Partida Rol por web

|Jardín - Comedor|

Sonreí al ver la reacción de Walgior, y más aún con el comentario de Jairon.
- Sí, la verdad es que para mi será un placer ganarme la confianza de ese muchacho... Tiene muchas cosas que ofrecerle al mundo, y ya no me refiero solo en el tema de luchar- le dije a Jairon, guiñándole un ojo.
Echó a caminar hacia el comedor con lentitud, así que me dio tiempo de correr tras él y darle una palmada en el trasero.
- Todo hay que decirlo... Prefiero el producto de calidad- dije, mietras le adelantaba y echaba a caminar deprisa, riéndome a carcajadas.

|MINI-JUGADA MASTER|

Los alumnos ya empezaban a llegar al comedor. Habían ya algunos profesores que estaban sentados en su correspondiente mesa, esperando a Frank y a Farilynn, que eran los únicos que faltaban allí.
La que estaba verdaderamente radiante de felicidad era Cassandra, que parecía estar realmente satisfecha con la escena erótica que protagonizó con Frank.
Sólo faltaba una profesora, que era Dana... No estaba en el comedor, y Fistandantilus la estaba buscando...

| CONJUNTA WALGIOR & ANNETTE FINE |

Walgior: Esperaba con tranquilidad a que todo el mundo llegase cuando una chica se me acercó. La miré y asentí con la cabeza a su pregunta. Esperaba que no me preguntase por las heridas de mi cara... Si me puse allí, apartado, era para evitar tener que dar cualquier tipo de explicación.

Annette: Sonreí al ver que asentía con la cabeza y me senté a su lado. Me habían dicho que la noche anterior había tenido un percance, así que no quería preguntarle por lo sucedido... Bastante tenía ya con ser el blanco de no-se-sabe-quién.
- ¿Qué tal? Es bastante extraño que nos llamen así, con tanta urgencia... Y además, que hayan suspendido temporalmente las clases...- le dije al muchacho, mirando hacia la mesa de los profesores-. Por cierto, me llamo Annette.

Walgior: Yo no opinaba igual. No lo veía tan raro ya que ami por ejemplo la noche anterior me dieron una paliza, eso es porque las cosas en el internado no ivan muy bien... Algo fallaba.
-Sea por lo que sea ya nos lo explicaran ahora.-dije sin mirarla. Esperaba ver a Farilynn entrar en cualquier momento. Tenia ganas de verla. Como siempre...-Walgior.-me presenté, aun sin mirarla.

Annette: Asentí con la cabeza, a pesar de que no podía verme, ya que ni siquiera me había mirado desde que me senté.
- Sí, yo opino igual... Las cosas no funcionan bien, eso está claro...- le dije, de acuerdo con él, aunque no esperaba que mencionara el incidente de la noche anterior-. Bueno, pues encantada, Walgior... Aún falta gente, así que tardarán un rato en contárnoslo...-.

Walgior: Apesar de no haber entablado una larga conversación aquella chica me habia caido bien. No me preguntó por mis heridas ni tampoco dió pie a seguir conociendome, a hablar por hablar. Aquello me gustó. Yo simplemente asentí por su ultimo comentario y esperé a que todos llegaran para ver que novedades habia.

[Pasillo de la sala de profesores]

Hice una reverencia para saludar a la Farilynn.

"Pricesa [...] Reina, quería decir.  Estoy buscando a Dana.  Debería hablar con ella lo antes posible sobre un asunto.  Privado -aclaré añadiendo una mirada fría como el acero, casi desafiando a la idea de que me preguntara de qué se trataba-.  ¿Está aquí?"

|Pasillos - Comedor|

Arqueé las cejas al escuchar lo que el alumno dijo. Yo siempre estaba al tanto de todo lo que hablaban los profesores con los alumnos, incluso si eran sentimientos prohibidos... Pero Dana no me había contado nada que tuviera entre manos con Fistandantilus.
- No, no está aquí, y te sugiero que bajes al comedor porque lo más seguro es que ella ya esté allí... Porque no la has buscado allí, ¿a que no?- le pregunté, haciéndole una seña con la cabeza para que me siguiera al comedor, mientras echaba a andar hacia éste.
Una vez llegué allí, crucé el comedor y vi a Walgior sentado un poco más apartado de la gente, acompañado de aquella alumna (Annette) y de sus dos guardaespaldas.
Le dediqué una pequeña sonrisa y un guiño del ojo, para sentarme después presidiendo la mesa.

|Pasillos - Comedor|

Ya me había arreglado para la ocasión. Llevaba mi mejor traje de lino blanco, cubierto por una coraza dorada que me cubría el torso. El traje acababa en una falda, que me llegaba más arriba de las rodillas. Llevaba también unas sandalias doradas, con hilos del mismo color rodeándome el tobillo y el gemelo.
Para acompañar y rematar el conjunto, me puse una capa del mismo color dorado que las sandalias y la coraza.
Entré en el comedor pisando fuerte, con la mayoría de la gente ya sentada. Algunos repararon en mí y sabían que el comunicado se realizaría en el mismo momento en que yo llegase a la mesa de profesores.
Con rostro serio y decidido, llegué a ésta.
Esperé a que todos estuvieran sentados y callados...

[Comedor]

Llegué tras la Reina Farilynn justo a tiempo.  Busqué a Dana con la mirada, pero no la encontré.  Sumamente sospechoso.  Pensé que ella no era el tipo de persona que llega tarde "por un imprevisto".  Una sonrisilla apareció tras mi breve chiste mental, mientras me centraba en lo serio.  Aquello olía muy mal.  Hedía.  Me situé detras de Sirius y Hëndel. Adelanté mi cabeza entre las suyas y les susurré:

- "Cuando esto acabe tenemos que hablar, pichones."

No sabía por qué Sirius despertaba mi faceta más cómica, cosa rara en mí. Me quedé detras suyo, esperando el anuncio.

| Jardín - Comedor |

Reí ante el comentario de Neith y aun mas cuando me tocó el trasero. Me mordí el labio jugueton al verla correr hacia el interior del castillo. Desde aquella vez en la casa de Markwolf con Hilary no me desahogaba... Y el hambre empezaba a apretar. Pero todo a su tiempo.
Entré en el comedor y me senté en el primer asiento que encontré. Miré a Walgior, me devolvío la mirada y le hice un gesto de cabeza amistoso. El me lo devolvío y miró hacia la mesa de los profesores, seguramente para ver a Farilynn. Que bonito es el amor.. Cuando se ve desde lejos, claro.

|JUGADA MASTER|

La gran mayoría de los alumnos estaban sentados en su sitio, así que Frank, el Jefe del Consejo Élfico, pensó que era un buen momento para dar por fin el comunicado, algo que sorprendería bastante a muchos y no tanto a otros...

Carraspeó la garganta, para aclararse la voz.
- Bien, como veo que la gran mayoría están aquí, comenzaré ya con el discurso y el comunicado- dijo Frank, entrelazando sus manos detrás de su espalda-. En los últimos días han sucedido una serie de acontecimientos que al consejo que regula toda esta actividad, ha decidido tomar medidas al respecto-.

Frank comenzó a pasearse lentamente por el comedor, mirando detenidamente a los alumnos, mostrando verdadero interés por Walgior, al que le dedicó una pequeña reverencia.
Al fin y al cabo, no tardaría demasiado tiempo en proclamarse rey de los elfos... Su rey...

- Uno de los acontecimientos más preocupantes fue el ataque nocturno a un alumno mientras estaba durmiendo, además del secuestro que sufrieron otros dos alumnos que no se encuentran aquí en estos momentos...- dijo Frank, reparando en que Hëndel y Sirius no estaban sentados-. Tanto al consejo Élfico como el resto de consejos (el Consejo Hispano, Enano, etc) hemos decidido que el internado no es seguro y nuestras propias vidas dependen de la vida de estos muchachos, así que hemos decidido destituir a Mark como director- anunció Frank, deteniéndose delante de la mesa de profesores-. La nueva directora será Cassandra- anunció, girándose para mirar a dicha mujer, que se encontraba sentada en la mesa radiante de felicidad. Al ser nombrada, se puso en pie y saludó a todos los presentes, mostrándose más efusiva con los alumnos que ella había traído al internado.

- Muchas gracias, Señor Frank- dijo Cassandra, poniéndose a su lado, delante de la mesa de profesores-. Para mi es un placer hacerme cargo de la dirección de este internado. Intentaré que todo funcione lo mejor posible y, mi primera medida como directora será poner guardias en los alrededores del internado y reforzar unas medidas internas- anunció Cassandra, con una sonrisa.

ANTERIORMENTE EN LA BIBLIOTECA.

Estaba sentado, inmerso en mi lectura y escuchando unos murmullos, provenientes de dos miserables. Lo que desian poco me importaba, pero ya estaba llegando a la desesperacion. Gracias a dios que estos dejaron la Biblioteca antes de que cometiera alguna locura.

Ya al estos irse, me consentre en mi libro, a leer y ver que pasaba con este libro... Despues de unos 20 minutos escucho una voz que nos llamaba a juntarnos en algun sitio, al no escuchar bien no sabia exactamente a donde ir...

Es por esto que sali de la biblioteca con el libro y empese a caminar aver en dondelos encontraria... Ya habian pasado unos largos minutos cuando escucho un ruido, gracias a mi agudo sentido auditivo, pude apresiar los aplausos y la supuesta emocion, pero al no saber el porque de esto, se me escapa una expresion que liberaba sumo interes y confusion a la vez...

Caminaba hacia la puerta, al abrirla encuentro a todos los alumnos aplaudiando.

EN LA REUNION.

Al ver todo esto, trato de hacer el menor ruido posible y de llamar la atencion lo minimo... mire acia mi alrededor y encientro a mis compadres... me avesino a Neith y le pregunto en voz baja.

-Senorita, que esta pasando aqui??? me he extraviado... tengo que ensenarle algo muy interesante, al terminar esto...- Lo dije con tal delicadeza para que ni los oidos de un cazador elfo experto los pudiera escuchar...

[Comedor]

El anuncio en sí fue sorprendente.  Que el internado no era seguro era un secreto a voces, pero sustituir al director por aquella... bruja, no lo entendí.  Además, había profesores con más antigüedad para ocupar el cargo.  Ademas, aquellas palabras, reforzar medidas internas, me erizaron el bello.  Creí que había encontrado la clave.

Cassandra no me caía bien.  Ya en nuestro primer encuentro chocamos como dos cargas de infantería que se dirigen a la matanza.

Aunque podría considerarse que se salía de lo que supuse podría llamarse protocolo, me levanté busqué a Naida con la mirada, fugazmente, para darle a entender que nuestra reunión pendiente tenía mucho que ver con esto.  Alcé la voz por encima de los presentes y dije:
 

- "Reforzar medidas implica que las medidas ya estaban activas.  Dinos pues, cuáles son, ya que el alumnado las desconoce."

Entonces preparé mi segunda estocada.  Mire a la reina Farilynn para dejar claro que nuestra conversación en la sala de profesores no había terminado y entonces mi voz volvió a tronar:

- "¿Y por qué, en nombre de los dioses del bien -intenté ver algún gesto que delatara a Cassandra- se hace un anuncio de este calibre en ausencia de una profesora"?

Realmente esperaba que las respuestas fueran una cháchara llena de embustes.  Dí media vuelta, dándole la espalda para mostrar mi desaprobación, y me quedé de pie junto a la reina.

[ Habitación - Comedor ]

Entro corriendo al comedor de la mano de Hëndel y cuando veo las caras de todos los presentes, desaceleramos el paso para entrar lentamente, ya sin estar cogidos por la mano, y así, caminando, nos sentamos juntos en dos sillas que están vacías justo delante de Fistandantilus.

Parece ser que han dicho algo importante o que algo grave ha pasado, por que el hechicero parece estar bastante enojado, por no hablar de la cara de los demás presentes. Menos las caras de Cassandra y del Jefe del Consejo élfico, todos los demás parecen sorprendidos.

- ¿Qué ha pasado? -, le pregunto susurrando a Fistandantilus, para que nadie escuche lo que digo.

| Comedor |

No me esperaba el nombramiento de Cassandra, pero menos aún el comportamiento de un alumno (Fistandantilus). Le miré un largo instante. Aquel joven hechicero se habia ganado mi respeto.
Esperé, de brazos cruzados, la contestación de la nueva directora. Me resultaba interesante ver su reacción, mas que sus respuestas...

|JUGADA MASTER|

Todo el que estaba presente en el comedor, se giró bruscamente para mirar a la persona que había alzado la voz para lanzar dos preguntas, una para cada persona. Se trataba de Fistandantilus, que no parecía muy contento con el nuevo nombramiento.
Frank carraspeó, dispuesto a contestar a ambas preguntas, pero Cassandra le hizo un gesto para que se detuviera, pues era ella la que tenía que contestar, al menos a la primera pregunta.

- Señor Fistandantilus, las medidas internas ya existían pero en ningún momento se las hicieron saber ni tampoco cumplir- dijo Cassandra, entrelazando las manos detrás de su espalda, dejando ver la preciosa figura que le hacía el vestido que se había puesto para la ocasión-. Una de las medidas será que, a partir de cierta hora no se podrá salir del castillo, además de que habrá otra hora límite para que todos estéis en la cama... Quien se salte estas dos normas, que son las más básicas, será expulsado automáticamente sin opción a reclamar el regreso- explicó Cassandra, poniéndose seria.

Cuando la hechicera terminó, fue la Reina Farilynn la que se puso en pie.
- No debería dejarse llevar por el impulso, Fistandantilus. Me imagino que eso ya se lo habrán hecho saber en alguna asignatura- comenzó a decir Farilynn, poniéndose igual de seria o más que Cassandra-. Si este comunicado se ha hecho sin la presencia de una profesora es porque no se encuentra ahora mismo en el internado, pero le puedo asegurar que ella estaba al tanto del nombramiento... Y ahora, Fistandantilus, siéntese en su sitio y después de que acabe el almuerzo vaya a mi despacho- finalizó la reina, quedándose de pie, esperando a que Fistandantilus fuera el primero en sentarse para asegurarse de que no habrían más represalias.

Cuando Cassandra terminó su almuerzo, salió del comedor, y Frank no pudo remediar salir detrás de ella.
Una vez fuera del comedor, en el pasillo, se pusieron a hablar:
- Cassandra, espera- dijo Frank, corriendo detrás de ella, parándose delante-. Felicidades, creo que has sabido manejar muy bien la situación... Te has mostrado tranquila y nada nerviosa-.
- Gracias- le dijo la hechicera, guiñándole un ojo. Le dio un beso en los labios, bastante apasionado, lo suficiente como para subirle la temperatura a Frank.
Éste la miró intensamente y le cogió de la mano, arrastrándola hasta los baños de los chicos que habían en esa misma planta. Se cerraron en uno de los wc y comenzaron a besarse apasionadamente.

Spoiler (marca el texto para leerlo):

[Comedor - despacho de Farilynn]

Me giré hacia donde estaban Sirius y Hëndel.

"Tenemos que hablar.  Nos vemos en el aula vacía de la segunda planta.  Allí estarán tambien Olwë y Naida."

Acto seguido me dirigí a la reina:

"En la sala de profesores usted me aseguró que lo más probable era que Dana estuviese aquí.  ¿Me equivoco al pensar que no tiene la más remota idea de qué ha pasado con ella?.  -El enfado era palpable en mis palabras y gestos-.  La veré en su despacho.  Este nombramiento me quita el hambre."

Di media vuelta y salí de aquel sitio, embargado por la ira, en dirección al despacho de la reina.

Una vez allí, me sente, con Magnus en el regazo, acariciándolo para deshacerme de la tensión y meditar mis próximas palabras.

[ Comedor - Sala vacía ]

Miro a Hëndel tras escuchar las palabras del hechicero, y ambos asentimos. Está claro que él también está preocupado por lo que sucede en el internado y además, seguramente, su espíritu investigador haya descubierto algo de importancia.

Olwë y Naida también estarán allí, por lo que será algo realmente importante y además, algo que no pueden saberlo todas las personas, sino, seguramente lo hubiera dicho aquí mismo, en esta sala.

Observo como Fistandantilus se retira hacia el despacho de la nueva Reina de los Elfos y tras esperar unos segundos, cojo a Hëndel de la mano y nos dirijimos a la sala que nos había indicado el hechicero...

|NOTA MASTER|

A partir de ahora, postear en la nueva escena ;) Ésta queda ya cerrada y ya no se podrá postear más aquí. Un saludo.