Partida Rol por web

[Aula vacía]

Estuve un buen rato devanándome los sesos.  Era obvio que un hechizo de apertura no daría resultado.  Quién haya protegido esto tendría en cuenta una posibilidad tan evidente.  Revisé nuevamente la sala, en busca de algo que pudiera haber pasado por alto, pero no, no vi nada nuevo.

Nada nuevo... las palabras sonaron en mi cabeza como un eco.  No, no vi nada nuevo porque no miré en ningun sitio nuevo.  El único lugar que quedaba por revisar era uno: tras la vitrina.  Había estado tan obcecado en cómo abrirla que no me fijé en nada más.  Las posibilidades eran escasas, lo tenía en cuenta, pero quizá detras encontrara algo nuevo.

Bien, si no quieren que la intente abrir, no lo hare, de momento.  Pero la moveré.

Me puse frente a la vitrina, preparandome, e intenté moverla hacia mi mediante la magia para ver el trozo de pared restante y la parte de atrás del mueble.

|EVALUACIÓN DE JUGADA Y MASTER|

El hechizo de Fistandantilus surte efecto y la vitrina comienza a moverse... Estaba llegando el momento que el hechicero estaba deseando... La pared que quedaba justo detrás de la vitrina quedó al descubierto, mostrando un bonito pero pequeño arco de piedra, cerrado.
El arco tenía unas letras... Parecían significar algo, pues sino no estarían ahí...
"RAT PAL"...
A Fistandantilus no parecía sonarle de nada, pero las letras estaban grabadas en la piedra con una caligrafía preciosa, definiendo bien las curvas de cada letra.
Aquellas letras tenían algo de encantadas y no estaban allí por casualidad, eso ya lo sabía Fistandantilus...

En el bosque, donde se encontraban Sirius y Hëndel, seguían escuchándose unas pisadas... Cada vez estaban más cerca, pero ellos parecía que aquello lo consideraban un juego, pues continuaron coqueteando y jugando por donde lo dejaron antes de que las pisadas les interrumpieran.
De repente, una fuerza invisible empujó a Sirius, alejándole de la muchacha que se encontraba allí...
- No creo que sea buena idea que mantengáis relaciones sexuales en este precioso lugar- dijo la voz de una mujer, entre unos arbustos. Al salir de su escondite, los muchachos pudieron ver que se trataba de Cassandra.

|Mi habitación|

Mientras le ayudaba a secarse su larga cabellera se giró para mirarme y aproveché para darle un beso en los labios.
- Me lo has puesto servido para que lo hiciera- le dije a Olwë, con una sonrisa de oreja a oreja. Me alegraba mucho de estar así con él, era un verdadero encanto.
Rodeé la silla, poniéndome de nuevo delante suya. Me senté de lado sobre sus piernas, pasando mis brazos por alrededor de su cuello, para sujetarme mejor, y le seguí dando besos en los labios.
- Me alegro de que estés aquí conmigo... La noche iba a ser mucho más aburrida si tú no estabas...- le dije, imitando la cara de una niña triste, para reirme a continuación-. ¿Vas a quedarte a dormir conmigo? Me siento tan sola cuando no estoy contigo... Por favor, quédate conmigo...- le susurré al oído, aprovechando el abrazo que le di en ese momento.

|Habitación de Naida|

Me quede sorprendido ante las acciones de Naida, no sabia como reaccionar, nunca me habia visto envuelto en algo parecido a esto.

-¿Es esta tu manera de resolver los problemas? porque si es asi no me importaria que nos enfadasemos más amenudo.- Dije riedno
-Y con respecto a la idea de quedarme a dormir suena tentadora, pero tu no me dijiste hace poco que ninguno de los que estamos en este internado no podemos perder el tiempo en esas tonterías...- le dije en tono burlón.

[Aula vacía - biblioteca]

No tenía ni idea de qué podían significar aquellas palabras, pero había llegado demasiado lejos para dejarlo ahí.  Pronunciarlas no produciría la apertura del portal, pues de otro modo no se hubieran molestado en sellarlo y poner la llave delante de uno...

Significaban algo, sin duda.  Volví a poner el mueble en su lugar, cerciorándome de que todo estaba tal y como lo dejé y me dirijí presto a la biblioteca.  Allí busqué libros de traducción para encontrar algún significado a aquellas palabras que devorarían mi mente hasta resolver el acertijo.

Cuando hube seleccionado los libros, me senté y empecé a buscar.

|Jardines|

- Vaya vaya, me he topado con un pirata ligón...- le dije a Cambaral, irónicamente, intentando enrabiarle-. Así que tienes una larga lista de mujeres que han pasado por tus aposentos, ¿no es así? Y dime, ¿para conquistarlas haces lo mismo que estás haciendo conmigo? Me refiero al truco de la lluvia y ser tan amable con las mujeres... Porque si es así, me gustaría saber si yo acabo de entrar en esa lista- le pregunté, empezando a usar un tono borde con él. Si pensaba que era una chica fácil, iba listo-. Yo no tengo una lista tan larga, pero he tenido algún que otro desliz... Los seres vivos tenemos unas necesidades, pero hay unos límites, al menos es lo que opino yo- le dije, separándome un poco de él. Me gustaba marearle y liarle.

|Mi habitación|

Reí a carcajadas.
- Tú eres un poco rencoroso, ¿no? O es que tienes demasiada memoria -le dije a Olwë, con una sonrisa, dándole otro beso en los labios-. No me lo tengas en cuenta... Son cosas que se dicen cuando una está enfadada o dolida...- le expliqué, dándole un fuerte abrazo-. No creo que haga falta enfadarnos para que te quedes aquí a dormir... Puedes venir siempre que quieras, las puertas de mi habitación siempre estarán abiertas para ti- le susurré al oído, sin dejar de abrazarle-. Parece que ya estás más seco, ¿no? Aunque hay un método más rápido para secarse, por si quieres utilizarlo la próxima vez... Te haré un baile sexy y verás qué pronto te secas- le dije, riéndome a carcajadas.

NUEVO INTERNADO

Mientras estaba en un momento religioso, por asi desirlo, siento que una voz muy sensilla y lijera me cruzaba por los oidos, interrumpiendo la consentracion que tenia.

-Que interesante- me dije a mi mismo en voz alta.

Tenia aun los ojos cerrados tratando de mantener un poco la consentracion y dije -quien sera, mmm... Escucho una voz muy suave, y creo averla escuchado antes. es que podra ser Neith?-

Sonrei rapidamente, mostrandolo sin ninguna dificultad. De forma majestuosa me paro y jiro para verla de frente. -Que bueno que te  preocupes por mi, deveras que eso me agrada- Como de costumbre, le hago una reverencia - Ya se que no me devo preocupar mucho si me enfermo ya que he descubierto que hay gente que se preocupa por mi- le dije sonriente y mirandola picaramente. -No se que me motivo salir de la sala pero fue una sensacion muy rara y alavez tentadora o podria desirse seductora- Me hacerco a ella y me quito el saco, rapidamente lo pongo sobre su cabeza evitando que se moje aun mas.

-que cosa estar ahora de este lado del continente- lo dije insinuando del lado de los enemigos. -¿esperas algo en especial con este cambio?- La mire fijamente y me di cuenta de algo pero no lo quise admitir, me quede pensativo y disfrutando de la vista que tenia de aquella joven.

Era agradable verla y sentir que perteneciamos a los mismos polos, alegres y muy sociables, esto sin importar las sircunstancias. Ella al ser una protejida de nuestro amo me provocaba mucho respeto, apesar de pareser una nina, sabia que enrealidad esta no lo era y que poseia cunas cualidades muy especiales, esto me hacia respetarla aun mas.

Me avecine aun mas, estando unos pocos centimetros de ella -debo pedir disculpas por como la trate al desender del barco, es que vi algo que me resulto impertinente por parte de uno de los nuestros y quise enmendar las cosas... no se si me entiende mis leidy?- al terminar la oracion, me pongo de rodillas y cojo una de susmanos, especificamente la mano derecha, y la pongo en mi cabeza - Espero que cuente que estare a sus servicios en cuanto lo necesite- Alse la vista, directo a sus ojos de forma inquisitora, pero no intimidante, mas bien inspirada por nobleza y devosion, y dentro pero muy a lo profundo, picardia. - Recuerde, no dude en contar con mis servicios para lo que usted quiera, o necesite.

|Habitación de Naida|

Me estaba divirtiendo mucho con Naida, y no queria que esto acabara aqui.

-Si puedo venir siempre que quiera me veras muy amenudo aqui, por no decir a todas oras.- Le dije al oido.
-Y con respecto a lo del baile... yo aún me noto muy mojado, me ayudarias a secarme.- le dije riendome.

[Jardines]

Sonreí fanfarrón a Victoria- ¿Te crees que si quisiese llevarte a mi cama no estarías ya en ella? - intuyendo que ese comentario le cabrearía si le daba tiempo a tomárselo en serio, cambié mi gesto, recuperando una sonrisa de simple felicidad - ¡Es broma, es broma! Bueno... en parte. Ten por seguro que si quisiese añadirte a esa lista de la que hablas, no habría pasado tanto tiempo charlando, ni me habría preocupado lo más mínimo por tu vida. Si te soy sincero - digo rascándome la cabeza, ligeramente avergonzado - creo que eres la primera mujer a la que me paro a escuchar.

Ahora que se había apartado, volví a colocar los dos brazos detrás de la cabeza, apoyándome en el tronco. Se estaba cómodo, pero la verdad es que prefería cuando ella estaba apoyada contra mí. Pero no quería enfadarla ni molestarla insistiéndose en que volviese a acercarse:

-Y con los límites... quizás tengas razón. Pero en mi vida no he tenido a nadie que se preocupara en marcármelos... así que soy yo quien los fija. Quizás por eso suelen estar mucho más lejos que los que el resto de la gente... - Cerré los ojos, escuchando cómo golpeaban las gotas de lluvia contra el suelo - ¿Te has enfadado?

|NOTA MASTER|

Bueno gente, he de deciros que quizá durante estos días no pueda postear en la partida... Intentaré hacerlo esta noche, si me veo con fuerzas... Ha fallecido un amigo de nuestra antigua pandilla y entre que iremos al entierro, las pocas ganas que tendré de postear y los deberes que tengo pendientes de hacer, probablemente me pase poco por aquí, aunque intentaré que eso no suceda.

Un saludo a todos.

"We are not anybody..."

|Jardines|

- ¿Por qué me iba a enfadar? ¿Por que pareces un poco prepotente a veces, un ignorante, y otras pareces un cielo? No, no creo que tenga razones para enfadarme... ¿O si?- le pregunté a Cambaral, siendo directa y empezando a adoptar aquel tono tan borde que usaba muy amenudo con la gente-. Y no deberías ser tan egocéntrico... No sé lo que quieres exactamente pero, aunque quisieras llevarme a tu cama, no soy una chica fácil a la que puedas llevar con dos palabras sin sentimiento... No soy como todas las mujeres con las que te has acostado... Te costaría muchísimo acoplarme en esa lista- le dije, poniéndome de pie, dispuesta a marcharme. Quería hacerme la dura.

|JUGADA MASTER|

En el bosque que rodea el castillo está nuestra pareja de adolescentes, Hëndel y Sirius, con las hormonas bastante alteradas... A la vez que intentaban esconderse del origen de aquellas pisadas poniéndose detrás de un árbol, aprovechaban el momento para demostrarse su amor... Lo que no sabían es que, de repente, sentirían un golpe en la cabeza cada uno, perdiendo la noción del tiempo y la consciencia.

Cuando pudieron abrir los ojos, se encontraban en una amplia habitación con paredes de piedra, provocando que allí empezaran a sentir mucho frío... Contrarestando el calor que habían estado sintiendo hace un momento...
Para su sorpresa, no estaban ni atados ni inmovilizados de ninguna manera, pero aquella estancia no tenía ni puerta ni ventanas... No tenían salida.

Cambaral y Victoria seguían intentando conocerse, aunque a cada palabra que decía el pirata, la joven parecía enfadarse más aún... La lluvia seguía cayendo lejos de ellos, pues estaban cubiertos por aquel gran árbol, que una de sus ramas les cubría.
¿Era seguro estar fuera del castillo?

Fistandantilus, en su empeño por encontrar un traductor o algo que le diera una señal sobre lo que podía ser aquel arco grabado con aquellas palabras, fue a la biblioteca en busca de esa información... Lo único que encontró fueron algunas frases escritas en el idioma élfico, pero no encontraba nada relacionado con aquellas dos palabras... "RAT PAL"... Al menos de momento...

Naida y Olwë estaban en la habitación de la muchacha, aprovechando que el chico estaba mojado debido a la lluvia, para seguir mostrándose su cariño... La temperatura de la estancia empezaba a subir a cada palabra que la joven pronunciaba, pues tenía bastante más experiencia que él en el tema de la seducción...

Mefiroth no dudó en entregar sus servicios a Neith, que seguía impresionada por lo que acababa de hacer el muchacho.
La joven sonrió, maliciosamente, cuando le vio arrodillarse. Jamás pensó que eso fuera tan fácil... Retiró la protección que Mefiroth le entregó para que no se mojara.
- No me importa mojarme, no te preocupes, cariño... Puedo llamarte cariño, ¿verdad?- le preguntó, guiñándole un ojo-. Y bueno... Yo he estado ausente bastantes días, cuéntame cómo ha ido el tema con mi primo- le dije, volviendole a guiñar el ojo, para que supiera que se refería a Markwolf-. Estabas muy solo aquí, ¿no? ¿Por qué no has venido conmigo? Yo también estaba sola-.

Mientras tanto, Walgior seguía en el comedor... Cassandra intentaba ligar con el director del internado, Mark, pero éste no le quitaba el ojo de encima a la actual reina de los elfos, Farilynn, que cenaba tranquilamente.
- He oído hablar mucho de usted, señor Mark...- decía Cassandra, insinuante, a pesar de que en la mesa también estaban el resto de profesores. Cuando pareció darse cuenta de ello, también lanzaba alguna mirada fugaz a Pharen o a Rick. Sin duda, tenía sus métodos para conseguir lo que quería...

| Comedor |

Cené con tranquilidad, sin mirar apenas a nadie como de costumbre. Aunque esta vez no pude evitar mirar al director, Mark. Sus miradas hacia Farilynn eran puñaladas para mi. Apreté los dientes con fuerza un momento y terminé de cenar. En cuanto pude me levanté y salí del comedor sin dirigir una mirada a nadie excepto a Farilynn. Estaba cansado, así que preferí ir a mi habitación a descansar un poco y eso hice. Al llegar, me quité la ropa por completo y me acosté desnudo, no habia nada mejor en esos momentos.

[ Habitación cerrada ]

Mis ojos se abren lentamente para encontrarme con la imagen de la habitación cerrada. No veo ni puertas ni ventanas y el techo está tan alto, que parece que no pudiera llegar nunca. Rápidamente, comienzo a tocar mi cuerpo para ver si estoy herido de alguna manera, pero sólo tengo un pequeño chichón en la base de la cabeza que no resulta para nada molesto.

Automaticamente, recuerdo con quién estaba hace un momento y veo que se encuentra a mi lado, despertándose también del golpe en la cabeza. Es extraño, pero ella tampoco parece estar herida en ningún lado, sin embargo, más extraño es que no estemos atados ni amordazados...

- ¿Estás bien? -, le pregunto mientras la ayudo a sentarse en el suelo y comienzo a mirar a mi alrededor buscando una salida.

Mi mente trata de conectarse con la de mi dragón, intentando enviarle una llamada de auxilio, pero sólo siento trazas de su consciencia. Al parecer, estas paredes están embuidas en una especie de magia que no me permite comunicarme con Rakkir.

Miro a Hëndel nuevamente, y al descubrir que está bien, me incorporo y comienzo a tocar las paredes buscando alguna especie de rendija por la que escapar. Pero no encuentro nada. Sólo queda una opción...

- ¿Hola? ¿Hay alguien aquí? -, hablo a una de las paredes, sin saber si recibiré respuesta.

[Biblioteca]

La búsqueda infructuosa me hizo cambiar de rumbo.  Al ver no encontrar nada contemplé la posibilidad de hallar la información en los libros del interior de la vitrina.  Pero antes debía resolver otro asunto.

Enseguida me puse a buscar algún hechizo para romper la salvaguarda mágica del candado, teniendo muy presente cualquier referencia a las misteriosas palabras: "RAT PAL".

A LAS AFUERAS DEL INTERNADO.

Al escuchar las palabras de Neith me sorprendi, deveras que me sorprendi... hasta me parecio extraño en sierto punto... pero afin de cuentas poco importaba... - si, me puedes llamar cariño, eso enrealidad mi señora me gusta- le dije, giñandole un ojo picaramente.

Me puse depie y me le avesine aun mas de los pocos sentimetros que nos distanciaban -Siento desirle que no fui con usted ya que me tenia que colar entre los extraños, pero ya no se preocupe, no la volvere a dejar sola... con respecto a su primo... no sabria que desirle pero tengo mis dudas... las cuales no podria desirle ya que no tengo niguna fundamentacion, y ademas no nos serviria buscar respuestas ahora que estamos donde estamos.

Todo lo dicho fue en tono muy sutil y susurrado, mirandola a los ojos de forma penetrante pero picara, no intimidadora... Dentro de mi sentia que habia algo nuevo pero no sabia que... no sabia si era Neith, o la muchacha rubia (Eirin), o si simplemente era la lluvia, la cual probablemente era, ya que me sentia tan agusto en ella...

Las palabras de ir adentro a resguardarnos me empezaron a zumbar por los oidos asi que le dije -vamos para adentro, ya esta bueno de agua... ahora es mejor secarnos y ver como esta todo alla adentro...

|NOTA MASTER|

Bueno, aviso de que aunque lo que digáis o hagáis no lo pueda ni oir ni ver nadie, debéis marcar a todos los personajes como destinatarios... De esa manera, todos podrán entretenerse con la trama y disfrutar de la cantidad de misterios que rodean los personajes... Eso sí, hay que ser realistas.
En el caso de Sirius y Hëndel, que es el más reciente, nadie puede acudir a ayudarles porque, de entrada, nadie sabe donde están... ¿De acuerdo? Es un ejemplo.
Marcar siempre a todos los personajes como destinatarios, pues me gusta más esa manera de jugar a un rol, saber tramas de otros personajes.

Otra cosa que quería comentar... Ya que Mefiroth ha sacado el tema, no os preocupéis, ¿vale? La partida no se va a parar. No lo he hecho estos últimos días que tenía más razón para hacerlo, y no lo haré ahora... Simplemente, el ritmo ha bajado un poco debido al comienzo de las clases, incluídas las mías, que no son moco de pavo...
Con esto quiero decir que ahora nos hemos adaptado al ritmo que en un principio sabía que íbamos a llevar, pero debido a que comenzamos en verano la gente tenía mucho más tiempo libre. No os impacientéis...Os conviene relacionaros con los personajes que más posteen, pues así damos juego entre todos y crearemos buen ambiente en la partida.
Si necesitáis ayuda para relacionaros con otros personajes porque no véis la manera de hacerlo o tenéis alguna duda, pregunta, etc, ya sabéis donde encontrarme.

Un abrazo muy fuerte a todos y a disfrutar de la partida.

Atte, Medea.

"We are not anybody..."

|Habitación extraña, encerrada|

- Oh, como me duele la cabeza...- dije, mientras escuchaba la voz de Sirius intentando despertarme. Me ayudó a incorporarme, apoyando la espalda contra la fría pared de piedra, frotándome la parte de la cabeza donde habíamos recibido un golpe-. ¿Qué diablos es esto? ¿Por qué estamos aquí? ¿Y por qué le preguntas al aire?- le pregunté a Sirius, esta vez intentando recibir una respuesta, no como las anteriores preguntas retóricas...
Me levanté, apoyando mi mano en la pared, pues parecía que me sentía algo mareada. Sentía mucho frío... Había demasiada humedad allí y notaba cómo el frio se iba metiendo en mi cuerpo, calando hasta mis huesos.
Sirius estaba intentando no se qué, pero no dudé en ponerme delante suya y abrazarle, para combatir el frío.
- Hace frío...- susurré, comenzando a tiritar, rodeándole la cintura con mis brazos, sintiendo nuestro calor corporal.

[ Habitación Extraña - Encerrado ]

Hëndel se acerca a mí, tiritando de frío y me abraza. Intento darle calor, abrazándola contra mi cuerpo, pero veo que eso no es muy efectivo. Por eso, me quito el abrigo de cuero y se lo pongo sobre su cuerpo. Aún tiene la ropa un poco húmeda por la lluvia del bosque, y espero que esto sea suficiente para que le pase un poco el frío.

No tengo respuestas a sus preguntas. En realidad, yo tampoco tengo idea de que estamos haciendo aquí. La cojo con fuerza, pegándola a mi cuerpo, mientras continúo frotando con mis manos su espalda para que entre en calor.

Mis ojos continúan buscando algo en la habitación, ahora, para poder hacer fuego, pero rápidamente me doy cuenta que hacer fuego en una habitación cerrada no es muy seguro.

- ¿Estás bien, preciosa? -, le pregunto mirándola a los ojos.