Partida Rol por web

Los soldaditos de plástico, tras unos segundos de espera, ven como la puerta se abre lo suficiente para que pueda pasar un... juguete. Debido a los obstáculos, nada más pueden vislumbrar en la lejanía.

 La puerta se ha abierto dos centímetros; lo suficiente para que Stretch quepa por la abertura. Nota como la puerta del cuarto de baño se abre, pero ya está dentro.

El cajón del que proviene es el tercero desde abajo -claro; desde donde está él- de la columna de cajones más lejana, a la derecha de la mesa.

Todo parece en orden... para ser el cuarto de Max, claro.

Alto!-Grita el capitan-Chicos, avancemos en formacion. Apunten al objetivo y a mi orden disparad.

Los soldados se van moviendo lentamente hacia la puerta sin bajar sus armas.

Doc observa el agujero y decide echar mano a su escopeta. Parece que los chicos de verde se lo montaban bien, pero siempre había preferido cuidar de sí mismo. Los hermanos Earp y los tipos secundándolo, avanzan hacia la rendija de la puerta. Todos salvo Wyat, que, más preocupado porque la rendija de la puerta no se cierre, coge un calcetín del suelo de la habitación y arrastrándolo, intenta encajarlo debajo de la puerta para inmovilizarla.

El trayecto a la puerta resulta ser una cansada caminata. ¡Cuánto se sorprenden los soldaditos y vaqueros cuando descubren que quien la ha abierto es un todavía más exhausto juguete!

Se trata de Stretch Armstrong; el mismo que la mañana pasada fue raptado para satisfacer al bebé de la casa. Y ha logrado escapar.

Sudando (¿o es baba de bebé?) Stretch entra en la habitación por el estrecho hueco que ha conseguido abrir en la puerta. Sus extremidades se deforman al pasar por el mismo, para volver al poco tiempo a su firma original.

Por fin puede ver como un grupo de soldados y los rancheros avanzan hacia la puerta.

Stretch se desploma cual Gulliver entre los muñecos, agotado.

-Ha sido horrible, ¡horrible!- relata- Ese monstruo metio mi cabeza en su boca...

-Tuvo que ser una experiencia horrible, amigo-contesta Wyatt mientras le tiende amistosamente el calcetín para que pueda usarlo a modo de toalla-.Pero cuéntanos, ¿qué hay más allá de esa puerta?.

El resto de sus compañeros de caja permanecían alerta, avanzando inexorablemente hacia la abertura, encabezados por Doc.

Al ver llegar al jugete la tension en la compañía disminuyo. Mas aun cuando vieron que los chicos de la carabana hablaban amistosamente con él.

Soldados-susurro en voz baja Price-parece un civil no un adversario. Bajad las armas pero manteneros alerta. McTavish hacercate a recabar información

-Si señor-le respondio el sargento mientras se unia a la pregunta de Wyatt.

Stretch finalmente se sienta y se seca la cara con el calcetin que le acerca uno de los vaqueros.

-Sí, lo fue...

Entonces mira alrededor, a la habitación, había cosas nuevas desde la última vez que había salido del cajón...

-Como es que... bueno, ya sabéis... ¿Por que ahora podemos movernos?- pregunta finalmente confundido.

-¿Y donde está el resto de los juguetes? ¿Ellos no pueden?

El capitan mira a sus soldados y se aleja de la formacion andando hacia el nuevo juguete que acaba de entrar.

Sargento McTavish, de la Green Company al servicio del Coronel Max. Venimos de aquella posicion elevada-dice señalando el cajon-Alli hay otros como nosotros pero no podemos sacarlos de alli. Usted viene de fuera, le exijo identificacion y un informe de la situación.

-Ya tendremos tiempo de ocuparnos de eso más tarde, amigo. Primero deberíamos asegurar la zona y ayudar a nuestros amigos a salir de allí-dice Wyatt señalando al cajón de los juguetes-.Por ello cualquier información que nos puedas dar, será de gran utilidad.

Se oye un grito masculino que proviene del lejano cajón. Max se revuelve bajo la colcha.

Sorprendidos por el grito la compañia entera se da media vuelta y apunta en la direccion del sonido.

Compañia, alerta. Mantened la posicion.-se gira hacia Strech Amstrong- será mejor que regresemos al cajon. Pero antes debemos coger uno de esos cordones y llevarlo con nosotros-dice McTavish.

Compañia, en marcha!

La green company, con el corral de Wyatt siguiéndola no muy de lejos y Stretch casi rodando tras los demás, llega finalmente al pie de los cajones.

-Bien, aquí estamos. Eh, chicos de verde, ¿habeis conseguido esa cuerda?. Dejádmela y vereis lo que es capaz de hacer un vaquero con ella-Dice Wyatt-.

Cuatro soldados acarreaban el largo cordon. Al oir lo que Wyiatt les decia echaron a reir. Parecia un buen tipo, y valiente. Pero como su nuevo compañero no les ayudara a alzar la cuerda no podrian pasarla al cajon.

Jajaja, me temo que esta cuerda no la podremos mover ni siquiera entre todos nosotros vaquero. Ey roockie(refiriendose a Strech) por que no nos echas una mano ya que tu eres mas grande que nosotros. Hay que sacar al resto de ahi dentro...no sabes como huele.

Wyatt se rie al comprobar el tamaño de la cuerda que traían los amigos de verde. Dos manchas rojas aparecieron sobre el plástico amarillo que formaba su cuerpo, a la altura de sus mejillas.

-Errr...creo que teneis razón. A ver, grandullón, ¿te puedes encargar tú?.

Los chicos dejaron el cordon en el suelo y suspiraron aliviados.

Pues como el grandullon no pueda lanzar el cordon, estan listos los de ahi dentro-dijo Josh.
Calla!-contesto John-Sacaremos a esos pobres diablos y tambien a la chica-monstruo. Es nuestro deber John.

Los chicos callaron rapidamente mientras el vaquero y su capitan hablaban con el otro juguete.

Pues yo creo que los de ahi dentro deberian poder salir ellos solitos. De que sirve ser tan grande si no pues' salir de ahi-dijo gus en voz baja a los dos.

No,-dijo John- debe de haber de todo tipo de juguetes y nos debemos ayudar entre tod...-calló al oir hablar a Strech.

Stretch mira hacia arriba, a la pared-cajón.

Allí dentro había más juguetes y tenían que sacarlos.

-Cogeré la cuerda con la boca e intentaré estirarme hasta alcanzar la parte de arriba del cajón.

Muerde un extremo del cordón y se coloca junto al cajón, comenzando a ponerse de pie utilizando el mueble para sostenerse...