Partida Rol por web

Sombi ni poyah

Orguyo y Satisfaksión (Escena 3)

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08/04/2015, 18:15
Natasha Bâlan

La Naty asintió, como si fuera a obedecer la orden. Luego vió que el Deibi se marchaba en busca de la monja, que no había ido muy lejos. Y cuando estaba en el dintel de la puerta, se giró, la cerró y le miró a él. Se acercó unos pasos, se arrodilló frente a él y tomó una de sus manos, besándola.

-Voy a tenerlo -le dijo, con decisión- Lo he decidido. He abortado demasiadas veces en mi vida, y ahora no quiero hacerlo. Muchas personas están muriendo, éste mundo necesita niños.

Sonrió brevemente, como para animarle.

-Perdona que te diga ésto ahora. Pero no quiero que te preocupes además por mi, y por eso... Ya tienes bastante con lo que preocuparte.

Suspiró.

-Cuando quieras hablaremos del tema. Será tu hijo también, o hija. No te voy a impedir verle, ni nada de eso. Haremos lo que quieras, cuando sepas lo que quieres hacer, ¿Vale?

Se levantó y se quitó un poco el polvo. Luego le dió un casto beso en la frente.

-Voy a por ésta. Imagino que estará viendo a su tío en el hospital.

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08/04/2015, 18:26
Sebastián Carrillo

Ésta vez trató de ser conciliador y aprender de sus errores.

-Obviamente no le ha sentado muy bien. Pero vamos, ha sido razonable. Está en su casa ahora, ha ido a ver a su niño.

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08/04/2015, 20:24
Er Zeky

Miré con cierto escepticismo a Carrillo, pero tampoco sabía hasta que punto era buena idea hablar el tema delante del Fausti. Lo chungo aquí es como se puso el Cagaprisas cuando le advirtió que más la valía que su familia estuviera a salvo. Pero que cojones...Bastante que él estaba envenenao en el hospital por la sargenta de su mujer.

- Voy a hablá con él luego...A veh que me dise....- les digo. Igual estaba bien tantear el tema.

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08/04/2015, 21:38
Mari Cruz Castaño Hita

-Sebastián ¿Estás seguro?- Mari Cruz se paró, por primera vez le confirmaba de viva voz sus aspiraciones, era obvio que había meditado sobre ello pero era su deber preguntar y confirmar.
Le sorprendieron muy mucho sus palabras. No solo claudicaba si no que le reconocía como líder cualificado, en cierto modo la halagó. Sí que debió suponerle un trago lo de la Toñi… bueno… para algo había servido todo ese desastre “¿Qué no quieres caldo? Pues toma dos tazas” y a Carrillo el tazón de “ser el jefe” se le hizo indigesto. Quizás la caída de la democracia no era algo tan malo, la Castaño se inclinaba por la meritocracia y el apocalipsis parecía estar imponiéndola, o vales o no vales. El cabo del seprona había aprendido que para eso en concreto no valía. Sacar barriga era cosa del pasado.

El gesto decía mucho de él

-Precisamente de eso quería hablar contigo… me encuentro con 3 cabos y… es imperativo efectuar algunos ascensos, para reconocer vuestro trabajo y evitar choques de competencias… pero si lo que quieres es quedarte como estas… no te voy a negar que me facilita las cosas, pero no quiero que te sientas menospreciado. Desde el primer momento has estado ahí dando lo mejor de ti, no creas que no me he dado cuenta. Gracias…-

Al llegar al hospital la doctora se le quedó mirando, pero estaba ocupada, cuando quedara libre, si era algo importante, ya la buscaría.
El tatu se cuadró al verla, ella saludó y siguió escaleras arriba, el primer piso se había convertido en cuidados intensivos. Miró a ambos lados, saludó con la mano a su tío de un modo cariñoso, ligeramente infantil, como estaba con el Zeki se acercó primero a doña Fulgencia. Pobre, no se merecía aquello.
No se tragaba eso de que la Toñi se hubiera escurrido o tropezado, aún tenía que hablar con la Naty pero estaba claro como el agua que la Kimber había jugado un papel clave. Teorías aparte mostró preocupación genuina al ver a la anciana -¿Cómo está? ¿Y tu?-

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08/04/2015, 21:41
Kimberly María Sánchez Gutiérrez

Vino la guardia civil bollera que no era bollera, ni nada, o sí, eso nunca lo sabría la Kimberly. Preguntó por su yaya, aunque no sabía si por cotilleo o por qué.

-La yaya tiene que descansar, que la doctora Barbi la va a operar en un par de meses. Yo'stoy bien- la miró extrañada por la pregunta. -¿Por qué? ¿Que t'han dicho y quién?- entrecerró los ojos mirándola seria. Si al cagaprisas le habían dicho qué había pasao, quizás tamién les habían contao de la pelea y el moñeo, to culpa de la japuta de la Toñi... Como to, amos.

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08/04/2015, 22:06
Mari Cruz Castaño Hita

-Tu abuela es un ángel y no se merece esto. Espero de verdad que se mejore- le sonrió, a ver si así entendía que estaba siendo amable, porque que choni que era la tía, siempre sacando el cuello como los gallos, todo lo entendía para mal –Lo se todo- le lanzó una mirada de rayos X en plan “tu a mi no me la das” –por eso es conveniente que te cuides tu también, tu abuela te necesita- aún tenía que pensar que hacer con la chavala si confirmaba sus sospechas –no te molesto más. Nos vemos- volvió a sonreir y fue a donde su tío.
El Zeki estaba hablando con Carrillo y Mari Cruz se metió –Sí por favor, vosotros os llevais bien. Me hago cargo de que está pasando un muy mal trago y me preocupa. A ver si tu pudieras hacérselo ver- Sonrió entonces a don Faustino, se le rompía el corazón de verlo tan frágil, lo tomó de la mano –Hola tito…- 

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08/04/2015, 22:12
Director

La Naty se fue y Jose Luis se quedó solo. Sin ganas de nada, dándole vueltas a la pelota, se tumbó en la cama, ahora demasiado grande para él solo. Se había quitado pesos de encima, algo era algo. No tenía que preocuparse por si la Naty estaba cabreada, o por si su mujer le fuera a arrancar la polla a trozos por descubrir que la había preñado.

Sin embargo, había cosas que no cuadraban y él seguía dándole vueltas a la mandorla. Así que se puso a buscar. Decían que habían encontrado aquel matarratas en el armario, y miró allí. Efectivamente había un doble fondo que se le había pasado totalmente por alto, abierto en ese momento. Tocó por debajo y vió que daba a los ladrillos de la pared de la casa. Pero algo le hizo fruncir el ceño. Había un ladrillo movido de sitio. Así que lo sacó y salió con facilidad. En el hueco encontró una libreta de aquellas del gusanillo, con hojas a cuadros.

La estuvo examinando un rato y luego la abrió, sentándose en la silla. Era la letra de su mujer, esa con redondeles encima de la i y esas cosas de mujer. Se la había visto cien veces últimamente, con su trabajo de secretaria en el castillo. El documento parecía original, y no era una falsificación. Parecía una especie de diario, o algo así, donde iba anotando ideas y deseos. Como una especie de descargo, hablando allí cosas que no podía hacerlo con nadie en la vida real.

Los primeros días de la llegada al castillo estaban narrados como un trauma. Ella tenía miedo, pero confiaba en su marido. A pesar de ello, se refería a él numerosas veces como "el cabrón del Jose Luis". Unas inquietantes entradas el día de la reunión en el polideportivo que decían "Mi Jose Luis me ha conseguido un buen puesto. Iremos escalando, consiguiendo ser lo que no he podido. Mi madre al final no tenía tanta razón. Él no es un inútil. Es muy buen peón, curra y le respetan. Ese respeto juega a mi favor. Solo tengo que darle lo que quiere en la cama". Sin embargo todo comenzaba a rallar a partir del día que rescató a las chicas en el Casablanca. La entrada decía cosas como: "No solo me pone los cuernos cuando se va con el camión y vuelve oliendo a mujer y sin ganas de follar, si no que rescata a las putas y se las trae al castillo".

Y más allá de eso. Al parecer fue preguntando, extorsionando e incluso amenazando a La Taisha y otras con la expulsión del castillo si no le contaban lo suyo con la Naty. Se enteró. "Hoy he ido a ver a las monjas y me han dicho que algunas personas del castillo tienen ladillas. Me pica, y Jose Luis me ha cambiado el champú. Hijo de puta. Putero de mierda. Creía que no me iba a dar cuenta. Últimamente, cada vez que follamos debo reprimir la náusea, pensar en el legionario para que no se me venga todo abajo. Maldita Kimberly, que se lo ha quedado. Debía ser mío. Pero me vengaré, de ella y de su abuela. Ya le he jodido viva mezclando el agua que bebía con la mierda que sale de los trajes del equipo de limpieza de los toriles. Creo que ha pillado hepatitis. Ojalá se muera. Ojalá se mueran las dos".

En los últimos diez días, las entradas eran inquietantemente brutales. "He comenzado a envenenar a Don Faustino. Jose Luis está cabreado con él, cuestiona sus decisiones. Eso me conviene. Si le voy dando veneno poco a poco, parecerá que el exceso de trabajo le pasa factura. Ahora tenemos una doctora, y debo andarme con cuidado. La cabrona es lista, aunque sea una niña, y se dará cuenta con unos análisis de sangre". La última entrada era del día anterior a su muerte. "Hoy es el día. Le voy a cargar el café con más veneno, aprovechando que han salido a Segovia. Si Dios quiere, me lo cargo. Una vez sea la nueva jefa, echaré a las putas de Baños, para que se las coman los apollardados. Todo va a cambiar a mejor. Ésta gente es blanda, no merece sobrevivir. Hay mucha morralla entre ellos, como Carrillo, como la puta de la Mari Cruz, que va de santa, como la Kimberly, esa puta nini de mierda. Cuando esté al mando esto funcionará como debe. No habrá ni rey, ni guardia civil ni nada. Baños será para los de aquí, nada de forasteros. Les expulsaré. Y cuando comience a racionar la comida a cambio de favores, todos me respetarán. Putos gordos de mierda, comiendo a dos carrillos. No se merecen todas éstas comodidades. Jose Luis no se enterará. No se entera nunca. Es el peón perfecto, siempre pierde el culo por hacer lo que le digo. Me da hasta lástima".

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08/04/2015, 22:35
Faustino Castaño

La miró con una pequeña sonrisa y un apunte de lágrimas en los ojos. Se sentía un poco tonto. Estaba demasiado acostumbrado a la bondad de los niños y los adolescentes del instituto. Por muy malos que dijeran ser, en el fondo tenían un buen corazón. Erróneamente creía que los adultos eran así, y casi lo habían matado al no darse cuenta de que tenía al enemigo justo al lado, sirviéndole café.

-Ey... te veo bien -le dijo- Teniente, ¿No? Hace mucho que hice la mili, pero creo que si. Felicidades.

Tosió un par de veces, mostrándole la condecoración.

-Ya ves, ahora no solo dan éstas cosas a los políticos y los famosos. Caballero de la Órden de Carlos III. No está nada mal.

Sonrió y señaló la silla que tenía al lado de la cama, ahora vacía.

-Siéntate y cuéntame -carraspeó por las toses- Me ha dicho Ezequiel que ha ido todo miel sobre hojuelas.

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08/04/2015, 22:27
Jose Luis Carmona "El cagaprisas"
Sólo para el director

Jose Luis leyó con cara de pasmo, frotándose la cabezota con las manos a cada párrafo. Ese era el diario de una loca, un cúmulo de desvaríos increibles. Todo le daba vueltas. El Cagaprisas estaba flipando como no flipaba desde que dejó los tripis y la ruta del Bakalao. Ni siquiera en el 2002 con la resaca de 60 horas por aquella fiesta de tres días de coca, pólvora, hachis, güisqui y putas en Melilla, le daban tantas vueltas la cabeza. Hasta ese momento flotaba en la incredulidad y la negación. Pero ahí estaban las putas pruebas de que su mujer había perdido la cabeza. El horror. Y delante de sus narices.

Y toda la culpa era suya. Ella había sido la ejecutora de un plan demoníaco, pero sintió que él tenía la culpa de todo y toda la responsabilidad. No era capaz de reconocer a su Toñi en esos papeles. Siempre había sido una marimandona, exigente y cotilla, pero nunca pensó que llegara a desear el poder de esa manera ni mucho menos provocar la muerte de nadie. Recordó cuando quiso buscarle una pistola pequeña para su seguridad y la del Deibi cuando él no estuviera en el castillo. Al menos le quedaba el consuelo de no haberlo hecho. Sonrió por no llorar.

Era todo terriblemente demencial y al mismo tiempo real. Todo había pasado delante suya y no se había dado cuenta de absolutamente nada. ¿Desde cuándo era así? ¿Le odiaba ya antes del fin del mundo? ¿Le soportaba mientras le consiguiera una buena vida, una buena casa y dinero? ¿O todo empezó con el 15 de agosto?

Se sorbía los mocos sentado en el suelo a oscuras, comiéndose la olla. Se palpó los bolsillos y no encontró su petaca. Seguramente estaría en su equipaje, todavía en el despacho. No tenía ganas ni de levantarse a buscar una botella que se hubiera bebido de un tirón. Se encendió un piti y dio una calada profunda ...tú na máh quería lo mejo pa tol mundo, Selui... na máh salvá a tu hijo y a tu Toñi... solo eso... solo hasé lo mejó pah tós, pal pueblo, pa ti, pa la familia... hincá loh cuehno y echahle cojone pa que to funcione, currá currá y currá... y la cagate... lo hah cagao enterico tó, Selui, maldito ioputa que ere... ioputa, cabrón... lah cagao... si solo hubierah hecho lah cosa bien, como debe sé, Jose... hah currao demasiao y pasao poco tiempo en casa, Selui...

Siguió fumando despacio ...ahora te toca apechugá, Selui... te toca cargá con toa la mierda... limpiá el nombre de la Toñi, de tu familia, tu prorpio nombre, Selui... avergonzarte delante tol pueblo... nandie va a volvé a confiá en ti... y to porque no ehtaba en lo que tenía que ehtá... no ehtaba aquí y ha pasao to ehto por no tené losojo abierto y pararle la mano a la Toñi...

Se acordó de don Faustino ...pobre hombre, qué hija de la gran puta la Toñi... eso no se hase, coño... si tiene poblema conmigo, Toñi, lo habla conmigo, no le pone matarrata al alcalde... pero qué hija de la gran puta, Toñi, me cagontuhmuehto entero... Releyó las notas de los últimos días y alucinó por lo calculado que estaba todo ...Toñi, tu puta madre ¿tú cuantoh episodioh de CSI tah vihto, iaputa?... ¿pero qué cojone quería tú con to ehto? ¿la reina de Bañoh o qué? ¿y pa qué?

Con razón o sin ella se culpaba de provocarlo, de no verlo y de no estar en Baños cuando debía estar. Jose Luis Carmona es el que está donde debe estar, el que todo lo sabe y el que todo lo puede, el que cuando tú vas él ya está de vuelta, pero su propia mujer se la había cruzado en su propia cara. Ni siquiera pensó que aunque fuera un hijo de puta y un putero, la mano asesina no era la suya. No pensó que la Toñi debía ser responsable de sus propios actos.

Jose Luis solo quería hacer las cosas bien y lo había estropeado todo.

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08/04/2015, 23:23
Mari Cruz Castaño Hita

Tomó asiento – sí, sí- asintió quitándole importancia a lo del rango. Toqueteó el collar en el estuche –es la más chula de las que nos dieron, siempre me cayó bien Carlos III- se rio, ellos tenían esos chascarrillos históricos, hablando de personajes del pasado como si fueran el vecino de enfrente –Había por allí un retrato con el ropón de la orden, habrá que hacerte uno- hubo una pausa, suspiró, no le miró directamente pero era obvio lo que estaba pensando “Te lo dije”. No quería decírselo, esas cosas sentaban regular, tampoco creía que hiciera falta, ya lo sabría.
-Bueno… no se, un honor y todo eso, la familia real es verdaderamente impresionante, gente interesante, pero… politiqueo, disciplina… no hubo tiempo de saborearlo- le acarició la mejilla risueña –están deseando conocerte sabes? El rey insistió y el general  Fontenla también, por lo visto es un apasionado de la historia. Seguro que tú le sacarás mucha chicha a la estancia- apoyó el brazo izquierdo en la camilla adoptando una pose relajada –Anda que… no puedo dejarte solo, me voy unas horas y la lías-  quería estar alegre, animarle, pero con la broma se le rompió la voz –lo siento tito, lo siento,… debiste ir tú y no yo, yo… no pintaba nada allí tenía que haberme quedado y…- boqueaba –nada de esto hubiera pasado- sorbió con la nariz –tito… yo te quiero mucho… y no quiero que te pase nada, es culpa mía- otra vez lagrimones.
Ver para creer, Mari Cruz convertida en una sensiblona

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09/04/2015, 01:08
Faustino Castaño

El tito le cogió la mano cuando la vió llorar, sonriendo despacio. Ay, la Mari Cruz. Recordaba una vez que estaban en la playa, en Roquetas de Mar, cuando era una niña, y se tiró al agua en un sitio donde apenas cubría, pegándose un costalazo del copón. Que panzada de llorar, la pobre, y sus padres que se habían ido a comprar al super. La tuvo que recoger del agua en brazos y llevarla a donde estaban los de la cruz roja para que se quedara tranquila.

Es curioso como para los ojos de alguien que ha visto crecer a una persona desde que era un bebé, daba igual el tiempo transcurrido. Siempre se acordaban de cuando eran niños, como si ese fuera un momento que definiera o marcara sus vidas, mucho más que la edad adulta. También contribuía que él era un poco sentimental, la verdad sea dicha.

-No llores, anda. No pasa nada -negó- Mira...

Le dió algunas razones para que dejara de mortificarse.

-Nunca se sabe como van a venir los palos de la baraja. Habéis conseguido algo que quizá yo no habría podido por ser una persona civil, por no gozar del patrocinio del García. Así que no digas que debía haber ido yo. Lo importante es que se ha hecho y ha salido fenomenal.

Dió un tiento al agua, que le sabía a gloria bendita.

-Tu tía dice que soy un cabezota, pero a veces, cuando uno lo es y tiene razón. Ay, que gusto. Eso lo compensa.

Se señaló, tosiendo una vez más.

-No te preocupes. La doctora dice que en un par de días ya no tendré más veneno en la sangre. Ya mismo estaré dando por saco otra vez, y te calentaré la cabeza con ideas peregrinas.

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09/04/2015, 01:19
Er Zeky

Todo aquello estaba siendo emotivo que te cagas. Ver a la Mari Crú llorar era como el puto cuento ese del Daví y el Goliat. Acababa de ver caer a un gigante, asín que parecía de piedra, pero que en el fondo tiene sentido y sensibilidad...Eso me hace verla con otros ojos. La Mari Crú también era capaz de hacerse una bajada de pantalones, no literal claro, y mostrar que no era un témpano cual cubito en un copazo.

- Bueno...Iguah...Creo que voy yendo pal Cagaprisah, a veh que mencuentro...Oh dejo aquí en vuehtra cosilla familiah...- digo. La Fulgencia estaba sopa, asin que ya vendrí a verla luego. No era cuestión de despertarla a la mujer, ya había ocasión.

Dicho esto, me levanto.

- Bueno, don Fauhtino...Fuersa y a dar guerra en na y menoh...- asiento, tendiéndole de nuevo la mano.

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09/04/2015, 01:27
Francisco Javier Aceituno "El Tatu"

Cuando bajó las escaleras, se encontró con la mole del Tatu. Le dejó pasar con una sonrisa y un comentario que le dió que pensar.

-Eh, a ver cuando nos tomamos unas cerves.

Le señaló con el dedo, gracioso. Su fama de tío de puta madre estaba cruzando fronteras. El Zeky, tío de fiar. Quien le había visto y quien le veía ahora.

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09/04/2015, 01:30
Déme Sadji

Con éstas reflexiones, se encaminó hacia la puerta de la casa del Cagaprisas. Vivía en la segunda planta de una buena casa, de las mejor construidas. Su casa tenía más chorraditas y comodidades que la del resto de personas, pero es que las había traído e instalado él mismo. No era nada de favoritismos ni nada así.

Le sorprendió encontrarse con el negrazo encaminándose al mismo sitio. De hecho se cruzaron en la puerta de la planta baja. Llevaba una caja de cervezas alcázar, de las de tercio de litro.

-Eh, campeón. ¿Que vienes, a ver al capitán también? Voy a darle mis respetos. Imagino que estará pocho, y ahí tenemos que estar los colegas.

Era curioso que él se dijera a si mismo colega de puta madre del Cagaprisas. Hace días se estaban dando de hostias. Y ahora le traía birras para que ahogara sus penas.

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09/04/2015, 02:39
Mari Cruz Castaño Hita

Que vergüenza, delante de todo el mundo, pero es que había sido todo tan de seguido, venía rumiando lo de Quique y el susto de lo del Cagaprisas… la tensión por algún lado tenía que salir. Sacó el pañuelo de Vílchez (de esos que regalan las madres con las iniciales bordadas), el que le ofreció en el salón del trono, y se secó las mejillas, esta vez no había maquillaje que corriera riesgo de arruinarse –Ays… tengo que lavarlo- la vez anterior lo manchó de rimmel. Acarició la tela con el pulgar –que… en Segovia también se me escapó la lagrimilla…-
El Zequi se despidió con tacto.
-Tendría que haberle visto allí, estarías muy orgulloso. Cuando hablaron él y Jose Luis me di cuenta de lo grande que es esto, el plan…- volvió a sonreir –tienes que ir, en serio, yo ya hice lo más difícil. Ahora entre tú y ese Fontenla seguro que adaptáis el plan para las distintas zonas del país. Un republicano en la corte del rey de España, jaja!- apoyó la mejilla en los nudillos, suspiró, tenía que decírselo –por cierto… ejem, esto…- bailó los ojos –a ver como te lo digo… hubo que tomar medidas para prevenir problemas de aplicación…- echó esa mirada de reojillo infantil, respiró hondo “Precaución Mari…” –temporalmente… se han suspendido las competencias del poder ejecutivo… em… ahora eres alcaide y no alcalde…- parpadeó “El plan Baños y la vuelta al feudalismo” o “El Plan Baños y el fin de democracia: tesis doctoral, que fuerte… atenta a ver si le da un vahído”

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09/04/2015, 03:11
Faustino Castaño

Escuchó lo que le decía y pensó en la oferta. Arreglada aquella crisis, Baños estaría bien. Al menos hasta que llegara lo más crudo del invierno. No era mala idea ir allí, a la "capital", y trabajar con los mejores en algo más a gran escala. De hecho era su sueño mojado. Baños solo había sido el principio, o así lo veía él.

-He leído algo de él -confesó- Cosas que escribió sobre la División Azul. Que curioso, no sabía que fuera un general.

Respiró hondo y parpadeó.

-Sí, tendría que ir. Pero antes quiero dejarlo todo bien dispuesto aquí. Preparar la llegada del invierno. Si el invierno me pilla en Segovia no podré volver en globo. Y por carretera, va a estar chungo.

La miró cuando dijo aquello último, tosió un par de veces y abrió los ojos. Pero ponerse de mala leche no le sentaba bien en su estado, así que se abrió un poco más el gotero y respiró hondo haciendo acopio de todo su zen.

-Bueno... -dijo, al final- Al menos ya no nos gobierna Zapatero. Mientras sea transitorio y haya alcaldías por elección, me parece bien suprimir toda esa fórmula de gobierno elefantíasica de ministerios, comunidades autónomas y diputaciones. Pero ya sabes que éstos le pillan el gustillo a la dictadura apenas te descuidas.

Parpadeó y la miró con un apunte de sonrisa.

-Más razones para ir allí y ponerse en plan mosca cojonera.

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09/04/2015, 03:36
Mari Cruz Castaño Hita

-Esa es la actitud!- le dijo divertida, acababa de proporcionarle la gasolina necesaria para recuperarse en cero coma “Genio y figura” –pero… no te flipes ¿Eh? Que nos conocemos, te recuerdo las peloteras que tuvimos al principio porque te pasabas de rosca- hablaba medio en serio medio en broma, a veces había que atarlo en corto. Se inclinó al levantarse de la silla y le ametralló unos cuantos besos en la mejilla –Bueno… no hay descanso para los jefes, tengo un montón de cosas pendientes. No te preocupes, el tatu está en las escaleras para lo que necesites, sin pasarte que te conozco- le guiñó un ojo –vuelvo al lío, te quiero. Hasta luego-

Buscó a la doctora a ver que tenía que decirle 

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09/04/2015, 03:40
Director

La picoleta se fue y la dejó a solas con la yaya. Había escuchado algo del Tatu. Paco estaba allí, al pie de las escaleras, montando guardia. La abuela se meneó de la cama y medio se despertó, pidiendo que la ayudara a levantarse para ir a mear.

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09/04/2015, 03:42
Director

La doctora había terminado de atender al paciente de la gastroenteritis, y al verla bajar dejó dicho a las enfermeras que la buscaran en la zona comedor si pasaba algo importante. Dicho ésto, se acercó a ella y compuso una breve sonrisa de circunstancias. Estaba un poco nerviosa. Acojonada era la palabra exacta.

-Vamos a tomarnos algo. Yo la invito. Hay algo importante que quiero decirle.

Era curioso eso de "invitar", por que ya no usaban monedas ni billetes. Intrigada, la acompañó afuera. No había que andar mucho para llegar a la zona del comedor y las mesas. Lo que si atrajo su atención fue ver a su padre trabajando con un par de albañiles, arreglando algo en el pie de unas torres, las más dañada, que no habían usado hasta entonces por miedo a no sobrecargar las viejas piedras. Había un cartel pintado que tenían que colocar en el dintel. Pero ya habían instalado unas neveras de bar, una pequeña "cocina" que iba con butano y la barra. En realidad, lo habían montado en un plis plas por que lo habían sacado de uno de los bares del pueblo. Se lo habían traído ya montado. Le hizo gracia. Su padre no podía estar sin montar un bar. Pero no era mala idea, por que así tenían un sitio donde picar aquellos que no llegaban a tiempo para la comilona general, los que estaban descansando y los que no tenían nada que hacer ese día. Una red social 1.0 con su futbolín (había un futbolín allí, ni idea de como había entrado por la puerta) y sus dardos en la diana. Nada que requiriera mucha tecnología.

Su padre paró un momento. Estaban echando cemento a las grietas para asegurar la estructura de la torre y prevenir que se siguiera rajando. Lo reforzaban con unas varillas de metal. La vieja torre volvería a tener uso, y ahora se llamaría "Bar Andalucía". Con dos cojones. ¿Para que poner un nombre más complicado que ese? En un par de días más estaría funcionando. Menudo era el papa para montar bares. El del Zaidín lo tenía operando en una semana, y eso que hubo que meter obra y todo, haciendo los suelos nuevos e instalando los sanitarios.

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09/04/2015, 03:55
Paco Miguel Castaño

Se limpiaba las manos con un trapo. Había una mesa colocada y las otras estaban apiladas. La mesa colocada era para un piscolabis que se habían tomado los currantes hacía un rato para recompensar su esfuerzo. Aquello ya era un auténtico pueblo español. Tenía alcalde, guardia civil y bar. Las tres cosas necesarias para el establecimiento de la civilización moderna.

-Bueno, no hemos inaugurado oficialmente, pero las neveras están funcionando y tengo unas sin metidas ahí desde hace un ratico. Eso y coca cola. Lo que más os apetezca.