Partida Rol por web

Envalentonado por su pequeña proeza el guardia que se ensaña con la elfa herida. Rememorando la actuación de la esclava en el zoco de Urik se le dibuja una sonrisa mientras apuñala a la mujer.

Así aprenderás a mantener la boca cerrada, esclava...

La estocada del guardia deja una profunda huella en el estomago de la elfa... 

Sadicamente, retuerce la espada de obsidiana mientras Derian pierde el sentido por el dolor.

Las pocas ropas de la chica en seguida se empiezan a manchar del color carmesí de la sangre.

Avísame cuando llegue mi turno, para actuar

Cuando el guardia se desplomó a su lado, seguramente lamentando el momento en el que decidió entrar en combate, el mul se tomó un instante para evaluar la evolución de la batalla. Había un claro bando vencedor, y los enemigos que quedaban parecían haber sido poseídos por una insensatez inusitada, tratando de luchar por una vida que habían perdido en el momento en el que decidieron plantarle cara al semigigante. A pesar de lo improvisado del plan de ataque, el resultado había sido devastador, aunque parecía que el eslabón más débil de la cadena había cedido.

La elfa acababa de caer presa de la locura de uno de los esclavistas. Vio la expresión de placer en su cara al retorcer su arma dentro de la carne, escuchó el ahogado grito de ella, cuya vida sería pronto engullida por las ardientes arenas, y decidió que no habría paz para ese hombre. Moriría, si, pero sufriría un calvario en el camino.

Escupió con rabia en el suelo justo antes de comenzar a balancear el Carrikal. Un tenue silbido se escapó de la hoja cuando comenzó a cortar el aire a su alrededor. Agarró el Slodak como si se tratase de un puñal, algo que sólo un hombre de su envergadura habría sido capaz de hacer, y fijando su objetivo se lanzó a la carrera hacia él. Por el camino arrolló a uno de los esclavistas que trataba de reponerse de su último ataque. Salvó de un salto los últimos metros que le separaban de su objetivo, amenazando su cráneo con el letal filo de su arma.

Bretus, que era bien consciente de que había que acabar con la miserable vida de todos los guardias presentes, no lo dudo, se acerco con rapidez, aprovechando que estaban tocados, y procuro matarlos de manera que murieran si o si, y les doliera lo máximo posible.

Por ese motivo planto sus enormes pies en sus gargantas, si no morían con el cuello aplastado, quizás lo hiciera lentamente quedándose sin aire.

Eso sería mucho mejor, pero no tenía tiempo para recrearse. Miro el resto del combate, había de seleccionar su próxima víctima.

El bueno de Bretus camino intentando orientase en el combate, cada uno de sus compañeros estaba enfrascado en su propia cruzada.

El psionico y la elfa parecían necesitar su ayuda. Que hacer.

La enorme mole se paró en seco mirando con ojos bobos a un lado y a otro. Para desventura de los guardias que había caído al suelo tras ser entrechocados de manera brutal hacia tan solo unos pocos segundos.

Ahora, la mala suerte los perseguía, pues el enorme gigante se había parado con sus poderosos pies, que sujetaban un sinfín de kilos acumulados en los músculos y huesos de semigigante.

Ahora solo les restaba morir, bajo el peso de su contrincante, que miraba de hito en hito a sus compañeros.

La carga del mul aparta al aturdido guardia que se interponía entre el y el objeto de su furia.

El impetuoso golpe impacta en el brazo abriendo en canal el mismo y dejando al descubierto la roja carne que cubre el hueso. El arma del esclavista cae al suelo cerca de la moribunda elfa...

La mole de músculos pisa fuertemente a los atontados esclavistas, uno de ellos tiene tiempo de soltar un alarido antes de que el monstruoso pie lo deje fuera de combate. El otro no tiene tanta suerte, la titánica presión de los quinientos kilos de peso de Bretus hace que se desparrame como una boñiga de carru pisada por un mekillot, dejando solo una mancha sanguinolenta irreconocible.

Kavan observo el filo de su arma en la que ya habian aparecido algunas grietas, el combate se estaba cobrando su precio en las armas, aunque la verdad es que esto se estaba volviendo practicamente una masacre completamente unilateral, solo Derian parecia haber sufrido daños.

Kavan apreto el paso, iniciando una carga directa contra los guardias que restaban; entrando como un mekilot en una cristaleria con la espada por delante a modo de arite contra el primero de los guardias; el objetivo de esta clase de maniobras era empalar a tu rival por peso y luego aprovechar el cadaver para fintar frente al resto de enemigos..a ver como iba la cosa...