Partida Rol por web

Mire, señor. Si quiere que le ponga un whisky, se lo pongo. Zarparrilla, leche... lo que quiera. Yo se lo sirvo y no digo nada. Pero si lo que busca es información, olvídelo. Ni me fijo en las caras ni oigo los nombres. Para eso tendrá que preguntarle a las chicas. ¡Esas sí que saben sacar información!

El barman señaló hacia arriba, hacia la planta superior en donde las prostitutas habían vuelta a la normalidad y de nuevo se escuchaban puertas abriéndose y cerrándose.

Sarge se encoge de hombros, coge el vaso de whiskey y sube las escaleras a la segunda planta. Observa alrededor, mirando a las chicas. Espera que una de ellas se le acerque, y juzgará si esa muchacha puede o no saber algo. De momento no hace más que esperar.

No tienes que esperar mucho antes de que una de las putas se te acerque sinuosamente.

-Hola, vaquero. ¿Estás buscando a alguien? ¿Te valgo yo? -te dijo, pasando un dedo por tu pecho de arriba a abajo.

Despues de engañar al sheriff indicandole un camino erroneo por el que no habian ido nuestros "compañeros" los hermanos parecia que tan solo nos quedaba ponernos en marcha y por lo que parecia todos tenian lo necesario, yo no estaba muy segura pero suponia que no quedaba otra opcion asi que todos subimos a nuestros caballos o carretas y nos pusimos en camino hacia River Creek.

Ya comenzaba a anochecer cuando en la lejania se vislumbraba una hoguera que todos supusimos seria de los hermanos por lo que nos diriguimos hacia ella y finalmente los encontramos; no dije nada tan solo baje de mi caballo y busque un lugar en el que atarlo y si podia ser que pudieran descansar mientras veia a los demas.

Había cazado algunos conejos y liebres para el grupo cuando se reuniese con nosotros, c on los que eramos tendríamos para solo este día y habría que cazar mas en otro momento. Comiendo junto a mi hermano llega el grupo y mostrando la caza les insto para que se la preparen en la hoguera. Comed, podéis serviros. Después miro a Leroy, ¿ha ido todo bien Leroy?.

-Ha ido bien -respondí a la pregunta del joven pistolero, mientras aún me hallaba en la carreta donde transportaba a mis gallos-. El sheriff del pueblo anda buscándoos, pero le di una dirección opuesta. Con suerte, eso lo distraerá el tiempo suficiente como para que podamos sacarle la suficiente ventaja y descansar hasta mañana. ¿Qué pasó? ¿Cómo os pudisteis meter en problemas de un momento a otro?

Mientras aguardaba la respuesta de mi antiguo compañero de fechorías, saqué una cantimplora del interior de la carreta y le di un largo trago.

Gracias por despistarlo, el sheriff me busca por cosas de antes, mi hermano me cubrió y le busca ahora a el. La verdad no esperaba chocar tan de frente con el sheriff pero me reconoció, supongo que fue mala suerte.

Lamento que te veas involucrado, no era mi intención. Algo me dice que ese sheriff no va parar hasta que me encuentre...

Sarge observa a la muchacha sin interés. Asiente. La sigue a la habitación, y deja su rifle apoyado en una pared. La mira, de arriba a abajo, un instante. Parece bonita. Pero no está allí para eso.

- Escucha - le dice a la chica-. Te pagaré, por un buen rato. No tienes que hacer nada, simplemente sientate y descansa. No te voy a forzar a nada, solo quiero que me cuentes algo. ¿Conociste a Roy? Murió abajo, antes. Busco a su compañero, Charlie Valance. 

Al final salimos del pueblo en cuanto estuvimos todos listo y con el sheriff y sus hombres a galope tendido en dirección contraria aquellos dos bandidos, el niñato y su hermano seguirían libres durante una temporada. Cuando comenzó a oscurecer, estaba claro que debíamos acampar pero aquel fuego en la colina avisaba de que muy seguramente serían los hermanos así que fuímos hasta allí y en efecto eran ellos.

Bajamos de los caballos y nos acomodamos lo mejor posible alrededor de aquella pequeña hoguera. El destetado nos ofreció algo de caza que se habían procurado y aunque no me ofrecía ninguna simpatía la verdad es que tenía hambre, el Coronel se había metido en el buche un buen plato de estofado pero yo menos aquel whisky no tenía nada más en el cuerpo-Gracias...-dije escueto masticando la carne mientras miraba a todos los que estaban allí sin decir mucho, de momento prefería observarlos y sobre a los hermanos.

La verdad es que nunca me han pedido que haga tan poco con la boca, pero si me vas a pagar, me da lo mismo -te dijo, encogiéndose de hombros y conduciéndote a una de las habitaciones.

Al llegar, cerró la puerta, se sentó en la cama y cruzó las piernas.

¿Conociste a Roy? Murió abajo, antes. Busco a su compañero, Charlie Valance. 

Sí, el bueno de Roy. Era un poco "blando", no sé si me entiendes. Pero al menos pagaba, lo que no puedo decir de los demás. No conozco al tal Charlie, pero sí sé que hablaba de un trabajo en la frontera, en un pueblo que se llamaba... Creek algo. Dijo yo-qué-sé-qué de hacerse rico y que tenía un amigo allí que le ayudaría. Quizás se refería a ese que buscas.

La chica te miró sugerentemente. Parecía querer desnudarse, pero entonces se acordó de algo.

-Creo... ahora recuerdo, creo que su amigo trabajaba para el sheriff de ese sitio. Me acuerdo bien porque me llamó la atención muchísimo que él se relacionara con alguien de la ley.

La prostituta se levantó y se acercó a ti.

-¿Puedo... ayudarte en algo más? Soy bastante buena, ¿sabes?

Parecia que los hermanos habian cazado y tendriamos algo de cena asi que cogi un trozo y empece a masticarlo mientras me acerque a Bill.
-Deberiamos limpiar la herida y cambiar el vendaje dije para ver si me daba su aprobacion e iba a buscar las cosas necesarias para limpiarle la herida.

Por lo demas parecia que alli no habia nada para que aquel criajo se metiera en lios asi que de momento estariamos tranquilos.

Masticaba un trozo de carne mirando el fuego vivo de la madera cuando me percaté de que la joven se acercaba a mí, con la intención de revisar la herida y cambiar el vendaje, asentí y me quité el poncho para luego retirarme parte de la camisa para dejar el vendaje a la vista.

-Muchas gracias señorita Earp, he de confesarle que es raro hoy día ver a alguien con ánimo de ayudar como usted-dije estirando el brazo para facilitarle el acceso-Está claro que cada uno tenemos nuestras motivaciones para ir a aquel pueblo y aunque el suyo me sigue pareciendo curioso no dejaré de agradecer que se encuentre con nosotros-miré atento como retiraba la venda usada mientras revisaba la herida para poner otra nueva. -Tiene manos muy hábiles señorita, dedos finos, manos pequeñas...perfectas para una cirujana-dije con una media sonrisa.

-Una cirujana, o una ladrona..-

Cita:

-Gracias Sr. Paxtondije sonriente mientras me preocupaba de quitar con delicadeza la venda que llevaba puesta para limpiarle con un poco de alcohol y ponerle una nueva Pero puede llamarme Elena y ademas... dije mientras enrollaba la nueva venda al hombro y apretaba No querria que se infectara, con la suerte que tengo les necesitare dije recordando en lo que me habia dicho antes el Coronel de que si fallaba el tiro no podria ir con ellos; no queria ser una carga para nadie y la verdad es que estaba acostumbrada a ir sola asi que aquella situacion en parte se me hacia raro.

Despues de finalizar con el vendaje y terminar con la comida el cansancio se iba apoderando de mi.
-Si no les importa voy a descansar dije mientras colocaba una manta en el suelo cerca de la hoguera a modo de dormir, pues creia que el resto de mis compañeros haria lo mismo No me importa con quien hacer la guardia dije mientras les miraba solo diganme con quien y en que turno finalice sentantome en la manta a modo de acostarme.

Terminé de comer y no tengo cabeza para dormir, solo me fío en este momento de mi hermano así que esta noche no dormiré y descansará mi hermano.

Al terminar de comer me levanto para ir a una posición donde poder controlar si se acercan por la noche y hacer vigilancia. Hermano mañana descanso yo, hoy duerme tu.

Abandonar la ciudad de Socorro horas antes del anochecer no entraba dentro de los planes del coronel, pero dadas las circunstancias no había mucho que se pudiese hacer. Sinceramente le sorprendió que el mestizo le mintiera al sheriff tan descaradamente por aquellos dos hermanos, e intuyó que ya les conocía de antemano y que quizá tampoco era trigo limpio. Durante el trayecto, estuvo constantemente siguiendo observando el entorno y siguiendo el rastro de llamados hermanos, tomando la delantera del grupo, y llegado el anochecer, cuando vislumbró a lo lejos la hoguera, supo que les habían dado alcance. 

Como era habitual en Mortimer, se acercó al lugar pausadamente y a la vista, sin hacer gala de ninguna actitud sospechosa o acercar sus manos al cinto para no llevarse ningún tiro de improviso. Sabía que ambos hermanos se sentían amenazados y que era conveniente ser precavidos hasta que estableciese no contacto y pudiesen hablar tranquilamente.

- Buenas noches... - fue lo único que comentó el coronel cuando cruzó la mirada con ambos hermanos. 

El intercambio de palabras de Leroy con el jovencito le confirmó sus deducciones, ya se conocían de antemano, probablemente como socios en algunos trabajos o asuntos turbios. Pero lejos de mostrarse contrariado o receloso, el coronel actuó con normalidad, aunque rechazó de buenas formas la caza que le ofrecían, él ya había podido comer antes de salir y tenía bebida en su alforja. Lo que si agradeció fue sentarse cerca de la hoguera para calentarse, dad que el frío por las noches en aquel desierto podía ser duro de soportar.

No sé si trabajar con ese par que están siendo perseguidos por las autoridades sea la mejor opción, solo espero que sean competentes y no se anden con tonterías. Mientras sean de utilidad para acabar con Cobb y su banda, nos llevaremos bien, pero si llegado el momento no dan la talla o deciden abandonar, no me importará darles caza enecuanto ofrezcan una suculenta recompensa por sus cabezas...

La joven revisó la herida de Bill y le cambió los vendajes, y al poco de cenar la gente fue acomodándose cerca del fuego para tratar de dormir. A Mortimer le gustaba tener su espacio y se colocó en una posición que le confería una buena visión del improvisado campamento, apoyando cómodamente la espalda sobre una roca.

- Yo haré la primera guardia, te avisaré cuando te toque relevarme, Bill. Le comenté con calma al viejo cazarrecompensas, aunque ambos sabíamos que la mayor parte del tiempo los dos estaríamos pendientes del entorno y tan solo dormitariamos a ratos, lo imprescindible para descansar lo suficiente. 

Donovan estuvo silencioso toda la noche, solo la llegada del otro grupo pareció alejarle de esa nube negra que parecía seguir su mirada. Luego de acomodar su arma, la cual fue sacada de su funda en cuanto oyó que alguien se acercaba, se sentó junto al fuego para masticar algo de lo cazado por su hermano. Ya conocía a la mayoría, desde la joven, el chico de los gallos, el peligroso del poncho… el otro le daba la misma sensación que con Paxton. Otra vez esa mirada evaluando todo en él, su posición, sus gestos, que miraba, como se acomodaba en ese sitio de desconocidos. No le agradaba. Sobre todo por esa mirada que les lanzó, como si estuviera midiendo un pato antes de meterlo en una cacerola.

-Buenas noches- dijo a todos pero siempre mirando al viejo cazarrecompensas, recordaría bien su rostro, si eso terminaba y le veía en algún otro momento, sabía bien que “palabas” usar para gente como él-. Muy bien Crow.

Le dijo a su hermano, acomodándose en un rincón, con el rifle a mano. Ya había notado ciertas cosas en esas personas, como que les faltaba una si lo que habían dicho era cierto, pero también que todos, a su manera, parecían gente acostumbrada a vivir malamente. Incluso los dos cazarrecompensas, por mucho que no les gustase oírlo.

Parecia que el niño se quedaria despierto toda la noche vigilando y el coronel y Bill se irian turnando, como parecia que no tendria que hacer guardia me meti en mi manta y mire las estrellas.
Buenas noches les dije a todos los que habia alli y buenas noches papa dije por lo bajo antes de cerrar los ojos y dejar que el sueño se apoderara de mi.

Cuando Elena terminó con el nuevo vendaje lo miré como si le estuviese dando el visto bueno, aunque en realidad lo que hacía era admirar el gran trabajo que había realizado-Muchas gracias Elena un trabajo excelente-dije con una pequeña mueca de agradecimiento mientras me volvía a cubrir con mis ropas.

-Buenas noches y descansa, vamos a necesitar estar todos dando el cien por cien-dije mirando un instante de reojo a la joven mientras se acomodaba para dormir. Los dos hermanos ya se aclararon entre ellos a lo que yo ni me preocupé ni molesté en intervenir, pero si escuché al Coronel.

Cita:

-Suya es la primera guardia Coronel, despiérteme cuando sea mi turno-dije agradecido mientras me recostaba y ponía el sombrero sobre la cara para intentar conciliar el sueño, no soportaba tener a esos dos en el campamento y mucho menos de compañeros de viaje. Me encontraba intranquilo y eso no me gustaba. Para nada.

Durante un largo instante, Sarge observa a la chica. Con una mezcla de pena, quizás de deseo, y sobre todo, compasión. Le extiende el doble de la cantidad que debería cobrar, de una cartera que empieza a quedarse vacía. Pero ya poco importa: se acerca el final de todo, y pronto, muy pronto, podrá descansar en paz.

- Gracias - le comenta, mientras se dirige hacia la puerta -. No es nada que tenga que ver contigo, pero... Es demasiado tarde para mi. Pero gracias.

-Bueno, no te preocupes. Si cambias de opinión, aquí estaré -te dijo la muchacha, observando cómo te ibas del cuarto como si llevases una carga enorme sobre tus espaldas.

-Eh, vaquero. He oído que ese lugar es peligroso. Ten cuidado -te advirtió, mientras se guardaba el dinero en el sostén.