Partida Rol por web

Sangrientas Navidades 3: Regreso de la tumba

La idea de Ferguson

Cargando editor
11/09/2020, 17:42
Director

Llevaban un rato esperando en el cementerio y empezaban a temer que los chicos no aparecieran. Sería una broma muy típica del capullo de Ferguson. De hecho, Laurie ya había expresado un par de veces su deseo de marcharse de allí, porque le daban mal rollo las tumbas, especialmente por la noche. Pero Jennifer y Joy la convencieron para que aguardara un poco más. Aquella mañana, el grupo de chicos de Ian con el que llevaban juntándose un par de semanas a raíz del interés amoroso que había despertado él en Jennifer, les habían dicho de quedar en el cementerio por la noche y ellas habían aceptado.

Era la típica tontería que se hacía de adolescente. Ir a visitar un cementerio por la noche como si tuviera algo de especial. De mayores recordarían aquella estupidez y se reirían de haber hecho algo así, pero entonces era algo importante. Era obvio que les daba miedo, pero ninguna quería decir nada. De hecho, Jennifer había convencido incluso a Laurie, que normalmente no aceptaba ese tipo de planes extravagantes. Y a decir verdad, ninguna de ellas solía hacer esas cosas, pero la influencia de Ferguson y el resto de su grupo durante aquellas últimas semanas les había llevado a situaciones como aquellas. La gracia en esta ocasión era hacerlo el día de Nochebuena, una fecha especialmente señalada en Birchmont a raíz del terrible crimen cometido por el loco Erik Stark del que ellas apenas tenían constancia, al igual que la mayoría de la juventud del pueblo que no había vivido el horror de seis años atrás o no había perdido familiares en el suceso.

Un par de minutos más tarde del intento de espantada de Laurie, Matthew y Peter hicieron su aparición saltando desde uno de los árboles del campo santo, donde llevaban un buen rato acechando a las chicas en silencio y aguardando el mejor momento para pegarles un susto. Aunque estuvieron a punto de salir por patas, ver a aquellos dos idiotas les calmó. A pesar de todo. Para evitar que los ánimos se caldearan, Gordon propuso enterrar el hacha de paz y de detrás de una de las tumbas sacó una bolsa repleta de botellas de alcohol. Les dijeron que Ian llegaría algo más tarde, pues había dicho que tenía una sorpresa pero ninguno de ellos sabía de qué se trataba. Entre tanto empezaron a beber y a hacer bravuconadas para impresionar a las chicas.

Cargando editor
11/09/2020, 18:25
Laurie Cleveland

-¡Sois imbéciles! - Dijo Laurie enfadada.

Esperaba que aquello hubiera sido la gota que colmara el vaso después de hacerles esperar durante tanto tiempo con el frío que hacía, pero al parecer a las chicas se les pasó el enfado cuando Gordon y Clarkson sacaron la bebida. A diferencia de ellas, Laurie era más retraída, tímida y no le veía la gracia a la moda de andar con esos chicos últimamente. Pero Jennifer, que era la líder del grupo de las chicas, estaba prendada de Ian y solo por eso ya tenían que aguantar a esos imbéciles. Jennifer era guapa, buena estudiante, y podía estar con cualquiera, pero había elegido a Ferguson porque era el rebelde del instituto, y eso atraía a las chicas como la luz a las polillas. Seguro que si fuera uno más del montón nadie perdería el interés en él y ellas no estarían allí. No comprendía como Joy, que era la alumna ejemplar, la que mejor notas sacaba de todo el instituto, se había dejado engañar de esa manera. Probablemente también tendría un interés en alguno de los otros dos que acompañaban a Ian, y lo peor de todo es que estaba convencida de que habían hecho planes para que ella se liara con el restante. Clarson era mono, pero era un estúpido. El típico que le reía las gracias a Ian y repetía todo lo que él decía con una risita tonta. Y Gordon... era el segundo mejor jugador del equipo después de Ferguson, pero era raro de narices. 

Cargando editor
12/09/2020, 13:47
Matthew Gordon

Matt estaba disfrutando de lo lindo. Por supuesto, preferiría no tener aquella rama clavándose en su espalda, pero ver a aquellas tres pobres almas cagadas de miedo era superior a sus fuerzas. Cuanto más decía Laurie de irse, más miedo cogía el resto. Matt no se estaba tocando de puro milagro.

Miró al árbol de al lado, donde Peter aguardaba igual que él. Alzó la mano y realizó una cuenta atrás con los dedos, para salir los dos a la vez. Al llegar a cero, se dejó caer y se puso a gritar en cuanto tocó el suelo. La reacción de las chicas no pudo satisfacerle más y se puso a reír sonoramente ante sus chillidos. Podría estar haciendo aquello todo el día sin mostrar remordimiento alguno, tal y como dejó ver la sonrisilla sádica que le dedicó a Laurie al insultarle.

- ¡Hey, no no! -dijo abriendo los brazos y cortándoles el paso cuanto intentaban irse.- Va, que era una broma. No os podéis ir.

Se acercó corriendo a una lápida no muy lejana y sacó una bolsa llena de botellas. Volvió y comenzó a sacar alcohol y a dárselo a los presentes.

- Las he comprado con un carnet falso que conseguí por la deep web. Hay de todo, ¿sabes? Puedes pagar para ver cómo matan a gente.

Como era costumbre, Matt soltó aquello como si acabara de dar los buenos días. Todos sabían que le iban las cosas raras, y siempre había alguna nueva "curiosidad" que acababa de descubrir y que compartía con los demás con total normalidad. 

Cargando editor
12/09/2020, 16:46
Jennifer Brown

Aquella iba a ser la noche. Estaba segura de conseguir conquistar a Ian, porque no podía ser de otra manera. Ya era bastante doloroso tener que soportar su indiferencia, pero un rechazo era algo que ni tan siquiera contemplaba. Ian caería en sus redes sí o sí.

Aquella iba a ser la noche.

-Venga, chicas. No os retraséis. Una cosa es hacernos las duras y otra conseguir espantarlos. No tienen que saber que nos interesan, pero tampoco echarlos. ¿Lo pilláis?

Laurie se comportaba con su sosería habitual. Jennifer no comprendía lo que veían en ella los chicos, porque le parecía de lo más aburrida del mundo. Pero bueno, seguramente podría aprovecharlo. Después de todo, si no quería venir sería porque le asustaba, y si la asustaba... eso era algo que a Jennifer le hacía sentirse bien.

No obstante, cuando los chicos saltaron sobre ellas, también se sobresaltó. Afortunadamente, fue Laurie quien respondió, lo que le dio a Jennifer el tiempo que necesitaba para rehacerse.

-Vamos, Laurie. No me digas que te has asustado. Nana nana naaaaana, Laurie está asustaaaaada, Laurie está asustaaaaada... -canturreó Jennifer con una sonrisa maliciosa.

Matt se disculpó, como perdedor que era, pero Jennifer solo miró a su espalda, en busca de Ian, mientras Matt les demostraba lo "inteligente que había sido".

-Sí, has sido muy listo. Dime, ¿de verdad te ha hecho falta falsificar un carné para conseguir alcohol? Yo lo hubiera hecho sin él, pero supongo que para eso hace falta más de medio cerebro, ¿Verdad? A propósito, ¿dónde está Ian?

Le extrañaba que no anduviese por ahí, junto a los demás. Después de todo, si estaba allí era solo por él. Y ya estaba empezando a hartarse de que la rehuyese. Si continuaba haciéndolo, tendría que enrollarse con algún inútil... como Matt...

puajjj

Menos mal que aún no estaba tan desesperada.

Cargando editor
12/09/2020, 17:52
Joy Harding

- Anda, Laurie, no seas tonta. Está científicamente demostrado que los fantasmas no existen y que los muertos no salen de sus tumbas. Los chicos vendran... y si no te quedas por ti, hazlo por Jennifer al menos... - La verdad era que no sabía que había visto en ese chico. Al menos Matt tenía sentido del humor y un buen cuerpo... Ian solo sabía meterse en líos.

- Quizás por eso le gusten... los chicos malos siempre atraen o eso dicen.

La verdad era que Joy estaba nerviosa también, pero más por los chicos que por ella misma. La más lista de la clase y la más mojigata y se había propuesto ese año quitarse la etiqueta de estrecha, así que esa era una buena ocasión. - Lo único que me molesta de este lugar es el frío. Podíamos haber quedado en una de las casas vacías de las afueras. Al menos estaríamos bajo techo. - Se quejó con motivo. La nieve hacía su efecto en los pies y los de Joy se estaban helando.

En ese momento escuchó un grito y que alguien salía de la nada. Contagiada por sus compañeras, se unió a los gritos y a la huída, cuando los chicos les frenaron el paso. - Dios Matt, eres un idiota. - Dijo con el corazón acelerado mientras que Jenny se burlaba de Laurie. Vio como el chico se agachaba a sacar algo de detrás de una de las tumbas y decidió vengarse.

Se agachó, cogió una bola de nieve y se la lanzó a Matt, impactándole en el cuerpo. - Eso para que vuelvas a asustarnos.

Cuando este le pasó el alcohol a Joy no pudo evitar bromear nerviosa.- Al menos estarán frías, ¿no? - En ese momento Jenny preguntó por Ian y Joy miró a su alrededor, esperando que también saliese de la nada para asustarlas. Luego se acercó a su amiga y le susurró. - Tranquila, vendrá... y disimula un poco más, que se te nota que estás colada por él.

Joy miró a Gordon. - Oye, chico raro. ¿Tú te sabes alguna historia sobre este cementerio? Ya sabes... que de un poco de miedo... Creo que estaría bien escucharla cuando llegase Ian. - Así Jenny tendría ocasión de agarrarse a él fingiendo estar asustada y quizás ella hiciese lo mismo con Matt.

No le importaba que solo tuviese medio cerebro como decía Jenny, lo que importaba era todo lo demás y liarse con él aquella noche, haría que su fama se esfumase en menos de veinticuatro horas.

 

Cargando editor
14/09/2020, 19:08
Peter Clarkson

Saltó también, dando un susto de muerte a las chicas, pero al contrario que su amigo no se mostró demasiado ufano de ello. Era divertido, pero esas cosas perdían un poco la gracia cuando no estaba Ian. Matt... No era lo mismo.

Como era de esperar, la conversación derivó en un toma y daca de insultos, tonterías varias y otras estupideces que a él le daban igual. Al igual que la idiota de Jennifer, solo quería que Ian llegara. ¿Qué estaría haciendo? No les había dicho nada, y no es que normalmente les contara sus planes, solía dedicarse a mandarles hacer esto y lo otro sin más, pero era raro que tardara tanto. Al menos, lo que estuviera preparando, sería gordo.

Una sonrisilla un tanto bobalicona le asomó al rostro, aunque se esforzó en ocultarla dándose la vuelta y acercándose al otro chico para sacar las botellas y los vasos; hielo no iban a necesitar esa noche. Un poco de alcohol les ayudaría a pasar el tiempo, y también a relajarse. Lo cierto es que, dijera lo que dijera, a él también le estaba dando un poco de mal rollo todo aquello.

Podemos empezar a beber ya. Seguro que a Ferguson no le importa. Estará al caer.

Notas de juego

Madre mía, estoy que se me va el tiempo de las manos. Actualizo rápido para seguir.

Cargando editor
15/09/2020, 18:13
Director

El susto de los chicos dio paso a un enfado bastante ligero por parte de las chicas en un primer lugar, bola de nieve incluida, y después a una reconciliación mediante el uso del alcohol como ofrenda de paz. Se movieron hasta un espacio algo más despejado de tumbas, donde había un pequeño mausoleo de mármol blanco al lado de uno de los caminos secundarios del cementerio.

El bosque se encontraba colindante al lugar, por lo que el cementerio era un lugar frío y por el que se paseaban algunos animales salvajes por la noche, a pesar de la pequeña valla de metal entrecruzado que bordeaba el perímetro. Los animales muchas veces excavaban bajo la alambrada para colarse al interior, aunque normalmente sólo estaban de paso, cruzaban la carretera y seguían por el bosque del otro lado. Normalmente eran zorros, aunque se decía que en los últimos años se habían divisado cada vez más lobos.

Un cementerio era un lugar bastante tétrico, y aunque no lo querían admitir, todos sentían aquella incómoda sensación de no querer estar allí. Cualquier sonido que se escuchara les provocaba un escalofrío por la espalda y les hacía girarse nerviosos. Algunos utilizaban el humor para camuflar ese miedo u otros mecanismos, y luego estaba Laurie, que lo estaba pasando realmente mal.

Notas de juego

Haced una tirada de cognición. Dif 4.

Cargando editor
16/09/2020, 08:53
Matthew Gordon

Matt recibió un bolazo de nieve mientras no miraba. Se giró buscando al culpable, y por su expresión intuyó que había sido Joy. Comenzó a caminar hacia ella con un "uuuuuuh" silencioso en los labios y con intención de hacerle alguna, pero el comentario de Jenny consiguió quitarle todas las ganas de diversión. Dios, qué tonta es...

- Si, ya sabemos todos cómo habrías conseguido las botellas -acompañó el comentario con un gesto simulando una felación y se echó a reír.

Ni siquiera hizo el intento de disimular que estaba ignorando la pregunta sobre cuándo llegaría Ian. No terminaba de entender a ninguno de los dos, a uno por darle bola a medias y a la otra por no darse cuenta de ello. Ian sabría dónde se mete, pero tener que soportar a Jenny a veces era todo un esfuerzo. Por suerte, Joy parecía dispuesta a seguir con la temática de la noche, y Matt se puso a pensar mientras se metía un puñado de nieve en la boca para después regarlo de vodka. Sobra decir que no fue una gran idea.

- Claro que sé historias -dijo, aun masticando nieve.- Por algún sitio está la tumba de un tipo al que han tenido que cambiar de agujero varias veces, y siempre que abren la caja el cabrón está en una pose diferente. También está la vieja que quemaron por bruja y que no se moría, la hija de puta. -bajó el tono de voz y comenzó a caminar despacio, acercándose a Laurie con aire tétrico.- Y no muy lejos está la tumba del Santa Claus asesino, que una noche de Navidad se dedicó a masacrar estudiantes con un hacha. Llevaba un saco lleno de miembros descuartizados y los dejaba como regalo junto a los árboles de las víctimas. -comenzó a caminar entonces hasta Joy, con los ojos desorbitados cual zombie de peli mala.- Nadie sabía porqué mataba, pero algo estaba claro. -se la quedó mirando mientras hacía una pausa dramática.- Siempre iba a por los mejores estudiantes.

Antes de que ella pudiera reaccionar, Matt hundió el pié en la nieve y le lanzó a Joy una nube blanca. Riendo como un crío, cogió las botellas y echó a correr para alejarse de las represalias de Joy. Pero al pasar a una zona más despejada, cerca de la línea de árboles, pronto aminoró la marcha. Nunca lo reconocería, pero verse sólo en aquella parte del cementerio le ponía tenso incluso a él. La sombra del bosque creaba la sensación de que había un vacío infinito, detrás de una valla que no sería capaz de retenerlo si quisiera engullirlo todo. Dio un trago para disimular, pero los ojos le iban de aquí a allá, atento a todo.

- Tiradas (1)
Cargando editor
16/09/2020, 14:01
Joy Harding

Cuando Matt comenzó a acercarse así a Joy, esta empezó a negar con la cabeza y a recular, hasta que Jennifer abrió la bocaza. Había veces que se pasaba mucho y esa fue una de ellas. Joy tuvo que aguantar la risa, porque desde luego que Matt se la acababa de meter doblada a Jenny. Era su amiga, pero a veces se pasaba "de lista".

La joven no había bebido nunca alcohol y miraba las botellas como si la fuesen a comer o algo. Pero debía hacerlo, quería dejar de ser la estrecha y buena chica del instituto. Seguiría siendo la mejor de la clase, pero al menos "molaría" más. Así que mientras Matt contaba las historias a las que había preguntado al chico raro, ella decidía que probar primero.

Entonces escuchó la historia del loco de Santa Claus, matando a todos con su hacha. - Sí. Recuerdo algo de aquello... Yo tendría diez años cuando pasó. - Dijo haciendo memoria. - Por eso las Navidades dejaron de serlo en el pueblo, por la matanza de aquel loco... lo que no sabía era que estaba aquí enterrado. - Eso si que le dio miedo a la joven. Y en ese momento sintió el bolazo de nieve en la cara. No necesito ver para saber quien había sido.

- ¡Matt! ¡Te mato! - Dijo riendo y agarrando un puñado de nieve antes de levantarse y salir corriendo detrás suyo para vengarse. Cuando le vio clavado en el sitio, mirando a la nada o quizás al bosque, Joy comenzó a acercarse en silencio, dejando caer la bola de nieve en el suelo, para llegar a su altura, ponerle del tirón las manos en la cintura del chico durante un segundo y soltar un sonoro. - ¡Buh! - Con la clara intención de asustarle.

En ese momento le dio la sensación de que Matt estaba pendiente de algo y se puso a mirar y a escuchar, a ver si detectaba algo.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Mierda! No saqué la estampita...

Cargando editor
16/09/2020, 16:57
Peter Clarkson

Definitivamente, las bromas de Matt no tenían nada que ver con las de Ian. Carecían de... Algo. El chico, en realidad, no tenía la culpa, era su personalidad. La verdad es que no tenía ni idea de porque era parte del grupo; como segundo mejor jugador debería estar con el resto del equipo, cosa que seguramente no ocurría por lo raro que era. Ian era demasiado bueno habiéndole acogido bajo su ala. Esperaba que llegara pronto.

La historia sobre el Santa Claus le había puesto en tensión. Todos en el pueblo sabían lo que había ocurrido, aunque ellos eran muy jóvenes por suerte, y nadie olvidaba. Muchos habían intentado hacerlo, incluso no pensar en que la tumba de aquél psicópata estaba allí, en el cementerio, pero a la hora de la verdad casi nadie lo conseguía. Las manadas de curiosos atraídos por el morbo cada año tampoco dejaba pasar página; Birchmont estaba en el mapa desde aquello, pero era una maldición.

Incapaz de contener un temblor que poco tenía que ver con el frío, se encogió, rodeándose las piernas con los brazos, y procuró centrarse en beber y no dar vueltas al asunto. ¿Maldita sea, dónde estás? Con los nervios a flor de piel, miró alrededor esperando que su amigo apareciera ya de una vez.

- Tiradas (1)
Cargando editor
16/09/2020, 18:57
Laurie Cleveland

-Cállate, Matt.- Protestó Laurie. -Lo del Santa Claus es un tema serio. No está bien que bromees con cosas así. La profe Crookshanks estaba en el instituto cuando eso pasó. Fue una tragedia.

Laurie quería hacerse la fuerte en aquellos momentos, pero su voz delató un tono de miedo que no pudo controlar muy bien. Joy salió corriendo alegremente tras Matt y Laurie se sintió nerviosa.

-¡No os alejéis!

Cargando editor
16/09/2020, 20:55
Jennifer Brown

El loco, el loco. No sabían más que hablar de aquel maldito loco sanguinario que ya estaría bajo tierra y putrefacto.

-No sé porqué habláis e ese Santa asesino. No solo no tiene gracia sino que es una estupidez. Hay bebida, pues bebamos -dije, cogiendo una de las botellas, abriéndola y echando un sorbo a morro. Sabía como si alguien hubiera echado formol en ella, pero demonios, lo necesitaba si finalmente hacía algo con Ian.

No iba a ser temerosa como Laurie, y estaba allí para pasarlo bien.

-¿Qué te ocurre, Laurie? ¿De veras tienes miedo de que ese Santa Claus se levante de su tumba y te corte en pedacitos? ¡Uuuuuh!

Desde luego, si querían escoger un lugar peor para ir de fiesta, no podían haberlo hecho, pero a medida que el alcohol caía por mi garganta, me daba cuenta de que todo aquello era una broma y que el cementerio, le añadía un toque excitante que no había esperado.

¿Cómo sería hacerlo encima de una tumba? Debía proponérselo a Ian.

- Tiradas (1)

Notas de juego

uh uh

Cargando editor
17/09/2020, 18:53
Director

A pesar de que meterse con Laurie porque mostraba abiertamente el miedo que todos sentían eran divertido, lo cierto era que todos se sentían incómodos en aquel lugar. Y no era de extrañar, los cementerios no eran los lugares más alegres del mundo, y menos de noche. Especialmente si Matt Gordon iba contando historias trágicas y angustiantes como aquellas, recordando incluso al infame asesino de las navidades de seis años atrás, que tal día como aquel había asesinado a decenas de estudiantes del mismo instituto al que ellos iban.

Entonces, Matt guardó silencio y puso la oreja para escuchar. Lo único que se oía eran las quejas de Laurie y la risa de Jennifer metiéndose con ella. Gordon tuvo que chistar para que guardaran silencio, y entonces escuchó que unos arbustos cerca de allí se movían. Pronto el ruido fue más claro, y todos pudieron escucharlo.

Cargando editor
18/09/2020, 14:32
Matthew Gordon

No terminaba de saber qué era, pero algo había llamado la atención de Matt. Por desgracia, su concentración fue arruinada en cuanto dos manos le cogieron por sorpresa por la cintura. Dejó escapar un grito y se giró a toda velocidad, sólo para encontrarse a Joy disfrutando de la bromita. Apoyó las manos en las rodillas un segundo y resopló mientras intentaba que el corazón no se le saliera del sitio. Al menos Joy parecía dispuesta a divertirse, y Matt no iba a perder la oportunidad, en ningún sentido.

Sin previo aviso y con una sonrisilla maliciosa, soltó la botella y se lanzó hacia ella. La cogió de la cintura y el brazo, dispuesto a lanzarla contra la nieve, pero apenas había empezado a forcejear cuando Matt paró. Lo había vuelto a escuchar, ahora más claro. Se quedó allí plantado, aun cogido a Joy pero aflojando el agarre, con la mirada puesta en la oscuridad del bosque.

- ¡Schht! -fue todo lo que les dijo a los demás cuando llegaron haciendo ruido.

Allí estaba de nuevo el ruido, y esta vez Matt creía haber visto de dónde venía. Movió la cabeza despacio hacia los lados, como si así pudiera ver más allá del arbusto.

- ¿Ian? 

Cargando editor
18/09/2020, 15:15
Joy Harding

Joy rió divertida ante el comportamiento de Matt. Nunca había sido así en la escuela, pero al verse lejos de ella y con un grupo de chicos que parecían desinhibidos, sobre todo el deportista e Ian, el cual no había aparecido aún, se sentía libre para hacer cualquier estupidéz y eso hizo al asustar así a Matt.

Cuando vio que el chico soltaba la botella y se acercaba a ella, comenzo a hablar nerviosa. - No, no , no, no.. - Mientras ponía las manos al frente. No sabía lo que Matt iba a hacer pero seguro que su venganza superaría su susto. La joven sintió como se agarraba a ella y comenzó a forcejear con el chico entre risas y sintiendo como se ruborizaba y en ese momento Matt paró en seco y Joy le miró cuando este la chistó. - Venga ya... ¿no querrás asustarme con eso? - Le susurró por si acaso iba enserio.

Y entonces ella también escuchó algo y se abrazó asustada a Matt.

- ¿Y si es el guarda del cementerio y nos denuncia? Creo que deberíamos irnos... - Susurró de nuevo a Matt asustada por aquel sonido. No creía que fuese Ian. Este era más escandaloso y le gustaba llamar la atención más incluso que al joven deportista.

Cargando editor
18/09/2020, 15:58
Peter Clarkson

No se había dado cuenta de primeras, pero lo escuchó claramente cuando Matt les chistó para que callaran y prestó atención. Allí, entre los arbustos, un ruido.

Era Ian, tenía que ser Ian. ¿Quién más iba a ir allí, ese día y a esas horas? No, tenía que ser él, por supuesto. Estaría preparando una buena broma, una de la que en unos minutos todos se reirían, igual que del miedo que empezaban a sentir. Solo es nuestra imaginación, aquí no hay nada peligroso. Rio nervioso, a la espera, tenso.

Notas de juego

Verás como es Ian vestido de Santa y con el hacha. Ya sabemos de dónde ha sacado sus cosas el zombie... xD

Cargando editor
18/09/2020, 18:25
Jennifer Brown

De pronto, todos se callaron y yo me di cuenta de que estaban intentando oír algo, o a alguien que se movía por allí cerca. Miré hacia donde lo hacían todos y vi como unos arbustos se agitaban de un lado a otro. A Joy no se le ocurrió otra cosa que decir que era el guarda del cementerio intentando asustarnos y eso me pareció incluso más estúpido de lo habitual para ella.

-No digas estupideces. ¿De verdad piensas que el guarda iba a esconderse detrás de unos arbustos y a moverlos para que saliéramos huyendo? ¿En serio? -me acerqué a ella y la miré con cara de desprecio; no soportaba a los retrasados mentales, fueran quienes fuesen, incluso aunque se tratara de supuestos amigos.

-La verdad es que es más probable que sea Ian. ¡Eh, Ian. Si crees que vas a asustarnos con esa tontería es que te has frito el cerebro con tantos canutos. Sal de ahí! -le grité, acercándome al arbusto.

Al ver que no salía, pensé en una manera sencilla de atraerlo.

-Bueno, pues tú verás lo que te pierdeeeees -le solté, girándome, agachándome y bajándome las bragas para mostrarle mi sonrosado trasero. Lo moví a un lado y a otro durante unos segundos y después, volví a cubrírmelo, en medio de un ataque de risa.

Cargando editor
18/09/2020, 18:59
Director

-¡Ho-ho-ho! - Gritó una voz a cierta distancia. -¡HO-HO-HO!

Pudieron ver como una silueta de considerable altura y corpulencia aparecía cerca de allí. El contraluz de la escasa iluminación que había en el cementerio no les permitía verle la cara, pero jurarían que iba vestido de Santa Claus. Un vestido navideño rojo e incluso un gorrito acabado en una borla blanca. Vieron que el individuo manejaba un hacha de considerable tamaño que blandía de izquierda a derecha.

-¡HO-HO-HO! - Gritó de nuevo.

Cargando editor
20/09/2020, 15:37
Matthew Gordon

Matt agarró por instinto a Joy cuando se le abrazó. Por un instante, la opción de que fuese el guarda le pareció ligeramente reconfortante. Al fin y al cabo, lidiar con un capullo que venía a arruinarles la diversión no era nada nuevo. Ellos ya habían tenido sus encontronazos con los estirados de la oficina del sheriff cuando se colaban en la abandonada tienda McHale, en las afueras. Un guarda de cementerio no iba a conseguir mucho contra ellos. Pero había algo extraño, y aunque era otra cosa de aquella noche que nunca reconocería, estaba de acuerdo con Jennifer en algo. El guarda hubiese sacado la linterna mucho antes, posiblemente más asustado que ellos, y se habría puesto a gritar y a insultar.

Mientras Jennifer daba un espectáculo más que lamentable, Matt soltó un momento a Joy y se agachó para recoger la botella que había soltado, que había quedado clavada en los centímetros de nieve que cubrían el cementerio. La cogió por el cuello, como una porra, y volvió a rodear la cintura de Joy con el brazo, con la intención de apartarse con ella unos metros más de la valla y, sin duda, de la vergüenza ajena que regalaba alegremente Jennifer. Pero apenas se había movido unos centímetros cuando aquella voz y aquella figura le pararon los pies en seco. ¿Sería ÉL realmente? ¿Era un zombie? Qué cojones importaba, era otro colgado con un hacha con ganas de asustarles o a saber qué. Matt comenzó a recular, llevando a Joy consigo, y apuntó al extraño con la botella.

-¡Eh! ¿Qué coño quieres, capullo? -dijo con el tono más amenazante que la tensión le permitió usar.- Vete a tomar por culo antes de que te reviente la cabeza.

 

Cargando editor
20/09/2020, 16:51
Joy Harding

- Cuidado. Habló la lista. - Respondió Joy a Jennifer. - Si yo fuese vigilante y no supiese lo que tengo delante, si haría eso y más en un lugar como este. Mejor asustar que enfrentarse a saber que... Estúpida. - Como le jodía a Joy cuando Jenny iba de lista de la vida y más aún cuando trataba dejar a todos en evidencia. Esperaba que se liase una buena y que saliese perjudicada por bocas, porque encima era eso, una bocas.

Pero el sonido asustó lo suficiente a Joy como para aferrarse a Matt y cuando este soltó a la joven, ella se asustó más. - No, no me dejes... - Le susurró con miedo, para ver como cogía la botella que había dejado caer y se llevaba a Joy con él caminando hacia atrás.

Aquella risa, heló la sangre de Joy más que el frío de la noche. Ni la proximidad de Matt lograba en aquel momento calentar su cuerpo de ninguna manera. Miraba aterrada a todos lados, buscando de donde habían venido las risas aquellas mientras recordaba lo que los mayores contaban sobre aquel Santa asesino. Se decía a sí misma que no podía ser, que estaba muerto y que solo podía ser una broma... pero la veía demasidado pesada para ser incluso de Ferguson. Además, el miedo ganaba y en aquel momento si hubiesen intentado separar a Joy de Matt, hubiesen necesitado un hacha para cortar sus brazos, puesto que se había aferrado con tanta fuerza que parecía estar pegado a él.

Mientras, Jenny se dedicaba a hacer lo único que sabía hacer: el ridículo. Al menos el miedo que tenía Joy impidió ver las posaderas de la joven y cuan estúpida e inmadura era su amiga... si es que era su amiga...