Partida Rol por web

Maestro, es terrible aqui delante hay una especie de ...de ..veo a un humanoide enorme de carnes rechonchas con la carne livida y blancuzca, cuyo cuerpo esta repleto de tatuajes, en una de sus manazas sostiene el cuerpo sin vida de kalador, su enorme boca parece estar masticando algo, , el cuerpo de Kalador no tiene cabeza, y de donde tendría que estar su cabeza ahora es un surtidor de sangre, que a cada latido de su todabía vivo cuerpo, el cual no parece haberse enterado de que esta muerto, la cosa mira hacia vosotros mientras deja caer el cuerpo de Kalador

Eanor palideció y un gesto de profunda repulsión apareció en su rostro, seguidos por el pesar.
"Sangre de Bahamut... que él te guíe al hogar de tus ancestros, Kalador" musitó.

Cuando observo la imagen dantesca que tengo ante mis ojos, un grito desgarrador sale de mi garganta...

No Kalador, nooooo..... Lillian....

Empiezo a temblar violentamente, y unas lágrimas asoman por mis ojos, no puede estar pasando, no puedo creermelo, mis dos amigos, tanto tiempo juntos, y ahora... Vuelvo a gritar, siento como el pánico empiezaa a vencerme...

He de intentar tranquilizarme, ya les lloraré después...

Respiro profundamente, intento ahogar un tercer grito que lucha por salir, y me preparo...

Delante ves a un humanoide enorme de carnes rechonchas con la carne livida y blancuzca, cuyo cuerpo esta repleto de tatuajes, en una de sus manazas sostiene el cuerpo sin vida de kalador, su enorme boca parece estar masticando algo, es entonces cuando te embarga el terror, el cuerpo de Kalador no tiene cabeza, y de donde tendría que estar su cabeza ahora es un surtidor de sangre, que a cada latido de su todabía vivo cuerpo, el cual no parece haberse enterado de que esta muerto, la cosa mira hacia vosotros mientras deja caer el cuerpo de Kalador

Un poco mareado por las vueltas que empieza a dar la habitación, decido salir de allí, más ahora que algún peligro parece haber vuelto sobre nuestros pasos
¿qué pasa? digo sin mirar hacia arriba dónde flota mi amigo

-Pronto lo sabré. Da el paladín como única respuesta, mientras un mero gesto de sus piernas despliega las alas de su montura, que se extienden, sorprendentemente, en el interior de las paredes.

Otro gesto más y Abyss atravesó el muro lateral, tratando de posicionarse junto a su enemigo, como Geon indicaba. La pared de piedra se abombó al otro lado, soltando en una burbuja al seguidor de Moradin, que se aprestó a picar al ser que amenazaba a los suyos con su lanza de caballería, mientras Abyss seguía su gracil vuelo hacia la esquina contraria del pasaje:

-¡Vuelve al averno, engendro!- sentenció el caballero del murciélago blanco.

Por dos veces la lanza penetró profundamente en el ser preternatural, atravesando su piel enfermiza y repartiendo ira y dolor. El brazo de Moradin guiaba la mano de Geon, mientras su arma atravesaba las defensas del maligno monstruo como mantequilla. Por fin éste se giro y alzó un brazo defensivamente,

La criatura estaba empapada con la sangre de Kalador, ahora centro su mirada en Lilian. la chica estaba temblando, no se sabía si a causa de la ira que la embargaba, causa de la muerte de Kal o del miedo, la criatura había sido muy rápida y ella aun no parecía estar dándose cuenta de lo que sucedía y del peligro en que se encontraba. La criatura con una velocidad que no aparentaba tener se abalanzó sobre ella, con sus enormes garras predispuestas aprobar la sangre y la carne de ella, su enorme boca estaba manchada de sangre y sus mandíbulas desencajadas cual de una serpiente se tratara. lilian consiguió a duras penas esquivar las garras de la criatura peor no vió como la enorme criatura se había predispuesto para asestar su mordisco fatal. Todo pasó en un abrir y cerrar de ojos el cuerpo de Lilian cayó al suelo, pero su cabeza ya no estaba, es acosa la estaba masticando y cuando volvió a abrir la boca un chorreton de sangre cayó por la comisura de su boca. La misma se revolvió por si había alguien mas cerca suyo, peor no había nadie

El dantesco espectaculo hace que mis tripas se revuelvan en mi interior y tras unos instantes