Partida Rol por web

The Force War, Prelude

Preludio: Los hermanos Orrein.

Cargando editor
28/08/2011, 21:51
Director

Achaikos. Al fin ves la puerta de vuestra casa, de vuestro refugio, no has corrido tanto en mucho tiempo y llegas a la puerta y te sostienes en ella, oyes las voces alegres de Teebo y Mizaa al otro lado y suspiras alivado. Ya está todo atrás. Y seguro que habéis conseguido algo con lo que comer.

Lisandra. Después de todos los acontecimientos de la noche (y eso que casi ni ha empezado) te acercas a casa preocupada por tu hermano, y un poco (aunque no tanto) por Teebo y Mizaa, los dos huerfanos que viven con vosotros. Te alivia ver la familiar figura de Achaikos que sale de un callejón y se dirige a la puerta de casa apoyándose en ella.
Pero... ¿Qué pasa? Ves como el pequeño tiene una oreja absolutamete roja y parte del pelo de ese lado quemado como si se hubiera acercado a una plancha ardiente o algo asi.
 

 

Cargando editor
29/08/2011, 00:35
Achaikos Orrein

Me arrastro más que correr, ya, de lo cansado que estoy. Me duele el costado izquierdo, el derecho o los dos, no sé, pero me cuesta respirar. Y sin embargo, tan cerca, ya estoy en zona segura. Me esfuerzo en dar paso tras paso, aminorando de trote ligero a caminar, apretándome fuerte el pecho. Respirar me duele, pero no respirar me duele más... bueno, de otra manera. Me relamo los resecos labios pensando en una deliciosa y refrescante fruta de agua.

Tuerzo una esquina y ya veo la puerta, sintiendo un verdadero alivio. Pienso en lo que haré con el dinero para evitar el dolor: probablemente, el regalo del pasado cumpleaños de Lis, una sesión de duchas calientes y limpias! A cada paso que doy es como si las piedras del suelo se clavasen en mis más que cansados pies, como si las zapatillas tuviesen cosas por dentro que me arañasen. 

El dolor de pies se une intensamente a los otros, lo cual hace como un esfuerzo horrible el llegar y apoyarme en la puerta de casa, chafando mi cara completamente en la puerta y murmurar:

- Casa -"Abrazo" la puerta.

Me siento en el suelo, mientras oigo las risas de Teebo y Mizaa, cerrando los ojos satisfecho de que mi plan haya funcionado. Es un alivio ver que lo que se practica con Lis funciona con otros. Me quito las húmedas zapatillas para poder contemplar las zonas enrojecidas de la planta de mi pie. Me toco y molesta. El otro pie lo tengo igual, así que comienzo a masajearlos allí mismo con las manos.

Enhorabuena, maldito héroe -Me lamento en silencio, sufriendo cuando mi "masaje" tocaba las rozaduras.

Cargando editor
30/08/2011, 19:33
Achaikos Orrein

Conjunta Hermanos Orrein

 

Lisandra: Me había dado prisa. Mucha. Tanta que apenas me dió tiempo de guardar la extraña caja en el interior de mi mochila. No tengo muy claro si quiero que nadie se entere de que la tengo, no vaya a ser que el borracho ese luego cambie de idea y decida que quiere recuperarla y luego me acuse falsamente de robarla... Mis pies recorren la distancia que queda, con rapidez y mis ojos en seguida se fijan en el estado de mi hermano.
- No estabas así cuando te dejé en casa- replico, contrariada, como saludo, señalando hacia su oreja y acaricio su pelo quemado, al acercarme-. Qué has hecho ya?

Achaikos: Me sobresalto al oír la voz de mi hermana, alzando la vista y gimiendo de dolor cuando su caricia roza mi oreja. Aparto su mano y pongo morros durante un rato, porque yo no he hecho nada.
- ¡Au! Correr, sólo correr.

Finalmente le sonrío y le doy un pequeño abrazo, para acto seguido contarle tooodo lo que ha sucedido.
- Mizaa robó dinero a unas lagartijas que andan y corren, aunque nos pillaron y nos persiguieron ¡hasta la Zona Subterránea! Yo les dije a Teebo y Mizaa que volviesen a casa, mientras yo me encargaba de ésas cosas. Lo que pasa, es que sacaron armas y comenzaron a dispararme -A medida que hablo me emociono más y más-. ¿Recuerdas aquella piedra que me tiraste una vez y la esquivé? ¡Pues lo mismo con los disparos! Y he corrido, mucho, mucho.

Jadeo cuando acabo de contarle, exaltado de la emoción de poder contarlo.
- He ganado dinero, Lis -Comento orgulloso.

Lisandra: Enarco una ceja como toda respuesta mientras me va describiendo sus hazañas con los hombres-lagartos hasta que finaliza. Le doy un abrazo fuerte a mi hermano y luego levanto una mano y le sacudo una colleja.
- Pero tu estás tonto o qué? Qué quieres, matarme de un susto?!!- le regaño -No vuelvas a jugártela de esa manera sin estar yo, o al menos contesta al puñetero comunicador!- vuelvo a abrazarle con fuerza y suspiro aliviada. "Está bien, es lo que cuenta, maldita sea, a veces le estrangularía cuando hace estas cosas a mis espaldas!".
-Y a esos dos! Ya hablaré luego yo con esos dos acerca de incursiones sin mi!- protesto en plena vena protectora maternal, aquellos dos niños los considero casi tan hermanos pequeños como a Achaikos.
-Vale, y a cuanto asciende nuestro tesoro, hermanito?- le sonrío cariñosamente.

Achaikos: Sonrío encantado con el abrazo de Lis, aunque luego me regalara una preciosa colleja por vete-tú-a-saber qué motivo. Jamás me gustarán las niñas: de pequeñas gritan y son muy pesadas; y de mayores pegan y son muy pesadas.

- La idea era ir a por algún mecánico, pero se nos presentó una oportunidad y... -Murmuro, abrumado por su repentina bronca por haber intentado ayudarla-. ¡Además -Añado, recuperando el coraje y la voz-, yo ya no soy un niño y tengo que comportarme como un hombre!

¡Pues claro que sí! Además, así ella no hará ésas cosas tan feas. Dudo acerca de cuánto hemos ganado, ya que los números no se me dan del todo bien. Farfullo mientras cuento con los dedos, intentando hacer memoria de cuánto era:

- ¿Chorrocientos?

Lisandra: Bufo exasperada, siempre la misma discusión sobre "ya soy mayor, no me agobies, blablabla".
-Así que un mecánico... Y como demonios acabasteis con los lagartos si perseguíais un "mono gris"? Me lo quieres contar?- le miro con suspicacia. Está claro que aquí algo falla -Chorrocientos? Oye, vas a tener que aprender a contar mejor, Señor Yanosoyunniño!- digo en tono burlesco.

Achaikos: Cierro la boca, ya que no pienso decirle nada, aunque su mirada es tan directa que jo, ¿cómo puedo engañarla? Me pillaría, yo no sé y...

- Estábamos caminando tranquilamente y vimos la cartera en un bolsillo desprotegido y... pero te aseguro que no fue Mizaa, fui yo, ¿eh? Estaba todo controlado, sí.

Me ofendo, no es que no sea mayor por no saber contar, ¿verdad? Lo que he hecho hoy lo demuestra.
- Los números son difíciles -Me callo-. ¿Estás enfadada?

Lisandra: Sacudo la cabeza levemente, si es que no aprende, mira que le he dicho veces que no se arriesgue tanto, que los objetivos fáciles no existen... Suspiro levemente.
-No estoy enfadada, sólo muy preocupada, no me gusta que te metas en líos tú solo, no quiero que te pase nada, vale?- le doy un nuevo abrazo y le doy un beso en el pelo -Ya es suficiente con que me la juegue yo...- murmuro por lo bajo, acordándome de lo que acababa de pasar en el bar.

-Prométeme que la próxima vez al menos me llamarás, usa ese melón de agua que tienes por cabeza, vale?- finalizo, sé que no puedo hacerle prometer que no volverá a meterse en líos él solo porque a veces creo que Peligrosidad es su apellido, pero al menos puedo hacerle comprender que por lo menos me avise para saber donde está e intentar salvarle o algo-. Anda, enseñame que has conseguido...- le sonrío cariñosamente.

Achaikos: Sonrío cuando dice que no está enfadada, sólo preocupada por mí y me dejo hundir en su abrazo. No hago gesto alguno de apartar sus brazos mientras ella habla, farfullando un "lo prometo" aún teniendo la cara 'chafada' contra su cuerpo. Le doy un par de palmaditas en la espalda, ya que parece realmente preocupada aunque yo esté bien.

- ¿Y tú? ¿Dónde estabas? -Pregunto, agarrándola de la mano cuando me suelta y se dirige a la puerta-. Cuando llegué a casa ya hacía rato que no estabas, por éso salimos sin ti.

Me la quedo mirando fijamente, esperando que me diga que no ha estado haciendo cosas malas, sólo... comprando chuches.

Lisandra: Ahm.... Me quedo pensativa unos segundos, abrazada y siendo aplastada por mi hermano, en su abrazo de oso, para ser tan enano tiene fuerza el cabrón!
-Salí a dar una vuelta, pero se me fue la olla y me olvidé de la hora que era.  Pero a cambio, he traido algo interesante y podremos comprar una manta nueva, para cuando llegue el invierno. Iremos al mercado a comprar comida, nada de esas barritas energéticas, algo decente! Y una pieza de fruta fresca para los dos!- sonrío, se me hace la boca agua y mi cuerpo reacciona con un rugido de mi estómago. Tengo hambre, con tanto "ejercicio" entre el piloto y Lena.

Achaikos: Mi sonrisa deslumbra cuando oigo que ha traído algo interesante. ¡Y fruta! Me relamo los labios.

- ¡Ñam ñam!

Mi estómago también ruge, vacío después de tanta carrera. Y aún me duelen mucho los pies. Mientras entramos, le comento cómo dejé atrás a las lagartijas:

- ...¡Y corría tan rápido que casi parecía que volaba! Y, y me caí y me raspé las rodillas, pero seguí corriendo -Si no fuera por el dolor de pies, casi saltaría en el sitio-. ¡Soy más rápido que una aeronave de tercera!

Lisandra: Suelto una risa por lo bajo ante el modo de describir su aventura, especialmente la huida. Es tan adorable que no puedo evitar no estar enfadada con él, nunca consigo hacerlo más allá de unos pocos segundos, decir lo contrario sería mentir.
-Y tú solo pudiste escapar de tantas lagartijas?- pregunto extrañada. Bueno, es un chico listo y a veces ve cosas que los demás no vemos, quizás fue eso... Y desde luego es muy rápido corriendo, el que más! Paso un brazo por sus hombros y abro la puerta que nos permite entrar en la casa abandonada. Es hora de descansar, antes de ir a comprar comida.
-Descansemos un poco, deja que te mire ese raspón y luego iremos a comprar la fruta, vale?- le digo en tono suave.

Achaikos: Afirmo con la cabeza, bueno, sólo eran dos pero tenían armas! Asiento con la cabeza de nuevo y entro a casa con ella, aunque lo primero que hago es llamar a mis amigos.

- ¡Mizaa! ¡Teebo! -Grito-. ¡¿Y mi parte del dinero?!

Cargando editor
31/08/2011, 00:33
Teebo

Desarmáis la cruda trampa y el avisador que tenéis después de la entrada, en el pasillo, para hacer la vida imposible a los maleantes que puedan intentar robaros y los volvéis a colocar en su sitio. Oís a Mizaa y Teebo muy excitados y cuando entráis en el pequeño patio tapiado que hace la vez de sala común veis que en la mesa de plástico han puesto un mantel de papel y sobre él, varias botellas de plástico contienen líquidos de colores. Y debe de haber un montón de otras golosinas.

-Mirad, mirad.-Dice Teebo con los ojos relucientes... y os dais cuenta que se ha comprado al menos un colirio de esos de acción rápida, ya que en sus ojos la sempiterna infección que tiene casi ha desaparecido.-Hemos comprado medicinas y comida.-¡Y sobran cincuenta créditos!.- Los tiende a Achaikos.

Entre lo que han comprado hay varias botellas de fizzyglug, dulces y calorías en forma de aperitivos baratos, pero también hay medicinas y repelentes de bichos. Desinfectantes y antibióticos para parar un tren. También antídotos contra las criaturas mas desagradables de la subciudad.

-¡Fiesta!-dice bailando hacia delante y atrás, presa sin duda de un ataque de azucar.

Notas de juego

Los crios no son tontos, probablemente habrán ido a una farmacia/colmado de la ciudad media baja, donde habrán encontrado de todo a precio medio/bajo y sin riesgo que les atraquen.

En mierdas se pueden haber gastado 5-10 créditos, en curas y medicamentos unos 100.

Cargando editor
31/08/2011, 00:46
Mizaa

-Sabíamos que volverías, Achaikos, cuando te llevaste a ese Trandoshano detrás de ti es seguro que nos salvaste. Que miedo pasé cuando nos disparó. Eres el mejor. Los niños sois feos y oléis mal, pero te nombro niña honoraria.-

Para subrayar el riesgo que ha corrido Achaikos os señala una cartera vacía de créditos, pero con varias tarjetas de datos y una identificación de Cazarrecompensas Registrado. Un hombre serpiente Trandoshanoo de aspecto fiero está retratado en él.

-Vamos Liss...-dice a Lisandra.-¡Fiesta! Cuando te cambiaste esta tarde estabas muy guapa, yo de mayor quiero ser como tú.-

Notas de juego

La pequeña Mizaa, que no creéis que llegue a diez años, todavía no es consciente de muchas realidades de la vida.

Hace medio año que la adoptásteis, al principio robaba comida de vuestras sobras y de las de otros mendigos o gentes de clase baja que malviven por la zona. Por alguna razón descubrísteis que lo hacía aunque nadie más podía, fue como un presentimiento, y luego la encontrásteis en su agujero, con obvios sintomas de desnutrición y maltrato. Habéis podido meterle algo de carne en los huesos y la habéis adoptado, casi podría parecer una niña normal en algunas ocasiones. Sobre todo si estudia las lecciones de educación que programáis en un viejo datapad.

En la calle hay muchas bandas de chicos marginales y delincuentes, que acaban pasando droga o metiéndosela, vosotros solo habéis adoptado a Teebo, que es muy joven también, un poco más joven que Achaikos, pero es algo retrasadillo y muy bonachon (y mucho más pequeño y con menos edad mental que un rodiano de su edad).

Cargando editor
01/09/2011, 14:55
Achaikos Orrein

- ¡¡Fizzyglug!! -Exclamo al reconocer las botellas de refresco, alejándome de Lis para ir directo a por una de las botellas, la cual abro antes de coger tres chocolatinas y sentarme en el suelo. Agarro los 50 créditos que me da Teebo y se los tiendo, a mi vez a Lis-. ¡Eh! -Me llevo un bocado-, buibfonahompha -Trago-. ¡Muy buena compra!

Suelto una pequeña risotada ante lo que dice Mizaa, sonrojándome ligeramente y acariciando mi nuca.

- Bueno, bueno, ¡tampoco fue tan complicado! -Mi sonrisa es ancha como... como... bueno, es ancha. Me gusta que me haya dicho éso, ¡pero tampoco puedo ir vacilando o Lis me pegará un capón! Vuelvo a dar un gran mordisco a la chocolatina, aunque ésta vez espero a tragar antes de hablar: - Se dice "niño honorario", Mizaa. Las niñas sois vosotras -La señalo-, que sois chillonas y muy cursis. ¡Además! Yo ya no soy un niño, tengo trece años, ¿vale?

Cojo la cartera y miro la foto del lagartija.

- ¡Sí, sí era éste! O éso creo. Eran dos. Pero los dos tenían cara de lagartijas. ¿Ves, Lis, ves? -Le entrego la cartera-. ¡No te mentía! ¡Fui perseguido por lagartijas que corrían y disparaban!

Ya me he acabado mis chocolatinas, así que ahora doy un último trago a la botella y atraco un par de golosinas de ésas que parecen chicle. También, imitando a Teebo, comienzo a bailar adelante y atrás al son del cántico "Somos los mejores, tralalá".

Cargando editor
02/09/2011, 15:58
Lisandra Orrein

[Achaikos-Lisandra-Teebo y Mizaa]

Lisandra: Entro en el pequeño patio y veo a Teebo saltando mega-excitado y gritando como nunca. Sonrío al verle tan felizoide, es tan adorable y sencillo, como no quererle? Miro las compras que han hecho. Vale, nada de eso es sano, como pretendo que comamos todos, para no acabar enfermos ninguno de los cuatro, pero bah! ha sido un día duro, nos merecemos una recompensa! Me acerco a Teebo y le doy un abrazo cariñoso y un beso.

-Fiesta!! Pero no comas demasiados dulces que luego te sientan mal si te atracas demasiado, vale?- le pido a éste. No puedo reñirle, al menos no ahora ni azucarado al máximo como está. Levanto la cabeza y veo a Mizaa, me acerco a ella y la cojo en brazos, para achucharla. Aunque ha ganado peso, sigue siendo demasiado ligera para su supuesta edad.

-No, Mizaa, no quieres ser como yo, tu serás mucho más guapa y mejor- le doy un beso enorme en la mejilla y la apreto fuerte contra mí. No sé que haría sin los tres.

-Ach, no comas tan rápido o te atragantarás! Que no es robado!- le saco la lengua, en broma -Y no te hagas el chulo con Mizaa y Teebo, sigues siendo un niño, hasta que no te salga pelo en la cara, nada!- le digo, para picarle. Lagartijas que disparaban... A dónde iremos a parar en esta megalópolis... Bajo a Mizaa y me acerco a Ach y le cojo la identificación del lagarto y me la quedo mirando.

-Sigo pensando cómo demonios pudiste huir tu solo de dos caza-recompensas armados hasta los dientes...

 

Achaikos: Dejo un poco de lado los dulces al llamarme la atención, poniendo mala cara ante lo de la barba. Pero su sorpresa ante mi huida me llena de orgullo y satisfacción.
-Porque soy realmente bueno, Lis. ¡Soy más rápido que una aeronave de tercera, te lo dije! Y bueno -añado-, porque un 'pardillo' se detuvo a ayudarme y se quedó con ellos. ¿Recuerdas? ¡Lo que dijo aquél niño que huele tan mal! Busca la ayuda de los que tengan cara de tontos y desplúmales luego. Solo que no tenía nada útil, sólo unos tornillos o... algo raro, no sé.
Con tranquilidad, me fijo en la caja que llevaba. La señalo con curiosidad.
- ¿Y eso?


Lisandra: Levanto la mirada de la tarjeta identificadora ante su comentario. Me lo quedo mirando largamente.

 

Master: Teebo y Mizaa devoran las existencias de golosinas como sólo dos niños hambrientos pueden hacer... aunque han comprado muchas, y de las baratas. Así que todavía quedan.

 

Lisandra: -Sé que eres muy rápido Ach, pero ya os lo he dicho muchas veces, no me gusta que corráis riesgos innecesarios... - digo algo seria. "Un pardillo? Así que es eso... usó a algún incauto como escudo humano, eso ya me cuadra más". Bueno, tampoco es que seamos unos samaritanos, somos lo que somos, robar implica eso, que siempre hay algún despistado del que aprovecharse. Me encojo de hombros. Dirijo mi mirada de nuevo hacia lo que señala Ach. La Caja,

-Es una caja, queréis que la abramos juntos?- les sonrío a los tres, mientras me acerco a donde está la comida basura y cojo uno de los dulces que compraron y la botella de fizzyglug. La abro y bebo un trago, luego le paso la botella a Mizaa y a Teebo para que ellos también beban.

 


Master: la botella de fizzyglug, con su sabor a frutas azucaradas dejó un regusto amargo a Lisandra, un regusto de infancia perdida y casa. Sus padres a veces les habían comprado botellas de la conocida marca de refrescos. Pero con toda la algarabía... la sensación se transformó en algo más dulce... podían seguir adelante y formar cada uno sus propias familias


Achaikos: Teebo y Mizaa han parado de bailotear y vuelven a la carga de los dulces, por lo que les acompaño mientras se atracan antes de quedarme sin.
-¿Qué? ¿Puedes abrir la caja? -Me acerco a ella cargando golosinas en los brazos y dejo un montón sobre la caja, para luego apartarlos con la mano. Me siento en el suelo, alrededor, y miro a Lis.


Lisandra: Ladeo la cabeza varias veces. Me tocará a mi luego aguantarles la cabeza cuando vomiten por el dolor de estómago a causa de las guarradas que están devorando. Bueno, mañana por la mañana iré a comprar fruta y las mantas.
-No lo sé, lo intenté antes pero ehm... tenía prisa por llegar a casa y no pude mirarlo demasiado- respondo, con sinceridad. Simplemente dejo que acaben con todo, vale que lo pasarán mal luego pero vivimos el momento, ahora son felices en su mundo de azúcar. Cojo la caja y la miro y remiro, para ver si realmente se puede abrir o es que es enteramente sólida y sólo es un cubo sin más.

-El tipo que me la regaló dijo algo de ser "merecedor" de la caja, no entendí que quiso decir con eso, la verdad...- digo en voz baja, mientras sigo observando el objeto, en busca de ranuras o algún mecanismo que permita hacer algo con ella.

 

Master: Mientras Achaikos y Lisandra empiezan a mirar la extraña caja, oyen fuera a varios pandilleros corriendo por la calle y riendo mientras comentan los pormenores de la última carrera de motojets. Es una escena habitual en casa de los Orrein, si no fuera porque hoy hay comida de sobra en la mesa y tienen bastantes créditos. Hoy la cosa pinta bien. Y para los siguientes días también. Entonces comienza el bombardeo.

Cargando editor
08/09/2011, 10:10
Director

Desde las enrejadas ventanas los cuatro integrantes de la casa pueden ver como desde el cielo llueven lineas azules y rojas que golpean varios edificios de la Zona Alta, de las cúspides, licuando metal y cristal y reduciendo las cúpulas y rascacielos a esqueletos de metal fundido. Y poco después bolas de fuego y restos caen ya sobre toda la ciudad, deben ser las naves del tráfico regular.

Si miran en la dirección del espacio puerto pueden ver que es la única zona que a pesar de no encontrarse en la Zona Alta, también es bombardeada sin cesar, muchas naves intentan alzar el vuelo entre la tormenta láser, pocas consiguen llegar a la atmósfera.

Teebo y Mizaa os miran con pavor.

Cargando editor
08/09/2011, 10:38
Teebo

-Eso... eso no son fuegos artificiales ¿Verdad?-

Cargando editor
13/09/2011, 16:00
Achaikos Orrein

Guardo silencio ante el "espectáculo" que hay ante nuestros ojos, prestando especial atención a las naves que intentan alzar el vuelo y caen como moscas sin siquiera haber tenido opción alguna. Me puedo llegar a imaginar que algunas contenían personas asustadas que sólo intentaban huir, además de las pocas de combate que pretendían defendernos. Y también me puedo imaginar su miedo y terror.

- No -Le respondo a Teebo, con la boca completamente seca. Miro con seriedad a Lis unos segundos y después me dirijo a coger una botella para darle un trago, con la vista perdida en el suelo-. ¿Y ahora qué hacemos? No podemos quedarnos aquí, podría caernos algo encima y aplastarnos.

¿Qué está pasando? ¿Por qué nos atacan? No nos están bombardeando directamente a nosotros pero, si nos los encontramos, ¿nos matarán? Vuelvo a mirar a Lis, esperando instrucciones.

Cargando editor
14/09/2011, 18:16
Lisandra Orrein

El ruido y la luminosidad hacen que mire por la ventana enrejada, eso y el nerviosismo de Teebo, que parece aterrado y no me extraña. Me muerdo el labio inferior al ver como están bombardeando la parte alta de la megalópolis.

"Vamos a morir o quemados o aplastados por derrumbe si nos quedamos aquí, a este ritmo no tardarán mucho en llegar a esta parte de la ciudad...", pienso para mis adentros. Sólo somos un atajo de niños, que se supone que hemos de hacer?!

"Sacarles, Lis, debes sacarles de esta maldita ratonera mortal antes de que lleguen los invasores o decidan arrasar la ciudad entera y no dejar a nadie vivo... Quien sabe cual es el objetivo de los atacantes? Y tampoco es nuestro problema saberlo, sólo sobrevivir".

-Ach, Mizaa, recoged la comida y las bebidas y agua que hayan quedado. Rápido- les digo a ambos. Cojo de la mano a Teebo- No cariño, no son fuegos artificales, pero no dejaré que nos pase nada, vale? Anda, ven aquí- y le paso mi brazo por sus hombros, para tranquilizarle. Les doy la mochila a Ach y Mizaa.

-Metedlo todo aquí dentro y coged un par de mantas- les ordeno a ambos. Tenemos que alcanzar el puerto espacial, quizás podamos conseguir colarnos en alguna nave.

"Bueno, está ese piloto de antes, por lo que ví, el tipo es muy bueno en lo suyo, quizás con un poco de suerte, si no se ha ido todavía, pueda conseguir convencerle de que nos deje colarnos como polizontes en su nave... Parecía odiar mucho a su jefa." Lo malo es: Y si no está? Y si se ha ido? Tendré que tirarme a un piloto asqueroso para que nos deje entrar? No será jugársela demasiado con cualquiera que se haga llamar a sí mismo, piloto y acabemos todos muertos? "Bueno, mejor muertos todos juntos, que sucumbir por la radiación o el hambre, dispersos y solos."

-No nos quedaremos -sentencio con firmeza, como respuesta a los comentarios de Achaikos. Cojo la caja bonita y la meto en la mochila también, quizás tenga algún valor para alguien y la podamos canjear por una salida segura del planeta... Una vez han acabado de recoger todo lo consumible a mano, me cargo la mochila, cojo a Teebo en brazos. Él es muy bajito y de piernas cortas, no quiero que en nuestra huida se tropiece, se caiga y se haga daño...

-Ven Mizaa- le pido a la niña, una vez hemos recogido todo lo llevable, y la cojo de la mano -Ach, tu guías, nos vamos al puerto, saldremos de aquí como sea! Niños, decid adiós a nuestra antigua casa y a este planeta!- finalizo, con mucha seguridad, más de la que realmente siento por dentro.

Cargando editor
17/09/2011, 21:26
Director

Teebo y Mizaa cumplen las instrucciones que les da Lisandra, guardando toda la comida y la bebida en la mochila y momentos después abandonáis la casa a contemplar lo que está pasando fuera.

En vuestra zona, tan deshabitada, no parece haber mucho movimiento, sin embargo podéis contemplar alguna de las bandas de pandilleros que alegres por la situacion se dirigen hacia las zonas más elevadas con planes, anunciados a gritos, de robar las tiendas y saquear a los ricachones de la cúspide.

Al cabo de un rato los brazos de Lisandra le duelen de llevar al joven Teebo y los pies de Achaikos vuelven a dolerle de tanto andar y correr, pero afortunadamente habéis recorrido más de medio camino hacia una sección de hangares clandestinos que sabéis está cerca (el espaciopuerto está a varias horas de caminata).

Sin embargo el torrente de laseres del cielo se detiene al cabo de una media hora y podéis contemplar como la batalla se queda en el espacio.

En vuestros comunicadores aparece un mensaje, debe ser del canal oficial, que llega a todos los comunicadores del planeta.

Cargando editor
19/09/2011, 21:59
Noble de Raxus

En las pantallas sale una imagen de mujer que empieza a hablar, su voz también sale de los comunicadores.

-Aquí la consejera Barh'eia Mavros del Alto Consejo de Raxus, rogamos a todos los ciudadanos que ayuden a sus congéneres en la medida de lo posible, y que intentaremos solucionar esta agresion no provocada cuanto antes. La ayuda médica está en camino.-

-A la nave atacante repetimos nuestra rendición incondicional, en un canal público, tal y como pidió, nos rendimos totalmente y estamos a su merced.- Toma un datapad y arruga el gesto al leer de él.-Leo textualmente como ha sido acordado en la rendición: Raxus se rinde al Poder del Lado Oscuro y le entregaremos a las ratas Jedi que se esconden en el Planeta. Ciudadanos... ahora contactaremos -arruga más el gesto.-con El Supremo Señor Darth Akef y el nos dará las órdenes precisas para servirle adecuadamente.-

Cargando editor
19/09/2011, 22:00
Darth Akef

La imagen del canal oficial se divide en dos en todos los datapads y un humano anciano de pelo blanco y vestido con algún ropaje negro se dirige al planeta desde algún lugar ¿Podrá ser desde la nave que está causando tanta destrucción?.

-Habitantes de Raxus, querida gobernante del Consejo... quiero deciros que hoy voy a liberaros, hoy es el día en el que os alzaréis sobre vuestros maestros... pero sólo lo haréis los que seáis mas fuertes, más dignos, los que no...- Toca un control en lo que parece una pantalla que tiene al lado- Observad la Gran Torre de Raxus, las viviendas de vuestros dirigentes.-

Las miradas de todos se levantan de los datapads y se dirigen al mayor de los rascacielos de los muchos que sobresalen de la ciudad, el unico que cuenta con un rudimentario escudo de energía y que ha resistido el bomardeo intacto.

En ese momento lo que parece un cometa se estampa contra la torre ¡Reventando el escudo y provocando una brutal explosión, seguida de una lluvia de fuego turboláser y de torpedos de protones que en un par de minutos hacen que el edificio, asemejando a una primitiva antorcha se derrumbe sobre la ciudad acabando con la vida de miles de personas, probablemente de decenas de miles.

Cargando editor
19/09/2011, 22:02
Noble de Raxus

-NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO ¡Loco! Ahí vivía mi familia, ¡Las familias de todos los miembros del consejo!-

Cargando editor
19/09/2011, 22:02
Darth Akef

El humano rie como si la consejera dijera lo más gracioso del mundo...Y continúa hablando: -Afortunadamente el Consejo está a buen recaudo... en las profundidades de Raxus, en un lugar de seguridad... pues que sepáis, ciudadanos, que ofrezco cienmil créditos por la cabeza de cualquier miembro del consejo y la seguridad para el que me la traiga y para su familia.-

-Y aparte... cualquier nave que salga de la ciudad será derribada, dentro de unas horas os pasaré unas imágenes de unos enemigos míos que es posible que se encuentren en ese planeta... si me los entregáis os dejaré tranquilos... mientras tanto, agradeced a vuestra consejera que me proporcionara las coordenadas de hospitales y guarderías para respetarlos... muchas gracias.-

Y la imagen desaparece y el bombardeo se reanuda... y la gente se mira horrorizada, porque sabe perfectamente contra que está disparando ahora.

Cargando editor
25/09/2011, 18:17
Lisandra Orrein

Suelto a Teebo, empieza a pesarme y queda todavía camino hasta el aeropuerto y no parece que haya mucho tumulto en la calle que lo justifique. Aún así, le mantengo cerca de mí, cogido de la mano, para evitar pérdidas o contratiempos. Miro al cielo cuando veo que los disparos paran. Me quedo algo dubitativa.

"Es mala señal... eso sólo puede querer decir dos cosas: que han abatido al invasor o bien que ha ganado...".

Trago saliva, no me gusta la perspectiva de ninguna de las dos cosas, porque sea lo que sea, siempre acaba llevando a lo mismo: represión de la población y búsqueda en la zona baja y marginal de posibles cabezas de turco relacionables con el ataque. Y eso sólo quiere decir una cosa en mi mundo: que podemos acabar salpicados nosotros. No somos nadie, sólo niños de la calle, desconocidos sin oficio ni beneficio, bajas asumibles e incluso apetecibles, no somos más que escoria para los de arriba y para los invasores. Mi diatriba mental se ve interrumpida por la señal del comunicador, suelto la mano de Mizaa, saco mi comunicador y lo chequeo.

-Parece que hay un... mensaje para la población, osea, quiero decir, para todos nosotros...- no me gusta como suena eso, definitivamente. Una mujer ricamente ataviada hace oficial el rendimiento de Raxus y toda su población.

-Era la segunda opción...- murmuro alucinada y acojonada. Cada vez me gusta menos el mensaje.

"Darth Akef? Que mal suena eso, madre mía... Suena a nuevo Emperador o al menos pseudo-intento de ello. Espero que sólo sea mi paranoia, por favor, que sólo sea mi paranoia...", rezo para mí misma. Recuerdo las historias que madre y padre nos contaban, de cuando el primero y último Emperador gobernaba y no era bonito, nada bonito. Pego un bote del susto al ver y oír como revientan y destruyen el escudo y el edificio de la zona alta de la megalópolis. Apreto con fuerza la mano de Teebo. Estoy simplemente acojonada y en shock. Es mucho peor de lo esperado cuando empezó el ataque... Hipnóticamente, continuo visualizando el mensaje, esta vez de nuestro nuevo "dueño", el tal Darth Akef.

-Miembros del Consejo y Enemigos varios? En serio? Es lo que buscan? A un par de colgados que le han robado igual unos pocos créditos?- murmuro por lo bajo, sin entender muy bien porqué demonios está pasando todo esto. Raxus es un planeta bastante próspero, pero tengo mis serias dudas de que merezca tantas... molestias por conquistarlo mediante la violencia.

"Cualquier nave que salga de la ciudad será derribada... Maldita sea! Estamos atrapados! No puedo creermelo!". Tiemblo un poco, aterrorizada, más intento recuperar el control, tengo tres niños a mi cargo, me necesitan, no puedo permitirme ponerme en plan niñita llorica.

-Mierda!- reniego por lo bajo. Miro horrorizada como está destruyendo los puntos seguros. "Maldita consejera, como se puede ser tan estúpida?! Era evidente que dispararía contra hospitales y demás! No me extraña que hayamos perdido ante semejante tipo raro!" reniego y maldigo mentalmente.

-Cambio de planes, nos vamos al sub-mundo, la superfície no es segura y de momento no podemos arriesgarnos a colarnos en una nave y que nos vuelen por los aires...- aparte de que nadie en su sano juicio querrá ahora mismo salir de aquí, digo yo.

-Pero aprovechemos el viaje y veamos de qué podemos proveernos antes de bajar ahí abajo...- lanzo una mirada de complicidad a Achaikos, él ya sabe lo que eso significa, saquear lo que podamos antes de internarnos ahí abajo, donde no tendremos nada a que agarrarnos que no sea a nosotros mismos.

Cargando editor
27/09/2011, 17:31
Achaikos Orrein

Conjunta

Ach: Me detengo y no tardo mucho a sentarme en el suelo para masajearme de nuevo los pies, mientras se escucha el mensaje entre los dirigentes del ataque y nuestro planeta. No entiendo mucho de lo que dicen, ¿Lado Oscuro? ¿Ratas Jedi? ¿Entregar? Miro atentamente los cambios de expresión en la cara de Lis, de la estupefacción e incredulidad al miedo y horror para finalmente acabar en enfado. "Vale, no pinta bien".

Suspiro. El submundo... otra vez a la Zona Subterránea. La miro con ilusión y renovadas energías al mencionar ella "aprovechar el viaje".

¿Por qué están disparando a los Hospitales si prometieron no hacerlo? 

No entiendo qué finalidad puede tener disparar a un Hospital, la mayoría son heridos y no son una amenaza. Y, en cualquier caso, ¿por qué mentir diciendo que se respetaría para luego atacarlos? ¿Por qué no desde un principio?


Lisandra: Miro hacia Achaikos, cuando pregunta el punto-clave de la cuestión. Me paro a pensar unos segundos la respuesta.
- Porque la consejera es idiota, le indicó exactamente donde estaban, si quieres aplastar un pueblo entero con un solo ataque, elimina a los más débiles y los supervivientes te seguirán como perrillos, es la manera que tiene de...- me paro de nuevo unos segundos para encontrar las palabras justas -Demostrar que no tendrá piedad con nadie, ni siquiera con los enfermos, es la manera de hacerlo...- no sé si hago bien en ser tan llana explicando eso, Ach todavía es un niño, pero ahora mismo, no es momento para eso, el tiempo de la inocencia se está acabando, a marchas forzadas.

Ach: Parpadeo varias veces, pensando en lo lógico que me parece ése razonamiento. Al fin y al cabo, ¿no es la vida en sí que hemos llevado en el planeta? Los débiles mueren, los que se buscan la vida sobrevivimos como podemos y los poderosos viven. Entonces, ¿para sobrevivir hay que hacer lo que él pide?

- Entonces, ¿deberíamos buscar a aquellos que buscan? Dijo que mantendría a salvo a la familia de aquél que le proporcionase algo. Y no quiero que nos disparen.


Lisandra: Me quedo mirando de nuevo a Achaikos, algo confusa con su planteamiento.
- No, no creo que debamos buscar a nadie de expresso, no somos caza-recompensas, Ach, para eso ya están esa gente, que sean estúpidos no quiere decir que merezcan morir de forma cruel -contesto, aunque no me acaba de satisfacer del todo mi respuesta -Ach, no somos nadie, no contamos y además, alguien que bombardea hospitales, no paga deudas, probablemente nos acabaría matando después de conseguir lo que quiere, no te puedes fiar de alguien así- complemento mi explicación de porqué no deberíamos ir a buscar a esos sujetos enemigos del tal Darth no sé qué, ya no recuerdo su nombre completo -Cuanto más alejados estemos de ese tipo y de su gente, mejor.

Ach: Asiento con la cabeza algo apenado, no es que esté en desacuerdo con sus palabras pero considero que tampoco merecemos morir nosotros. Sin embargo, sí es cierto que alguien tan malvado podría no "pagar" el trabajo. ¿Cuántas veces he hecho algo por alguien que prometía créditos y después sólo me dieron hostias?

- Entonces, ¿las ratas jedis no son ratas? 

Es algo que todavía no entiendo. ¿Ratas jedis son algo o alguien? ...no importa, Lis dice que no nos debe preocupar. Refugio, sí, éso es lo importante.

- La zona subterránea me parece segura siempre y cuándo no nos adentremos mucho. Si el suelo se vuelve... pegajoso... hay que volver, me da mala espina.

Lisandra: Las ratas jedis? La verdad es que no sé que responder a eso, la verdad.

- No lo sé, Ach, no tengo ni idea de si son ratas o no. Lo que cuenta es sobrevivir, los cuatro. Y haremos lo que sea preciso, pero no vamos a ir a buscarlos, vale? Otra cosa es que nos los crucemos y bueno, en todo caso, ya decidiríamos que hacemos al respecto -bueno, nunca digas de este agua no beberé, desconozco las intenciones de esos Jedis o del tal Darth ese que busca enemigos a su causa (a saber quienes son, mientras no seamos nosotros) -Pero si podemos evitar estar en el mismo sitio que esa gente, eso que nos llevamos de gratis, porque créeme,  donde estén esas ratas, habrá disparos y donde hay disparos, hay muertos. No vamos a ser ninguna de esas cosas -afirmo, taxativamente.

- No me gusta la zona subterránea pero no nos queda otra, Ach, aunque quizás podemos pasar por la taberna...- me acuerdo de Bass'e, "espero que esté bien y no hayan asaltado su casa o el bar, me sabría mal, es buena gente, de los pocos de este sitio".


Ach: Insatisfecho por no recibir respuesta a mi pregunta continúo caminando hacia la Zona Subterránea con la imagen de unas ratas humanoides en la cabeza. ¿Tal vez una raza llamada Jedi? ¿Serán peligrosos? Si alguien destruye hospitales para capturarlos, deben serlo. 

- A mí no me van a matar, alguien debe ser el hombre de la familia, ¿no? -Alego, seguro de mí mismo y con una ancha sonrisa-. Además, tus chistes apestan.

¿Qué se le ha perdido en la Taberna? Me pregunto si querrá comprar más fizzyglug, creo que tenemos bastantes pero con Teebo... nunca son suficiente. Miro a Lis, parece preocupada.

- Vale, vayamos a la Taberna. Ésto no es más chungo que tener dos caras de serpiente detrás persiguiéndote -La animo-. Piensa en un robo fallido, tenemos que correr, ¿qué necesitamos?

Cargando editor
11/10/2011, 00:36
Director

Notas de juego

Bueno, vamos a continuar... Lo primero, me parecéis dos jugadores fantásticos :) y lamento haberos tenido tanto tiempo en el aire, seguimos las historias de Achaikos y Lissandra, porque interpretáis tan bien que se lo merecen :)

 

Cargando editor
11/10/2011, 00:39
Director
Sólo para el director

Achaikos y Lisandra transmiten una sensación de seguridad tremenda a sus dos jóvenes amigos y encaminan los pasos del grupo hacia la taberna donde trabaja Lis, la "Alegría de Raxus", allí por lo menos hay bebidas y comida... y algo de refugio y algún amigo.