Partida Rol por web

The Thing: Outpost 211 (+18)

ESCENA: PRÓLOGO

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04/04/2018, 13:47
Director
Sólo para el director

INTRODUCCIÓN

El deshielo provoca que una misteriosa estructura reaparezca en una región costera de la Antártida, que los científicos de la NASA y el Ejército creen identificar con la enigmática Base 211, que los nazis supuestamente construyeron en la época de la Segunda Guerra Mundial. El hallazgo es, por el momento, secreto, solo conocido por unos pocos, por lo que se decide enviar a un pequeño grupo de investigadores que realicen un primer análisis del lugar, aunque bajo el control del Ejército.

PRÓLOGO

La aventura comienza a bordo de un helicóptero del Ejército de los Estados Unidos (U.S. Army), a bordo del cual viajan los aventureros. Es el momento preciso para conocerse y explicar por qué están ahí y añadir la introducción. El helicóptero viene de una base estadounidense cercana, localizada a 20 km, a donde llegaron la mayoría de los aventureros (todos menos los miembros del ejército) un día antes, tras un largo periplo en barco.

Además de los PJ viajan 3 soldados PNJ.

El objetivo de los investigadores es, obviamente, profundizar en los secretos de la Base 211. El de los militares es descubrir lo que los nazis estaban construyendo allí y reclamarlo para los Estados Unidos. Todos los investigadores están actuando bajo Secreto Militar y no pueden contar nada de lo que vean allí.

Si el historiador pase una tirada de INTELIGENCIA conocerá los pormenores de toda la aventura y podrá contárselo al resto. Si es el parapsicólogo, solo la parte sobre la civilización hiperbórea. En caso contrario, a excepción de los militares, que tienen información básica, van sin saber nada más que se requieren sus conocimientos por el bien del país.

ACCIÓN

A pesar de todo el equipo que lleva el helicóptero, no podrán irse con todo. Cuando lleven un rato, el piloto avisará de que se les está echando encima la tormenta más rápidamente de lo que esperaban. La previsión era que hubiese tiempo despejado durante las próximas 12 horas y que aquel frente se alargara durante las siguientes 72 horas, pero ahora, ya está ahí.

Como consecuencia de ello, el helicóptero pierde sustentación y cae al suelo. 

+Tirada de Atletismo para saltar a tiempo, +6 en dos oportunidades.

Todos tendrán que escoger qué se llevan de entre todo el equipo:

El equipo constará de lo siguiente:

 

-ARMAMENTO LIGERO (Capitán, Sargento, Soldados)

-ARMAS CORTAS (Capitán, Sargento, Soldados)

-GRANADAS (4 para cada uno)

-BENGALAS DE LUZ (3 para cada uno)

-LINTERNA (2 linternas)

-EQUIPO DE RADIO (1 soldado)

-RACIONES DE EMERGENCIA (Dos mochilas con raciones para tres días, tres latas por persona)

-CANTIMPLORAS LLENAS (Capitán, Sargento, Soldados)

-EQUIPO DE PRIMEROS AUXILIOS

-FOGÓN DE CAMPAÑA (Junto a las raciones)

 

Thalassa no logra saltar, pero sobrevive en el helicóptero con las raciones de campaña, los calentadores y demás hasta que vienen por ella.

Una vez en el suelo, deben localizar la entrada. La temperatura está bajando rápidamente y no se pueden quedar a la intemperie.

A continuación, el grupo encuentra rápidamente la entrada porque es perfectamente visible. No se trata de las compuertas principales, sino de un conducto de ventilación por el que se puede descender utilizando unas escaleras metálicas. Eso limitará mucho el equipo que puedan llevar: nada que no puedan cargar ellos solos y que sea más grande que una mochila.

El descenso se producirá en orden, por lo que todos los jugadores tendrán que determinar quién baja antes de quién.

Durante el descenso, un pequeño temblor sacude la escalera, por lo que todos los PJ y PNJ deben hacer una tirada de ATLETISMO, +6. Fallarla implica que su torpeza les hace pisar mal y caerse. Una nueva tirada puede hacer que recuperen a tiempo el pie, pero si vuelven a fallar, caen, arrastrando con ellos a todos los que vayan debajo.

Si se cae, hay que hacer una nueva tirada para ver las heridas y si se sobrevive, con 1D20:

0 - 5 = Muerte instantánea

6-10 = Heridas graves. Piernas rotas y heridas internas. Morirá en poco tiempo si no se hace una tirada médica excepcional.

11+ = Como los gatos, cae de pie.

 

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17/07/2018, 20:45
Director

El helicóptero se movía continuamente a un lado y a otro, arriba y abajo, empujado por los mismos vientos que desde hacia días azotaban sin descanso aquella parte del continente antártico. Había sido un viaje difícil, y debían recorrer una distancia de 20 kilómetros para llegar a un lugar desconocido a investigar algo... desconocido. En el interior del helicóptero, el Capitán Mayers  y el Sargento McQeen permanecían sentados e indiferentes a los bruscos movimientos del vehículo, bajo los manos de un Piloto del Ejército y actuando como Copiloto, la  Cabo Langley. Todos los demás sufrían los efectos de la travesía, primero, en barco para llegar a la base americana y después, de aquel vuelo, que les estaba revolviendo el estómago.

Junto con tres soldados que habían venido como parte del destacamento del ejército, estabais un Médico Militar, Joel Brochard, un Historiador, Friedrich Von Kleist, una Arqueóloga, Thalassa Bright, una Asesora Especial, Victoria Hasan, y un Ingeniero, Michael Ford.

Lo único que les habían dicho a todos ellos era que habían sido escogidos para participar en un gran descubrimiento que databa de los tiempos de la Segunda Guerra Mundial: La famosa Base 211 que supuestamente los nazis construyeron durante la guerra.
Más allá de aquello, no sabían nada, y cualquier cosa que encontraran o descubrieran quedaba bajo el más estricto Secreto. No tenían permiso para hablar de ello, ni pública ni privadamente.

Y pese a todo, estaban allí, porque su curiosidad era mucho mayor que su deseo de comunicar los hallazgos al resto de la humanidad.

Muchos de los pasajeros miraron hacia abajo y a lo lejos, preocupados, porque lo que veían no era nada halagüeño. Parecía estar formándose una tormenta... exactamente en la misma dirección hacia donde se dirigían.

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23/07/2018, 09:29
John Mayers

Bien. Soy el Capitán Mayers y dirijo esta operación -empezó a explicar el serio oficial -. No se les ha proporcionado demasiada información para mantenerlo todo en el más estricto de los secretos, y hasta nueva orden, así debe continuar. 

Acto seguido, sacó un mapa del continente antártico de un bolsillo de su chaqueta militar y lo desplegó.

Nuestro objetivo es la estructura puesta al descubierto por el deshielo localizada en la zona conocida como la Tierra de la Reina Maud, un territorio de unos 600 000 km² que se extiende desde los 12° Oeste hasta los 18° Este y entre los 70° y 75° Sur. Nuestro objetivo se encuentra exactamente a 13º Este y 69ºS

La zona ha sido catalogada como Peligrosa, puesto que el calentamiento global ha creado que una sección no muy alejada de la misma haya empezado a fracturarse. En otras palabras, existe un riesgo inminente de hundimiento. Y tenemos además otro problema añadido. Hay una tormenta acercándose peligrosamente. Los meteorólogos nos han dado un margen de doce horas antes de que la tengamos encima, pero no sería la primera vez que  el tiempo cambia a peor en este maldito continente. Así que esta será por consiguiente una misión puramente de reconocimiento: localizar la entrada, efectuar un examen superficial del interior y regresar. Aquí mando yo y todo el que venga conmigo tendrá que hacer lo que yo diga, cuando yo lo diga y cómo yo lo diga. ¿Entendido?

Por último, todos ustedes están aquí con un fin. Bright, Thalassa; Von Kleist, Friedich; y Hasan, Victoria; Necesitamos saber todo lo que consideren que pueda ser relevante o interesante para esta misión. Todos los demás estamos aquí por motivos militares, pero ustedes son expertos en historia. ¿Qué saben de todo esto?

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23/07/2018, 10:08
Peter McQueen

El sargento McQueen permanecía impasible con la mirada perdida al infinito. Sabía lo que su capitán iba a decir, así que no le sorprendió nada de lo que dijo.

Miró de reojo al personal civil. Estaba acostumbrado a misiones de diferente tipo y condición, en algunas de las cuales había contado con la ayuda de algún asesor, pero siempre militares, era la primera vez que le tocaba lidiar con personal civil, y no le gustaba. Mucha cara bonita pero a nadie aparentemente curtido en situaciones de riesgo.

Somos unas jodidas niñeras, como pase algo seguro que se ponen histéricos

Repasó mentalmente las instrucciones y se fijó en los soldados que les acompañaban. Había hablado con ellos antes y entrenado la semana anterior. Su valoración inicial era positiva, aunque deseaba ver como se desempeñarían en una misión.

Ahí es cuando se marca la diferencia

Durante unos segundos su mente voló hacia su hogar.....pero solo unos segundos. Tenía que centrarse. Esperó a que alguno de esos expertos aportasen algo de información, pero si no lo habían hecho anteriormente, sería raro que lo hiciesen ahora, salvo que al llegar a su destino encontrasen algo destacable.

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23/07/2018, 11:10
Michael Ford

Las turbulencias eran terribles, los saltos que estaba pegando el helicóptero me revolvían el estómago de forma más que importante y comencé a plantearme si había sido un error apuntarme a ésta maldita misión-Vamos Mike, aguanta por tus muertos, no parezcas un niñato en su primer viaje en barco- pensé mientras apretaba la mandíbula hasta que hice chirriar los dientes. Intenté pensar en mis últimas vacaciones en las Bahamas con aquella rubia...¿Cómo se llamaba, Rubí? No me acordaba y decidí que daba igual. Otro bote brutal, el cinturón se comprimió contra mi cintura de tal manera que pensé que me iba a partir en dos-Joder- mascullé agarrándome al incómodo asiento con todas mis fuerzas.

Cuando me ofrecieron y explicaron lo que iba a hacer aquí, lo que se había descubierto, la importancia y trascendencia que iba tener en ese instante me pareció mucho más interesante que la nanotecnología, me habían vendido la moto a la perfección y yo había picado como un idiota, mi curiosidad pudo con mi raciocinio típico de ingeniero, pero es lo que había, acepté y no había marcha atrás.

Miré a mis compañeros de fiesta y todos parecían estar en casi la misma situación que yo menos los militares que tenían una cara de tíos curtidos en mil batallas. Nosotros los civiles intentábamos mantener el tipo lo mejor que podíamos pero había quien lo ocultaba mejor, estaba seguro de que tenían tantas ganas de vomitar como yo, el grupo era bastante variopinto, pero desde luego mis ojos se posaron desde el principio en las tres mujeres que formaban parte del grupo, especialmente en Victoria y Thalassa, no habíamos tenido apenas tiempo de conocernos entre nosotros, pero estaba seguro de que en ese aislamiento forzoso nos daría tiempo a compartir nuestras vidas compartir vivencias y quizás algo más...

Miré por una de las ventanillas y no veía más que blanco y más blanco un desierto de hielo sin fin, miraba lo más lejos que mis ojos me permitían y no veía más que el puto hielo-estupendo, nos vamos a helar el culo a base de bien- gruñí mentalmente mientras volví a mirar el interior del helicóptero, momento en el que el Capitán Mayers se aseguró de explicarnos la misión. Le miré con gesto serio, atendiendo a sus palabras lo mejor que podía, entre las sacudidas, el ruido del motor y el sonido del viento costaba entenderle.

Su gesto duro e impertérrito sugería de sobra que ésta no era su primera misión ni la de McQueen, ambos parecían estar en su salsa y estaba totalmente seguro de que nos miraban como unos bebés que ellos tendrían que cuidar. Pero en lo que no reparaban es que si se jodía cualquier aparato de aquel lugar, ellos no iban a saber arreglarlo pero yo sí. Ellos eran, instinto, músculo, puntería y supervivencia y lo respetaban, ellos deberían de hacer lo mismo con nosotros. Pero eran los que mandaban, ya se ocupó el Capitán de recalcarlo, fruncí el ceño ostensiblemente, no me gustaba que me dieran órdenes, pero había que tragar.

Estuve a punto de soltar un ¡SEÑOR SI SEÑOR! pero dudé muchísimo que eso sentara bien y no quería empezar con mal pié. Si llegaba el momento y necesitábamos protección, ellos nos cubrirían, pero estábamos allí solos sin un alma en kilómetros a la redonda ¿Que podía salir mal? me pregunté a mi mismo mirando a los compañeros objetivo de la pregunta del Capitán.

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23/07/2018, 16:06
Victoria Hasan

No lo iba a negar, hacía un frío descomunal, antártico, después de todo. Perfectamente la corriente circumpolar antártica era la causante de todo aquello: una corriente, demoníaca, marina fría que transcurre de oeste a este alrededor de al Antártica.  Se posicionó correctamente en el asiento, tras sus gafas de sol analizaba al personal: testosteronas aquí y allá ,a excepción de dos muñequitas, como ella, que parecían de armas tomar. Puso los pies en el asiento de enfrente, dejándose tumbar un poco.

Sin embargo, tras la charla del capitán, que a ella le parecía que andaba berreando más que otra cosa.

Recuérdame, Victoria, que le compre unos audífonos, a ver si no chilla tanto...

Asintió acariciándose la barbilla, observando a aquel niño rico de papá y mamá, que no dejaba de mirarle a ella y a las otras dos mujeres. Le sonrió saludándole con la mano y apoyó la cabeza en la ventanilla. 

Tengo los pezones para rallar cristales y no estoy de humor... ¿Es que nadie va a proseguir hablando? Tss... Pues nada, me tocará a mí... En fin.

-Eh, testosteronas con piernas -comentó con una sonrisa, sin importarle si pudiera ofender a alguien-, a vosotras no... ustedes tres me caéis bien, ¿qué sabéis de la Antártida?

Y sus labios se sellaron a la espera de que le contestasen.

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23/07/2018, 16:40
Friedrich von Kleist

Friedrich von Kleist permaneció en silencio, durante todo el viaje estuvo escrutando a sus compañeros con la mirada, analizando sus comportamientos para determinar qué clase de personas eran cada uno de ellos. Un abrigo negro lo cubría por completo, dándole un toque un tanto siniestro. El gigantesco historiador nunca había sido una persona sociable ni le agradaba trabajar en equipo pero, como buen camaleón, sabía adaptarse a cualquier tipo de situación.

El hombretón escuchó las palabras de Mayers, incapaz de creer lo que oía. ¿Habían enviado a los militares a ciegas sin haberles informado sobre nada, más allá de que buscaban una base alemana de la Segunda Guerra Mundial?

Friedrich advirtió que Victoria Hasan preguntaba al resto de los presentes acerca de qué sabían acerca de la Antártida. Probablemente ninguno de ellos tuviera un amplio conocimiento de qué era el lugar al que se dirigían ni cuáles eran las intenciones que llevaron al Tercer Reich a pretender construir allí una base. El enorme estadounidense de ascendencia alemana se mantuvo en silencio, esperando las respuestas que le iban a dar a la pelirroja.

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23/07/2018, 17:20
Jöel Brochard

La punta de la bota de Jöel martilleaba el suelo del helicóptero de transporte, en un ritmo cadencioso que bien podría ser totalmente inventado. Le habían llamado no se sabe muy bien para qué, pero él no había dudado en aceptar. ¿Qué posibilidades habían de que eligieran a un matasanos con un expediente tan complicado cómo el suyo? Al recibir la notificación en su residencia de Burdeos, no dudó ni un instante en integrarse a la misión. Nunca había tratado congelaciones, así que... qué mejor que probar con aquellos incautos que se habían sumado a la expedición.

Mientras el Capitán explicaba los pormenores de la aproximación, se tomó un instante en mirar al rostro de todos los presentes. Contuvo una mueca divertida, al comprobar que aquello parecía más una entrega de premios humanísticos que un convoy dispuesto a aterrizar en la Antártida. ¿Por qué los habían convocado? Lo de la base 211 era tan sólo un rumor, y en caso de necesitar historiadores, asesores o arqueólogos, sería tras hacer un reconocimiento previo de la zona y su condición para el despliegue de personal civil.

Personal civil sin entrenamiento previo.

En medio de las estepas más peligrosas de la tierra.

Cojonudo.

Se tomó un instante en revisar su equipo, sin echar demasiada cuenta al resto de soldados. Como ellos había vista miles, y no podían importarle menos. Repartidores de muerte a tiempo completo, cabezabotes instruidos para desandar todo lo andado. "Y ahora eres uno de ellos" pensó, divirtiéndose en su propia hipocresía. Todo el instrumental médico parecía estar en su sitio, y por fortuna no había ninguna jeringuilla rota. Parece ser que no se repetiría lo de Fallujah. Fue la intervención de Victoria la que le hizo prestar de nuevo algo de atención, cerrando su bolsa y desviando su mirada hacia ella. No pudo evitar sentirse sorprendido ante la ignorancia de una asesora del ejército, pero decidió no compartir su estupor. No merecía la pena enfadar a Mayers o McQueen, y más a tantos pies de altura.

Así que se acomodó en su asiento, ajustando su cinturón, a la vez que seguía golpeando discretamete el suelo con la punta de su bota. Había cambiado la entrada de su auricular de radio para escuchar aquel destartalado Walkman que llevaba en uno de los bolsillos de pertrechos de su chaleco. Aunque subiera el volúmen al máximo, el ruido infernal de las aspas lo cubriría. Por ahora, le bastaba con escuchar discretamente a Bowie.

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23/07/2018, 17:39
Anika Langley Renikova

Cuando todo el mundo subió al helicóptero, asentí con la cabeza en gesto hacia el piloto para que procediera a arrancar el motor, -Aquí Viuda Negra para noviembre uno-uno, papeleo de último minuto y preparando rotores para iniciar el despegue... deséenos suerte chicos- luego de ello hago la indicación al piloto para que se ponga en marcha.

De cuando en vez giraba mi cabeza para observar las cosas ahí atrás, veía algunas caras de preocupación en los civiles y era de esperarse, los gélidos vientos de la Antártida no eran los mejores amigos de un piloto, y para personas como ellos esto no era precisamente una parque de atracciones; mirando la preocupación en el rostro de Michael por los movimientos bruscos de la aeronave y dibujando una sonrisa me dirijo hacia el personal civil, -Tranquilos, son solo pequeños pozos de aire, en estas circunstancias hay tres simples reglas para conseguir aterrizajes suaves… desgraciadamente, nadie conoce cuales son- me rio luego de ello y me enderezo mirando hacia el frente nuevamente.

-Señor, si señor- respondo ante la voz de mando del Capitán Mayers,

Rato después, la chica de cabello rojo pregunta sobre el lugar al que vamos; realmente era una excelente pregunta, quizá algunos de los aquí presentes sabemos a dónde vamos y superficialmente a qué vamos, pero no es del todo claro por qué lo hacemos o que hay detrás de esta investigación, siempre hay algo de fondo.

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23/07/2018, 19:32
Thalassa Bright

Thalassa había escuchado atentamente las palabras del Capitán Mayers, típico de los mandos militares, que exigían obediencia ciega y preguntas cero, pero no se olvidaba de que su presencia era fruto de la necesidad. Si de verdad supiesen tanto como decían, solo habría militares, no civiles.

¿Qué saben de todo esto?

-Capitán, lo que sabemos es información bastante común. El Tercer Reich planeaba usar la Antártida como base permanente para submarinos y posibles ataques, y bautizaron a la zona en donde supuestamente construyeron la base como Neuschwabenland -tras decir esto, y viendo el gesto contrariado de la mayoría, tradujo el término -. Nueva Suabia, porque el barco que llegó se llamaba Schwabenland,  Suabia, y eso fue... en 1938.

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23/07/2018, 20:26
Michael Ford

Cuando el Soldado de Invierno cerró la boca un silencio reinó en la nave, silencio relativo, ya que las turbulencias seguían atacando sin descanso y el ruido atronador del motor conseguía que mis tímpanos quisieran irse de vacaciones a cualquier otro lugar. En ese momento Victoria nos soltó la primera puya. La miré y sonreí.

Cita:

-Eh, testosteronas con piernas, a vosotras no... ustedes tres me caéis bien, ¿qué sabéis de la Antártida?

-No hay nada como tratarme como a una señorita para ponerme a tono pelirroja-le lancé una mirada divertida-En cuanto a tu pregunta de Trivial Pursuit, pues hace mucho frío, hay mucho hielo, pocas horas de luz, osos polares, focas...ah y no nos olvidemos de los esquimales- contesté con una pequeña risa que se convirtió en un murmullo apagado gracias a la melodia, me incliné hacia delante apoyando mis codos en las rodillas dejando las manos relajadas entre las piernas mirando a la pelirroja-Ha sido una sorpresa ver una cara bonita de asesora militar, esperaba a una Teniente O'neill con la cabeza rapada y voz de camionero- contesté mordaz y sonriendo.

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24/07/2018, 02:00
Victoria Hasan

Ha sido una sorpresa ver una cara bonita de asesora militar, esperaba a una Teniente O'neill con la cabeza rapada y voz de camionero

-Señor Ford, no deberías subestimar a nadie perteneciente al ejército; pues pudiera ser que esta ''cara bonita'' se vuelva oscura cuando...

 

Entonces, escuchó las palabras de la mujer. Sonrió al señor Ford y asintió ante lo que decía ella, pues por fin alguien había contestado de una forma u otra a su pregunta.

-Capitán, se ha demostrado que nuestro amigo el bigotes de estatura media, tenía una cueva secreta, no una Batcueva, chicos eso no existe, donde guardaban, estos nazis, sus armamentos y, creo, que hasta hacían 'experimentos', por lo que es cierto lo que la señorita comenta.

Se ajustó las gafas de nuevo y dejó que los demás respondieran al Capitán.

-Trivial Pursuit -musitó en voz baja-, curioso...

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24/07/2018, 07:30
Michael Ford

Cita:

-Señor Ford, no deberías subestimar a nadie perteneciente al ejército; pues pudiera ser que esta ''cara bonita'' se vuelva oscura cuando...

Elevé una ceja, interrogante-Oh, vamos señorita Hasan no me tome por un niño mimado, ya he trabajado antes con militares de mayor rango en proyectos que jamás verán la luz pública y sé cómo son...respeto su trabajo de protegernos y todo lo demás, pero no somos unos idiotas inválidos que se esconderán en una esquina sollozando, vamos espero que no llegue ese hipotético caso-la miré escrutador intentando descifrar su mirada, pero era buena-le gusta dejar a la gente en ascuas ¿verdad? Así no nos vamos a poder llevar bien nunca, venga caeré en su juego, veamos si atino-me recosté sobre el respaldo de mi asiento y puse mis manos las la nuca poniendo una cara como si estuviese discurriendo la solución a un problema complicado.

-Veamos...cuando se vuelva oscura ¿Se convertirá en mujer/hombre lobo? ¿Hacer calceta? ¿Ver Falcón Crest? ¿O quizás oler 50 sombras de Grey?- pregunté divertido esperando alguna respuesta de su parte mientras elevaba una de las comisuras de mis labios, divertido. Luego continué tras el comentario de la pelirroja.

-Quien se haya interesado un poco por la historia de los nazis, es bien sabido que hicieron todo tipo de experimentos con seres humanos para conseguir Supersol dados resistentes a venenos y enfermedades, investigaciones en ocultismo llegando a buscar inexistentes armas de poder incalculable, milagros para ganar una guerra que ya estaba perdida- aseguré-La existencia de esa base aquí me parece totalmente plausible, ahora qué coño estaban haciendo aquí, sólo Dios lo sabe- comenté aunque era completamente ateo-Aunque ha llegado el momento de descubrirlo- finalicé mientras echaba otro vistazo por una de las ventanillas, unos nubarrones oscuros se habían firmado ante nosotros-Cojonuo, la fiesta mejora- pensé mirando ceñudo los nubarrones.

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24/07/2018, 08:50
Peter McQueen

McQueen observó con cara de desagrado la conversación entre Hasan y Ford

No hemos llegado y ya han comenzado a tirarse los tejos y los trastos.....

La sensación de que estaba haciendo de niñera aumentaba cada vez más. Apartó la mirada y observó el paisaje blanco a través de la ventanilla. Un par de sacudidas le devolvieron a la realidad

Ni que fuese Irak

Sonrió, le vino a la mente el recuerdo de las explosiones cuando su antiguo comando se dirigían a liberar a unos rehenes en una de las múltiples misiones que tuvieron lugar en un Irak liberado y democratizado a golpe bomba. Todo por una buena causa.

Por fin alguien se dignó a contestar a su capitán. Prestó atención a la mujer aunque su explicación fue escueta

¿Una base de 1938?, ¿para que coño nos envían a explorar una ruina?

-¿Esa base tenía algo en especial o podría tener algo en especial para que nos envíen allí?

No le cuadraba. Podría haber sido un objetivo para un comando durante la Segunda Guerra Mundial pero ahora esa base no tendría ningún valor, ni estratégico ni tecnológico.

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24/07/2018, 09:53
Director

Mientras todos discutían, el helicóptero dio una nueva sacudida, mucho más grande que la anterior, haciendo que la mitad del equipo que llevaban cayese al suelo. Al mirar las cajas, vieron su contenido. Había linternas, bengalas, granadas, raciones de emergencia, equipo de primeros auxilios, binoculares, cantimploras... e incluso un fogón de campaña. También había armas, por supuesto, un subfusil HK MP5 para cada uno de los tres soldados, el sargento y el capitán.

Los soldados se pusieron rápidamente a guardarlo todo de vuelta en sus cajas.

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24/07/2018, 10:18
Peter McQueen

Cago en todo

-¡Rápido muchachos!, no queremos que ese material se pierda o sufra daño

Se levantó, agarrándose a dónde pudo y se acercó a la cabina de la piloto

-Langley, ¿cual es la situación?, ¿tendremos muchas más sacudidas de este tipo?

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24/07/2018, 10:22
Director

Notas de juego

La tormenta se está acercando peligrosamente. Estás intentando comunicar con el centro de mando pero cada vez te resulta más complicado hacerlo. Hay interferencias. Las últimas noticias que tienes es que la tormenta está avanzando más rápidamente de lo que se preveía y que estaba apareciendo otro frente por el oeste.

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24/07/2018, 10:40
Jöel Brochard

Al parecer lo de la base 211 era más o menos oficial... aunque el testimonio de unos cuantos divulgadores no terminaba de convencerle. Desgraciadamente, la conversación derivó en un palique pasivo-agresivo que poco le importaba, por lo que se recostó de nuevo a escuchar su música.

Con la sorpresa de la sacudida, la bolsa que descansaba sobre su regazo botó para tratar de unirse junto al resto del equipamiento caído. Sin embargo, de igual manera que un oso se lanza por una trucha, sus brazos rodearon el petate pegándolo contra su pecho, con una mueca de terror, suplicando para que el delicado material no se hubiera roto. Cada vez estaban cerca de la tormenta, por lo que podían esperar varias sacudidas como aquella. Aquel pensamiento le hizo abrazar con más fuerza la bolsa, mientras observaba al resto de soldados recoger el equipo caído. Parece que no sólo tendían que hacer de niñeras... también barrer el suelo.

McQueen se levantó dirección a la cabina, buscando respuestas por parte de la piloto. No había tenido oportunidad de verla, y desde su asiento poco podía averiguar. Sabía que era buena... o al menos eso le comentaron los burócratas que le había metido en aquella lata de sardinas volante. Si hubiera sido creyente, rezaría para que así fuera.

Apagó el reproductor, tragó saliva y esperó alerta, saltando su mirada entre todos los presentes. Estaba preparado para cualquier ráfaga fugaz de vómito, y no dudaría en esquivarla.

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24/07/2018, 13:51
Thalassa Bright

Thalassa extendió los brazos para sostenerse, tras el movimiento del helicóptero. Su estómago dio un vuelco y parte del desayuno de aquella mañana pareció desear salir de paseo, pero finalmente logró convencerle para que pemaneciese en su interior. A su lado, el equipo que transportaban se desparramó por el suelo, y los soldados y el sargento comenzaron a recogerlo.

-¿De verdad necesitaremos tanto equipo, Capitán? -le preguntó al superjefazo de la misión.

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24/07/2018, 15:02
Friedrich von Kleist

Friedrich resopló al escuchar la forma en que el ingeniero se dirigía a la señorita Hasan. Era el graciosete del grupo, por desgracia siempre tenía que aguantar a uno de aquellos supuestos genios. "Espero que, al menos, este sea competente" se dijo para sus adentros, mientras lo observaba detenidamente. Sin embargo, a medida que hablaba, percibió que se trataba de un hombre mucho más inteligente y culto de lo que su sentido del humor hacía percibir a simple vista.

-Übermensch -dijo el historiador, con un acento alemán tan natural que indicaba su ascendencia-. Superhombres. El Tercer Reich los intentó crear de muchas formas, no sólo mediante la experimentación. También mediante métodos naturales, como haciendo procrear a mujeres arias alemanas con oficiales de las SS. Un darwinismo social llevado a cabo mediante el programa Lebensborn. La supremacía de los más fuertes.

Al escuchar que Ford no parecía saber qué buscaban los nazis en la Antártida, Friedrich sonrió con picardía.

-El Tercer Reich creía que en estas tierras, hace unos sesenta mil años, existió una raza de hombres superiores: los hiperbóreos. Hombres y mujeres de gran tamaño, belleza, con la piel clara y cabellos dorados. Se les conocía como los "ariyas" o "aryas" -Miró a todos en general y añadió-: Traducido a nuestro idioma, sería ario, que significa "iluminado" o de "alto rango". Con el paso de los mienios y la congelación de Hiperbórea, los arios marcharon al sur, donde inevitablemente terminaron mezclándose con humanos comunes.

-Como es de esperar, Hitler quiso ver en esta raza mítica un origen para el pueblo germano y por eso dedicó muchos de sus esfuerzos para demostrarlo. ¿Saben qué era la Ahnenerbe? -Dirigió una mirada a la señorita Bright, convencido de que al menos ella conocería ese nombre-. Fue una organización pseudocientífica, integrada dentro de las SS, y que destacó en diversos campos, como la arqueología. Con afán de buscar el origen del pueblo alemán, se enviaron expediciones a Egipto y al Himalaya, por lo que el hecho de que pudieran enviar una expedición a la Antártida para ubicar en ella el lugar donde vivieron los hiperbóreos no me resulta descabellado. Y si en verdad se construyó esa base -El historiador sonrió de manera inquietante-, puede que los alemanes encontrasen algo.