Partida Rol por web

El trote de tu caballo era agradable. A pesar de la situación en la que te encontrabas, lo cierto es que lograbas, al menos durante unos instantes olvidarte de que el mundo se había ido irremediablemente al carajo y podías disfrutar de la cabalgada. 

Ibas sola, sin contar a tu caballo que habías encontrado hace ya varios dias en un establo abandonado. Era tu única compañía, a excepción hecha de los pocos caminantes que te habías encontrado durante el camino y que habías ignorado por completo en la mayoría de los casos. Te dirigías hacia Atlanta, ciudad que esperabas que fuese el refugio que habías oído por la radio antes de perder toda emisión. También era cierto que había pocas opciones que seguir.

Habías recorrido muchos kilómetros, pero calculabas que estabas cerca, muy cerca de tu destino. Si Atlanta era el refugio ideal sería perfecto, en caso contrario... bueno, ya verías que hacías.

Jenna tenia las extremidades algo doloridas tras haber recorrido tantos Kilometros a lomos de su joven caballo, durante este viaje no habia parado de observar a su alrededor la belleza de la naturaleza que destacaba sobre el caos causado por los caminantes.

"Deberiamos descansar unos minutos, ¿no crees Precioso?"- comento Jenna a su montura con tono infantil

"Necesito estirar las piernas 5 minutos"- dijo en alto para si mismas

Jenna guio a su montura, al cual habia bautizado como "Precioso", hacia un arbol cercano tras haber observado cuidadosamente que no hubiera ningun caminante por los alrededores.

Te acercas al árbol en cuestión y dejas al caballo descansar un poco. No tienes necesidad de atarle: el animal esta bien amaestrado y no se aleja mucho de ti, lo suficiente para pastar un poco. 
Mientras, tu aprovechas para estirar las piernas y observar el paisaje, nada agradable: algún que otro coche por el camino salido de la carretera, y algún que otro cadáver muerto (y buen muerto). Lo bueno de todo eso era que ya te encontrabas cerca de tu destino. Esperabas que allí encontrases un buen refugio... si es que había tal.

Tras estirar un poco los musculos agarrotados de su cuerpo, Jenna saco su cantimplora y le dio unos tragos cortos antes de acercarse a su caballo.

"Vamos Precioso, es hora de seguir...estamos muy cerca, estoy segura"- susurro al oido del caballo antes de montar y comenzar al trote la ultima fase de su viaje a atlanta.

Montas de nuevo y vuelves a la cabalgada. Tienes ganas de llegar cuanto antes a la ciudad y esperar encontrar un ansiado refugio. Tanto viajar al final pasaba factura.

Al poco rato, por la autopista encuentras mas coches por la cuneta, lo que no sabías si entenderlo como buena señal o no, no obstante, no puedes pensar mucho en ello habida cuenta de la situación que tienes delante: tres caminantes se encuentran a un lado de la carretera, agachados comiendo algún cadáver, no sabes si es animal o no.

Jenna habia continuado su viaje a caballo en busca del deseado refugio en atlanta, aunque por mas que se acercaba el panorama no cambiaba, lo cual desanimaba un poco a la joven.

Deberia haber un panorama mas esperanzador... si yo estuviera al mando de un refugio seguro me habria asegurado de despejar un poco el camino o al menos poner carteles o algo que de esperanza a aquellos que se acercan

Los pensamientos de Jenna se disiparon cual humo, al ver a tres caminentes devorando a una victima, apena podia ver si se trataba de una persona o un animal, pero eso realmente no era importante, lo importante es que no la vieran y pasar de largo.

"Tranquilo Precioso, tranquilo...no nos han visto todavia, veamos como pasamos ¿ok?" - susurro la joven a su montura mientras le daba una palmaditas

Tiene que haber otra forma de pasar sin que me vean, no es momento de montar un escandalo, vamos piensa...piensa... - se repetia mentalmente la joven mientras discernia con sus ojos todas las posibles rutas para evitar a los caminantes. Su mano derecha reposaba sobre su pistola mientras la mano izquierda agarraba fuertemente la riendas y la silla de montar.

Desgraciadamente, antes de que logres hacer avanzar el caballo, los caminantes se percatan de tu presencia y se dirigen hacia ti. Lo bueno es que se encuentran alejado de ti, por lo que tienes tiempo de reacción. Lo malo es que tu ruta esta cortada (al menos, el frente). 

El corazon de Jenna se sobresalto al ver como los caminantes habian advertido su presencia y se dirgian lenta pero incansablemente hacia ella. Aun tenia tiempo para pensar una salida, aunque lamentablemente no veia ninguna otra.

No te la jueges, haz que el caballo corra y dejalos atras. No importa que sigan en tu direccion, ellos son lentos y apenas queda nada para llegar a atlanta. No te pongas a disparar ahora, te oiran otros y entonces estaras jodida - la mente de Jenna era un torbellino de indecisiones pero deberia decirse ya, antes de que los caminantes estuvieran demasiado cerca.

Jenna esperaba que los caminantes se acercasen un poco mas para realizar su gran huida, cuando estos estaban a unos 10 o 15 metros de ella..."Yiah! Yiah!" - grito Jenna a su caballo mientras golpeaba con su talones al caballo indicandole que era el momento de correr.

El plan de Jenna era sencillo, intentaria pasar la linea de caminantes a toda velocidad, procurando pasar lo mas lejos posible de ellos y pasando relativamente cerca de la presa que se habian estado comiendo.

Con un poco de suerte funcionara y se quedaran devorando los restos de su presa, tiene que funcionar! 

Aceleras el caballo el cual coge velocidad nada  mas ser espoleado. Había visto suficientes caminantes para mantenerse con calma en esta situación, por lo que avanza como una exhalación al lado de los no-muertos, pasando por su lado sin problemas. Mantienes el ritmo para poner mayor distancia entre ellos y tu... y justo en ese momento, te detienes en seco. A lo lejos divisabas lo que habías estado buscando: Atlanta.

Jenna y su caballo lo habian hecho bien, a toda velocidad habian dejado atras a los hambrientos caminantes. Jenna estaba emocionada, cada accion que la mantenia viva era digna de celebracion en los tiempos que corrian.

Muy bien Precioso, sigue asi, los hemos dejado atras - Jenna hecho un ultimo vistazo al terreno recorrido a la carrera para asegurarse que no la seguian antes de esbozar una amplia sonrisa, de repente al mirar de nuevo hacia adelante la cara de Jenna se transformo, nadie podria decir si expresaba alegria o decepcion. Jenna detuvo brusca y secamente a "Precioso".

" Al fin hemos llegado! mira Precioso, hemos llegado a Atlanta!" - un grito de emocion escapaba e la boca de Jenna al ver por fin el final de su viaje.

Los caminantes que habia dejado atras ya no eran importantes, ni siquiera las penurias sufridas los ultimos dias...en ese momento podrian golpearla y no se enteraria, sus ojos observaban la desolada entrada de atlanta.

"Tengo la sensacion de que llegar hasta aqui no ha sido la peor parte del viaje...es el momento de buscar el refugio prometido, ¿no crees Precioso? - relato Jenna en alto antes de empezar a trotar ciudad adentro.

Mantienes el ritmo con tu animal, mientras te adentras aún mas por la ciudad. Las pocas calles que de momento recorres están claramente desiertas y muy estropeadas: nadie ha estado por allí en mucho tiempo. Y lo que era peor, no habías visto a nadie en ningún momento. Es como si fuese una ciudad fantasma. Desde luego, no tenía pinta de ser eso un refugio. Y justo cuando estas pensando en eso, en la posibilidad de un posible refugio y en encontrar mas gente, tus peores sospechas se hacen realidad. Nada mas girar en una esquina te encuentras con una escena aterradora: caminantes, caminantes por doquier...

Tu caballo estaba acostumbrado a la vista de esos seres, pero no de un grupo tan grande, por lo que el animal se encabrita, haciendo difícil que puedas controrarle. 

Jenna llevaba ya algun tiempo paseando a lomos de su caballo por la desolada atlanta, la ciudad no parecia contener vida alguna y no habia visto a ningun ser por las calles.

menuda mierda, esto esta desolado...no hay refugio, ¿he llegado tarde?...¿se habran marchado?

Joder esto no puede estar pasandome - los pensamientos de Jenna la mantenian abstraida ante el panorama que tenia frente a sus ojos.

Al girar la esquina la cara de Jenna se transformo, ante ella tenia un muro de cientos si no miles de caminantes, algo que sus ojos no habian presenciado nunca. Su montura se encabrito ante el muro de caminantes que posaron sus hambrientos ojos sobre Jenna y su caballo.

"Tranquilo, ssshhhh...tranquilo Precioso!... noooooo!!!" - gritaba desesperada Jenna mientras intentaba controlar su nerviosa montura, viendo como poco a poco perdia el control y se precipitaba bruscamente contra el suelo.

"Mierda!...mierda!...mierda!"- se repetia la joven mientras intentaba deslizarse por el suelo poniendo todo el  terreno posible entre ella y los caminantes.

Jenna se agarraba su dolorido costado ...vaya ostia mas tonta, olvida el dolor concentrate en lo que tienes delante...mientras intentaba incorporarse.

"Arriba, vamos levantate estupida, no te dejes comer ahora" - se dijo a si misma mientras intentaba incorporarse a la desesperada

Los caminantes comienzan a avanzar como una turba hacia vosotros: tu animal se intenta levantar pero el pobre animal no se mueve con suficiente rapidez. Los caminantes se abalanzan sobre él, comenzando a devorarle, mientras tu no puedes hacer otra cosa que mirar como devoran a tu animal. 

Sin embargo, eso te ha dado una oportunidad para escapar, puesto que buena parte de los caminantes han dejado de fijarse en ti. Claro que unos pocos aún continúan moviéndose hacia ti.

Jenna consiguio incorporarse al tiempo que los caminantes se abalanzaban sobre su caballo devorandolo mordisco a mordisco, esto habia distraido la atencion de la mayoria pero no de todos los caminantes.

No habia tiempo para nada, solo para huir y ponerse a disparar no marcaria ninguna diferencia con tanto caminantes cerca. Jenna, pistola en mano, comienza a correr en la direccion contraria a los caminantes buscando una posible salida o escondite que la permita dar esquinazo a los caminantes.

Necesito una salida, vamos Jenna piensa - se repite mentalmente la joven mientras continua avanzando por las desoladas calles de atlanta seguida de varios caminantes.

Jenna se mueve de vehiculo en vehiculo, de puerta en puerta sin quitarle la vista a sus perseguidores..."Joder!, venga abrete...!!!" - grita a alguna de las posibles escapatorias que intenta abrir

Los caminantes siguen con su andar lento y errático, acercándose poco a poco hacia ti, mientras tus intentos de abrir la puerta del coche se vuelven inútiles. Estaba cerrada y bien cerrada. Una rápida inspección por el cristal te permite ver que el cerrojo esta echado. De todos los coches que podía haber en Atlanta e ibas a coger el que tenía las puertas cerradas. 

Maldiciendo tu mala suerte, te dispones a correr, pero justo algo ocurre: en medio de los caminantes surge una especie de bola de fuego, seguido de otra. Los zombies se queman, y algunos de ellos cambian de rumbo. Aún tienes a varios que se acercan, pero buena parte de ellos se dirigen hacia un coche en el cual ves a dos caminantes con mochilas. Justo en el momento en el que los caminantes se acercan hacia ellos, salen corriendo para esquivarlos.

Sea lo que sea lo que ha ocurrido, has logrado tiempo para escapar. 

"Pero que demonios ha sido eso!"- exclamo Jenna mientras retrocedia un par de pasos asombrada por lo que acaba de ocurrir. Atras quedaban los pensamientos de mala suerte y mala leche por no encontrar un posible salida, sea quien fuera los que han liado esto y luego se han puesto a correr la habian salvado de ser devorada.

¿Ahora que? ¿que hago? - se preguntaba la joven mientras no perdia de vista a los caminantes restantes que tenian fijacion por ella y mantenia su pistola lista para hacer algun que otro tiro.

"veamos, tiene que haber una salida...busca Jenna, busca..." - se dijo a si misma en alto buscando una posible salida a su situacion