Partida Rol por web

Harper se sentó en un sillón del centro de mando, se estiró y se puso cómodo antes de responder a Jun.

Es muy sencillo, obedezco. El Coronel nos sacó de Serenity Valley, nos guió en nuestras operaciones haciendo que nuestra unidad fuera la que menos perdidas sufría y mejores resultados obtenía. Su mirada decía algo así como "es evidente, muchacha". Confío ciegamente en él. Si me dice "pon a salvo a estos" lo hago sin preguntar.

El tono final de la frase dejaba claro, que no os rescataba por gusto y os ayudaba por vuestra bonita apariencia. Era un soldado y cumplía ordenes.

El viejo dijo que "Bloody-Donny", perdón, Donald Vanyard... Le llamábamos así en las trincheras. Se excusó con una sonrisa mordaz. Dijo que el Coronel Vanyard os mandó a ayudarle y que por lo tanto debíamos trataros como si fueráis de los nuestros.

Miró a Spencer y Kovacs.

Hasta donde sé, el plan es manteneros a salvo hasta que la cosa se estabilice. Dijo encogiéndose de hombros. -Los Feds no quieren realmente problemas y los chicos de Union Law, los mercenarios policiales, tampoco. Todos han visto ya demasiada guerra. En cuanto se vayan los tipos de Blue Sun, seguramente, se reestablecerá el orden y os escoltaremos de vuelta a vuestra nave.

En un momento dado, un hombre de unos cincuenta años, gordo y lleno de cicatrices se acercó a Harper y le pasó un papel.

Vuestro pequeño amigo ha aparecido, lo encontraron inconsciente en los jardines cerca de las oficinas del gobierno. Os enseña el papel, es un informe de transcipción. Dice esencialmente eso y que está con la familia Cartwright. Las Cartwright son unas chicas que nos ayudan, el padre murió en Serenity Valley y la Señora Milly y sus hijas han cooperado con nosotros desde entonces.

- Un placer Teniente Harper - digo estrechándole la mano.

Estudio meticulosamente el recinto rebelde cuando entramos. Es deficiente, un cuchitril sin posibilidades y una ratonera táctica; pero se nota que lo han ido labrando con cierto mimo. Es eternecedor, pero la melancolía y la ilusión no ganan batallas.

Teniente Harper: ... una de ellas era Beth y la otra creo que Miranda.

Estaba paseando y me giro lentamente entrecerrando los ojos. 

- Así que ¿pueden espiar sus comunicaciones?

Bill y Jun se muestran suspicaces. Buenos chicos. La desconfianza en los buenos samaritanos es esencial para sobrevivir.

Bill: ¿Formaremos una resistencia para acabar con Blouse?

Me cruzo de brazos.
- Tenemos una misión, que es joder a ese bastardo de la forma más imaginativa posible. - No seremos una gran milicia, ni siquiera unos delincuentes eficientes, y distamos mucho de ser un grupo cohesionado... peros sabemos dar por culo. 

Me sirvo un vaso de agua y levanto el vaso para evaluar la turbidez del agua antes de beber.

- Ese Coronel que les salvó el culo... ¿se refiere a Donny "Big-Heart" Vanyard ? - digo sin mirarle y degustando el agua fresca.

Teniente Harper: En cuanto se vayan los tipos de Blue Sun, seguramente, se reestablecerá el orden y os escoltaremos de vuelta a vuestra nave.

Me giro con gesto confuso - ¿Qué han venido a hacer aquí Blue Sun? 

Las noticias de que el joven Russel estaba seguro tranquilizarían a los demás. Sin embargo no saber quien lo había dejado inconsciente y lo había llevado hasta allí me ponía nervioso a mi.

Permanezco en silencio, escuchando a Harper conversando con el capitán, mientras jugueteo con la pieza oxidada de Aria, pasándomela entre los dedos con rapidez. La pregunta de mayor importancia ya la había hecho Kaine. ¿Qué diablos hacía Blue Sun en Pallas?

Levanté entonces la mirada hacia el hombre del coronel Dumphy, guardándome la pieza en un bolsillo y dirigiendo una mirada extrañada tanto a Harper como a los miembros de la tripulación.

-Señor, ¿ha dicho que encontraron a nuestro compañero inconsciente cerca de las oficinas del gobierno? -pregunté, incapaz de creerlo. Me volví hacia Jun y Kovacs, extrañado-. ¿Qué podría buscando Aria acercándose a las oficinas del gobierno?

Se refiere a Dumphy

Harper: El viejo dijo que "Bloody-Donny", perdón, Donald Vanyard... Le llamábamos así en las trincheras. Dijo que el Coronel Vanyard os mandó a ayudarle y que por lo tanto debíamos trataros como si fueráis de los nuestros. 

 ¿"Coronel Vanyard"? Alzo la cabeza, sorprendida. ¿Donny era un Casaca marrón? El Capitán debe haber deducido lo mismo que yo, pues no tarda en expresar su pregunta con cierta indiferencia.

Kaine: Ese Coronel que les salvó el culo... ¿se refiere a Donny "Big-Heart" Vanyard ?

Todo esto tiene cada vez menos sentido... o más. Quizás Donny era de por aquí. Quizás fue uno de los perjudicados por la llegada de la Alianza, de Blouse y de los especuladores.  

Spencer: ¿Qué podría buscando Aria acercándose a las oficinas del gobierno?

Me retiro un mechón de cabello oscuro de la frente, arrugando el ceño.

-No lo sé... ¿quizás estaba siguiendo a alguien? -Sin embargo, que le hayan encontrado me alivia profundamente. Mientras esté bien y a salvo en esa casa, me vale. Mejor escondido y a salvo, que en mitad de este berenjenal en el que nos hemos metido el resto.

Tomo asiento lentamente, cruzándome de brazos.

-¿Qué sabe de Kim "Sugar" Il, señor Harper? -Murmuro, empezando a comprender por qué Dony querría quitarse de encima a Sugar. O viceversa.

La información que les proporcionó Harper pudo tranquilizarlo un poco. No se estaban preparando para una rebelión que terminaría antes de empezar, solo iban a esconderse y capear el temporal hasta que fuera seguro salir de nuevo. Pero una vez los de Blue Sun se marcharan, ¿Qué garantizaba que Blouse liberaría a Dumohy y al resto de magnates de Pallas?

Claro que una vez pudieran regresar a la nave, aquello sería problema de otros, salvo por el tema de que habrían fallado en su misión de ayudar a Big-Heart... pero si lo que les había dicho Jun era cierto, y era el propio Sugar el que quería deshacerse de su mano derecha... ¿Qué camino tomar? El capitán parecía empeñado en continuar con el primer encargo, pero ahora que no contaba con el factor sorpresa, ¿Qué opciones les quedaban?

La siguiente noticia fue aun más buena. Aria había aparecido, y estaba a salvo, dentro de lo que cabe. No había congeniando demasiado con el muchacho, pero seguía siendo un miembro de la Constanze como los demás. Ya solo faltaba averiguar que había sido de su piloto. No les era imprescindible para hacer volar la nave pero ningún otro de ellos tenía su habilidad a los mandos, y, a pesar de ser algo pendenciero, a David le caía bien.

En lo que todos parecían de acuerdo, era en que se había acabado lo de ir a ciegas. Tenían que averiguar todo lo posible para no volver a cometer otro error, uno que esta vez podría resultar fatal - Si pueden escuchar las comunicaciones de los hombres de Blouse, ¿Han oído algo sobre el compañero que nos falta? Decidió quedarse en la nave, quizás hayan hablado de él en alguna conversación.

Harper suspiró, siguió comodamente en su sitio.

No exactamente. Tenemos a alguien que hace eso, no aquí en Pallas. Dijo mirando al techo. Ese tipo dice que todas las señales van a algún sitio y que el puede ir a todas partes, no se puede detener la señal.

Indicaba claramente que no era su gente, si no colaboradores.

Respecto a Blue Sun, por lo que sabemos tienen tratos con Blouse. Sacó unas fotos, se veían cajas marcadas a nombre de Blouse Enterprises. Y eso nos lleva al amigo "Sugar", sabemos que es un proveedor del gobierno, Vanyard hace de intermediario para él, vendiéndole nuestro opio para sus empresas farmacéuticas.

Respecto a la última pregunta.

Tenemos uno de nuestros muchachos guardando el espacio-puerto, su amigo está bien. Miro a Jun y al Capitán Kaine. No es él quién nos preocupa. Buscan a una joven asiática y a un supuesto millonario.

No, no busco asi, busco rastros, seguramente si desarmaste una pieza que tiene monton de combustible, gotea, entonces, busco un rastro, no busco en piezas. 

Dime si encuentro o no el rastro. 14 para buscar en el pasillo siguiente a la sala de maquinas.

Si lo encontre, dime adonde lleva el rastro.

 Buscan a una joven asiática y a un supuesto millonario.

Suspiro, dejando caer los hombros, y frunzo el ceño durante unos instantes.

-¿Y si me entregara? -Murmuro- ¿Qué es lo peor que podría pasarme? Podría tratar de aclarar este malentendido. Que Blouse sepa, soy una Acompañante con guardaespaldas, ¿qué hay de malo en eso? No es tan extraño.

Quizá si me dejo ver por la calle, me encuentren y me lleven ante Blouse. Quizá así podríamos saber dónde se oculta, o averiguar algo más. No es descabellado.

-No se atreverá a tocar a una Acompañante registrada, y menos una persona que hace tantos usos de nuestro servicio -resuelvo, sin saber si trato de convencerles a ellos o a mí-. Y podría llevar algún tipo de rastreador o localizador, para que podáis encontrar... no sé, la guarida secreta de Blouse o algo así.

Incluso podrían aprovechar y tratar de robar el banco mientras está distraído conmigo. 

Así que Faraday estaba a sus anchas, después de todo. Como siempre. O había conseguido despistar a los de Blouse, o al final estos habían pasado de la Constanze. Bien por él, en cualquier caso, pero eso solo hacía su problema un pelín más pequeño.

Jun se ofreció a entregarse, para ver si conseguía averiguar algo más al precio de ponerse en el punto de mira, pero David no lo tenía tan claro. Aunque no había comentado nada al respecto aún, porque no quería ese pensamiento en su mente, todavía recordaba lo que Harper les había dicho cuando había ido a recogerlos.

- No creo que entregarse sea muy buena idea - le respondió a la Acompañante - Si lo que dijo el teniente es cierto, y el hombre que... maté, era su hijo adoptivo, entonces estará fuera de sí. Viendo como estamos, dudo que sea de los que saben controlarse si ve que puede conseguir lo que quiere de la forma que sea - y en aquellos momentos, sería venganza por el hombre que él había asesinado - Incluso con un salvoconducto como el suyo - dijo, preocupado.

- Sabe que está involucrada en algo en su contra, y que eso ha llevado a la muerte de un ser querido. Si ya se ha servido de Acompañantes en actividades ilegales sin que se entere el Gremio... ¿Cuanto cree que le costaría hacer desaparecer a una en su propia luna? - vista la desproporcionada respuesta que había desplegado para darles caza, estaba claro que lo de ir con discreción no era algo que le importase, así que debía de tener algún buen plan para cubrirse las espaldas luego frente a todo el mundo - Si además la descubren con un rastreador o otro dispositivo... Por no hablar de que luego tendríamos que rescatarla - lo que se volvería mucho más difícil si hacían cualquier movimiento mientras tanto - No, - finalizó, esperando que aquello la hiciera cambiar de idea - si alguien se entrega... debería ser yo.

-No entregamos a los nuestros -le espeté a Vasilis, con dureza-. Eres nuestra compañera y no vamos a dejar que Blouse te ponga una mano encima. Si fuera entregar a Stark, quizá me lo pensaría. -Señalé con la cabeza a la mortífera y silenciosa mujer, que llevaba ya callada un buen rato-. Ese tipejo ya ha resultado ser más peligroso de lo que nos esperábamos y si ya ha puesto todo Pallas patas arriba por la muerte de su hijo adoptivo, imagínate lo que te hará si te encuentra. Es lo suficientemente rico como para creerse por encima de todo, incluyendo el Gremio de Acompañantes. Así que no, vamos a dejar que te entregues, Jun.

Suspiré al escuchar las palabras de David. Definitivamente, ese era el día de los planes heroicos que implicaban sacrificios.

-Tú tampoco deberías entregarte, Kovacs -indiqué, convencido-. Hemos perdido a Russel, Faraday sigue en la Constanze... Apenas somos cinco. Si te entregas, estaríamos perdiendo a alguien que podría hacer mucho bien a la causa. Tal vez lo que debamos hacer es seguir con lo planeado: hemos venido a Pallas para fastidiar bien a ese Blouse, ¿no? Pues entonces fastidiémoslo. Puede que en estos momentos tenga vigilancia por toda Pallas, lo que implicaría que quizá ya no tenga tan vigilado ese banco. Ahora mismo, lo que menos podría esperarse Blouse es que alguien fuese a robar en su banco. O incluso podríamos crear una distracción, haciéndole creer que va tras la pista de Jun mientras nos encargamos de robar las escrituras que hay en ese banco. Pero todo buen golpe necesita un buen plan. Capitán, ¿usted qué opina?

Teniente Harper: Ese tipo dice que todas las señales van a algún sitio y que el puede ir a todas partes, no se puede detener la señal.

Alzo una ceja mientras me mantengo impasible con los brazos cruzados. Sé a quién se refiere, pero no creo que haya motivo para desplegar aquí conocimientos innecesarios. 

- Entiendo, una fuente externa les informa, pero no tiene forma de comunicarse con el exterior. Por tanto no tenemos forma alguna de contactar con nuestro patrocinador (Sugar ) ni con el hombre que nos encomendó el trabajo (Donny).

Me giro ligeramente hacia Harper con una sonrisa sincera. Aquel tipo estaba dándonos gran cantidad de información sin pedir nada a cambio, aunque aún debía saber mucho más para no dar más pasos en falso. - ¿Tienen idea de porque buscan a una joven asiática y a un supuesto millonario?

Tanto Spencer como Kovacs parecen declinar la oferta de madame Vasilis de entregarse a Blouse. Sin duda motivados por sentimientos de idealismo y compañerismo. Afirmo con la cabeza confirmando que estoy de acuerdo con ellos. No es que me importe lo más mínimo lo que le pase a nuestra preciosa y joven diplomática; simplemente creo que si la atrapan no podremos tener contacto y estoy seguro de que la torturarán para exprimirle toda la información como si fuese una naranja. Y no podemos permitirnos ese lujo. - Es usted muy valiente, pero coincido con los demás. No creo que entregar a Kovacs o a Jun nos fuese a dar ningún beneficio táctico. Es mejor reservarse esa carta si nos vemos apurados.

Spencer: Ahora mismo, lo que menos podría esperarse Blouse es que alguien fuese a robar en su banco. O incluso podríamos crear una distracción, haciéndole creer que va tras la pista de Jun mientras nos encargamos de robar las escrituras que hay en ese banco. Pero todo buen golpe necesita un buen plan. Capitán, ¿usted qué opina?

Inspiro profundamente y soplo con resignación. Luego le miro y afirmo lentamente, dejando ver que estoy de acuerdo con la opinión del joven.

- Sin noticias de nuestros superiores (estén realmente enfrentados o no), lo único que podemos es aferrarnos al plan establecido. Si eso acaba jodiendo a Sugar me importa bien poco, que no nos hubiese presentado a Donny como su lugarteniente.

Así que nuestro objeto sigue siendo el mismo. Sin embargo... - digo separando los brazos y acariciándome el mentón - seguimos sin  tener información "util" sobre el banco, sobre Blouse y sus horarios, sobre su seguridad, sobre los planos del banco... - niego con la cabeza y cierro los ojos - sin esa información cualquier plan sería improvisar un suicidio. 

A menos que... - me giro con media sonrisa hacia Harper.

El olor a combustible impregna los pasillos que rodean la sala de maquinas y el suelo enrejado, ya de por sí lleno de manchas de grasa, no permite disntinguir rastros.

Harper se encogió de hombros, el no dijo que su contacto no pudiese, solo que él no podía, aunque eso incluya la posibilidad de que el contacto no quiera tampoco.

A la acompañante, la acusan de intento de asesinato. Dijo con voz pesada y despreocupada. Al joven millonario nadie lo busca oficialmente, pero extraoficialmente alguien está intrigado porque un misterioso ricachón venga a la luna más perdida del verso, exigiendo ver al director... Que curiosamente es la víctima del intento de atentado.

Se levantó y se encaminó hacía el pasillo interior, hacía una puerta que parecía ocultar unas letrinas.

Creo, Capitán, que no tiene muy claro el nivel de riesgo de la situación actual.  Dijo sin girarse mientras accedía a aquel lugar para deposiciones sólidas y líquidas. De todas formas... Ahora mismo no puedo acceder a esa información... Deberían ponerse cómodos, esto llevará unas horas.