Partida Rol por web

Tras un breve descanso y unas últimas comprobaciones, cogéis el equipo. Estos chalecos son bastante ligeros y el resto del equipo se puede llevar en una mochila pequeña, por tanto os movéis bastante cómodos y con ligereza; perfecto para este tipo de misiones.

Partis hacia el punto de encuentro mientras seguis debatiendo respecto al nombre de la escuadra. Una vez acabado el paseo os encontráis con un hombre de aspecto valiente y rudo; a buen seguro un veterano de los GOS.

- ¿Sois la segunda escuadra?- Pregunta sin más preámbulos.

Durante el transcurso del breve viaje, revisas tus notas. Al fin entre tanto papel innecesario encuentras algo de utilidad: Un pequeño plano del hotel.

Durante el pequeño trayecto, Nikolai hizo ponerse a Abraham a su altura, entonces aprovechó para hablarle de su historial...

- Bueno, creo que falto yo por contarte...grupo de sangre A positivo, en el colegio tuve algunas de las típicas peleas, me rompí el brazo izquierdo a la altura del codo, y ya en el instituto se sumaron algunas costillas rotas, aunque los médicos decían que ya estaban soldadas de nuevo completamente ten cuidado con eso, cuando hace frío o llueve siento bastante más los movimientos en el brazo...Ya más adulto tuvieron que operarme de apendicitis, nada grave, heridas de bala 2, una en la pierna izquierda, en el muslo, no llegó a rozar la arteria, otra en el hombro derecho, afortunadamente ninguna se incrustó en el hueso y no suelo tener problemas con eso...por cierto, la semana pasada salí de un catarro...creo que con esto es suficiente ¿No soldado?- El sargento dirigió la mirada hacia el médico con una media sonrisa en la cara, pensando en su propio historial médico, lo que le hizo pensar en algo- Por cierto, puede que sea útil que tú nos cuentes algo de tí al resto, si te dan, tendremos que curarte como podamos...- Ni el sargento ni los demás eran médicos de batalla, pero los conocimientos básicos eran enseñados en el ejército.

Una vez terminaron de conversar, Marshall siguió organizando papeles, estudió con detenimiento el pequeño plano que encontró y después de eso, encontraron al oficial que se les dirigía.

-Sí señor, el Teniente Furia imagino, ¿Cuál es el plan?- Respondió secamente.

Durante su marcha, sus pasos se nivelan con los del sargento Nikolai y este comienza a mentarle su historial médico, más algo en lo que no había caído en la cuenta.

-Ok lo recordare todo, y tiene razón, señor…-para unos segundos en lo que hace memoria, normalmente aquellos datos jamás los daba, apenas eran necesario pues el dedicado a esa labor eran él y los de su oficio.- Ab negativo por lo que coincido con “el Bombas”, aparte de las típicas fracturas y alguna rotura en huesos nada fuera de lo común, bien curado y sin problemas para el futuro. Durante el campo de batalla he recibido varios tiros, pierna izquierda, tórax y hombro. Por suerte recuperado sin daños evidente aunque a veces alguna molestia en el hombro derecho.- comentaba mientras iba señalando y gesticulando durante sus palabras, hasta que al final se queda mirando al frente agarrándose el hombro. Parecía perdido en las batallas pasadas rememorando aquel momento.

Vuelta a la normalidad observa al Sargento imita casi a la perfección la sonrisa de este y continua hasta encontrarse con el Teniente Furia.

No saludo puesto que su Sargento no hizo tal cosa y por parte del teniente tampoco, quizás allí reinaba la informalidad.

- Perfecto. Acompañadme.

Todos os dirigís hasta un hummer militar y os montáis. Con el Teniente Furia al volante, el vehículo avanza por unos túneles muy estrechos y agobiantes; debido a las rocas el viaje está lleno de sobresaltos.

- Yo os abriré la Exclusa, que os dejará cerca de vuestro objetivo. Tan sólo tengo un consejo que darte Sargento...Salva tu culo. A nadie le sirve unos soldados muertos.

- Es un buen consejo mi teniente...lo tendré en cuenta...preparaos soldados...comienza nuestra propia guerra...- El sargento estaba organizando las ideas en su cabeza, las cosas podrían salir mal, y cuando eso pasaba, no había que dudar, estaban a punto de entrar en combate...la última idea que pasó por la cabeza de Nikolai era que prefería morir como un soldado que postrado en una cama...a partir de ahí solo se concentraría en la misión.

- Señor.- John respondió con un asentimiento a las palabras del sargento. Al fin y al cabo, era su primera misión real. Había sido entrenado para ello, y no sabía si estaba del todo preparado. Esperaba que si, ya que lo contrario sería fatal, tanto para él mismo como para sus compañeros.

Abraham no había abierto la boca en ningún instante,  y no pensaba hacerlo por el momento. Solía preferir saber lo indispensable y luego ya se adaptaría a las circunstancia.

Aunque unas palabras del mismo le molestaron, si no se tratase de un superior habría contestado de alguna manera hiriente y de carácter instado por superioridad respecto a aquel teniente, gracias solo a su rango se salvaba.

Luego simplemente se dejó llevar hasta el lugar previsto para el inicio de aquella misión.