Partida Rol por web

Colocandose delante de sus amigos Ignus brilla con el poder del fuego para churruscar a los esqueletos que tiene delante

Después de derrotar a Asar, estas criaturas no son nada. Alcanzando la coordinación máxima lográis acabar con todos los esqueletos en apenas segundos.

Saladino siente un calor intenso en la espalda y segundos después está envuelto en llamas. Tanto el esqueleto que le estaba sujetando como el que intentaba sacarle las tripas mueren calcinados instantáneamente. Él, que apenas siente algo más que un caloret de un día de verano, saca de su sitio la cabeza de uno de los esqueletos justo cuando Sedrik pasaba por allí. Sedrik lanza un ataque que choca contra la pared, ya que su adversario ya ha caido.  Mientras, Pasifae trata de zafarse de un esqueleto que se propone lanzarla al foso, pero Faysal lo ajusticia justo a tiempo.

Cuando el peligro ha pasado observáis con detenimiento los fosos. Calculáis que hay una caida de cuatro metros, y parece que en el fondo hay varios esqueletos como los que habéis aniquilado.

Para vuestro consuelo, el cofre contiene varias gemas preciosas y monedas de oro. También parece que dentro tuvo una nota, pero por culpa del agua es ilegible. 

-¡Me pido romper la puerta!

Salta Saladino con una expresión infantil.

-¿Rompemos la puerta desde esta posición o desde la otra?

- Puedes proceder como quieras, pero ten cuidado no haya trampas.

Saladino se acerca emocionado a la puerta, estira sus músculos y ... llama educadamente a la puerta. Tras unos segundos sin escuchar nada empieza lanzar puñetazos mientras se rie a carcajadas.

La puerta estalla en mil pedazos y una avalancha de agua cae sobre Saladino. Unos segundos después, el flujo de agua se estabiliza y se pone a la altura del suelo. Saladino asoma la cabeza, tiene un pez en la boca y parece dolorido.,..

Hala - Escupe el pez - Ya podemos entrar!

Una vez abierta la puerta Sedrik se aproxima hacia la habitación intentando hacer el menos ruido posible a examinar la misma

Comienzo a dudar del entrenamiento de Saladino... O quien sabe, puede ser un nuevo camino ideado recientemente por algún maestro obstinado...

Tras el pequeño, al menos para el resto del grupo, susto de con el agua, una nueva habitación se encontraba antes ellos. 

¿Por qué habría tanta agua en esta parte del túmulo?

Sedrik ve imposible entrar sin hacer ruido por el agua que cubre el suelo hasta sus rodillas. Sus movimientos provocan salpicaduras y ondas, pero aún así decide entrar con cautela.

En medio de la habitación ve tres grandes ranas, sentadas sobre figuras sumergidas. Son del tamaño de un perro, y le devuelven la mirada. Acto seguido, una de ellas salta al agua la pierde de vista.
 

- Ranas? que pasa ahora nos atacarán seguro, como en todas las habitaciones.

Se volvió hacia Faysal con las cejas arqueadas y la boca encogida.

Que pesimista eres, Faysal. Puede que nuestra presencia la haya asustado...

En lo más profundo sabía que, si tuvieran que pelear allí dentro, iba a ser una tarea difícil.

Pasifae se asoma a la habitación e identifica a las ranas. Os cuenta que son animales inofensivos, pero muy territoriales. Es posible que os ataquen, como dice Faysal, pero solo si las molestáis.

Saladino mira hipnotizado a las ranas...

-Bueno, una cosa es destruir no-muertos o amenazas para los aldeanos y otra cosa es matar a todo lo que se mueva por que sí. Si vais a luchar yo os ayudo, pero voto por no hacerlo.

- Pues intentemos rodear a esas ranas, estoy deseando acabar y salir de aquí.

Yo no tengo nada en contra de esos bichos. Vayamos a por la llama eterna!

Pues no se diga mas, dejemos a las Ranas tranquilas y prosigamos con la inspección de la cripta, aunque si en cada sala que encontremos resistencia vamos a pasar de ella, mejor sería ir ya al pueblo y dejar lo que quede de la cripta tranquilo

A medida que retrocedían lentamente de aquella habitación comprobaba su cuaderno.

De acuerdo a mis notas, parece hemos cubierto la mayoría de la cripta, siendo la sala llena de humo una de las que nos faltan.

Un escalofrío recorrió su espalda. 

No me gustaría volver allí, si soy honesta, así que evaluemos la situación y salgamos de aquí... ¡Y no nos olvidemos de los hermanos!

-¿De quiénes? Preguntó Saladino, sin que sus compañeros pudieran discernir fácilmente si bromea o de verdad se le ha olvidado.

-Bueno, entonces cogemos la llama y marchamos ya ¿no?

Bajáis a encender vuestras linternas con la Llama Eterna. Cuando vuestras linternas contienen parte del poder de la llama, una figura fantasmagórica aparece ante vosotros.

Jo jo jo! Bienvenidos, hijos mios. Habéis logrado pasar la pr... Espera, qué ha pasado aquí? Por qué está mi tumba abierta?

Sorprendido, Kassen se pierde por un instante en sus pensamientos. Ese de ahí... Asar? Quién te ha levantado de tu letargo? Apenado, suspira. Se gira hacia vosotros y continúa.

Mi nombre es Ekat Kassen. No parecéis de por aquí, pero tenéis las linternas de mi pueblo. ¿Podéis presentaros y explicarme qué ha ocurrido aquí?