes y proveedores, tal vez algunos clientes tomando una copa antes de regresar a sus hogares. Pero, por encima de todo, había varios grupos de jóvenes de manos manchadas de tinta y cuerpos más bien escuálidos, sin lugar a dudas escribas o tal vez novicios del Templo del Saber, a juzgar por sus humildes vestimentas.

Cerca del hogar, en el que apenas había unas brasas, había un hombre de armas ya entrado en años, vistiendo una armadura de cuero tachonado.

Un par de chicas jóvenes de buen ver estaban acarreando platas y frascas de vino entre las mesas con grupos de clientes.

De la parte de las cocinas llegaba el apagado canturrear de una voz femenina.

El hermano Egil, tras buscar a alguien con la mirada decidió ir a dar un vistazo por la puerta de la cocina mientras saludaba alguno de las parroquianos y a las muchachas. Finalmente se perdió en las cocinas. Al poco salió junto a una mujer. Con la que estuvo hablando todo gesticulando y señalándoos un par de veces.

La mujer tenía el aspecto de una matrona, bajita, de busto generoso y casi más ancha que alta, pero que se movía con soltura. En cualquier caso lo que resaltaba más eran sus despiertos ojos, penetrantes e inteligentes.

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05/06/2014, 10:28
Director

Finalmente se acercaron al grupo y el hermano Egil les presentó.

 

-Compañeros, os presento a Desi, la mejor posadera de todo Puertolibre, sino no me explico como alguien puede regentar un lugar tan en condiciones como este a precios tan... razonables.

-Vamos Egil, no seas zalamero.- Dijo con una alegre sonrisa plagada de pequeñas arrugas salidas por la fuerza de la costumbre en la comisura de labios y ojos.- Hola, soy Desi y esta es mi posada, la Pluma del Estudiante, Egil me ha dicho que soys nuevos, se ve a la legua sin necesidad de que nadie lo diga, parece que hayáis pasado un mes perdidos en la mar. El caso es que me ha dicho que buscáis un lugar donde hospedaros. Y también me ha dicho que os haga un precio especial por que le hacéis un favor. Os dejo quedaros por una plata al día, con eso tendréis habitaciones individuales, tortas y leche con pescado para desayunar y lo que haya en el puchero para cenar.

Es vuestro turno, os quedáis, pasáis, apremiáis a Engil, es vuestro turno y vuestra decisión...

Notas de juego

Tachán, tachán!

Filippo Delfiore 1 px

La Botas 0 px

Neulens 1 px

Sutilidad Varek 1 px

Experiencia:

Filippo Delfiore 8 px

La Botas 7 px

Neulens 7 px

Sutilidad Varek 5 px

***

La Botas, sucia, harapienta pero sana.

Filippo, sucio, harapiento y (-1) por golpe contundente en antebrazo izquierdo. Fastidiado por habéresle privado de sus placeres sencillos.

Neulens, sucia, harapienta y (-1) por golpe a traición por la espalda, tras tumbar al primer marinero de agua dulce.

Sutilidad Varek, con un dolor entre pierna que disimula pero le duele (-3) (se recuperó de la mitad del daño tras el encuentro por descansar en la taberna de la Rata de Agua.

Próximo turno lunes 09 de Junio.