Partida Rol por web

Saga de Arcain: Stohlm

[D: Thibe] Granjas locales

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25/07/2018, 23:44
Abzu

Acompañado por Arwin, inicias una larga caminata a través de los terrenos externos de Thibe. Poco más halláis durante los primeros treinta minutos aparte de unas casas alejadas y dispersas que intentaban mantenerse lo más cerca posible de las murallas. Pasada ya la hora, habríais llegado al terreno de cultivo de las gentes de tu pueblo, unas tierras bajas de color dorado adornan la visión, pues ahí se encontraban las variadas granjas que abastecían a las buenas gentes que conocías. De ahí se envían generalmente granos y algunos tipos de verduras. El alimento predilecto de los hombres y mujeres de Derchios.

Ser un granjero es una empresa tan peligrosa como la de ser soldado. La meteorología de Stohlm no solo es impredecible, sino que, también, está contaminada por el bandidaje, de modo que del cielo pueden llover tanto gotas de lluvia como asesinos y ladrones. Luego, además, hay que tener en cuenta la existencia de bestias y otras cosas peores con las que lidiar, lejos de la relativa seguridad de pueblos y ciudades.

Esto hacía a los que trabajaban la tierra personas de espíritu envalentonado, cualidad que suplía correctamente su incompetencia general con el manejo de las armas o la disciplina. Revisas a través de los maizales, por los caminos y en los rincones más alejados pero no observas ningún estallido de energía o una explosión arcana en tu pecho, el cincel está inalterado. Arwin parece estar más cansado que tu y lo demuestra quejándose cada tanto y tanto en el camino, empiezas a dudar de la veracidad en la historia de Teobalt y piensas que lo mejor sería buscar en otro lado. Cuando te das cuenta os habéis acercado bastante a un enorme cobertizo con una cabaña cercana, no le tomas mucha importancia hasta que un grito atrae tu atención.

¡¿Quienes sois ?! —Escuchas a lo lejos, la voz de un muchacho claramente más joven que vosotros.

 

Arwin es pillado por sorpresa y al instante se lleva una mano al arco, mientras otea el terreno intentando dar con la fuente

 del grito.

—¡He dicho que quienes sois! —Repitió la voz, que se quebró por un instante antes de finalizar la oración.

Os giráis e intentáis encontrar al emisor del grito, hasta que finalmente veis a lo que parece ser una familia a lo lejos que os observa con curiosidad. No están tan lejos, de hecho puedes discernir en los detalles de sus rostros desde la distancia.

La familia parece estar conformada por un hombre ya anciano, una mujer que sostiene en sus brazos a un bebé, una pequeña niña que se asoma tímidamente a un lado de las piernas de su madre y el joven chico que les gritó, quien sostiene un escudo con algo de esfuerzo y una espada. Un casco más grande que su cabeza le protege y está un poco agazapado quizás por todo el peso de su equipo. El niño os ve con una claro ceño fruncido mientras que su familia observa a una distancia prudencial.

—¿Quienes sois? Os parecéis a Katrin, pero es obvio que ninguno es chica. ¡Largo de aquí antes de que las cosas se pongan feas, bandidos! ¡Ya estamos artos de vosotros!

Arwin alzó una ceja y te miró, luego al muchacho. Parece que os habíais metido en un malentendido. Aunque uno del que fácilmente podríais salir simplemente dando media vuelta y retirándose, el chico no parecía avanzar un solo paso pero tampoco mostraba señales de querer retirarse. Simplemente estaba ahí observando y esperando una respuesta de vuestra parte. Todos parecían compartir un esbozo de temor en sus rostros, y el semblante del muchacho estaba un poco pálido por el nerviosismo.

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26/07/2018, 18:31
Arthur Kurgan

Arthur se quedó entre sorprendido y asustado por el valor del muchacho, si ellos fueran bandidos de verdad el muchacho podría tener muy mal final. Le apoyó una mano en el hombro a Arwin para que bajara el arco, creía poder manejar la situación sin pasar a mayores. Con las manos arriba de forma exagerada se acercó lo suficiente al chico como para no tener que hablar a gritos.-¡Saludos, joven!¡Nos rendimos, nos rendimos!¿Tú debes ser el bravo guerrero del que hemos oído hablar tanto, el defensor de estas tierras ¿cierto?.Espero que aceptes nuestras humilde rendición, pues además de los arcos, con los cuales nos ganamos la vida, no portamos arma alguna. Somos cazadores, traemos nuevas de Thibe por si deseáis oírlas antes de que sigamos nuestro camino. Sino fuera abuso, algo de agua sería de agradecer.-me senté en el suelo, bajando las manos y bebiendo un poco de la bota para luego ofrecérsela al chico. Haciendo un gesto a los mayores para que se acercaran.-Mi nombre es Arthur, no conozco a la dama Katrin ni tú nombre, pero eso tal vez podríamos subsanarlo. Igual que traemos noticias escuchamos noticias para difundirlas. Me han dicho que la cosecha de este año ha sido un poco rancia y que en algunas granjas ha desaparecido gente, tal vez pudieras decirme cual sería la mejor manera de visitar las granjas de los alrededores lo más rápido posible. Al fin y al cabo el protector de estas tierras seguro que conoce bien sus caminos.-aprovechaba la pausa para comer algo ligero a media mañana, fijándome en la mirada del chico pensando en si esa pobre gente estaría pasando penurias o no.

Notas de juego

Saludable.

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27/07/2018, 15:54
Abzu

Tomaste por sorpresa tanto a Arwin como al joven muchacho con tu rendición. Tu compañero te dedicó también una mirada dudosa pero decidió acercarse también, con las manos alejadas del arco y ligeramente alzadas también intentando demostrarle al niño que no le iba a hacer daño. Más allá de él, pudiste notar como el anciano le hablaba a la mujer al oído, y esta se dio la vuelta para empezar a moverse apresuradamente a la cabaña cercana.

El hombre se quedó mirando la escena desde la distancia, apoyado de una gran vara de madera con sus hombros caídos. Mientras que el muchacho seguía observando con el ceño fruncido vuestro gesto.

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27/07/2018, 15:58
Sieger

El jovencito bajó la espada hasta que el filo empezó a rozar el suelo. Como decepcionado tras quedarse sin nadie a quien golpear con el arma. La levantó hasta dejarla reposando sobre su hombro y se acercó de forma recelosa hasta tu bota, tomándola rápidamente y dando un par de zancadas hacia atrás por si acaso. Olisqueó el interior y dio unos pocos sorbos antes de arrojarla de vuelta y limpiarse la boca con la manga.

—¿Qué hacen tan lejos del bosque si son cazadores? Creo que te has equivocado de camino —dijo el muchacho con una sonrisa ceñuda mientras que intentaba acomodar el escudo que se le resbaló por el brazo—. Soy Sieger, y soy el hombre a cargo de la casa mientras que Katrin no está... después del abuelo.

Detrás de él, a la lejanía, todavía se hallaba el anciano que observaba con atención lo que ocurría. El muchacho miró a Arwin con ojos afilados y eso obligó al cazador a presentarse también. Este con un poco más de mala gana que tú, pero eso le bastó al joven.

—Sí, bueno, eso es porque desde hace ya un tiempo unos hideputas ladrones nos han estado haciendo la vida imposible desde el mes pasado, llegaron como unos vagabundos y nos empezaron a pedir algo de comida, luego llegaron más y más. Uno menos amable que el otro. Desde que atacaron a la familia de Cameron todos nos pusimos muy nerviosos. No nos dejan trabajar en paz y madre dice que debemos pasar más tiempo dentro de la casa. ¡Pero no podemos cuidar de los cultivos si estamos encerrados!

El muchacho pateó el suelo y dejó caer sus hombros. Escupió a un lado y miró a su diestra.

—Madre dice que deberíamos llamar a la guardia, pero no me deja ir, mi abuelo está ya muy arrugado como para ir solo y ella debe ocuparse de los cultivos. ¡Los demás están demasiado asustados como para salir de casa! Yo creo que son todos unos cobardicas. Por suerte desde que Katrin se mudó podemos mantenerlos a ralla, pero ella solo es una, y solo cuenta conmigo para cuidar de este sitio... Como sea. ¿Qué noticias tienes de Thibe?

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27/07/2018, 17:29
Arthur Kurgan

En la bota tan solo había un poco de vino aguado, pero valía para refrescarse del calor durante las cacerías. El joven Sieger era bastante cabal y espabilado, era todo un suerte que siguiera con vida si se había encarado con los bandidos.-Encantado Sieger, menos mal que te tienen aquí para protegerlos.-hablaba con el chico distendidamente mientras se descolgaba el arco y se lo ofrecía a Arwin. De su cinto saco un afilado cuchillo de curtidor y tomándolo por la hoja se lo ofreció al niño para que pudiera cogerlo sin hacerse daño.-Espera aquí Arwin enseguida volveré, toma Sieger es mi única arma. Si quieres puedes comprobarlo tú mismo- se dejó cachear por el muchacho, sin ocultar nada.- ¿qué te parece si me acompañas en presencia de todos y así solo tengo que contar las noticias una sola vez?como ya has podido ver no busco líos, de buscarlos no vendría desarmado mientras tú aún conservas la espada ¿no crees?. Verás lo que vengo a comentar está relacionado con los bandidos y la guardia. ¿Cameron es otro granjero?¿sabes cuantas granjas hay rodeando Thibe aproximadamente y a cuantas han atacado?.

Tendrás que presentarme a esa tal Katrin ¿cómo es que se ha mudado con vosotros?¿es de otra granja o alguien que se ha perdido?-se levantó sin prisas relajado, saludando al viejo de lejos para anunciar mi presencia. Luego iría andando tranquilo a la par que el Sieger hasta allí, no iba a ayudarle con las armas era mejor que supiera lo que era el peso de la responsabilidad. 

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27/07/2018, 18:21
Sieger

Le entregas tu arco a Arwin quien lo atraviesa con un brazo para acomodarlo en su hombro. Él asintió con la cabeza, comprensivo y te dijo que iba a estar revisando por su cuenta el lugar. Sieger se chupó los dientes, clavó la espada en el suelo y se acercó a ti para tomar tu cuchillo, inspeccionándolo como si estuviese hecho de oro, luego empieza a revisarte. Palpando con avidez de hallar algo en tus bolsillos, manosea tu bolso e incluso toquetea un poco la bolsa de monedas, pero finalmente se aleja.

—¿Y esos libros? ¿Sabes leer? Pensaba que eso era cosa de los ancianos —mencionó mientras caminaba hacia su espada y la recogía del suelo, el escudo ya se lo había colgado en la espalda y con la mano libre le hizo una seña al anciano—. El abuelo sabe leer, y me enseñó a contar hasta cien, pero no tenemos dinero pa' comprar esas cosas así que trabajamos con lo que tenemos. Si, los Cameron son los vecinos, ellos fueron los primeros en bienvenir a los vagabundos, y por lo visto los primeros en sufrir las consecuencias. Viven a unos, yo que se, diez minutos de aquí.

Tras tu pregunta acerca del resto de granjas, el muchacho frunció el ceño y empezó a contar con los dedos de la mano libre. Al final se rindió y empezó a hablar otra vez.

—Bueno, están los Cameron que son los que nos pillan más cerca. Los Jorji que quedan más pa'l norte de aquí, cerca del río, los Shaw y los Holmes. Todos estamos al este del pueblo, no nos alejamos demasiado igualmente por si surge algún jaleo. También nos pilla cerca una pequeña aldea de pescadores pegada al lago, aunque madre dice que para llegar hay que cruzar a través de los arboles y podría ser peligroso. ¿Que quien es Katrin? ¡Ella debe ser la persona más fuerte del mundo! Para ser una chica, claro. Ella es algo así como una cazadora, como tú, pero ya hace mucho que no caza animales ni nada de eso. Un día llegó y estaba bastante flaca y descuidada, así que madre le cuidó por un tiempo hasta que se recuperó, desde entonces ella se ha quedado por aquí cerca y nos ha ayudado a cuidarnos de los ladrones. Me esta enseñando también a usar la espada.

Sieger te hizo una demostración arrojando un par de tajos al aire.

Finalmente habíais llegado con el anciano, más de cerca podías pensar que el pobre hombre ya tendría un siglo de edad, cosa realmente sorprendente teniendo en cuenta que las enfermedades en el campo eran más propensas a matar a alguien que el propio acero. El anciano te empezó a mirar con recelo hasta que Sieger le explicó quien eras, esto no pareció cambiar mucho su mirada, pero al menos le hizo hablar.

—¿Qué te trae por aquí, cazador? Mi nombre es Yosef, soy el abuelo de Sieger.

Su nieto se apresuró a responder:

—¡El cazador dice tener nuevas de Thibe, abuelo!

El anciano levantó una ceja y te miró, como esperando una explicación, el muchacho imitó su gesto y se rascó la cabeza debajo del casco metálico.

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28/07/2018, 13:44
Arthur Kurgan

Avanzando hacia el abuelo iba tranquilamente charlando con Sieger.-No, no se leer, esos libros son de un amigo, se los estoy guardando. Siento lo de los Cameron, estarán bien supongo. Una cosa más ¿al oeste de Thibe no hay granjas- le eché el casco hacia delante con gesto jocoso para que durante unos segundos le tapase los ojos. Llegando a la altura de Yosef saludándole con gesto algo más serio.-Un placer señor Yosef, oye Sieger hazme un favor quieres dale mi cuchillo a tú abuelo y ves en un carrera a avisar a Katrin, creo que ella también querrá escuchar lo que tengo que decir.-era una pequeña artimaña para no hablar según que temas delante del muchacho.Cuando este se hubo alejado empezó a sincerarse con Yosef.-Bueno, en verdad las nuevas que traigo no son muy halagüeñas, lo lamento. Está habiendo graves problemas en el Bosque del Alba, han aparecido unas criaturas mitad hombre mitad carnero que están sembrando el terror en el bosque. Están desplazando a los bandidos del bosque es por eso que ahora rondan sus tierras tanto "vagabundos" como dice el chico, pero esas cosas también han atacado a los fluviales, nada parece amedrentarlas.

Hemos hablado con Rodrig el alcalde, dice que va a organizar una reunión, en principio van a cerrar las puertas del muro oeste. Comentó que había habido desapariciones en las granjas, mi compañero y yo veníamos a ver cuanto había de verdad en eso, por si pudiéramos encontrar algún rastro de esas cosas; así sabríamos cuanto se han acercado a Thibe. Se que le pareceré un completa locura, aunque en breve estará en boca de todos, creí que al menos mientras se organiza algo habría que avisar a la gente que vive en los alrededores. Por cierto, si no le es molestia el chico me dijo que usted sabe leer.- le ofrecí el diario.-¿Le importaría leerme las dos últimas semanas?Era de unos compañeros que desaparecieron  bajo las fauces de esas bestias, tal vez ahí haya algo que me pueda ser de ayuda. Con eso y todo lo que usted pueda contarme nos marcharemos cuanto antes, no sabemos como estará la cosa en el lado oeste. ¿Podrá avisar a sus vecinos? Eso me ahorraría mucho tiempo, ah disculpe casi se me olvida, me llamo Arthur; Arthur Kurgan. Espero que las heridas de sus vecinos no sean nada, si lo cree necesario puedo echarles un ojo o avisar al templo de Zaryanitsa para ver si pueden enviar a alguien.-ciertamente la gran mayoría del discurso era cierto, aunque omitió la parte de saquear las granjas vacías para no poner más nervioso al anciano. En estas duras tierras cada no se labraba su porvenir como buenamente podía, Arthur no le deseaba ningún mal a aquella gente y les ayudaría en la medida de sus posibilidades, esperando que eso le ayudara a dejar atrás su oscuro pasado.

Notas de juego

Saludable.

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31/07/2018, 01:32
Sieger

El joven Sieger se rascó la cabeza debajo del casco metálico mientras intentaba recordar algo.

—Si hay alguna, no tengo ni idea. Hasta donde yo sé al oeste de Thibe solo hay árboles y más árboles —se encogió de hombros con una sonrisa—. ¡Muchos más de los que hay antes de llegar a la aldea maloliente!

Cuando le bajaste el casco, con un gruñido se lo quito e hizo un ademán de coger la espada, distando de parecer amenazante tras la sonrisa que te ofrecio hace un rato.

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31/07/2018, 01:37
Yosef

Finalmente cuando empiezas a hablar con Yosef y te interrumpes para intentar sacar a Sieger del camino, lo primero que hace el jovencito es hacerte caso, aunque solo necesitó una mirada y un gesto de la cabeza de su abuelo para agachar la cabeza y retirarse con tu cuchillo.

Fue escuchando sereno todo lo que ibas diciendo, de hecho, pensabas que su mirada perdida significaba que el viejo se había dormido con los ojos abiertos en el sitio mientras que tu estabas narrando tu historia, pero al verlo parpadear te das cuenta de que en efecto está escuchando cada una de tus palabras.

—También han pasado por aquí —te dijo el venerable, conciso—. Los monstruos con cuerpo de persona y de animal. Si es a lo que te refieres con "desapariciones". Los vagabundos... así les llama mi nieto, ya puedes imaginar por que. No parecen entender lo que ocurre, se guían por el miedo igual que todos... y aquí no tienen razones para sentirse asustados.

Se giró, con ayuda del bastón y señaló a un grupo de casas que se hallan a poco menos de un par de millas de donde os encontrabais.

—Atacaron a los Cameron, pero fue más por temor que por otra cosa. Por lo que escuché de la boca de Katrin parecían actuar como unos auténticos animales salvajes. Pero había una verdad que se negó a contarme; se que me oculta algo... como sea, lo que si sé es que tuvieron las agallas para atrapar a uno de ellos y dejarlo atrapado en el sótano. No han aparecido más desde entonces, yo diría que quizás fueron unos descarriados o algo así... si es que actuan en manada como lo haría un grupo de animales. Si dices que esas criaturas también se encuentran en el oeste, entonces tenemos un problema realmente serio... parece que es verdad, parece que Arcain finalmente nos ha dado la espalda.

Más allá de eso, Yosef no propuso más nada. Así que procediste a entregarle el diario de Edwin y el anciano empezó a leer las últimas páginas, su rostro se fruncía cada tanto demostrando dificultad para leer algunas partes. Quizás el cazador no era tan bueno escribiendo después de todo.

—En las últimas páginas solo se habla de algo referente a un viaje a la capital. Y sobre como el idiota de su hermano ha ahuyentado por error a... 

El anciano tragó saliva y su semblante se puso pálido de repente.

—A un hombre con cabeza de carnero en el bosque. ¿Ya sabían acerca de estas criaturas y no habían dicho nada? ¿Acaso los necios intentaban estudiarlas o algo por el estilo? —el anciano te devolvió el diario mientras que se limpiaba los dientes con una uña—. Quizás su curiosidad sea la fuente de su horrible final, solo esperemos que haya sido uno rápido. ¿Quieres mi consejo? No sigas sus pasos.

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01/08/2018, 19:30
Arthur Kurgan

Arthur asintió ante el consejo de Yosef, aunque interiormente ya era demasiado tarde para él. Ya estaba medido en aquel asunto hasta el cuello le gustase o no.-Entonces al oeste de Thibe no hay granja alguna por lo que deduzco, aún y así esas bestias han llegado hasta aquí; que extraño me resulta todo esto. Sieger mencionó algo de una aldea maloliente ¿de qué se trata? igualmente hay una cosa que no me ha quedado clara, esos bichos han venido hasta aquí pero solo han herido a uno de los Cameron ¿no se han llevado a nadie, ni han matado a nadie?. Entonces no hay granjas abandonadas, en Thibe creíamos que la situación era mucho más grave, me alegra haberme equivocado. Disculpe la pregunta, pero el muchacho me enumeró las granjas de los alrededores, todas menos la suya.¿Cómo se les conoce Don Yosef?.- intentaba ir atando cabos a medida que escuchaba las nuevas de Yosef. El mago le había explicado que aquello era como una enfermedad, tal vez a los recién infectados todavía no les nublaba la sed de sangre pero no podía comunicarse, de ahí ese miedo. Se imaginó a él mismo por un momento en esa situación y se sintió aterrado, encerrado en un cuerpo deforme sin poder pedir ayuda alguna y siendo perseguido por el miedo de los demás junto con el tuyo propio.-Esperaré a Katrin para hablar con ella unos instantes y recuperar mi cuchillo, a la vuelta informaré de todo a la guardia y así les ahorraré un viaje. Tengan cuidado con los bandidos, esas cosas los están exterminando y se han vuelto muy violentos. Le importaría leerme lo del viaje a la capital mientras esperamos, creo que debería avisar a al familia para que se preparen para lo peor. Le quedo muy agradecido.-ya sabía suficiente, la idea de tener encerrada a una de esas cosas no era lo mejor del mundo pero quizás al mago le sirviera de algo. De todos modos quería hablar con Katrin y marcharse cuanto antes, el sol ya llegaba a mediodía y ni se había acercado al bosque, no quería líos con Teobalt. Más o menos ya tenía una idea de la situación y de como deshacerse de Arwin para poder adentrarse solo en el Bosque del Alba durante toda la tarde.

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03/08/2018, 19:59
Yosef

El anciano Yosef iba camino a su cabaña no muy alejada mientras que escuchaba tus preguntas, las iba contestando conforme ibas produciéndolas.

—No que nosotros sepamos, tampoco es que nos interese mucho, Joven Arthur. Somos gentes simples que se ganan la vida trabajando la tierra, y si solo tenemos a nuestros vecinos para ayudarnos... ¿Para qué necesitar algo más? Sí... Barné. Ahí vivirán unas cien personas a lo sumo, quizás un poco más. Hace un par de años viajé con Sieger hasta allí, son pescadores, y el olor fue la única cosa que le quedó del viaje al pequeño —comentó con una sonrisa—. Mi nombre es Yosef Findegard, y la granja esta a mi nombre... tras la partida de mi hijo. Espero durar lo suficiente como para enseñarle todo lo necesario al joven Sieger, con un poco de suerte él llevará las riendas algún día junto con su madre.

Ya habíais llegado a la cabaña, más grande y envidiable que la que le habías tomado prestada a los gemelos, había un porche con un par de sillas. Yosef se acercó a una con un cojín y se dejó caer ahí con un suspiro.

—¿Eres amigo de la joven Katrin? Eso explica el atuendo —dijo mientras abría nuevamente el diario para leerlo—. Ella nos ha ayudado mucho desde que llegó aquí, y a Sieger le viene bien tener a alguien con quien andar, así no puede estar incordiando todo el día a su madre. Debería llegar pronto, dijo que iría a resolver unos asuntos en Thibe y volvería antes de la cena. ¿Te quedarás, no es así? Como sea... veamos... bueno, este muchacho podría haber pasado quizás un poco más de tiempo practicando su letra, pero ha recopilado un buen montón de información; las rutas de viaje más seguras, la lista de cosas que comprará para soportar el viaje... incluso un recuento de todo lo que ha ahorrado. Se ve que si no sabía lo que hacía al menos hacía un buen intento. Y... bueno, estos son solo garabatos y dibujos.

Antes de que siguiese hablando el anciano Yosef, podías ver como se asomaba la figura de una mujer que pregunta si vas a quedarte para la comida. A lo que el primero te observa con una ceja arqueada.

—No te preocupes, hay suficiente como para que os quedéis tú y tu amigo por una noche. Podéis usar el establo si queréis.

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05/08/2018, 00:22
Arthur Kurgan

Escuchaba educado a Yosef, era gente buena y humilde pero tampoco quería abusar de su hospitalidad. El tiempo se le estaba echando encima y todavía no se había acercado al Bosque del Alba, no podía perder mucho más tiempo con todo aquello.-Ciertamente no conozco a Katrin de nada, es tan solo por lo que me ha condado Sieger sobre ella. Le agradezco el detalle de la cena Sr.Yosef pero no puedo quedarme hasta tan tarde y no querría abusar, de todos modos muchas gracias por su amabilidad. Si no le es molestia podrá informar a los vecinos de las nuevas, ahora si Sieger me devuelve mi cuchillo empezaré a andar camino, tal vez mi compañero sise pueda quedar a esperar a Katrin. Hablaré con él, yo informaré a la guardia de las novedades si me voy antes.-ciertamente se le había hecho muy tarde, aunque ciertas cuestiones del diario le interesaron perdiendo un poco de tiempo en ellas.-¿A qué se refería con eso de las rutas más seguras?¿A donde quería ir de viaje y para qué?-echo un vistazo a los dibujos y garabatos a ver si le sonaban del algo, marcas en el bosque o zonas de paso. La mujer les interrumpió levemente mientras Arthur guarda de nuevo los libros.-Muchas gracias señora muy amable, no querría ser molestia además debo partir.-en cierta medida al joven se le partía el corazón al ver que aquella gente, los que menos tenían eran los más generosos a la hora de compartir su escasa comida.

Salió fuera de la casa y dio un fuerte silbido que Arwin reconocería para acercarse, le presentó a Yosef y le contó un poco la situación por encima antes de hablar a parte con él para despedirse.-Escúchame Arwin necesito que te quedes a hablar con esa tal Katrin, ella sabe algo más. Aquí te ofrecen comida y estarás lejos de los líos, necesito que cuando vuelvas a Thibe informes a la guardia de todo lo que me ha contado Yosef y de que tienen uno de esos bichos vivos encerrados en el sótano. Díselo al capitán Faller y de paso le preguntas si tienen a un norteño plagado te tatuajes azules en los calabozos. Nos vemos esta noche en Grajo Ciego, si llegas antes que yo dale otro ahumado a la carne de ciervo; si al final cierran las puertas en un par de día esa carne valdrá mucho dinero. Si todo va bien y has cumplido esta noche tendrás tú mitad.-le dije picaramente refiriéndome a la bolsa de dinero de los gemelos.- No te preocupes, Yosef me ha leído parte de los diarios y he pensado que tal vez en el templo me puedan aclarar unas dudas.-hice un pausa, serio de golpe. Parándome en seco.-Como vea asomar una sola risita bajo esa nariz aguileña, te quedas sin una sola moneda y un ojo morado de regalo.-dijo Arthur sonriendo. Le sabía mal mentirle a Arwin pero era por su propio bien, no quería meterle en más líos de los que ya estaba. Al fin y al cabo por un par de tareas sencillas iba a comer gratis, además de cobrar una buena cantidad por no hacer nada ¿quien dijo que tener amigos salia barato?

- Tiradas (1)

Notas de juego

Saludable.

Me voy cagando leches al Bosque del Alba, llegaré cansado pero llegaré. Que desastre de tirada.

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11/08/2018, 17:45
Abzu

Para tu desgracia, Yosef no podía interpretar los garabatos ni tampoco parecía tener idea de que ideas inundaban la mente de Edwin a la hora de escribir sus planes de viaje. Te dijo lo más seguro; que no querían ser asaltados por bandidos y esperaban llegar lo más rápido posible para ahorrar provisiones. Era lo que hacían los viajeros que se aventuraban a ese tipo de vivencias en el territorio Derchios.

El abuelo llamó a Sieger, quien acudió tras un par de gritos ya desprovisto de casco y espada. Aunque todavía tenía tu cuchillo, tras pedírselo el muchacho te lo devolvió y le preguntó a su abuelo si tu ya te ibas.

Te diriges a Arwin para explicarle todo lo que está por ocurrir.

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11/08/2018, 17:49
Arwin

—¿Que me quede a hablar con Katrin? ¿Y a donde irás tú, socio? —Te preguntó el cazador cuando llegaste a él y le empezaste a hablar, se encontraba de pie caminando de un lado a otro lentamente y con una mano en el cinturón, observando a la lejanía.

—¿Si sabes que no la conozco de nada y...? ¡Espera! ¿Qué vaya con la guardia después? ¡Oye Arthur que yo no soy tu esclavo para que me estés mangoneando así! ¿Qué diablos te traes tú? Creo que se te está olvidando contarme algo y no me gusta nada... —dijo antes de que mencionaras la parte de su tajada, a lo que sonrío picaramente y se rascó el cuello, para luego darte un leve empujón—. Recuerda que sigo siendo mayor que tú, cabrón. Vale, vale, me quedo... pero si esa Katrin no se aparece me iré a Thibe, no me pienso quedar con estos paletos y pasar la noche con ellos, de paso revisaré lo del sótano por mi cuenta. Antes de la media noche en el Grajo Ciego, o si no me desaparezco. ¿Lo pillas? Bien, venga fuera de aquí, que no quiero verte.

Tu compañero te despidió con otro empujón y una leve risa, te palmeó la espalda y empezó a dirigirse en dirección a la cabaña, saludando con un brazo.

Notas de juego

Te traslado ahora al Bosque del Alba