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Tombstone: Dead Lands

Capítulo 1: Un día en Tombstone

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13/05/2009, 13:01
Director
Sólo para el director

FRANK

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16/05/2009, 20:32
Director

El Oeste es un lugar duro para gente como tú. En realidad, El Oeste es la gente como tú.

Y tú no eres un ramillete de flores.

La vida de un cowboy solitario tiene poco del romanticismo de esas novelas que los pisaverdes escriben: manejas rebaños de ganado que podrían aplastar una granja en minutos, de hecho a veces te pagan para que lo hagan; tienes que vértelas con cuatreros y pistoleros que quieren echar mano a lo ajeno, la peor calaña de Arizona; viajas seis semanas por los peores paisajes del país y descansas una en una pensión de mala muerte.

El último rebaño que escoltaste cambió de manos en Tombstone, ya habías estado aquí una vez, una ciudad dura, incluso para gente como tú. Sin embargo este viaje fue distinto y tu descanso se alargó más de lo que te habría gustado. Todo empezó con una partida de póker en el gran Saloon "La Jaula del Pájaro", se te suelen dar bien las cartas, pero esta vez apostaste demasiado y perdiste...

¿Qué es un vaquero sin su caballo? Volviste a transformarte un pistolero. Tuviste que hacer pequeños trabajos para saldar las deudas y pagarte la cama y el pan duro. Sin embargo tuviste mucho cuidado de no llamar la atención. El Sheriff Eackley no es de los que ahorran plomo, especialmente en los forasteros indeseables. Además, tus días de forajido violento ha quedado atrás, muy atrás.

Pasaron semanas y cuando tuviste dinero suficiente compraste un billete de diligencia para salir de ese agujero llamado Tombstone. En el Oeste estaban las oportunidades, si conseguías llegar otra vez a zona de rebaños tendrías trabajo asegurado. Pero para eso hacía falta atravesar el desierto y sabías lo suficiente del mundo como para olvidarte de la idea de hacerlo solo.

Sin embargo llegó todo ese asunto del problema de la Wells Fargo, que no entendías demasiado bien, y te dijeron que la diligencia no iba a salir por ahora. Te quedaste con el billete en espera, válido para el primer viaje que saliera hacia el oeste. Ha pasado un semana y muchas cosas desde entonces pero no hay cambios y no tienes muchas otras cosas que hacer aparte de esperar.

Eso, y sobrevivir en la ciudad más dura de Arizona.

 

Ayer empezó el mes de mayo, si no te equivocas llevas ya un mes en Tombstone y el día de hoy no promete muchos cambios. Para empezar porque estás en tu lugar habitual, el Saloon La Jaula, esperando una oportunidad que parezca un trabajo y bebiendo cerveza barata.

El local está concurrido, chicas de salón, pistoleros, algún viejo borracho, una mesa de militares... Mucha gente para ser tan temprano, aún no debe ser mediodía.

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19/05/2009, 13:36
Frank

Frank bebe solo y apartado cerveza caliente en una desvencijada mesa del maldito salón "La Jaula del Pájaro" mientras recuerda la fatídica mano de póker en la que perdió su caballo. Maldita sea!

Con su sombrero negro y redondo bien calado sobre sus ojos, observa el ir y venir de borrachos, fulanas y demás gente indeseable... como él. Sin levantar ninguna sospecha presta atención a las conversaciones vecinas, todas ellas triviales, por si se entera de algo que le pueda facilitar salir de este agujero llamado Tombstone.

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19/05/2009, 15:36
Director

Paseas la mirada por toda la sala, dos chicas hablan entre ellas de algún tema sin importancia, otra flirtea con un vaquero borracho, en una mesa cuatro militares comentan algo que queda fuera de tu alcance, un viejo medio ebrio en la barra permanece en silencio, el herrero del pueblo con dos amigos hablando seguramente de su trabajo, un solitario anciano que fuma en pipa, un pistolero en una mesa apartada que mira hacia el viejo de la barra...

Tus ojos se cruzan con dos tipos malcarados que hablaban a saber de qué, a uno de ellos no parece gustarle tu atención en sus asuntos y te dedica una mirada agresiva, sin embargo la cosa no llega a mayores. Los forasteros, pies tiernos, los indios... son blanco fácil y frecuente en esta ciudad violenta. Pero tú eres uno más entre los tipos duros.

Aún así te da la impresión de que al tipo no le has caído nada bien y te mira mucho.

- Tiradas (1)
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21/05/2009, 15:50
Frank

Frank sabe demasiado acerca del indeseable caracter de ese tipo de cuatreros que le observa ahora como para no provocar una pelea en el salón. El sheriff de la ciudad es famoso no precisamente por ser blando aplicando la ley. No quiero tener problemas. Solo quiero largarme de este antro lo antes posible. No obstante Frank también sabe que si se han molestado debe de ser por dos razones: 1) que quieran buscar problemas, lo cual es probablemente lo más habitual y 2) que oculten realmente algo. En cualquier caso que el diablo se los lleve! Frank centra de nuevo su atención en el asqueroso sabor de la carveza, se cala aún más el sombrero, se acomoda en la desvencijada silla y mira a las fulanas más cercanas.

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21/05/2009, 16:10
Director

Tu mirada da un segundo paseo por el saloon, el tipo con aspecto de pistolero se ha levantado e intercambia unas palabras con el viejo borracho de la barra, al que has oído llamar Bill. El viejo le pasa un periódico al otro, un ejemplar del Epitaph, supones.

Las chicas te miran con interés pero debes asustarlas porque se comportan de forma muy tímida para su profesión. El herrero y sus amigos han empezado una partida de cartas y los ánimos se caldean entre ellos rápidamente. Poker, peleas, fulanas, pistoleros... este Saloon tiene una fama merecida.

Alguno de los militares te mira de vez en cuando, estás seguro de que no lo habías visto en la vida. En el ambiente flota agresividad y hace falta poco para prender la mecha.

En ese momento las puertas dobles del establecimiento se abren con un chirrido bajo el paso de tres figuras de forasteros. Tres mexicanos desaliñados. Bajo sus anchos ponchos puedes distinguir la forma de los revólveres que llevan al cinto, no eres el único que no se arriesga a cumplir la Ordenanza pero estos tienen todo el aspecto de bandidos o tú no eres un cowboy.

El hombre que había estado hablando con Bill y leyendo el periódico ya se había levantado para marcharse y en su camino se topa con los tres extranjeros. Una fría mirada, que habría pasado desapercibidas para alguien menos avezado que tú, te dice que el presunto pistolero también se ha dado cuenta de las armas de los mexicanos y eso no parece gustarle lo más mínimo.

La pólvora parece a punto de estallar aunque el tipo, si no te equivocas, está desarmado.

El hombre, con su mirada asesina, vuelve hacia la barra donde intercambia unas palabras con el Barman. Mientras, los extranjeros entran haciendo sonar sus espuelas contra el suelo. El camarero entonces saca una escopeta que debía tener a sus pies y la pone sobre la barra, a distancia de usarla tanto él mismo como el pistolero que se ha acercado a advertirle.

En todo el Saloon reina un silencio expectante al ver esto, el ambiente ha mejorado rápidamente, piensan muchos. Se susurran algunos comentarios en voz muy baja pero nadie parece dispuesto a hacer otra cosa que mirar.

Los mexicanos, ante el gesto hostil, paran en seco en mitad de la sala y uno de ellos habla.

- Tiradas (3)
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21/05/2009, 20:46
Mexicano

Caramba... ¿acaso los forasteros del otro lado de la frontera no son bienvenidos aquí?

aunque no hace ningún gesto agresivo ves que no separa mucho sus brazos del costado, de sus pistoleras.

venimos a beber algo, descansar y hacer unas preguntas nomás.

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21/05/2009, 21:04
Pistolero

El pistolero no deja de mirar fijamente al mexicano que habla hacia él. Mientras lo hace el asco que muestra su cara es bien patente, no parecen caerle bien los mexicanos.

¿Pero es que te sorprende, bastardo de un coyote?, para empezar deberíais haberos presentado ante el Sheriff para que os diera permiso a pisar las calles de la ciudad. Y si os hubiera dejado, cosa que dudo, le tendríais que haber entregado las armas como hemos tenido que hacer la gente "civilizada". Aunque por otra parte entiendo que no lo hayáis hecho, para conocer la ley de no llevar armas hay que leer uno de los carteles que abundan en la ciudad, pero de todos es sabido que no se puede enseñar a leer a un animal.

Los susurros y risitas se cortan en seco en el Saloon. El ambiente es tan denso que puede cortarse con un cuchillo, el hostil tipo no mueve ni un músculo aún cuando los rostros de los mexicanos se retuercen de ira y sus manos se acercan aún más a las pistoleras.

Los extranjeros, y la situación, parecen a punto de explotar.

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22/05/2009, 12:53
Frank

Frank observa el típico diálogo entre gallos de pelea. Ambos bandos buscan lío y desde luego lo van a tener. El pistolero parece ir desarmado, pero la escopeta que le ha dado el barman equilibra un poco la balanza. Aún así son 3 contra uno, y es difícil saber quién está a favor del pistolero y quien no.

Desde luego Frank sabe lo suficiente de la vida como para permanecer al margen. Solo si las cosas se ponen fea hará lo posible por... ¡salvar el pellejo! ¡Claro!

De manera rápida busca entre la gente del bar miradas o actitudes coporales que puedan indicarle que alguien más puede estar dispuesto a tomar cartas en el asunto.

- Tiradas (2)
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22/05/2009, 14:35
Director

Nadie parece dispuesto a meterse en la pelea, a pesar de que el aspecto de los mexicanos no promete nada bueno y a nadie le agrada tener a unos extranjeros armados en su Saloon.

El Barman parece desentenderse y da unos pasos laterales para dejar de estar tan cerca del conflictivo pistolero.

En ese momento sucede lo inevitable: los mexicanos con un rápido movimiento echan mano a su pistolera...

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23/05/2009, 00:43
Frank
Sólo para el director

Frank se ve sorprendido por la rápida acción de lo mexicanos. No obstante él no es un cuatrero cualquiera y desenfunda su arma velozmente. Finalmente el cowboy parece decantarse por ayudar al pistolero. Su perorata acerca de las normas en la ciudad le hacen ligeramente más digno que a los otros. Pero solo ligeramente...

Frank se dispone a echar mano de su arma y a actuar contra los mexicanos.

- Tiradas (1)
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23/05/2009, 03:06
Director
- Tiradas (2)

Notas de juego

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23/05/2009, 03:16
Director

Las manos de los mexicanos son muy rápidas aunque sus nervios parecen haber sufrido por la seguridad del hostil pistolero.

Los revólveres salen de sus fundas en un parpadeo, justo en el mismo momento en el que el tipo aquel echa mano a la escopeta.

Uno de los mexicanos comete un terrible error: su arma se lia en el poncho y tarda mucho más de lo que debiera en estar apuntada en la dirección correcta. Un error fatal.

Los otros dos son mucho más eficaces aunque el tipo de la barra se mueve endiabladamente rápido, en un instante tiene la escopeta en la mano y la gira hacia los bandidos pero uno de los dos ha sido más rápido y ya le apunta, el percutor se amartilla dispuesto a detonar.

En esa precisa fracción de segundo se oye tu disparo...

- Tiradas (2)
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23/05/2009, 08:47
Frank

Sin levantarse de la silla el cowboy escupe el plomo de su pistola contra el mexicano más amenazante, ese que ya tiene encañonado al pistolero.

El ambiente violento se ve enriquecido por el olor a plomo y sangre. Frank no puede evitar sentirse reconfortado por su acción.

- Tiradas (7)
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23/05/2009, 14:55
Director

El mexicano que ya rozaba el gatillo de su arma apuntada al pistolero mira su poncho súbitamente manchado de sangre un segundo antes de que el estampido de la escopeta haga tragar plomo al que está a su derecha.

Los dos cuerpos caen al suelo prácticamente a la vez, con un balazo en el corazón uno y con media onza de perdigones de plomo en el pecho el otro.

El tercer mexicano, el más torpe, a duras penas lograba sacar su arma en ese instante, antes siquiera de darse cuenta de la caída de sus compañeros en la rápida sucesión de disparos. Tal vez cuando sea consciente de que ha quedado solo esté más comunicativo, o tal vez decida mandarlo todo al diablo antes de caer también.

Tu arma, en todo caso, vuelve a estar lista para disparar...

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23/05/2009, 21:33
Frank

Acabar lo empezado... esa es la filosofía de Frank. Paño! Restan 4 balas en el tambor. Una segunda bala sale del revólver de Frank con dirección al último Mexicano vivo. La torpeza en el Oeste se paga... con la vida, amigo.

- Tiradas (3)
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24/05/2009, 02:27
Director

Tu segundo disparo resuena, atrayendo miradas de los aturdidos espectadores, y una bala del 45 va a alojarse en la clavícula del mexicano en pie. La sangre salpica la pared una vez más y el herido cuatrero gira sobre sí mismo por la inercia del proyectil.

Encarado a la puerta y con la mano izquierda sobre su herida el extranjero trastabilla tratando de salir.

En el Oeste la moralidad no está muy valorada y con frecuencia las leyes son difusas, cada uno tiene sus propios límites. Disparar a un hombre herido por la espalda rebasa los límites de la mayoría...

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24/05/2009, 10:30
Frank

La moralidad de Frank es tan laxa como la de la mayoría de los individuos de su calaña. Disparar por la espalda a un estúpido buscapleitos del tres al cuarto no supone ningún problema para él. Pero hay algo que debe ser resuelto, y es por qué se han "metido" con el pistolero. Quizás el pistolero quiera respuestas, y no las tendrá si Frank le da una nueva dosis de plomo al mexicano patoso. Así que permanece sentado en la silla a la espera de lo que haga el individuo de la escopeta. Semioculta el revólver bajo la mesa pero no lo guarda... Aún no.

Entre estos asquerosos compañeros de taberna pueden haber más enemigos... No sería la primera vez.

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24/05/2009, 23:25
Pistolero

El pistolero de la escopeta te mantiene la mirada ignorando al bandido que escapa, haciendo chirriar las puertas, y hace un simple gesto de agradecimiento con la cabeza. Luego te habla directamente sin dejar de mirarte.

Gracias por la ayuda, amigo. Pero lo mejor que puedes hacer ahora es marcharte, deja que yo me lleve todas las culpas por lo que ha pasado. El Sheriff llegará pronto y querrá saber que ha sucedido. Por lo que se, Eackley no es tonto y descubrirá enseguida que los dos mexicanos no murieron por la escopeta. No quiero que tengas que dar explicaciones de por qué llevabas un arma encima. Cuando venga el Sheriff no le mentiré, pero si no estas no podrá involucrarte, por que no conozco tu nombre y tu aspecto es muy habitual.

Hace una ligera pausa para añadir finalmente.

No olvidaré esto que has hecho vaquero, me has salvado la vida.

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26/05/2009, 18:50
Frank

Frank sabe juzgar una mirada. Y la de este pistolero es la de un tipo duro. Como él... Duro, sí. Pero también franco. No parece ser un bribón, ni un asesino, ni tampoco un cuatrero. Aun así en el oeste no destacan las buenas acciones. Y esta es una de esas acciones buenas "con mayúsculas".

Por qué me dejará ir?

Algo le dice a Frank que volverá a encontrarse con este misterioso personaje, y desde luego no dejará que ese encuentro sea casual. Guardando la pistola bajo su abrigo y dando un último y largo trago a la asquerosa cerveza del Salón, sale del lugar calándose bajo el sombrero. Sus pisadas resuenan en el recinto. Al pasar junto al pistolero murmura en un tono grave...

No veremos vaquero. Nos veremos.