Partida Rol por web

Un largo viaje hacia Minas Tirith

Cap. 6: Cambio de planes

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03/07/2012, 10:54
Gallindum

Turno 610

Dado la tardanza de Daupner y Groal empiezo a preocuparme. No es normal que tarden tanto en recoger unas cuantas ramas secas así que preto especial atención por si viera algo raro mientras mis manos agarran firmemente el Escudo y el Martillo.

- ¿Alguno ha visto a Ilidian y a Arlan? - pregunto. Hace rato que deberían haber vuelto.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 24(+45)=69

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03/07/2012, 14:40
Draupner "hiendeescudos"
Sólo para el director

Turno 610

Draupner se tomó con calma la búsqueda de leña dejando a Groal que se afanara más en aquellas labores, el motivo no era otro que su preocupación por la tardanza en la inspección de Ilidan y Arlan. Tomó el camino por donde habían salido los exploradores y trató de buscar el rastro de sus compañeros por si daba con alguna pista de su paradero.

Una vez recopilada la leña volvió al campamento y ayudó a Marga a preparar la hoguera, aprovechando la hoquedad en la que se hallaban para intentar minimizar el resplandor que las llamas generabas.

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Percepción

Tirada: 2d100

Resultado: 81, 23

Tirada oculta

Motivo: Rastrear

Tirada: 2d100

Resultado: 23, 21

Notas de juego

Si no encuentro nada me vuelvo, si no mandaría a Groal de vuelta con la leña. El segundo d100 de cada tirada es para el tema de los posibles críticos o pifiias.

Bono de percepción 53

Bono de Rastreo 42

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03/07/2012, 19:01
Ilidan
Sólo para el director

Turno 610

 

Ilidan iba a proponer a Arlan de volver ya al campamento tras el descubrimiento del riachuelo, cuando escuchó un sonido metálico como rodando. De inmediato, el numenoreano se apoyó de espaldas contra un árbol, llevando con una mano la espada en posición vertical hasta el hombro contrario al que la empuñaba.

Miró a un lado, y vio la fuente del ruido, una cuerda que rodeaba todo un perímetro y que cada cierto tiempo seguramente tendría objetos metálicos colgados, una fuente de alarma ante intrusos, no una trampa.

Giró la cabeza hacia el otro lado, hacia la posición que había visto por última vez a Arlan. A pocos metros de allí, agachado se encontraba el enano, maldiciendo el haber tropezado con la cuerda. Volvió a girar la cabeza y se quedo observando durante un rato si venía alguien alertado por el ruido.

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 29(+46)=75

Tirada oculta

Motivo: Acechar/Esconderse

Tirada: 1d100

Resultado: 23(+26)=49

Notas de juego

Si pasa mucho tiempo sin ir nadie, interactuaré con Arlan si da tiempo en este turno, y sino pues para el siguiente.

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05/07/2012, 00:43
Temüdyin

TURNO 610:

Los nudillos, blancos por la firmeza con la que sujetaba el arma, fueron recuperando su color cuando reconoció la desfigurada cara del éothéod. No fue automático, como hubiese sido lo normal, sino que por un instante, apenas perceptible, la punta de la lanza se mantuvo firme, a escasos centímetros de la carne de Fréagulf. Aquel pequeño lapsus de tiempo, en el que un simple parpadeo hubiese tenido problemas para llevar acabo todo su recorrido, se expandió dentro de la cabeza del recién despertado.

Tal vez fuese por el cansancio sufrido por el castigo físico y mental recibido de una gente a la que, días antes, consideraba como propia, pero lo cierto era que, en aquel ambiguo momento, infinitesimal e infinito a la vez, una parte de Chaka había deseado acabar el movimiento que había empezado en el momento en que despertó.

Superado por la ira que lo embargaba y por la venganza, no importaba quien sufriese, mientras sufriese de verdad, tanto como él lo había hecho. Si el objetivo real estaba fuera de su alcance en aquel momento, cualquiera podría servir para aligerar, aunque solo fuese un instante, aquella pesada carga que lo oprimía y no le dejaba respirar, asfixiándole irremisiblemente. 

Pero aquella cara, la misma que acababa de despertar aquel instinto primario, era la cara de quien podía acercarle a su verdadero propósito. Y fue solo por aquel motivo por el que el animal que todos llevamos dentro, y Chaka aún más que nadie, no tomó el control de su cuerpo lacerado. Como una cuerda lanzada a un enfurecido río por la acción salvadora de un congénere, Temüdyin se aferró a aquella esperanza como a un clavo ardiendo. 

Porque, sin lugar a dudas, todo el esfuerzo realizado y todos los riesgos asumidos para salvar, curar y mantener con vida al ailgratha tenían un propósito. Y Chaka era demasiado inteligente como para, en un momento de enajenación, echarlo todo a perder. 

Se incorporó, apoyando el peso del cuerpo en la lanza, a la vez que observaba a su compañero. Al parecer los cuidados a los que le había sometido habían surtido efecto. Había recuperado el color y, se notaba, la sangre volvía a fluirle por las venas. Sin duda, aún tendría efectos secundarios, pues aquella herida del brazo tardaría en cerrar definitivamente pero, por lo menos, ya no se le escapaba la vida por ella. 

También él se había beneficiado del reparador descanso y, como no, del improvisado baño que había tomado. Se sentía más fresco y despejado. Los músculos aún entumecidos por haber dormido a la intemperie, bajo las estrellas y sin un refugio adecuado, protestaron al instante. Lo habían estado haciendo desde mucho antes de que lograra escapar pero de manera muy distinta. Mientras lo que en aquel entonces fueron unos débiles y lastimeros gemidos de auxilio ahora, después del reparador descanso, no eran más que las típicas y airadas quejas de unos músculos engarrotados por la postura y el frío.

Decidió poner fin a aquella mini rebelión con una buena dosis de agua helada y cristalina. Si, sería lo mejor. Después, ya más despejado, tanto de cuerpo como de mente, le expondría a Fréagulf sus exigencias. No eran unas exigencias caprichosas ni contrarias a la supuesta misión que estaba llevando a cabo el ailgratha, sino más bien al contrario. El éothéod debía comprender que no necesitaba los ojos, ni ninguno de sus sentidos, para lograr la información que tanto anhelaba; la tenía al alcance de su mano, solo debía agarrar un pequeño papel, algo con que escribir y una paloma. En menos de lo que un Crebain tardaba en recorrer las Tierras Brunas, sus superiores tendrían una visión completa del terreno de juego, lo que les permitiría gozar de cierta ventaja a la hora de trazar un plan.

Y además Chaka, que conocía perfectamente cual el plan de los orientales, también conocía sus debilidades. Y era en aquel instante cuando eran más débiles pero si conseguían juntarse... - "Si tan solo dispusiese de unos pocos hombres..." - pensó. Pero aquel no era el momento de lamentarse, era el momento de actuar. Necesitaba convencer a su compañero, debía...

- "Clonk, clink clank." - ...debía actuar, y rápido. Alguien, o algo, se acercaba y había hecho saltar la alarma. Podía ser un animal o...algo muchísimo peor. Por suerte Frégulf lo había despertado instantes antes lo cual le ahorró un tiempo precioso y la molestia de preparar el arma. Se encontraba libre para lo que quisiese.

Rápidamente, miró a su alrededor para ver si conseguía localizar la causa del ruido mientras se colocaba de espaldas a riachuelo y reculaba lentamente hacia el mismo intentado esconderse al máximo y disimularse entre la vegetación. Esperaba, de ese modo, evitar ser sorprendido por la espalda y, a la vez, intentar que no le vieran ni siguieran. Si lo conseguía, el factor sorpresa se decantaría hacia su costado

Mientras pasaba por el lado de un junco de agua, rompió un trozo con un sutil pero efectivo movimiento y lo guardó. Aquella planta, o mejor dicho, su tallo, era hueco y resistente. Si necesitaba huir y amagarse tal vez luego le fuese de utilidad.

Después, simplemente, empezó a maldecirse a si mismo por no haber seguido a su instinto de marchar sin descanso hacia la ciudad. Era la segunda vez en menos de una semana que lo ignoraba y aquello empezaba preocuparle. Ahora, lo que había temido, podía hacerse realidad. Y fue en ese momento, en medio de aquella tensión e incertidumbre, cuando Temüdyin esbozó su primera sonrisa post tortura. 

- "Por lo menos son torpes. Si no han logrado burlar una rudimentaria alarma, tendrán que emplearse a fondo para atraparme de nuevo."

Estaba preparado para matar y morir matando. Siempre, claro está, que Byambin cayese con él.

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05/07/2012, 18:02
Director

RESOLUCION TURNO 610

 

Cuando terminaron todas las tareas, enterraron a los caidos y escondieron el carro, Marga hizo una peticion a Gallindum. Necesitaba encender un fuego, con el riesgo que ello conllevaba. Era sencillo, algunas de las hierbas que Valdir habia conseguido traer, la vida le habia costado, necesitaban de preparacion. Cualquier otro se hubiera conformado con masticar esta o aquella hoja sabiendo de sus propiedades, pero Marga estaba bien versada en los temas y sabia que los nervios de algunas hojas, tras cocerse, servian de base para un brebaje reconstituyente, no tan poderoso com las propias hojas, pero efectivo a su manera. Aparte otras hierbas necesitaban de calor para su preparacion irremediablemente. Gallindum sabia que la enana le peida algo peligroso, pero tambien que era inprescindible, la muerte del rohir no seria en balde por no encender un fuego.

Gallindum accedio y pidio a Groal y Draupner que  consiguieran algo de leña. De inmediato se pusieron a la faena, era la ultima del dia. Gelion se habia tumbado y aunque aun no estaba dormido su agotamiento delataba que no tardaria en caer profundamente. Bolgo aunque menos cansado estaba sumido en una profunda tristeza. Su buen amigo Elendur habia caido tambien y eso lo apenaba sobremanera. Se tumbo cerca de Gelion para dornir tambien, pero no era capaz de hacerlo, una y otra vez la imagen del cadaver de Elendur se le aparecia delante, el hobbit no lograba reconciliar el sueño.

Coralak y los mercaderes se prepararon tambien para dormir. Ataviados con mantas y ropas de abrigo se hicieron un hueco cercano a la base del arbol. Dwalin tambien hizo lo propio, pero sin tanta parafernalia, un enano como el no temia el frio. Briniel y Agranil hacia ya un rato, desde que bajaron, que se habian acomodado entre dos enormes raices que presentaban una oquedad entre ellas, era el mejor sitio sin duda. A su lado Marga preparaba el lugar donde encenderia el fuego. Habia elegido un pequeño hoyo en el suelo, alguna antigua madriguera abandonada que ya habia sido tapada de nuevo por las lluvias. Arranco del interior y un poco de los alrededores la hierba que sin duda provocaria un intenso humo blanco por su humedad. Uso para ello su propia maza. Despues comenzo a colocar a mano los utensilios que usaria. Un pequeño mortero de piedra, algunos potes metalicos y dos cajitas de madera que siempre llevaba consigo. Despues tendio el atillo que saco de las alforjas de Valdir y comprobo las hierbas que habia traido. Habia bastante, no las mas efectivas pues esas eran raras de encontrar, pero si habia otras que aliviarian sin duda a la enferma. Alli quedo esperando por la leña.

Draupner y Groal se habian marchado juntos a por la leña. Era complicado encontrar algo que no estubiera mojado o demasiado podrido por la lluvia. El enano estaba algo preocupado por Ilidan y por Arlan. Se habian marchado hacia ya un buen rato, y aun no habian vuelto. Draupner tomo la decision de intentar ver a ambos, busco huellas o señales que delataran su paradero. Todo era confuso en ese suelo, podrian haberse visto calaramente las huellas dejadas, de no ser por el abundante sotomonte que cubria el suelo hacia de ello una tarea engorrosa. Groal encontro una buena fuete de leña, no muy lejos del campamento. Era un arbusto seco que se enontraba justo debajo de un pino muy tupido, apenas se habia mojado y era facil de partir. Draupner ayudo a coger algunas de sus ramas y al volver al campamento fue cuando el enano vio algunas huellas de Valdir y de Arlan. En el camino el suelo se habia despejado un poco y la luz de la luna permitia diferenciar dos juegos de pisadas, una del enano y otra de Ilidan. Ambos juegos iban de aquí para alla y se alejaban de igual modo se alejaban cada vez mas. Se habian tomado molestias para asegurar el campamento, temiendo quizas que ya hubiera alguien o tal vez para encontrar una ruta de escape. Groal y Draupner volvieron al campamento con la leña. El enano conto lo que habia visto sobre las huellas.

Marga comenzo a hacer el fuego ayudada por Draupner. El fuego era pequeño, casi sin llamas pero que iba haciendo unas brasas medienamente buenas. Al poco rato ya tenia un pequeño cazo, con agua de su cantimplora, calentandose.

Oin se habia recostado tambien a la espera de sus guardias. Apenas habian cenado del cansancio que tenian, habian tomado algunos frutos secos y chupado un pequeño pedazo de carne ahumada. No tenian demasiadas provisiones. Ya habria sido complicado llegar a Burh Ailgra con la comida que les quedaba, mas aun desviarse tanto y alargar el viaje hasta un lugar habitado. Los siguientes dias tendrian que tener muchisimo cuidado. Lamentablemente la oscuridad de la noche y el desconocimeinto del bosque hacia casi imposible encontrar o cazar algo de comer. Ya le habia costado a Draupner, con su buena vision nocturna, encontrar las huellas de Ilidan y Arlan, y a Groal ni decir el arbusto seco. No era menester molestarse mucho mas esa noche, y menos con el agotamiento que todos tenian encima y el peligro que suponian los acechaba desde el campamento sagath.

Ilidan y Arlan no aparecian, llevaban casi media hora y aun no sabian nada de ellos. Tal vez se hubieran perdido en el bosque, o les hubiese pasado algo, aunque lo mas probable es que se tomaran demasiado en serio su trabajo de asegurarse de que nadie merodeara por los alrededores. Tal vez hubieran encontrado una buena ruta alternativa de escape, o incluso se estubieran entreteniendo en coger algunos frutos comestibles. No lo sabian, pero Gallindum sobre todo estaba preocupado.

Al fin el sueño fue pudiendo con los viajeros, Gelion y Oin se habian quedado dormidos. Los esgarothianos tambien y Dwalin incluso roncaba de cuando en cuando. Bolgo no lograba conciliar el sueño. Gallindum, Marga y Draupner permanecian despiertos esperando la llegada de sus compañeros. El primer turno corria a cargo de los que estaban por llegar y esperarian a que llegasen antes de irse a descansar.

El frio haria buena mella esa noche, se presentaba un viento particularmente helado, por suerte la frondosidad del bosque, incluso cerca de su linde, los protegeria.

Notas de juego

► Anota el próximo turno como “Turno 611

► Aun no habeis empezado las guardias, faltan por llegar Ilidan y Arlan, nada sabeis de ellos

 

► Resolución del próximo turno: LUNES  09-07-12

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05/07/2012, 18:03
Director

RESOLUCION TURNO 610

 

Ilidan y el enano se quedaron inmediatamente quietos. El enano se agacho intentando que los helechos y la hierba alta lo ocultaran, pero no era muy efectivo, desde la posición del numenoreano se le veía a la paerfeccion. Ilidan apoyo la espalda contra un árbol, buscando la seguridad de tener algún objeto cubriéndolo por detrás. Lo hizo de frente al lugar donde parecía haber vendió el sonido metalico. Ambos, inmóviles oteaban la osucridad en busca de aquello que había provocado el sonido, o en su defecto, aquel que había preparado aquella cuerda para avisar de su llegada. Como Ilidan había supuesto no era una trampa en si misma, no hubo dardo mortal, ni red atrapadora ni guillotina asesina, solo había sido un sonido, el metal contra la roca.

Un rato permanecieron asi, en silencio y en la semioscuridad del bosque, terriblemente inmóviles, tensos y con sus armas atenazadas. Se temian lo peor.

Se habían alejado bastante en su empeño por asegurar los alrededores, y por que no, buscar una ruta de escape alternativa por si los sagath volvían. La noche les cubria de las miradas, el relativo silencio de sus pasos no sobresalía mas que los propios sonidos del bosque, no había razón para temer… hasta ahora. Una señal de aviso solo podía indicar una cosa, habían entrado en un territorio que estaba siendo guardado. No sabían su extensión, ni que era lo que guardaba aquella cuerda. Tras un rato vieron algo moverse, ruido de alguna pisada casi imperceptible. Pero nada se mostraba.

Una ráfaga de frio aire surgió de entre los arboles, haciéndolos silvar y mecerse sumisamente. Tras una pesada rama, de la que surgían otras mas pequeñas, vieron gracias al movimiento generado por el viento, una sombra que pasaba agazapada, estaba lejos, o al menos lejos para la luz que había. Unos seis metros por delante antes de desaparecer de nuevo entre las puntiagudas hojas del frondoso pino. Ambos lo vieron, Arlan miro de inmediato a Ilidan, con la cabeza le señalo al montaraz su intención de ir a por ellos, solo buscaba su aprobación. El enano ya se había encarado hacia la sombra, agarrado su mazo, mas negro que la noche, no llevaba escudo. Si Ilidan había visto la silueta, tal vez la excelente visión enana, en lo que a oscuridad se refiere, hubiera visto lo que había allí delante. Ahora el enano esperaba el apoyo del Ilidan para lanzarse en pos de la silueta.

Notas de juego

► Anota el próximo turno como “Turno 611

► Seis metros por delante, mas o menos, ha pasado una silueta. Ya no la veis. Por la forma podría ser un hombre, pero caminaba agazapado. No veis mas.

”Esquema de situación para el turno 610” (asalto 1)

 

► Resolución del próximo turno: LUNES  09-07-12

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05/07/2012, 18:04
Director

RESOLUCION TURNO 610

 

Los dos hombres se quedaron inmediatamente quietos. Freagulf, se giro sobre si mismo y desenvaino el arma como el resorte de una trampa para ratones. Temudyin estaba apunto de lavarse cuando el sonido metalico también lo alerto. Agarrando su lanza, que no había dejado ni un momento desde que el ailgratha lo despertara, se puso en posición de defensa, esperaba la llegada de un enemigo que no se mostraba. Con la mano, y un hábil movimiento, corto un junco que crecia allí al lado, solo el sabria para que lo usaría después.

Un rato permanecieron asi, en silencio y en la semioscuridad del bosque, terriblemente inmóviles, tensos y con sus armas atenazadas. Se temian lo peor.

Habian dormido demasiado, bueno, realmente lo necesitaban por lo que nunca era demasiado. La noche les cubria de las miradas, el relativo silencio de sus pasos no sobresalía mas que los propios sonidos del bosque, no había razón para temer… hasta ahora. Una señal de aviso solo podía indicar una cosa, alguien habia entrado en las inmediaciones de su campamento. Gracias a la trampa de Temudyin fueron alertados, pero tenia un pequeño fallo, mas bien una pega, y era que no sabían en que punto de la cuerda algo había hecho saltar el estribo. Tras un rato vieron algo moverse, ruido de alguna pisada casi imperceptible. Pero nada se mostraba.

Una ráfaga de frio aire surgió de entre los arboles, haciéndolos silvar y mecerse sumisamente. Tras una pesada rama, de la que surgían otras mas pequeñas, vieron gracias al movimiento generado por el viento, una sombra que pasaba agazapada, estaba lejos, o al menos lejos para la luz que había. Unos seis metros por delante antes de desaparecer de nuevo entre las puntiagudas hojas del frondoso pino. Ambos lo vieron, Freagulf miro de inmediato a Chaka, con la cabeza y con señas le preguntaba si había visto algo y le hacia comprender que el no había logrado ver nada claro.

Ambos hombres permanecían quietos, esperando a que la sombra se mostrase, pero no parecía ocurrir nada, tal vez ellos mismos habían sido descubiertos y por ello no aparecia nadie, tal vez los estuvieran rodeando, quizás ya estaban perdidos.

Notas de juego

► Anota el próximo turno como “Turno 611

► Seis metros por delante, mas o menos, ha pasado una silueta. Ya no la veis. Por la forma podría ser un hombre, pero desaparece tras un arbol. No veis mas.

”Esquema de situación para el turno 610” (asalto 1)

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06/07/2012, 13:34
Gallindum

TURNO 611

Mucho tiempo había pasado desde que Ilidian y Arlan partieran en su ronde de reconocimiento y no había la más mínima señal de ellos.

- Maldita sea. Espero que no les haya pasado nada. Ya hemos tenido dos bajas importantes en el día de hoy. - pienso mientras me levanto y estiro los músculos.

- Это я не люблю. Оставайтесь с нами и Awake ИСО. Я собираюсь поиск для них. - les digo a Marla y Draupner mientras agarro el escudo y la maza y me interno en el bosque en busca de alguna señal de Ilidan y Arlan.

- Tiradas (2)

Motivo: Rastrear

Tirada: 1d100

Resultado: 88(+18)=106

Tirada oculta

Motivo: Percepción

Tirada: 1d100

Resultado: 98(+45)=143

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06/07/2012, 14:28
Gallindum

Traducción:

- Esto no me gusta nada. Permaneced atentos y Despertad a Oin. Voy a buscarlos.

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06/07/2012, 21:34
Gelion

Turno 611

Ilidan y Arlan no volvían, Gallindum había abandonado al grupo, preocupado por los exploradores. Bolgo no podía dormir y Oin Dormía tranquilamente. Draupner y Marga al menos habían sido avisados. Gelion, ajeno a todo, descansaba sus cansados huesos. Su cuerpo lo necesitaba y además si le hubiesen despertado con más preocupaciones poco habría podido hacer a parte de preocuparse. Quién sabe si la noche traería nuevas desgracias.

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08/07/2012, 15:46
Arlan "Mazonegro"

Turno 611

 

Arlan, desde su posicion miraba a Ilidan. Cuando el numenoreano supo lo que el enano pretendia hacer, que no era otra cosa que asegurarse de que o quien era el que se movia alli delante, le hizo una seña afirmando que era una buena idea. Eso le basto al enano que sencillamente comenzo a avanzar. Se puso en pie, pero semiagachado, tampoco queria que lo pillasen en cuclillas. Un paso, despues otro, armado con su maza, que llevaba abajo y atras, listo para dar un golpe asendente, Arlan iba hacia delante.

No queria hacer demasiado ruido, iba despacio, poniendo cuidado en donde ponia los pies, atento a lo que se movia delante.

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: percepcion

Tirada: 1d100

Resultado: 43(+5)=48

Tirada oculta

Motivo: Acechar

Tirada: 1d100

Resultado: 92(+13)=105

Notas de juego

Tirada de percepcion.
Tirada de Acechar.

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08/07/2012, 15:56
Marga Granwich

Turno 611

- ¿Pero vas donde vas enano loco?. No puedes internarte solo en el bosque, de noche y sin luz. - dijo la enana, y era cierto, la oscuridad no dejaba ver demasiado bien, ni aun siendo un enano. - Al menos que alguien vaya contigo. - Mraga volvia a tenr razon, si las sospechas de Gallindum de que algo les habia pasado eran ciertas, necesitaria ayuda, ya fueran victimas de un ataque, como si simplemente se habian perdido en la noche.

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08/07/2012, 16:01
Fréagulf
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Percepcion

Tirada: 1d100

Resultado: 26(+18)=44

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08/07/2012, 16:01
Gallindum

Turno 611 - No pienso dejar la caravana sin la vigilancia de los 2 mejores hombres de que disponemos. - digo señalando a ambos enanos. Si hubiera algún ataque ellos podrán defenderos.

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08/07/2012, 16:09
Fréagulf

 

Turno 611

 

Freagulf permanecia inmovil, algo le parecio oir al ailgratha, pero esta vez venia de mas a la derecha. Fuera lo que fuese se movia, y no era precisamente muy silencioso. El explorador dio algunos pasos a su izquierda, buscando salir del pequeño claro donde habian dormido, y resguardarse entre los arboles. De ese modo no seria descubierto y si alguien penetraba en el campamento, tendria facil echarse encima de el.

Con su espada aun desenvainada encontro un grueso tronco, se semi-agacho tras el y sacando solo la cabeza observaba a su compañero e intentaba ver lo que habia delante. La oscuridad de la noche no le dejaba ver nada.

 

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08/07/2012, 16:19
Marga Granwich

Turno 611

 

- Haz lo que quieras enano testarudo, pero no creo que sea bueno que el lider del grupo se pierda en mitad de la noche en el bosque. - dijo la enana mientras se levantaba para despertar a Oin.

Cuando estubo junto a el se volvio hacia Gallindum.

- Yo tambien puedo defender el campamento, o al menos estar alerta. Dejemos descansar a los demas, mañana ser un dia duro - y asi quedo, esperando la respuesta de Gallindum.

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08/07/2012, 17:33
Gallindum

Turno 611 - Con Oin despierto seréis 3 enanos alerta. Además de que si hay problemas será el que mejor pueda defenderse y darte tiempo de dar la voz de alarma al resto. - Hasta que regrese Daupner está al mando.

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08/07/2012, 16:44
Temüdyin

TURNO 611:

El silencio que precedió al sonido de los estribos al entrechocar fue mucho peor que la certeza de que alguien, o algo, había hecho saltar su improvisada alarma. Pues en aquella oscura y envolvente calma las caras de sus torturadores tomaban forma y atenazaban su mente.

Pero Temüdyin poseía la fortaleza mental propia de aquellos que han tenido que pelear cada cobre y cada plato de comida para seguir adelante y poder medrar en la vida.  Además, su trabajo le había enfrentado otras veces a situaciones similares y conocía aquella sensación.

Sin embargo, esta vez no era como las demás. Desprendía un suspense y emanaba una tensión que, por su intensidad, daba la sensación de poder cortarse con el cuchillo. ¿De quién sería aquella sombra que acababa de cruzar perpendicularmente al río, a unos pocos metros de ellos?

Fréagulf, que al parecer no estaba muy seguro de lo que había visto por los gestos que le hacía, se desplazó lateralmente hasta salir del claro. Seguramente estaba más confuso que él pues no tenía ni idea que que había provocado aquel ruido metálico ya que estaba semi inconsciente cuando se había fabricado. No obstante, previniendo cualquier posible problema, no dudó un segundo en parapetarse detrás de la maleza.

Temüdyin no tenía dudas. La alarma no se había activado sola; el casi imperceptible crujir de las agujas de pino al ser aplastadas por el peso de la sombra desconocida, tan familiar para él, había llegado, débilmente, a sus oídos y una mancha oscura, más oscura que la oscuridad oscura de la noche bajo los árboles, había sido descubierta por una oportuna brisa que había apartado la cobertura natural ofrecida por la frondosa vegetación.  

Una serie de nombres, asociados a unos rostros que habían quedado grabados a sangre y fuego en su mente, vinieron a su cabeza: Dragvador, aquel asqueroso y sucio borracho al que le gustaba escupir a la cara; Nambaryn, un enamorado de la tortura mental; Rynchen, maestro con el látigo, de ello daba fe su lacerada espalda; el hijo de perra de Sukhe, ya fallecido, y, sobretodo, Byambin, que aún le debía un ojo. ¿Cual de ellos sería?

"Pengine Hakuna" - pensó. Por mucho que sus torturadores estuvieran siempre en sus pensamientos, su intuición y sus años de experiencia le decían que era harto difícil que fuese uno de ellos. Aquella manera de desplazarse no era propia de un oriental. Además, buscaban a un hombre solo, herido y a pie, no a dos hombres a caballo. Cierto era que si habían encontrado el cadáver de Sukhe habían podido darse cuenta de que algo había cambiado en la situación de su presa pero, aún así, y más después de las horas transcurridas desde aquel suceso, aquello se le antojaba, cuanto menos, improbable.

Así que protegido por el río, que le guardaba la espalda, sintió la tentación de dar dos pasos a su izquierda, perderse entre la vegetación y, finalmente, si la cosa se ponía complicada, usar el junco que había cortado para desaparecer totalmente.

Pero no podía arriesgarse, no debía arriesgarse. Cabía la posibilidad de que fuera uno de sus perseguidores, que los hubiese encontrado y reconocido, y que espantado por el ruido metálico de la improvisada alarma, decidiese ir a buscar a los demás. Temüdyin conocía su manera de operar: rastreaban en solitario, y si daban con la presa, corrían a informar  a Byambin que, acompañado siempre por la mole de carne y grasa conocida como Dragvador, jamás se arriesgaba a ir solo. 

A partir de ahí, como una manada de lobos salvajes, instigaban y acosaban a su presa, hasta llevarla a la extenuación, y cuando ya la habían desgastado lo suficiente, le daban el golpe de gracia. No, por muy improbable que fuese, no podía arriesgarse a ello; debía estar seguro.

Sin perder un segundo más, y siempre con la lanza preparada por lo que pudiese acaecer, Temüdyin se dirigió al lugar donde había visto cruzar la sombra. Estaba seguro de que no le sería difícil seguir el rastro entre la frondosa vegetación, aún por la noche. Las estrellas brillaban en el lienzo nocturno.

El tuerto no quería acercarse demasiado, no necesitaba correr ningún riesgo aparte del estrictamente necesario: reconocería los andares de cualquiera de los hombres que le seguían a cientos de metros. Tan solo necesitaba observarle en la distancia unos segundos, sin nada que entorpeciera su visión. Después, una vez descartado el peligro, volvería al campamento y sugeriría al ailgratha que mandara la puta paloma y, de paso, que movieran el culo de allí.  

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08/07/2012, 23:13
Ilidan
Sólo para el director

Turno 611

 

El numenoreano de inmediato comprendió lo que Arlan quería decirle con su movimiento de cabeza, y de inmediato lo secundo asintiendo, un gesto sutil que para la visión nocturna de los enanos no pasaría desapercibida.

Durante unos segundos pensó en cual sería la mejor opción a abordar; seguir al enano rápido o tomarse su tiempo en utilizar las artes "no naturales" de montaraz que le había enseñado su maestro para ocultarse mejor con el entorno.

Por fin, decidió escoger la primera idea que se le había pasado por la cabeza, seguir a Arlan, ya que de nada le servía camuflarse si al perderlo de vista no iba a saber donde se encontraba la figura para usar ese don "secreto" con el fin de cogerla por sorpresa.

Así que con el mayor sigilo posible que a la vez le permitía encontrarse lo más cerca del enano sin perderlo de vista, aunque siempre a unos metros de distancia de él, Ilidan fue dispuesto a interceptar a la silueta que había visto brevemente pero sin que ello le hiciera perder la concentración de seguir atento a los alrededores para no verse él mismo sorprendido en una emboscada.

- Tiradas (2)

Tirada oculta

Motivo: Percepcion

Tirada: 1d100

Resultado: 14(+46)=60

Tirada oculta

Motivo: Acechar

Tirada: 1d100

Resultado: 22(+26)=48

Notas de juego

La distancia que dejaría con Arlan sería la que estimes oportuna como para no perderlo de vista, pero también nunca siguiendo sus pasos, es decir más yendo en diagonal ("a las 4 o a las 8") con respecto su posición.

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09/07/2012, 09:36
Bolgo Villaseca

Turno 611

Bolgo escuchó la conversación desde un rincón, acostado. Sabía que no podría dormir de modo que se incorporó y con desgana se ofreció a ayudar en la tarea.

- Puedo acompañar a quien sea que vaya.

Iba a explicar que su aportación a la defensa sería escasa y que tenía buen sentido de la orientación además de poder desplazarse con bastante sigilo por el bosque, pero no tenía ganas ni fuerzas como para explicar todo aquello. Se limitó a ofrecerse y a esperar si le encomendaban finalmente alguna tarea.