Partida Rol por web

No pude ver mucho y no iba a funcionar el acercarme con disimulo por siempre, además de que tenía que ser más cuidadosa con las posiciones de todos al querer mirar, pero aun así iba a seguir buscando pistas. Ayer comenté que podría ayudar en el taller, al terminar con Isra iré a revisar que puedo hacer. Dejé la alarma encendida para las dos irme y encontrar a mi amigo.

Estoy ansiosa, y nerviosa. Me da miedo lo que pueda descubrir. Pero estoy dispuesta a obtener la información, y a todo con tal de salvar a mi hermano. Además, extrañé mucho a Isra. Me muero por volverlo a ver.

Me llamó la atención que mirara el periódico en línea, pero pudo ser solo por entretenimiento. Aun así, tomé nota mental de ver lo que se había publicado hoy.

– ¡Claro! – le comenté a la señora Crane, feliz de ayudar. Miré al baño. –  Creo que también puedo corregir la limpieza de Alyssa al terminar. – si pudiera, creo que la ayudaría a hacer eso antes, pero las habitaciones deben quedar rápido. Al menos le ahorraré eso a la señora Crane.

Tras saludar a ambos policías, y aprovechando su conexión con Daniel al conocerlo desde el instituto, Killian acabó por acercarse a él para hablar un poco en privado. Bueno, tan en privado como se podía ahí en medio de la recepción, donde también estaban tú, Lennox y la policía que los había atendido.

Mark, ¿te molesto un segundo? - dijo el rubio, acercándose a ti ahora que los otros dos estaban ocupados. Tampoco parecía preocuparle mucho que alguien más escuchara, pero mantuvo el tono bajo para un poco más de privacidad - Mira, no es por meterles presión... pero de verdad necesito la declaración de AJ por el tiroteo. Charlotte dijo que la traería ayer, y no se apareció, y me están presionando de arriba. Sé que no tienen nada de culpa de lo que les pasó, y que son las víctimas en todo esto, pero tengo que llevarles algo, ¿sabes?

Kieran se acerco y yo le mire tranquilamente, ante sus palabras asenti quedamente. - Claro. ¿Que ocurre?

Escuche a Kieran sus palabras provocaban que un destello de recuerdo viniera a mi cabeza. Dapper hizo entrar a AJ en la capilla para que firmara papeleo y eso, solo podia ser cosa de Charlotte. - Charlotte esta ahora mismo de gira haciendo trabajo pero... - Cogi el movil y le mande un mensaje a mi prima, sin importarme que Kieran lo viera. - Si la veo o veo los papeles, me asegurare de que alguien te los traiga.

¿Todo bien? - Mire a mi alrededor, hablando obviamente tanto de la policia como de cualquier otra cosa.

Mire de reojo un instante en direccion a Killian para volver al rostro de Kieran.

Jesse acompañó a su padre con una sonrisa divertida, y es que a pesar de lo caótico de la situación, de lo cansado que estaba por los acontecimientos, y de que le daba mucha pereza haberse levantado del sofá, siempre estaba bien fastidiar un poco al viejo.

-No creo que eso sea bueno para un hombre de tu edad.- Apuntó Jesse sobre la cama improvisada mientras se ponía cómodo en su silla.

Jesse le dedicó una sonrisilla socarrona y se comenzó a balancear sobre las patas traseras de la silla, esperando a captar la atención de su padre, solo entonces habló.

-Tenía que informarte de varias cosas que no se si sabes.- Dijo limpiándose las legañas con algo de pereza.- La chica morena que os enseñé ayer, de la que tenía la foto el mocoso de AJ, resulta que es la hija de Mad, me dijo que ya estabas al tanto de su existencia, pero no se si sabías que era ella. He mandado a Maddie para que hable con el chico a ver si sonsaca porqué la tenía Jack.- Dijo haciendo una pequeña pausa.- No le he dicho quien es, obviamente.- Añadió con cierta desgana, pues le daba algo de pereza el tema.- Eso nos lleva a que cuando he hablado con Maddie, me ha dicho que Jack vio a los del tiroteo rondando fuera de su casa, parece que AJ podría tener relación con ellos, podría haber hecho algo para sacar a su hijo de un lio más gordo del que creía...- Dijo Jesse bastante más serio, incluso se detuvo en su balanceo.- Parece que Jack mató a otro chico...

Una vez en su sala privada, Mad se estiró como un gato. Normalmente era muy activa, pero llevaba un par de noches durmiendo demasiado poco y la perspectiva de no tener nada que hacer tampoco ayudaba a quitarle la idea de dormir un poco más de la cabeza. 

Se acomodó en el sofá y se hizo un ovillito. Empezó a ojear el móvil un poco aleatoriamente, para ir cogiendo el sueño otra vez. Se había despejado con el café, pero confiaba en volver a dormirse sin mucho problema. 

No podía evitar sonreír con cariño a Arnold porque realmente era un amor de hombre, podría haber elegido el bufete que me diera la gana, con casos mejores, sueldos increíbles y mil cosas más pero sin duda en ninguno hubiera encontrado a nadie como el .

- Muchas gracias, intentaré descansar y despejar la mente, pero deja listos esos papeles y los llevaré a la fiscalía, iré seguro - Pues necesitaba ver a Michael y de paso conseguir el papel del fiscal para dejar fuera a Chris, ese era el primer paso, Libertad preventiva, bajo fianza o lo que fuera. Después ya si había otro juicio ya sería otra historia, pero el primer paso era sacarlo, abrazarlo fuera de prision, tenerlo en casa y eso solo podía firmarmelo el fiscal.

Me levante y suspire - Ire a ver lo de Daniel y después ya oficialmente me cogeré esos días pero si me necesitas no dudes en llamarme ¿vale? - Volví a sonreírle suavemente y apreté los labios antes de mirarlo por si quería algo más y si no irme ya al despacho.

Te los doy ahora - dijo, dejando de apoyarse en el escritorio para ponerse de pie otra vez e ir hacia una estantería, donde unos archivadores esperaban. Tras tomarlos, te los entregó - Con que los entregues en fiscalía basta. Los van a estar esperando. - te sonrió, para que no te preocuparas de tener que presentar otro caso o lo que fuera.

Cualquier cosa que necesite, te llamo. Y tú harás lo mismo. - su sonrisa se amplió. No era una pregunta, sino más bien un trato. Sin embargo, dicho esto y dando el trato por cerrado sin esperar intervención, se giró para volver a su escritorio, dejándote marchar a ti también.

Cuando saliste, Junior seguía metido en el móvil, esperando. No parecía haberte visto de momento, así que probablemente se estaría tomando lo de escolta con un poco más de relajo que tu padre, que ya se habría montado ahí una base militar y tendría reconocido a todo aquel que cruzara el pasillo.

- Genial - Le dije siguiéndolo con la mirada y cogiendo los archivos. Claro que con la orden que vino después solo pude sonreír y asentirle antes de salir del despacho. 

Al caminar hacia el mío mire a Junior y mi sonrisa se amplió, entre y apoye los archivos en la mesa - Recojo unos papeles y ya nos vamos - Informe antes de abrir unos archivadores y coger varios documentos y formularios metiéndolos en una carpeta, después guarde todo en mi porta folios, incluido lo de Arnold y ya me colgué del hombro las cosas mandando unos mensaje para salir - Lista - Aún tocaba un viaje en coche a la prisión y ver qué ocurría en las visitas.

Claro que al llegar al coche ya le había dado mucho margen y como había camino por delante mire a Junior humedeciendome los labios - Cuentame que te pasa anda, si tú me escuchaste y consolaste en la cocina de mis padres yo puedo escucharte en su coche - Porque mi bebé seguía en manos de Novak.

Negue con la cabeza levemente, dando a entender que no habia nada que agradecer. Hoy por ti, mañana por mi. La poli se portaba bien con nosotros, lo justo era no hacer su trabajo mas dificil de lo necesario.

Asenti levemente. - Es familia. - No hacia falta decir mas, era la mujer de un miembro del Club, asi que tras lo ocurrido y mientras no supieramos que cojones pasaba, protegerla era parte de lo que haciamos. Sonrei muy levemente ante el comentario de mejor uno de los nuestros que un azul. - Si, creo que asi es mejor... pero tambien se agradece vuestra preocupacion.

Suspire mientras me encogia de hombros. - Volviendo locos a algunos de mis hermanos, pero relativamente estan confiados en que su madre despertara y los mantenemos ocupados. - Lo basico, si no tenian tiempo para pensar, no podian comerse la cabeza.

Killian no tardo en acercarse, llevaba el informe encima pero nada mas. Mire en direccion a los papeles y luego mire a Keiran. Mire a Killian y volvi a Keiran. - Se que igual es mucho pedir, pero... ¿Podrias conseguirnos un par de minutos con el tipo que teneis en el calabozo? - Por probar no perdiamos nada y ya que parecia que Killian no habia podido usa su don de gentes, pues probaria... lo que fuera que tuviera yo. - Te prometo que no lo tocaremos, ni tendreis problemas. - Una mirada a Killian dejando claro, que nada de problemas.

De no poderse, lo aceptaria, le daria la mano a Keiran y me despediria para volver al Club.

Jesse aceptó la copa, al fin y al cabo la necesitaba, aquello sin duda ayudaba a mantener aquella máscara que hacía que pareciese que todo estaba bien, como el hecho de que hubiesen estado buscando desesperadamente y protegiendo a un niñato de mierda al que le gustaría dejar abandonado en medio de la nada.
El joven dio un trago mientras escuchaba a su padre, se había sentido muy unido a AJ, era un gilipollas, pero él también lo había sido, había visto conexiones entre ambos, pero el que fuese un maldito pijo abusón... que se hubiese cargado a alguien... Se había planteado como podría haber sido su vida si su padre hubiese sido como AJ, pero estaba seguro de que no habría acabado atormentando a chavales...

-Al parecer tenemos a un abusón muy valiente entre nuestras filas. Y se ve que le gustaba meterse con pardillos, hasta tal punto de que la gracia de meter a uno en un maletero se le fue de las manos.- Dijo de mala gana, notando como el trago se amargaba en su garganta.- La verdad, me ha costado no ir directo a su cuarto y arrastrarlo hasta el maletero del primer coche que hubiera encontrado... Pero eso tampoco iba a arreglar nada.- Añadió algo cansado. Seguía sin entender como Maddie había sido tan fuerte como para sacarlo de aquella casa después de que le contase eso como si nada hubiera pasado. Él iba a tener putas pesadillas. Jesse suspiró profundamente.- Nuestra principal preocupación ahora mismo es que cojones ha dado AJ para sacar a su hijo de esta, no es que lo haya sacado de un pequeño lío precisamente. Han inculpado a otro de lo que hizo su hijo, han podido pedirle literalmente cualquier cosa. ¿Qué no haría un padre por su hijo?- Preguntó finalmente el joven con cierta hostilidad, casi como si quisiese señalar que se refería a cualquier padre menos al suyo.- Se que la situación es jodida, pero deberíamos hablar seriamente con AJ. Tenemos que saber que ha hecho exactamente. Que le pidieron a cambio del favor y a quien acudió.

Si algo me faltaba para sentirme en las nubes, era que la señora Crane estuviera contenta conmigo. Ella, Mads, y Fauve son mi modelo a seguir. Le respondí silenciosamente con una sonrisa a su guiño, y procedí a las habitaciones.

Luego regresaría a las de los Hill. Aunque le sonreí a los niños, me molestó genuinamente ver a Dinah con resaca. Tienes la responsabilidad de cuidar a un niño, no te embriagas y lo dejas a su suerte. Incluso si están en su mundo y ya comieron, tienen necesidades emocionales. Ojalá pudiera hacer que ella lavara los baños.

Mientras aseaba y ordenaba cada cuarto, aproveché para revisar todo. Los bolsillos de los pantalones, antes de doblarlos y aparentar que estaba acomodando la ropa. Debajo de las camas, y en los pliegues y espacios entre el colchón y la base, mientras las tendía. En los closet, mientras barría el suelo o acomodaba los zapatos. En parte quería tomarme mi tiempo y ser minuciosa para ocuparme mientras llegaban las dos de la tarde, en parte porque cualquier pista que pudiera encontrar sobre todo lo que pasaba y no nos decían era importante para mí. Quiero saber en qué estamos metidas Fauve y yo. No van a volver a atacarnos de repente y me quedaré atrás, mientras la lastiman.

Dejé mi habitación y la de Fauve al último. Aún tenía que entregarle la computadora a Mike. Apenas salga de este cuarto lo haré, para evitar problemas. Pero quiero ver si puedo acceder por mi cuenta, antes de hacerlo.

Vale - contestó, guardando su móvil en el bolsillo delantero de sus vaqueros para mirarte moverte por la habitación. Una vez recogiste los papeles, el chico se puso de pie y salió tras de ti. Con lo alto y ancho que era, y el chaleco que lo marcaba como prospecto del club de moteros, era una escolta bastante intimidante para cualquiera que no lo conociera.

Una vez llegaron al coche, Junior fue a prender la radio. Normalmente se quedaría quieto, por no toquetear el coche de alguien más, pero contigo tenía la confianza para saber que no te molestaba si ponía algo de música. Siendo el coche de Jessica, claro, solo prendió la radio, y ni se aventuró a cambiar el dial. Por suerte, estaba puesto en una radio de rock clásico y baladas bastante agradable.

Tu pregunta hizo que el cachorro exhalara, apretando los labios - Son... cosas del Club. - dijo en un principio, frunciendo ligeramente el ceño. - Están tomando una decisión que no me gusta. Y que me jode que ni siquiera pensaran en hablar conmigo, sino que me enteré de rebote. Y no me molesta por ser prospecto, que sé que no tengo ni voz ni voto, sino porque tiene que ver con mi padre y quienes lo mataron. - bajó la mirada - Estoy cabreado. Muchísimo. Y decepcionado. Y... no puedo quejarme, porque además creo que nadie se ha dado cuenta de que podría molestarme, lo que es aún peor. Me hace sentir como si mi padre no le importara a nadie. Y si él no les importa, que dio su vida por el club, que era parte de la cúpula... ¿que queda para mí? Claro que no me iban a avisar de nada, si les doy igual.

Casi inmediatamente, continuó, claramente sintiéndose culpable por sus últimas palabras.

Sé que me quieren. No es que les dé igual. - exhaló - Estoy agradecido por todo lo que han hecho por mi y por mi madre. Pero... así se siente.

Los detalles del crimen del niñato parecieron gustarle a tu padre tan poco como te gustaban a ti. Su expresión se endureció, y pudiste notar una rabia indisimulable brillar en su mirada. Sus nudillos se blanquearon un poco por la fuerza con que apretaba la copa. Tu hermana había muerto en circunstancias muy distintas, sí, pero el hombre tenía un punto débil cuando se trataba de niños perdiendo la vida luego de su propia experiencia, y a causa de ello su tolerancia para ese tipo de acciones era nula.

Quizás no arreglaría nada, pero no te habría culpado. - de hecho, por su tono, te daba la impresión de que quizás hasta te habría protegido de cualquier consecuencia. Parecía desear hacerlo él mismo, aunque ciertamente una acción así, u ordenarlo directamente, podría tener repercusiones desastrosas frente a la opinión de algunos miembros. Después de todo, asesino o no, seguía siendo un niño.

Intentando concentrarse frente a lo que sí podía tener algo más de libertad de acción, retomó el tema de AJ - No le han pedido poco, está pagando una buena suma, mensual, por cinco años. - te recordó lo dicho por Mark en una reunión previa - No sé que tanto pueda ayudarnos ese imbécil ahora mismo. - dijo refiriéndose a AJ - Ya tenemos su contacto con el intermediario, y Dizzy y Mark hablaron con él ayer. Se supone que esta tarde tienen una cita con el encargado del negocio. - te informó, antes de retomar la discusión sobre el hacker - Si fue tan estúpido como para meterse en cama con los rusos sin hacer preguntas, no espero que sepa decirnos demasiado. Y dicho eso, me planteo que coño está haciendo AJ por el Club además de darnos problemas y quitarnos ventajas de negociación dejándose secuestrar. - dijo ya hastiado, porque incluso cuando estaba en el Club, no estaba realmente. Y si, tenía un pase por Joan, pero tu padre era de los que pensaba que lloriquear al lado de la camilla en el hospital no ayudaba a nadie.

Tras un rato en silencio, bebiendo de su copa, volvió a hablar.

No voy a llevar esto a mesa, pero quiero tu opinión - te miró a los ojos - Digamos que hay una forma de hacer que AJ pague su deuda con el club, expie sus errores y los de su hijo, y Jack y Jill se vayan con alguien que si les preste más atención que como adornos en un modelo de casa piloto. Quizás así Jack se reencauce, de paso. - con mucha terapia, mucha atención y mucho esfuerzo, sin duda - Charlotte tiene una idea de como sacar a Gavel de la cárcel, pero es probable que reabra la investigación sobre SAMCRO. No hay ninguna prueba conclusiva, y sin entrar en detalles, tenemos la opción de redirigirla a alguien más. En un principio había pensado ponerle la diana a algún ruso o nórdico que me tocara los cojones, aunque habría que gastar bastante recursos para ello y nos arriesgaríamos a que descubrieran evidencia falsa. Pero si estamos redirigiendo a alguien dentro del club... - se encogió de hombros - Podría ser una oportunidad para que AJ dejara sus asuntos en orden, ahorrarnos dinero y contactos, y controlar un poco más la situación interna del Club. Además, entraria por asesinato, que es casi justicia poética considerando el caso de Jack.

Kieran te sonrió ligeramente con la comisura de los labios al oír tus agradecimientos, y acto seguido negó con la cabeza, insinuando que no eran necesarios. Al hombre, de origen irlandés a juzgar por su nombre y un ligero acento, le gustaba cumplir con su trabajo lo mejor que podía, y parte de ello era preocuparse por cada habitante de Charming independiente de su origen y situación.

Me alegro. Estarán bien entonces. - respondió confiado a las noticias de los niños. Cuando Killian se acercó, Kieran pareció entender que la conversación llegaba a su fin, mas tu siguiente pregunta le hizo darse cuenta de que su impresión había sido errónea. En un principio apretó ligeramente los labios, complicado con negarse a la petición, pero tu siguiente frase lo hizo desviar la mirada a un lado y luego a ti - No puedo dejar pasar a Killian. Intentamos evitar que las dos partes de un conflicto se encuentren, porque puede perjudicar el caso si alguno de los dos presenta cargos. - explicó - Pero tú podrías pasar como visita, siempre y cuando te mantengas a una distancia razonable de los barrotes. Yo esperaría en la puerta, de todas formas. - te planteó las condiciones, esperando a que las aceptaras o negaras antes de guiarte o no dentro de la comisaría.

Como era de esperar, la habitación de los Crane estaba bastante ordenada. No quedaba mucho que pudieras curiosear "casualmente" más allá de ropa en las maletas. Charlotte debía haberse llevado su portátil y todos sus documentos al irse a trabajar, y ninguno de los Crane parecía haber traído demasiados efectos personales. En la habitación de los Malar encontraste una agenda planificadora llena de papeles, que por la letra distinguía como perteneciente a Lorelei. Estaba llena de anotaciones, fechas, números y nombres. También encontraste un libro sobre la mesita conun marcador de dos entrada al cine tras la última página. El libro en cuestión era "The gift of struggling" de Bobby Herrera. En la mesita del otro lado había una pipa que reconocías como de Dizzy, y un biberón vacío.

En la habitación de María y Dinah no encontraste mucho tampoco. La primera no había traído demasiadas pertenencias, así que cuando mucho encontraste su maleta con ropa y efectos personales, pero ya había salido así que se habría llevado ya todas sus cosas. También encontraste una petaca guardada en un cajón, probablemente perteneciente a Dinah, y una caja de condones king size. Sobre la mesita Dinah había dejado su bolso, y entre un montón de maquillaje, barritas y tonterías, encontraste su billetera. Vacía, pues no le quedaba ya dinero, aunque seguía conservando tarjetas de crédito, identificación y una foto de Mike cuando era pequeño con ella y el difunto padre de este. Era una foto adorable, en realidad. Dinah se veía muy distinta. Saludable, feliz, llena de amor por su familia. Ni rastro de su actual problema de alcoholismo. Mike sonreía de oreja a oreja, y el padre, portando un chaleco del club con el parche de secretario, los abrazaba a ambos.

No tuviste problema en acceder al portátil. De hecho, te pareció sospechosamente fácil. Era cierto que estabas bastante segura ya de que ese no era el portátil de AJ, pero aún así había sido demasiado sencillo. En el escritorio no había demasiadas cosas. Dos archivos de imágenes, y un excel sín título.

Jesse escuchó con especial atención a su padre, saboreando la copa mientras intentaba que no se le amargara, lo cual era cada vez más difícil. No era normal en él que estuviese tan callado, pero aquellos temas le tocaban demasiado de cerca, al fin y al cabo era otra familia la que estaba en juego, otra que podría morir por culpa del club, y aunque AJ y Jack probablemente lo merecieran... Aunque Jill estuviese mejor en otro lado, ¿era justo decidir ellos el poner fin a aquella familia? ¿No había más opciones?
Y por otro lado estaba el tema del contacto, aquello era más fácil de digerir, lo cual ya era mucho, porque según lo que acabaran descubriendo su hermano podía ser desde un estúpido a un traidor, fuera como fuese no iba a ser bonito, y aun así era mejor que el otro tema, así que prefirió empezar por ahí. Tenía la teoría de que los negocios que había hecho era con los rusos, solo esperaba equivocarse.

-¿Ya sabemos quien es el intermediario? ¿Qué han descubierto?- Preguntó de forma abierta sin intentar deducir nada sin pistas, aunque era posible que hasta la tarde no pudieran tener aquella información, pero no perdía nada por preguntar.

Y entonces se centró en su vaso, sabiendo que tocaba encarar el difícil dilema que su padre planteaba. Mareó la bebida de un lado a otro, y finalmente cuando se cansó de observar su vaivén la apuró.

-Gavel se merece salir, eso está claro. Literalmente está cargando con todo el peso del club... Y está claro que AJ es un gilipollas.- Dijo sin rodeos.- Sin duda, si se tratase de quien merece más estar en la cárcel la respuesta sería sencilla. Pero no se reduce a eso, tú no puedes decidir como hacer o deshacer familias a tu antojo. Por no hablar de que pareces olvidarte de que siguen teniendo madre.- Jesse hizo una pausa, su padre parecía siempre hacer lo más práctico, lo cual probablemente funcionase en el club, pero no lo hacía tanto cuando se trataba de cuidar de una familia.- Tienes que pensar en que es más importante: el club, o la familia Hill.- Dijo con cierto regusto amargo, pues tenía bastante claro que era prioritario para su padre.