Partida Rol por web

Al verlo llegar justo a tiempo, ni un minuto más... ni un minuto menos, sonreí conforme y descrucé mis brazo. Justo después comencé a acercarme hasta llegar a él. Sinceramente, no me esperaba que ya estuviera fuera. A decir verdad, esperaba que saliera de dentro del complejo.

—Has llegado en buen momento — sonreí, me acerqué bastante a él y... le corregí el nudo de la corbata, pues lo tenía un poco suelto —. Muy bien. Un traje clásico pero elegante. No está mal. Digamos que... de momento tienes un 7 sobre 10. Tienes que ganarte los otros 3 puntos durante la noche.

Le guiñé un ojo. Estaba conforme, aunque... notaba su respiración un poco acelerada... como si hubiera corrido una media maratón.

Seguro que ha estado entrenando hasta tarde...

—Un taxi es perfecto.

Volví a sonreírle, y esperé a que me abriera la puerta para montarme dentro. Una vez se hubo montado él también, le di la dirección al taxista.

—Llévenos a la calle de Vaugirard, número 54, por favor.

Sin embargo, nada más darle la indicación, me fijé casi por casualidad en el taxímetro. No estaba en 0, sino que marcaba ya un número demasiado elevado... Hum, ¿Matthew? ¿Qué habría estado haciendo? ¿Habría vuelto con Dmitri a la ciudad? Por un momento, enarqué una ceja... sin embargo, traté de tomar aire, hacer como si no me hubiera dado cuenta de nada y confiar en que lo que me dijo aquel día era cierto- Quería tratar de evitar recordar los rumores que habían estado circulando por el complejo durante días y que había generado nuestra primera discusión.

"7 sobre 10, un aprobado decente", pensó Matthew al ayudarla a entrar en el taxi. El joven aun no sabia muy bien si considerar esto un reto cumplido o simplemente un entrenamiento más. Por suerte, antes de llegar, ya habia recuperado el aliento de tal odisea.

Por otra parte, cada vez que Matthew observaba a Alyss le parecía más y más extraña. Quiero decir... ¿No desentonaría por su culpa? No tenia un traje esquisto y ademas era bastante antiguo, por otro lado también tenia que decir que la ropa que llevaba era muy reveladora ¿Acaso iría a ver a su novio y lo necesitaba de niñera? Vaya, no se esperaba que la usara para eso. Sin embargo el podría trabajar de guardaespaldas perfectamente.

-  ¿Y que necesitas hablar? -dice directamente- Te has arreglado tanto que parece que vas a quedar con alguien importante. -hace una pequeña pausa- Estas hermosa con esa ropa -la mira de arriba a abajo sin saber bien que decir- La verdad es que tu cita va a estar tan impactado como yo al verte.

En cierta forma no podía parar de mirar sus atributos de mujer, aunque lo podía fingir mirándola más a la cara. Sin embargo había pasado bastante tiempo sin mantener relaciones, justo el tiempo para que se sintiera mal al mirar a cualquier mujer que se la insinuara demasiado. Al final tuvo que apartarle la mirada por culpa de ir demasiado provocativa. Encima también estaba algo cansado de la acción, a pesar de su buen humor. 

Cuando le escuché, fruncí el ceño... No me reponía de una, y ya me venía con otra. Pero luego negué con la cabeza y sonreí ligeramente. Debía estar bromeando, y debido a mis dudas por lo del taxímetro, no había podido captar del todo la broma. Porque, si de verdad lo decía en serio... ¡¿cómo se pensaba que había quedado con otra persona?! ¡Había quedado contigo! Sólo por eso, ya se merecería una buena bronca.

Aún así, queriendo pensar que era broma, y obligándome a ello por si las moscas, le seguí el juego...

—¿Ah, sí? ¿Te has quedado impactado al verme? ¡Qué tierno! Pero no creas que con halagos baratos vas a conseguir más puntos, ¿eh?

Solté una pequeña carcajada, y le guiñé un ojo de forma coqueta. Luego me puse algo más seria para responder su primera pregunta.

—Quería quedar contigo para hablar sobre... bueno, mejor hablemos de lo importante durante el paseo. Creo que será mejor que en un taxi — respondí —. Cuéntame, Matthew, ¿cómo te ha ido el día? ¿Has hecho muchas cosas?

El taxi ya se había puesto en marcha.

Matthew se quedo algo perplejo por la reacción de Alyss. No le había respondido a su pregunta, aunque quería saber que había hecho hoy, bueno decirle lo que había pasado no estaba mal al fin y al cabo. Ya tendrán tiempo de soltarse cuando den el paseo.

- Mmmm... Pues a la hora de comer recibí tu mensaje, descubrí que no tenia ningún traje en el Cuartel y por que "cierta persona" -remarca esas palabras- me evitaba y no recibía mensajes, pues no pude avisarle que mejor podíamos haber quedado en la ciudad. Así que fui a mi casa lo más rápido que pude, me arregle, se me escapo un autobús, corrí detrás de él, pase por en medio de la carretera para pillar un taxi y aquí estoy -dice sonriendo y rascándose un poco la nuca- Creo que dos horas para ir y volver ha sido un tiempo record ¿No crees? -hace una ligera pausa- ¿Y tu estas muy ocupada con los nuevos entrenamientos?

Ahora todo tenia un poco más de sentido, en cierta forma Matthew si parece haber corrido de un lugar a otro, aun le tiembla un poco la mano de la situacion tan peligrosa que ha sufrido.

Cuando me dijo lo de que me había contestado, desvié la mirada y traté de disimular.

—¡Ah! ¿Sí? ¿Me has escrito? 

Justo en ese momento, saqué el móvil y lo comprobé.

—¡Uy! ¡Está apagado! Lo siento, debe haberse quedado sin batería.

Por supuesto, mentía. Pero, ¿sabes?, en realidad... estaba aguantándome la risa. ¡Pobre Matthew! Lo que había tenido que sufrir... aunque, sinceramente, si no lo hubiera hecho así, ¡quién sabe si realmente estaríamos ahora juntos! Ejem, alguna carrera por la ciudad, y vuelta al complejo no venía nada mal de vez en cuando... ehm... ¿verdad...?

En cualquier caso, mi inocente pregunta me había servido para hacerme desaparecer cualquier duda. Era el objetivo por el que la había formulado, después de todo.

—¿Sabes? Deberías guardar algún traje en horizon. Nunca se sabe si en algún momento se hará una fiesta de gala allí, ¿no crees? — lo decía en serio —. Sí, ya sé que «no estamos en horizon por diversión» — lo parafraseé como si fuera él quien me lo estuviera diciendo... estaba claro de que ésa sería su respuesta en caso de darle el tiempo suficiente como para que me contestase —, pero... hasta en sitios como éste hay veces en las que se debe festejar algo. Un día especial. O una victoria importante... ya sabes, ese tipo de cosas.

Luego solté una pequeña carcajada, y le guiñé un ojo algo divertida.

—Pero... sí, tienes razón. Tiempo récord. Ya veo que eres un chico rápido.

Estaba contenta, después de todo. Hoy quería pasarlo bien y divertirme...

—No te creas, desde que volvimos del Duwang, los Bishops no hemos tenido demasiado trabajo — dije tras encogerme de hombros —. Quizás lo más duro ha sido elegir especialización, aunque en mi caso tenía claro desde un principio que quería unirme al grupo de cirujanos de campaña.

Mentía, en realidad no lo había tenido tan claro. Por un lado, quería unirme al cuerpo de expedicionarios... pero... creía que allí no sería tan eficiente como en el cuerpo  de cirujanos de campaña. Había sido una decisión difícil... y me avergonzaba de admitir que había tenido que rechazar la idea del cuerpo de expedicionarios porque no veía capaz de ser una.

—¿Tú en qué te has especializado, Matthew?

- Asalto ligero, no creo que sepa hacer otra cosa que no sea eso, la verdad -dice un poco dubitativo ante eso, como si en parte le doliera haber elegido esa opcion.

Matthew escucho con atención lo que decía Alyss. No sabia si comprendía como de peligrosa e intensa era su aventura, pero quería ampliar un poco la conversación.

- Respondiéndote por partes... Me alegro que hayas escogido eso, quiero decir... Me siento más seguro si tu eres la que va a operarme si me pasa algo grave -dice mirando hacia delante- Solo espero que eso no intervenga con que quieras explorar el mundo, al fin y al cabo era lo que tu querías ¿No es así? -hace una pequeña pausa- Y sobre lo del traje... No era exactamente por eso, es más bien por que tengo mi casa al lado y solo tengo un traje, así que tengo que cuidarmelo más de lo que piensas.

Durante un momento se quedo mirando a Alyss. Posiblemente... Pensando en lo que habían pasado en tan poco tiempo o simplemente como había cambiado su pensamiento en general. Nunca hubiera pensado que quedaría de forma tan cercana con alguien que es tan diferente a él ¿Es acaso un interés extraño o es simplemente supervivencia? Aun así... La mirada estaba durando demasiado por lo que podría sentirse demasiado extraño.

- Esto... Estaba pensando cuanto habíamos cambiado desde nuestra primera conversación ¿Sigues pensando lo mismo sobre la opinión que tienen de ti? ¿O verles tan débiles te ha hecho cambiar de opinión? -pregunta intentando no crear una situacion incomoda.

—Asalto ligero no está mal — dije, tratando de animarle —. Creo que es una buena especialización.

Luego me llevé el dedo al labio, pensativa. ¿Así que recordaba lo que le había contado acerca de que me gustaría conocer el mundo...? Se había ganado un punto más para la calificación final.

—¿Sabes? Procura no hacerte muchas heridas — dije sonriéndole —. No te preocupes, aunque no sea exploradora, siempre seguiré teniendo curiosidad por Aquaterra y... por la Tierra. Seguiré investigando. ¿Quién sabe? Quizás algún día nos manden a todos otra vez a una nueva isla con un ecosistema tan interesante como Duwang.

En el fondo, sentía que la probabilidad de que eso pasara era relativamente baja...

—En fin, lo importante es ser útiles, ¿recuerdas?

Aún recordaba nuestra charla en la enfermería, en la que le había dicho que prefería ser una persona que aportara cosas y fuera útil antes que una persona que cayera bien. Sin duda, había pasado mucho tiempo de aquello.

—Me sigue dando igual lo que piensen de mí — le contesté a su última pregunta —. Lo importante es sentirse a gusto con uno mismo, y eso es lo que trato de conseguir día a día — hice una pequeña pausa —. Es imposible caer bien a todo el mundo, después de todo... siempre habrá alguien que te guarde recelo por algo.

Lo miré un rato, aunque quizás no tan intensamente como él me había mirado momentos antes a mí. Y no es que le recriminara que me mirara, ¡para nada! Me gustaba que lo hiciera. No por otra razón me había puesto un vestido que me hiciera ver más bonita...

—¿Qué opinas tú? — dije tras varios segundos de silencio —. Cuando pasó lo del Duwang, hubo algunos "problemas"... yo estoy acostumbrada a ganarme recriminaciones por parte de... "algunas personas", pero a ti es la primera vez que te pasa en Horizon. ¿Estás bien?

Sabía que era lo que se sentía cuando todos se ponían en tu contra... lo había vivido por primera vez en Horizon, y ya había empezado a acostumbrarme. Quizás por eso salí en defensa de Matthew aquel día, y quizás por eso me preocupaba ahora por él. No quería que también sufriera y se sintiera tan inseguro de sí mismo como me sentí yo...

- Los pecados del padre pasan a los hijos ¿No? -dice suspirando y echándose mejor sobre el respaldo- No es algo que me guste ni que quiera seguir, por lo menos algunos como Artie me tienen en mejor estima. En cierto modo me ha costado digerir lo que ha pasado y encima ahora ni puedo mirar a mi padre a la cara. Eso incluso me va a afectar para las festividades... Estoy pensando en buscar trabajo para Navidad y Año nuevo, ya sabes, para ganar algo de dinero en esas fechas que nadie quiere trabajar.

Parece que se queda algo pensativo ante la situacion. Aun no sabia que hacer y sobre todo en esta situacion. Pero se estaba dando cuenta que podía hundir la situacion de una forma muy fea.

- Pero no importa, las cosas hechas hechas están, no hay que darles más vueltas -dice intentando quitarle hierro al asunto- ¿Cuanto falta para llegar? Empiezo a tener hambre.

No sabia cuanto tiempo había pasado desde entonces.

—Sí, imagino que algunas personas de intelecto limitado no son capaces de ver que una cosa son los padres y otras los hijos. Pero eso no es problema tuyo, sino de ellos. No te preocupes.

Hice una pequeña pausa, el tiempo de darle la indicación al taxista para que parara. Ya estábamos cerca. Luego saqué la cartera del bolso de marca que llevaba y pagué al taxista tanto lo que tenía el taxi en toda la odisea de Matthew como lo nuevo que hubiéramos recorrido hasta ahora.

Si Matthew trataba de negarse, le miraría fulminantemente. No aceptaba otra cosa que no fuera pagar yo.

—Te lo debo por todos los problemas.

Una vez fuera del taxi, me acerqué a él y le agarré del brazo para ir caminando por la calle pegada a su lado... como si fuera lo más normal del mundo. Aunque ya me imaginaba que a él esto le cogería de sorpresa.

—Si no encuentras trabajo, podrías trabajar haciéndome vestidos bonitos — bromeé —. Aún espero el que me dijiste que me ibas a hacer. No te creas que he olvidado cómo me tomabas las tallas, ¿eh? No querrás que piense que lo hacías porque eres un pervetido, ¿verdad?

Fruncí el ceño mientras alzaba la mirada para verle el rostro. Aunque no duró ni un segundo antes de soltar una carcajada. Estaba claro que lo decía de broma.

—¿Tienes mucho hambre? — le pregunté finalmente —. El restaurante no está muy lejos, pero qué te parece si andamos un poco. Esta zona es perfecta para pasear, ¿no crees?

Y tanto que lo era. Se trataba de una de las calles más lujosas de la ciudad. Las tiendas eran casi todas de marca, y las aceras estaban impolutas. Además, las luces de las farolas comenzaban a encenderse, pues ya empezaba a oscurecer, lo que le daba un aire bastante romántico a la escena. Sin duda, era un lugar perfecto para personas que se lo pudieran permitir.

Matthew quería pagar evidentemente el trayecto, aunque su cartera empezara a resentirse de verdad... Sin embargo la mirada de Alyss le paro la mano en seco, ciertamente era una mujer intimidarte. No podía si no ser un invitado esta vez... En el fondo, su respuesta casi no le valió como excusa. Aun no comprendía todo lo que estaba pasando y la cosa se volvió peligrosa nada más salir del taxi.

La situacion era bastante extraña para él. Estaba demasiado pegado a Alyss, se sentía algo incomodo de la situacion. Ya no sabia que estaba pensando y estaba bastante tenso en ese momento y el ambiente, para él estaba enrarecido. En el fondo sabia que extrañamente esto esta yendo un poco lejos. Sin embargo no hizo nada al respecto.

- Solo empiezo a tener hambre, si tu no la tienes, puedo esperar -dice educadamente mientras anda- Sobre el vestido, no lo había olvidado en absoluto, pero con todo lo que ha pasado... No he pensado mucho en ello. Aun así, no, la verdad es que la gente no suele calificarme mucho como un pervertido la verdad -se ríe un poco- Más bien un poco lo contrario. En este aspecto... Dmitry dice que tengo poca sangre, o más bien, que solo la tengo cuando combato. -dice haciendo una pequeña pausa- La verdad es que nunca había estado por aquí y me siento ligeramente perdido...

Ciertamente Matthew en muchos aspectos sociales era demasiado inflexible y serio. Quizás hasta unos puntos algo extraños, pero se puede notar que ha avanzado un poco en ese aspecto, ahora por lo menos se ríe. Durante un rato más sigue andando y cuando parece que no hay tanta gente alrededor pregunta lo que tiene que preguntar.

- Estas más cariñosa que de costumbre, Alyss... Y sobre todo muy... Servicial. Como explicarlo... No siento que me debas nada, pero aquí estamos paseando por la ciudad siendo invitado por ti. - se queda pensativo- Me siento extraño y aun me intriga saber por que querías hablar precisamente conmigo. Me tiene preocupado que te haya pasado algo ademas de lo que ya ha pasado.

Quizas se estaba precipitando, pero como lo llamo con tanta urgencia no sabia que pasaba y encima era algo que no podía contar en el taxi. La cara de Matthew era de preocupación esta vez. Cuando una persona cambiaba tanto de golpe era por algo, algo que le atosigaba, y él sabia lo que era. Intento no darle más importancia como mirándola con preocupación ni nada, simplemente siguio mirando hacia delante y caminando lentamente.

—A Dmitri no le falta razón — dije, bromeando de nuevo —. No te preocupes, no nos perderemos. Conozco muy bien esta zona, suelo venir siempre que quiero comprarme ropa o cosas por el estilo.

En ese momento se me encendió una bombilla.

—¿Sabes? Vendremos de nuevo a probarte trajes de verdad. No digo que el que tienes no sea un traje de verdad, no me malinterpretes. Pero... ¡sólo tienes uno! Tenemos que solucionar eso.

Sonreí amablemente. Sería divertido verle probarse ropas y... sinceramente, no confiaba en sus gustos. ¡Me necesitaba para buscar un traje que de verdad le sentara bien y fuera moderno! Si no, seguro que cogía alguno para viejos chochos que sentían nostalgia de la Tierra.

Sin embargo, mi gesto se torció ligeramente cuando me dijo que estaba más cariñosa y... ¿servicial?... que de costumbre. Me paré en seco, me separé de su brazo y le miré con una ceja enarcada. Aún así, traté de evitar soltarle una bordería. Seguro que no lo había dicho con mala intención...

Luego volví a cogerle del brazo, pero no reanudé la marcha.

—Me apetecía pasear contigo, Matthew — le dije en un tono neutral. Justo después cogí aire para continuar —. Y... quería disculparme también. Me comporté mal aquel día en el que... pensé que te drogabas como Azael. Dije cosas horribles, y... aunque no hemos vuelto a hablar sobre ello a pesar de que ya ha pasado tiempo, quería pedirte... perdón. Siempre te has portado bien conmigo, no te merecías que te recriminara nada...

Me costó decirlo, pero llevaba tiempo pensando que debía hacerlo...

—Para mí, no eres uno más en Horizon, Matthew — añadí finalmente casi en un susurro, cerrando los ojos y apoyando mi cabeza en su hombro.

- Eso ya paso, no deberías darle vueltas al tema. No suelo hacer nada realmente extraño, aunque no suelo ir comentando las cosas que hago... Aun no me acostumbro a ser esas personas que pone toda su vida en redes sociales. -dice pensativo- Si es solo por eso... No tienes que preocuparte.

Se queda pensativo un momento y escucha a Alyss susurrar algo, y aunque lo escucha hace un poco de caso omiso. Sin embargo cuando siente que Alyss aun se pega más a él... Siente como si profundamente estuviera dejando la responsabilidad sobre él. Durante un momento la siente débil, pero no sabe que hacer. En respuesta... lo único que se le ocurre es abrazarla.

- No se exactamente que te pasa. Te cargas con muchas culpas que no deberías cargar, en vez de eso, si están arregladas, déjalas estar -dice con su tono serio- Prefiero que me invites por que quieres pasar tiempo conmigo que simplemente para disculparte.

Realmente se sentía como muy extraño. Se había guiado por un impulso, un impulso de preocupación por su compañera. Ademas esa sensación como si necesitara ahora disculparse por todo, algo que se quedo en el pasado, ademas, incluso se había disculpado de verdad.

- No le des más vueltas.

—En este momento no me estoy cargando con culpas — le dije sin apartarme de él.

Por alguna razón, le estaba notando más frío que nunca... incluso su abrazo, también me resultó frío. Estaba hablándole de verdad, abriéndole mi corazón y dejando salir las emociones de él. Era como cuando dejo escapar los colores de mi interior para impregnarlo todo. Y sin embargo de él en estos momentos sólo veía un azul frío.

Por un momento, pensé en utilizar mi poder con él. Impregnarlo de rojo pasión y hacer que todo resultase como lo había pensado. Sin embargo... no lo hice. Hacer algo así sería un error que no me podría perdonar. Sería forzarlo a algo que, según parecía... él no quería hacer.

¿Quizás... siente algo por... Artie?

Me separé de su abrazo y volví a dejar un poco de espacio entre nosotros. Luego sonreí ligeramente.

Está bien si es así... no pasa nada.

—Te he invitado a pasar tiempo conmigo, ¿no? — dije amablemente —. No era sólo para disculparme. Me gusta estar contigo, Matthew — di media vuelta haciendo volar ligeramente los bajos de la falda de mi vestido, y reanudé la marcha —. Anda, vamos a comer antes de que tu tripa empiece a hacer ruidos... Si te pasa en el restaurante, no te invitaré más, ¿eh? ¡Qué lo sepas!

Solté una pequeña carcajada, y seguía avanzando sin mirar atrás.

Cuando le aparto de una forma tan brusca, Matthew se sintió extraño ¿No pasaba realmente nada? No sabia como reacción ante esta sensación. Se sentía como si no debiera haber hecho lo que hizo. Estaba ante algo que le resultaba extremadamente extraño todo lo que estaba pasando. En un momento estaba super pegado a él y al siguiente, cuando la abraza, se separa. Estaba confuso y preocupado, no era algo que le resultara simpático. Su cabeza daba vueltas en este momento.

- Antes de ir al restaurante, déjame sentarse un rato -dice de forma algo seca- Me gustaría disfrutar de este sitio aunque sea un rato y no sea caminando.

El hambre que tenia antes había desaparecido y la situacion estaba siendo demasiado extravagante para él. Comportándose de forma egoísta, decidió buscar el banco más cercano y sentarse en él, haciendo que su caminata se parase en seco. Durante un momento permaneció en silencio, pensativo y mirando a Alyss. Cuando reunió el valor, le hablo directamente.

- Yo también disfruto de mi tiempo contigo Alyss y puedo decir con seguridad que eres de las personas que más se preocupan por mi de la organización. Eres la única que le preocupa que vaya la ciudad y piensa que me este drogando y a su vez se enfada y se molesta por ello, como si fuera una persona muchísimo más importante para ti de lo que pienso -hace una pequeña pausa- Si, te escuche, y si, tu tampoco eres otro recluta cualquiera para mi. Posiblemente si te pasara algo, no podría seguir en Horizon, por lo menos no de la misma forma ¿Pero sabes? No es fácil esto para mi, no soy una persona que capte fácilmente las indirectas y muchas veces prefiero hablar claro que hablar con miedo. Quiero que me digas que hace que te comportes de una forma tan extraña, antes no paras de estar pegada a mi y ahora, te abrazo y te alejas de mi. No... No lo comprendo Alyss ¿Que es lo que pasa?

Matthew parecía realmente preocupado por la situacion. No sabia que hacer y había comenzado el principio del fin.

Cuando me dijo que quería sentarse, asentí y... me acerqué hasta el banco en el que estaba ahora. Su tono era bastante seco, a decir verdad. ¿Estaba enfadado conmigo? No sabía qué pensar.

—Yo no me estoy comportando de manera extraña — le dije algo sorprendida —. Soy... como siempre, ¿no? Bueno, he cambiado un poco desde el sueño que despertó nuestras habilidades. Vi cosas, y sentí que... debía cambiar. Pero para mejor. Y créeme, lo estoy intentando con todas mis fuerzas. Pero sigo siendo yo.

No entendía a Matthew... y, en estos momentos, pensaba que jamás podría llegar a entenderle. Ni él a mí.

—¿Quieres que te hable directamente? — le contesté, al tiempo que me sentaba a su lado —. Siempre te he hablado directamente, Matthew. Te he dicho por qué quería quedar contigo, te he dicho lo que siento por ti, te estoy diciendo claramente cosas que antes nunca diría. ¿Qué más quiere que te diga directamente?

De repente, me sorprendí por estar usando un tono más duro del que había usado al comenzar a hablar. Me forcé a hacer una parada... cogí aire y reanudé en un tono más calmado.

—Matthew, yo no puedo ser más directa de lo que ya lo soy — sonreí, aunque no era una sonrisa que definiría como feliz —. Ahora disfrutemos de la noche. Hoy quiero pasarlo bien, y mi intención era hacerte pasar bien a ti también...

Matthew durante un momento al escucharla hablar se quedo algo difuso. Se lo había dicho claro, no quería ser más clara de lo que estaba siendo. Era una situacion... Clara a la vez que confusa. Matthew se quedo un momento pensando en lo que le había dicho. Cada palabra se le paso por su mente e intento descifrarla.

"Vi cosas, y sentí que... debía cambiar". El MGT, seguro que se refiere a eso. Yo la vi tenerlo junto a Snowy, no parecía pasárselo bien. Imaginaba que seria igual que los extraños pensamientos. Quizás en ese sueño vio cosas que le hicieron daño... Aunque tampoco hemos hablado del tema.

"Te he dicho por qué quería quedar contigo" ¿Ese es el motivo real de todo esto o hay algo más? No sabia exactamente que entender de la situacion. Eran amigos realmente ¿Pero era así realmente? Apenas se hablaban cuando estaban en publico ¿Sentían acaso vergüenza ajena? ¿Que pasaría si se mostrasen juntos en publico? Eran cosas que Matthew se planeaba. Quizás solo tenia miedo de que se quitase alguna mascara o quizás tenia miedo de sentirse tan cercano a Alyss.

"Te he dicho lo que siento por ti" ¿Que es exactamente ese sentimiento? ¿Acaso le gustaba? ¿Acaso quería intentar algo con él y por eso era toda esta cita? No obstante... ¿Que era lo que sentía Matthew por ella? Siempre le había visto como una niña adolescente, no pensó en verla como una mujer, aunque a pesar de eso... Ahora la miraba y con esos sentimientos, parecía todo menos una niña... ¿Que era Alyss ahora mismo? La miraba y... Se fijaba en cosas que antes no se fijaba. Ella se había abierto a él, como una persona adulta y él sin embargo parecía huir de la realidad.

"Matthew, yo no puedo ser más directa de lo que ya lo soy". Y él no podía dejar de evitar su forma de ser directa.

"Hoy quiero pasarlo bien, y mi intención era hacerte pasar bien a ti también...". Se sentía el causante de esto que esto no fuera por el buen camino. No se sentía culpable, pero sus pensamientos y su preocupación le había llevado demasiado lejos. Esto no era lo que debería pasar hoy.

Por su cabeza pasaban algunos nombres, unos más fuerte que otros. Sin embargo al final estaba allí, sentado junto a una Alyss, ligeramente avergonzada. Completamente dada a él, sin ningún tapujo o problema, como si fuera su primera vez. Era una noche que ella planteo con ilusión para él y ella. Seria pretencioso sacar una conclusión sobre él por que, pero... 

Matthew no termino ese pensamiento y se levanto para estirarse un poco. En ese momento miro a la Alyss que ocupaba el asiento, con una sonrisa enmascarada para no romper la situacion. Pero de golpe... Ya no veía a la misma Alyss que se hubiera enfadado y huido para no tener que enfrentarse a la situacion. Ahora estaba allí, esforzándose por seguir con esta... cita... de pie. Algo que era importante para ella. Se dio cuenta que no estaban aquí por nada más importante que no fuera simplemente pasar un tiempo a solas de una forma especial. Alyss Laine había madurado.

- Si, vayamos al restaurante -dice ofreciéndole la mano con una sonrisa- Como sigamos así no vamos a comer en la vida y seguro que es de esos sitios que tarda en prepararte la comida por que la están decorando.

De golpe... Toda la preocupación que rodeaba a Matthew desapareció, simplemente se calmo. No era peligroso estar allí, no era por nada especial, solo quería demostrar sus sentimientos. Aunque fuera de una forma claro-indirecta para los ojos de Matthew. Si Alyss aceptara coger su mano, no dudaría en apretarla con la suficiente fuerza como para hacerle entender que no quería soltarla.

Cuando le vi levantarse, sonreírme y tenderme la mano, sentí que por fin todo estaba volviendo al punto que debía. Por un momento, me quedé mirándole a los ojos. No debió ser más de un segundo. Luego sonreí, y le cogí la mano.

—Sí, vayamos — le contesté —. Créeme, tardará... pero merecerá la pena.

Estaba contenta. Hasta ahora, todo había sido un vaivén de emociones... y, por fin, parecía que se había estabilizado. Quería que ese momento durara lo máximo posible. Su mano me apretaba con fuerza, pero no llegaba a hacerme daño. Era una firmeza suficiente como para darme seguridad.

Durante el camino al restaurante, estuve callada... de vez en cuando le miraba de reojo, pero no me atreví a pronunciar ninguna palabra. Temía poder romper aquel instante. De hecho, permanecí así hasta que llegamos.

—Buenas noches — le dije al camarero que nos atendió —. Tenía reservada una mesa para dos.

Sí, había reservado la mesa con anterioridad. Y sí, nos habían dado la mesa junto a la ventana tal como pedí. Era la mesa mas tranquila de todo el restaurante, y la que mejores vista tenía, pues la ventana daba a un hermoso jardín, que... alumbrado con la luz de la luna, obtenía una belleza extraordinaria.

Cuando Alyss le cogió la mano, pudo sentir que lo que pensaba era cierto. Realmente esos pensamientos no estaban totalmente conjuntos, pero la sensación de tocarla sin sentirse absolutamente extraño... Hizo que pudiera relajarse. En viaje hacia el restaurante no hablo mucho, más que nada quería disfrutar de la sensación y pensar bien las cosas. No se sintió incomodo, pero esto demostraba más de lo que pensaba. Alguna vez que otra pillo a Alyss mirándole, pero hizo como si nada y siguio el camino con tranquilidad. Una vez llegaron al restaurante las cosas cambiaron un poco.

Realmente los decorados... Jardines y todo eso no le impresionaban. Posiblemente carecía de esa sensibilidad. Perfectamente podría descendir algo bonito de lo que no, pero realmente no le importaba realmente. Si era un sitio que le gustaba a Alyss tampoco era para despreciarlo. Al darse cuenta de esto, se dedico a observarlo un poco más pensando en su mente por que le gustaría esta clase de lugares... Eran misterios del corazón femenino.

- Es un buen lugar -dice de una forma un poco nerviosa, como si simplemente quisiera decir algo para iniciar una conversación- ¿Tienes buenos recuerdos de este lugar o simplemente es un gusto preferente al lugar?

Con una conversación iniciada seria más fácil enlazar la siguiente y así seguir a la siguiente de forma infinita. O por lo menos eso esperaba. De una cosa a la otra empezaron a mantener conversación varias, quizás opinando sobre algunas que otras cosas o simplemente contando que le gustaba. Matthew tampoco quería entrar en temas sobre técnicas de entrenamiento ni nada de eso, así que intento no manejar mucho la conversación y dejaba que Alyss la manejara intentando preguntarle sobre sus gustos y sus pensamientos sobre algunos temas. Si intentaba averiguar cosas sobre él no tendría problemas en contarle alguna que otra cosa, pero que evitara preguntar sobre su padre o cualquier tema relacionado con él lo esquivaba de forma magistral. A pesar de ello, solía seguirle el juego y comentarle cuantas más cosas mejor.

Al final de la velada simplemente podía sacar un par de conclusiones. El servicio estaba bien, el cocinero era lento de cojones, la comida en pequeñas cantidades no era el producto favorito de Matthew y que la velada estaba yendo viento en popa, aunque las dos primeras se desfiguraron en su mente con la ultima.

Cuando salimos del restaurante, avancé de un salto hasta colocarme justo delante de Matthew y le miré a los ojos. La charla había sido agradable, eso sumado a la buena comida... se podía decir que había sido una magnífica cena.

—Estoy llenísima — dije llevándome la mano a la barriga —. ¿Tú no?

La verdad es que la comida había sido mínima, pero de una calidad exquisita. Magret de pato a la naranja, vino tinto añejo de reserva de la tierra, precisamente del sur de España (ya quedaban pocas, así que no había sido precisamente barato... pero el tema del dinero no era importante después de todo, invitaba yo), y de postre un impresionante Paris-Brest para compartir.

—No me importaría comer aquí todos los días, ¿sabes?

Sonreí, y volví a colocarme a su lado para cogerle de la mano y seguir caminando. Tenía el rostro un poco colorado debido al vino... quizá por eso me mostraba un poco más infantil que de costumbre.

—¿Has practicado cómo bailar? — le pregunté finalmente —. Me apetece mucho mover el cuerpo , y... creo recordar que había una por aquí cerca.

Me llevé el dedo índice de la mano libre al labio y miré a mi alrededor tratando de orientarme. Justo tras un segundo, señalé una calle con gesto triunfante y, acto seguido, tiré de Matthew para allá. Quería bailar de nuevo con él... aunque ya preveía de que el chico no se mostraría tan animado como yo.

Ciertamente Matthew estaba algo apenado y hambriento aun. No quería aprovecharse de Alyss y pedir más comida, pero sabia perfectamente que esas cantidades eran un crimen, aunque estuviera buena. Sin embargo la situacion para él no era algo que le perjudicara, realmente podría ser peor, ya sabes por el tema de podría ser un restaurante vegano. Cuando la chica apareció delante de él le cogió de improvisto y se sobresalto un poco.

- Yo la verdad es que comería algo más, pero estoy bien - dijo con su sequedad normal- Sobre  el tema de bailar... He practicado poco, por culpa de los entrenamientos y todo eso. Aun así, esta bien, vamos allí -le dijo con una sonrisa siguiendo el juego a la bebida chiquilla.

Era menor de edad y había sido un poco irresponsable dejándola pedir alcohol, pero no era propicio pararla si ella invitaba. Él no bebió, aunque si le dio un sorbo al vino si la invitaba. No se encontraba mal y ver a Alyss algo más contenta le alegro, por lo que no le resultaba extraño tener alguna que otra situacion comprometida con ella. A pesar de que su ultimo baile hubiera sido algo más atrevido, por lo menos en sus recuerdos, no esperaba que la situacion no fuera mucho más diferente a aquella.

Aun era temprano, posiblemente serán entre las 10:45 y las 11:30. Aun la noche se había vuelto ni peligrosa ni extraña para alguna clase de personas, por lo que las discotecas estaban realmente medianamente cargadas a esta hora. Sin embargo a la discoteca que me llevo Alyss esta vez había una fiesta extraña. Al parecer querían celebrar una fiesta de música disco y dance. 

Cuando Matthew entro y escucho la música, parecía mucho más animado, incluso movió un poco el pie al ritmo de la música y parecia mover ligeramente la boca, como si estuviera... ¿Cantando la canción? ¡¿MATTHEW CONOCÍA ESTA CANCIÓN?! Por motivos obvio parecia listo para bailar... Ahora ¿Y Alyss estaría a dispuesta a bailar este tipo de música?

- ¿Lista para un baile? -le dice al oído para invitarla.

La música de este tipo extrañamente hacia que el corazón del joven se dispara y hiciera que su cuerpo fuera al ritmo de forma automática. Parece que esta vez si iba a poder cumplir la voluntad de su joven compañera. Era hora de la guerra de bailes.