Partida Rol por web

Al cabo de un rato, sin que se hayan producido nuevas transmisiones en el interludio, llega el mensaje que todos estábais ansiosos por oír, transmitido por la voz de Scott Matthew:

- Los tenemos, dos tipos trasteando con la CPU central de la nave... apuesto a que intentando borrar archivos comprometidos -susurra de forma instintiva, aunque el transmisor de su casco está codificado- Aiden, tú por la izquierda, encárgate del tipo grande que monta guardia...

Tras esto se oye el ruido de algunos movimientos apresurados...

- ¡Alto ahí, como alguien se mueva le vuelo la puta cabeza! -suena la voz de Ford, con su estilo habitual- Eso es, así me gusta, las manos donde pueda verlas...

De nuevo interviene Matthew:

- Le recomiendo que deje de teclear y se aleje de esa terminal... no voy a repetirlo.

Las posibles respuestas de los detenidos no os llegan, pero la ausencia de disparos, gritos o ruido de lucha es una buena noticia. Y finalmente las palabras de vuestros compañeros resumen el feliz desenlace:

- Señor, ya son nuestros. Dos hombres detenidos, uno de ellos reconoce ser el capitán de esta nave mercante.

Parece que la cosa está hecha. La Alexei Leonov está bajo vuestro control y el tal James Cole bajo arresto.

La voz del mayor Tigh llega alta y clara por el intercomunicador:

- !Buen trabajo, muchachos! Ahora quiero que me traigais a ese capitán Cole para llevarlo ante el comandante, él decidirá lo que vamos a hacer con él... -afirma con un tono plenamente satisfecho- Quaritch y Greer, conduzcan a sus prisioneros hasta el puente de mando de ese mercante, así mantenemos a la tripulación controlada y también nos aseguramos de que nadie intenta una maniobra no permitida con la nave, ni trastea más con los archivos. Seguramente querremos examinarlos de forma minuciosa...

Desde su puesto de guardia, en la cubierta inferior de la nave, donde se han acoplado al Alexei Leonov para abordarlo, se prepara para recibir a Matthew y Ford con su valioso cautivo.

Escucho con atención todo lo que ocurre en la Alexei Leonov y no puedo más que sentirme satisfecho por el trabajo realizado por mis hombres.

- Bien hecho chicos, habéis hecho un gran trabajo. Me siento muy orgulloso de vosotros -digo a mis hombres por el comunicador- Haré que preparen una buena cena para todos vosotros... ¡Os la habéis ganado!

—No se olvide de incluir un buen vino para acompañarla —dijo después de soltar una carcajada un poco forzada.  

Abandonó entonces la terminal frente a la que se encontraba y se aproximó hacia el comandante. Aquel episodio en el puente de mando había resultado demasiado intenso para el doctor Baltar.

—Si quiere puedo echar un ojo a los archivos de nuestra nueva nave, Comandante. Pero si no tiene inconveniente, me gustaría descansar un poco por el momento. 

Con una presteza encomiable, el mayor Saúl Tigh conduce hasta el puente de mando del AURORA al capitán de la nave mercante que acaban de abordar y tomar por la fuerza de las armas, aunque sin necesidad de dar un solo tiro.
 

Tigh se cuadra con un marcado aire marcial al entrar en el puente:

- Comandante, este es el capitán James Cole, el hombre al mando del Alexei Leonov.

El aludido se planta con gesto altanero ante vosotros, sin perder en ningún momento la sonrisa, pero de momento escoge guardar silencio...

Smith, con evidente cara de agrado por el resultado de la misión, observa a Cole con evidente suficiencia y superioridad. Se diría que está a punto de decir algo, pero comprende que no le corresponde, que es el comandante quien debe comenzar las preguntas.

- Ya le tenemos aquí, Comandante -dijo sin poder quedarse en silencio un segundo más- Creo que el señor Cole tendrá muchas cosas que explicarnos.

Alfred Bester, el agente del ONUG, aparece en este momento por la puerta, a tiempo para oír el comentario de Smith. Resulta sorprendente el sentido de la oportunidad que siempre demuestra este hombrecillo, esa especie de don para llegar justo en el momento oportuno para ser testigo de las cosas que le interesan...

Saludo con gesto marcial a mi primer oficial y me planto ante el detenido. Smith me solicita celeridad pero hago caso omiso a sus palabras. Por lo poco que sabía de Cole me hago a la idea de que es un personaje inteligente, tal vez demasiado, razón por la que prefiero no darle más información de la necesaria. Al menos por ahora.

- Capitán James Cole -saludo con un gesto de cabeza sin tenderle la mano. Él sabía de sobra quién le hablaba así que no era necesario presentarme -¿Puede explicarnos la razón por la que no se detuvo cuando se lo solicitamos?

Tras lanzar la pregunta me acerco a Saúl y le susurro algo al oído.

- Inspeccionad la nave de arriba a abajo y presentadme un informe del inventario. Se supone que la mercancía robada debería estar en la nave, al menos una parte -ordeno en susurros a mi viejo amigo.

Tu privilegiado oído te permite escuchar los susurros que intercambian el comandante y su primer oficial...

Tigh contesta algo al oído del comandante y a continuación se cuadra antes de retirarse del puente sin perder ese aire marcadamente marcial...

- Así lo haremos, Will -contesta en otro susurro- Me llevaré a Rogers, a Sysko y a Henderson para que colaboren en el procedimiento...

Pues el trabajo estaba hecho. Por fin se había abordado a la nave. 

- ¿Y quién prepara la cena? -me pregunté. Era una pregunta tonta. Cocinero no había visto, y meter comida prefabricada el dispensador de alimentos para luego dar a un botón no era hacer una cena.

- Alcohol en una nave espacial. Lo mejor para la gente que lleve mucho tiempo aislada en una nave.

Entonces llegó la oferta de Baltar.

- Eso, tú ofrécete el primero para investigar los archivos. ¡Que casualidad!.

Desde el encuentro con Bester y McKay no me fiaba nada de Gaius Baltar. Tenía que enviar un mensaje a Rodney para que esté atento de vigilar, no tanto lo que averigua, sino lo que se deja de contar... o directamente modifica.

Ví como el Capitan Cole se presentó ante nosotros con un gesto altanero, propio de alguien acostumbrado a estar en situaciones difíciles y lo que es mas complicado, a salir con bien de ellas. Aunque, para su desgracia, nunca había estado en una situación como esta.

Me giré para ver entrar a Bester, al que saludé con un ligero movimiento de cabeza.

Y mi privlegiado oído me permitió escuchar los susurros entre el Capitan y el Primer Oficial.

- Hmmm... buscar a conciencia un cargamento robado, que interesante. Veremos qué dice el Capitan Cole sobre ello.

Saque mi PDA, la cual no solía usar mucho, pues me gustaba apuntar todo con un lápiz y una libreta. Tenia una bonita caligrafía y era toda una purista con estas cosas. Pero había cosas que no podía hacer con papel y lápiz. Por lo que tecleé de forma rápida y metódica en la moderna PDA.

Y mande un mensaje a McKay.

Pues el trabajo estaba hecho. Por fin se había abordado a la nave. 

- ¿Y quién prepara la cena? -me pregunté. Era una pregunta tonta. Cocinero no había visto, y meter comida prefabricada el dispensador de alimentos para luego dar a un botón no era hacer una cena.

- Alcohol en una nave espacial. Lo mejor para la gente que lleve mucho tiempo aislada en una nave.

Ví como el Capitan Cole se presentó ante nosotros con un gesto altanero, propio de alguien acostumbrado a estar en situaciones difíciles y lo que es mas complicado, a salir con bien de ellas. Aunque, para su desgracia, nunca había estado en una situación como esta.

Me giré para ver entrar a Bester, al que saludé con un ligero movimiento de cabeza.

Saque mi PDA, la cual no solía usar mucho, pues me gustaba apuntar todo con un lápiz y una libreta. Tenia una bonita caligrafía y era toda una purista con estas cosas. Pero había cosas que no podía hacer con papel y lápiz. Por lo que tecleé de forma rápida y metódica en la moderna PDA.

Cuando estabas a punto de abandonar el puente hace su entrada Tigh con su prisionero, cosa que evidentemente despierta tu curiosidad y te retrasa unos instantes...

Y entonces, la ya tan familiar voz de Tricia resuena en tu cabeza:

- Querido, acabo de interceptar un mensaje privado que la secretaria de Wray está enviando con su PDA, ya sabes que me gusta estar atenta a lo que sucede en mi entorno -te comenta- Ha llamado mi atención porque tu nombre aparece en él... por supuesto estaba encriptado, pero no con un nivel de seguridad que suponga un verdadero reto para mí.

Gaius suspiró aliviado al oir la voz melodiosa y familiar de Tricia de nuevo en su nuca. Las sensaciones no son tan… logradas como lo eran antes, pero la comunicación volvía a resultar más natural.

—Bien hecho, querida. Parece que eso confirma nuestras sospechas: estamos sólos. Veremos que nos depara la reunión con Rodney y el fantasma que tiene Wray por secretaria. ¿Qué más datos puedes sacar de esa PDA que lleva consigo, Tricia?

Tricia contesta con una inflexión de aburrimiento en su manera de modular la voz asombrosamente lograda...

- Me temo que no hay nada más que revista un mínimo interés -comenta desdeñosa- Sólo una serie de novelas históricas con escasa base académica, por lo visto Vickers es muy aficionada a la lectura y tiene una marcada predilección por ese género.

Hace un alto, como si estuviera revisando algo, y luego continúa:

- No he detectado nada que pudiera sugerir un cifrado oculto en esos ficheros, por lo que me atrevo a extrapolar que no utiliza esa PDA más que para tareas superfluas -concluye- Lo cual por otra parte nos indica que es un personaje inusualmente precavido con la información que maneja, la he visto muchas veces tomando notas con medios analógicos, escribiendo a mano en una arcaica libreta...