Partida Rol por web

Zay llega algo agitada. Deja sus libros al lado de una butaca y se sienta en ella.
Pfffffffff..... suspiró y miró el reloj, aún tenía unos minutos antes de la clase de Herbología. De pronto algo le acarició su mano: era Sucifer. La tomó y empezó a acariciarla.

Ya es hora... Tras un rato, Zay cogió sus cosas y se dirigió a su clase.

Sara entró por la puerta. Llevaba puesto el guante de cuero. Saludó a los presentes y se dirigió al cuarto de las chicas. Salió en muy poco tiempo portando la misma mochila que había usado por la mañana para llevar los libros, aunque era evidente que ahora su peso era inferior. Había pasado todo el tiempo de descanso practicando su "no tan correcta" transformación en clase, y había encontrado un lugar no muy transitado, la lechucería.

-¿Listos para la versión en directo de bricomanía?

Cuando regresamos a la escuela, cambio de opinión de súbito. 'Escurriéndome' de la vista de mis compañeros a las primeras de cambio, me vuelvo a la sala común de Slytherin pues estoy algo cansado y con un extraño estado de ánimo. Cuando recuerdo la promesa que la hice a mi compañera Zaida, me 'ataca' un atisbo de culpa A pesar de ello, prefiero quedarme ahora aquí... ya me disculparé con ella tras la misma. Además, si ahora entro le quitarán puntos a la casa y no puedo permitirlo... Saco de mi habitación los libros y apuntes sobre la Herbología los estudio por mi cuenta.

Tras estar un largo rato sólo en la Sala Común, estudiando Herbología por mi cuenta (nunc fui muy dado a las amistades :P), calculo que ya será la hora de que los demás hayan acabado la clase y que es hora de reintegrarme a los demás.

Recojo los libros, hojas y pluma (con su tinta) que he utilizado, con cierta prisa, y sólo con mi varita en un bolsillo interior de la túnica salgo a los pasillos de la escuela para intentar loc alizar a los demás.

Ve al gran comedor ;P

De repente, todos los gatos de la sala empiezan a llorar desesperadamente, maullidos agudos y molestos; se les unen los gatos que dormían en las respectivas habitaciones... en cuestión de segundos, la Sala Común se llena de mascotas felinas llorando desconsoladamente.

Entré a la Sala Común después de decir la contraseña... y me dirigí directamente al sofá, dejándome caer como un saco de patatas.

El primer día y ya había muerto una alumna. De esto no me había hablado nada...

Sweety vino directamente hacia mí, subió enroscándose por mi brazo y se quedó en mi regazo... le empecé a acariciar la cabeza con dulzura, mientras miraba el vivo fuego.

Llego a la sala común tras ponerme como un auténtico cerdo en la cena... No se si cansado por el largo día o porque toda la sangre de mi cuerpo se encuentra trabajando para digerir todo lo que acababa de meter en el estómago, me tiro en uno de los sofás de la sala.

Me fijo en que está Anaïs, pero solo cuando ya me he sentado observo la serpiente, y no puedo sino dar un respingo... Joooder cierro los ojos en el salto y me agarro a los reposa brazos... Dios, nunca me acostumbraré a ver a tu, serpiente... la leche, casi se me corta la digestión...

Miro a Andrés y sonrío, divertida; siempre conseguía arrancarme una sonrisa, o una carcajada.

- Tarde o temprano te acabarás acostumbrando... además, aun tiene que venir a dormir a tu cama, ¿recuerdas? - le respondo, sin dejar de sonreir y apartándome el pelo de la cara.

O gracias, ahora la carne me va a dar vueltas en el estómago toda la noche... digo riendo. No obstante antes de que pase eso ya sabes que yo me colaré en tu cama tras sortear al dragón de la entrada... digo levantando las cejas...

Llevo la mano a la tripa y le doy un par de golpes suaves... Madre mía creo que comí demasiado para la cena... Donde estará esta gente, ¿tardan en llegar no?

- A saber qué estarán haciendo... - respondo, acariciando de nuevo la cabeza de Sweety, la cual ha entrecerrado los ojos para sentir mejor mis caricias.

Luego me río, por lo primero que ha dicho - Para que tú te cueles en nuestra habitación vas a necesitar siglos... de los que careces - le guiño un ojo, sonriendo divertida... pero me vuelvo a poner seria.

Qué chungo lo de la tia de Gryffindor, ¿no? Vale que ha sido una palurda por entrar la Bosque Prohibido pero... joder, la ha palmado.

Trago saliva cuando Anaïs saca el tema... No es que me gustara hablar demasiado de esas cosas, pero sin duda iba a ser un tema candente Si... es, deben de estar jodidos los de Gryffindor... Y vale que avisaron pero, ¿no debería haber algo de seguridad?, no se, y si lo que le... lo que le hizo eso ¿sale del bosque?

Miro al fuego, como temblequean la llamas y escucho el crujir de la madera rompiendo... Lo cierto es que no pienso entrar en ese bosque... no es que lo tuviera pensado, pero ahora... ni mucho menos.

- Bueno, tenemos quince años y... el bosque se llama "El Bosque Prohibido"... la niña esta provenía de una família de magos, solo hace falta ver su apellido... por lo que sabía de la existencia del peligro en el bosque... es una lástima decirlo, pero eso un Slytherin no lo habría hecho... somos más inteligentes, incluso que los Ravenclaw, porque la otra chica que entró era de Ravenclaw...

Dirijo la mirada a la misma dirección que Andrés, hacia el fuego... y vuelvo a mirar al chico - No creo que salga del bosque... lo tendrán controlado. Supongo.

Nico aparece en la sala comun, sonriendo satisfecho. Creo que le ha quedado claro al pequeño Gryffindor que nadie juega con un Nogueira.

Iba tran concentrado en sus pensatamientos que no se dio cuenta de que tenia compañia hasta estar llegar casi a los sofas.

Hola chicos, ¿que haceis tan solos?¿No han llegado todavia los demas?

Natalia llega poco después.

Hola. Saluda a sus compañeros con una de sus provocativas sonrisas. Se sienta en uno de los sofás, como si fuera una princesa: con delicadeza, colocándose la falda (por encima de lo normal) y con las piernas cruzadas. ¡Anda!¡Tienes una serpiente! Es preciosa. Le dice amablemente y con entusiasmo a Anais.

Dirijo la mirada a Natalia y le sonrío.

- ¿Te gustan las serpientes? Tienes buen gusto... se llama Sweety - le respondo, sin dejar de sonreir.

Luego miro a Nico y niego con la cabeza - Ya ves que no... estamos solos y abandonados... ¿por qué no te sientas con nosotros? Estábamos hablando de la leoncita que ha fallecido... - no lo digo con rintintín ni nada por el estilo, más bien lo contrario.

Cuando llega Natalia se gira hacia ella sonriente.Aunque realmente por lo que sonreia era porque al escuchar hablar de la mascota de Anais ,acababa de recordar que tenia que ir a por su lechuza.

No se porque a la gente le estraña tanto.No es que me alegre de ello,pero si no se molesto en hacer caso a las advertencias... Puede decirse,que se lo busco.Dice totalmente serio,apoyandose en el respaldo de uno de los sofas vacios.

Natalia asiente a las palabras de Nico.

Yo la verdad..es que no la conocía, y realmente ni me viene ni me va...Dice claramente sin immutarse. ..pero está claro que si se llama "Bosque Prohibido" es por algo. Por mucho que lo "prohibido" suene tentador.. -dice poniendo una sonrisa pícara-..está claro que murió por su estupidez. Era una Gryffindor, qué podemos esperar..Natalia mientras dice esto con sangre fría, se mira las uñas muy coqueta.

Bueno,sera mejor olvidar este tema... Mira el reloj y ve que es demasiado tarde para ir a la lechuceria, solo le quedaba que Curu le estuviera esperando en su habitacion...

Ahora que no tengo que ir a ningun sitio, puedo relajarme un poco.Da la vuelta al sillon en el que estaba apoyado y se sienta.

Espero que no nos quiten puntos por ningun despistado, ya van a ser las 11.