Partida Rol por web

Saga de Arcain: Stohlm

[?] Un sitio sin tiempo, ni luz

Cargando editor
20/10/2018, 19:34
Director

Gesticulas con tu mano en dirección al omnioso obelisco, no estabas segura de que conjuro realizar así que simplemente intentaste identificar la energía que manaba del mismo. No podías reconocerla con exactitud, no era algo a lo que estuvieses acostumbrada ni que conocieras. Era un tipo de energía completamente nuevo, no realmente maligno pero si bastante volatil e incontrolable. Eso le confirió al obelisco el aspecto de una verdadera bomba de tiempo, un incendio que si no lograba controlarse consumiría todo a su paso. Y aquellas aberraciones que rugían, bramaban y pisoteaban a sus pies eran claramente el fuego que se extendía por el lugar.

Algo extraño invadió tu extremidad, y una curiosa calidez se adueñó de tu cuerpo durante un instante. Las criaturas que te odiaban desde la distancia se detuvieron, y en un parpadeo te hallabas en el ardiente pueblo. Los gritos callaron y el aroma a muerte se había esfumado. Solo quedaban restos de lo que alguna vez fue un asentamiento civilizado.

Unas pocas criaturas pequeñas corrían a la sombra, lejos de tu mirada. Y mientras empezabas a avanzar a través de las calles en dirección al gigante obelisco, otras bestias de mayor tamaño se entrometieron en tu camino, pero más allá de desear realizarte daño alguno simplemente se limitaron a seguir su camino a donde quiera que fuese.

Asciendes una pequeña cordillera y ahí está. El gigante obelisco no se veía tan grande de cerca. Solo otra ilusión del sueño. Medía poco más de unos cuatro metros y era tan ancho como un gran arbol adulto. Ahí seguía, manando energía e iluminandose de forma timida y rítmica. Como los latidos de un corazón moribundo. Investigar la energía almacenada quizás te de más pistas sobre lo que sea que debas estar haciendo en ese sitio. Aunque la advertencia de Erembia pasó por tu mente, es tu decisión quedarte a investigar o "correr" como te lo había ordenado.

Cargando editor
23/10/2018, 17:57

Parpadeé un par de veces tras el cambio radical de la situación y observé mi mano. Ya era imposible discernir lo que era real de lo que era una ilusión, si es que alguna vez había ocurrido algo de verdad. ¿Estaba en el pasado? ¿En el presente? ¿En el futuro? ¿Estarían todos mis compañeros experimentando las mismas vivencias que yo? Moví cada uno de los dedos para intentar sentir algo que me recordase a la realidad. Apreté el puño y lo abrí. Aún tenía la respiración agitada por la adrenalina y poco a poco me fui relajando al comprobar que aquellos animales no eran agresivos. 

Tomé aire una vez más y me encaminé al obelisco. La nueva situación me desconcertaba y me acerqué con cautela. Aquel artefacto parecía poseer vida propia y si existiese de verdad, los magister seguro que deseaban comprenderlo y quizás controlarlo. Caminé alrededor para inspeccionarlo desde diferentes puntos. Estuve a punto de tocarlo con mi propia mano pero antes de plantar la palma, giré la cabeza a ambos lados buscando a alguna bestia que fuese mitad cabra, mitad humano. Quería ser cuidadosa, incluso en un mundo de sueños.

Notas de juego

Si no veo a ninguna bestia que encaje con las características de un fauno. Planto mano en el obelisco y trato de sentir su magia.

Cargando editor
12/11/2018, 06:14
Abzu

Miras a tu alrededor inspeccionando el gran obelisco, el cual todavía palpita con energía en ebullición. Revisaste a la muchedumbre de horrores que te rodeaba y te diste cuenta de que ahora, más cerca del enorme artefacto; compartían todos ese aspecto que estabas buscando. Más o menos.

Algunos tenían la parte baja del cuerpo conformada por las patas de un perro o una oveja, mientras que el torso era peludo y desnudo, con manos como garras de lobo y cabezas de macho cabrio, toros y otros bovinos. Así se veían los más monstruosos, mientras que otros tenían la apariencia de un fauno que lejos de parecer maligno, tenía bondad en sus ojos. De pelajes claros y simetría llena de belleza, miraban con respeto desde detrás de sus compañeros más salvajes. Todos a la espera de que hicieras algo con el místico obelisco.

Cuando estabas a punto de tocarlo, otra voz se apareció detrás de ti. Una que distaba de parecer humana.

—... Te has topado con un destino que te supera, humano. ¿No es así?

Cargando editor
12/11/2018, 06:21
Haakon

Te giras y te sorprende una figura que hacía algo de contraste con el resto. Jadeante sobre unas rocas se encontraba sentado un anciano desprovisto de ropa, con distintos tatuajes y marcas que rodeaban todo su cuerpo junto con manchas de suciedad. Sus ojos brillaban intensamente en la oscuridad, cosa que afirmaba la naturaleza esotérica del individuo. Una gran cornamenta coronaba su cabeza blanca de las canas, y al escucharle hablar, te diste cuenta de que su voz era la misma que escuchaste junto con aquel eco del cazador.

La diferencia era que en ese momento, el "hombre" mitad cabra estaba hablando contigo. En tiempo real, por lo visto. Ya que su brillante mirada estaba posada sobre ti. No era un fantasma, no era una ilusión. Estaba comunicándose contigo.

A decir verdad, el anciano no parecía tan poderoso como te lo imaginabas. De hecho, por lo que podías ver el hombre lucía como si hubiese estado pasando por un continuo dolor. Su rostro se muestra cansado, su semblante suda y podrías jurar que sus extremidades hacen un esfuerzo escabroso por controlar el temblor.

Antes de que pudieras hacer nada, la criatura habló:

—Humano, no creas que este sueño estaba planeado. No era una casualidad. Pero no por ello debes asustarte. Uno de muchos males ha despertado y temo que no podré contenerlo más. Mi tiempo ahora es limitado, y dudo que el de mis compañeros también. Mi nombre es Haakon, y soy el guardian de La Piedra.

Al mencionar el hombre que conociste como Haakon "La Piedra", los hombres mitad bestia rugieron, balaron y se agitaron. Levantando sus armas con descontento. Incluso el propio obelisco pareció estremecerse con la mención. Chisporroteando energía a cada segundo que pasaba.

—Hay cosas en este mundo que deberían permanecer fuera del control de los hombres. Pero esta amenaza debe de ser contenida cuanto antes. Temo que se hayan llevado La Piedra a otro sitio, me han alejado de ella y pronto mi existencia llegará a su final. Mis amigos, lejos de mí, jamás se enterarán de mi partida. Por eso mi último recurso fue hablar contigo. Quien quiera que seas, necesitamos a la caballería.

Cargando editor
27/11/2018, 16:28

Una voz evitó que hiciese contacto con el obelisco, alguien que se dirigió a mí de manera directa con una pregunta. Me hería en el orgullo admitirlo pero la verdad es que no entendía nada y me quedé en silencio sin darle la razón. Me giré y su aspecto peculiar me dio a entender que este podría ser el fauno que se encontraba junto al obelisco, además de que su voz me era conocida.

Cuando dijo "La Piedra" volví a mirar al obelisco de reojo y a las bestias de alrededor. No tenía claro qué era lo que les inspiraba este fanatismo. Tampoco me quedaba claro el por qué era un entorno tan diferente con respecto a hace unos minutos. Cuando volvió a hablar y mencionar que se habían llevado La Piedra, me volví a hacer un lío.

¿La Piedra? —repetí sus palabras—. ¿Qué es? ¿No es esto? —señalé el obelisco.

— Perdona Haakon, estoy hecha un lío. Mi nombre es Kate. —comencé de manera educada llevándome la palma de la mano al pecho—, y desde que he llegado no he entendido nada. ¿Sabes esa sensación de cuando estás en un sueño y tu cuerpo se mueve sin que tú des ordenes y simplemente eres un espectador de toda una aventura onírica sin que apenas puedas tomar decisiones? —torcí los morros a un lado dándome cuenta de que quizás explicar mi situación de esta manera a un ser mágico medio humano no iba a facilitar las cosas y tampoco me iba a llevar a ninguna parte.

Ni siquiera tengo claro que seas real. Continué en mi cabeza. Si recapacitaba un poco, todo esto venía por una prueba ante los magister. Por lo que yo sé, esto podría ser parte de la evaluación para poner a prueba mi voluntad y mi capacidad de concentración. Quizás encontrar La Piedra era el examen final y sólo tenía que seguirle el juego.

— El caso es que es posible que pueda ayudaros. No soy una humana normal y corriente pero me hace falta más información. ¿Qué es lo que ha pasado? ¿A qué mal te refieres? Y lo mas importante, ¿cómo es La Piedra? ¿Por dónde podría empezar a buscar?

Cargando editor
01/12/2018, 17:40
Haakon

El fauno se quedaba en silencio mientras hablabas. No podías darte cuenta si realmente estaba escuchandote o solo viendo a través de ti, con sus brillantes ojos como antorchas que carecían de pupilas. Pues solo tenían luz. Las criaturas a tu alrededor seguían viéndote, algunas balaban y otras gruñían furibundas. Pero ninguna se atrevía a acercarse.

—Descuida, chica. Soy real, tan real como tu lo eres —adivinó el hombre mitad ciervo—. Entiendo que te halles confusa. Este sueño no te pertenece, verás... es mío. Lamento que todo haya tenido que llevarse de esta forma, pero era una oportunidad demasiado buena como para desparovecharla. Todos me ignoraron, o fueron despertados... tú, sin embargo... sigues aquí.

El fauno se levantó, cuan alto era. Y era muy alto; te superaba al menos en un par de cabezas y más de cerca no se veía tan anciano y maltrecho como en su primera impresión.

—La piedra es tal como la ves... En otros tiempos era la fuente de mi poder, aunque esa es una historia para otro día. Si es que llegamos a ver uno por aquí. Ahora esta transformada, corrupta, poseída. Como quieras decirle... y ha creado a estos demonios que se han expandido como una plaga en los bosques del este. Hace unos meses solo eran unos pocos, luego se hicieron docenas, luego centenares, luego... una legión. Han esperado y se han preparado para atacar, y pronto lo harán. Se están reuniendo y falta poco para que empiece su gran marcha hacia los asentamientos humanos. Uno de los "prodigios", como tú... Teobalt; se llama. Ha venido para estudiar esta amenaza, pero el necio no se ha dado cuenta de que se salió todo de control... ni él ni nadie se dará cuenta hasta que sea demasiado tarde...

Solo él y sus allegados conocen la verdadera gravedad del asunto. Y solo ellos son los que están haciéndo algo al respecto. Temo que la noticia llegue demasiado tarde o demasiado criptica como para que la ayuda llegue a tiempo...

Cargando editor
19/12/2018, 20:23

Entrecerré los ojos inspeccionándole con cierta sospecha cuando me dí cuenta de que me había leído la mente. No me sentía insegura del todo pero no me hacía gracia que lo único que podía controlar no fuese privado para él. El cómo él había conseguido introducirme en su sueño era un misterio y trataría de estudiarlo en cuanto tuviese una biblioteca cercana.

Me crucé de brazos y seguí escuchándole en silencio. Al menos, esta vez, estaba entendiendo algo. Aunque el nombre de Teobalt no me sonaba de nada en la escuela, sí que lo había escuchado hace un rato mientras perseguía a aquel chaval por le bosque. ¿Sería algún Magister? Parecía que era mi única pista en la que continuar indagando. Por lo menos, darle el mensaje de que Haakon estaba en las últimas. ¿Qué otra cosa iba a hacer? ¿Enfrentarme a esa legión yo sola? Ni hablar...

Haakon, intentaré comunicar tu mensaje pero no prometo nada. No sé cómo es Teobalt, no sé si voy a ser capaz de reconocerle. —confesé con cierta inseguridad—. Esto que me cuentas es gravísimo y todavía hay recuerdos de la última guerra. Apenas nos estamos recuperando.  ¿Cómo se supone que debemos de pararlo? ¿Qué se puede hacer?

Cargando editor
11/01/2019, 17:10
Haakon

—La energía de La Piedra es renovable con los años, infinita, pero puede agotarse y volver a un estado de "recarga", por así decirlo. No confío en el hechicero, quiere destruirla y con ella a todo lo que ha creado. No solo cosas malas, si no toda la fauna y flora que con ella ha nacido. La Piedra no es de este mundo si no que es una herramienta de los... ¡Agh!

La visión del sueño se torno de golpe de un color rojo y junto con un temblor, un terrible dolor en tu cabeza se hizo presente. Como si un cuchillo apuñalase directamente tu cráneo de una vez. Las visiones se distorsionaban y se hacían pedazos frente a ti, mientras que un tembloroso fauno se arrastraba para poder acercarse y hablar.

—Me encontraron, ¡El Bosque del Alba y pronto las tierras de los hombres arderán si esta amenaza no es detenida! ¡Encuentra a Teobalt, encuentra el obelisco y detén esta pesadilla!

Cargando editor
11/01/2019, 17:16
Abzu

Entonces el color y la luz desaparecen una vez más, y te vuelves a quedar en ese espacio donde el tiempo no corre ni la luz llega a ningún sitio...

Un destello se ve a lo lejos, y unos sonidos que tus oidos no pueden identificar se hacen presentes. Estás despertando.

Notas de juego

Te mueves otra ves al Colegio de la Llama Azur